Está en la página 1de 8

Las mil y una noches

Personajes:

- Visir
- Sultán
- SHERZAD
- DINAZAR
- GUARDIA

ACTO I

ESCENA 1

HABITACION DE PALACIO ORIENTAL. EL SULTAN Y EL VISIR HABLAN.

VISIR- (DETRÁS DEL SULTAN) Pero Señor, entienda. Es una locura. Es


horrible, piénselo bien, se lo suplico...

SULTAN- Es una orden del Sultán y debe cumplirse de inmediato. Quiero


casarme ahora y no después.

VISIR- Eso está bien, cásese si quiere...

SULTAN- ¡Una vez cada noche!

VISIR- Perfecto. Cada noche se casará, pero es un crimen. No puede


matar a cada esposa al día siguiente de casarse...

SULTAN- ¿Y por qué no? Yo soy el Sultán y soy dueño de la vida de cada
una de mis esposas.

VISIR- Pero, Sultán...

SULTAN- Pero nada. Me casaré cuantas veces quiera a partir de esta


misma noche o será a ti a quien mandaré a cortar la cabeza. ¿Has
entendido?

VISIR- Sí, Señor. Como usted mande. (SALE)

SULTAN- ¡Mi venganza será terrible!

ESCENA 2

EN LA CASA DE SHERZAD, ELLA ESTA BORDANDO. ENTRA EL GRAN


VISIR.
SHERZAD-¡Hola Padre mío!

VISIR- Amada hija, debes disculparme ahora... Pero mi cabeza da


demasiadas vueltas y no puedo atenderte como quisiera...

SHERZAD-Padre mío. Sabes que puedes confiar en mi desde siempre. ¿Dime


qué llena tu corazón de aflicción?

VISIR- El Sultán otra vez con sus caprichos. Quiere casarse cada
noche y cortarle la cabeza a cada esposa a la mañana siguiente.

SHERZAD-¿Y por qué, Padre mío?

VISIR- Está furioso por un agravio que le ha hecho su última esposa,


que en paz descanse. Y no conforme con darle muerte, quiere
vengarse con cada mujer de este gran país.

SHERZAD-¿Cómo es posible?

VISIR- Sencillo. El Sultán está loco. Y nadie puede detenerlo...

SHERZAD-Padre mío... tú siempre has querido que yo me case con el Sultán...

VISIR- ¡Antes! Ahora no lo consentiría aunque me amarren al cráter


de un volcán.

SHERZAD-(PENSATIVA) O tal vez si...

VISIR- ¿O tal vez, qué?

SHERZAD-Padre mío. Cásame con el Sultán.

VISIR- Pero... esto es una epidemia. Mi hija se ha vuelto loca


también.

SHERZAD-Tarde o temprano se acabarán las mujeres del planeta...

VISIR- Es verdad pero... ¿Qué propones? ¿Adelantar tu propia


muerte?

SHERZAD-No... más bien evitar la muerte de las demás.

VISIR- ¿Crees que podrías hacerle cambiar de opinión?

SHERZAD-Estoy segura.

VISIR- No sé si esté loco yo también; pero mi desespero es claro y


verdadero. Tú eres una niña sensata, hasta ahora, y creo que puedo
confiar en ti.

SHERZAD-No te arrepentirás, Padre mío.

VISIR- Así lo espero. (SALE)


SHERZAD-Ya verás... (LLAMANDO) ¡Hermana!

ESCENA 3

MISMO LUGAR.

DINAZAR- (ENTRANDO) Dime, querida hermana.

SHERZAD-Ayúdame a vestirme...

DINAZAR- Ya casi es de noche, ¿Dónde irás a esta hora?

SHERZAD-Voy a casarme con el Sultán... (LE ENTREGA UN TRAJE)

DINAZAR- ¡Eso es maravilloso! (EMPIEZA A VESTIRLA)

SHERZAD-Podría no serlo, por eso debes ayudarme...

DINAZAR- Te ayudaré en lo que me pidas...

SHERZAD-Entonces escúchame con atención. Si haces lo que te pido,


salvaremos a todas las mujeres del mundo.

DINAZAR- ¡Que interesante! Dime qué debo hacer.

SHERZAD-Primero que nada, irás conmigo a la boda y te quedarás conmigo


pase lo que pase.

DINAZAR- “Quedarme contigo pase lo que pase”

SHERZAD-¡Muy bien! ¡Eres la mejor hermana del mundo! Lo segundo es


despertarte mucho antes que amanezca y pedirme que... (CONTINUA
SUSURRANDOLE AL OIDO, SONRIEN FELICES)

ESCENA 4

HABITACION DE PALACIO ORIENTAL. EL SULTAN TERMINA DE


VESTIRSE PARA LA BODA.

VISIR- (ENTRANDO) Ya está todo arreglado. Sultán... ya tiene


esposa para esta noche.

SULTAN- ¿Y quién es la afortunada?

VISIR- Perdón... Querrá decir la víctima.

SULTAN- Como quieras...

VISIR- Es mi propia hija Sherzad.


SULTAN- (ASOMBRADO) ¿Sherzad? Pero es tu hija.

VISIR- Más vale temprano que tarde. Y ella misma insistió.

SULTAN- Es una lástima... es tan linda.

GUARDIA-(ANUNCIANDO) La futura esposa del Gran Sultán, hija del gran


Visir y próxima decapitada: Sherzad. (ENTRA SHERZAD
ACOMPAÑADA DE DINAZAR)

ESCENA 5

MISMO LUGAR.

VISIR- Bueno, no hagamos esto más largo de lo necesario...


Yo les declaro Sultán y Sultana y que pasen feliz noche y... un
hermoso amanecer. Ya ni sé que cosas digo. Vayan a dormir. (SE
ACUESTAN EL SULTAN, SHERZAD Y DINAZAR) Epa, tú, Dinazar. No
pensarás dormir aquí, supongo.

DINAZAR- Déjame, padre mío. Tal vez esta sea la última noche en que
vea a mi hermana. Y recuerda que ella siempre me cuenta un relato
fantástico antes de despertar...

SULTAN- ¿Relato fantástico?

VISIR- (EXTRAÑADO) ¿Desde cuando? ¿Antes de despertar?


¿Y como le escuchas si aún estás dormida? (SHERZAD Y DINAZAR SE
MIRAN)

DINAZAR- (DISIMULANDO) Desde siempre, padre mío. ¿No te


acuerdas?

SULTAN- ¿Qué clase de relatos?

DINAZAR- Relatos maravillosos de tierras lejanas...

VISIR- Pero...

SHERZAD-De príncipes y hechiceros...

VISIR- Pero...

DINAZAR- De amores imposibles...

SULTAN- ¿Y yo podría escuchar ese cuento?


SHERZAD-Todos los que quieras escuchar...

VISIR- Pero...

SHERZAD-¡Pero ya, padre mío!

DINAZAR- Solo tienes que permitir que me quede...

SHERZAD-Déjala, padre mío. Tal vez sea el último cuento que escuche
mi hermana de mis labios.

SULTAN- Entonces, que se quede.

VISIR- Pero...

SULTAN- (MOLESTO) Dije “Que se quede” ¿No escuchaste, Gran


Visir?

VISIR- Está bien... pero... (EN VOZ BAJA) Las va a matar a las
dos...

DINAZAR- ¿A mí por qué? (A SHERZAD) ¿Y a ti por qué?


(DESESPERANDOSE) ¿Nos van a matar? ¿A las dos? ¿Por qué?

SHERZAD-Tú ya cállate y duérmete. Dormir. A dormir todos. (SE


DUERMEN RAPIDAMENTE Y EL VISIR SALE)

ESCENA 6

MISMO LUGAR. SHERZAD DESPIERTA Y SE ACERCA A DINAZAR


SACUDIENDOLA. DINAZAR DESPIERTA. SACA UN RELOJ
DESPERTADOR, HACE QUE SUENE EN LAS OREJAS DEL SULTAN. LAS
HERMANAS FINGEN DORMIR Y LUEGO DESPERTARSE.

DINAZAR- ¡Mmmmm! ¿Qué hora es?

SHERZAD-Hora de tu cuento, querida hermana.

SULTAN- (DESPERTANDO) ¡El cuento! ¡Sí! ¡Llegó la hora del cuento!


Y después del cuento... (SE PASA EL INDICE POR EL CUELLO)
¡Cuiccccc!

SHERZAD-(RESPIRA PROFUNDO) ¡Muy bien! Esta es la historia de un


joven muy pobre, de nombre “Aladino”, nacido en la capital de un
reino del Oriente. Aladino era un muchacho muy travieso que pasaba
el tiempo en las calles jugando con pequeños vagabundos. Un buen
día, estaba Aladino en la plaza jugando con otros muchachos, cuando
un extraño que pasaba por ahí se detuvo y se le quedó mirando. Era
aquel extranjero un mago que acababa de llegar de África y descubrió
en el rostro de Aladino la inteligencia necesaria para llevar a cabo sus
proyectos...

Aladino y la lampara maravillosa


Personajes:

 Aladino:.
 Madre de Aladino:
 Genio.
 Jafar.
 Princesa Jasmine:
 Sultán: Padre de Jasmine y gobernante del reino.

Acto 1: La Lámpara Mágica


(Aladino camina por el mercado y encuentra a Jafar)

– Jafar: Hola, joven. ¿Te gustaría conseguir una lámpara mágica que puede
cambiar tu vida?

– Aladino: ¿Una lámpara mágica? ¿Qué puede hacer?

– Jafar: Esta lámpara contiene un poderoso genio que concede tres deseos a
quien lo libere. ¡Imagina las posibilidades!

– Aladino: ¡Vaya! Suena increíble. ¿Cómo puedo conseguirla?

– Jafar: Para obtener la lámpara, debes entrar en una cueva secreta en las
afueras de la ciudad. Pero solo alguien de corazón puro, como tú, puede entrar.
¿Aceptas la tarea?

– Aladino: Sí, lo haré. Haré cualquier cosa para mejorar la vida de mi madre y
la mía.

Acto 2: En la Cueva
(Aladino encuentra la lámpara y libera al Genio)

– Genio: ¡Gracias por liberarme, Aladino! Como recompensa, te concederé tres


deseos.

– Aladino: ¡Genial! Primero deseo que mi madre y yo tengamos una vida


mejor, con una casa bonita y comida en abundancia.

– Genio: ¡Deseo concedido!


(Aladino regresa a casa y encuentra a su madre sorprendida por los cambios)

– Madre de Aladino: ¡Aladino, esto es increíble! ¿Cómo sucedió?

– Aladino: Madre, encontré una lámpara mágica con un genio que nos
concedió este deseo.

Acto 3: El amor de Aladino y Jasmine


(Aladino ve a la princesa Jasmine en el palacio y se enamora de ella)

– Aladino: Genio, deseo conocer a la princesa Jasmine y que ella me vea


como alguien digno.

– Genio: ¡Deseo concedido!

(Aladino se transforma en un príncipe y va al palacio para conocer a Jasmine)

– Princesa Jasmine: ¿Quién eres tú, apuesto príncipe?

– Aladino: Soy Aladino, un príncipe de un reino lejano. He venido a conocerte,


princesa.

– Princesa Jasmine: Me encantaría conocerte mejor, Aladino.

Acto 4: La lucha contra Jafar


(Jafar descubre la verdad sobre Aladino y la lámpara mágica y decide robarla)

– Jafar: Ahora que tengo la lámpara, ¡soy el más poderoso! ¡Genio, deseo ser
el sultán!

– Genio: Aunque no me guste, debo concederte el deseo. ¡Deseo concedido!

(Aladino decide confesar la verdad a Jasmine)

– Aladino: Jasmine, debo decirte la verdad. No soy un príncipe de verdad. Usé


uno de mis deseos para parecerlo y conocerte. Pero mi amor por ti es real.

– Princesa Jasmine: Aprecio tu honestidad, Aladino. Luchemos juntos contra


Jafar y recuperemos el reino.

(Aladino y Jasmine luchan juntos contra Jafar)

– Aladino: ¡Jafar, devuélveme la lámpara y ríndete!

– Jafar: ¡Nunca!

(Aladino, valientemente, logra quitarle la lámpara a Jafar, y aprovecha un


descuido de Jafar para arrojarla a Jasmine)
– Princesa Jasmine: (Sosteniendo la lámpara) ¡Genio, deseo que Jafar pierda
todos los poderes que obtuvo de la lámpara!

– Genio: ¡Deseo concedido!

(Jafar pierde sus poderes y es capturado por los guardias del palacio)

Acto 5: El deseo final


(Aladino y Jasmine celebran su victoria)

– Aladino: Genio, tengo un último deseo. Deseo que seas libre.

– Genio: ¿De verdad? ¡Eso es lo más generoso que alguien ha hecho por mí!
¡Deseo concedido!

(El Genio es liberado y Aladino decide ser honesto con el Sultán)

– Aladino: Sultán, no soy un príncipe real, pero mi amor por Jasmine es


verdadero. Espero que pueda perdonarme por haberles mentido.

– Sultán: Aladino, has demostrado ser valiente y honorable al enfrentarte a


Jafar y salvar nuestro reino. Te doy la bendición para casarte con mi hija.

– Madre de Aladino: Estoy orgullosa de ti, hijo. Encontraste el amor y la


felicidad sin olvidar tus raíces.

(Aladino y Jasmine deciden casarse)

– Princesa Jasmine: Aladino, aunque no seas un príncipe de sangre, eres mi


príncipe en mi corazón. Juntos, seremos felices y gobernaremos con justicia y
amor.

Fin

Enseñanza del guion:

La obra de teatro “Aladino y la Lámpara Encantada o maravillosa” nos enseña


la importancia de la honestidad, el amor y la humildad. A través de las
aventuras de Aladino, aprendemos que no se necesita riqueza material o ser
parte de la realeza para ser feliz y encontrar el amor verdadero. Aladino
demuestra su valentía y generosidad al enfrentar a Jafar y liberar al Genio, y en
lugar de aprovecharse de sus poderes, aprende a ser feliz con lo que tiene y a
luchar por lo que es correcto. Al ser honesto sobre su identidad y su amor por
Jasmine, Aladino demuestra que la verdadera riqueza se encuentra en el
corazón y en nuestras acciones.

También podría gustarte