Clases de evangelismo: Resumen Diana Jocelyn Flores Cerrato

Temas de discusión en la consejería cristiana parte 1, 2 y 3

Resumen de la parte 1

Antes de ver cada uno de los temas de consejería, es importante mencionar que la consejería cristiana únicamente
puede ser exitosa cuando descansamos en la guía, el poder y la sabiduría del Señor.

La depresión: La depresión es uno de los problemas más comunes, en algún momento de nuestra vida todos
pasamos por esto. Algunas características de la depresión son el miedo, el sentirse solo, estar triste, estar
desanimado sin querer hacer nada ni siquiera vivir más; hay casos severos de depresión que las personas no tienen
energía, no tienen deseo de comer o de interactuar con otras personas. Otras características que se han detectado
en personas con depresión es que son autocríticas, letárgicas, tienen dificultad para concentrase, no tienen energía
y en ocasiones luchan con sentimientos de culpa y enojo, a veces pueden lucir bien por fuera pero en el interior
estan luchando, no hay gozo y alegría en sus vidas y llegan a tener ideas suicidas.

No existe una causa única para la depresión cada persona puede presentar una causa diferente; Sin embargo, hay
tres influencias comunes. Puede ser una causa física, puede ser depresión por estar atravesando por una
enfermedad, hay enfermedades que desorganizan la química del cuerpo y producen cambios físicos que crean
depresión. Hay veces que no es necesario estar enfermos, pero no descansar bien, llevar una dieta inadecuada, la
falta de ejercicio pueden contribuir a la depresión.

La tensión sería la segunda causa, la vida esta llena de presiones, frustraciones y desilusiones, esto nos puede
llevar a experimentar depresión, se dice que la mayor depresión viene como resultado de una perdida, ya sea de
algún ser querido o la perdida de un trabajo.

El perder la esperanza es la tercera causa, la depresión a veces viene a las personas que estan atrapadas en
situaciones donde se sienten sin esperanza.

No es fácil aconsejar a alguien que está deprimido, hay ocasiones que las personas no mejoran y el consejero
puede deprimirse también, sin embargo, tomando el caso de Elías, él recibió comida, bebida y descanso, en muchas
ocasiones tener un tiempo de descanso es lo que las personas que están pasando por este problema necesitan,
tiempo para descansar y ocuparse de si mismos físicamente, inclusive se puede animar a la persona para que se
haga estudios físicos.

Hay ocasiones en que con el hecho de identificar la causa de la depresión lleva a la persona a mejorar y buscar
soluciones para esa causa, pero hay veces que no es posible modificar la situación, en este caso se debe a ayudar
a que la persona acepte lo que no se puede cambiar.
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En medio de la depresión las personas no tienen deseos de obedecer a Dios pero es necesario que de forma
cariñosa se les anime a hablar con Dios, a leer la Biblia y esperar que Dios provea la guía necesaria, así como
vemos en la Biblia en la historia de Elias, es necesario que obedezcamos a Dios.

Es necesario ayudar a la persona a ver que la vida no es tan sin esperanza como a veces lo parece, finalmente es
necesario aceptar la ayuda de otros, como cristianos necesitamos estar accesibles para prestar ayuda, pero también
es necesario tener la humildad para recibir la ayuda que viene de Dios a través de otras personas.

La ira: Es un profundo sentimiento de tensión y agresividad que surge cuando nos sentimos amenazados, frustrados
o equivocados. Es una emoción que agita la totalidad de nuestro cuerpo y es capaz de producir abundante energía
que en ocasiones se convierte en violencia física y agresión verbal. La ira nos puede afectar física, psicológica y
espiritualmente.

La Biblia nos habla de diferentes tipos de ira, hay una ira que es justificables un ejemplo de esto es cuando Jes ús
limpió el Templo, esta palabra es orge, es una indignación intensa, pero correcta, morada por el pecado y el mal
proceder del mundo. Esta es una ira sin resentimiento, dirigida a la injusticia bajo control, el propósito de esta ira es
eliminar el mal y tener cambios para mejorar.

La segunda palabra que se utiliza es parogismis, es una irritación amarga y exasperada, cuando permitimos que
esta ira dure de un día a otro nos hace daño y Satanás la puede utilizar para afectar nuestras vidas, esto se puede
convertir en un daño físico y espiritual.

La tercera palabra es themus, es una agitación palpitante o una explosión de intensa hostilidad, este tipo de ira junto
con la amargura debe ser expulsada de nuestras vidas.

La ira nos hace tener una sensación de superioridad y poder, aumenta nuestra presión sanguínea, el corazón palpita
más rápido, circula más adrenalina, los músculos se tensan y la digestion se hace más lenta. Cuando las personas
tienen prolongados estados de ira se ven afectados por presión alta, ataques cardiacos, problemas digestivos y
dolores musculares. Cuando nos enojamos tenemos dificultad para tomar decisiones racionales, la ira
frecuentemente nos lleva a la depresión, crea barreras entre las personas.

Lo primero que hay que hacer con las personas que tienen problemas de ira es animarlas a admitir y expresar sus
sentimientos de ira, es mejor afrontar la ira honestamente y hacer algo con ella, antes de que pase otro día. Es
mejor detenerse antes de expresar la ira de una forma inapropiada, con una mente en un estado de enojo la
persona iracunda no puede expresar sus sentimientos sin herir o alejar a los demás.

Una segunda forma de manejar la ira es ayudar a las personas a que redirijan su ira, en lugar de que se transforme
en hostilidad, pueden hacer una caminata, practicar algún deporte o alguna otra actividad que permita descargar la
energía.
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También se puede ayudar a pensar razonablemente acerca del enojo, después del reconocimiento, la expresión y
nueva evaluación de la ira, necesitamos remplazar los sentimientos de ira con acciones nobles y disponibilidad para
perdonar.

La ansiedad: Es un sentimiento de amenazas, aprehensión, temor e inquietud, cuando la ansiedad se desarrolla

puede afectar nuestro razonamiento, traernos desanimo, quitarnos el gozo y producir un sinnúmero de síntomas
físicos. La preocupación está asociada a la ansiedad, implica temos acerca de problemas reales o imaginarios,
cuando consume nuestro pensamiento nos impide tratar el problema con eficacia. En la Biblia, específicamente en
filipenses 4:6 -7 se nos aconseja no estar afanosos por nada y que debemos depositar nuestra confianza en Dios y
regocijarnos en Él, debemos llevar a Dios todas nuestras preocupaciones él está cerca, nos escucha y nos da paz
que sobrepasa todo entendimiento. Nuestra mente debe concentrarse en cosas que son santas, correctas, puras,
hermosas y buenas, la preocupación debe remplazarse con oración y confianza en Dios.

Dios nos asegura que no importa lo que suceda nosotros tenemos la profunda certeza de que un Dios amoroso y
soberano está en total control y seguirá estándolo hasta el fin, haciendo que cada cosa nos ayude para bien.
Nosotros podemos interesarnos en las personas ansiosas estando con ellas en tiempo de presión, mostrándoles
nuestro interés, orando por ellos con regularidad y recordándoles de lapaz de Dios que Jesús nos da la cual nos
sustenta en tiempos de ansiedad y preocupación.

La soledad: Es un sentimiento de frustración dolorosa y no deseada, es la falta de ayuda y pérdida de contacto con
los demás. Las causas de la soledad son complejas, en ocasiones viene debido a la perdida de alguien, o porque
ahuyentamos a las personas por nuestras actitudes. Sin embargo, también hay que reconocer que las personas
estan solas cuando se alejan de Dios.

La forma de ayudar a alguien que padece soledad es animarlo a acercarse a Dios a Dios a través de Jesús, cuando
confesamos nuestros pecados y le decimos a Dios que creemos en su Hijo, entonces le pertenecemos y su Espíritu
Santo entra en nosotros y tenemos comunión con Dios de tal forma que nunca más nos sentiremos solos.

Resumen de la parte 2

Las crisis nos provocan profundos sentimientos de tensión, trastornos emocionales y confusión

Enfermedades emocionales: No se debe asumir que las personas que tienen alguna enfermedad mental siempre se
comporta en una forma extraña o con una conducta poco usual. Muchas personas que padecen alguna de estas
enfermedades no son muy diferentes del resto de nosotros, excepto por el hecho de que los problemas y las crisis
de la vida los han abrumado y que es difícil para ellos pensar y actuar apropiadamente. Frecuentemente existen
fuertes sentimiento de desánimo, ansiedad, confusión, fracaso, una autoestima baja y frustración debido a que la
persona está abrumada por las presiones de la vida.
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Los consejeros deben estar atentos a los síntomas de los disturbios emocionales, también puede ayudar a la
persona a recibir un tratamiento adecuado, en caso de que haya sido necesario internar u hospitalizar a la persona
un consejero puede visitar a la persona, esta visita debe ser breve, jovial, comprensivo, utilizando la Biblia y la
oración.

Cuando se desarrollan este tipo de enfermedades, muchas familias afrontan una grave crisis, para algunas familias
la crisis hace que se unan más pero en otras causa una fuerte tensión.

Consejería espiritual: Es necesario aconsejar siempre con amor, cuando alguien experimente problemas espirituales
se pueden hacer estas preguntas cuando hay una falta de vitalidad espiritual, ¿Es usted creyente?, ¿Existe algún
pecado?, ¿Está físicamente fuera de forma?, ¿Está usted nutriéndose espiritualmente?, ¿Está sobre alimentado
espiritualmente?, ¿Es usted, legalista super critico?, ¿Es su pensamiento claro?, ¿Existe alguna área de su vida que
necesita equilibrio?, ¿Está utilizando el poder del Espíritu Santo? ¿Es usted muy independiente?

Tratando con el problema de la enfermedad: Las enfermedades graves pueden ser fuente de mucha tensión en la
vida de la persona que está enferma y en la familia. La enfermedad trae consigo ansiedad, frustración e
incertidumbre sobre el futuro. Cuando hay una enfermedad se pasa por tres etapas, el de transición, el de
tratamiento y el de convalecencia.

Consejería con el paciente y la familia: Es muy útil el recordar a los aconsejados que el Medico divino esta consiente
y se interesa por los problemas físicos de sus hijos. Podemos orar por y con la persona involucrada.

Consejería con un niño enfermo: El niño deberá recibir seguridad y no deberá ignorársele, es bueno orar con el niño
y darle seguridad de que Jesús estará ayudándolo mientras está enfermo, los padres enfrentaran emociones
fluctuantes, es necesario el apoyo de la oración y la lectura de la Biblia deberá ser parte importante de la consejería
a los padre y a la familia.

Tratando con el problema de la muerte: Las personas que saben que se van a morir pasan por varias etapas, la
etapa de negación y de aislamiento, la etapa del enojo, la etapa de la negociación entre prolongar la vida o terminar
con el dolor, después llega la depresión y finalmente llega la etapa de la aceptación. La actitud que se tiene ante la
muerte puede ser definida por diferentes factores como la cultura, la familia y la personalidad de la persona, en cada
etapa se puede ver que el paciente muestra una esperanza de mejorar, sin embargo, cuando esta esperanza se va
la muerte está más cercana.

Consejería con la persona que padece una enfermedad mortal: El consejero debe estar accesible así como
interesado, el consejero debería ser flexible para discutir los temores y las frustraciones, para traer consuelo y ánimo
de las Escrituras, para escuchar pacientemente y en ocasiones simplemente para sentarse y escuchar en silencio.
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Resumen de la parte 3

El duelo: Cuando una persona atraviesa por este proceso de duelo, experimenta muchas emociones, incluyendo
pesar, desesperación, ansiedad, culpa, soledad, enojo, confusión, sentimiento de inutilidad, y sentimiento de
perdida, antes del funeral las personas entran en un profundo dolor, llanto, añoranza, autocritica, en este periodo
también momentos de insomnio, perdida del apetito, molestias estomacales, profundo cansancio, irritabilidad,
arranques de enojo. La vida debe continuar y las personas vuelven a sus actividades sin embargo la tristeza
permanece.

Necesidad de la persona en el proceso del duelo: Tienen la necesidad del apoyo de otros, que puedan estar
disponibles para escuchar, compartir y ayudar, la necesidad de aceptar la realidad de la perdida, involucra un largo
proceso.

Consejería con la persona que atraviesa por el proceso del duelo: Los consejeros pueden traer el consuelo de las
Escrituras, traer consuelo en el funeral y pueden guiar a los deudos en el proceso de reajuste. Hay que ser sensibles
y accesibles para ayudar.

La muerte de un niño pequeño: Es necesario hablar con los niños de la muerte, para los niños de todas las edades,
es importante, discutir abiertamente la muerte y dar seguridad de que él, que ha quedado vivo es amado y que se
cuidará de el sin importar lo que suceda.

Tratando con problemas físicos: Una persona con problemas físicos, es aquella cuyo cuerpo posee algún tipo de
impedimento que interfiere con su habilidad para funcionar normalmente en la sociedad. Tienen valor y aun tiene
otras habilidades. Cuando una persona nace con está discapacidad será más fácil, sin embargo, cuando fue algo
repentino, será más complicado. Las personas con este tipo de enfermedades no pueden llevar una vida como los
demás.

Tratando con el alcoholismo: El abuso del alcohol es un problema muy grave, arruina familias, destruye carreras,
debilita la salud y produce accidentes automovilísticos. Hay varias causas del alcoholismo como, la tensión, el medio
y la cultura, personalidad, fisiología, área espiritual y la familia.

Consejería y alcoholismo: No es fácil aconsejar a alguien que tiene alcoholismo ni tampoco a la familia, el proceso
debe ser llevado en oración y guiado con la sabiduría y el poder del Espíritu Santo. Muchas veces el alcoholismo es
porque se quiere llenar un vacío, pero hay que hacerle ver a las personas que este vacío sólo puede ser llenado por
Dios.

Tema de los demonios: La Biblia dice que nuestra lucha no es contra sangre y carne sino contra principados, contra
las autoridades, en contra de los poderes de las tinieblas del mundo, y en contra de fuerzas espirituales malignas en
las esferas celestiales. El consejero que este involucrado en esta clase de ministerio necesita gran sabiduría y poder
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de Dios, además del apoyo que da la oración y poder de Dios, además del apoyo que da la oración de otros
creyentes.

Tratando el asunto del ¿Por qué?: Los caminos de Dios están más allá de de nuestro entendimiento, muchas veces
no sabemos el por qué de las cosas y la respuesta a algunos por qué solamente podrá revelarse cuando veamos a
Cristo cara a cara