Está en la página 1de 1

Estoy en la libre con gente que no existe en la realidad porque estoy soñando.

Los randoms
del sueño me pasan cables, me dicen que mi equipo de bajo no funciona, está Nadia ahí
girando en círculo como haciendo un ritual, un embrujo, o como si fuera un tigre en una
jaula invisible. En un momento del sueño todos se van, estoy solo con una piba grande q
solo existe en este sueño, le pido prestado una funda –después te la traigo –le digo a la
piba que quedó en la libre, no la conozco, no sé si me conoce, ni siquiera el bajo es mío, ni
se si es mí sueño o el de una bestia enjaulada que pretende hacer un embrujo. Ahora estoy
recostado al lado de esta piba grande que parece como una especie de cuidadora de la
libre con un vestido que se mezcla entre el azul y el verde y suena una máquina de escribir
tipeando en una mesa a unos metros, pero no hay nadie. Me levanto, la piba me mira
riéndose, se escucha el ruido del tipeo de la máquina de escribir pero no hay nadie. Nadia
me mandó un mensaje (al cerebro) que vaya a Paraná, que me está esperando, que no
quiso despertarme, me siento a tocar el bajo y me sale corte una escala blusera re copada,
la especie de cuidadora me mira con cara de que quiere que me vaya, el tipeo vuelve a
escribir a unos metros, sin nadie, me asusto, le vuelvo a pedir una funda para el bajo que no
es mío y hago fuerza para despertarme.

También podría gustarte