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ASIGNACIÓN: PRECISIONES HERMENÉUTICAS

El articulo me parece muy bueno, me ayuda a esclarecer y confirmar algunas preguntas que siempre me he hecho,
sobre qué pasa después de la muerte, cuando escucho que unas personas según su comportamiento reciben el premio de
cielo o infierno, reflrxiono… y ¿quién garantiza que existe un espacio como tal? … es un misterio que no acaba de
comprenderse.
Pero hoy al leer este texto me llama la atención lo siguiente:
“invocar el nombre de Jesús, el nombre de María o de un Santo al que tenemos devoción es como un bálsamo
que hace bien a todo el cuerpo, a la vida que habita en cada persona. Por eso la religión tiene algo que se nos escapa y
toca al misterio del ser humano, inefable como un suspiro profundo, inexplicable como un gesto de ternura, misterioso
como el acto de dar la vida por el bien de muchos”

 Me siento con esperanza y confianza, por que la figura de María amplia esta teología de la salvación, en
una identificación con las distintitas realidades que vive el pueblo pobre, excluido, sufriente. María toca
las necesidades del pueblo y por eso hay una estrecha identificación y consuelo al invocarla. María se
convierte en una mujer que libera, que es fuerte y portadora de vida nueva; de caminos de Justicia y
Esperanza especialmente para la mujer.
 Me conecta con las realidades actuales de las familias migrantes, de las mujeres obreras, en las casas, la
mujer que cada día lucha contra el sistema opresor que cada vez organiza estructuras que quitan la vida
de la mujer y su familia.
 Solamente no había escuchado la frase: “los vivos en Dios”
 Puedo coincidir con las autoras en que no se entiende a María desconectada de una realidad, vista como mujer
humana que escucha y consuela, no sólo la que hace milagros y ya, sino la que vive en lo cotidiano de la vida del
pueblo escuchando su clamor.
 Me sigue cuestionando, como la religión católica sigue utilizando la persona de María para domesticar y
dominar el modo de proceder de las mujeres en la Iglesia y en la familia. Al tenerla como modelo de
sumisión, obediencia ciega, frágil, dócil, dolorosa.
 Queda el reto de seguir deconstruyendo esta teología dominadora-chantajista, y apostar por dar a
conocer la mujer valiente, fuerte, que discierne, escucha y acompaña a su Pueblo vulnerable y oprimido
por tantas cargas que ha puesto la Iglesia y la sociedad.

 ¿Cómo ir haciendo desde la base una descodificación Mariana, si la Iglesia jerárquica es como un muro de la
frontera, que ha influido con esta religiosidad dominante?

Maribel Lara Hernández.

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