Argentina exporta e importa servicios.

Vende al mundo por más de 9 mil millones de

dólares, aunque hace 3 años atrás lo hacía por un monto mucho mayor: 15 mil millones.

Los servicios comerciales son lo que más exporta nuestro país, con un monto aproximado a
los 4 mil millones, algo menos de la mitad de todo lo vendido afuera. ¿Qué son estos
servicios comerciales? Fundamentalmente son Servicios basados en el Conocimiento:
Servicios de profesionales de consultoría, administración de empresas y auditoría. (2 mill.
millones). Para dimensionar, casi lo mismo que exportamos de autos o el triple que vino.
Los servicios comerciales son también “Investigación y Desarrollo” (527 millones) y
Servicios tecnicos específicos (1.547 millones)

Luego vienen los Servicios tecnológicos e informáticos por 2.147 millones, transporte
(1.712) y Viajes 406 millones. Argentina es un líder regional en la exportación de Servicios
basados en conocimientos, está detrás de Brasil, pero supera a México y otros países como
Colombia o Chile, que tienen fuertes programas de promoción.

El siglo 20 fue el siglo de las mercaderías, y este siglo es el de los servicios. El Ingreso por
habitante global ha ido creciendo y eso significó más gastos en bienes tecnológicos
(celulares, computadoras, autos eléctricos) y más servicios (viajes, informática, finanzas,
etc).

El escenario para el año próximo con un tipo de cambio más alto -muy probable- puede
significar un salto grande para la exportaciones de servicios. La “Marca país” de Argentina
en el tema es positiva y bien posicionada, a lo que le suma un buen nivel de inglés y la
posibilidad de trabajar en contra horario con mercados interesantes.

La Agencia ProCórdoba ha lanzado un programa interesante para promover la exportación

de servicios de empresas cordobesas. Hay mucho para crecer en ese sentido y las
oportunidades en el mundo están.

¿Y por las mercaderías como andamos?

La participación de Argentina en el comercio mundial llegó a la cifra histórica más baja: solo
0,25%, bastante lejos del 0,34% de una década atrás o del 2% de 1950. La caída
sistemática de “la porción de torta” que significamos del comercio mundial tiene varias
causas y el próximo gobierno debería atacarlas para de esa manera, evitar las constantes
crisis de divisas de la economía argentina.
Para comparar en servicios somos actualmente el 0,15% y en Servicios Profesionales y de
Consultoría somos el 0,14% .Nuestra mejor performance es en la exportación de servicios
Tecnológicos e Informáticos es de 0,28%.

Y entonces que vendemos: el maíz fue el producto más exportado por Argentina en 2022,
con un monto total de 8.571 millones de dólares.
El primero, ahora fue el 2°: harina de soja con 7.049 millones; tercero el aceite de soja con
4.792.
Completan el ranking, las camionetas y camiones con 3.578; y el trigo con 3.119 millones de
USD.
Luego del top five, vienen los porotos de soja (3.059), aceite crudo de petróleo (2.887),
carne bovina congelada (2.386), Biodiesel (1.758) y cierra como 10° los automóviles con
926 millones.

Fuera de ese top ten, el oro con 918 millones de dólares, camarones (890), cebada (873),
carne bovina refrigerada (816) y 15° el maní cordobés con 744 millones. Taylor Swift
recaudará 1.000 millones de dólares en su actual gira, para que comparemos la importancia
de los servicios frente a las mercancías.

La producción exportable sale principalmente de tres provincias, que son productivas y con
perfil competitivo que facilita la inserción internacional de sus mercancías.

Córdoba exporta el 14,5% del total Nacional, Buenos Aires el 37,3% y Santa Fe el 21,7%.
Las tres provincias exportan el 73,5% del total vendido al mundo nacional.

En el otro extremo de la tabla está Formosa que exporta sólo 41 millones de dólares, La
Rioja y Catamarca 0,2% cada una y Corrientes (0,3%). Otras provincias poco exportadoras
con Misiones y Rio Negro (0,5%) del total nacional.

Argentina necesita una revolución exportadora, que abarque bienes y servicios, que le
permita dejar de sufrir en dólares y dolores.
Córdoba está preparada, hay otras provincias y regiones que deberán actualizar su
“software” para ser competitivas en el mundo actual.