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LEALTAD AL CABALLERO LEAL

La obra “el cantar del mio Cid” es un cantar de gesta anónimo que relata hazañas

heroicas inspiradas libremente en los últimos años de la vida del caballero castellano

Rodrigo Díaz de Vivar el Campeador.

Es muy común ver en los libros de caballería la imagen del caballero como algo

muy grande y valioso dentro de su reino y alguien muy sagrado para las batallas, esta no

es la excepción, es muy bien sabido que el Cid fue un caballero muy leal a su reino a

pesar de haber sido desterrado del mismo, el Cid en la obra cuenta con un número

grande de hombres a su cargo que decidieron seguirlo sin importar la decisión tomada por

el rey en contra de Rodrigo y también dejaban de lado el hecho que le fuesen arrebatados

sus bienes en la tierra, lo cual me lleva a querer centrar este ensayo en ¿Que lleva a

estos vasallos a ser leales al Caballero más leal de todos?

Claramente estas personas le son leales al Cid por como el sigue rindiendo

pleitesías a su rey a pesar de todo. Como es mostrado en varios cantares o en todos, ese

pensamiento del Cid en querer redimirse con su rey, para así volver a Castilla y seguir

defendiendo su reino. El Cid acostumbró a siempre mandarle detalles a su rey, esperando

alguna respuesta positiva que en gran parte si lo fue, recibiendo siempre cosas positivas

para sus seguidores lo cual para el siempre fue bien visto y lo llenaba de alegría.

Para darle más valor a está imagen de lealtad para mi hay 3 rasgos muy

importantes a destacar: Su esposa e hijas, repartición de bienes y su relación con el rey a

través de Minaya.

El primer rasgo, Esposa e Hijas; se nos presenta al Cid como un buen marido y un

buen padre, y este aún estando fuera de su hogar sigue respetando a su esposa y
siempre la tiene presente, cada vez que envía a Minaya Álvar Fáñez hacia Castilla para

que entregué los obsequios al rey, también le encarga pasar a dar las buenas nuevas a su

esposa e hijas, mandado también riquezas. Otra manera en la que vemos la lealtad del

Cid es cuando el rey compromete a sus hijas con los infantes de Carrión, los cuales se

convertirían en enemigos directos del Cid, al cual no le importó casar a sus hijas con

estos hombres para cumplir la voluntad de su rey, los cuales más adelante tendrían una

batalla contra dos hombres del Cid, los cuales mostrarían su lealtad al mismo vengando lo

que le habían hecho los infantes a sus hijas.

El segundo rasgo que encuentro importante, es la repartición de bienes

equitativamente que tiene siempre con sus seguidores cuando saquean los pueblos, lo

cual puede hacer creer que siguen a este por solo bienes materiales, sin embargo a la

hora de partir del reino de Castilla nadie les garantizaba esa parte de ganancias,

simplemente el Cid pudo coger cada riqueza y quedarse con todas, este no actuó así y

decidió ser justo, yo veo esta repartición equitativa como un agradecimiento que

encuentra el Cid para las personas que lo acompañan en este viaje mientras encuentra su

redención, en estos viajes siguió probando que tenía palabra y que era leal a sus

principios, tenemos el ejemplo del secuestro al conde de Barcelona que después de

probar bocado fue liberado tal y como lo había prometido Rodrigo.

Para finalizar no hay mejor ejemplo de lealtad al Cid Campeador que Minaya, el

cual se volvió el mensajero por excelencia entre el rey Alfonso y Rodrigo, cumpliendo

cada orden impuesta por el Cid, cada vez que el Cid solicitaba llevar las ofrendas al rey

estaba ahí Minaya siempre dispuesto a llevar estos obsequios, para mi es el vasallo o

acompañante más leal que puede tener el gran campeador y el cual es reflejo de los

demás, los cuales son tan fieles como este y estarán siempre dispuestos a servir al cid. El
ejemplo que más me gusta de la lealtad de Minaya hacia el Cid es cuando va a Castilla a

entregar 100 caballos al rey Alfonso:

«VOS, REY, LE HABÉIS DESTERRADO, LE QUITASTEIS VUESTRO AMOR,


PERO AUNQUE ESTÁ EN TIERRA EXTRAÑA EL CID SU DEBER CUMPLIÓ,
A ESOS PUEBLOS QUE SE LLAMAN JÉRICA Y ONDA GANÓ,
ALMENAR HA CONQUISTADO, MURVIEDRO, QUE AÚN ES MAYOR,
A CEBOLLA GANA LUEGO Y AL PUEBLO DE CASTEJÓN,
PEÑA CADIELLA, LA VILLA QUE ESTÁ EN UN FUERTE PEÑÓN;
CON TODAS ESTAS CIUDADES YA EN VALENCIA ES SEÑOR.
OBISPO HIZO POR SU MANO MÍO CID CAMPEADOR,
CINCO BATALLAS CAMPALES LIBRA Y TODAS LAS GANÓ.
GRANDES FUERON LAS GANANCIAS QUE LE HA DADO EL CREADOR,
AQUÍ TENÉIS LAS SEÑALES, LA VERDAD OS DIGO YO.
ESTOS CIEN GRUESOS CABALLOS, BUENOS CORREDORES SON,
DE RICOS FRENOS Y SILLAS TODOS LLEVAN GUARNICIÓN,
MÍO CID, SEÑOR, OS RUEGA QUE LOS TOMÉIS PARA VOS,
QUE ES SIEMPRE VUESTRO VASALLO Y OS TIENE POR SEÑOR.»

Concluyendo con la imagen de lealtad al que es leal, ellos son leales al Cid

simplemente porque el sigue siendo leal a pesar de todas las cosas, sigue queriendo a su

rey pasa lo que pase lo que da ese sentimiento de serle leal a el, y también ser leales al

rey, Lealtad es igual a Lealtad.


Referencias bibliográficas:

Salinas, P. (2007). Poema de mio cid. El perro y la rana. http://www.guao.org

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