Está en la página 1de 2

EL VACIO URBANO (3)

La plaza, la plazoleta, el parque, el bulevar, la rambla, la alameda, la


avenida y la calle son tipos de Vacío Urbano. Lo son desde el callejón estrecho
y longitudinal destinado al paso exclusivo de peatones, hasta el grandioso y
monumental, y de dimensiones equivalentes entre sus costados, para el
encuentro y la concentración de multitudes. Por lo general, al estar cada uno de
los citados en mayor o menor grado confinados, son de fácil comprensión y
determinación en su tridimensionalidad. Pero hay otros, de extensión y magnitud
superiores, como son las playas de las ciudades costeras o los parques
metropolitanos. Éstos, con características de descubiertos son cerrados
parcialmente, o poseen cerramientos laterales no siempre inmediatos, evidentes o
explícitos. Es debido a la razón anterior que se dificulta para la percepción
definirlos y abarcarlos como una totalidad, y como volúmenes espaciales
identificables y mensurables.

Se consideran en la categoría de Vacíos Urbanos las áreas libres no


edificadas comprendidas dentro de los perímetros urbanos y de servicios de las
ciudades, y previstas hacia el futuro como terrenos de reserva para nuevos
desarrollos urbanísticos.

Constituyen de igual modo Vacíos Urbanos los ríos, los canales, las
quebradas y las corrientes de agua que atraviesan ciudades y poblaciones, y los
lagos, lagunas, humedales y otros depósitos de agua, naturales o no, en medio de
o en las proximidades de las áreas urbanizadas. De los primeros algunos son
utilizados como vías de navegación fluvial, con probables instalaciones
portuarias, y en comunicación seguramente con mares cercanos. Todos los
anteriores pueden incidir decisivamente en los trazados urbanísticos, configurar
un factor paisajístico, ambiental y ecológico relevante, y ofrecer en sus riberas,
en sus márgenes y en sus aguas la posibilidad de amenidades, de diversión,
recreación, esparcimiento y ocio. Asimismo pueden ser escenario de actividades
culturales, artísticas, deportivas, y comerciales también, y generar el desarrollo
de potenciales turísticos en general.

Por último, el piso del Vacío Urbano tendrá correspondencia en su diseño


y tratamiento con las peculiaridades referidas a las actividades que allí ocurren, y
al uso y la significación de las edificaciones circundantes.

Cabe destacar, para cerrar ya, la importancia y el valor que representan en


los barrios populares de las ciudades los Vacíos Urbanos, conocidos
comúnmente como Espacios Abiertos. Su implementación no suele obedecer a
una planificación formal igual que sucede en los desarrollos urbanísticos
oficiales, pero es innegable no sólo su influencia en la consolidación física y
social de los asentamientos en mención sino el sentido de apropiación y arraigo
que generan en los habitantes. Sobre dichos Espacios Abiertos es el texto
siguiente del arquitecto JAIME HERNÁNDEZ GARCÍA:
“Los Espacios Abiertos en los barrios populares son públicos en términos de
propiedad y accesibilidad, pero son comunitarios en cuanto a uso y sentido de
pertenencia; y juegan un papel importante en las dinámicas físicas y sociales de
los barrios. […] La investigación 1 contribuye a entender los sectores populares
urbanos como una forma de ‘hacer ciudad’ en América Latina, y los Espacios
Abiertos como herramientas de consolidación urbana y social. La tesis concluye
que los espacios abiertos en los barrios populares no son ‘espacios sobrantes’; por
el contrario, tienen valor funcional y simbólico desde las primeras etapas de los
asentamientos. También se concluye que los procesos de producción y consumo
de estos espacios están íntimamente relacionados, y que esto ayuda a explicar el
lenguaje formal (la arquitectura y el urbanismo) encontrado, y los significados
que pueden tener para los individuos y las comunidades.”

JOSE E. ROBLEDO OCAMPO


Profesor

1
Construcción Social de Espacio Público en Barrios Populares de Bogotá, de Jaime Hernández García,
arquitecto. Ver: http://www.revistainvi.uchile.cl/index.php/INVI/article/view/668/1099

También podría gustarte