ACTIVIDAD 3

BARBIE

Desarrollo Profesional

Asesor: Flores del Campo Orozco Patricia

Grupo: 6AM25
¿TE PARECE QUE LOS HUMANOS
PODEMOS VIVIR SIN UN MÍNIMO
DE NORMAS ÉTICAS? ¿POR QUÉ?

Considero que los humanos si podríamos vivir sin normas

éticas pero sería de una manera bastante caótica debido a las
implicaciones que conlleva relacionarse con otra persona, por
naturaleza los ser humanos somos diferentes en múltiples
aspectos tanto físicos, mentales, cognitivos, etc. y lo que nos
facilita, en gran parte, a entablar conexiones son las normas
éticas; existirían más conflictos que hoy en día si las personas
decidieran no tener respeto o tolerancia. A pesar de que si se
podría vivir sin normas nuestra calidad de vida disminuiría
significativamente y nuestras relaciones se reducirían.
REFLEXIÓN

Ver la película de Barbie me dejo analizando la situación que se vive

actualmente en la sociedad, observar a algunas mujeres que
tomaron la decisión de ocultar su feminidad (el gusto por el rosa, las
flores, la delicadeza) creando un caparazón neutro para protegerse
del exterior, ya que durante décadas se ha ido reforzando el
pensamiento de que lo femenino es un sinónimo de debilidad.
También me hizo consiente de los privilegios y ventajas, que muchas
de las veces, no nos damos cuenta que tenemos o incluso
consideramos que todas las personas poseen el mismo.
Comentando con una compañera la película, comprendí un poco de
la presión que la sociedad pone constantemente en las mujeres,
haciéndolas sentir inseguras en todos los aspectos de su vida como
es la escuela, el trabajo, la familia, su físico, sus creencias, su metas y
planes de vida, metiendo la idea que nunca serán suficientes.
Mientras que nosotros crecimos con la idea de una hermandad con
nuestros amigos y compañeros, a ellas les decían que otra mujer era
su enemiga o la competencia, justo lo que me marcó de la película
fue darme cuenta la conexión tan fuerte y admirable que pueden
tener las mujeres cuando ven que otra mujer está pasando un mal
momento.
Me agradó bastante ver personajes hombres que no demostraban
incomodidad de expresar sus sentimientos aunque algunos sean
considerados poco “masculinos”, también en la búsqueda que los
protagonistas se encontraban de su propia voz y su lugar,
rompiendo estos estereotipos que malamente hemos ido
replicando durante generaciones, dando pie y un gran impulso a
sanar estas heridas de infancia y romper los patrones que se nos han
marcado.