EL CANTAR DEL MIO CID

NARRADOR: Buenas tardes tengan vuesas mercedes me presento soy un juglar de una bonita
historia les voy a contar que a su vez también vamos a interpretar, pero antes de comenzar a
narrar una cosa debemos aclarar soy yo el autor de este cantar y soy natural de san esteban de
Gormaz se me ha entendido bien no y después de este punto aclarar comencemos a narrar

NARRADOR: Hace muchos muchos años en estas mismas tierras nos encontramos cabalgo un
ilustre jinete cuya historia les vengo a narrar de nombre Rodrigo Diaz de Vivar nació en vivar
conocido en las tierras cristianas moras como el sobrenombre del Cid el campeador

EL CID: Lo mismo os digo yo Rodrigo mira bien lo que os digo yo era el portaestandarte del rey y
caballero del rey sancho señor de mi castilla nata.

NARRADOR: Se casa en alegres nupcias con Jimena noble dama, la vida del guerrero transcurre
placida y serena vigilando estas tierras de la frontera castellana.

JIMENA: Rodrigo esposo mío la dicha envueltos nos tiene la felicidad no invadiera mientras la
preocupación ya viene.

NARRADOR: Pero entre hermanos dejo una regia van a nacer el odio la envidia y las rencillas.

NARRADOR: una traición se conspira en Zamora un sicario le da muerte al rey sancho en menos de
una hora Alfonso será ahora el rey de castilla.

REY ALFONSO: Yo Alfonso sexto ahora rey de castilla

NARRADOR: Si ven al rey Alfonso os digo el cual desterrara al cid

REY ALFONSO: O as faltado a la palabra has conmovido mi paciencia estas desterrado.

HIJAS DEL CID E ESPOSA: Lloran.

NARRADOR: Dios que buen vasallo si hubiese buen señor, pero el cid no esta solo en este su nuevo
destino guerreros fieles le acompañan.

NARRADOR: gran guerrero primo del cid, Minaya, y su sobrino, Félix muñoz y para brillar el espíritu
cristiano sin que huéspedes caiga animo el obispo Gerónimo.

NARRADOR: En san pedro de cardeña se despide de su esposa e hijas a ellas se queda mirando y
sus ojos tan fuertemente llorando.

El CID: Esposa mía esposa mía que gran desdicha la nuestra el amor estoy nos acompaña ha sido
caprichoso y funente.

NARRADOR: Otro día de mañana empiezan a cabalgar, va abandonar castilla el campeador leal a
una nueva ciudad.

EL CID: A diestros las torres ya se ven y llenas de moros están.

MINAYA: Cerca queda el cubella que castillos fines ya por la calzada kinnear deberemos caminar.

FELIX MUÑOZ: Sobre nada de paros debemos descansar.

OBISPO GERONIMO: Eso eso a descansar a descansar.

NARRADOR: Ya en tierra de moros su primera noche iban a pasar.

EL CID: Arriba a arriba mis soldados enseguida hemos de seguir cabalgar un mensaje de un espíritu
mas notificado del cual no debemos tardar más.

MINAYA: Bien mio cid crucemos la sierra de noche y así pongamos esta lectura broches.

NARRADOR: Después de 15 semanas y caminos transitados a tierras de molina han llegado.

MIO CID: Alerta alerta mis soldados tenemos moros en la costa.

MOROS: Esto es una embocada.

MIO CID: Parad parad toda nuestra pelea venid todos acercarse valencia conmigo no a la fuerza los
espero 3 días en el puente de selva para poder así conquistar valencia.

MOROS: Cuenta conmigo mio cid con pacto de hermano sellemos esta gran amistad que entre
nosotros ha iniciado.

MIO CID: Vamos todos a valencia.

NARRADOR: Pasado ya el tiempo el cid señor de valencia es, y el dominio de todo el levante tiene
a sus pies.

NARRADOR: De nuevo regresa la felicidad al seno del hogar diciendo ya sus hijas ya tienes que
casar serán los infantes de Carrión los afortunados que las acompañen al altar.

SACERDOTE: Que Dios bendiga estas 2 parejas.

NARRADOR: Los condes de Carrión con las suyas se van a salir y con la comitiva nupcial su tierra va
a partir.

CONDES DE CARRION: Vámonos.

NARRADOR: Que malvados fueron los infantes a la salida del sol.

FERNANDO: Nosotros condes nacidos de Carrión para vengar la vergüenza de aquel león escarnio
para las hijas del cid campeador.

DIEGO: Si hay que darle lo suyo lo que se merecen en donación con las ganancias del cid
tendremos buena condición es carneo a las hijas del mio cid.

DIEGO: Vamos vamos recoged todo.

FERNANDO: Y guardad arriba arriba vamos.

FERNANDO: Cargar las acémilas con las cosas de valor.

DIEGO: Tu querido primo gran Félix Muñoz ve adelante para nosotros disfrutar estos bellos
paisajes con nuestras esposas.
NARRADOR: Fíjense cual malvado son los infantes de Carrión, fíjense cual malvados son los
infantes de Carrión.

CONDES DE CARRION: Al suelo

DIEGO: Aquí os quedareis en este fiero rincón ninguna parte tendréis de las tierras de Carrión.

FERNANDO: Ahora nos dejaremos aquí.

SOL: Ay don Diego y Don Fernando rogamos por Dios.

NARRADOR: Lo que pedían las dueñas de nada allí le sirvió tanto allí las azotaron que el sentido les
fallo.

NARRADOR: Por el rastro que dejaron llego Félix Muñoz a sus dos primas a punto de muerte hallo

A voces les dijo primas primas y luego descabalgo.