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Turno: Sabatina
2024
Introducción
practicadas.
10. Sana Crítica: La sana crítica es el criterio o juicio razonado que debe
utilizar el juez al evaluar las pruebas presentadas por las partes en un
proceso judicial, basándose en la lógica y la experiencia para llegar a una
conclusión objetiva y justa. Criterio para la valoración de la prueba
conforme a un raciocinio lógico. «La valoración de la prueba pericial
corresponde a la función de los tribunales
de instancia al tratarse de un medio de prueba de apreciación libre, por lo
que no cabe la verificación casacional.
11. Celeridad: La celeridad es la diligencia y prontitud con la que se tramitan y
resuelven los asuntos judiciales, procurando evitar demoras injustificadas
y garantizando un acceso oportuno a la justicia. Está representado por las
normas que impiden la prolongación de los plazos y eliminan trámites
procesales superfluos y onerosos. Así, la perentoriedad de los plazos
legales o judiciales.
12. Lealtad y Buena Fe Procesal: Este principio implica que las partes en un
proceso judicial deben actuar con honestidad, transparencia y respeto
hacia el tribunal y las demás partes, evitando conductas fraudulentas o
abusivas. El principio de buena fe y lealtad procesal es la obligación de las
partes de actuar de manera honesta, transparente y leal entre sí y con el
tribunal. Este principio busca garantizar la integridad y la confianza en el
proceso judicial.
13. Legalidad: La legalidad es el principio que establece que todas las
actuaciones judiciales deben ajustarse a las normas y leyes aplicables,
garantizando así la seguridad jurídica y el respeto al Estado de Derecho.
“Nadie podrá ser procesado ni penado por un hecho no descrito
expresamente como delito por la ley al tiempo de su comisión, ni sometido
a medidas de seguridad que la ley penal no prevea”.
14. Contradictorio: Es aquel en que existe controversia entre partes. El
principio del contradictorio establece que las partes en un proceso judicial
deben tener la oportunidad de conocer y rebatir los argumentos y pruebas
presentadas por la parte contraria, asegurando así la igualdad de armas
en el debate judicial.