Cuando el hombre empieza a

desarrollar más
sus sentidos, de modo que puede
verse y
comprenderse mejor a sí mismo y a
los
demás, se abre ante él un mundo
nuevo y
fascinante, y los Chakras son de las
primeras
cosas de ese mundo que atraen su
atención.
Las personas se le presentan bajo
una nueva
luz, percibe más aspectos que antes
estaban
ocultos a sus ojos y, por tanto, será
capaz de
comprender, apreciar y, cuando sea
necesario, ayudar más de lo que
podría haber
hecho antes.
Prefacio del autor
La historia de los Chakras es muy antigua y, con la difusión del yoga
en Occidente, se ha hablado y escrito mucho sobre ellos incluso en
tiempos recientes y desde muchos puntos de maestros, gurús, vista,
por parte de profesores,

psicoterapeutas, médicos y científicos; así que no es mi intención

inventar algo nuevo ni dar interpretaciones diferentes a las muchas
ya existentes.
Con este libro pretendo ofrecer una breve guía, un resumen de las
principales características de los Chakras, la interpretación de los
símbolos y colores asociados, y sugerir algunas posturas o ejercicios
de yoga para estimularlos.
Como también anticipa el título, será bastante breve, y no se trata
de restarle importancia, sino de acercar a este fascinante mundo
incluso a los principiantes o a quienes no tienen ganas de leer o
estudiar este tema por primera vez con un volumen de 300 o incluso
600 páginas.
Éstos, sin embargo, esperarán a quienes se apasionen por los
Chakras y deseen profundizar en el tema, adentrarse más en los
aspectos simbólicos, energéticos, filosóficos y psicológicos.
A medida que empezamos a conocer las características de los
distintos Chakras, puede ocurrir que nos reconozcamos en muchos
aspectos, a veces incluso que nos encontremos confrontados con
algún aspecto de nosotros mismos que tendemos a no querer mirar,
justificar o afrontar.
Los Chakras son a menudo poco conocidos, subestimados o
devaluados, pueden ser vistos como algo abstracto o esotérico,
intangible o irracional, poético o artístico... pero estudiándolos más
de cerca y sobre todo experimentándolos, con las diversas formas o
métodos propuestos por diferentes maestros o disciplinas, uno podrá
ver su alcance y eficacia reales. Tenemos que ser conscientes de que
será un trabajo y unas prácticas en las que se requerirá mucha
perseverancia y dedicación, y este es también el reto que nos pide el
trabajo sobre los Chakras y dependerá de nosotros aceptarlo o
rechazarlo.
Practico yoga desde 1998 y cuando pienso en mis primeras clases
recuerdo que era un mundo completamente nuevo del que no sabía
nada, recomendado por un pranoterapeuta y profesor de yoga; al
principio el enfoque era sólo físico con mucha práctica sobre el
cuerpo para liberar tensiones. Después de años con terribles dolores
de espalda que a menudo me obligaban a guardar cama durante
algunos días, varias visitas a especialistas que desgraciadamente no
encontraban más solución que la farmacológica o sugerir una
operación, me encontré en una esterilla de yoga sentado con las
piernas cruzadas, lo que me resultaba muy incómodo y doloroso, sin
saber en absoluto qué estaba haciendo allí y qué era el yoga.
Al mirar a los demás participantes en la conferencia, tuve la
sensación de estar terriblemente fuera de lugar. También fue la
primera vez que oí mencionar la palabra Chakra, sin tener la menor
idea de lo que era, y también debo admitir que en realidad no me
importaba. Simplemente no podía esperar a que terminara esa hora.
Al principio, un principio que duró unos pocos años como le ocurre a
mucha gente, practicaba con poca constancia y mucha ignorancia
sobre el tema. En realidad, no sabía nada al respecto, pero a
menudo oía que podía ser bueno para mí y también sentía una
fuerte atracción, yo diría atávica (ahora digo kármica) hacia esta
disciplina.
Al mismo tiempo, sentía en mi interior un sentimiento de
inadecuación, de falta de preparación física y mental (estaba
sometido a mucho estrés) y también de las limitaciones que me
imponían ciertos problemas físicos. Lo sentí tanto que pensé que en
realidad no me convenía el yoga y que tal vez debería haber
buscado una gimnasia postural más adecuada para mi espalda y mis
músculos demasiado rígidos, o al menos algo distinto del yoga.
La atracción se mantenía, pero había una gran fatiga y a menudo
mucho dolor.
Recuerdo como si fuera ayer mi primera lección, sentado con las
piernas cruzadas y las rodillas a 40 cm del suelo, la espalda doblada
y dolorida, incapaz de permanecer más de unos minutos en esa
postura. La duda de que estuviera en el lugar equivocado era fuerte:
observándome, a mi alrededor veía a gente sentada cómodamente,
recta y relajada, algunos incluso en la posición de loto que creía
inalcanzable para mí.
El yoga con el que había empezado era más bien físico y dinámico y
por eso pensé que no era adecuado para mí. Había oído hablar de
varios tipos de yoga, bastante diferentes, pero no sabía nada de
ellos y por eso no podía elegir.
No voy a entrar ahora en los detalles de los estilos que probé y con
los que me encontré mejor, porque no es mi intención expresar
preferencias, sino más bien un concepto.
Todos somos muy diferentes, y lo que pienso se resume en dos
puntos breves y sencillos:
• Está bien y es bueno que haya tantos estilos diferentes, incluidos
los más modernos, porque así cada uno puede acercarse a lo que
considera y siente como "suyo".

• sería aún más correcto y sobre todo más eficaz tener una práctica
muy personalizada con una buena frecuencia, teniendo conocimiento
y conciencia de aspectos importantes como la propia Prakriti
(constitución individual) y por tanto el propio dosha predominante
(del concepto de dosha hablaré en el capítulo sobre Ayurveda), pero
también del "estado" de los propios Chakras.

Puesto que todos somos tan diferentes a nivel psicofísico-energético,

construir la(s) propia(s) lección(es) personalizada(s) con un profesor
formado puede reportar grandes beneficios, mayores que los ya de
por sí importantes que también puede dar el yoga en grupo, a los
que no quiero restar importancia. Llevo años dando clases con varios
alumnos, y a menudo las clases son bastante numerosas; noto
beneficios muy notables en quienes las siguen con constancia, pero
ciertamente con más gente se hace más difícil seguir al individuo.
Además de que siempre habrá quien haya empezado hace más o
menos tiempo, nuestras características personales, como bien
sabemos, influyen: quien tenga dolor de espalda, o de cuello, o de
rodillas, etcétera; igual que es importante, según el dosha de cada
uno, hacer una práctica más o menos dinámica o más lenta y
meditativa y los Chakras, que representan nuestra evolución.
Cada uno de nosotros ha llegado a su propio nivel evolutivo
personal, habrá quienes tengan más necesidad de arraigo, pero
también quienes ya estén muy arraigados y por tanto tengan más
necesidad de centrarse en los Chakras superiores, y así
sucesivamente con las muchas características de los distintos
Chakras.

Se pueden utilizar algunas pruebas para comprobar qué aspectos

son los más adecuados para prestarles atención con el fin de
equilibrar gradualmente las propias "desarmonías".
Mencionaré brevemente el Ayurveda y los doshas, hay multitud de
pruebas para comprobar el propio, aunque creo que lo mejor es
confiar en un buen médico ayurvédico.
Entrando en detalle sobre los Chakras, hablaré de sus diversas
características y asociaciones e indicaré algunos ejercicios y posturas
de yoga para estimular y equilibrar su energía.
Mi invitación es intentar entrar y mantener las posturas con un
enfoque suave, sintiendo el cuerpo expandirse y contraerse como un
gran pulmón al ritmo de la respiración, un movimiento imperceptible
de músculos, tejidos conectivos, ligamentos, tendones,
articulaciones y órganos. Esto favorece una gran liberación de
tensiones, estimula la disolución del estancamiento energético y el
alargamiento muscular gradual. Estamos en el tercer milenio, la
sociedad, los hábitos, las necesidades cambian a gran velocidad, y
creo que es justo que el yoga también evolucione con nosotros, sin
olvidar por supuesto las tradiciones, los orígenes y los profundos
mensajes inherentes a esta disciplina milenaria.
Como sostiene uno de mis profesores, con el que estoy de acuerdo,
el yoga es para el hombre y no al revés. El hombre de hoy ha
cambiado en comparación con el hombre de hace miles de años,
física, mental y socialmente. Tiene muchos más conocimientos del
cuerpo humano, por lo tanto, es correcto en mi opinión, llevar estos
a la práctica para tener los máximos beneficios con el mínimo riesgo.

Creo que un periodo inicial suave y agradable, que combine

constancia y gradualidad, debe hacer que quieras continuar y no
parar.
Uno no tiene necesariamente que empezar con yama y niyama (los
dos primeros pasos del yoga), estos son conceptos que quizás
algunos ya tienen dentro de sí, y kármicos también diría yo, pero
que uno tratará por otra parte, a medida que continúe en la
práctica, impulsado por los maestros, pero también por los propios
sentimientos y energías en movimiento que inevitablemente
cambiarán y provocarán cambios. Empiezas porque te duele la
espalda o el cuello, o porque estás nervioso, enfadado o estresado,
o porque duermes mal o te sientes deprimido, o simplemente
porque sientes el impulso y has oído que "sienta bien". Como
también dice el Bhagavad Gita, cuando Arjuna fue golpeado por la
depresión, el yoga le fue revelado. El yoga llega a ti cuando te
sientes frustrado, cuando tu mente ya no está bajo control y estás
sometido a constantes ataques de tristeza, ira, celos, resentimiento,
ansiedad, preocupación y pasión. Cuando tu mente ha perdido su
estabilidad y ya no eres capaz de poner en orden tus ideas, intentas
hacer algo para encontrar un camino, una solución: ese algo es el
principio del yoga.
Cuando estás enfadado, asaltado por las dudas o la depresión, ¿qué
haces?
Intentas recuperar tu equilibrio.
Estos esfuerzos por estabilizar la mente y liberarla de emociones
negativas e incontroladas... son los primeros pasos hacia el yoga.
Las personas con responsabilidades, obligaciones, preocupaciones,
ansiedad, noches sin dormir, etc. necesitan el yoga. Me ha pasado a
mí, a mucha gente que conozco y a muchos de mis alumnos, pero
hablando con otros profesores también a muchos de sus alumnos.
Uno llega a la primera clase sin saber todo lo que hay en el yoga, es
difícil que los principiantes vengan preparados sobre filosofía,
historia, el significado de los ocho pasos y los Chakras. Muchos ni
siquiera han oído hablar de la palabra Chakra u otros términos
"extraños" del yoga.
Vienen para intentar sentirse bien, de oídas, por moda o por lo que
sea, pero no necesariamente (estoy generalizando, no te lo tomes
como algo personal) para convertirse en un sannyasi, un
renunciante, hacer voto de castidad, leer el Gita y los Vedas de
inmediato, estudiar los Sutras y hacer Sadhana todas las mañanas o
seguir la Vía Bhakti. Al menos no de inmediato y eso está muy bien,
lo importante es empezar.
Por lo tanto, la intención de este libro, para aquellos que se inician o
se han iniciado recientemente en la práctica del yoga y tal vez
acaban de oír hablar de los Chakras incluso sin conocer su
significado y se muestran

un poco escépticos, es ofrecer un primer acercamiento que estimule

el deseo de profundizar. A menudo he sugerido a mis alumnos
algunos libros, incluso muy eruditos y bellamente detallados, pero
como a menudo eran largos y exigentes, regularmente no los
terminaban, abandonándolos incluso después de unas pocas
páginas.
Además, soy un gran creyente en el trabajo de los Chakras, pueden
provocar cambios considerablemente profundos que luego nos harán
apreciar cada vez más la vida cotidiana; también creo firmemente
que estamos aquí para evolucionar, y el trabajo de los Chakras es
una gran herramienta al alcance de todos, realmente eficaz, siempre
que se haga con cuidado. Así que buen viaje, y que sea un comienzo
hacia una conciencia nueva y fascinante.
Introducción
Como mencioné en el prefacio, seré deliberadamente breve. Quisiera
que esto sirviera de puerta para empezar a vislumbrar lo que hay
más allá: hermosas vistas en las que podemos adentrarnos a medida
que avanzamos por el camino, incluso afrontando algunos
obstáculos que podamos encontrar en el trayecto, pero con la
certeza de que al superarlos podremos comprender cada vez mejor
quiénes somos en realidad. Intenta cerrar los ojos y pensar en el
lugar más bonito en el que hayas estado, o quizás en el que te
gustaría estar, instintivamente. Visualiza ese lugar claramente frente
a ti, tal vez puedes sentirte allí de nuevo, puedes ver los colores y
los contornos y todo lo que hay allí, incluyendo los sentimientos y las
emociones... ¡Ya está! Piensas que eso no es nada comparado con lo
que encontrarás cuando entres en contacto con tu Ser más
profundo, un lugar de dicha completa y total. De paz absoluta.
"El yoga es una práctica que ayuda al practicante a superar los
obstáculos de la mente, a través de un estilo de vida y un cambio de
visión, no sólo una práctica a realizar sino una filosofía de vida, con
el objetivo de descubrir la verdadera naturaleza del Ser".

Advertencias y precauciones
Hay que tener en cuenta que los chakras son energías muy
poderosas y, por lo tanto, deben tratarse con conciencia, precaución
y cierto cuidado.
Lo ideal, si se está empezando, es empezar siempre por conocerlos,
profundizar en sus asociaciones psicológicas y físicas y, si se quiere
iniciar un camino de apertura y despertar, dejarse seguir por
maestros formados. Una de las primeras cosas que habrá que hacer
será empezar a "limpiarnos" de lo que contamina y afecta nuestras
vidas. Es esencial ser cada vez más conscientes de estas zonas tan
importantes y activas de nuestro cuerpo.
La meditación es una gran herramienta, probablemente la mejor,
para este fin.
También hay que realizar pranayama (ejercicios de respiración) y
ejercicios de kriya, todos ellos muy útiles pero que al mismo tiempo
deben hacerse con buena conciencia.
Las asanas que ilustraré para los distintos Chakras ayudan y
estimulan la energía para que se muevan y despierten, pero en
realidad son sólo uno de los muchos aspectos del yoga que, la
práctica continuada, se convertirá en una filosofía y una forma de
vida que incluirá necesariamente yama y nyama y luego pranayama,
concentración y meditación (dharana y dyana).
Tras un trabajo de purificación de los Chakras, la energía Kundalini
podrá penetrar en ellos y acceder a niveles superiores de existencia,
permitiéndonos despertar de maya, la ilusión, que caracteriza
nuestra experiencia terrenal.
El propósito de este libro no es profundizar en estos aspectos, que
requieren un estudio aparte en gran profundidad, puedes hacerlo
más adelante personalmente si te interesa, pero, te sugiero, seguido
de un profesor experimentado. Siempre teniendo en cuenta que el
yoga es un camino muy completo que una vez emprendido puede
durar toda la vida. Y, como ya he expresado, considero muy
importante hacerlo todo paso a paso, sin prisa.
Por poner un ejemplo banal, si quiero escalar el Everest necesitaré
una preparación adecuada, quizá empezando en la colina que hay
detrás de mi casa.
CAPÍTULO 1
Algo sobre los Chakras
Abro un breve paréntesis, que en ningún caso pretende ser
polémico, sino simplemente aclarar mi punto de vista.
En cuanto se menciona el tema de los Chakras, suelen surgir
controversias y, a veces, acaloradas discusiones en el mundo del
yoga; las opiniones son numerosas y muy diferentes, hay muchos
textos con muchas interpretaciones distintas.
Lo que observo es que a veces no se acepta que estas
interpretaciones se desvíen significativamente de las tradiciones, se
consideran especulaciones new age que han distorsionado el
mensaje y el valor originales. Si, por ejemplo, leemos los libros de A.
Avalon, Swami Satyananda Saraswati, C.W. Leadbeater, de Mircea
Eliade, de Cyndi Dale, de Anodea Judith, de M.M. Gore y otros, las
diferencias descriptivas e interpretativas son a menudo notables.
Carl Gustav Jung, Herman Keyserling, Richard Wilhelm y sus
contemporáneos (primeras décadas del siglo XX) estudiaron a fondo
el yoga y los Chakras y escribieron cosas realmente interesantes al
respecto, por ejemplo, las asociaciones de los Chakras con la psique
fue una innovación de Jung.
He aquí algunas de sus definiciones y citas sobre el yoga y los
Chakras:

• ...la nueva psicología representaba, en realidad, un

redescubrimiento de lo que ya conocían los antiguos indios: <La
sabiduría india es la más profunda que existe... Cuanto más
progresamos, más nos acercamos al pensamiento indio. La
investigación psicológica confirma, paso a paso, las afirmaciones
contenidas en la antigua ciencia india del alma> (H. Keyserling, The
Travel Diary of a Philosopher, Nueva York, 1925, p. 255)
• Keyserling consideraba el yoga como un sistema psicológico
superior a cualquier sistema occidental: <Los indios han hecho más
que nadie para perfeccionar un método de entrenamiento que
conduce a la ampliación y profundización de la conciencia... Entre los
caminos que conducen a la autoperfección el yoga parece tener
derecho a uno de los lugares más altos>. (H. Keyserling, Diario de
viaje de un filósofo, Nueva York 1925 p. 124).

• El indio considera fundamentales los fenómenos psíquicos; para él

son más reales que los fenómenos físicos. (H. Keyserling, Diario de
viaje de un filósofo, Nueva York 1925 p. 95)

• El kundalini yoga proporcionó a Jung un modelo para algo que

estaba casi completamente ausente en la psicología occidental:
<Una descripción de las etapas de desarrollo de la conciencia
superior.> y también: <la mayoría de los comentaristas de la época
estaban de acuerdo en que los Chakras y los nadis no deben
entenderse como representaciones fisiológicas del cuerpo, en el
sentido occidental, sino que representan el cuerpo sutil, el cuerpo
místico> (Sonu Shamdasani - The Psychology of KUndalilni yoga,
Foundation of the works of C.G. Jung, 1932 p. 29)

También me parece interesante la siguiente observación del profesor

indólogo Wilhelm Hauer, que dio seis conferencias con Jung en 1932
en Zúrich tituladas: "Yoga, y en particular el significado de los
Chakras": <Creo que sería importante que los yoguis indios
escucharan al Dr. Jung: les ayudaría a volver a poner en movimiento
los Chakras; han hecho una condensación metafísica de ellos y no
ven ni sienten mucho el aspecto psíquico, un aspecto que es tan
importante poseer en su lugar.>.
Así pues, algunos se basan en las tradiciones más antiguas, pero
otros no, han innovado, añadido e integrado nuevos descubrimientos
y conocimientos. También hay que saber que no existe un único
sistema de Chakras, sino que hay muchos; el sistema de los 7
Chakras, el más extendido hoy en día, no se conoció hasta el siglo
XIII y se dio a conocer en el siglo XVI con el texto
Shatchakranirupana de Purnananda Yati, traducido a principios del
siglo XX, es decir, en una época bastante reciente. Existen sistemas
de 5, 6, 9, 10, 12, 21 o incluso más Chakras, dependiendo del texto
y de las numerosas escuelas existentes. El budismo tántrico y el
tantra clásico, por ejemplo, adoptan un sistema de 5 Chakras.

El modelo más extendido, sin Chakras principales, también embargo,

prevé 7 descritos como

"expresiones de la conciencia" (A. Avalon, El poder de la serpiente,

1968 Edizioni Mediterranee, Roma, p. 90). Diversos textos antiguos
mencionan varios Chakras que, entendidos como centros de
conciencia, son mucho más numerosos que los que figuran en los
libros modernos. De hecho, según las escuelas iniciáticas, se enseña
a meditar en diferentes puntos.
Anodea Judith (psicoterapeuta y profesora de yoga) propone un
trabajo relacionado con la bioenergética y la psicología, dando
indicaciones prácticas y útiles para el crecimiento personal.
Otras lecturas son más esotéricas y están más ligadas a las
tradiciones, pero quizá no sean muy aplicables si no se practica un
yoga estrictamente tradicional relacionado con el despertar de la
kundalini. Pero hoy en día quizás, sobre todo en Occidente, es
bastante difícil proponer y practicar este tipo de yoga, sobre todo
dirigiéndose a un gran público.
En los sistemas más antiguos y tradicionales, el propósito de los
Chakras era funcionar como una instalación de mantras y energías (y
deidades) en puntos específicos del cuerpo sutil, y las características
en estos sistemas antiguos son principalmente tres:

-Cada Chakra está asociado a una deidad específica (en orden de

abajo a arriba Ganesh, Brahmā, Vishnu, Rudra, Īśvara, Sadāśiva y
Bhairava).

-Cada Chakra está asociado a un elemento (tierra, agua, fuego, aire

y éter).

-los sonidos místicos del alfabeto sánscrito, con vibraciones únicas y

poderosas, se distribuyen por los pétalos de todos los Chakras.
A continuación, resumo un tema muy amplio, con la intención de
aportar alguna información general y más extendida, pero otra
quizás poco conocida.
Personalmente, me atraen y aprecio las integraciones, hay mucho
que aprender estudiando varias disciplinas y encontrando puntos en
común o incluso "mezclándolas".
También, o, sobre todo, por eso elegí practicar y enseñar Anukalana
yoga (Anukalana significa integración) y llegué a él después de años
de Hata, Vinyasa y algunos años de Astanga.
Estoy profundamente convencido de que integrar "conocimientos
antiguos y nuevos descubrimientos" puede reportar grandes
beneficios, tanto culturales como físicos, psicológicos y energéticos.
En cuanto al tema de los Chakras, también aprecio las nuevas ideas
y propuestas, siempre que, por supuesto, no desvirtúen los
mensajes originales, sino que posiblemente los amplíen.
Entiendo perfectamente a los que no están de acuerdo, pero yo diría
que es algo que se repite en muchos ámbitos de la vida, cada uno
elegirá luego el que le sea más afín y estaría bien que se hiciera sin
juicios ni prejuicios.
Soy de la opinión de que, si siguiendo las sugerencias de los nuevos
autores y sus interpretaciones nos beneficiamos, entonces ese
sistema es muy bueno, aunque sepamos que no es el sistema
original.
CAPÍTULO 2
¿Cómo definir los Chakras?
En primer lugar, hay que considerar el prana, definido como la
energía vital que, fluyendo por todo el cuerpo, es perceptible a
través de sensaciones y percepciones sutiles, pero también a través
de nuestros estados vitales (agitación, relajación, cansancio,
energía, fuerza, debilidad, etc.).
Esta energía es una corriente que fluye en el cuerpo sutil, en canales
de energía (nadis) que luego desembocan en centros energéticos
llamados Chakras. En antiguos libros indios se dice que existe una
distinción según la cual los Chakras no están en nuestro cuerpo sutil
(transmigrante), sino en lo que se considera el cuerpo yóguico; sin
embargo, no deseo tratar este tema, prefiero quedarme en las
interpretaciones más tradicionales y/o modernas, que nos resultan
más comprensibles ahora.
La definición más común es, por lo tanto, la de centros energéticos
en los que se concentra la energía que fluye por los nadis, o también
pueden describirse como ruedas de energía, centros pránicos o
esferas de energías arremolinadas, vórtices de energía, pero también
puntos focales dentro del cuerpo humano para la meditación.
Así que, resumiendo, el prana fluye en el cuerpo físico a través de
vías (nadis) en zonas y tejidos más conductores. Como tantas
carreteras, estos canales se cruzan en determinados concentran, se
convierten energéticos.
puntos que, cuando se

en importantes centros

Con la concentración y la meditación aprendemos a escuchar y

"sentir" las sensaciones más sutiles y profundas, desarrollando una
mayor conciencia de estos centros.
<Los Chakras son símbolos que reúnen en forma de imagen, ideas
complejas y multiformes sobre la realidad.> <Los Chakras son
símbolos generales de los niveles humanos de conciencia.> (C. G.
Jung, La psicología del Kundalilni yoga, Fundación de las obras de C.
G. Jung, 1932 p. 30).
La descripción de Arthur Avalon en su libro "El Poder de la
Serpiente" también es hermosa: "Los Chakras pueden definirse
brevemente como los centros sutiles de acción, en el cuerpo, de la
Shakti o Potencias de los diversos Tattvas (principios) que
constituyen las envolturas corporales... los 5 Chakras inferiores son
las 5 formas de materia sensible, el 6º (Ajna y los otros situados en
la región entre el 6º y el 7º) son las envolturas mentales, mientras
que el 7º (Sahasrara o loto de mil pétalos) es la sede dichosa de
Shiva y Shakti, el estado puro de Conciencia."
De nuevo Avalon, en el mismo libro, escribe que una descripción de
los Chakras debería implicar, primero, una discusión de la anatomía y
fisiología occidentales de los sistemas nerviosos, luego una
exposición de la concepción tántrica del sistema nervioso y de los
Chakras, y finalmente una correlación, en la medida de lo posible, de
los dos sistemas desde un punto de vista anatómico y fisiológico,
siendo el resto una cuestión de ocultismo tántrico.
Todos estos son temas muy necesariamente implican estudio
complejos que y análisis en

profundidad, por lo que sugiero a los interesados el libro de Avalon,

así como otros textos que encontrarán en la bibliografía.
Ahora me limitaré a dar descripciones e interpretaciones más
difundidas y al alcance de quienes empiezan a interesarse por este
tema fascinante y profundo.
De los muchos, el que prefiero y en el que más creo es considerar
los Chakras como "centros de consciencia" (Avalon también los llama
Consciencia - Chaitanya), o

expresiones de la incluso centros de consciencia, energías que luego

se manifiestan a nivel psicofísico, puntos donde se concentra más la
energía que circula por el cuerpo y que luego se distribuye y regula
por todo el organismo.

Así que los vemos como puntos de nuestro cuerpo donde con
diversas técnicas estimulamos y aportamos más energía, con el
objetivo de despertarlos y elevar su vibración, despertando la
conciencia y elevando nuestra consciencia.
En cuanto a la conciencia, ésta es la definición que dan los Treccani:
"Conciencia que el sujeto tiene de sí mismo y del mundo exterior
con el que está en relación, de su propia identidad y del complejo de
sus actividades interiores".
Un despertar de la conciencia, en consecuencia, corresponderá a
una mayor conciencia de uno mismo y del mundo que nos rodea.
Swami Satyananda Saraswati, hablando de la conciencia, la describe
como "conciencia total, energía que debe ser liberada".
Mientras que del Baghavad Gita:
"¿Qué es realmente la conciencia? Es la percepción que uno tiene de
sí mismo, el hecho de ser consciente de que uno existe. Soy, pero
¿quién soy? Esta percepción varía según nuestra pureza" (The
BHAGAVAD GITA as it is, © The Bhaktivedanta Book Trust, 2019,
p.9). Se puede decir que en los Chakras está realmente todo nuestro
mundo interior y exterior, nos pueden dar una mayor conciencia de
quiénes somos, qué queremos, nuestros apegos, nuestros miedos,
celos, envidias, inseguridades y mucho más que veremos más
adelante.
Sólo es cuestión de trabajar en ello sin prejuicios, y el yoga puede
ser una gran "herramienta" que ayude y favorezca este despertar.
Abramos un paréntesis con algunas investigaciones recientes y
consideraciones científicas.

Existencia y medición de los Chakras y canales energéticos

Algunos científicos y médicos modernos, con una mentalidad y un
enfoque "holístico", han intentado estudiarlos, comprenderlos,
interpretarlos, conocerlos y, a menudo, trabajando en ciencia por
tanto de forma muy racional, buscar pruebas de ellos a nivel físico y
demostrable.
Por ejemplo, el Dr. Hiroshi Motoyama realizó investigaciones
científicas sobre el yoga y los Chakras. Durante más de 15 años
realizó experimentos fisiológicos para tratar de establecer si los
Chakras "existen" realmente y cuál es su relación con los órganos y
el sistema nervioso. A través de diversos experimentos, observó
diferencias significativas en las funciones fisiológicas del órgano
asociado al Chakra en algunas personas que afirmaban haberlo
"abierto" o "despertado".
Creó instrumentos especiales; uno de ellos, llamado Instrumento
Chakra, detecta el campo electromagnético del cuerpo y los cambios
que se producen al activar y estimular los Chakras.
Otros instrumentos han medido y demostrado la existencia de los
nadis (de la raíz nad que significa movimiento) por los que fluye el
prana, también llamados red psíquica de flujos de energía, canales
para el flujo de la Conciencia, corrientes pránicas, conductos de
energía y Meridianos. No son objeto de este libro, aunque merecen
un tratamiento más extenso.
CAPÍTULO 3
Nadi y Kundalini
Curiosamente, existen varias similitudes entre los Meridianos de la
Medicina Tradicional China y los Nadi y Chakras. Sin embargo, tanto
si los Meridianos y los Nadi son similares, iguales o completamente
diferentes, proporcionan energía sutil al cuerpo físico, controlan las
funciones corporales y los estados mentales.
Como el positivo y el negativo de la corriente en los circuitos
eléctricos, la fuerza vital (prana shakti) y la fuerza mental (manas
shakti) fluyen por el cuerpo a través de los nadis (de la raíz nad, que
significa movimiento, por donde se mueve el prana) que, según el
texto al que se haga referencia, son entre 1.000 y 3.500, mientras
que según las tradiciones tántrica, tibetana y ayurvédica son 72.000
o incluso más (algunos textos indican 300.000 o incluso 350.000).
Entre estos miles de canales, algunos son más gruesos y visibles
(nervios, arterias y venas) mientras que otros son más sutiles e
invisibles; sólo 14 se consideran los principales, de los cuales tres
son los más importantes: Ida Nadi (asociado a la Luna) que controla
los procesos mentales, Pingala Nadi (asociado al Sol) que controla
los procesos vitales, Sushumna Nadi que es el canal para el
despertar de la conciencia.
Estos tres canales tan importantes fluyen en el canal cerebroespinal,
Ida y Pingala ascendente se cruzan con Sushumna, creando zonas
donde la energía está más concentrada (correspondientes a los
Chakras). El primer paso será desarrollar un mayor conocimiento y
conciencia de estos centros.
A su vez, Sushumna es también un conjunto de canales concéntricos
que van de fuera a dentro, llamados Vajra nadi, Chitrini nadi,
Brahma nadi.

Puede decirse que la purificación de estos canales es uno de los

factores fundamentales en el camino del yoga, ya que su impureza
impide el ascenso de Kundalini Shakti, en contraposición a la pureza
que lo promueve.
Y este es también el trabajo del Pranayama.
Nuestra Conciencia no es libre porque la mente está sujeta a
condicionamientos e interpretaciones subjetivas, así como a la
información que recibe de los sentidos (por ejemplo, vemos con los
ojos, oímos con los oídos, tocamos con las manos, etc.) y por ésto la
mente se ve influida. Pero cuando emerge experiencia e incluso la
Conciencia

el conocimiento superior, la se vuelven

completamente independientes de los sentidos. Según el Ayurveda,

una ciencia médica muy antigua, la mente tiene su propio también
considerado el pensamientos, el flujo de la mente (manovaha srota).
Este nadi influye inevitablemente en Anahata Chakra (Corazón).
Chitta nadi se origina en el corazón espiritual (energético), la sede
del verdadero Ser.
Cuando Chitta nadi está bloqueado, nos quedamos atrapados en la
mente exterior, los sentidos y las emociones. Cuando expandimos el
flujo del Ser de lo personal a lo universal, el flujo en Chitta nadi
aumenta. Cuando el flujo se libera por completo, nos lleva de vuelta
al océano de conciencia que habita en el corazón y se hace uno con
el silencio y la paz interior. nadi llamado Chitta nadi, canal que
transporta los Un exceso de ego provoca la acumulación en Chitta
nadi de diversas toxinas, materia pesada o impurezas que lo
obstruyen: comida tóxica pensamientos tóxicos, impresiones
condicionantes, comida mal digerida pero también

negativas o pero también compañía o situaciones mal digeridas, mal

uso de los sentidos, relaciones erróneas. Así es que el flujo en este
nadi está influenciado por diferentes aspectos: condiciones del
cuerpo, prana y mente.

Los tres Nadis principales convergen e influyen en los Chakras y

ascienden en espiral por los distintos Chakras hasta el tercer ojo,
que se considera el último Granthi (barrera/bloqueo), antes de
ascender al séptimo Chakra.
Por el canal central Sushumna fluirá la Kundalini cuando se produzca
su despertar, pasando por todos los Chakras.
Sólo unas palabras sobre Kundalini.
Como sostienen autorizados Maestros y Gurús, todo el mundo
debería saber algo sobre la kundalini, porque representa la
conciencia futura de la humanidad. Kundalini es el nombre de una
fuerza potencial latente "dormida" en el organismo humano, situada
en la base de la columna vertebral. Es una pequeña glándula que
coincide con el primer Chakra.
Para despertarlo es necesario estimularlo mediante técnicas
yóguicas, hay que practicar asana, pranayama, kriya y meditación.
Cuando uno es capaz de dirigir el prana hacia el asiento de la
kundalini, la energía se despertará y ascenderá a través del nadi
sushumna, y en el camino pasará a través de los Chakras que están
conectados con diferentes áreas del cerebro.
Así, la kundalini puede relacionarse con el despertar de estas áreas
del cerebro con gran potencial.
Jung lo llamó "la bella durmiente" y "la posibilidad de un mundo aún
no realizado" (citado).
Kundalini es la manifestación microcósmica de la energía primordial,
la Shakti (cit.).
"La kundalini es conocida desde hace mucho tiempo como una
fuerza divina y la clave de la iluminación, y también como el poder
secreto de las alegrías y los placeres físicos. Es la energía divina
natural dentro de nosotros, es la fuerza vital del organismo que,
cuando se activa plenamente, permite vivir como un sabio
iluminado". (Cyndi Dale, Kundalini, Energía Divina, 2011, Lllewellyn
Publications, 2989 USA p. 6,7,8) "Los Chakras y la Kundalini están,
por tanto, estrechamente relacionados, y hay que tener en cuenta
que los Chakras no sólo contienen bloqueos o malos recuerdos o
heridas, sino que cada uno de ellos está cargado de atravesar
problemas, oscuridad". 2011, Lllewellyn Publications, 2989 EE. UU.).
No voy a entrar aquí en el tema de 'Kundalni' porque es muy vasto;
se puede abordar más adelante con un mayor conocimiento y
conciencia de los Chakras.
dones brillantes y resplandecientes. Al los Chakras se resolverán
nuestros y será como encender una luz en la (Cindy Dale, Kundalini,
Energía divina,
CAPÍTULO 4
CHAKRA (Cakra)
También llamadas flores de loto (padma)

Los Chakras pueden considerarse una poderosa herramienta de

crecimiento personal.
El sistema de Chakras se originó en la India hace 4/5.000 años, o
quizá antes. Los Chakras se mencionan en los Vedas, los
Upanishads, los antiguos textos tántricos, los Yoga Sutras de
Patanjali y el Ayurveda. El sistema de Chakras puede considerarse
una representación profunda, completa y convincente del Universo y
de nuestras vidas. Según el tantra, la existencia diferentes planos
que pueden Conciencia, Mente, Energía, Materia. se manifiesta en

resumirse como

Se puede pensar en los Chakras como en un microcosmos en cuyo

espacio danzan partículas de mente, energía y materia que se
arremolinan creando la manifestación y la experiencia terrenal.
Los Chakras, como hemos visto antes, son por tanto puntos de
nuestro cuerpo físico y de nuestros cuerpos energéticos más sutiles
donde la conciencia se expresa tanto a nivel mental (psíquico) como
físico.
La energía vital (prana) es el medio a través del cual se produce esta
manifestación.
La vida energética está en constante movimiento y al sumergirnos
cada vez más en ese movimiento seremos capaces de captarlo.
He escrito tanto Chakra como Cakra para despejar esta duda o
curiosidad en caso de que la haya, ya que puedes encontrarlo escrito
de ambas formas, aunque la más frecuente es con h, por la
siguiente razón: comúnmente utilizamos el sistema de pronunciación
inglés; por lo tanto, para la pronunciación correcta 'ciakra' se pone la
h, de lo contrario se leería cakra en italiano.
En cambio, para los que conocen el alfabeto sánscrito y pueden leer
el devanagari (que utiliza el alfabeto hindi) utilizando el sistema
diacrítico con el sistema oficial Iast (International alphabet of
sanskrit transliteration) adoptado en 1894, es correcto escribir Cakra
y se pronunciará de la forma correcta. Por eso casi siempre se
escribe Chakra anglicismo, aunque a muchos conocedores de la
lengua original y puristas les "horroriza" esta costumbre. Sería un
poco como escribir palabras con h donde la h no es necesaria en
italiano o inglés u otros idiomas.
Seguiré escribiéndola con h, como es costumbre en Occidente,
sabiendo sin embargo que la lengua original la quiere sin h.
Como ya se ha dicho, existen 7 Chakras principales y puede decirse
que representan todos los aspectos psicofísicos de la vida humana.
Existen otros Chakras considerados "menores" o secundarios, que
sin embargo tienen su propia importancia dentro de este sistema
"energético", pero aquí sólo describiré los 7 principales.
Como todo lo relacionado con el yoga, la meditación, el tantra, la
kundalini, los canales de energía y el cuerpo energético, los Chakras
en su historia han sido objeto de estudio, investigación, práctica e
interpretación a lo largo de los siglos.
Entre las diversas culturas, tradiciones y escuelas que se han
sucedido, pero también superpuesto, hay varias interpretaciones de
los Chakras que a menudo pueden hacer que las diversas teorías
parezcan estar en desacuerdo, pero en realidad ven las mismas
cosas desde diferentes puntos de vista. Las diferencias son en gran
medida semánticas o simbólicas, o debidas a concepciones,
educaciones o concepciones personales diferentes. Pero esto
también ocurre a menudo en otros campos entre las personas
cuando intentan comunicar una idea o experiencia con palabras.
La "acomodación", la "apertura", el "despertar" de los Chakras
puede ser, o más bien "es", la estructura organizativa que nos
creamos para enfrentarnos al mundo, y comprendiendo esto
podemos entender muchas cosas sobre nosotros mismos, nuestras
defensas, nuestros miedos, nuestras necesidades, nuestras
emociones, nuestras relaciones, nuestra comunicación, nuestra
visión y nuestra comprensión de las cosas.
De hecho, la de los Chakras debería ser sobre todo una experiencia
para adquirir un conocimiento personal de ellos, más que una
descripción verbal o escrita por otros.
Un Chakra equilibrado recibe, asimila y distribuye la energía
adecuadamente. El objetivo del yoga y de los ejercicios específicos
es equilibrar la deficiencia o el exceso de esta energía.
Sobre el tema de la apertura y el despertar, términos muy utilizados
sobre los que a veces existe cierta confusión, cito lo que Jung dijo
en su famoso seminario sobre los Chakras en 1932: <... Lo que hace
el trabajo... consiste en analizar la propia actitud, tomando
conciencia de muchas resistencias y muchos elementos personales
que reprimen la auténtica actividad mental y los procesos
psicológicos. Todas estas inhibiciones son impurezas, y la mente
(citta) debe purificarse antes de que pueda tener lugar el proceso de
transformación. Por lo tanto, como dice el yoga, la mente debe
purificarse antes de que uno pueda pensar en emprender el camino
de la Kundalini. Hay que despejar la mente para alcanzar la
objetividad perfecta...>.
Así que la apertura puede entenderse como un camino preparatorio
para el siguiente camino hacia el despertar.
Los nombres más comunes de los Chakras son "ruedas de energía",
"centros de energía", "centros psíquicos", "ruedas de vida", "centros
de Conciencia", "centros para el despertar de la conciencia", "centros
para la transformación de la energía vital", centros para el control de
las esferas física y psíquica.
El tema de los Chakras no es fácil de tratar, la gente suele mostrarse
escéptica ante este tipo de cosas y, especialmente en Occidente, es
difícil captar plenamente su alcance, potencial e importancia, aunque
en las últimas décadas ha aumentado su difusión, interés y
comprensión.
El nuestro no es sólo un cuerpo físico, sino también un cuerpo
energético, también llamado vehículo de "conciencia", y los Chakras
pueden verse como las ruedas que permiten a este vehículo
moverse a través de los retos, el sufrimiento, el crecimiento, el
cambio y la transformación.
Toda forma de vida evoluciona y el hombre no es una excepción. La
evolución humana a la que estamos sometidos puede considerarse
un viaje a través de los Chakras.
Muladhara (el primer Chakra) es donde comienza nuestra evolución
como seres humanos y Sahasrara (el séptimo) donde se completa.
A medida que evolucionamos y que se despiertan gradualmente
distintas capacidades y cualidades, en el curso de la vida cotidiana
las experimentamos como experiencias externas, y en el curso de la
meditación como experiencias internas.
Con la práctica (yoga, meditación y pranayama, pero también
muchas otras disciplinas), la energía fluye progresivamente a
voltajes y vibraciones más elevados a través de los Nadis y, a
continuación, hacia los Chakras.
Muladhara es considerado el primer Chakra de la evolución humana,
mientras que, en el reino animal, el más elevado es Sahasrara.
Bajo Muladhara están los Chakras que representan el reino animal,
más instintivos, relacionados sólo con la conciencia sensorial y no
mental. No hay conciencia individual o ego, apareciendo con
Muladhara. Los Nadis en el reino animal tienen su confluencia en
Muladhara, mientras que en el cuerpo humano en Agya (ajna)
Chakra.
Así como Muladhara es el primer Chakra en el hombre, Patala es el
primero en los animales y representa la oscuridad total.
Más allá de nuestro séptimo Chakra, Sahasrara, hay otros Chakras
extra-corporales que representan un plano superior de Conciencia.
Profundizar en el estudio de los Chakras mostrará cómo la Kundalini
controla todas las situaciones de la vida. Unas palabras sobre la
evolución.
Hasta el Chakra Muladhara, la evolución procede espontáneamente,
los animales no tienen que hacer prácticas espirituales ni yoga ni
pranayama ni meditación, comen lo que quieren instintivamente y se
aparean cuando quieren regulado por la Naturaleza. Sin embargo,
cuando la evolución llega a Muladhara, como seres humanos ya no
estamos completamente sujetos a las leyes de la naturaleza, sino
que estamos sujetos a muchas influencias.
También se tiene conciencia del tiempo, el espacio, el yo y el ego.
Pensamos y sabemos que estamos pensando, comemos y sabemos
que estamos comiendo, vemos y sabemos que estamos viendo,
aunque muchas cosas las hacemos de forma automática e
inconsciente somos conscientes de nuestros sentidos y, hasta cierto
punto, de nuestro cuerpo, nuestros pensamientos y nuestra mente.
Y ése es precisamente el trabajo: desarrollar una mayor conciencia,
despertar la Conciencia, que por lo demás está en un nivel muy
bajo, todavía instintiva y condicionada.
La Kundalini "duerme" tranquilamente en Muladhara, para
evolucionar y así empujarla hacia los Chakras superiores, debe ser
estimulada, guiada, dirigida. Y el yoga, la meditación, el pranayama
y las kriyas hacen esto, al igual que una dieta sáttvica (sensible,
pura) y pensamientos elevados.
Es importante que todo se haga gradualmente, porque es una
energía muy potente que también puede provocar desequilibrios
psicofísicos.
El despertar siempre se produce, sin embargo, de forma no
inmediata, excepto en casos muy raros. Pero puede despertar y
volver a caer una y otra vez, es una energía que sube y baja
también muchas veces y durante muchos años. Puede subir al
segundo o tercer Chakra y volver a descender en el primero, pero
cuando llega de forma estable a Manipura (el tercero) ya no
desciende.
Sólo con Manipura despierto ya no estaremos sujetos a las
"reacciones" de los Chakras inferiores, sino que sólo habrá
"acciones" conscientes.
Hay varios síntomas del despertar, normalmente son manifestaciones
psíquicas, pero también pueden ser físicas. Cada uno de nosotros se
encuentra en una etapa diferente de la evolución y también es difícil
determinar dónde hemos llegado.
Con algunas pruebas, es posible saber si hay cierre o apertura de los
distintos Chakras; además, no están conectados entre sí, por lo que
pueden abrirse y/o despertarse no necesariamente en orden, como
un ascensor.
El despertar de los Chakras puede considerarse un acontecimiento
de importancia evolución humana. No debe fundamental en la
confundirse con el ocultismo. Con el despertar de los Chakras
nuestra mente y conciencia cambios, que tienen experimentan
gradualmente una relevancia y relación

significativas con la vida cotidiana.

El odio, el amor, los apegos, los juicios, los prejuicios, los miedos,
nuestras relaciones con los demás, etc.; están relacionados con la
calidad de nuestra mente consciente, subconsciente e inconsciente.
Nuestras angustias, frustraciones y sufrimientos no tienen tanto que
ver con las circunstancias de nuestra vida como con las respuestas
de la mente.
Además de lo que nos ocurre, es cómo reaccionamos ante lo que
nos ocurre.
Habría que abordar el significado y los aspectos de los samskaras y
el samsara, pero creo que esto también puede tratarse más adelante
con más detalle. Muchas personas nacen, o pueden nacer, ya con la
Kundalini y los Chakras despiertos, y serán personas especiales,
superiores, en diversos aspectos de la vida: grandes músicos,
inventores, científicos, profesores, profetas, estadistas, etc.
Esto puede verse en los niños que manifiestan diversas habilidades a
medida que crecen. A veces la sociedad no ha sido capaz de
comprenderlos y a menudo se les ha considerado anormales o locos
o, al menos, extravagantes.
A medida que tu mente y tu conciencia se expanden, te vuelves más
alerto y sensible a todo lo que ocurre en tu vida y en tu mente. La
conciencia aumenta y uno se vuelve más receptivo porque las
frecuencias de la mente cambian. Uno tendrá cada vez más acceso a
las cualidades más elevadas del hombre: amor, compasión, caridad,
gratitud, misericordia. Y por eso el despertar del Chakra del corazón,
empezando por la apertura, se considera fundamental.
La apertura de Anahata puede proporcionarnos una salud duradera y
una mayor inmunidad.
Cuando Anahata despierte tendremos una relación sublime con
todos los seres, nuestros valores y la calidad de nuestras relaciones
cambiarán.
Entonces vivirás de forma cada vez más elevada, mejorando tu
actitud hacia ti mismo y hacia la vida.
CAPÍTULO 5
Veamos con más detalle los distintos Chakras

Cada Chakra tiene su propio nombre en sánscrito, una ubicación

física, se asocia con colores, sonidos y más que veremos en la tabla
al final del libro.
Dependiendo de la escuela o tradición de origen se suelen notar,
como he dicho, ciertas diferencias y aquí he decidido destacar las
asociaciones más reconocidas y extendidas. Cuando indico dos
colores, es porque algunas escuelas han indicado colores diferentes;
no me parece oportuno dar preferencia o mayor importancia a una u
otra interpretación, se trata de corrientes de pensamiento que se
han desarrollado a lo largo del tiempo y siempre a partir de escuelas
o tradiciones autorizadas.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que los colores y las formas
"correctos" son revelados por el gurú al emprender los caminos
iniciáticos.
Por ejemplo, el Chakra de la garganta es más reconocido como azul
brillante, pero algunas tradiciones lo indican como violeta, otras
plateado o blanco o azul claro, el Chakra del corazón se considera
generalmente verde pero también rojo o a veces azul... ¿quién tiene
razón?
El indianista y amigo de Jung Heinrich Zimmer en "Los Chakras del
Kundalini Yoga" - Primavera 1975. An Annual of Archetypal
Psychology and Jungian Thought los enumera (ascendiendo desde
abajo) como sigue: carmesí, bermellón, negro azulado, rojo sangre,
púrpura ahumada, blanco (como la luna), abigarrado. Para alejarse
de confusiones e interpretaciones, también es útil pensar que, en los
manuales antiguos, las indicaciones sobre los Chakras son
prescriptivas y no descriptivas; el Maestro prescribía al discípulo
cómo visualizar los Chakras, dónde apuntarlos, con qué colores
activar sus funciones y qué mantras utilizar para estimularlos.
He decidido basarme en las más extendidas y reconocidas, aunque
sé que puede haber muchas otras. Ilustraré para cada Chakra
algunas posturas (asanas) que ayudan a estimularlos.
La tabla que figura al final del libro muestra las asociaciones y
características de los Chakras; la apertura y el despertar darán lugar
a la consecución de un equilibrio cada vez mayor en los diferentes
aspectos de los Chakras.
Veremos a continuación ejercicios y posturas de yoga para cada
Chakra.
Son muy importantes la etapa y el crecimiento evolutivo de los
Chakras, que comienzan a formarse durante el embarazo hasta el
inicio de la edad adulta. En los distintos periodos indicados en el
cuadro, todo lo que nos ocurría, desde lo más significativo hasta lo
más trivial, era muy importante porque profundamente en nuestro
carácter, pensamientos y estado psicofísico general. Dejo
deliberadamente fuera los aspectos psicológicos, porque esto entra
en un campo muy amplio, personal y sensible que no es de mi
dominio.
Muchos psicólogos y psicoterapeutas utilizan el trabajo con los
Chakras con sus pacientes. Si te interesa profundizar en este tema,
te sugiero el hermoso (en mi opinión) libro de la psicoterapeuta y
profesora de yoga Anodea Judith "El libro de los Chakras", así como
lecturas sobre las ideas y estudios realizados por C. G. Jung.
También se utilizan mucho los colores y la música, porque ambos
vibran y aportan armonía al resonar con nuestro cuerpo energético.
A continuación, haré una breve mención a los sonidos. En cuanto a
los colores, existen interesantes interpretaciones y escuelas de
pensamiento, también combinadas con los Chakras, que les invito a
explorar. influía

actitud,
CAPÍTULO 6
Mantras y sonidos
Cada Chakra tiene su propio bija mantra y está asociado a un Dhatu
(tejido) que se utiliza para equilibrar el sistema nervioso y los
tejidos, liberar tensiones y estimular las energías de los Chakras.
Sobre bija y citando a Jung: <El bija es el germen de un Chakra. En
la meditación también se debe tomar conciencia del bija. El poder
operativo interno del bija no es una personalidad claramente
desarrollada, y nunca se le da un nombre. El bija simboliza
simplemente el poder subconsciente del elemento que simboliza. Es
esto lo que opera en la base psicológica de uno, pero sólo puede
operar con fuerza real cuando uno se hace consciente de ello a
través de la meditación>. (C.G. Jung, La Psicología del Kundalini
Yoga, 2007 Fundación de las Obras de C.G. Jung, Zurich).

De Wikipedia:
En el hinduismo y el budismo, el término Bija designa el sonido
semilla, es decir, el sonido que transformó la energía potencial de
Brahma en materia; asociado a cada forma material hay un sonido
que es el sonido por el que esa forma se materializó en el mundo
material.

Los Bija Mantras, por su parte, son sonidos que, gracias a sus
vibraciones, según la tradición védica, contribuyen a ampliar la
esfera psicofísica del hombre.

Una bella interpretación y descripción es la siguiente (de

armonianaturale.com):
Los bija mantras son estructuras sonoras básicas, monosílabos, que
no tienen traducción explícita.
Constituyen la energía del universo y también se describen como
"experiencias energéticas". No son símbolos de otros objetos o
experiencias del mundo. Por ejemplo, la palabra "silla" significa un
objeto con cuatro patas, mientras que los bija mantras no
representan objetos ni sentimientos. Son como el olor de una flor o
el sabor de una manzana. Las palabras no definen esas experiencias.

En sánscrito, bija que una pequeña significa semilla. Y al igual

semilla contiene un árbol majestuoso, cada bija mantra contiene una

gran cantidad de sabiduría espiritual y poder creativo porque es la
semilla, es decir, la esencia, de una energía particular en forma de
sonido.
Una de las más antiguas y conocidas de estas semillas es el OM, el
sonido primordial, el sonido del infinito que impregna el Universo. Se
utiliza como invocación inicial en muchos mantras y como mantra en
sí mismo.

Resumiendo:
1er Chakra - Bija: Lam (músculos, huesos, estabilidad), nota DO
2º Chakra - Bija: Vam (Grasa, receptividad, creatividad), nota RE
3er Chakra - Bija: Ram (sangre, voluntad, coraje), nota MI
4º Chakra - Bija: Yam (plasma, amor, compasión, devoción) nota
FA
5º Chakra - Bija: Ham (prana, comunicación, discernimiento), nota
SOL
6º Chakra - Bija: Om (mente, sabiduría,
comprensión), nota LA (432 Hz)
7º Chakra - Bija: Om (silencio), iluminación, conocimiento - nota SI
o silencio.
Aquí hay que abrir necesariamente un paréntesis sobre las notas.
Según algunos investigadores autorizados, la mejor frecuencia para
afinar las notas es comenzar con A a 432 Hz, por lo que C estará a
unos 256,8 Hz. Hoy en día, toda la música que se escucha está
afinada a 440 Hz, por lo que los instrumentos utilizados tienen su
diapasón en esta frecuencia, con Do 261,6 Hz. Se cree que 432 es el
tono natural perfecto, en armonía con la resonancia Schumann a 8
Hz, también conocida como "resonancia de la Tierra".
Esta frecuencia tiene efectos beneficiosos, relajantes e incluso
terapéuticos tanto a nivel energético como psicofísico.
La música de 432 Hz está conectada con el Chakra del corazón, es la
llave para acceder a este Chakra. Hay varios músicos que, afinando
sus instrumentos a 432 Hz., han compuesto muchas piezas
hermosas que utilizan como musicoterapia en diversos campos,
entre ellos el médico, incluidas algunas intervenciones recientes en
quirófanos.
Los símbolos también son muy importantes y a menudo se pasa por
alto su significado, por lo que los describiré a continuación.
CAPÍTULO 7
Muladhara - Primer Chakra

Mula significa raíz o base, está en la base en el sistema de Chakras y

sus efectos se consideran la base de nuestras vidas y, también a nivel
colectivo, de lo que ocurre en el mundo.
Representa nuestras raíces y nuestra experiencia corporal en la tierra.
Comienza a formarse desde el tercer mes de embarazo hasta el
primer año de vida; lo que nos ocurre durante ese periodo tiene una
importancia fundamental para toda nuestra vida.
Simboliza la condición psíquica del hombre actual, estar y sentirse
atado al cuerpo físico, como si estuviéramos "en la red" de las
fuerzas terrestres.
Son nuestros cimientos, como un edificio que descansa sobre bases
sólidas.
Muladhara también se considera el interruptor directo para el
despertar del tercer ojo, Ajna Chakra. No todo el mundo dibuja el
símbolo de la misma manera, yo describiré una que prefiero y me
parece más completa.
Está representado por una flor de loto con cuatro pétalos de color
rojo oscuro (según otras tradiciones es carmesí, un rojo claro
luminoso o negro, ya que a veces el negro puede encontrarse
asociado al segundo Chakra).
Las flores, en este como en los otros Chakras, cuelgan al revés, pero
cuando la Kundalini pasa a través de ellas enderezarán sus corolas.
En cada pétalo hay una letra en sánscrito escrita en oro, traducida en
vam, sham, sh.am, sam, con el mantra bija Lam (el mantra del
elemento tierra, el sonido que activa la energía del 1er Chakra),
donde vam sham y sh.am son mantras de paz que promueven la
calma, el desapego (la mente se calma fortaleciendo el sistema
nervioso) y alivian el dolor; sam calma la naturaleza emocional.
El cuadrado es amarillo y representa la tierra, las 8 flechas son las 8
montañas kula. El cuadrado está sostenido por un elefante con 7
trompas y representa la solidez, la fuerza y la firmeza.
Características de Muladhara: un gran poder durmiente que descansa
en un lugar estable y seguro. Los 7 troncos representan los 7 tejidos
(dhatu) necesarios para nuestro cuerpo (tierra, fluidos, sangre, carne,
tejido, grasa, hueso).
El triángulo invertido es rojo y es el símbolo de la energía creadora
Shakti, responsable de la reproducción y multiplicación de todas las
cosas. Dentro del triángulo está el dhumra linga gris que representa
el cuerpo astral, rodeado por la Kundalini retorcida en 3 ½ espirales
los cuales se asocian: a los 3 mantras OM (asociados al pasado, al
presente y al futuro), a las 3 gunas o cualidades del ser humano
(tamas, rajas y sattva), a los 3 estados de conciencia (vigilia, sueño y
ensoñación) y a los 3 tipos de experiencia (subjetiva, sensorial,
ausencia de experiencia). El semiespíritu es el estado de
trascendencia, un plano superior de conciencia sin vigilia, sueño ni
ensoñación (cit.).
Así pues, la Kundalini tumbada y retorcida representa la experiencia
total del universo y la trascendencia. En el Tantra esta serpiente se
llama mahakala, el tiempo sin fin, la forma estática de todas las
energías. La Kundalini yace en el inconsciente, más allá del espacio y
del tiempo. Cuando comienza a despertar penetra en la personalidad
y está sujeta al tiempo y al espacio.
Tocado por un creciente poder espiritual, despierta a la vida, a la luz
y trasciende los aspectos más materiales de nuestras vidas. Se dice
que, para nuestra evolución, tanto personal como colectiva, será cada
vez más necesario emprender los caminos del despertar espiritual.
En el primer Chakra la psique está inerte, hay mucho apego a la vida
y a las cosas materiales, a la posesión, no hay acciones positivas o
conscientes sino reacciones instintivas.
Cuando la energía de Muladhara está muy presente en nuestras
vidas, somos muy reactivos y poco conscientes.
Al ascender por los Chakras, la psicología del individuo se
transformará, evolucionando hacia aspectos y actitudes más
espirituales.
Encima del triángulo rojo está el mantra Lam*, a los lados del
triángulo están el Dios Ganesha y la Diosa Dakini.
El Muladhara Chakra está situado para los hombres en el centro del
perineo, ligeramente hacia dentro, y para las mujeres en la parte
posterior del cuello uterino. En ambos hay una pequeña glándula
también llamada ganglio o bloque (granthi).
Es el primero de los tres nudos energéticos y psíquicos que el
practicante debe desatar, que luego se encuentran en el primero, el
cuarto y el sexto Chakra. *Una aclaración sobre los mantras:
generalmente los mantras de los Chakras se describen como
correspondientes a ese Chakra respectivo, pero en realidad los
mantras están asociados a los elementos, así LAM es el mantra del
elemento tierra asociado entonces al primer Chakra. Y así
sucesivamente para los elementos/Chakras siguientes. El mantra
también se utiliza para despertar la energía kundalini. Los mantras
reciben varias definiciones en los textos: oración, forma de adoración,
sílabas místicas... Mantra es poder (Shakti) en forma de sonido. La
raíz Man significa pensar.

Además de nudos psíquicos, son obstáculos para el camino de la

Kundalini. Son niveles de conciencia donde maya es muy fuerte, hay
ignorancia y apego a las cosas materiales. En el primer Chakra, las
características son el letargo, la pereza, los apegos, el egoísmo, la
negatividad, el miedo, las reacciones demasiado instintivas sin
consciencia (todos poderes de tamas).
El tanmatra (actividad de los sentidos, percepciones sensoriales) es el
sentido del olfato, el órgano la nariz. A través de la meditación sobre
la Kundalini y el primer Chakra, y con el posterior despertar, el
individuo se libera de todas las enfermedades comunes, está siempre
feliz y de buen humor (cit.).

Ya no entra en discusiones estériles, ha abandonado el juicio y el

prejuicio, la crítica, la polémica y el ridículo. El despertar de
Muladhara es muy importante por varias razones: además de ser el
asiento de la Kundalini, representa nuestra base, nuestros cimientos,
y como en un edificio de apartamentos, si todo el sistema de Chakras
descansa sobre unos cimientos sólidos, los pisos superiores se
beneficiarán enormemente.

Es sentirse arraigado, es pertenecer a la tierra y no sólo a la propia

tierra, también está asociado a la familia, al trabajo, al hogar. Se dice
que un primer Chakra fuerte y despierto se siente bien en todas
partes, en todas partes se siente en casa porque ha encontrado su
hogar y su estabilidad dentro de sí mismo.
Reivindicando el derecho a existir y a tener lo que uno necesita para
vivir (de forma equilibrada, por supuesto), los verbos asociados a
este Chakra son: SOY y TENGO.

Camino seguro por el mundo y no tengo miedo.

Es la sede de Tamas, que representa la oscuridad y la inercia, el

instinto animal. Es la fuerza pasiva que intoxica el cuerpo y la mente,
es el apego y el estancamiento emocional.
Todas las pasiones, complejos, culpas, ansiedades, miedos tienen sus
raíces en Muladhara.
La comida y la nutrición (justo en el sentido de cómo nos
alimentamos) también son del primer Chakra, por lo que algunos
problemas alimentarios pueden tener una asociación con el primer
Chakra (pero también con el segundo desde el punto de vista de la
gula y el deseo).
La interpretación que hace la Cábala del primer Chakra en relación
con la comida y el intestino es interesante: es como si el intestino se
considerara una "cabecita", de ahí la exhortación a "comer con la
cabeza" (en el sentido de nutrirnos), a comer lo que nos nutre y nos
hace sentir bien y no alimentos que nos intoxican. Así pues, un
primer Chakra abierto y evolucionado "proporcionará" de forma
natural y espontánea los alimentos más sanos, más energéticos y
menos intoxicantes.

También está relacionado con la sexualidad, la más instintiva, animal,

reproductiva. Según algunas interpretaciones, la sexualidad se
localiza exclusivamente en el primer Chakra, pero estoy más de
acuerdo con quienes asocian los aspectos más emocionales y
relacionados con el placer de la sexualidad con el segundo.

Fisiológicamente, se asocia con el colon, el intestino grueso, el ano,

el nervio ciático y el lumbar.
A continuación, voy a enumerar algunas estrategias de curación para
abrir Muladhara y tal vez iniciar un despertar para superar este
primer granthi. Pero recuerda que para un verdadero despertar hay
caminos que no se pueden evitar, no hay atajos: mucho yoga,
pranayama, meditación y Siempre seguidas por experimentado.
técnicas de

un profesor Kriya yoga. o maestro

ESTRATEGIAS PARA EL 1ER CHAKRA

• Llenar tu vida todo lo posible de objetos rojos, sábanas rojas, ropa

roja, frutas y verduras rojas, baños en agua roja, etc.

• Caminar, sentir la tierra bajo los pies, la gravedad, el peso del

cuerpo, el apoyo de la tierra, pertenecer a la tierra. concentrado,
meditar caminando, Caminar caminar
conscientemente, "sentir los pasos". Tomar energía de la tierra.
• Comer alimentos de la tierra (frutas y verduras).

• Masaje, con aceite (almendra, jojoba), preferiblemente con aceites

esenciales, por ejemplo, geranio, salvia y lavanda (los aceites
esenciales son el espíritu de la planta, su energía sutil conecta con la
nuestra, actúan sobre las vibraciones más profundas y remotas según
un principio de resonancia, desempeñan un papel fundamental en la
apertura y armonización de los Chakras: la fuerza del prana de la
planta actúa sobre nuestro prana, despertando y moviendo nuestras
energías sutiles). También automasaje frecuente, especialmente pies
y piernas. Masajea la zona del primer Chakra con aceites suaves o
incluso arcilla. Como alternativa, vierte 10/12 gotas de aceite esencial
(por ejemplo, lavanda) en un cuenco con agua tibia, sumerge y
humedece un pequeño paño de algodón y colócalo sobre el primer
Chakra hasta que se enfríe por completo.

• Meditaciones sobre el primer Chakra, el color rojo, la Madre Tierra.

• Yogra Nidra, muy centrado en relajar el cuerpo, el peso, la
gravedad y "sentir" la tierra bajo nosotros, sentirnos acogidos y
nutridos por la Madre Tierra.

• Examinar la relación con la madre en la primera infancia...

comprender, perdonar y dejar ir.

• Canto repetido del mantra LAM.

Afirmaciones:
Es seguro para mí estar aquí
La tierra me sustenta y satisface mis necesidades Amo mi cuerpo y
confío en su sabiduría Existo y soy real
A continuación, ilustraré algunas posturas (asanas) y ejercicios
indicados para el primer Chakra; a este respecto, señalaré que para
cada asana y para todos los Chakras sugeriré intentar mantener la
postura con un enfoque suave, al estilo de Anukalana yoga, evitando
así en lo posible tensar y respirar hacia el interior del cuerpo. Voy a
entrar en más detalles para
las diversas posiciones.
Tadasana (postura de la montaña)
Por lo general, se presta poca atención a cómo estamos de pie; es
una posición que asumimos instintivamente sin prestar especial
atención a la postura y a cómo descargamos el peso en las piernas y
en los pies. Intentemos mantener la postura de la montaña durante
unos minutos de forma muy relajada en la parte superior del cuerpo,
para después dejar caer los hombros, los brazos y relajar las manos.
También relajamos completamente la cara, el abdomen y nos
centramos en las piernas y en el apoyo de los pies. Eliminemos la
tensión de las piernas, mantengamos las rodillas suaves y prestemos
atención al apoyo de las plantas de los pies sintiéndolas bien
apoyadas, descargando así el peso de manera uniforme. Ahora no
pensamos tanto en la postura como en sentirnos muy arraigados, con
los pies firmemente plantados en el suelo. Sentimos la gravedad, el
peso del cuerpo atraído por la tierra, el elemento tierra bajo nosotros,
la madre tierra que nos nutre, nos sostiene y nos da energía.

Apanasana
(Posición tumbada supina con las rodillas apoyadas en el pecho)
Apana es la respiración vital, apana vayu es el movimiento
descendente de la energía. Esta sencilla postura favorece la liberación
de la corriente de energía hacia la tierra y activa el primer Chakra.
Empieza en posición supina y después de unas cuantas respiraciones
relajadas, exhalando, levanta las piernas y lleva las rodillas al pecho.
Durante unas respiraciones y siguiendo tu ritmo natural, mientras
exhalas, acerca ligeramente las rodillas al pecho y mientras inhalas,
sepáralas unos centímetros. Un movimiento suave y delicado
siguiendo la respiración, después durante 20 o 30 segundos mantén
las rodillas cerca del pecho mientras respiras con naturalidad. Presta
atención a los pequeños movimientos de la región lumbar, al
estiramiento de los músculos isquiocrurales y de los glúteos, a la
flexión de las rodillas y al suave masaje de las vísceras.
Experimentarás una sensación de enraizamiento a medida que la
respiración se desplaza desde el Chakra raíz (Muladhara) hasta la
cabeza. Este movimiento favorece la eliminación de toxinas, mejora
las funciones digestivas y también ayuda a liberar tensiones mentales
y emocionales.
Tonifica y masajea los órganos abdominales y mejora el peristaltismo
intestinal.
Relaja la zona lumbar, eliminando cualquier tensión. Activa el Chakra
Muladhara.

Supta Padangusthasana
(supta significa tumbado, pada pie y angustha dedo gordo)
Tumbado boca arriba, alternando las piernas izquierda y derecha,
extiende una pierna hacia arriba si es posible a unos 90° con
respecto a la espalda (si aún no se extiende bien, mantenla lo más
lejos posible sin tensarla), coge el dedo gordo del pie con la mano,
introduciendo el índice y el dedo corazón entre el dedo gordo y el
segundo dedo del pie, luego levanta la cabeza, acercando la frente a
la rodilla, haz unos cuantos ciclos de respiración relajada; durante la
inhalación aplica una relajación mayor pero suave y durante la
exhalación deja que la pierna se relaje. Facilita la apertura de los
canales de las piernas, fortalece los músculos y los relaja, aumenta el
enraizamiento y alivia cualquier tensión o dolor lumbar.

Setu Bandha Sarvangasana (medio puente sobre los hombros)

Tumbado boca arriba, flexiona las piernas manteniéndolas paralelas

entre sí, con los pies separados a la anchura de las caderas, las
rodillas por encima de los talones y las piernas perpendiculares al
suelo; presiona los pies contra el suelo y contrayendo los glúteos
levanta la pelvis y la espalda y, colocando los brazos estirados bajo la
espalda, entrelaza los dedos y mantén las caderas levantadas durante
unos cuantos ciclos de respiraciones lentas y profundas (de 15-20''
gradualmente hasta un minuto): Inhalando levanta más forzando con
los brazos y empujando los pies hacia el suelo con la fuerza de las
piernas, luego exhalando suelta relajando los músculos. Presta
atención a tu espalda y en caso de problemas, dolor o tensión no te
arquees demasiado. Vuelve suavemente al suelo y lleva las rodillas al
pecho durante unas cuantas respiraciones, relajando todos los
músculos. Estimula las piernas y el primer Chakra, fortalece los
glúteos y la zona lumbar, y abre la zona de la ingle por delante de las
caderas.
Salabhasana (posición de la langosta)

Tumbado en decúbito prono, inspira y espira para levantar

simultáneamente la cabeza y los hombros, estira los brazos y eleva
unos centímetros las piernas extendidas. Cuida mucho tu espalda sin
forzar demasiado la postura. Si tu espalda te lo permite y es fuerte y
flexible, levantate todo lo que puedas contrayendo los músculos de
los glúteos y los muslos y aguanta unas cuantas respiraciones incluso
hasta 1 minuto o más; si tu zona lumbar es débil, tienes problemas o
dolores, ajústate bien escuchando tu cuerpo para no provocar una
tensión excesiva. Puede bastar con elevarse unos centímetros o
realizar la media langosta elevando sólo la cabeza, los hombros y los
brazos.
Esta asana estimula y tonifica el primer Chakra, fortalece las piernas
y los músculos de la espalda al tiempo que flexibiliza la columna
vertebral y ayuda a aliviar cualquier dolor sacro o lumbar.
Bhujangasana (postura de la cobra)
Túmbate en decúbito prono. Puedes encontrar varias formas de
realizar esta postura, en este caso realízala de forma suave y
relajada, con los antebrazos apoyados en el suelo y los codos bajo los
hombros. Si sufres dolores lumbares ten mucho cuidado con
arquearte, podría ser bueno para ti, pero también perjudicial; primero
debes conocer bien tu tipo de problema y pedir consejo a un profesor
experimentado o a tu fisioterapeuta (esto podría aplicarse a muchas
otras posturas, en caso de dolencias físicas). Así que, hablando de
espaldas sanas, puedes empujar fuerte con los antebrazos y alejar
los hombros de las orejas, arqueando la espalda tanto como te
permita tu flexibilidad. Mantén el cuello recto con la mirada al frente
y concéntrate en enraizar la zona pélvica. Soy de la opinión de que,
en ausencia de problemas físicos, puedes mantener los glúteos y los
muslos completamente relajados, con las piernas extendidas, pero no
tensas.
Permanece entonces con esa sensación de alargamiento de la
columna en el arqueamiento y enraizamiento de la pelvis. Mantén la
postura durante unas cuantas respiraciones lentas y profundas por la
nariz (incluso de 1 a 2 minutos) y con cuidado de no hiperventilar.
Esto nos conecta con nuestro cerebro reptiliano, orientado a la
supervivencia, un aspecto psicológico asociado al primer Chakra.
Esta postura favorece el enraizamiento de la pelvis, aumenta la
flexibilidad estimula los sistemas linfático.
de la columna vertebral y
inmunitario, circulatorio y
Adho Mukha Svanasana (posición de perro boca abajo)

Una posición que probablemente hayas hecho muchas veces.

Tanto los Chakras inferiores como los superiores se estimulan
intensamente, pero ahora centrémonos sobre todo en los inferiores.
Sin preocuparse por los talones que podrían no tocar el suelo, piensa
en estirar bien la columna y los brazos, soltando los hombros y
dejando caer la cabeza llevando el mentón hacia el esternón.
Haciendo una ligera retroversión de la pelvis, lleva el coxis bien hacia
arriba.
Siente bien la tierra bajo tus pies y bajo tus manos, con todos los
dedos abiertos y separados.
Puedes doblar alternativamente las rodillas para relajar las piernas,
los pies están abiertos a la anchura de las caderas.
Puedes mantener la posición gradualmente desde 1 hasta 5 minutos.
Esta postura da una sensación de arraigo a todo el cuerpo, distiende
y crea fuerza en el canal central, estira los músculos isquiocrurales y
las pantorrillas. Puede llevar tiempo conseguir que los talones se
apoyen en la esterilla, pero no te preocupes por esto, con la práctica
mejorarás y la postura se volverá muy cómoda.
Evitar en caso de túnel carpiano, embarazo avanzado, hipertensión,
migraña.
Utthanasana (flexión hacia delante), también con las rodillas
ligeramente flexionadas.
Distiende intensamente todos los músculos de la espalda y las
piernas. Los principales canales de energía de las piernas y la espalda
se beneficiarán enormemente de esta postura si se realiza con
constancia.
Estimula intensamente la energía en los canales del primer Chakra;
durante la retención, además de estirar los músculos, intenta percibir
el nervio ciático, imagina y visualiza un flujo de energía que recorre el
nervio ciático y conecta con la energía de la tierra, durante la
inhalación estira las piernas hasta el "final" pero sin tensarlas
demasiado, y durante la exhalación relaja todo doblando ligeramente
las rodillas.
También dura mucho tiempo, gradualmente se puede empezar desde
uno hasta cinco minutos.
El nervio ciático, o isquiático, junto con el nervio vago, es el nervio
más largo y de mayor tamaño del cuerpo. Se origina en la parte
inferior de la columna vertebral Se origina en la parte inferior de la
columna vertebral S2-S3-, recorre el glúteo por debajo del músculo
piriforme, el muslo y la rodilla, y luego se divide en dos ramas: ciático
poplíteo interno, que cubre la zona de la pantorrilla y la planta del pie
y el ciático poplíteo externo, el que nos permite levantar la punta del
pie y realizar la flexión dorsal, imprescindible para caminar.

Ashva Sanchalanasana (Posición de estocada baja)

Desde la posición de Tadasana, lleva una pierna hacia atrás con una
zancada larga, apoyando la rodilla y el pie extendidos.
Levanta los brazos paralelos con las palmas de las manos
enfrentadas, los brazos están estirados hacia arriba pero no
extendidos, ten cuidado de no tensarlos. También con los hombros
intenta abrirlos, pero sin forzarlos, siguiendo tu respiración natural,
durante la inhalación los brazos se estiran y los hombros se abren, en
la exhalación todo se relaja. Concéntrate en el equilibrio, la
estabilidad, la fuerza de las piernas y siéntete bien enraizado. Mantén
la postura uno o incluso gradualmente hasta dos o tres minutos.
Fortalece pies, tobillos y piernas. Al estimular el primer Chakra da una
sensación de equilibrio y conexión a tierra.
Ardha Hanumanasana (estocada invertida, medio split frontal)

Como se muestra en el dibujo, realiza esta posición manteniendo las

manos (si es posible las puntas de los dedos) apoyadas a los lados de
los pies, la cadera por encima de la rodilla y dejando caer los
hombros, intentando, mientras inhalas, enderezar la pierna. Si no se
extiende totalmente, permanece con la pierna flexionada según tu
flexibilidad y sin tensarla demasiado, intentando durante la inhalación
estirar un poco más y relajando con la exhalación.
Flexiona el pie de la pierna delantera como si fuera un martillo y tira
ligeramente de los dedos hacia ti. Haz también algunas rotaciones
con el tobillo en el sentido de las agujas del reloj y en sentido
contrario para aflojar la articulación.
Sostén cada pierna durante uno o dos minutos y luego, durante unas
cuantas respiraciones, colócate en Balasana (postura del niño).
Esta postura estimula y abre el primer Chakra, estira las caderas, los
músculos pantorrillas.
Es una buena preparación completa (Anumanasana). de los muslos y
las

para la división frontal Utkatasana (Postura de la silla)

Desde la posición de montaña, con los pies paralelos y abiertos al
igual que las caderas, flexiona las piernas para "sentarte" en la
posición, mirando los pies, ten cuidado de que las rodillas no
sobrepasen la punta de los pies: si las rodillas tienden a cerrarse
hacia dentro, prueba a abrir ligeramente la punta de los pies hacia
fuera, intentando alinear los pies, las piernas y los muslos. Intenta
mantener la columna recta acentuando ligeramente el arqueamiento
natural de la región lumbar y realizando una pequeña retroversión de
la pelvis.
Contrae ligeramente los músculos de la cara interna del muslo con
una pequeña contracción hacia dentro, siente el peso del cuerpo bien
repartido por toda la planta del pie. Los brazos se estiran hacia arriba
intentando abrir los hombros sin crear excesiva tensión; mira hacia
arriba, pero sin arquear demasiado el cuello. Si hay tensión en la
zona hombros-cuello, mira hacia delante (con el cuello recto), para
no comprimir el tracto cervical.
Aguanta unas cuantas respiraciones concentrándote en la fuerza y la
conexión a tierra, ajustando según tu resistencia incluso hasta 1 o 2
minutos.
Esta asana aumenta la fuerza y la resistencia, fortalece las piernas y
estimula el primer Chakra.
Debe evitarse en caso de problemas de rodilla y tobillo o de tensión
arterial baja.

Utkata Konasana (postura de la esquina poderosa o 'la diosa

agachada')
También conocido como Deviasana
Según el dibujo, abre las piernas colocándote lo más lejos posible con
las rodillas por encima de los talones y, a continuación, abre bien las
caderas. Los pies están abiertos con los dedos apuntando hacia
fuera, intentando repartir el peso uniformemente por toda la planta
del pie. Si es posible, flexiona las piernas hasta que los muslos
queden paralelos al suelo a 90° con las piernas (que quedan así
perpendiculares al suelo). Flexiona todo lo que puedas sin forzar
demasiado, poco a poco llegarás a la posición final. Levanta los
brazos doblándolos 90º con las manos abiertas hacia arriba, abre,
pero no contraigas los hombros, por el contrario, intenta que caigan
relajados. Mantén el cuello recto y la mirada al frente, relajando
también bien los músculos faciales. Alternativamente, puedes unir las
manos al corazón, relajando bien los hombros y los brazos. Aguanta
la respiración todo lo que puedas. Si sientes que has llegado al límite
de tus fuerzas, puedes intentar aguantar unos segundos más y luego
estirar las piernas y salir de la postura.
Esta es una asana intensa, fortalece mucho las piernas, abre el suelo
pélvico, da energía, fuerza, confianza, abre y estimula el primer y el
segundo Chakras, pero también es buena para Manipura, el tercer
Chakra. Vrksasana (postura del árbol)
Esta es probablemente una de las posturas de yoga más antiguas. Se
realiza con las dos piernas y es esencial para conectarse a tierra.
Desde la posición de montaña, levanta un pie paralelo a la cara
interna del muslo abriendo bien la rodilla hacia afuera, ayudándote
con una mano para levantarla bien. Si no puedes levantarlo o se
desliza hacia la rodilla, lo mejor es apoyarlo en la cara interna de la
pantorrilla, o incluso justo por encima del tobillo, evitando presionar
la articulación, e intentar mantener el equilibrio. Una vez que hayas
encontrado la mejor manera de mantener la postura cómodamente,
levanta los brazos por encima de la cabeza juntando primero las
manos, con los hombros relajados y los codos ligeramente
flexionados para evitar crear tensión y aprovechar al máximo la
energía donde se necesite en ese momento. Si quieres intentar
intensificar la postura y desarrollar más concentración y equilibrio,
prueba a cerrar los ojos, llevando toda tu atención a la estabilidad, al
equilibrio, apoyando uniformemente toda la planta del pie en el suelo,
sintiendo bien el arraigo, también desde el punto de vista energético.
Percibe el enraizamiento intentando identificarte con un árbol, con las
raíces hundiéndose en la tierra de la que se nutren. Esta asana
estimula fuertemente el primer Chakra y el sentido de enraizamiento
y de estabilidad, fortalece pies, pantorrillas, tobillos y muslos.

Utthita Hasta Padangusthasana

(posición de la mano agarrando el dedo gordo del pie)
Es una posición bastante difícil, pero puede abordarse por etapas.
Para el agarre del dedo gordo, introduce los dedos índice y corazón
entre el dedo gordo y el segundo y apriétalo con fuerza con ambos
dedos. Si hay problemas con este agarre, puedes agarrar
alternativamente la parte exterior del pie con la mano; intenta
extender la pierna todo lo que puedas manteniendo la espalda y el
cuello rectos, incluso si la pierna aún no está bien extendida, intenta
mantener la espalda recta. La otra mano se apoya en la cadera;
alternativamente, para ayudar al equilibrio, puedes abrir y extender el
brazo hacia fuera. Después de 5 respiraciones (si estás familiarizado
haz la respiración Ujjayi, si no tu respiración natural está bien) con la
pierna extendida hacia delante, intenta rotarla hacia fuera abriendo
bien la cadera, manteniendo la posición otros 30" o 1 minuto si
puedes. A continuación, vuelve lentamente con el pie al suelo y, tras
una breve pausa, realiza la misma postura con la otra pierna.
Se trata de una asana intensa, que fortalece los pies y las piernas
mediante una fuerte estimulación de los canales de energía, además
de fortalecer y elongar los músculos.

Virasana o supta virasana (postura del héroe)

Sentarse sobre los talones o, si se puede, en medio de ellos.
Estas posturas estiran eficazmente los cuádriceps y los flexores de la
cadera y, al abrir la zona inguinal, se estimula el primer Chakra.
Si resulta cansado o doloroso sentarse en medio de los talones, es
preferible llevar un ladrillo de espuma bajo los glúteos para sentarse;
si aun así resulta difícil, es mejor sentarse con los glúteos sobre los
talones. Evitar si hay lesiones en rodillas, tobillos o caderas.
Hindolasana (mecer al bebé)

Sentado con las piernas cruzadas, levanta una pierna y acúnala como
a un bebé. Si puedes, lleva tanto la rodilla como el pie por dentro de
los codos; si no, puedes sujetarlos con las manos.
Sin doblar la columna, intenta acercar la tibia al pecho, lo importante
es no hacerte daño en la rodilla ni en la cadera ni en el tobillo, si no,
busca tu mejor punto donde puedas estar unas respiraciones sin
crear dolor ni tensión.
Mantén la postura durante uno o dos minutos, con los ojos cerrados,
acunando suavemente la pierna y relajando al máximo los músculos
implicados. El pie se flexiona como un martillo, pero sin excesiva
tensión muscular.
Repite con la otra pierna.
Esta asana abre las caderas, estimula el colon, el hígado y los
riñones, estimula el primer y segundo chakra y relaja el suelo pélvico,
que suele estar contraído.
Evitar en caso de lesiones o problemas de rodilla y cadera.
Janu Sirsasana (cabeza a rodilla)

Esta es una buena postura para hacer hacia el final de la práctica. Yo

prefiero mantenerla durante unos minutos de forma relajada y
distendida, soltando todos los músculos implicados, pero sin caer con
la cabeza (para ello, mantén la mirada en el pie). Si sigues sin coger
el pie con facilidad, es mejor que no te tenses y apoyes las manos en
el tobillo o incluso en la espinilla. Lleva tu respiración al punto o a los
puntos donde sientas más necesidad de estirar los músculos, al
inhalar haz un ligero estiramiento y al exhalar relaja todo por
completo. Mantén esta posición gradualmente de uno a cinco
minutos. Intenta relajar completamente la pierna abierta dejando
caer la rodilla hacia el suelo. El pie de la pierna flexionada está en la
cara interna del muslo y el talón presiona suavemente el centro del
perineo.
Esta postura estira los músculos de los muslos y la columna vertebral,
mejora la digestión al masajear y estimular los órganos internos. Abre
las caderas y el canal energético de la raíz.
Si quieres intentar intensificar el trabajo de estimulación del primer
Chakra, levanta los glúteos y siéntate sobre el talón apoyado en el
centro del perineo, relajando bien los músculos. Prueba esto sólo si
no tienes problemas particulares en esa zona y, tratando de relajar
bien los músculos, deja caer tu peso sobre el talón. Si es posible,
aguanta hasta un minuto con ambos pies; si no, al principio puede
bastar con unas pocas respiraciones.
Paschimottanasana (flexión sentada hacia delante)
Se trata de un estiramiento intenso de todos los músculos de la parte
posterior del cuerpo. Sugiero mantener la posición como la anterior,
es decir, de forma muy relajada y distendida, básicamente con un
estiramiento agradable sin llegar a tensarse demasiado. Inclinándose
hacia delante, según tu flexibilidad y sin querer forzarla, apoya las
manos en las piernas o en los tobillos o, si puedes alcanzarlos, toma
los lados exteriores de los pies y mantén la posición durante un
mínimo de un minuto, pero gradualmente hasta cinco o seis minutos,
respirando como para la anterior: al inspirar estira más la espalda y
las piernas para relajarse inmediatamente al espirar. La respiración
debe ser tranquila, natural, relajada y por la nariz. Al igual que la
asana anterior, estira y alarga la columna vertebral y los músculos
paravertebrales, los músculos posteriores de los muslos y las piernas,
y abre y estimula el canal radicular.
Evitar en caso de lesiones de espalda o embarazo avanzado (en caso
de embarazo, el yoga puede ser muy adecuado, pero es mejor
consultar a un profesor especializado y certificado para yoga durante
el embarazo).
Balasana (postura del niño)
Es una postura muy relajante que crea una buena conexión con la
tierra. Si durante la práctica te sientes un poco cansado, sientes
tensión o rigidez en la espalda, mantener esta sencilla postura
favorece un buen estiramiento y relajación de la columna vertebral y
de todos los músculos de la espalda, relaja la pelvis y todos los
órganos, relaja las piernas y estira los músculos. Al principio puede
resultar agotadora e incluso un poco dolorosa para los tobillos; te
sugiero que intentes mantenerla gradualmente durante más tiempo y
pronto te resultará muy cómoda.
Mantén la posición desde 1 minuto gradualmente hasta 5 minutos.
Nos lleva a una conexión profunda con el Ser, nos hace sentir
relajados y seguros, calma el sistema nervioso. Savasana (posición
del cadáver)

Casi todas las prácticas y clases de yoga deberían terminar con esta
postura que conduce a una relajación profunda.
Esta asana nos hace sentir un buen contacto con la tierra, es muy útil
imaginar que estamos tumbados en la naturaleza tratando de sentir
profundamente la conexión con la Madre Tierra, con la solidez y la
energía de la tierra, también tratando de sentir el intercambio de
energía entre nosotros y la tierra.
Tumbado boca arriba, deja que cada músculo se relaje
completamente, siente el peso de tu cuerpo prestando atención
precisamente al aspecto de la gravedad, siente también los puntos de
contacto de tu cuerpo con la tierra.
Trata de relajar todos los músculos, articulaciones, órganos internos,
cada célula más y más profundamente, manteniendo la atención y la
conciencia de esta relajación profunda, apreciando plenamente la
capacidad de la mente y el cuerpo para dejarse llevar.
Savasana proporciona un descanso profundo, mantenlo durante
mucho tiempo, incluso 30 minutos o 1 hora si puedes, intentando
permanecer quieto pero presente en la relajación. Si puedes, pon
música de 432 Hz de fondo.
CAPÍTULO 8
Swadhisthana (segundo Chakra)

Literalmente significa 'morada de uno mismo'. También se traduce

como dulzura, lugar dulce.
Físicamente está muy cerca del primer Chakra y se dice que es
corresponsable del despertar de Muladhara. Algunos afirman que la
Kundalini se encontraba anteriormente en el segundo Chakra, pero
tras una recaída volvió a "descansar" en el primer Chakra.
Corresponde al aparato urinario y reproductor. Su localización física
es en la base de la columna vertebral, un pequeño bulbo óseo que se
palpa justo encima del ano.
El Kshetram (punto reflejo de los puntos Chakra originales, que están
dentro de la columna vertebral, delante de ellos horizontalmente) se
encuentra por encima y en medio del hueso púbico.
Representado por un loto de seis pétalos, según la mayoría de las
tradiciones es de color rojo anaranjado, pero algunas tradiciones
tántricas lo señalan como negro por ser la sede de la ignorancia
primordial. En los pétalos las letras bam bham mam yam, ram, lam.
El Bija mantra es Vam.
La luna en el interior simboliza el elemento de este Chakra, el agua.
Este Chakra representa nuestra sexualidad, el placer dado y
"buscado" en la sexualidad, que, sin embargo, como siempre, debe
ser equilibrada, sin excesos, pero sin carencias ni demasiadas
renuncias. Aquí todo es excitante, la luna representa las mareas de la
vida y la sexualidad se considera un aspecto importante en la vida y
una de estas mareas.
A nivel energético, todos "sufrimos" mucho las fases de la luna, que
al estar asociadas al elemento agua influyen en nuestras vidas de
forma muy subjetiva. También se dice que es la sede de los deseos y
la culpa.
La luna está formada por dos círculos que enmarcan dos Yantras: el
primero con los pétalos hacia fuera representa la dimensión
consciente de la existencia, el otro con los pétalos hacia dentro la
dimensión inconsciente y también el almacén del Karma, de esta vida
y de las anteriores.
El animal símbolo es el Makara, el Leviatán, un animal parecido al
cocodrilo del Ganges. Es blanco y transporta todos los fantasmas de
la vida inconsciente, los movimientos del Karma.
Representa la fuente erótica de la vida, el goce de estar vivo, el
disfrute de los placeres de la vida (recuerda siempre de forma
equilibrada y sin excesos), pero también es una criatura auspiciosa
vinculada a la fertilidad.
Makara es también la montaña de la diosa del Ganges (Ganga) y del
dios del agua Varuna.
Se dice que este Chakra está estrechamente relacionado con el
mundo vegetal, por lo que seguir una dieta vegetariana puede ayudar
en el despertar de este Chakra. Después de todo, con la apertura y el
despertar gradual del primer Chakra, habrá cada vez menos
necesidad y deseo de alimentos de origen animal.
Tanmatra es el gusto y está asociado a la lengua. Se expresa en el
aparato genital y los órganos sexuales, los riñones y el sistema
urinario.
Meditar sobre el segundo Chakra y equilibrar su energía ayuda a
deshacerse de ciertos "enemigos interiores", como la gula excesiva y
los deseos sexuales.
Se dice: "Quien despierta este Chakra permanentemente se convierte
en un Sol que ilumina la oscuridad de la ignorancia" (cita).
Se considera el útero universal, donde todo reside en estado
potencial.
Para penetrar bien en las características más profundas de este
Chakra, habría que ahondar en los conceptos de Karma, inconsciente,
samskara y samsárico, sexualidad y placer, emociones y sensaciones.
También rige la energía de la creatividad (que más tarde expresarán
los Chakras 4º y 5º), la moral y la imaginación.
Por ahora, nos limitaremos a enumerar sus principales características
y asociaciones, que ya exigen una buena dosis de trabajo y
compromiso para empezar a estimular este Chakra y ser más
conscientes de él. Se asocia con los sentidos y las emociones, con
sentir las emociones y experimentarlas de forma equilibrada para
alcanzar el equilibrio emocional; quizá más con sentirlas y ser
consciente de ellas.
También se asocia con los placeres que nos ofrece la vida y con
tomar y entregarse a estos placeres, con equilibrio y sin excesos.
Svadhisthana se asocia comúnmente con la esfera de las emociones,
pero no siempre. Por ejemplo, Jung indica el tercer Chakra como el
lugar y el "reino" de las emociones.
El movimiento estimula este Chakra, especialmente los movimientos
fluidos y suaves: el objetivo es liberar tensiones y dejarse llevar
apreciando la fluidez del propio cuerpo, entrando así en contacto con
nuestro cuerpo fluido, tomando conciencia de él y acompañándolo
con movimientos suaves.
Son muy recomendables el yoga dinámico, la marcha, la danza, la
bioenergética, el Qi Gong, prestar mucha atención al propio cuerpo
en movimiento y a las sensaciones que surgen de él.

" Lo importante no es lo intensa que hagas una posición, sino lo

profundamente que sientas la posición en la que te encuentras".
(Anodea Judith, The Chakra Book, ©1996 por Anodea Judith,
Publicado por Celestial Arts Publishing, Berkley).

Veamos ahora algunas posturas para el segundo Chakra, cuya

ejecución requiere permanecer muy atento a las sensaciones y
emociones.

Supta baddha konasana

(posición tumbada supina con las piernas separadas)

Tumbado boca arriba con las piernas flexionadas, deja caer las
rodillas hacia fuera e músculos por completo. Si te intenta relajar los
resulta incómodo o doloroso, coloca un almohadón o un soporte bajo
las rodillas y busca la forma de relajarte al máximo. Relajando bien el
resto del cuerpo, hombros, cara y abdomen, imagina que abres el
segundo Chakra mientras respiras profundamente.
Si tus muslos empiezan a temblar, déjalos temblar sin parar, es una
agradable liberación de tensión que aporta mucha energía a la zona
pélvica.
Mantén la posición gradualmente durante uno o incluso dos o tres
minutos, si no hay ningún dolor o problema en particular puedes
balancear ligeramente las piernas como las alas de una mariposa,
siempre evitando el dolor o la tensión muscular.
Esta postura favorece un sistema reproductor sano, lubrica y afloja
las caderas y estimula un segundo Chakra deficiente.

Ananda balasana (el niño feliz)

Tumbado boca arriba, levanta las piernas y flexiónalas agarrando los
pies con las manos, ya sea por dentro o por fuera. Empuja
suavemente las rodillas hacia los hombros y los pies hacia la cara, sin
forzar.
Si tienes dificultades para agarrar los pies, puedes ayudarte con
correas o, alternativamente, agarrarte las pantorrillas.
Déjate mecer suavemente a izquierda y derecha, siente tanto a nivel
físico como energético la apertura del segundo Chakra.
Favorece la digestión, estimula la energía del primer y segundo
Chakras, alivia los dolores menstruales, afloja las caderas. Debe
evitarse en caso de lesiones de cadera o de rodilla.

Sucirandhrasana (el ojo de la aguja)

Tumbado en decúbito supino, levanta una pierna perpendicular al
suelo alineada por encima de la cadera, con el pie extendido.
Cruza la otra pierna y coloca el pie sobre el muslo justo por encima
de la rodilla, como se muestra en el dibujo. El pie de la pierna
extendida puede estirarse y doblarse alternativamente en posición de
martillo.
Las manos con los dedos entrelazados detrás del muslo tiran
suavemente la pierna hacia el pecho. Mantén la posición el tiempo
suficiente para sentir una agradable apertura, relajación y
estiramiento de las piernas y la cadera. Ten cuidado de no entrar en
tensión o dolor; si lo haces, suaviza la posición, que debe ser
agradable y relajante.
Repite lo mismo con la otra pierna.
Esta postura favorece la relajación y la conexión a tierra, libera los
Chakras primero y segundo, abre las caderas y relaja los músculos de
los muslos.
Jathara Parivartanasana
(torsión en el suelo con una pierna flexionada y otra extendida)

La posición tradicional tiene ambas piernas extendidas, en este caso

hazlo con la pierna inferior extendida y la superior doblada a 90º,
como muestra el dibujo. La mano que sujeta la rodilla intentará
llevarla al suelo evitando levantar el hombro contrario, así que
detente antes de que el hombro se levante, aunque la rodilla no
llegue al suelo. Ten cuidado de no forzar demasiado la postura y
sobre todo que no sea dolorosa para la espalda. Con la cabeza girada
hacia el lado contrario, intenta relajar profundamente los músculos
implicados (cuello, cara, hombros, pectorales, abdominales y piernas)
y mantén la posición durante unas cuantas respiraciones, poco a
poco incluso de uno a tres minutos; lo importante es que sea cómoda
y relajante. Esta postura libera la tensión retenida en la pelvis al
implicar energéticamente al segundo Chakra, así como al primero y al
tercero, mejora la digestión, fortalece la zona lumbar y estira la
columna vertebral.
Evitar en caso de embarazo avanzado y durante la menstruación
abundante.
Baddha Konasana (esquina o posición de zapatero)
Como se muestra en el dibujo, sentado en la esterilla, flexiona las
piernas juntando las plantas de los pies y deja caer las rodillas,
intentando relajar completamente los músculos; si te duele la cara
interna de los muslos o las rodillas o las caderas, prueba a apoyar las
rodillas sobre un almohadón o una manta o, al menos, un soporte
que te permita descansarlas mientras relajas los músculos.
Sujétate los pies con las manos metiendo los pulgares bajo los dedos
gordos de lo spies y déjate caer lenta y gradualmente hacia delante,
manteniéndote siempre en una zona cómoda y sin ningún dolor ni
tensión particular.

Abre, afloja y lubrica las caderas, aumenta la flexibilidad general,

masajea los órganos abdominales, facilita la digestión y es muy útil
para un segundo Chakra deficiente o contraído.
Evítalo si estás embarazada en los primeros meses, tienes lesiones o
prótesis de cadera, lesiones o dolores de rodilla.
Upavistha Konasana (posición sentada en una esquina)

Desde la posición anterior, estira las piernas abiertas en ángulo,

respetando su flexibilidad natural. Esta posición es más intensa que la
anterior. Estirar los tejidos conjuntivos de estas articulaciones lleva
mucho tiempo, pero sin prisa y con mucha perseverancia conseguirás
poco a poco, de forma gradual pero constante, abrirte y avanzar cada
vez más.
Mantente dentro de lo que podría ser el 80% de tu posibilidad de
estiramiento, que deberías sentir intenso, pero sin dolor ni tensión
excesiva.
Con las manos agarra tus piernas, tobillos o pies según tu flexibilidad
y cierre de pelvis y caderas, pero sin doblar la espalda. Si sientes que
para caer hacia delante con el torso se te dobla la espalda, mantente
recto y respira profundamente sin querer bajar. Intenta mantener la
posición inicialmente durante 1 minuto relajando los cuádriceps y los
pies, luego las piernas extendidas, pero sin tensarlas. Lleva tu
respiración hacia donde sientas que es más necesario para aflojar y
suavizar y, muy gradualmente y con cuidado, intenta dejarte caer
hacia delante cuando sientas que es posible hacerlo sin doblar la
columna.
Encuentra tu lugar donde parar y respirar, debe ser una relajación
agradable; además de la respiración, trata de traer a tu cuerpo la
intención de aflojar, elongar y ablandar, mantén la posición mientras
escuchas a tu cuerpo y a tus sensaciones, preferiblemente con los
ojos cerrados.
Esta asana favorece un estiramiento profundo de la cara interna de
los muslos y de los músculos de la zona inguinal.
Fortalece la zona lumbar, estira la parte posterior de los muslos,
estimula la circulación en la zona pélvica, alivia la ciática y ayuda a
regular el flujo menstrual. Muy útil para un segundo Chakra
deficiente.
Utthanasana (de pie, inclinándose hacia delante)
Al igual que con el primer Chakra, intenta realizarlo doblando más las
piernas y apoyando el abdomen contra los muslos.
Anjaneyasana (posición de mono).
Desde la posición del perro boca abajo, da un paso largo con la
pierna derecha, llevando el pie entre las manos (si no puedes dar un
paso, utiliza la mano derecha para llevar el pie hacia delante), luego
coloca la rodilla izquierda con el muslo y la pierna bien extendidos
sobre la esterilla. La rodilla derecha se alinea por encima del talón, la
pierna perpendicular al suelo.
Intenta relajar completamente las piernas dejando caer la pelvis,
imaginando que quieres hacer el split frontal, pero de forma natural y
sin dolor. Mantén la espalda recta y los hombros abiertos, evitando
siempre crear tensión, luego quédate en un lugar donde te sientas
cómodo, mientras sientes que estás trabajando duro en el
estiramiento y la apertura.
El sentido es también encontrar la propia alineación cómoda sin
"meterse" en zonas dolorosas o tensas, sentir un trabajo intenso pero
agradable en el que también se puede permanecer durante varias
respiraciones, de uno a dos minutos.
En esta postura, además de los músculos de los muslos, se estira
muy eficazmente el músculo iliopsoas, muy importante para muchos
aspectos físicos, energéticos y emocionales. Es tan importante que se
han escrito libros sólo sobre este músculo, también conocido como el
"músculo del alma", que merece ser bien conocido; por eso te
sugiero encarecidamente que lo estudies en profundidad.
Repite con la otra pierna. Esta postura también es buena para aliviar
el dolor de ciática, estimular y abrir el segundo Chakra, ideal para
atletas y corredores, y estira el suelo pélvico.
Ten mucho cuidado en caso de hernias o lesiones de cadera, en cuyo
caso consulta a tu profesor o fisioterapeuta.

Utthan pristhasana (posición del lagarto)

Desde la posición anterior de Anjaneyasana, déjate caer hacia

delante con los brazos y los hombros, si puedes mientras apoyas los
codos en el suelo; si es demasiado intenso o aún no puedes
alcanzarlo, apóyate en las manos mientras sigues intentando caer
hacia delante y hacia abajo con los hombros y el torso. Esta posición
puede realizarse con el brazo y la mano en la parte interior o exterior
del pie, según te resulte más cómodo.
Apunta los dedos de los pies hacia atrás, luego levanta la rodilla e
intenta extender bien la pierna. La pierna delantera debe permanecer
plantada a 90° con la rodilla alineada por encima del talón.
Siendo muy consciente de tu exagerar ni forzar demasiado, fuerza y
sin querer

mantén la posición durante unas cuantas respiraciones hasta un

minuto. Cuando hayas adquirido más fuerza y resistencia, aguanta
hasta dos minutos por pierna.

Si levantar la rodilla de atrás te resulta demasiado cansador,

mantenla apoyada en el suelo, intentando relajar todo el cuerpo y
dejar que la pelvis caiga hacia el suelo.
Mantén el abdomen activo contrayendo los músculos del interior.
Esta postura abre bien la ingle y estira los flexores de la cadera,
estira el psoas, tonifica el abdomen y fortalece las piernas.
Estimula y abre el segundo Chakra.

Eka pada Kapotasana

(posición de paloma). Versión más simple.
Colócate en esta posición después de un buen calentamiento,
especialmente de caderas, rodillas y pelvis.
Desde la postura del perro cabeza abajo, levanta la pierna derecha
como si fueras a coger carrerilla, luego da un paso largo con la pierna
derecha, flexionándola y acercando la rodilla a la mano derecha y el
pie a la mano izquierda, apoyando la parte externa de la pantorrilla.
Mantén el pie derecho lo más adelantado posible, sin crear excesiva
tensión o dolor en la rodilla. Apuntando con las manos y luego
apoyándolas en las puntas de los dedos (si te duelen los dedos,
mantén las palmas apoyadas y los dedos bien estirados), levanta el
torso, si puedes, hasta que los brazos estén bien extendidos y luego
endereza la columna.
Es importante que la pelvis se mantenga recta con las caderas
alineadas: si al levantar sientes que la pelvis tiende, aunque sea
ligeramente a girar, levantate menos hasta que puedas mantener las
caderas alineadas. Si el muslo sigue muy levantado, es útil apoyarlo
sobre un almohadón o manta para que los músculos se relajen mejor
mientras se mantiene la posición.
La zona lumbar, la cadera, la rodilla, los dedos o las muñecas no
deben dolerte, así que levántate o ponte en posición y detente antes
de sentir demasiada tensión o dolor.
La pierna trasera está bien extendida con la parte superior de la
rótula y el empeine en apoyo.
Con el cuello recto, cierra los ojos y mantén la posición con el torso
elevado durante unas cuantas respiraciones, incluso hasta un minuto
o más; después, cruzando los brazos, déjate caer hacia delante,
apoyando la frente en la esterilla y relajando todo el cuerpo al
máximo, poco a poco incluso hasta 3, 4 o 5 minutos.
Cambia de pierna levantando para volver a la posición de perro y
repite con la otra.

Esta postura también estimula fuertemente el segundo Chakra, abre

las caderas, favorece la flexibilidad de la columna vertebral y estira
los músculos de los muslos, el psoas y la ingle.
Evítalo si tienes problemas de rodilla o cadera. Afirmaciones para el
segundo Chakra: Estoy abierto al cambio, estoy ávido de sensaciones
y experiencias, siento y experimento mis emociones, me libero de la
culpa y la frustración, disfruto del flujo de la vida, satisfago mis
deseos y placeres de forma equilibrada, experimento la sexualidad de
forma placentera y abierta, sin culpa ni frustración.
CAPÍTULO 9
Manipura (tercer Chakra)

Manipura deriva de dos palabras sánscritas y significa ciudad de las

joyas.
En la tradición tibetana, se llama Mani padma, loto enjoyado.
La ubicación física es dentro de la columna vertebral en línea con el
ombligo, el kshetram está justo detrás del ombligo.
Está conectado con el plexo solar, regula el fuego digestivo
(jatharagni) y la temperatura corporal. Está representado por una flor
de loto con diez pétalos de color amarillo brillante y representa
nuestro sol interior.
Tradicionalmente, el color asociado es el amarillo, mientras que según
algunos textos tántricos el color es el de las nubes cargadas de lluvia,
o incluso el rojo fuego.
En cada pétalo hay diez letras sánscritas escritas en azul: dam dham
nam tam tham dam dham nam pham pam. En el centro hay un
triángulo invertido de color rojo fuego con tres esvásticas, que brillan
como un sol naciente (la esvástica es un símbolo muy utilizado desde
la antigüedad en muchas religiones y culturas, con diferentes
significados).
De Wikipedia: "En el hinduismo, la esvástica en general simboliza
tanto los cuatro Vedas como las correspondientes cuatro caras de
Brahmā, el Dios creador supremo. Como "Puerta del Cielo", la
esvástica representa tanto la "puerta solar" que da acceso al Brahma-
loka ("Lugar de Brahma"), que es el vértice extracósmico supremo
(polo norte eclíptico), como la "puerta lunar" que da acceso al Indra-
loka ("Lugar de Indra") o Svarga, que es el vértice intracósmico
manifiesto (polo norte celeste). En el mundo situado bajo el vértice
celeste, el símbolo con las puntas hacia la derecha (卐) está asociado
al Sol y a la rueda del mundo que gira alrededor del centro inmóvil
del polo norte, y es emblemático de Viṣṇu-Kṛṣṇa y del mundo
manifiesto (y diurno); Por otro lado, el símbolo con las puntas hacia
la izquierda (卍) se asocia con los rituales tántricos de la diosa Kālī, y
con el mundo no manifestado (y nocturno)".
En la base hay un carnero como símbolo de dinamismo y resistencia,
que son las características de este Chakra.
Encima está el bija mantra ram, del que se dice que está sentado
sobre un carnero (el símbolo animal de este Chakra), mensajero de
Agni y Señor del Fuego. El tanmatra de Manipura es la vista, el
órgano los ojos y el órgano de acción los pies.
Su guna es rajas (actividad, vigor, deseo de acumular). Su elemento
es el fuego. Se encarga de digerir y distribuir sistema. la esencia de
los alimentos por todo el Pero los alimentos y las situaciones

emocionales también se digieren, o se digieren mal, en Manipura

Chakra. Jung describe este Chakra como el centro de las emociones y
las pasiones. También regula la temperatura corporal.
La mayor parte de la energía se genera en este centro, es nuestro
"Sol", nuestra fuerza física e interior.
En las escrituras se dice:
"la luna en bindu (un centro energético muy importante situado en la
parte posterior de la cabeza, donde los brahmanes hindúes se dejan
crecer un mechón de pelo) segrega un néctar que, pasando por el 5º
Chakra, desciende hasta Manipura, donde es consumido por el sol (o
fuego digestivo agni, el fuego que transforma). Este proceso continuo
conduce a la vejez, a la degeneración de los tejidos y luego a la
muerte. Pero con las prácticas yóguicas este proceso puede
ralentizarse e invertirse, devolviendo el néctar al cerebro en forma de
energía pránica o vital.
Bindu también se considera el centro (núcleo) de los diversos
Chakras que albergan la consciencia, un lugar donde con el despertar
gradual y la purificación de los diversos Chakras entraremos cada vez
más conscientemente.
Se dice que meditar, abrir y despertar el Manipura conduce a la plena
conciencia del Ser y de todo el sistema físico, y cuando el tercer
Chakra está totalmente despierto, no habrá retorno a las etapas
inferiores.
Según algunos textos tántricos, el verdadero despertar está en
Manipura y no en Muladhara.
En algunas tradiciones, los Chakras inferiores a menudo ni siquiera se
tienen en cuenta porque siguen perteneciendo al reino animal,
mientras que en Manipura predomina el hombre superior y comienza
una mayor conciencia.
En este caso, Muladhara se considera la sede de la Kundalini,
Swadhistana la residencia y Manipura el lugar donde despierta.
Manipura es el Chakra de la autoafirmación, del propio poder
personal, siempre en busca de equilibrio, de lo contrario se trasforma
en arrogancia, prepotencia, prevaricación, egocentrismo excesivo.
Por el contrario, debe dar confianza en uno mismo y en sus
capacidades, posibilidades, autoestima, optimismo, determinación,
perseverancia.
Por el contrario, la falta de energía conduce a la falta de confianza en
uno mismo, al menosprecio, a una timidez excesiva y a la debilidad
física e interior.
Estabilizar la consciencia en Manipura requiere mucho compromiso y
constancia, pero no quiero desmotivar, al contrario, hay que ser
consciente de que requerirá perseverancia en la práctica y a veces
esfuerzo, significará querer fuertemente evolucionar y vencer las
fuerzas que intentan hacernos recaer en los aspectos más tamásicos
(materiales, inconscientes, pesados, etc.) de los Chakras inferiores.
Pero no se trata de restar importancia a los dos primeros Chakras, al
contrario, un mayor arraigo y contención en el cuerpo físico apoyará
el camino de crecimiento y evolución y el despertar de los demás
Chakras y por tanto también de la Kundalini.
Cuando la conciencia evoluciona a Manipura, el practicante adquiere
una mayor conciencia espiritual y puede vislumbrar los planos
superiores de la existencia. Los prejuicios y juicios personales
desaparecerán, los complejos, miedos y apegos se desvanecerán, y
uno empezará a ver o percibir la belleza y la dicha de los Chakras
superiores, de las grandes ideas y posibilidades.
El poder obtenido del despertar de Manipura conducirá a un gran
conocimiento del propio cuerpo y fuerza, inmunidad a las
enfermedades, fuerza de voluntad y la capacidad de llevar la energía
hasta Sahasrara Chakra. Asana para el Chakra Manipura:

Virabhadrasana 1 (postura del guerrero)

En la mitología hindú, esta posición está dedicada a un héroe creado
por el Señor Shiva. Esta leyenda se relata en el gran poema Kumara
Sambhava, "El nacimiento del Dios de la Guerra".
Vira significa héroe y bhadra buen auspicio. Al realizar esta postura
sientes tu fuerza física pero también tu fuerza interior, te sientes
como un guerrero triunfante ayudado por la energía de tu tercer
Chakra. En la posición de montaña, en el principio de la esterilla, da
un paso largo hacia atrás con la pierna izquierda, si puedes incluso
más de un metro hasta un metro y medio, por supuesto ajustando
según la longitud de tus piernas. La distancia debe permitir que las
plantas de los pies se apoyen bien en el suelo. Gira el pie hacia atrás
unos 45° con los dedos hacia el exterior, ajustando la rotación de
modo que el pie siga apoyado uniformemente en el suelo y sin crear
molestas o dolorosas flexiones de tobillo. Es importante sentirse bien
apoyado y arraigado con ambos pies, llevando el peso del cuerpo
uniformemente al suelo, intentando que la pelvis permanezca lo más
alineada posible, llevando también la cadera izquierda ligeramente
hacia delante. Flexiona la pierna derecha hasta que la rodilla quede
por encima del tobillo y ten cuidado de no dejar caer hacia adentro la
pierna, la rodilla y el muslo, que deben permanecer alineados. Para
encontrar más estabilidad, gira el muslo de la pierna trasera
ligeramente hacia dentro y el muslo delantero hacia fuera.
El muslo delantero debe estar lo más paralelo posible al suelo.
Después de enderezar la columna, estira los brazos hacia arriba con
las palmas enfrentadas, inspira, abre bien los hombros y estira los
brazos y todos los dedos hacia fuera.
Mantén la posición varias respiraciones con los ojos cerrados,
aumentando gradualmente la retención según tu fuerza.
Esta postura es buena para el tercer Chakra, pero también lo es para
los dos primeros, nos hace sentir fuertes y estables, abre las caderas
y alivia el dolor del nervio ciático.
Virabhadrasana 2 (posición del guerrero nº 2)
Desde la posición anterior, baja los brazos, poniéndolos paralelos al
suelo, con los hombros relajados; gira la pelvis, el torso y los
hombros para alinearlos, dobla la pierna delantera, si puedes, hasta
90° con el muslo paralelo al suelo, procurando que la rodilla no caiga
hacia adentro, sino que permanezca alineada por encima del tobillo,
con la pierna perpendicular al suelo. Siéntete bien apoyado en toda la
planta del pie, concéntrate en la estabilidad y la fuerza de las piernas,
siéntete un guerrero por fuera y por dentro, mantén la mirada fija en
el horizonte y el cuello recto, pero no tenso, el torso descarga su
peso en el centro y no debe desequilibrarse hacia delante. Durante la
inhalación intenta extender los brazos al máximo y suelta los
hombros y los brazos en la exhalación. Para sentir mejor la postura,
pruébala también con los ojos cerrados, manteniéndola como la
anterior gradualmente por más tiempo.
Sin forzar demasiado, puedes intentar estimular el tercer Chakra con
una ligera contracción de los abdominales, tirando del ombligo hacia
dentro, hacia la columna vertebral.
Proporciona los mismos beneficios que Guerrero 1, además de
fortalecer brazos y hombros.

Virabhadrasana 3 (posición del guerrero nº 3)

Puedes entrar en esta posición directamente desde guerrero 1 o 2,

incluso haciéndolas en secuencia como vinyasa.
Ahora entramos en la postura de Tadasana, la montaña.
Empieza dando un paso atrás de unos 60/70 cm con la pierna
izquierda y parándote de puntillas, en una estocada alta pero no
demasiado larga. Después de concentrarte en la estabilidad, levanta
los brazos y con un poco de impulso levanta la pierna de atrás, luego
apoya todo el peso en la pierna derecha y déjate caer poco a poco
hacia delante con el torso hacia abajo. Mantén la pelvis recta sin abrir
la cadera hacia arriba. Levanta gradualmente la pierna de atrás
extendida y extiende también el pie (normalmente se mantiene el pie
a 90° pero, por un aspecto energético, sugiero probar con el pie
extendido). Idealmente en la posición final tendré los brazos, la
espalda y la pierna trasera alineados y paralelos al suelo, teniendo
cuidado de no mover la pelvis (las caderas permanecen alineadas). Si
eres principiante y aún no tienes una buena estabilidad, busca eso
primero y luego piensa en la alineación. Tu pierna de apoyo estará
extendida, pero si notas tensión puedes doblar ligeramente la rodilla,
suavizando la articulación.
Incluso los brazos, si te cuesta mantenerlos levantados y estirados
paralelos al suelo, puedes bajarlos ligeramente o estirarlos hacia
atrás paralelos al torso. Al principio busca una buena estabilidad y
equilibrio y luego "ajusta" bien la posición en las distintas
alineaciones.
Repite como siempre con el otro lado.
Mantén la posición ajustándola bien según tu fuerza y estabilidad,
aumentando gradualmente la tensión. Se trata de una asana que
mantenida durante mucho tiempo se vuelve bastante intensa,
fortaleciendo los pies, los tobillos, las piernas y los muslos. La
espalda, los hombros y los brazos también se tensan en la postura,
por lo que se convierte en un entrenamiento muy completo en el que
intervienen varios músculos. También estimula fuertemente el primer
Chakra, así como el tercero. ¡Siéntete como un guerrero!

Utthita y Parivrtta Trikonasana

(posición del triángulo abierto y en torsión)
Si acabas de empezar, mantén la postura suave y cómodamente, sin
entrar en tensiones innecesarias y contraproducentes.
Empecemos con Utthita Trikonasana: desde la posición de montaña,
Tadasana, si tienes una linea en medio de tu esterilla mantén el pie
izquierdo 1 cm a la izquierda de la linea y el pie derecho 1 cm a la
derecha. Manteniendo esta distancia entre los talones, lleva el pie
izquierdo hacia atrás con una zancada bastante larga, pero no te
excedas, ajústala en función de tus piernas para que los pies se
apoyen uniformemente en el suelo.
A continuación, el pie izquierdo gira con los dedos hacia fuera,
encontrando una rotación que permita un buen apoyo del pie.
Gira el torso, las caderas y los hombros en línea con los talones,
imaginando que te apoyas en la pared detrás tuyo y que los talones,
los glúteos y los omóplatos están en contacto con la pared, sólo el
pie trasero estará ligeramente adelantado.
Personalmente, prefiero hacer y mantener esta postura suave y
cómodamente, así que para descender dobla ambas rodillas y con la
mano derecha apóyate en la mitad de la pierna, desciende hasta que
sientas que tu pelvis debe perder su apertura para poder descender
más, para evitar esto, detente un poco antes. Siéntete estable sobre
tus piernas, luego inhala extiende tu brazo izquierdo hacia arriba en
línea con tu brazo derecho, abriendo el pecho y el hombro. Mantén la
posición evitando la rigidez, en la inhalación las piernas y los brazos
se estiran para relajarse con la exhalación, el movimiento es casi
imperceptible, pero sientes que no estás tenso ni rígido, continúa así,
como si todo el cuerpo fuera un pulmón que respira. Mantén la
posición durante varias respiraciones, poco a poco incluso durante
uno y dos minutos.
Se trata de un enfoque algo diferente de la forma clásica de hacer y
mantener posiciones que, como has visto, hemos descripto con
anterioridad a menudo. Prueba a experimentar con este nuevo
enfoque, típico especialmente del Anukalana yoga, del cual soy
profesor. El sentido es evitar crear tensión en el cuerpo, calentar el
tejido conjuntivo y las articulaciones, liberar rigidez, tensión y
fomentar un buen trabajo energético a lo largo de los canales de
energía.
Sólo probando este método podrás descubrir y apreciar sus ventajas;
si no te sientes cómodo con él, puedes seguir manteniendo las
posturas como estás acostumbrado.
Lo bueno del yoga es también que, como todos somos muy
diferentes a nivel psicofísico, cada uno puede elegir el método que
mejor se adapte a su constitución y le haga sentirse mejor.
Para la misma posición pero en torsión o sea Parivrtta Trikonasana:
comenzando siempre con la pierna derecha al frente, acerca la mano
izquierda al pie derecho, si puedes también sólo apoyando la punta
de los dedos, levanta el brazo derecho hacia arriba luego, siguiendo
la respiración, con cada inhalación trata de abrir el hombro (ten
cuidado de no forzarlo) y estira el brazo y los dedos de la mano,
siempre durante la inhalación trata de estirar la pierna derecha tanto
como puedas, incluso si no está completamente extendida detente
justo antes de tu máximo estiramiento. Mantén la postura unas
cuantas respiraciones, como en todas las demás deja que el cuerpo
respire, imaginando que la respiración irá a los puntos que sientas
más tensos o rígidos y los aflojará y suavizará. La intención es
importante, pero tambien es muy importante trabajar con la mente
en cada postura manteniendo la concentración para favorecer la
capacidad de concentración y la eficacia en las posturas.
Ardha Chandrasana (posición de medialuna)
Esta posición requiere fuerza, equilibrio y estiramiento de los
músculos de las piernas.
Desde la posición de Tadasana, gira hacia un lado mientras das un
paso atrás con la pierna izquierda. El pie derecho permanece recto
mientras que el izquierdo gira unos 45°. En el descenso para colocar
la mano en el suelo, intenta permanecer lo más posible con las
caderas abiertas, es decir, sin rotar la pelvis. Si aún así no puedes
descender manteniendo la pelvis abierta o si tienes que doblar la
pierna, puedes colocar la mano sobre un ladrillo o crear un soporte,
quizás con libros, para poder mantenerte firme con la pierna derecha
extendida.
Si eres principiante y nunca has probado esta postura, puedes hacer
las primeras pruebas apoyando los glúteos y los omóplatos contra
una pared con los pies ligeramente adelantados, y en el descenso
para llevar la mano al suelo mantén el contacto de los glúteos y los
omóplatos con la pared; si no llegas al suelo manteniendo esta
apertura, mantén la mano apoyada en un soporte que estará tan alto
como necesites para mantener la alineación. El aspecto más
desafiante de esta asana es mantener la apertura de la pelvis y, por
lo tanto, la alineación entre los talones, las caderas y los hombros
con las piernas extendidas. Se consigue, como siempre, poco a poco,
gradualmente y con posiciones intermedias.
El brazo izquierdo estará estirado hacia el cielo con los dedos de la
mano abiertos y extendidos. Como en todas las posturas me gusta
sentir la respiración del cuerpo, así que mantén la postura incluso
hasta 1 minuto o más si el cuerpo está preparado; durante la
inhalación todo el cuerpo se abre y se relaja mientras que al exhalar
se afloja y relaja los músculos. Es muy importante respirar siempre
por la nariz. Inicialmente, la mirada debe mantenerse en el suelo y, a
continuación, intentar girar gradualmente la cabeza hacia un lado
hasta llevar la mirada hacia arriba, sin forzar la torsión del cuello.

Utthita Parsvakonasana
(posición lateral en ángulo extendido)
Prueba a realizar esta postura desde la Utthita Trikonasana, y luego
dobla la pierna que tienes hacia delante unos 90° (luego, por
supuesto, lo harás con la otra pierna).
Mantén la posición con la pierna derecha flexionada hacia delante,
extendiendo el brazo y la mano hacia el suelo en paralelo a la pierna,
e intenta utilizar la fuerza de la pierna para sostenerte, de modo que
los dedos de la mano toquen la esterilla, pero sin cargar peso. Si esto
te resulta demasiado agotador, la posición puede suavizarse
apoyando el codo sobre la rodilla. Personalmente, prefiero mantener
el brazo hacia abajo en la parte interior de la pierna, pero a menudo
se puede ver esta postura realizada con el brazo en el exterior. Hazlo
como quieras, pero el interior permite que la pierna permanezca más
perpendicular al suelo. Intenta abrir el pecho concentrándote en el
tercer Chakra, percibiendo su energía y su fuerza irradiando hacia las
piernas y bajando por los brazos y las manos. Gira la cabeza
ligeramente hacia arriba para llevar la mirada a la mano, pero sin
forzar el cuello en una torsión.
Intenta respirar en la postura estirándote bien al inhalar y relajándote
al exhalar.
Esta posición estira y fortalece las piernas, la ingle y los muslos, abre
el pecho y los hombros y crea un estiramiento lateral completo desde
el talón hasta la mano.
Desarrolla la fuerza y la energía en todo el cuerpo, estimula el tercer
Chakra mejorando la fuerza de voluntad y la digestión, y aumenta la
capacidad pulmonar.

Chaturanga dandasana
('chatur' significa cuatro, 'anga' significa miembro o parte de
miembro, 'danda' bastón).
También puedes encontrarla como Phalakasana, postura de la
plancha, a veces también llamada postura de la viga.

Se puede hacer con los brazos rectos y en este caso el esfuerzo es

menor, pero también se puede hacer con los brazos doblados,
algunos incluso los doblan 90° manteniendo el cuerpo recto y fuerte,
y les parece más correcto. Por supuesto, con los brazos doblados se
requiere más fuerza, así que inicialmente dóblalos según tu fuerza,
también puedes empezar con los brazos rectos e ir doblándolos poco
a poco según aumente tu fuerza. Es importante para las muñecas y
los hombros que los codos estén tensos y que todos los músculos del
cuerpo estén activos, especialmente las piernas, los muslos, los
glúteos y los abdominales. Intenta mantener la posición durante unas
cuantas respiraciones, aumentando gradualmente la retención según
tu fuerza, incluso hasta un minuto o más. Es una asana intensa,
despierta y fortalece toda la musculatura, fortaleciendo mucho las
muñecas y los hombros. Al activar bien el abdomen, fuertemente el
tercer Chakra. Debe estimula

evitarse especialmente en caso de muñecas delicadas, túnel carpiano,

problemas lumbares.

Paripurna Navasana (la barca) y Ardha Navasana (media barca)

Una posición muy útil para desarrollar los abdominales, los

cuádriceps y estirar los isquiocrúsculos. Sentado, empieza por
levantar los muslos y, manteniendo las rodillas extendidas, o
flexionadas según tu fuerza y elasticidad, levantalas bien alto. La
espalda se inclina, pero la columna no debe ceder y debe permanecer
recta. Lo ideal es que las piernas y el torso estén inclinados a 45°;
con el tiempo y el aumento de la fuerza y el estiramiento, podrás
extender cada vez más las piernas. Mantén la postura durante varias
respiraciones activando bien el abdomen, con los hombros relajados y
la mirada al frente. Prueba también a mantener las piernas juntas
con las rodillas en contacto activando los músculos internos de los
muslos.

Al salir de la postura, cruza las piernas y relaja bien todo el cuerpo,

incluso con algunos movimientos del abdomen y la pelvis.

Es una asana que requiere fuerza y entrenamiento, practícala con

constancia y conseguirás mantenerla cada vez mejor durante mas
tiempo.
Desarrolla la fuerza y la energía, estimula fuertemente el tercer
Chakra, tonifica los abdominales y mejora la digestión.
Evitar durante el embarazo, si hay problemas en la zona lumbar,
menstruación dolorosa, tensión arterial baja.
Vasisthasana (eje/viga lateral). Debe su nombre al gran sabio
Vasistha.
Partir de Chaturanga con el cuerpo bien alineado, los brazos fuertes y
rectos, las muñecas alineadas por debajo de los hombros y los dedos
de las manos abiertos.
Gira el cuerpo, empezando por el lado derecho, y luego apoya el peso
en el brazo y la mano derechos, asegurándote de que la muñeca
permanezca bien alineada bajo el hombro. De pie sobre el exterior
del pie derecho, intenta colocar el pie izquierdo encima,
manteniéndolo alineado. Si te resulta cansador, puedes ayudarte
apoyando los dedos del pie izquierdo en el suelo.
Activando bien todos los músculos implicados, intenta no colapsar
con la pelvis mientras mantienes el cuerpo bien alineado. Cuando te
sientas estable, levanta el otro brazo hacia arriba, que estará
alineado con el de abajo, y, girando ligeramente el cuello, lleva la
mirada hacia la mano.
Distribuye bien el peso por toda la mano y no demasiado en la
muñeca, como tendemos a hacer. Es importante proteger las
muñecas manteniéndolas bien alineadas bajo los hombros para
descargar el peso perpendicularmente; el brazo estará recto y fuerte,
intentando no ceder con el codo. Con el tiempo irás ganando cada
vez más fuerza y serás capaz de mantener la posición durante varias
respiraciones. Así que aguántala poco a poco, dosificándola según tu
fuerza, preferiblemente calentando antes las muñecas con algunos
movimientos.
Para salir de la postura, gira el cuerpo volviendo a apoyar la mano en
el suelo y, apoyando las rodillas, siéntate durante unas cuantas
respiraciones en la postura del niño (Balasana).
Es una posición intensa que requiere fuerza y entrenamiento, así que
realízala muy gradualmente. Al principio, uno puede ayudarse
doblando la pierna por arriba y apoyando el pie delante de la rodilla
por debajo.
Desarrolla el equilibrio y la estabilidad, la fuerza en brazos, hombros,
muñecas y manos. Fortalece el abdomen, la espalda y las piernas,
estimula el tercer Chakra y poco a poco nos hace sentir fuertes,
aumentando también la fuerza de voluntad.
Evitar en caso de problemas de muñeca u hombro. Dhanurasana
(posición del arco)
Empieza poniéndote en decúbito prono, con los brazos extendidos a
lo largo del cuerpo y relajando bien todos los músculos. Al percibir el
ligero movimiento abdominal que sigue a la respiración, lleva tu
atención al ombligo, imaginando que respiras energía desde ese
punto.
Esta postura estimula bien los Chakras tercero y cuarto, pero requiere
fuerza y determinación, por lo que es muy adecuada para Manipura.
Activando los muslos y los glúteos, levanta los pies y los brazos
agarrando con las manos la parte exterior de los tobillos. Si la
espalda lo permite, levanta los muslos arqueándolos, teniendo mucho
cuidado en caso de tensión o dolor lumbar.

Con los brazos extendidos, abre el pecho y los hombros y durante

unos ciclos de respiraciones déjate balancear ligeramente, siguiendo
el ritmo natural de tu respiración, asegurándote siempre de respirar
por la nariz.
A continuación, relájate volviendo a la posición supina apoyando una
mejilla y relajando completamente todo el cuerpo, escuchando la
respiración y la energía que se ha activado con esta posición.
Evita arquearte demasiado, no te tenses y procura detenerte en un
punto en el que tu espalda no "sufra". Mantén los hombros alejados
de las orejas, intenta bajar los omóplatos y concéntrate en el plexo
solar sintiendo su energía.
Esta postura abre los hombros y el pecho, es muy útil como
preparación para las posturas arqueadas, mejora la digestión y
estimula fuertemente el tercer Chakra. Evitar durante el embarazo, si
hay problemas lumbares, lesiones de hombro, migraña o insomnio.

Ardha Matsyendrasana
(Señor de los Peces, media torción sentados)
Manipura Chakra también estimula y gobierna el metabolismo, esta
posición es un excelente trabajo y masaje para los órganos internos
estimulándolos y purificándolos.
Parte de la posición simple de piernas cruzadas; levantando la pierna
izquierda, lleva el pie sobre el muslo derecho intentando mantenerlo
bien apoyado y paralelo al muslo. Podrías levantar levemente el
isquion izquierdo mientras que el objetivo será mantener ambos bien
apoyados en el suelo; si no es así, prueba unos pequeños "ajustes"
en busca de un buen apoyo, incluso moviendo levemente el pie o la
pierna. Una cosa muy importante al girar es tener cuidado de no
curvar la columna, que por lo tanto debe estar lo más perpendicular
posible al suelo.
Estrategias para Manipura: Para estimular este Chakra existen varias
técnicas, Kriyas o Pranayama; como son bastante delicadas y
también potentes, será sin duda mejor que las sigas con un profesor
experimentado. Enumero sólo tres de ellas, a realizar en cualquier
caso preferiblemente con tu profesor.
Uddyana Bandha, cierre abdominal hacia arriba, evitar en caso de
embarazo, menstruación, hipertensión, glaucoma, migraña, úlceras
estomacales o intestinales.
Agnisar Kriya, activación del fuego digestivo, que debe evitarse
como en el caso anterior.
Kapalabhati pranayama, respiración de fuego, que debe evitarse
como en el caso anterior.
Afirmaciones fuerza que compromiso y perseverancia, el fuego que
arde en mí quema todos los bloqueos y miedos.
Tengo confianza en mí mismo, en mi fuerza física y mental. Puedo
hacerlo.
Meditación sobre el elemento Fuego; procesamiento y comprensión
de la ira; meditaciones dinámicas (meditación AUM).
para Manipura: Soy consciente de la

hay en mí, completo las cosas con

CAPÍTULO 10
Anahata Chakra - El corazón

Según el yoga tántrico, purusa aparece primero en Anahata: la

esencia del hombre, el hombre supremo, el llamado hombre
primordial, se hace entonces visible. Jung define purusa como "La
sustancia psíquica del pensamiento y de los valores, por tanto, del
sentimiento. Al reconocer los pensamientos y las ideas, uno ve
purusa, el primer atisbo de un ser, dentro de la propia existencia
psíquica, que no es uno mismo, sino un ser en el que uno está
contenido, que es mayor y más importante que uno mismo, pero que
tiene una existencia completamente psíquica".
Y de nuevo: <...uno empieza a razonar, a pensar, a reflexionar sobre
las cosas, y esto es el comienzo de una especie de contracción o
retirada del puro funcionamiento emocional. En lugar de seguir
desenfrenadamente los propios impulsos... uno sale del estado de
ánimo infernal y se pregunta: "¿por qué actúo así?".
Pero como aún no hemos alcanzado el quinto Chakra, seguimos
creyendo en un mundo material y no podemos relacionar la
existencia con la idea de algo cósmico o energético.>
(de: La psicología de la kundalini yoga - Jung)

La traducción de Anahata es "no afectado" y tiene varias

interpretaciones: puede significar no herido, libre de heridas pasadas,
de dolor (el demonio de este Chakra es el dolor).
Su apertura es fresca, radiante e inocente (cit.). Sin embargo, el
verdadero significado de "no impresionado" se refiere a un sonido
que no se genera al golpear dos cosas entre sí. Es el sonido de la
energía primaria del universo anterior a todas las cosas, la vibración
del universo. La energía primaria, comparable a un suave zumbido,
es la manifestación de este sonido, como el sonido interior que en
estados de meditación profunda podemos percibir dentro de
nosotros: la energía primordial.
OM es el sonido que más se acerca a esto, la sílaba sagrada que
contiene el sonido original de todas las cosas y todas las palabras.
Se trata de entrar en esa "zona", ese "estado" profundo de escucha
mientras se está despierto, no en estados de sueño o ensoñación,
encontrando el Ser puro. No existe una palabra para describir ese
estado, hay que experimentarlo, como el Samadhi.
Un estado que está dentro y a nuestro alrededor, un silencio que no
es silencio y que puede oírse resonar en todas las cosas.
Escuchando cualquier sonido que nos rodea sin interpretarlo, se
puede percibir el sonido de Anahata como fundamento de todo.
Cuando se siente, todo se calma y llega la paz. Los demás Chakras
están inevitablemente influenciados por Anahata porque es la morada
del espíritu y el centro del que fluyen las emociones, especialmente el
Amor y las relaciones con otros seres vivos. También en la Medicina
Tradicional China, el corazón es la morada del Shen.
Como escribe Jung: <El Yo siempre está ahí abajo, en Muladhara, y
de repente toma conciencia de algo en el cuarto nivel, en Anahata, y
eso es el Ser.> (C.G. Jung, La psicología del Kundalini Yoga, 2007
Fundación de las Obras de C.G. Jung, Zurich).
El amor que "florece" de este Chakra despierto es el amor
incondicional, que emerge de una profunda sensación de paz dada
por la ausencia de necesidad, irradiando hacia el exterior aportando
amor y compasión. Los sentimientos y las condiciones emocionales
también están asociados a este Chakra. Es un centro energético físico
y psíquico muy importante. En este nivel, con la fuerza de voluntad
del 3er Chakra, somos capaces de trascender nuestras necesidades
más materiales y egoístas y satisfacer nuestros deseos. El amor del
corazón es duradero y constante. Algunos dicen que la verdadera
apertura y despertar de la Conciencia se produce en Anahata.
Se podría escribir y hablar largo y tendido sobre este Chakra,
limitémonos ahora a las características principales.
El símbolo es una flor de loto con 12 pétalos. Según los textos
tántricos, el color es el carmesí brillante, según otros textos es el
azul, mientras que el color más popular y reconocido hoy en día es el
verde.
En cada pétalo las letras sánscritas: kam, kham, gam, gham, ngam,
cham, jam, jham, nyam, tam, tham, mientras que el bija mantra es
yam.
La parte interior hexagonal representa su elemento, el aire.
Hay varias interpretaciones de los dos triángulos: algunos (tantra) los
describen como la unión de Shiva y Shakti, la creatividad de Shakti
con la conciencia de Shiva, pero también como el descenso del
espíritu al cuerpo y el ascenso de la materia al encuentro del espíritu.
También representa "el matrimonio sagrado, el encuentro de lo
masculino y lo femenino en el resplandor del chakra del corazón".
(cit.)
El animal símbolo de Anahata es un antílope negro (a menudo
llamado gacela), conocido por su velocidad, agilidad y rapidez. El
antílope está en constante movimiento, corre rápido y salta de
alegría, como hace el corazón cuando está contento y feliz.
El triángulo amarillo del centro, boca abajo, es nuestra alma
individual, mientras que las seis puntas se refieren a los otros seis
Chakras, que están integrados en el Corazón.
Además del corazón físico, se asocia con la respiración y los
pulmones, mientras que el sentido (tanmatra) es el tacto.
Los brazos se consideran energéticamente una extensión de este
Chakra, y en las manos hay un Chakra secundario conectado con el
corazón (también en la Medicina Tradicional China, el meridiano del
corazón baja por el brazo hasta el final del dedo meñique).
En Anahata Chakra es el segundo psíquico), o barrera, en el centro
granthi (nodo

del corazón. Representa la atadura a los apegos emocionales, la

tendencia a tomar decisiones empujados por las emociones y los
sentimientos. Este nudo se desata cuando uno logra el equilibrio
emocional y no se opone al despertar espiritual.
Se dice que sólo con el despertar de Anahata te conviertes en yogui,
primero eres un practicante. En Anahata uno se estabiliza en su
conciencia yóguica y depende sólo de este poder, no de cosas
externas ni de la fe.
En este Chakra uno tiene la libertad de escapar de un destino
predeterminado y determinar el propio. Según el tantra, en la base
de Anahata hay un árbol que cumple los deseos y sus frutos llegarán
cuando lo que pensamos o deseamos se haga realidad. Se
desarrollará una nueva forma de pensar, tendremos una gran fe en el
poder de nuestra voluntad.
Por lo tanto, una buena preparación también consistirá en cambiar y
regular conscientemente los propios pensamientos, sin quedarse en
estados de ánimo negativos o pesimistas. Uno se vuelve
naturalmente optimista, positivo y esperanzado.

Prácticas para Anahata:

técnicas de respiración y pranayama, para cuales es mejor dejarse
guiar por un profesor formado.

Yoga mudra de pie

Esta es una postura sencilla que también puedes realizar a menudo,
abriendo el pecho, los hombros y la garganta, estimulando el cuarto y
el quinto Chakras. Partiendo de la posición de montaña, manteniendo
los pies paralelos y ligeramente separados, siéntete bien arraigado y
con el peso distribuido uniformemente en ambas piernas; lleva los
brazos a la espalda y entrelaza los dedos, abriendo los hombros. Con
las ligeramente flexionadas, inclínate hacia piernas delante

dejando caer la cabeza y los hombros, asegurándote de relajar bien

el cuello. Levanta los brazos tanto como te permitan los hombros,
siempre sin forzar demasiado. Si no sientes demasiada tensión,
puedes extender las piernas completamente, de lo contrario es mejor
mantener las rodillas ligeramente flexionadas. Mantén la postura de
unas respiraciones a un minuto, de forma gradual, escuchando bien a
tu cuerpo y sin querer forzar innecesariamente. La gradualidad en
todas las posturas es muy importante, incluso en las aparentemente
más sencillas y menos agotadoras. Los beneficios de esta postura son
muchos: abre bien los hombros y estira la espalda, relaja los
músculos del cuello, abre el pecho y los pulmones, estira los
isquiocrusculares, los dorsales, el canal central de energía que baja
por la espalda y las piernas, el nervio ciático sin duda se beneficia.
Estimula el cuarto Chakra, pero también es bueno para el primero,
segundo, tercero y quinto. Debe evitarse en caso de dolor de
hombros y tener cuidado en caso de problemas lumbares.
Bitilasana (postura del gato)

Marjariasana (postura de la vaca)

Se trata de un excelente ejercicio que, probablemente, si ya has
practicado yoga habrás realizado a menudo como calentamiento.
Además, es excelente para mejorar la flexibilidad de la columna y la
movilidad de la pelvis y, a través del proceso de expansión y
contracción, abre y estimula el corazón y el cuarto Chakra. Es
importante realizar el movimiento en sincronía con la respiración, de
modo que al inhalar miremos hacia delante arqueando ligeramente el
cuello y la espalda y al exhalar curvemos la columna y el cuello
acercando el mentón al esternón, mirando hacia atrás, hacia el
ombligo.
Busca una buena alineación con las muñecas bajo los hombros, las
rodillas bajo las caderas y las manos bien apoyadas con los dedos
abiertos y extendidos. Inicia el movimiento desde el coxis y sigue con
el resto de la columna.
Realiza entre 10 y 15 ciclos completos.
Esta sencilla secuencia afloja bien la columna vertebral, dándole
flexibilidad, abre y estimula el corazón y el respectivo Chakra. Si
tienes las rodillas sensibles o doloridas, apóyalas sobre una manta.
Anahatasana (posición del corazón o de la devoción)
Desde la posición cuadrúpeda, moviendo las manos hacia delante,
apoya inicialmente los codos bajo los hombros y quédate ahí unas
cuantas respiraciones: aquí relajas bien la espalda y el abdomen (ten
cuidado si tienes problemas lumbares o de hombros, ya que es
bastante exigente). Deja que la espalda se arquee, pero si notas
tensión o dolor detente antes y evita forzar la postura; si no, relaja
bien los músculos dejando caer el abdomen hacia el suelo y, tras
unas cuantas respiraciones, camina hacia delante con las manos
estirando los brazos como se muestra en el dibujo, dejando caer
luego el pecho hacia el suelo. Siempre con cuidado de no forzar,
puedes entonces apoyar inicialmente la frente, y si el cuello te lo
permite, arquear el mentón y el pecho en el suelo, relajándote en la
postura.
Busca una posición la que puedas estar cómodamente durante varias
respiraciones, así que al principio podría ser con la cabeza elevada y
los codos apoyados. Permanece en la postura llevando la respiración
a las zonas más tensas, si las hay, con la intención de aflojar y relajar.
Deja que la relajación y la gravedad hagan su trabajo.
Deja que cada exhalación traiga más relajación: mantén la postura
hasta que sientas la necesidad o urgencia de salir, "el corazón" de
esta asana es la entrega y la quietud.
Es una postura que promueve sensación de profunda paz, y conduce
a una

relaja el corazón estimulando el Chakra, suaviza y relaja la espalda y

abre los hombros.
Debe evitarse en caso de lesiones o problemas de hombros y
realizarse con mucha precaución en caso de problemas de columna,
mejor si está supervisado por su profesor o una persona
experimentada de confianza. Parighasana (posición del haz o de la
puerta)
Mientras realizas esta postura, piensa que además de abrir el hombro
y la caja torácica estás abriendo el Chakra del corazón como si
abrieras una puerta. Empieza de rodillas con las piernas abiertas
hasta la pelvis y los pies estirados sobre la esterilla.
Extiende completamente la pierna derecha, intentando apoyar la
planta del pie; si resulta difícil, mantén el talón en apoyo.
Con el brazo derecho extendido, coloca la mano derecha sobre el
muslo derecho y déjate deslizar en una flexión lateral, teniendo en
cuenta que las flexiones laterales son bastante suaves para la
columna vertebral, así que ten cuidado de no forzar demasiado, la
posición debe ser cómoda.
Extiende el brazo izquierdo hacia arriba, dejándolo caer en ángulo
por encima de la cabeza, como se muestra en el dibujo, teniendo
cuidado de no cerrar el hombro y manteniendo el pecho bien abierto.
Incluso bajando un poco en la flexión lateral (ahora nuestro objetivo
no es bajar tanto), intenta mantener la pelvis abierta con las caderas
alineadas con los hombros y, al inhalar, entra más en el estiramiento
lateral, mientras que al exhalar relajas todo el cuerpo. Evita la
hiperextensión de la pierna extendida presionando sobre el talón o la
planta del pie si puedes apoyarla; si te duele la rodilla apoyada,
colócala sobre una manta. Repite con el lado izquierdo.
Además de abrir bien los hombros y el pecho, estimulando el Chakra
del corazón, esta postura expande la caja torácica y estira los
músculos intercostales, tonifica los abdominales y da energía y calor.
Estira los costados del cuerpo y da flexibilidad a la columna vertebral
en las flexiones laterales. Evitar en caso de lesiones de rodilla o
hipertensión arterial.
Ustrasana (posición de camello)
Desde la postura Virasana, elevándote sobre las rodillas con las
piernas y los muslos paralelos, comienza apoyando las manos en la
parte baja de la espalda, contrayendo los glúteos y activando los
cuádriceps, déjate caer hacia atrás en un suave movimiento de
arqueamiento que deberás mantener durante unas cuantas
respiraciones.
Procura introducir el arqueo siempre de forma gradual y tras un
calentamiento adecuado, con precaución en caso de problemas de
columna (puede practicarse en caso de hernias o protuberancias,
pero tras un cuidadoso asesoramiento de tu profesor o médico).
Levanta el esternón abriendo el pecho y los hombros con los codos
hacia atrás y junta los omóplatos. Lleva la cabeza ligeramente hacia
atrás, pero sin arquear demasiado el cuello.
Mantén la postura durante unas cuantas respiraciones; si te sientes
cómodo y crees que no es demasiado intensa para tu espalda, pliega
los dedos sobre los talones. Después de unos cuantos ciclos
respiratorios completos y no forzados, sal gradualmente de la postura
sentándote sobre los talones y con la frente en el suelo en la postura
del niño (Balasana).
Esta asana abre el corazón, los hombros y el pecho estimulando el
cuarto Chakra, fortalece las piernas, aumenta la flexibilidad de la
columna vertebral, aporta vigor y energía.
Evitar en caso de problemas lumbares, cervicales o baja tensión.

Bhujangasana (posición de la cobra)

Esta es también una posición excelente para estimular el Chakra del

corazón, y para ello debes prestar toda la atención posible al
esternón y a la apertura de los hombros y el pecho.
Desde la posición de decúbito prono, levántate y coloca los codos
bien alineados bajo los hombros, tensos y con los antebrazos
paralelos.
Evita arquear demasiado el cuello, mantén la mirada en el suelo,
empuja hacia el suelo con los codos y los antebrazos, expande el
pecho concentrándote especialmente en el esternón como si quisieras
abrirlo y estirarlo.
Si tu espalda te lo permite, elévate bien arqueándote, o presta
atención hasta dónde puedes llegar sin que sea demasiado cansador
para tu espalda. Si puedes y deseas acentuar e intensificar la
postura, llevando las manos ligeramente arqueándote más. hacia
atrás, levanta los codos

Como nuestro objetivo aquí es estimular el cuarto Chakra, más que

en el arqueamiento, mantenemos la atención en el esternón y el
tórax buscando su apertura y expansión. Esta postura estimula
fuertemente el Chakra del corazón, da flexibilidad a la columna
vertebral, arraiga la pelvis y estimula los sistemas circulatorio y
linfático y la glándula timo, situada detrás del esternón, que
desempeña un papel importante en la regulación del sistema
inmunitario.
Debe evitarse en el embarazo, en caso de problemas lumbares o
lesiones de la columna vertebral.

Adho Mukha Vrksasana

(postura del pino, posición vertical erguido sobre las manos)
En las posturas invertidas, el prana fluye espontáneamente hacia los
Chakras superiores, invirtiendo así todo el sistema de Chakras,
mientras que, en las posturas erguidas, se necesita esfuerzo y fuerza
de voluntad para llevar la energía hacia los Chakras superiores.
En este caso, la posición de equilibrio sobre los brazos también
estimula fuertemente el Chakra del corazón ya que, a un nivel
especialmente energético, los brazos están en estrecha conexión con
el corazón.
Es una postura que requiere fuerza, preparación y un entrenamiento
constante; si eres principiante, es esencial que empieces a practicarla
con tu profesor. Así que ahora, más que su ejecución completa, daré
algunas indicaciones sobre cómo prepararse y entrenarse para
realizarla.
Será esencial fortalecer las manos y especialmente las muñecas, que
a menudo son delicadas o no están preparadas para tanto esfuerzo.
Una excelente preparación consiste en mantener la posición cabeza
abajo del perro durante mucho tiempo, incluso desplazando el peso
de la mano derecha a la izquierda. Es importante que las manos
estén bien abiertas y que los dedos se "agarren" al suelo, doblando
ligeramente las últimas falanges.
Como ejercicio preparatorio y de calentamiento, realiza varias
rotaciones de las muñecas en ambas direcciones con los puños
cerrados y, a continuación, con los brazos y las manos extendidos
hacia delante, flexiona las palmas hacia arriba y hacia abajo
(flexiónextensión).
Luego siéntate en cuatro patas y balancéate a izquierda y derecha,
desplazando el peso sobre las muñecas, primero unas cuantas veces
con los dedos apuntando hacia delante y luego hacia fuera. Evalúa
bien tus muñecas sin cargarlas ni forzarlas demasiado, mejor tomarse
más tiempo, pero entrenarlas adecuada y gradualmente.
Para cargar más peso, puedes elevarte hasta la posición de viga o
plancha y, de nuevo, balancearte suavemente hacia los lados y luego
hacia delante y hacia atrás alternando el peso.
Un buen ejercicio preparatorio para luego empezar a cargar más peso
en las muñecas y las manos es el siguiente: siéntate contra una
pared con la espalda recta y las piernas extendidas hacia delante
como en la postura Dandasana, y memoriza o marca el punto en el
que tus talones están en el suelo; esa es la distancia en la que
apoyarás las bases de las manos. A continuación, date la vuelta y
lleva las manos hasta donde estaban los talones con los dedos bien
abiertos y extendidos, con las muñecas separadas a la altura de los
hombros.
A continuación, coloca los talones en contacto con la pared, como si
quisieras hacer el perro boca abajo, pero con las manos juntas. A
continuación, levanta los talones y da pequeños pasos hacia arriba
con los pies hacia la pared hasta que las piernas queden paralelas al
suelo a 90° con respecto al torso.
Si nunca lo has hecho, pide ayuda a tu profesor o a un amigo, sobre
todo para evitar caerte hacia delante. Presiona el suelo firmemente
con la punta de los dedos y mantén los brazos extendidos y fuertes,
los hombros deben estar alineados bajo las muñecas, la mirada
inicialmente en el suelo, luego con el tiempo puedes bajar la cabeza
relajando el cuello. Las piernas estarán fuertes y activas con los pies
juntos y bien pegados a la pared. Activa los abdominales.
Esta es una buena posición para probar la fuerza de los brazos y las
muñecas, así como para empezar a familiarizarse con la posición
vertical boca abajo sobre las manos. Respira profundamente y
mantén la posición gradualmente hasta un minuto o más, lo
importante como siempre es no forzar demasiado y hacerlo todo muy
gradualmente. Debes sentirte estable, sin dolor en las muñecas ni en
los hombros y con los brazos sosteniéndote bien.
Sal de la postura caminando hacia el suelo con los pies y descansa en
Balasana, la postura del niño.
Urdhva Dhanurasana (posición de puente completo)
Se trata de una postura intensa y avanzada, y debe realizarse cuando
se tenga confianza en las muñecas, los brazos y los hombros, así
como en la flexibilidad de la columna vertebral. También necesitarás
bastante fuerza en las piernas, que podrás, con el tiempo, estirar más
que en el dibujo.
Si nunca lo has realizado, será importante que te ayude un profesor.
Antes de entrar en esta asana, es esencial realizar algunos ejercicios
de calentamiento para las muñecas, los hombros y los brazos, y
preparar la columna para arquearla gradualmente.
Los pies y las piernas, sobre todo las primeras veces, tenderán a
abrirse hacia fuera. Intenta evitarlo manteniendo los pies y los
muslos paralelos. Presiona los lados internos de los pies contra el
suelo.
Intenta mantener los codos hacia dentro, estabilizando los
omóplatos.
Deja caer la cabeza relajando el cuello, suavizando la garganta.
Manteniendo los brazos y las piernas fuertes y activos, presionando el
suelo con los pies y las manos, respira profundamente unas cuantas
veces, dejando que el pecho se expanda e intentando no ceder con
los codos. Como se mencionó al principio, es una posición intensa y
delicada, no apta para principiantes.
Tiene muchos beneficios, como dar fuerza y flexibilidad y estimular
fuertemente la apertura frontal de todos los Chakras.
Favorece la circulación y la digestión, abre el corazón y el chakra
respectivo, da energía y alivia el estrés. Evitar: en caso de lesiones o
problemas de columna, túnel carpiano o problemas de muñeca u
hombro, hipertensión, migraña y embarazo.

Meditaciones sobre el corazón.

Afirmaciones para Anahata:
Soy digno de ser amado, me amo y amo a los demás, vivo en
armonía con los demás.
CAPÍTULO 11
Vishuddha - Vishuddhi - Quinto chakra

Con el quinto Chakra llegamos a la "región del éter", que como dice
Jung está "más allá de nuestra visión actual del mundo", lo describe
como "el mundo de las ideas y los valores abstractos, donde la
psique está en sí misma. Donde la realidad psíquica es la única
realidad".
"Si nuestra experiencia alcanzara este nivel, tendríamos una visión
excepcional del purusa (Alma, Ser) aquí convertido en el centro de
las cosas, la realidad última". La descripción que Jung hace de este
importantísimo centro es hermosa y articulada, y cito un resumen de
esta:
<El elefante blanco representa aquí el poder en su plenitud, el
invencible poder sagrado del animal, como lo era en Muladhara. Nos
encontramos con todo el poder que nos trajo a esta realidad
consciente, pero ya no descansa en la tierra del primer Chakra, sino
en las cosas que suponemos más etéreas, irreales y volátiles, los
pensamientos humanos. Es como si en este punto el elefante
convirtiera los conceptos en Reconocemos que los
nuestra imaginación,
conceptos no son

productos de realidad. más que

nuestros sentimientos o intelecto, abstracciones o analogías que no

se apoyan en fenómenos físicos. Lo que los une a todos es el
concepto de energía> (C.G. Jung, The Psychology of Kundalini Yoga,
2007 Foundation of the Works of C.G. Jung, Zurich).

Vishudda significa literalmente purificación. Esto se debe a dos

razones:
1) Para llegar a este Chakra y abrirlo, y
luego despertarlo, el cuerpo debe haber
alcanzado un alto nivel de purificación psicofísico-energética.

2) El sonido, como vibración y frecuencia, tiene un poder purificador.

También hay otra razón: este Chakra también es conocido como el

centro del néctar y del veneno. De Bindu Visarga* gotea un néctar
que desciende hasta el Chakra de la Garganta y este néctar se divide
entre venenoso y puro.
Cuanto más se abre y despierta el Chakra, más se elimina el veneno
y el néctar nutre el cuerpo, garantizando la salud y la longevidad. El
secreto de la juventud y de la regeneración de los tejidos reside en el
despertar del quinto neutralizan tanto los internos.
Chakra. En este Chakra se venenos externos como los El símbolo es
una flor de loto con 16 pétalos, y en cada pétalo las vocales
sánscritas Am, aam, im, iim, um, uum, Rim, riim, Lrim, lriim, em, aim,
om, aum, Am, Ah. El mantra bija es Ham.
En el interior hay un círculo blanco como la luna, que representa el
éter (el elemento de Chakra, o sonido); el elefante blanco es el
vehículo de la conciencia de este centro.
El triángulo representa las tres formas del tiempo.

*Bindu Visarga es un centro muy importante, pero del que

generalmente se habla poco. Bindu significa gota o punto, y se
traduce como gota. Está más allá de la experiencia ordinaria y se
considera el almacén de todo el karma de vidas anteriores, también
en forma de recuerdos. Está representado por una Luna creciente y
una gota blanca que es el néctar que gotea en Vishuddha, el Chakra
de la Garganta. El asiento de Bindu se encuentra en la parte posterior
de la cabeza, donde los brahmanes hindúes se dejan crecer un
mechón de pelo, que también es una forma de entrar más en
contacto con este importante punto energético.

La diosa Gauri es la representación de Durga con su tez totalmente

blanca, su belleza es resplandeciente como el blanco de una perla. Es
la manifestación de la paz, la resistencia y la pureza.
Cuenta la leyenda que la diosa hizo una larga penitencia para obtener
al Señor Shiva como esposo. El color más conocido y popular para
este Chakra es el azul oscuro, pero algunos textos tántricos lo indican
como gris oscuro y otros como morado.
Se encuentra detrás de las vértebras cervicales y el kshetram está en
la parte delantera del cuello, en el hoyuelo de la garganta o en la
glándula tiroides. Asociado a la laringe, la faringe y las cuerdas
vocales, también se denomina Chakra de la Comunicación: decir y
escuchar la verdad es crucial para la apertura y el equilibrio de este
Chakra.
Con la apertura de este Chakra llega un discernimiento cada vez más
elevado, nuestra capacidad de elegir lo que es mejor para nosotros.
Este Chakra también está en asociación con un canal nervioso
conocido como el canal de la tortuga, Kurma nadi, que cuando está
completamente despierto permite dominar la necesidad de comer y
beber. Esto ha sido demostrado por muchos yoguis en el pasado. Las
características del Chakra en equilibrio son una voz resonante, saber
escuchar, tener sentido del ritmo, hablar con claridad, vivir de forma
creativa y decir la verdad, que es fundamental para este Chakra.
Posiciones y ejercicios:
Canto repetido del Om, el mantra de los mantras, la suma de todas
las vibraciones. Canto del kirtan, canto de los bija mantras de todos
los Chakras.
Ujjayi Pranayama (la respiración del victorioso o del océano):
• Siéntate con las piernas cruzadas, en una postura sencilla
(Sukhasana) con la espalda recta si es posible.

• Empieza a respirar de forma natural por las fosas nasales y deja

que tu respiración se vuelva tranquila y regular.

• Después de unas cuantas respiraciones, sigue respirando por la

nariz, pero lleva tu conciencia a la garganta y cuando exhales contrae
ligeramente la glotis (te ayudará a percibir la respiración justo en la
garganta).

• Esto producirá un sonido similar a un ronquido suave o a las olas

del mar.
• Concéntrate en este sonido y en el flujo lento y profundo de tu
respiración, que debería hacerse gradualmente más largo, regular y
agradable.

Si no puedes contraer la glotis inténtalo de esta manera:

1. Empieza inhalando por la boca y exhalando por la boca,

imaginando que haces el mismo sonido que cuando empañas un
vaso.

2. Inhala de nuevo por la boca y continúa inhalando por la nariz

(cerrando la glotis como si quisieras detener la respiración en la
garganta), deberías oír el mismo sonido.

3. Continúa así durante un par de respiraciones o el tiempo que

necesites para familiarizarte con esta práctica.
4. Luego continúa sólo con la nariz, manteniendo la atención en el
sonido de la respiración en la garganta. Jalandhara Bandha (cierre
de la garganta), regula el sistema circulatorio y respiratorio, estimula
la glándula tiroides y cura las enfermedades de la garganta.

Siéntate en Padmasana o Siddhasana con la cabeza y la columna

rectas. Las
estrecho contacto con el
Sukhasana no es adecuada.
rodillas deben estar en

suelo, por lo que la

Si aún no puedes sentarte cómodamente en Padmasana y

Siddhasana, puedes hacer Jalandhara Bandha de pie, colocando las
palmas de las manos por encima de las rodillas. Relaja todo el cuerpo
y cierra los ojos.

Inhala profundamente, contén la respiración e inclina la cabeza hacia

delante, presionando el mentón contra el esternón. Estira los brazos y
bloquéalos en la posición levantando simultáneamente los hombros
hacia arriba y hacia delante.
Las palmas de las manos deben permanecer sobre las rodillas.

Para empezar, manténte en la posición final durante unos segundos.

No fuerces.
Permanece en la posición final hasta que puedas contener la
respiración cómodamente.
Después relaja los hombros, dobla los brazos, suelta lentamente el
cierre, levanta la cabeza y exhala.
Repite cuando la respiración vuelva a la normalidad.

Afloja el cuello (suavemente con estiramientos, giros, rotaciones,

flexiones laterales).
Yoga Mudra Asana con los brazos extendidos.

Setu Bandha Sarvangasana

(o Setu Bandhasana, posición de medio puente)
Empieza en posición supina con las piernas flexionadas y
perpendiculares al suelo, los pies separados a la anchura de las
caderas. Apoya las plantas de los pies en el suelo, activa los músculos
de las piernas y los muslos y empuja los pies hacia el suelo. Siente la
energía y la fuerza en las piernas y levanta la pelvis arqueando la
espalda y contrayendo los glúteos. Sigue empujando los pies hacia el
suelo, intentando no ceder y manteniendo la pelvis elevada durante
unos cuantos ciclos respiratorios hasta que sientas que la posición es
cómoda.
Manteniendo los brazos bien apoyados y extendidos con los dedos de
las manos entrelazados, abre el pecho y los hombros juntando los
omóplatos.
Será la acción y la fuerza de tus piernas la que levante tu pelvis,
concéntrate en empujar como si empujaras desde el suelo.
Mantén los pies, las piernas y los muslos paralelos y alineados, y
presiona los brazos contra el suelo para levantar el pecho.
Esta asana fortalece las piernas, abre los hombros, estimula el chakra
de la garganta, la glándula tiroides y elonga el cuello.

Evitar en caso de problemas cervicales o lumbares. Matsyasana

(posición del pez)
Túmbate boca arriba, con las piernas juntas y los brazos a lo largo
del cuerpo (también puedes hacerlo en una versión más sencilla con
las piernas flexionadas, paralelas y abiertas como las caderas).
Desliza las manos por debajo de los glúteos con las palmas apoyadas
en el suelo; luego, levantando la cabeza y el torso, arquea la espalda
y abre los hombros juntando los omóplatos y los codos; después,
echando la cabeza hacia atrás y arqueando el cuello, apoya la parte
superior de la cabeza en el suelo, buscando la mejor posición para el
cuello, que no debe ser demasiado intensa y, por tanto, no debe
doler. Mantén la posición intentando inhalación. durante

relajar y unas cuantas respiraciones expandir el pecho con cada

Para estimular el canal central y desarrollar más fuerza, puedes

elevar las piernas a unos 45° activando los abdominales.
Si quieres y puedes intensificar aún más la postura, saca las manos
de debajo de los glúteos y llévalas delante del corazón en posición de
oración.

Quienen practican desde hace tiempo y han adquirido fuerza y

flexibilidad, pueden poner las piernas en Padmasana, la postura del
loto.
Esta asana abre la garganta estimulando fuertemente el quinto
Chakra, favorece la respiración profunda y estimula la glándula
tiroides.
Ten cuidado porque la posición es delicada e intensa para el cuello y
la espalda.
Evitar en caso de lesiones o problemas de cuello, espalda,
hipertensión o dolores de cabeza.
Halasana (posición del arado)

En posición supina, con los brazos a los lados y las palmas de las
manos en el suelo, comienza a abrir los omóplatos con una ligera
rotación hacia dentro de la parte superior de los brazos.
Inhala y mientras exhalas eleva las piernas juntas a 90° presionando
las manos y los brazos contra el suelo, deteniéndose unas cuantas
respiraciones en esta posición.
A continuación, tras una inspiración profunda, eleva la pelvis
activando los abdominales y presionando los brazos contra el suelo,
lleva las piernas extendidas más allá de la cabeza, dejándolas caer si
puedes hasta que las puntas de los dedos de los pies toquen el suelo,
con los pies extendidos. Si no llegan a tocarse, simplemente deja que
caigan con su peso sin empujar ni forzar demasiado.
Balanceándose ligeramente, abre bien los hombros, acercando aún
más los omóplatos, y con los brazos extendidos entrelaza los dedos
de las manos. Mantén la postura durante unas cuantas respiraciones
intentando relajar el cuello y la cara, luego mientras flexionas las
piernas puedes intentar acercar las rodillas a las orejas en
Karnapidasana.
Si sientes dolor o demasiada presión en el cuello, puedes aliviarlo
apoyando los hombros sobre una manta doblada, creando un grosor
que los eleve; en este caso, la zona del cuello no se apoyará en el
suelo ni en la manta.
Estimula fuertemente el chakra de la garganta y las glándulas tiroides
y paratiroides. Relaja y fortalece el cuello y los hombros.
Evitar en caso de lesiones o problemas de cuello, hombros,
embarazo, hipertensión, asma.

Salamba Sarvangasana (postura de la vela)

Desde la posición anterior de Halasana, mueve las manos
apoyándolas justo debajo de las crestas ilíacas bien con toda la
palma, luego lleva la pelvis hacia arriba todo lo que puedas con las
piernas y los pies alineados y extendidos.
Abre los hombros y, juntando los codos y los omóplatos, presiona los
brazos contra el suelo formando una base sólida. El mentón se
acercará al esternón. Presta atención al cuello, que no debería
dolerte porque deberías poder permanecer en la postura durante
mucho tiempo sin problemas. Tus piernas estarán activas, pero no
crees demasiada tensión, mantén la mirada hacia los dedos de los
pies sin girar nunca la cabeza.
Con el tiempo y la práctica, la espalda estará cada vez más
perpendicular al suelo.
Puede ser útil para los principiantes, pero si sientes tensión en el
cuello, prueba a apoyar los hombros sobre una manta doblada dos o
tres veces para crear grosor y levantarlos, sin apoyar el cuello en el
suelo.
Como todas las posturas invertidas, aporta sangre y prana a los
Chakras superiores, por lo que también es adecuada para el sexto y
el séptimo. Fortalece y relaja la nuca, abre los hombros, drena las
piernas, mejora la circulación, estimula la glándula tiroides, la
garganta, relaja el diafragma y el suelo pélvico.
Evitar en casos de hipertensión arterial, menstruación, embarazo,
dolores de cabeza, lesiones y problemas cervicales.

Afirmaciones para el 5º Chakra:

Digo la verdad.
Tengo derecho a escuchar la verdad.
Me expreso con claridad. Mi voz es clara y límpida, ¡es necesario!
(para expresarme y que me escuchen). Sé escuchar.
He desarrollado un buen discernimiento, soy capaz de evaluar las
situaciones y elegir.
CAPÍTULO 12
Ajna - Sexto Chakra

Ajna (o Agya) significa percibir, ordenar, es nuestro tercer ojo llamado

el ojo de la mente.
Se llama así porque es aquí donde se recibe, desde arriba, el
mandato del Gurú.
Generalmente, el trabajo sobre los Chakras comienza por el primero,
Muladhara, pero en algunas escuelas, especialmente en la tradición
tántrica, el estudio y las prácticas sobre los Chakras comienzan por
Ajna. El tercer ojo es el punto donde los tres nadis principales se
funden en una sola corriente de conciencia. Con esta fusión, la
conciencia individual se vuelve homogénea y trasciende el mundo de
la dualidad.
Al abrir y despertar este Chakra, la mente se purifica y, con una
mente pura, la experiencia, apertura y despertar de los demás
Chakras se producirá de forma más segura y consciente. Es también
el Chakra de la comprensión, de las grandes intuiciones, de la
imaginación, de las visualizaciones, de los sueños, de la clarividencia
y de la sabiduría. Con Ajna despierto habrá conciencia de "quién soy
realmente" y "qué soy realmente".
Según algunas tradiciones, se considera el último de los Chakras o, al
menos, el último en el que influye la psique. Con el séptimo se entra
en un plano superior de conciencia, en otra dimensión.
Simbolizado por un loto con dos pétalos, algunas escrituras lo indican
como gris pálido, otras blanco o plateado. Pero hoy en día el color
más extendido y reconocido es el índigo, entre el azul y el violeta. En
el pétalo izquierdo la letra Ham y en el derecho Ksham, los mantras
de Shiva y Shakti, que completan las 50 letras de los pétalos de los 7
Chakras.
Debajo del Chakra los tres nadis se funden y un círculo perfecto
simboliza el vacío, el triángulo invertido representa Shakti, la
manifestación. Encima hay un símbolo asociado a nuestro cuerpo
astral.
Encima están el símbolo OM y una luna creciente con Bindu.
El gran mantra Om es el bija de este Chakra. La mente está asociada
con Ajna.
Junto con el quinto Chakra, inicia la evolución psíquica. El segundo de
los Yoga Sutras de Patanjali dice "Chitta Vritti Nirodha", que significa
"Detener las fluctuaciones de la mente", "el torbellino de la
Conciencia". Esto es necesario para ver, clara y límpidamente con el
ojo de la mente, quiénes somos en realidad.
Habrá claridad y despertar cuando la mente pueda estar
completamente en calma, ya no distraída por el mundo exterior y el
constante revoloteo de los pensamientos, sino quieta y concentrada
en el momento presente.
Ajna está situado en el centro del cerebro, en línea con el centro de
las cejas, que es su kshetram.
Es muy difícil percibir el punto energético de este Chakra, por lo que
uno suele centrarse en el kshetram, que lo estimula energéticamente.
En la India, este punto suele pintarse con sustancias que estimulan el
nervio que lo conecta con el punto físico.
También se dice que el Ajna Chakra y la glándula pineal son la misma
cosa.
La pineal también ha sido descrita por los filósofos como un centro
que nos permite tener experiencias místicas. Fisiológicamente,
sintetiza la melatonina, también llamada hormona del sueño. Gracias
a la melatonina, podemos tener un sueño reparador, sus niveles
disminuyen generalmente con la edad y también parece estar
asociada a una disminución progresiva de la memoria a medida que
envejecemos. Algunos textos relacionan la pituitaria con el sexto
Chakra, en realidad, las asociaciones del séptimo Chakra con la
pituitaria son más comunes, pero están estrechamente relacionados
entre sí.
Ejercicios para el tercer ojo:
ejercicios de los ojos, meditar en el tercer ojo, meditación del lago de
la mente, meditación trataka (de la vela), posturas invertidas,
permanecer incluso mucho tiempo con las piernas levantadas hacia la
pared, o la vela sostenida incluso hasta 5 gradualmente); para los
que minutos (siempre

sean capaces de realizarla, la postura vertical sobre la cabeza o los

brazos.
Afirmaciones:
Veo las cosas con claridad, soy consciente de mi sabiduría interior, mi
mente está tan tranquila como un lago de montaña.
CAPÍTULO 13
Sahasrara - Séptimo Chakra

También llamado "El Loto Blanco Supremo", la traducción literal de

Sahasrara es 1000, por lo que se le llama el loto de los mil pétalos.
Sin embargo, el millar es simbólico, en realidad es un número infinito.
Contiene todas las letras del alfabeto sánscrito (según algunos,
excepto dos), que repetidas 20 veces forman el número 1000.
El símbolo del séptimo Chakra es de color púrpura (aunque también
es frecuente encontrarlo blanco), el color de la iluminación.

Su "tallo" está conectado simbólicamente con EL SUSHUMNA, el

NADI o canal de energía más importante que recorre el cuerpo
humano.

En las representaciones tradicionales se dibuja con un triángulo en el

centro, inscrito a su vez en una luna llena.
Este espacio central es el territorio de la unión entre Shiva y Shakti,
lo masculino y lo femenino, el lugar de la manifestación de la
KUNDALINI despierta.

Según algunas tradiciones, no se considera un Chakra, en el sentido

de que los Chakras inferiores se encuentran en el reino de la psique
humana y la conciencia (consciencia) se manifiesta a diferentes
niveles, dependiendo del Chakra que esté más activo.

Sahasrara está más allá, en un plano superior de conciencia, se dice

que es el punto culminante de la expansión de la conciencia. Un
centro de energía extracorpóreo.

Así pues, los Chakras inferiores se consideran los "interruptores" de

Sahasrara, donde se encuentra todo el potencial. Es la fusión del
prana y la conciencia, es el pináculo del yoga y la unión perfecta.

Se asocia con el conocimiento y la iluminación, el último de los ocho

pasos del yoga, el Samadhi. En este nivel, ya no existe la dualidad,
sino que todo se funde en una conciencia única.

Superar el ego, superar la dualidad. Cuerpo, mente y espíritu son

uno.

Samadhi también se traduce como conciencia supermental, después

de la conciencia mental y sensorial.
Un campo de experiencia, más allá del ego y más allá de los sentidos.

¿Cómo se produce? No se puede describir con palabras corrientes y

comprensibles, hay que experimentarlo. Esta experiencia tendrá lugar
durante la meditación, se transformará gradualmente, cada etapa
pasará a la siguiente en una fusión de experiencias.

Hay capítulos y libros enteros sobre el Samadhi, descrito como un

estado de dicha total y profunda en el que uno tiene conciencia de su
verdadero yo.

Cuando la conciencia se libera de las miles de vibraciones mentales,

vitales y físicas en las que yace enterrada, hay alegría.

SRI AUROBINDO
Prácticas para Sahasrara:
medita, medita, medita, medita, medita...

Para el desarrollo del Sahasrara no hay mejor ejercicio que la

meditación, diaria, gradual pero constante. Es el acto, esencial para
el espíritu, en el que se manifiesta la conciencia. Tan esencial como la
comida, el agua y el sueño.

Hay muchas formas de meditar, muchas tradiciones y técnicas,

antiguas y modernas.
Los beneficios también están ampliamente demostrados con pruebas
científicas.

Medita en la luz, en los colores del arco iris, en Sushumna nadi hasta
el tercer ojo y luego hasta la coronilla.

Practica posturas invertidas, todas son válidas, elige la que realices

con más facilidad y luego progresa gradualmente con el tiempo,
incluso simplemente perro boca abajo o quédate con las piernas
apoyadas en la pared tumbado boca arriba.

Savasana, sesiones de yoga Nidra.

Experimenta con meditaciones largas, incluso guiadas si no tienes
práctica.
Afirmaciones:
Estoy abierto a nuevas ideas - Me guía un poder superior - Me guía
mi sabiduría interior
Mi verdadero Yo es un lugar maravilloso y en ese lugar puedo
experimentar estados de dicha. (cit.)

Cualquier Camino es sólo un Camino, y no hay ninguna afrenta, ni

para uno mismo ni para los demás, en abandonarlo, si eso es lo que
tu Corazón te dice que hagas... Examina cada Camino cuidadosa y
reflexivamente. Pruébalo tantas veces como lo consideres necesario.
Luego hazte, sólo a ti mismo, una pregunta... ¿Tiene este Camino un
Corazón? Si lo tiene, la Vía es buena. Si no lo tiene, no sirve para
nada (Carlos Castaneda)

Toda transformación individual implica un cambio en el sistema y los

que están dentro de este sistema se ven inevitablemente afectados.
Empecemos, pues, por transformarnos a nosotros mismos. Es lo
máximo que podemos hacer. La transformación personal es el arma
más poderosa que podemos utilizar para cambiar la humanidad y el
planeta entero (Sheldrake).
CAPÍTULO 14
Breve mención del Ayurveda

He decidido añadir algunos apuntes sobre el Ayurveda porque lo

considero muy importante también desde el punto de vista del yoga,
por lo que sería interesante estructurar la práctica individual
conociendo las propias características psicofísicas, la Prakriti, de la
que hablaré más adelante.

El Ayurveda está reconocido como el sistema de medicina natural

más antiguo
hombre. La palabra puede
desarrollado por el

traducirse como conocimiento de la vida o ciencia de vivir (Ayus =

vida y Veda = conocimiento).

Su historia se remonta al periodo védico, en torno al 5.000 a.C., o

quizá incluso a épocas anteriores. Es difícil establecer su época
exacta debido a la falta de registros precisos, pero algunos
historiadores coinciden en datar los primeros tratados sobre Ayurveda
en los siglos VI o VII a.C.

En estos tratados se describen las ocho partes del Ayurveda:

• Medicina general
• Cirugía
• Tratamiento de enfermedades de oídos, nariz, garganta y ojos
• Psiquiatría, psicología
• Toxicología
• Ciencia del rejuvenecimiento
• Sexología
En el Charaka fundamentales del
Samhita (uno de los textos Ayurveda), se encuentra esta definición:
"El Ayurveda se define como la ciencia que describe los estados
ventajosos y desfavorables de la vida, junto con lo que es bueno y lo
que es perjudicial para la vida, que se ocupa de la duración de la vida
y de la vida misma. (Charaka Samhita I, 41)

El Ayurveda trata todos los aspectos del bienestar físico, psíquico y

espiritual y se ocupa tanto de lo que es normal y saludable como de
lo que es anormal o patológico.

Según el Ayurveda, la salud no es sólo la ausencia de enfermedad,

sino también un estado de plenitud y bienestar continuos, un estado
de felicidad física, mental y espiritual.

Para describir los principios en los que se basa el Ayurveda, es

necesario mencionar brevemente el concepto de creación según el
Samkhya. Este sistema filosófico sitúa dos principios fundamentales
en la base de la creación: Purusha, la conciencia primordial, y
Prakriti, la materia primordial (también considerada la constitución
individual).

La unión de estos dos principios da origen a todas las cosas y de esta

unión surge Mahat, la inteligencia cósmica que existe en el ser
humano en forma de inteligencia individual, llamada Buddhi, o
intelecto, que es también la capacidad de discernir entre lo real y lo
irreal.
Mahat da lugar a Ahamkar, el ego, que posee tres cualidades
llamadas gunas:

Tamas - inercia
Raja - energía, dinamismo
Sattva - pureza

Estas 3 gunas impregnan el cuerpo y la mente por completo, Sattva

no es patógeno para la mente mientras que las otras dos sí lo son.
De la interacción de las 3 gunas surge todo aquello de lo que está
hecho el ser vivo.
Sattva y Rajas, pureza y dinamismo, dan lugar a:
• 5 sentidos: oído, tacto, vista, gusto, olfato.
• 5 órganos de acción: manos, piernas, lengua, ano, genitales.
• La mente, que es a la vez sensorial y motriz.

Tamas y Rajas, inercia y dinamismo, dan lugar en cambio a los cinco

elementos: éter, aire, fuego, agua, tierra.

Todos los seres vivos constan de: mente, 5 sentidos, 5 órganos de

acción y 5 elementos.
El Yoga y el Ayurveda hacen hincapié en la importancia del desarrollo
de Sattva.

En el yoga, Sattva (purificación del cuerpo y la mente) es la cualidad

más elevada que hace posible el crecimiento espiritual, mientras que
en el Ayurveda es el estado de equilibrio que hace posible la
curación. Para el Ayurveda, el sattva es también una clave para la
curación, según la cual el cuerpo y la mente sáttvicos son menos
propensos a la enfermedad y más capaces de mantener un estado de
equilibrio. La enfermedad, especialmente la de naturaleza crónica, se
considera un estado tamásico.

De hecho, Tamas provoca la acumulación de toxinas y materiales de

desecho a nivel físico y de pensamientos y emociones negativas a
nivel psicológico.

Rajas es el paso de la salud a la enfermedad o viceversa. No

obstante, hay que tener en cuenta la mezcla de las gunas.

Veamos ahora el concepto de Dosha, la constitución corporal, las tres

grandes fuerzas cósmicas.

Según el Ayurveda, el universo se origina a partir de tres fuerzas

originales: energía, luz y materia. La ciencia las reconoce como
fuerzas físicas que gobiernan el mundo exterior, mientras que desde
una perspectiva védica son manifestaciones, poderes de la
conciencia.

La energía es el origen de la fuerza vital, la más poderosa de todas

las fuerzas. La luz es el origen de la mente, con la que podemos ver,
conocer y discernir. La materia es la base del cuerpo que nos da
forma y sustancia.

Cuando estas tres fuerzas se impregnan de prana o fuerza vital crean

los tres doshas: Vata, Pitta y Kapha, aire, fuego y humores líquidos.

Vata es viento y da movimiento, energía y expresión.

Pitta es fuego y crea luz y calor, con los que podemos ver, digerir y
transformar.
Kapha es el agua y sostiene a las otras dos fuerzas en forma de
tejido vivo.

Se dice, pues, que la existencia biológica es la danza de los tres

Doshas; estas tres fuerzas determinan el crecimiento, el
envejecimiento, la salud y la enfermedad.

Dosha significa imperfección o defecto, e indica los factores que dan

lugar a la enfermedad y la decadencia.

El Ayurveda divide a las personas en los tipos Vata, Pitta o Kapha

según sus hábitos y tendencias; en el yoga, comprender los Doshas
permite medir los efectos de la práctica sobre el cuerpo grueso y
sutil.

La visión yóguica de la anatomía, la fisiología y la psicología se

formuló a partir de los Doshas. Estos nos indican cómo funcionan los
distintos órganos y sistemas corporales desde la perspectiva del
prana, y se consideran la clave para estimular los nadis y los Chakras.

Por lo tanto, según este principio, es muy importante comprender los

tipos constitucionales ayurvédicos para adaptar las prácticas de yoga
a las necesidades individuales.

Por lo tanto, las prácticas de asana, pranayama y meditación en las

que predomina un determinado dosha pueden no ser adecuadas para
otra constitución.

Personalmente, durante las clases en grupo, que considero muy

válidas e importantes, hago todo lo posible para crear las llamadas
secuencias tridescentes, de equilibrio de doshas o de reducción de
doshas, mientras que, para las clases individuales, tras hacer algunos
tests de Chakras y establecer la constitución individual de la persona,
creo clases y caminos muy personalizados.

Por último, creo que también es importante hablar del concepto de

Dharma, o ley natural.

Dharma es uno de los 4 objetivos principales en Ayurveda, los otros

son Artha (disponibilidad de los medios de subsistencia), Kama
(cumplimiento de los deseos terrenales), Moksha (salvación
alcanzada a través de la liberación).

El dharma puede definirse como aquello que, mediante una acción

correcta, lleva al individuo y a la sociedad al bienestar.

Los principios dhármicos son los mismos para todos los seres, indican
las leyes universales en las que uno debe basar sus acciones; el
Ayurveda representa, de hecho, un enfoque dhármico de la salud y la
vida cotidiana.

La acción dhármica da paz interior y felicidad, mientras que las

acciones contrarias al dharma ofuscan y agitan la mente intoxicando
el cuerpo.

Un principio dhármico muy importante es Ahimsa o no violencia (que

es también el primer Yama de los 8 pasos del yoga), que significa
tener una actitud que no debe dañar a ninguna criatura viviente.
Se trata de la acción, la palabra y el pensamiento. Ahimsa es también
la base del consejo ayurvédico de seguir una dieta vegetariana, y
aquí podría abrirse un gran capítulo, pero prefiero no tratarlo aquí.

Pero aparte de la comida, las relaciones y el trabajo que elegimos no

deben causar sufrimiento a otras personas ni al medio ambiente.
El yoga combinado con el Ayurveda nos ofrece un gran recurso, que
aplicado a la vida cotidiana puede transformarnos significativamente
a nosotros mismos y a todo el planeta.

Representan una clave formidable para impulsar la evolución del

hombre hacia niveles superiores.
Acerca del Tantra

Habiendo hablado a menudo del Tantra y del Tantrismo, sobre los

que suele haber confusión o malentendidos, sólo haré una breve
mención, subrayando, no obstante, que para adentrarse bien en esta
antiquísima filosofía será necesario estudiar a fondo diversos textos
que hablan de ella y la explican detalladamente, ya que es muy
amplia y abarca un conjunto de valores que incluyen todos los
aspectos de la vida y de la sociedad.

Las sabidurías tántricas, aplicadas a la vida cotidiana, pueden ser la

base de una vida sana y feliz.

El tantrismo es un movimiento filosófico y religioso que surgió a partir

del siglo IV a.C. e influyó en la filosofía, el misticismo, la ética, el arte
y la literatura de la India (C.G. Jung, The Psychology of Kundalini
Yoga, p. 28).

El erudito Mircea Eliade, historiador de las religiones, antropólogo,

escritor, filósofo, orientalista, mitógrafo, ensayista y esoterista,
hombre de gran cultura, había observado que: "El tantrismo
contrastaba con la actitud masculinista del hinduismo más tradicional,
reservando una posición predominante redescubriendo también a la
Gran Diosa, y
una especie de redescubrimiento religioso del misterio de la mujer"
(M. Eliade, Yoga, 1954 Payot, París, p. 202).

A menudo, sobre todo en Occidente, el tantrismo se ha asociado

exclusivamente a la sexualidad, atribuyéndole incluso prácticas
imaginativas, acrobáticas o extremadamente transgresoras. Sin duda
ha habido muchos malentendidos, pero también especulaciones, con
el único fin de atraer a personas en busca de una sexualidad fácil o
difícil de experimentar en los entornos tradicionales.

La sexualidad desempeña sin duda un papel importante en el

tantrismo, pero no como liberación del sexo en sí, sino como
sublimación de los sentidos, expansión de la conciencia, canalización
de la energía y liberación del ciclo del renacimiento.

En los años sesenta, la intersección de la revolución sexual y los

movimientos de la Nueva Era suscitaron un gran interés por el
tantrismo en Occidente, pero el verdadero mensaje tántrico se
tergiversó o malinterpretó y, en cualquier caso, de forma reductora,
reduciéndolo a meras prácticas sexuales desprovistas de lo que era el
verdadero mensaje tántrico.

Hablar del tantra en pocas líneas también es reductor; sólo se

pueden dar algunas indicaciones que, espero, animen al lector a
profundizar en un tema muy amplio y polifacético.

Para concluir, citaré simplemente una definición de un erudito

autorizado:

El Tantra se basa en la experiencia real de videntes, yoguines y

experimentadores espirituales que trataron de investigar la naturaleza
interior y el potencial del hombre e hicieron experimentos de gran
alcance a nivel individual y social. Su laboratorio era el ser humano y,
en cierta medida, la sociedad.... El Tantra es una ciencia: ciencia
espiritual.... Con su metodología de investigación espiritual. (©2011
Kamalakar Mishra, Kashmir Saivism, The Central Philosophy of
Tantrism, p. 36)
Conclusiones

El trabajo de los Chakras puede ser un trabajo fascinante y profundo

sobre uno mismo, sobre nuestra relación con el mundo exterior, un
camino de cambios y transformaciones profundas que evolucionar en
nuestro camino espiritual.
nos ayudarán a

de crecimiento

Además de los aspectos mencionados anteriormente, desde la

apertura al despertar de los Chakras hasta el despertar gradual y
progresivo de la kundalini, hay un aspecto que realmente puedes
tocar a lo largo del camino que es más tangible.

Uno nota pequeños o grandes cambios en la vida cotidiana, tanto

física como mental y emocional. Todo parece moverse gradualmente
hacia un estado de agradable equilibrio, tanto emocional como físico.

Uno duerme mejor, digiere mejor, respira mejor, tiene defensas

inmunitarias más fuertes y mayor resistencia física.

Las emociones encuentran cada vez más espacio para ser

experimentadas, procesadas y tratadas de una forma más sana y
equilibrada.

Me gusta considerar los Chakras como centros de energía emocional;

las emociones y la mente también están guiadas y canalizadas por
una forma de energía.

Realmente tenemos que aceptar que somos energía y que todo es

energía, como afirman ahora los físicos modernos y muchos
científicos (un famoso físico de principios del siglo XX se refería a
nosotros como "paquetes de ondas").

El cuerpo, la mente, la respiración (prana), todo es energía en formas

más sutiles o más gruesas.
Llevar la armonía a estos cuerpos energéticos nos permite alcanzar
estados placenteros de bienestar repartidos por todo el cuerpo y la
mente.

Lo que digo lo digo por experiencia, habiendo trabajado estos

aspectos durante años no sólo personalmente sino también con
numerosos alumnos, clientes, amigos, viendo muy claramente con el
tiempo pequeños, pero también grandes cambios.

También han acudido a mí varias personas escépticas respecto a

estas "disciplinas" y siempre les he sugerido que intentemos dejar a
un lado el escepticismo y nos permitamos probarlas y trabajar en
ellas incluso (o especialmente) sin ninguna expectativa en particular,
porque sólo la experiencia puede darnos una comprensión profunda
de las cosas.

Sin haberlo experimentado, se le llama prejuicio.

Estos cambios, practicando yoga, suceden o sucederán, aunque no

sepas nada sobre Chakras o cuerpos y canales energéticos; lo que
sucede, sin embargo, es que, trabajando específica y
consistentemente sobre tu cuerpo físico, como consecuencia natural
equilibrarás tu cuerpo energético y mental, dándote estabilidad en
cuerpo y mente.

Concluyo citando literalmente una frase del Hatha yoga Pradipika (I.
17):
De las asanas se deriva la estabilidad del cuerpo y la mente, la
ausencia de enfermedades y la ligereza de las extremidades.

¡Buena práctica para todos!

Bibliografía:
• Swami Satyananda Saraswati, Kundalini Tantra, © Bihar School of
Yoga 1984).
• Swami Satyananda Saraswati, Asana Pranayama Mudra Bandha ©
1969, 1973, 1996, 2008 Bihar School of Yoga, Ganga Darshan,
Munger, Bihar, India).

• Anodea Judith - Las ruedas de la vida © 1987, 1999 por Anodea

Ludith (Llewellyn Publications-, Woodbury MN 55125USA) (Celestial
Arts Publishing, Berkley).

• Arthur Avalon, El poder de la serpiente. Londres: Luzak & Co, 1919,

(All India Press, Pondicherry, 1989

• Cindy Dale - Kundalini: Energía Divina, Vida Divina, © 2011 Cyndy

Dale, Llewellyn Publications, Woodbury, MN 55125 - 2989 USA

• David Frawley - Yoga y Ayurveda, © de David Frawley, 1999 Lotus

Press, Twin Lakes, WI, EE.UU.

• C. G. Jung - Die Psychologie des Kundalini Yoga, Nach

Aufzeichnungen des Seminars, 1932 (2007, Fundación de las Obras
de C. G. Jung, Zurich).

• Kamalakar Mishra - Kashmir Saivism The central Philosophy of

Tantrism, © 2011 Laksmi editions of A.S.Y.A. Om.

• C.W. Leadbeater - Los Chakras, edición Touchwood de 1927

Agradecimientos En mi Chakra del Corazón, ¡estáis cada uno de vosotros! ¡Os abrazo!
Mi hermana Elena, que siempre me apoya y demuestra afecto y cariño hacia mí.
Fabio, primo y amigo fiel desde que nacimos. ¡Un cariño y una cercanía increíbles!

Dany... Una verdadera amiga que de forma desinteresada me ha demostrado su amor incondicional y su
cercanía desde que nos conocimos. Un lugar especial en mi corazón.

María, no encuentro las palabras aquí pero Tu sabes por qué, es una amistad del corazón, pero también etérea
y espiritual. Paolo y Elio, que me demuestran continuamente su verdadera amistad.
Yolanda, por el cariño que me demuestra a menudo y la ayuda con las traducciones .
Pier con Monica y Marco, colegas, pero no sólo, personas especiales que me acogieron en su precioso centro.
Nirala por el apoyo, la cercanía y las sugerencias.

Mis viejos amigos, Roby, Giorgio, Mauro y Maurizio, que en estos años de profundos cambios en mi vida me
han comprendido y han estado a mi lado. ¡Y mi gran amigo Daniele!

Todos los alumnos que, desde que enseño yoga, han participado a mis clases. De todos ellos he tenido y
aprendido algo.

Los lectores de este libro mío esperando que sea apreciado por lo que pretende ser: dar nociones básicas e
incitar a una comprensión más profunda de los Chakras.

¡Penélope! ¡Simplemente fantástica!

Un abrazo especial a Isabella y Barbara.

Mis profesores Denese y Jacopo que fueron fundamentales para que amara profundamente el yoga.
A mis padres, ¡siempre en mi Corazón!
Índice

Prefacio p. 3 Introducción p. 11 Capítulo 1 - Algo sobre los Chakras p.

13 Capítulo 2 - Cómo definir los Chakras p. 19 Capítulo 3 - Nadi y
Kundalini p. 23 Capítulo 4 - Los Chakras p. 27 Capítulo 5 –
Profundicemos p. 35 Capítulo 6 - Mantras y sonidos p. 38 Capítulo 7 -
Primer Chakra p. 41 Capítulo 8 - Segundo Chakra p. 80 Capítulo 9 -
Tercer Chakra p. 99 Capítulo 10-Cuarto Chakra p.125 Capítulo 11 -
Quinto Chakra p.145 Capítulo 12 - Sexto Chakra p.161 Capítulo 13 -
Séptimo Chakra p.165 Capítulo 14 - Una visión general del Ayurveda
p.169 Capítulo 15 - Sobre el Tantra p.176 Capítulo 16 - Conclusiones
p.178