Está en la página 1de 1

•Ronroneo •

Leia Artemisa Black

Era un día normal, como cualquier otro. Estaba en camino a la


escuela cuando lo ví, aquel niño que siempre estaba solo, ese
chico que nunca podía recordar. Siempre que intenté acercarme,
algo me interrumpió. Sentí curiosidad cuando se adentraba a un
callejón, así que lo seguí lo más sigiloso que pude, no quería
asustarlo. Asustado quedé yo cuando escuché un grito desgarrador,
salí de mi escondite, preocupado por si estaba bien. El estaba
tirado boca abajo en el suelo, así que lo di vuelta para poder ver
si estaba bien. Grave error. El niño con la cara tan pálida como
fantasma, cabello castaño y ojos grises, era yo. Sintiendo un
balde de agua fría encima, lo último que ví fue como me
desintegraba en mis propias manos. Cerré los ojos con fuerza
mientras percibía un gran dolor desde el centro de mis entrañas,
cuando todo se volvió oscuro. Lo último que pude escuchar fue el
suave y arrullador ronroneo que me heló hasta la última gota de
sangre en mi cuerpo.

También podría gustarte