Gabriela Gaitán

Cuando empiezan a hablar de los Dioses, los titanes y los 12 gran olímpicos, se
puede ver y observar la ambición que estos tienen, una gran diferencia con Dioses
de otras religiones. Más aún, Zeus, el Dios más poderoso, carece de importantes
valores y su moral normalmente va en contra de las cosas que están permitidas.
Sus amantes e infidelidades, sus caprichos y mentiras, lo hacen un Dios imperfecto
y eventualmente un mal ejemplo para los mortales; esto es otra cosa por lo que es
un Dios muy particular en comparación a otros Dioses. Observamos en otras
creencias que a aquellos que se venera o a ese poder superior que se admira, son
ejemplo para mantener una sociedad en orden, con moral y culpas. Esto es algo
que con los Dioses más importantes, Zeus y su esposa Hera u otros Dioses, no
siempre se refleja y puede poner en duda que es entonces lo incorrecto.

El temperamento de los Dioses es único de cada uno, pero se podria decir que
todos tienen un poco de travesura en ellos. Principalmente en Hera, que aunque era
la Diosa del matrimonio, tenía ella misma uno que era incontrolable e iba contra lo
que ella misma predicaba. Hera es un ejemplo también del poder de los Dioses
sobre los mortales y como los últimos eran muchísimo más inferiores que los
primeros. Aunque era Zeus, el Dios, quien engañaba a las mujeres a estar con él y
él quien las buscaba, Hera nunca castigaba al Dios, sino siempre al mortal. Es así
como varios Dioses se aprovechaban de su puesto para hacer y deshacer a su
antojo. Como otro claro ejemplo de esto es Hades, quien decidió por que si quien
iba a ser su esposa y, la mortal si otra opción, tuvo que pasar el resto de su vida en
el inframundo.

La falta de coherencia moral en los dioses, evidenciada por las infidelidades de

Zeus y las acciones contradictorias de Hera, sugiere una dualidad entre su divinidad
y su capacidad para actuar de manera deshonesta. La relación entre los dioses y los
mortales también destaca la desigualdad, ya que los dioses, al abusar de su poder,
imponen castigos injustos a los mortales mientras ellos mismos quedan impunes.

En última instancia, la mitología griega presenta deidades complejas con

características humanas, proporcionando no solo explicaciones para fenómenos
naturales, sino también una reflexión sobre la naturaleza ambivalente de los dioses
y su influencia en la vida de los mortales.

Gracias por tu reflexión, Gabriela. Para la próxima, te invito a resumir

menos y reaccionar más. ¡Ánimo, buen comienzo!