Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
S(
OSGRADOEN
CIENCIAS
BIOLÓGICAS
En opción al título de
DECLARACIÓN DE PROPIEDAD
DEDICATORIA
A mis hermanas y hermano que son los otros pilares que forman esta
generación.
•
AGRADECIMI ENTOS
A mis asesores de tesis el Dr. José Luis Hernández Stefanoni y el Dr. Juan
Manuel Dupuy Rada por todos los conocimientos, tiempo, dedicación y apoyo
recibido para la real ización de este trabajo.
Al Dr. Javier Bello Pineda por sus comentarios para el documento final y su valioso
apoyo en el aprendizaje de los modelos para la toma de decisiones.
Al Dr. Rafael Durán García por sus comentarios para el documento final y la
literatura prestada
A la Dra. Luz María Calvo por sus comentarios y prontas revisiones del documento
final.
Al Tec. Filogonio May Pat por su apoyo en campo y sus valiosos conocimientos
sobre la vegetación de la Península de Yucatán.
Al C. Dr. Jorge O mar López Martínez por su amistad y sus críticas acérrimas ...
A mis amigos Violeta , César, Edília, Blanca, Montserrat, Isaac, Sara , Jorge Carlos
y todos los demás compañeros de la Unidad de Recursos Naturales por su
amistad y momentos compartidos en esta etapa ...
•
Índice
Agradecimientos
Listado de abreviaturas VI
Índice de Figuras VIl
Índice de Cuadros VIl
Resumen 1
Abstract 3
Capítulo 1
Introducción 5
Antecedentes 8
Distribución del BoEque tropical seco en el mundo y su importancia ecológica 8
Situación de la vegetación en Yucatán 1O
Planeación del uso del suelo 11
Planeación del uso del suelo a distintos niveles 12
Evaluación de la aptitud del uso del sueb 13
Herramientas para la planeadón del uso del suelo 14
Percepción remota 14
Sistemas de información geográfica y sus aplicaciones en la planeadón del 15
uso del suelo
Análisis multicriterio 16
Justificación 18
Preguntas de investigación 19
Objetivos 20
Objetivo general 20
Objetivos particulares 20
Bibliografía 21
Capítulo 11 25
Introducción 25
Materiales y métodos 27
Área de estudio 27
Planteamiento del problema 28
Planeación del uso del suelo utilizando los SIG 29
Caracterización de los recursos naturales en el paisaje 31
Mapa de coberturas del suelo en el pais'aje 31
Muestreo de la vegetación y suelo en el paisaje 32
Análisis de la estructura y composición de la vegetación 34
Selección de las alternativas de uso del suelo en el paisaje 35
Selección de criteri os para la evaluación de la aptitud del uso del suelo 37
Generación de los mapas de factores 37
Estandarización de los mapas de factores 39
Priorización de los factores 42
Evaluación rn.Jiticriterio de la aptitud del uso del suelo 43
Reclasificación de los mapas de aptitud 43
Evaluación rn.Jitiobjetivo del uso del suelo en el paisaje 44
Construcción de escenarios planeación de uso del suelo 46
Resultados 48
Índice
11
Índice
LISTADO DE ABREVIATURAS
¡¡¡
IV
indice
ÍNDICE DE FIGURAS
V
VI
•
Índice
ÍNDICE DE CUADROS
VIl
•
VIl!
•
RESUMEN
2
•
ABSi RACT
This study uses a GIS-based multi-criteria decision making approach for land use planning
at the landscape level. The study area was a tropical dry forest (TDF) landscape of 22 x 16
km 2 in the South-west of the State of Yucatan, Mexico where different land use interests
converge. A mu lti-criteria evaluation models were used to perform a land sui!abil~y
3
4
•
Capítulo 1
INTRODUCCIÓN
Esta situación es de gran relevancia para las regiones de Mesoamérica y el Caribe por su
alto valor de conservación , tanto para especies silvestres como domesticadas, donde más
del 72% de la superficie del BTS han sido convertidas a usos urbanos y agrícolas (Portillo-
Quintero y Sánchez-Azofeifa , 201 O; Harvey et al. 2008). Por lo tanto , los esfuerzos que
ayuden a mejorar la eficiencia de la utilización de los suelos agrícolas y forestales para la
satisfacción de las necesidades de la creciente pobladón humana son de gran
importancia para el manejo sustentable y la conservación de los BTS (Aiexandratos,
1997).
..
•
Uno de los mayores retos en el manejo del suelo en los trópicos es cómo conciliar la
creciente demanda de productos agrícolas y forestales , mientras se conserva la
biodiversidad , los servicios ecosistémicos y se mantiene la calidad de vida de las
comunidades rurales (Harvey et al., 2008). Estos autores han propuesto el "manejo
integral del paisaje", donde las unidades de producción y de conservación deben ser
manejadas conjuntamente para desarrollar paisajes completos que aseguren el futuro de
la biodiversidad y los niveles de vida de las comunidades rurales. Esta propuesta es
adoptada en este trabajo como punto de partida para el diseño de los usos del suelo en el
paisaje.
La planeación del uso del suelo, debe identificar cuáles áreas deben ser protegidas y
cuáles áreas son las más favorables para permitir el desarrollo, ya que los costos
ambientales asociados al cambio de uso del suelo (para áreas urbanas o agrícolas) son
mayores en los sitios no aptos para estos usos (Fabos, 1979). Esto debido a que el
cambio de uso de suelo altera una variedad de funciones ecosistémicas como la
captación de agua dulce, el mantenimiento de la fertilidad del suelo o la regulación de los
ciclos biogeoquímicos y el clima, y como consecuencia amenaza la biodiversidad al
modificar el hábitat (Defries et al., 2005). Además, el uso inapropiado de los recursos sin
tomar en cuenta su aptitud para las actividades humanas, puede llevar a la degradación
del ambiente con consecuencias directas sobre la seguridad alimentaria , la pobreza , la
migración y otros conflictos sociales (ENMST, 2008; Hossain , 2007). De aquí la relevancia
de realizar una adecuada planeadón del uso del suelo, para que los recursos naturales
sean destinados a los usos más benéficos para el hombre, mientras que al mismo tiempo
se conserven para el futuro (FAO, 1996).
..
•
Capitulo 1
predictivas para evaluar las consecuencias posibles de las decisiones del uso del suelo
antes de su implementación en el paisaje (Hossain et al., 2007; Ceballos y López, 2003a).
Estas herramientas han sido criticadas por su falta de capacidad para apoyar la toma de
decisiones. En respuesta a esta crítica , se ha tratado de extender la tecnología SIG para
explorar y representar los elementos subjetivos de los conflictos entre múltiples usuarios e
integrarlos a los análisis multicriterio (AMC) para la toma de decisiones (Feick y Brent,
2002; Bojórquez-Tapia et al., 2001 ). La integración de los SIG y los AMC ha contribuido a
resolver los problemas de decisión espacial al evaluar una gran cantidad de alternativas
en base a un conjunto de múltiples criterios y objetivos de planeadón muchas veces en
conflicto (Son et al. , 2008; Hossain et al. , 2007; Phua y Manowa, 2005).
7
Capítulo I
AN ECEOENTES
8
Capítulo 1
, .,ill
· ·,-,:~
.....
11 Bosque Tropical Seco ~
Figura 1. Distribución del bosque tropical seco en México, tomado de Miles et al., 2006 .
Los bosques tropicales secos son una fuente importante de recursos para las
comunidades humanas. De ellos se obtiene una gran variedad de productos animales y
vegetales, tanto para el comercio internacional como para las comunidades locales, tales
como alimentos, medicinas, especies aromáticas y combustibles. Además de tener un alto
potencial como sitios de recreación (Mooney et al. , 1995), estos bosques mantienen gran
parte de la productividad primaria neta mundial (Defries et al. , 1999), y cuentan con altos
niveles de diversidad de especies y de endemismos (Gentry, 1995).
Sin embargo, el 97% de las áreas remanentes del BTS se encuentran en riesgo de
desaparecer por múltiples amenazas simultáneas resultantes de las actividades humanas
como la deforestaci ón , la fragmentación, los incendios, el cambio de uso del suelo, el
cambio climático y las altas densidades de población humana (Miles et al., 2006). La
conservación de estos bosques es esencial para asegurar la disponibilidad de agua dulce,
el mantenimiento de la fertilidad del suelo, la protección de los suelos contra la erosión, la
regulación de los ciclos biogeoquímicos y el clima , y el mantenimiento de la biodiversidad
(Defries et al. , 2005); además de que las comunidades locales podrían beneficiarse de
formas alternativas de ingreso como el ecoturismo o el pago por servicios ambientales
(Portillo-Quintero y Sánchez-Azofeifa, 201 0).
9
•
apitulo 1
10
Capítulo 1
Cuadro 1. Extensión territorial de los distintos tipos de coberturas del suelo en el estado de
Yucatán , tomado de Durán y Contreras (201 O) .
Tipos de vegeta ción Hectáreas %
Agricultura de riego 33 753.44 0.86
Agricultura de temporal 883 910.16 22.51
Asentamiento humano
Blanquizal
44 253.13
12 519.04
. 1.13
0.32
Cuerpo de agua 12 381.70 0.32
Manglar 115 863.92 2.95
Pastizal inducid o 865 912.80 22.05
Pastizal inundable 42 764.47 1.09
Selva baja caduc ifolia 181158.20 4.61
Selva baja caduc ifolia con vegetación secundaria 622 578.58 15.85
Selva baja inundable 1 293.70 0.03
Selva baja inundable con vegetación secundaria 10 842.22 0.28
Selva mediana s ubcaducifolia 336 838.05 8.58
Selva mediana s ubcaducifolia con vegetación secundaria 649191.16 16.53
Selva mediana s ubperennifolia 67 100.58 1.71
Selva mediana s ubperennifolia con vegetación secundaria 40 289.98 1.03
Vegetación de duna costera 6 594.37 0.17
3 927 245.49 100
La planeadón del uso del suelo es un problema de decisión , en el que los tomadores de
decisiones deben encontrar el patrón de utilización del territorio que permita ubicar las
alternativas de uso de suelo en aquellos lugares donde se maximice la aptitud para su
desarrollo, pero al mismo tiempo se promueva la disminución de los conflictos entre los
usos (SEMARNAT, 2006).
Los objetivos de esta planeación , son los que definen cuál es "el mejor'' uso del suelo para
un territorio y estos deben ser especificados desde el principio de cualquier proyecto de
planeadón . Estos objetivos pueden ser agrupados dentro de tres apartados: i) eficiencia,
ii) equidad y aceptabilidad y iii) sustentabilidad (FAO , 1996).
11
Capitulo 1
La planeación en pro de la efi ciencia, busca realizar el uso más eficiente y productivo del
suelo , al hacer coincidir los diferentes usos del suelo con las áreas que producirán los
mayores beneficios al menor costo. La planeación para la equidad y aceptabilidad busca
proponer mejoras y una redistribución de los usos del suelo para reducir la inequidad o,
alternativamente para atacar la pobreza. La planeación para la sustentabilidad, busca la
combinación entre la producción de bienes que requiere la gente y la conservación de los
recursos naturales de los cuales depende la producción, para asegurar una producción
continua para el futuro (FAO, 1996).
La planeación del uso del suelo se realiza en tres grandes niveles, nacional, distrital y
municipal, que no necesariamente mantienen una secuencia para su implementación ,
pero corresponden a los niveles de gobierno en los cuáles se toman las decisiones sobre
el uso del suelo. Estas decisiones, al igual que los métodos y tipos de planes utilizados,
son distintas en cada nivel de planeación. Sin embargo, en cada nivel son necesarias las
estrategias de uso del suelo, las políticas que indiquen prioridades de planeación, los
proyectos que hagan frente a estas prioridades y los planes operacionales que permitan
llevar a cabo el trabajo (FAO, 1996).
12
...
Capítulo 1
La planeación del uso del suelo debe estar basada en el entendimiento tanto del entorno
natural, social y económico del área a ordenar, así come;> en los tipos de usos del suelo
que se van a considerar. La evaluación del uso del suelo es una parte del proceso de la
planeación y una de sus funciones es revelar este entendimiento y presentar a los
planeadores información relevante sobre los principales requerimientos, así como la
identificación y delimitación de los tipos de uso del suelo presentes en el área para las
etapas subsecuentes de la planeación (FAO, 1985).
13
Capítulo 1
La evaluación del uso del suelo, se refiere al análisis del desempeño del suelo cu ando es
utilizado para ciertos propósitos específicos. Esto involucra el análisis de factores como el
clima, el suelo y la vegetación entre otros, en términos de los requerimientos de las
formas alternativas de uso de suelo a considerar. Este proceso no determina por sí mismo
los cambios en el uso del suelo que deben llevarse a cabo , pero provee información
básica para la toma de decisiones sobre cuál es el mejor uso para determinado suelo y
dónde están los mejores suelos para ese uso (F AO , 1985).
14
Capítulo 1
Esto permite la obtención de información sobre áreas extensas e inaccesibles para los
seres humanos a un menor costo, la posibilidad de actualizar la información en cualquier
momento y la disponibilidad de esta información en diferentes resoluciones espectrales,
espaciales y temporales.
.
sensor puede registrar, una mayor resolución espectral en el sensor permite mejorar la
probabilidad de que un objeto pueda ser detectado y analizado, ya que ciertas regiones o
bandas del espectro electromagnético son mejores que otras para obtener información de
ciertos parámetros biofísicos. La resolución espacial , se refiere al tamaño del pixel
observado, una mayor resolución espacial en el sensor permite la identificación y la
obtención de información de objetos o áreas de distintos tamaños, desde unos metros
como en el caso de los sensores SPOT (1 O m) a kilómetros como el caso de los sensores
MODIS (1 000 m). La resolución temporal, se refiere a la frecuencia en la el sensor
adquiere los datos, una mayor resolución temporal permite obtener información de
variables o fenómenos en varias épocas del año y analizar cómo las variables cambian en
un tiempo más corto (Jensen, 1996).
Los SIG se pueden definir como sistemas de software que proveen las siguientes
capacidades para el manejo de datos espaciales: 1) ingreso de datos (conversión de
información espacial a un formato digital y una estructura compatible con los SIG); 2)
manejo de datos (almacenamiento y recuperación de la información); 3) análisis de datos
15
•
Capitulo I
Las aplicaciones de los SIG han sido frecuentemente utilizadas para producir nueva
información mediante la combinación de información de diferentes fuentes y el análisis de
la información existente. La modelación espacial , especialmente la modelación
cartográfica, ha sido utilizada cuando se busca identificar las áreas óptimas para
determinado uso del sueb (Hossain et al., 2007) o para alguna especie de interés (Store y
Kangas, 2001). El objetivo de esta modelación cartográfica es localizar el área o áreas
donde coinciden determinados criterios; sin embargo, a pesar de la capacidad de los SIG
para combinar un gran número de factores, este proceso no toma en cuenta que no todas
las variables analizadas tienen la misma importancia para un determinado objetivo
(Ceballos y Blanco, 2003b).
Además, muchos problemas sobre las decisiones del uso del suelo , son lo
suficientemente complejos y controversiales en su naturaleza, que su solución requiere no
solamente con ocimiento, experiencia e información de distintas fuentes, sino del debate
de múltiples puntos de vista , objetivos y estrategias de solución , muchas veces en
conflicto (Feick y Brent, 2002). A pesar de la capacidad de la tecnología de los SIG para
examinar una gran variedad de aspectos sobre el uso del suelo, ésta ha sido criticada por
su falta de capacidad para apoyar la toma de decisiones; particularmente la incapacidad
para facilitar el debate y la obtención de consensos han sido identificados como algunas
de las principales debilidades de esta tecnología . En respuesta a esta crítica , se ha
tratado de extender la tecnología SIG para explorar y representar los elementos subjetivos
de los conflictos multicriterio, e integrar éstos a las ·herramientas de los análisis
multicriterio (AMC) para el soporte de la toma de decisiones (Feick y Brent, 2002;
Bojórquez-Tapia et al., 2001).
ANÁLISIS MULTICRITERIO
Los anál isis multicriterio han auxiliado a los planeadores regionales y urbanos en la
solución de los conflictos de intereses por el uso del suelo , ya que permiten hacer
elecciones informadas y objetivas, considerando diferentes preferencias sociales y
necesidades de desarrollo o conservación (Malczewski y Jackson, 2000).
16
•
Cap itulo 1
17
•
apitulo 1
JUSTIFICACIÓN
La presión sobre los suelos forestales se intensificará cada vez más conforme la demanda
de productos, bienes y servicios agrícolas continúe aumentando con el crecimiento
poblacional y el desarrollo económico, provocando que más suelos forestales sean
convertidos a suelos agrícolas o urbanos. Las tasas de deforestación en las zonas
tropicales son mucho más altas, que la que se requerirían bajo un buen manejo del
proceso de expansión agrícola. Por lo tanto , los esfuerzos que ayuden a incrementar la
eficiencia en la conversión del uso del suelo a otros usos son de gran importancia para el
manejo y conservación de los recursos naturales (Aiexandratos, 1997). Con el fin de
contribuir a resolver esta problemática, el presente trabajo pretende contribuir a la
planeación integral del uso de suelo en un paisaje de BTS al sur del Estado de Yucatán ,
mediante una caracterización detallada de los recursos biofísicos (suelo , vegetación y
topografía) del paisaje, la utilización de modelos descriptivos, de evaluación y toma
decisiones, que permitan ubicar los usos del suelo en los sitios más benéficos para su
desarrollo y se desarrollen patrones de ocupación del paisaje que contribuyan al manejo
integral del paisaje y la disminución de conflictos entre los usos del suelo.
18
Capítulo 1
PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN
•:• ¿Cuáles son los usos del suelo más relevantes en el paisaje?
•:• ¿Cuáles son los criterios más relevantes para determinar la aptitud del uso del
suelo en el paisaje?
•:• ¿Dónde se ubican los mejores suelos en el paisaje para cada alternativa de uso?
•:• ¿Cómo están distribuidos los suelos en el paisaje en base a sus potencialidades y
limitaciones?
•:• ¿Cuáles son y dónde se ubican los conflictos por el uso del suelo en el paisaje?
•:• ¿Cuál podría ser el mejor patrón de ocupación del paisaje, que contribuya a la
disminución de conflictos entre los usos del suelo y el uso sostenible de los
recursos?
19
•
Capítulo 1
OBJETIVOS
OBJETIVO GENERAL
El presente trabajo pretende contribuir a la planeadón integral del uso del suelo en un
paisaje de BTS del sur del Estado de Yucatán, mediante la caracterizaGión detallada de la
vegetación y el suelo , la utilizadón de modelos descriptivos, de análisis y de toma de
decisiones, para obtener información básica y articular esquemas metodológicos que
contribuyan a generen productos relevantes para los tomadores de decisiones que
ayuden a guiar las decisiones sobre el uso del suelo en el paisaje.
OBJETIVOS PARTICULARES
3. Estimar la distribución espacial de la aptitud potencial para los diferentes usos del
suelo en el área de estudio.
4. Identificar y describir los principales conflictos por el uso del suelo encontrados en
el paisaje.
20
•
Capitulo 1
81 BLIOG RAFIA
Alexandratos, N. (1997) Pressures on the environment from agriculture, en: World
Agriculture: Towards 201 O, Alexandratos, N. (ed). Food and Agriculture Organization
of the United Nations and John Wiley and Sons. Great Britain. pp. 350-365 .
Fabos, G. J. (1979) Planning the total landscape: A guide to intelligent land use. Westview
Press. Colorado , United States of America. pp. 61-77.
Feick, R. D., y H. G. Brent (2002) Balancing consensus and conflict with a GIS-based multi-
participant, multi-criteria decision support tool. Geo Journal 53, 391-406.
21
ap{tulo l
Food and Agriculture Organ ization of the United Nations, 1985. Guidelines: Land evaluation
for irrigated agriculture , FAO Development series 1. (Seleccionando los encabezados
del boletín) [Online] (Actualizado 201 O)
Dispon ible en: http://www.fao.org/docrep/X5648E/x5648e00.htm
[Acceso 11 Febrero 2011]
Food and Agricu~ure Organization of the United Nations, 1996. Guidelines for land use
planni ng, FAO Soils Bulletin 55. (Seleccionando los encabezados del boletín) [Online]
(Actualizado 201 O)
Dispon ible en: http://www.fao.org/docrep/T0715E/t0715eOO.htm
[Acceso 11 Febrero 2011]
Gentry, A. H (1995). Diversity and floristic composition of neotropical dry forest, en:
Seasonally Dry Tropical Forest, Bullock, S. H., H. A. Mooney, E. Medina (eds).
Cambridge University Press. Great Britain. pp. 146-190.
Janzen, D. (1988) . Tropical dry forests: The most endangered majar tropical ecosystem. en:
Biodiversity, Wilson, E.O. (ed). National Academy of Sciences/Smithsonian lnstitution,
Washington, OC. pp. 130-137.
Lawrence, D. y D. Foster (2004). Recovery of nut rient cycling and ecosystem properties
followi ng swidden cultivation : regional and stand-level constraints, en: lntegrated Land-
Changes Science and Tropical Deforestation in the Southern Yucatan , Turner 11, B. L. ,
J. Geoghegan, D. R. Foster (eds) . Oxford University Press. New York. pp. 81-104.
22
Capítulo 1
Miles, L. , C. A. Newton, R.S. Defries, C. Ravilious, l. May, S. Blyth, V. Kapos y J.E. Gordon
(2006). A global overview of the conservation status of tropical dry forest. Journal of
Biogeography, 33, 491-505 .
Miller, K. , E. Chang, y N. Johnson (2001). Defining common ground for the Mesoamerican
Biological Corridor. World Resource lnstitute. Washington, D.C. 43 p.
Murphy, P.G . y A. E. Lugo (1995). Dry forest of Central America and the Caribbean. en:
Seasonally Dry Tropical Forests, Bullock, S.H., H. A. Mooney y E. Medina. (eds).
Cambridge University Press. Cambridge. pp. 9-34.
23
apítulo 1
Treja, l. y R. Dirzo (2000). Deforestation of seasonally dry tropical forest: a national and local
analysis in Mexico. Biological Conservation, 94, 133-142.
Vandermeer, J. y l. Perfecto (2007). The agricultura! matrix and future paradigm for
conservation. Conservation Biology, 21, 274-277.
24
•
Capítulo JI
INTRODUCCIÓN
Desde las perspectiva de los AMC, la planeación del uso del suelo es un problema de
decisión donde los tomadores de decisión deben encontrar el patrón de utilización del
territorio que permita a las alternativas de uso de suelo ubicarse en aquellos sitios donde
se maximice la aptitud del suelo para el desarrollo de las alternativas pero , al mismo
tiempo se promueva la disminución de conflictos entre las alternativas y el uso sostenible
de los recursos naturales (SEMARNAT, 2006).
25
Capitulo JI
Los sistemas de información geográfica (SIG) han surgido como poderosas herramientas
para la manipuladón y análisis de grandes volúmenes de información estadística, espacial
y temporal, necesaria para generar de forma flexible, versátil e integrada productos como
mapas y reportes necesarios para las tomas de decisiones sobre el uso del suelo (FAO,
1997). La integración de los AMC junto con los enfoques basados en los SIG, ha
permitido a los tomadores de decisiones tomar decisiones más informadas y objetivas,
para diversas aplicaciones como para la evaluación de zonas de riesgo a incendios (Chen
et al. , 2001), la modelación del hábitat (Store y Kangas, 2001), la selección de sitios para
la conservación (Phua y Manowa, 2005), la evaluación del aptitud del suelo (Ceballos y
Blanco, 2003b) o la planeadón del uso del suelo (Son et al., 2008) entre otras.
Es por esto que, el presente trabajo pretende contribuir a la planeación integral de los
usos del suelo en un paisaje de bosque tropical seco del sur de Yucatán , med iante el
desarrollo de modelos espaciales descriptivos, de análisis y toma de decisiones que se
constituyan en un insumo para la planeadón de los usos del suelo en el paisaje.
26
•
Capítulo JI
MATERIALES Y MÉTODOS
ÁREA DE ESTUDIO
27
apitulo JI
2
Figura 2. Localización del área de estudio y vista panorámica del paisaje (22 x 16 km ) en la época
de lluvias.
El área de estudio es un paisaje forestal donde confluyen diferentes intereses sobre el uso
del suelo, tales como la agricultura, el aprovechamiento de productos forestales no
maderables y la conservación. El crecimiento demográfico y socio-político de la región
podría llevar a un aumento en la necesidad de destinar mayores superficies forestales
para usos agrícolas o urbanos. Una intensificación del uso del suelo para las actividades
agrícolas ejercerá una mayor presión sobre los suelos forestales de mayor edad en el
paisaje, necesarios para mantener el rendimiento agrícola y la cantidad y calidad del
producto forestal. Esta situación hace necesario plantear una estrategia de uso del suelo
que busq ue lograr un balance entre los usos del suelo agrícola y de conservación .
Por lo que, el presente trabajo pretende contribuir al manejo integral del paisaje, mediante
el manejo conjunto de las unidades de producción y conservación, a través la evaluación
de la aptitud del uso del suelo para las diferentes alternativas de uso consideradas; junto
con un ejercicio de asignación de los usos del suelo que permita ubicar a las alternativas
en aquellos lugares donde se maximice la aptitud para su desarrollo, mientras al mismo
tiempo se conserven los recursos naturales para el futuro .
28
•
Capítulo 11
Los trabajos sobre la evaluación de la aptitud del uso del suelo se basan en una serie de
procedimiento lógicos, que incorporan un conjunto de datos espaciales relacionados con
los SIG y modelos computacionales que permiten alcanzar múltiples aplicaciones para la
gestión de los recursos naturales y la planificación de sus usos (FA-O, 1997). El
procedimiento general basado en la utilización de los SIG para ,la planeación del uso del
suelo en el paisaje se ilustra en la figura 3.
29
Capitulo 11
En el sexto paso los criterios, factores y sus prioridades son combinados a través de
métodos de combinación lineal para producir los mapas de aptitud para cada sector. En el
último paso , los mapas de aptitud obtenidos son utilizados como insumas para los
modelos multiobjetivo en la optimización de los usos del suelo, con la participación de los
usuarios y expertos para definir los objetivos, prioridades y otras variables que permitan
obtener el patrón ór:;timo de ocupación del paisaje.
Mapas n
criterios 3) Construcción de mapas temáticos
espaciales Clasificación de imágenes
Métodos de interpolación
Dig italización de vectores
Mapas de
!
l
6) Análisis multi-criterio (AM C)
aptitud por
alternativa - • Métodos de combinación lineal (CLP)
[
• Mapas de aptitud (0-255)
Y Evaluación de resultados
Figura 3. Diagrama de flujo para la planeación del uso del suelo utilizando los SIG , modificado de
Van der Merwe (1997). Los números representan las principales etapas en el procedimiento de la
planeación .
30
Capítulo JI
Como parte de un proyecto más amplio (Dupuy et al., 2011), la información sobre la
extensión, distribución y caracterización de los recursos (vegetación y suelo) en el paisaje,
se obtuvo mediante la obtención de información directa de campo, así como a través del
análisis de diversas fuentes información auxiliar como imágenes de satélite, modelos de
elevación digital y mapas topográficos de la región .
31
•
Capitulo JI
32
•
Capítulo 11
• Agrleu~ura
D VS1
· • VS2
• VS3
• VS4
• Urbano y caminos
a Parcela de muestreo
33
Capítulo JI
Para caracterizar las condiciones locales del suelo, se tomaron tres submuestras (aprox.
400 gr) de los primeros 1O cm del suelo, en el norte, centro y sur de las parcela (Figura
5d) . Una vez en el laboratorio de Ecología del CICY, las submuestras fueron secadas en
una estufa de secado durante 48 hrs. Posteriormente las tres submuestras de cada sitio
fueron homogenizadas a mano en una sola muestra compuesta y tamizadas con una
malla de 2 mm para retirar ramas, raíces y piedras y finalmente obtener una muestra de
300 gr.
34
•
Capítulo II
En donde:
Para evaluar las diferencias entre las clases de vegetación en cuanto su estructura , se
realizaron ANOVAs de una vía y las pruebas post-hoc de Tukey para las variables: altura
del dosel (altura promedio de los 1O individuos más altos), área basal (m 2 ha-\ densidad
de tallos(# de individuos ha-1) y densidad de especies(# de especie por sitio) .
Se seleccionaron cuatro alternativas de uso para la evaluación y planeación del uso del
suelo en el paisaje: 1) agricultura tradicional; 2) agricultura mecanizada; 3)
aprovechamiento forestal no maderable; 4) uso de conservación. Estas alternativas se
seleccionaron, debido a que representan las principales formas de aprovechamiento de
los recursos naturales en el paisaje y de las cuales las comunidades locales obtienen una
gran variedad de productos que son parte del ingreso familiar. Otras alternativas de uso
de suelo como la ganadería, no fueron tomadas en cuenta para la evaluación del uso del
suelo, debido a que son pocos los pobladores que la practican y no se realiza de forma
extensiva.
35
Cap ítulo JI
Estas altern ativas son consideradas como los objetivos particulares de personas,
organizaciones o instituciones con respecto al uso del suelo en el paisaje, que presentan
una serie características ecológicas, técnicas, socioeconómicas y culturales que las
diferencian e influyen en el desarrollo de estas (Hernandez-X et al., 1995), las cuales se
describen a continuación:
36
•
Cap ítulo II
La selección de los criterios y factores para la evaluación de la aptitud del suelo, se realizó
mediante una revisión de literatura y la consulta de expertos. En este trabajo, se
consideró como "expertos" a aquellas las personas cuyo trabajo o profesión se enfoca o
está relacionado con los aspectos técnicos o científicos de la implementación de las
alternativas de uso del suelo. Esta consulta se realizó a través de. entrevistas informales
con nueve expertos de diferentes áreas de conocimiento (agronomía , ecología , manejo
forestal, conservación); así como con seis agricultores (>40 años) de las comunidades,
para obtener información sobre los criterios y factores más relevantes para el desarrollo
de las alternativas.
Un criterio se defi ne como un aspecto del manejo forestal o agrícola, que se considera
importante y sobre el cual el manejo sustentable del bosque será evaluado . Los criterios
son acompañados por un conjunto de indicadores que describen el estado o situación que
debe ser alcanzado para el manejo sustentable del bosque. Un indicador se define como
un atributo cualitativo, cuantitativo o descriptivo, que cuando es medido o monitoreado
periódicamente indica la dirección del cambio en un criterio (ITTO, 2005). En este trabajo
los términos factor o indicador son utilizados como sinónimos para señalar los atributos
ambientales sobre los cuales se llevará a cabo la evaluación del uso del suelo.
El propósito de la planificación del uso del suelo, es separar áreas con similares
potencialidades y limitaciones para el desarrollo de las alternativas de uso del suelo. Esta
zonificación divide a la superficie de estud io en unidades más pequeñas, en base a
combinaciones de suelo, fisiografía y características climáticas. Las unidades
cartográficas o unidades de mapeo (UM) son definidas como áreas suficientemente
homogéneas con respecto a una característica evaluada , son representadas por clases
únicas, y se consideran lo mismo no importando donde se encuentren localizadas (FAO,
1985).
37
Capitulo JI
*Nota : Superficie total en el paisaje, sin contar el 5% (1 ,735 ha) correspondiente a las superficies
de las coberturas de agricultura y uso urbano.
38
Capítulo JI
Los mapas de distancia a los factores antrópicos, fueron obtenidos por medio de la
digitalización de los poblados y caminos para la obtención de los mapas vectoriales y la
utilizando el módulo DISTANCE. Este módulo calcula la distancia entre una celda y el
objeto más cercano (poblados, carreteras, pozos, etc.) (Eastman, 2003).
Los mapas de las restricciones del modelo se obtuvieron mediante la creación imágenes
booleanas utilizando el módulo RECLASS, para señalar aquellas áreas que no deben ser
consideradas en la evaluación. En este caso, se excluyó a las áreas agrícolas y urbanas,
debido a que las áreas urbanas ya no están disponibles para otros usos del suelo y en el
caso de las áreas donde se lleva actualmente la agricultura en el paisaje, no se contó con
información de las propiedades del suelo en estos.
39
Capítulo JI
En esta etapa es necesario realizar una distinción entre los factores de beneficio y costo,
ya que otro de los objetivos de estas funciones es la maximización o minimización de la
aptitud de cada factor. Los factores de beneficio , son aquellos en los cuales al
incrementar el valor de factor, incrementa el beneficio para el nosotros; por lo que se
utilizan fu nciones de forma monotónicamente crecientes. Los factores de costo, son
aquellos en los cuales al incrementar el valor del factor, disminuye el beneficio, por lo se
utilizan fu nciones de forma monotónicamente decrecientes (Malczewski, 1996). En
ambos casos se utilizaron funciones de de tipo sigmoidal y lineal para modelar el
comportamiento de los factores, ya que estas son las más comúnmente utilizadas
(Eastman , 2003) , excepto en el caso del pH que se utilizó una función de tipo de forma de
J, para reflejar un punto óptimo en el comportamiento de esta variable.
40
Capítulo JI
Cuadro 3. Forma, tipo y puntos de control (PC) de las funciones de pertenencia utilizada ~ para la
estandarización de los factores para la agricultura trad icional.
Factor Forma Tipo PCa PCb PCc PCd Pesos
pendiente mono decreciente sigmoidal 6 10 0.062
pedregosidad mono decreciente sigmoidal 10 15 0.058
índice de estructura mono creciente sigmoidal 10.3 25.5 0.268
fósforo mono creciente sigmoidal 2.2 9.9 0.132
materia orgánica mono creciente sigmoidal 5.5 40.3 0.239
pH simetrica forma de J 6 6.5 7.0 7.5 0.072
dist_poblados mono decreciente linear o 13000 0.091
dist_cam1 mono decreciente linear o 12000 0.028
dist cam2 mono decreciente linear o 11000 0.050
Cuadro 4. Forma, tipo y puntos de control (PC) de las funciones de pertenencia utilizadas para la
estandarización de los factores para la agricultura mecanizada.
Cuadro 5. Forma, tipo y puntos de control (PC) de las funciones de pertenencia utilizadas para la
estandarización de los factores para el AFNM .
41
•
apltulo JI
Cuadro 6. Forma, tipo y puntos de control (PC) de las funciones de pertenencia utilizadas para la
estandarización de los factores para el uso de conservación .
En esta etapa se utilizó el software "Expert Choice™ para Windows_9.047B" (EC) para
desarrollar las matrices de comparación de criterios y la obtención de las prioridades, ya
que este software ofrece interfaces gráficas amigables para la realización de estas
actividades.
42
•
Cap ítulo JI
Una vez obtenidos los mapas de factores estandarizados, las prioridades de cada factor y
las restricciones del modelo, se utilizó el módulo Decision Wizard en IDRISI para obtener
los mapas de aptitud de cada alternativa. Este módulo utiliza el método de la combinación
lineal ponderada (CLP) para integrar los diferentes mapas estandarizados, multiplicando
el valor de cada factor por su prioridad y luego sumando los resvltados para producir un
solo valor de aptitud , mediante la siguiente fórmula:
Donde:
A= aptitud
Una vez obtenidos los mapas de aptitud, estos son multiplicados por los mapas de
restricciones para excluir las áreas del paisaje que no deben ser consideradas en el
análisis. El resu ltado es un mapa donde se puede observar el valor de aptitud de cada
sitio (pixel) para cada alternativa en un gradiente de aptitud de O a 255, de las zonas no
aptas (O) a las zonas más aptas (255) (Malczewski , 1996).
Los mapas de aptitud son obtenidos en una escala continua de aptitud; sin embargo,
estos presentan diferentes rangos de los valores aptitud para cada alternativa. Para
eliminar los efectos de los distintos rangos de aptitud y permitir las comparaciones de los
valores de aptitud entre las alternativas, los mapas de aptitud fueron reclasificados en
niveles iguales de aptitud (Chen et al., 2001 ; Ceballos y López, 2003b).
43
•
apítulo 11
En este caso, los rangos de aptitud de cada alternativa fueron expresados en diferentes
niveles de aptitud, dividiendo la escala de aptitud original en cinco intervalos iguales
(Cuadro 7).
44
•
Capítulo JI
En el diseño de un patrón óptimo de ocupación del uso del suelo que permita el manejo
integral del paisaje, se utilizó el módulo MOLA de IDRISI. Este módulo emplea técnicas de
optimización lineal para encontrar una solución heurística que maximice la aptitud del
suelo en el paisaje. El primer paso para la solución del problema multiobjetivo, es la
jerarquización de los pixeles en los mapas de aptitud utilizando el módulo RANK en
IDRISI. Esta jerarquización se realizó en forma descendente, para que el pixel con la
mayor aptitud obtenga el un valor de 1. Esta ordenación tiene el objetivo de que en caso
de que el modelo se encuentre con un pixel con el mismo nivel de aptitud para más de
una alternativa , el modela resuelva el conflicto examinando el valor del pixel en un
segundo mapa jerarquizado en orden ascendente. Esto permite que los pixeles con la
mayor se mantengan para la segunda alternativa. La selección de esta segunda imagen
para la resolució n de conflictos , se decidió mediante la observación del nivel conflicto que
existe entre las alternativas.
El problema de la asignación de los usos del suelo en el paisaje, se puede resolver desde
la perspectiva de objetivos complementarios u objetivos en conflicto (Bello-Pineda et al.,
2006; Eastman, 2003). En este trabajo este problema de decisión se abordó desde la
perspectiva de objetivos en conflicto, con el objetivo de conocer cómo se modifica el
patrón de uso del suelo en una situación hipotética en la que todas las alternativas del uso
del suelo representan objetivos e intereses particulares y se encuentran en competencia
por el uso del suelo en el paisaje.
45
apitulo JI
El procedimiento de los análisis multiobjetivo y los SIG pueden ser utilizados para explorar
las relaciones entre los recursos y lo posibles usos del suelo , dentro del contexto conocer
distintos patrones de ocupación del paisaje y estimar el impacto de tales modelos
'
territoriales sobre los recursos naturales. La generación de posibles escenarios futuros en
el paisaje son una de las formas con que estas relaciones pueden ser exploradas (FAO ,
1997).
Estos escenarios buscan simular los objetivos e intereses de tres distintos tomadores de
decisión en el paisaje. El primer escenario simula un tomador de decisiones interesado en
maximizar la eficiencia de las áreas prioritarias de conservación del BTS, con el objetivo
de mantener el 95% del total del paisaje bajo alguna cobertura forestal y destinar
solamente un 5% para las alternativas productivas. En este escenario se le otorgó mayor
prioridad al uso de conservación y al AFNM, por considerar a esta última como una
actividad de bajo impacto (Cuadro 8).
46
•
Capítulo JI
En el segu ndo escenario se pretende obtener una solución más equilibrada , en la cual el
50% del total del paisaje es destinado a las alternativas productivas y el otro 50% a las
alternativas de menor impacto. En este escenario, se le otorgó la misma prioridad a todas
las alternativas (Cuadro 8).
47
•
Capítulo JI
RESULTADOS
La clase de vegetación con mayor extensión en el paisaje, fue la clase de vegetación VS3
>15 años en zonas planas con 11,743.6 ha (31 .5% del total del paisaje), seguida de la
clase de VS4 >15 años en cerros con 10,556.6 ha (28.3% del total del paisaje). Las clases
de vegetación con menor extensión en el paisaje, fueron las clases VS1 (3-8 años) con
6,751 .9 ha (18.1% del paisaje) , y la clase VS2 (8-15 años) con 6,455.5 ha (17.3% del
paisaje) . Estos resultados muestran que aproximadamente 22,300 ha (60% del paisaje)
aún se encuentra bajo alguna cobertura >15 años, mientras que 13,207 ha (35% del
paisaje) presentan una cobertura forestal menor de 15 años de abandono.
En este mapa se observar que existe diferentes zonas el paisaje que presentan distintos
niveles de fragmentación de las coberturas forestales , observándose una mayor
fragmentación en las áreas aledañas a los poblados y zonas con menor grado de
fragmentación en los extremos más alejados del paisaje; también se puede observar, que
el paisaje cuenta con una extensa red caminos (carreteras y terracerías) que dan acceso
a una gran cantidad de sitios a lo largo de todo el paisaje (Figura 7).
48
Capítulo JI
La precisión total de la clasificación previa a la aplicación del filtro fue 75.6% y un índice
de Kappa de 0.7. Esta clasificación permitió identificar las diferentes coberturas y usos del
suelo considerad as, aunque no todas con la misma precisión. En el cuadro 9, se puede
observar que las coberturas mejor clasificadas fueron las clases de agropecuario y
urbano, seguido de las coberturas VS1 y VS4, mientras que las cob~rtura que
presentaron la menor clasificación fueron la VS2 y VS3 respectivamente.
49
235000
•
Simbología
Coberturas del uso de suelo
. . Agricultura
. . Zonas Urbanas
@ Poblados
~ Caminos
W*E S
3 O 3 Kilometros
Figura 7. Mapa de coberturas del uso del suelo y principales rasgos culturales en el paisaje, modificado de Hernández-Stefanoni et al.
(201 0) .
50
•
Capítulo 11
4%
6%
9%
• Fabaceae • Bignoniaceae • Rubiaceae • Euphorbiacea
• Boraginaceae • Malpighiaceae • Malvaceae • Otras< 3%
De las 186 especies registradas en el muestreo, el 13% (24 especies) fueron endémicas
para la península de Yucatán de acuerdo con Durán y colaboradores (2000). El 20% (38
especies) son utilizadas como leña o para la construcción de las viviendas tradicionales
mayas de acuerdo con Kantún-Balam (2005) (Anexo 2). Sin embargo, muchas de estas
especies tienen reportados otros usos (medicinal, curtiente, forraje, etc.) para las
comunidades además de los considerados en este trabajo (Ortega, 1997).
51
Capitulo JI
En cuanto al valor de importancia relativa, nueve especies de árboles tuvieron los cinco
mayores valores del VIRen cada clase de vegetación . Mimosa bahamensis (Fabaceae),
Caesalpinia gaumeri (Fabaceae) , Lysiloma latisiliquum (Fabaceae), Lonchocarpus xuul
(Fabaceae), Piscidia piscipula (Fabaceae), Neomisllpaughia emarginata (Poligonaceae),
Gymnopodium floribundum (Poligonaceae), Bursera simaruba (Burseraceae) y Thouinia
paucidentata (Sapindaceae) (Figura 9).
Cuando se analizó la composición de las especies que representan el 80% del VIR
acumulado en cada clase de vegetación, se observaron algunos patrones respecto a la
dominancia de algunas especies en las clases de vegetación tales como: 1) especies
cuya dominancia aumenta con la edad sucesional: B. simaruba, G. floribundum, T.
paucidentata; 2) especies que disminuyen su dominancia con la edad sucesional : N.
emarginata, M. bahamensis, Croton reflexifolius; 3) especies que no muestran un patrón
claro con la edad sucesional: C. gaumeri, Diospyros anisandra, L. xuul (Figura 9).
1 2 3 4 S 6 7 8 9 W 11 12 U " B H 17 18 ~ 20 21 22 n M 25 1234S6789WllUUMUHV~UWHUHHU~U~~
.
1) Burse ra simaroba 2) Gymnopodiumnoribundum
25 2) Gymnopodiumfloribundum ~ 25 3} LysilomalaOsiliquum
3) Lysi/oma latisiliquum 4} Bursera simamba
20
15
4) Neomillspaughia emarginata
5) Piscidia piscipula
6) Lonchocarpusxuul
.
~ 20
.S
.il 15
~
5} Thouinia paucidentata
6} Diospyros cuneata
7} Diospyros anisandra
7) Caesalpiniagaumeri
8} Acacia gaumeri
8) Psidium sartorianum ~ 10 9} Neea psychotrioides
10 9) Eugenia axillaris
1O) Thouinia paucidentata 8. 1O} NeomiHspaughia ema~ginata
.É S
1 2 3 4 S 6 7 8 9 10 11121314 15161718192021222324252627282930313233
Figura 9. Valor de importancia relativo para las especies que representan el 80% del VIR
acumulado en cada clase de vegetación .
52
Capítulo JI
Los análisis de varianza permitieron observar diferencias entre las clases de vegetación
en todas las vari ables estructurales analizadas (altura del dosel: F3, 167 = 78.19, P < 0.001;
área basal : F3, 16 7 = 57 .57 , P < 0.001; densidad de tallos: F3, 167 = 11.63, P < 0.001 ;
densidad de especies: F3, 167 = 24.88, P < 0.001). Todas las variables analizadas, excepto
la densidad de tallos, mostraron un aumento con la edad sucesional (Figura 10).
;;..t::.
K e.
.t::.
¡;,
-¡¡
::1:
..
!
r
..
.t::.
.
~ Gl
uGl
)(
,; .,
Q.
'ti ci
.!: z
ci
z
Vegetation class
Figura 10. Comparación de las variables de estructura entre las clases de vegetación : 1) VS1 3-8
años; 2) VS2 8-15 años; 3) VS3 >15 años en plano; 4) VS4 >15 años en cerros. Las letras
representan las diferencias significativas de acuerdo a las pruebas post-hoc de Tukey (P < 0.05).
Altura del dosel (a), área basal (b) , densidad de tallos (e), densidad de especies (d).
53
•
ap ítulo JI
UNIDADES DE MAPEO
Cuadro 10. Valores promedio de las principales características de las unidades de mapeo (UM).
Unidad de mapeo
UM01 UM02 UM03 UM04 UM05 UM06 UM07 UM08 UM09 UM10
Atributo n = 26 n=4 n=2 n = 32 n=8 n=9 n = 39 n=6 n = 18 n = 24
Pendiente (%) 0.6 7.5 20.0 0.8 6.3 30.6 1.1 7.0 6.4 27.9
Pedregosidad (%) 5.0 45.0 40.0 5.0 35.0 50.0 10.0 40.0 51.9 55.4
Edad de abandono 7 7 6 11 11 12 32 28 25 31
A~ura del dosel (m) 6.0 5.5 6.2 7.2 7.8 7.0 8.9 9.6 8.2 8.1
Área basal total (m 2/ha) 13.3 15.0 14.6 22.1 24.9 26.1 32.0 33.4 29.9 29.7
Densidad total (Num. indiv/ha) 12863 12225 12800 11739 15263 15556 8927 8880 14742 12585
Num. total de spp. 14 20 21 16 23 24 21 23 26 24
Índice de estructu ra forestal (IEF) 6.5 6.4 7.9 13.3 21.8 18.9 21.6 28.6 30.3 24.7
Num. de especies endémicas 4 5 3 6 4 5 7
Num. especies para lena/Cn 10 11 7 11 12 8 11 11 10
Densidad (indiv./ha) Lena 170 208 146 198 198 205 228 230 224 230
Área basal de las spp. para
construcción (m' /ha) 9.4 8.4 10.1 13.6 16.8 16.1 13.8 17.3 18.2 15.2
pH(H 20) 7.2 7.7 7.5 7.2 7.6 7.5 7.2 7.5 7.4 7.4
MO(%) 10.7 36.8 37.1 8.5 42.0 50.0 12.3 28.4 40.1 46.0
N(%) 0.5 1.1 1.2 0.5 1.3 1.6 0.6 1.1 1.4 1.6
P (mg kg·' ¡ 5.3 7.5 4.0 4.5 9.6 5.3 6.5 9.0 13.9 15.6
K (cmol (+) kg·' ) 2.5 3.8 2.1 2.2 3.1 1.4 2.5 2.6 3.0 2.5
ArcUia (%) 58.2 50.7 35.0 59.3 48.7 45.3 55.1 40.2 42.1 40.0
Limo('/~ 18.9 24.7 12.7 19.4 21.9 20.5 20.8 14.0 19.0 17.9
Arena (o/~ 22.8 24.0 52.3 21.3 29.2 33.8 24.1 45.7 38.7 41.8
Franco Franco
arcillo arcill o Franco Franco
Clasificación tex tu ral del suelo Arcilla Arcilla arenoso Arcilla Arcilla Arcilla Arcilla arenoso arcilloso arc illoso
54
Cap ítulo Il
En el caso de la agricultura tradicional se determinó que los criterios más relevantes para
la selección de los sitios más aptos para el establecimiento de esta alternativa fueron: a)
condiciones del sitio; b) fertilidad del suelo ; e) acceso al sitio. En este caso , los
requerimientos climáticos de los cultivos no fueron tomados en cuenta , debido a que estos
no presentan una variación importante dentro del área de estudio; por lo que, estos
requerimientos se consideraron constantes en toda el área de estudio.
Las condiciones del sitio se determinaron en base a tres factores: 1) pendiente (%); 2)
pedregosidad superficial del suelo (%) y 3) estructura de la vegetación . Los valores del
porcentaje de pend iente y pedregosidad, se obtuvieron de la información de campo. La
estructura de la vegetación se evaluó a través del índice de complejidad de Holdrige (CHcl;
Holdrige et al., 1971), modificado por Lugo et al. (1978) para incluir los tallos con DAP =:: 5
cm . Este índice se construyó sin tomar en cuenta la densidad de especies, debido a que
esta es evaluada por separado en el caso del uso de conservación . De tal manera que, el
índice de estructura del bosque (IEB) se construyó mediante la siguiente la formula:
55
Capítulo 11
Donde:
La fertilidad del suelo, se evaluó en base a los factores de: 1) pH ; 2) materi a orgánica (%)
y 3) fósforo disponible (mg kg- 1). Estos factores se consideraron como algunos de los más
relevantes, debido a que el pH es el principal factor que afecta la disponibilidad de
nutrientes en el suelo y regula la forma en la que se encuentra el fósforo en este (Barret et
al. , 1998).
La materia orgánica, contribuye a mejorar las condiciones físicas del suelo aumentado su
capacidad de infiltración , almacenamiento de agua y su aireación ; además de que
proporciona gran parte del nitrógeno y fósforo en los suelos tropicales a través de su
mineralizacon (Barret et al., 1998). El fósforo junto con el nitrógeno, es uno de los
nutrientes que más afecta la producción de los cultivos (Bono y Romano, 2008); además
de que resultó ser una de la mayores limitantes de la fertilidad de los suelos en el área de
estudio , debido a que el contenido promedio de fósforo en los suelos se encontró muy por
debajo de los rangos establecidos en la NOM-021-RECNAT-2000.
El acceso al sitio, se evaluó a través de factores como : 1) distancia a los poblados (m) ; 2)
distancia a carreteras o caminos principales (m); 3) la .distancia a caminos secundarios o
terracerías (m) . Estos factores se seleccionaron, debido a que la distancia de un sitio a
estos factores antrópicos tiene una influencia sobre la aptitud , ya que a mayor distancia
del sitio , mayores serán los costos en tiempo, dinero y esfuerzo (FAO , 1985).
56
Capítulo II
Cuadro 11 . Rango de valores según la NOM-021 -RECNAT-2000 para los principales parámetros
físico-químicos del suelo en el paisaje.
*Nota : prom = valor promedio; DE : desviación estándar; min : valor mínimo; max: valor máximo
observado en el área de estudio.
En caso de la agricultura mecanizada, los sitios más aptos para el desarrollo de esta
alternativa se encuentran en sitios planos, con escasa pedr~osidad , suelos con textura
arcillosa y adecuada profundidad (Duch-Gary, 1991 ). Es por esto que, los criterios
seleccionados fueron : a) las condiciones de mecanizadón del sitio y b) el acceso al sitio.
En este caso el criterio de fertilidad del suelo no se consideró, debido a que este tipo de
agricultura implica la aplicación continua de fertilizantes a los cultivos (Santos Evelio Uc,
comunicación personal).
57
Capitulo JI
100%
1 [, I/; [·'
90% r- -
¡;:~
r-
~ r-
1:-' le
80% r- - -
~t. ~
En el caso del A FNM, los criterios seleccionados fueron: a) condición del bosque para el
AFNM y b) acceso al sitio . Las condiciones para el AFNM se evaluaron a través del: 1)
número de especies susceptibles de ser utilizadas para la construcción y/o para leña (No .
de spp. construcción/leña); 2) densidad de individuos de las especies utilizadas para leña
(No. individuos ha-1 ); 3) área basal de las especies utilizadas para construcción (m 2 ha-1).
El acceso al s~i o , se evaluó con los factores mencionados anteriormente.
58
Capítulo 11
Estos factores se consideraron los más relevantes, ya que estos son algunos de los
aspectos de la vegetación observados por los agricultores para seleccionar los sitios más
susceptibles para el AFNM (Levy-Tacher et al., 1992). La lista de espacies utilizadas para
leña y/o construcción de acuerdo con Kantún-Balam (2005) se presenta en el ANEXO 2.
En el caso del uso de conservación, los criterios seleccionados fueron : a) condición del
bosque para su conservación y b) acceso al sitio. La condición del bosque se evaluó a
través de algunos de los aspectos de la biodiversidad utilizados en los inventarios
forestales para seleccionar los sitios susceptibles de conservación de acuerdo con
Newton y Ka pos (2002) como : 1) presencia de especies amenazadas o endémicas (No.
de especies endémicas); 2) densidad de especies (No . de especies) ; 3) estructura del
bosque, utilizando el índice de estructura anteriormente mencionado. El acceso al sitio se
evaluó bajo los mismos los criterios de las otras alternativas.
El proceso analítico jerárquico (PAJ) permitió obtener los modelos jerárquicos que
ayudaron a establecer las relaciones y las prioridades de los diversos elementos que
interviene en la evaluación de la aptitud del uso del suelo de cada alternativa. En estos
modelos, el nivel superior está compuesto por un objetivo de decisión "seleccionar los
sitios más aptos para el desarrollo de cada alternativa". El nivel intermedio comprende los
criterios seleccionados para evaluar la aptitud de un sitio, los cuales son divididos en los
diversos factores que contribuyen positiva o negativamente al objetivo de decisión, a
través de su impacto en los criterios intermedios; el valor entre paréntesis de cada
elemento , representa la importancia relativa de ese elemento con respecto a otro
elemento para el nivel superior inmediato.
59
•
apltulo 11
En la figura 12 se presentan los modelos jerárquicos utilizados para cada alternativa. Los
pesos en el nivel intermedio, indican que los criterios relacionados con las condiciones
biofísicas de los sitios tienen una mayor importancia (peso = 0.800), en comparación con
los criteri os de acceso al sitio (peso = 0.200) o de fertilidad del suelo (0.297) en el caso de
la agricultura tradicional.
En cuanto a la alternativa del AFNM, se le otorgó una mayor prioridad al área basal de las
especies utilizadas para construcción, ya que esta tiene una relación directa con el valor
del prod ucto forestal (Levy-Tacher et al., 1992), seguido del número de especies
utilizadas para leña o construcción, ya que este factor permite reflejar un valor de opción
del bosque, y la abundancia de individuos de las especies utilizadas para leña resultó muy
simi lar en todas la UM. En el caso de los factores de acceso, se busco privilegiar a los
sitios que estuvieran cerca de los poblados y tuvieran acceso por los caminos
secundarios, ya que la cantidad de leña que se extrae del bosque, varía de acuerdo a la
60
•
Capítulo JI
edad y sexo del campesino y la distancia que hay entre el sitio de recolecta y la vivienda
(Ortega, 1997); además de que cerca de los caminos principales ya no hay vegetación
adecuada para leñar (Observación persona~.
En el caso del uso de conservación, se le otorgó una mayor prioridad a los factores del
endemismo y la estructura del bosque, debido a que desde el punto de ~ista de la
conservación , el endemismo es más importante que la diversidad de especies en los BTS
(Gentry, 1995); además de que algunas especies endémicas son más susceptibles a la
perturbación o reducción del hábitat. Por otra parte, una mayor complejidad estructural del
bosque, puede infl uenciar en la biodiversidad a través de sus efectos en la disponibilidad
de hábitat para las comunidades vegetales, animales y microbianas (Newton y Kapos,
2002). En cuanto a los factores de acceso, se busco favorecer a los sitios que estuvieran
más alejados de los poblados y caminos principales, por los riesgos de invasión y los
efectos de contaminación y ruido para las poblaciones de animales, pero que tuvieran
acceso por camin os secundarios.
61
•
apltulo JI
Fertilidad ~ pH(0.041)
del suelo Materia orpnica (0.093)
(0.240)
Fósforo disponible (0.107)
~ Distanciaapoblados(0.113)
Acceso
al sitio
~ Distancia a carreteras (0.034)
(O.Z10)
Distancia a caminos secundarios (0.062)
Condiciones de
mecanización
<::::::::: Pendiente (0.300)
<
(0.750) Pedregosldad (0.300)
b) Selección de sitios para
Agricultura mecanizada Distancia a poblados (0.123)
Acceso
al sitio Distancia a carreteras (0.078)
(0.250)
Distancia a caminos secundarios (0.049)
Área baal de las especies utilizadas
Condición para construcción (OAOS)
del bosque Densidad de individuos de las especies
paraAFNM utilizadas para combustible (0.123)
(D.7SO) Num. especies utilizadas para
combustible/construcción (0.223)
e) Selección de sitios
paraAFNM
Figura 12. Modelos jerárquicos para la priorización de los sitios en el paisaje respecto a las
alternativas de uso de suelo consideradas: a) agricultura tradicional ; b) agricultura mecanizada; e)
AFNM ; d) uso de conservación . El peso relativo o importancia de cada elemento se muestra entre
paréntesis.
62
•
Capitulo JI
El análisis de aptitud se utilizó para conocer la capacidad biofísica del paisaje para
sostener el desarrollo de las diferentes alternativas de uso de suelo, la cual se puede
observar en los mapas de aptitud, que presentan un gradiente de las zonas menos aptas
a las zonas más aptas para cada alternativa (Figura 13, 14, 15 y 16).
La reclasificación del índice de aptitud permitió conocer la superficie del paisaje que se
encuentra bajo cada clase de aptitud para cada alternativa. La alternativa de uso de suelo
con la mayor extensión en el paisaje dentro de la clase de mayor aptitud, fue la agricultura
mecanizada con 15,568 ha (42% del total del paisaje), seguida del AFNM con12 , 171 ha
(33% del paisaje), el uso de conservación con 10,289 ha (28% del paisaje) y la agricu~ura
Sin embargo, cuando se consideran las superficies de las clases apto y muy apto juntas,
la agricultura tradicional es la alternativa con el mayor potencial biofísico con 76% del
paisaje considerado como apto para esta actividad, seguida de las alternativas del AFNM
y el uso conservación con el 48% del paisaje y la agricultura mecanizada con el 43% del
paisaje (Cuadro 12).
Cuadro 12. Superficie por clase de aptitud para cada alternativa en el paisaje.
Alternativa de
Clase de aptitud
uso de suelo
No Apto Marginalmente Apto Moderadamente Apto Apto Muy Apto
ha % ha % ha % ha % ha %
Agricultura
tradicional 8 o 1,026 3 6,285 17 25,947 70 2,243 6
Agricultura
mecanizada 4,383 12 1,344 4 13,661 37 552 15,568 42
AFNM 1,987 5 4,431 . 12 11,370 31 5,549 15 12,171 33
63
apítulo JI
En el caso de la agricultura tradicional , 2,443 ha (6% del total del paisaje) se consideraron
como muy aptas; mientras que ninguna superficie en el paisaje se consideró como no
apta para esta alternativa (Figura 13). Las áreas con la mayor aptitud para esta alternativa
se encontraron en sitos con vegetación VS3 en zonas planas, con escasa ·pedregosidad
(<1 0%) y con un IEB mayor a 21.6, en suelos con pH ligeramente alcalino (7.2),
contenidos bajos de fósforo (<6.5 mg kg- 1), escaso contenido de materia orgánica (<12%),
dentro de los primeros 6 km alrededor de los poblados con acceso mediante caminos
primarios y secundarios (Cuadro 13).
Las zonas marginalmente aptas se ubicaron dentro del 0.5% de la clases VS1 , VS2 y el
2% de la clases VS4, en sitios con fuertes pendientes (>20%), con abundante
pedregosidad (>40%), una menor estructura (IEB= 7.9-13.3), suelos con pH ligeramente
alcalinos (7 .5), muy bajos niveles de fósforo (4.0-5.3 mg kg-1), pero con altos contenidos
materia orgánica (37-50%) y en algunos casos a más de 1O km alrededor del los poblados
(Cuadro 13).
Cuadro 13. Superficie por clase de aptitud por unidad de mapeo para la agricultura tradicional.
Clase de aptitud
64
•
Capítulo 11
En el caso de la agricultura mecanizada 15 568 ha (42% del total del paisaje) fueron
consideradas como muy aptas, mientras que 4,383 ha (12% del total del paisaje) se
consideraron como no aptas para esta alternativa (Figura 14). Los sitios con mayor aptitud
para la agricultura mecanizada se ubicaron en toda la superficie de las clases VS1 , VS2 y
VS3 en zonas planas (<1 %) y escasa pedregosidad (5-1 0%), en todo los largo del paisaje
(Cuadro 14). Las áreas marginalmente aptas y no aptas se ubicaron en toda la superficie
de las clases VS1, VS2 y VS4 en sitios con pendientes pronunciadas (>20%) y abundante
pedregosidad (>50%) , a más de 4 km de los poblados (Cuadro 14).
Cuadro 14. Superficie por clase de aptitud por unidad de mapeo para la agricultura mecanizada.
Clase de aptitud
Unidad de Cobertura Superficie total
m apeo del suelo en el paisaje No Apto M arginalmente Apto Moderadamente Apto Apto Muy Apto
ha % ha % ha % ha % ha % ha %
UM01 V$1 (0-5%) 4,536 12 o o o o o o o o 4,536 12
UM02 V$1 (5-10%) 2,032 5 o o o o 1,968 5 64 o o o
UM03 V$1 (> 10%) 184 o 127 o 57 o o o o o o o
UM04 V$2 (0 -5%) 4,199 11 o o o o o o 1 o 4,198 11
UM05 VS2 (5 -10%) 2,087 6 o o o o 1,902 5 184 o o o
UM06 VS2 (> 10%) 170 o 117 o 53 o o o o o o o
UM07 V$3 (0-5%) 6,837 18 o o o o o o 4 o 6,834 18
UM08 VS3 (5-10%) 4,906 13 o o o o 4,823 13 83 o o o
UM09 VS4 (5-10%) 5,184 14 o o o o 4,968 13 216 o o
UM10 V$4(>10%) 5,373 14 4,139 11 1,234 3 o o o o o o
Total 35 508 95 4 383- 12 1,344 4 13,661 37 552 15 568 42
En el caso del AFNM 12,171 ha (33% del total del paisaje) fueron consideradas como muy
aptas, mientras que 1,987 ha (5%) se consideraron como no aptas para esta alternativa
(Figura 15). Las áreas consideradas como muy aptas para el AFNM se ubicaron en toda
la superficie de las clases VS3 y VS4 y el 5% de la clase VS2 en pendientes moderadas
(5-1 0%) , en sitios con más de 11 especies utilizadas tanto para leña y/o construcción , con
valores de área basal de las especies utilizadas para construcción mayores a 16.8 m2/ha,
y una densidad de individuos de especies utilizadas para leña mayor a 198 individuos/ha,
a lo largo de todo el paisaje (Cuadro 15).
65
a
Capítulo 11
Las áreas marginalmente aptas y no aptas para esta alternativa se ubicaron en el 13% de
la clases VS 1 y 3% de la clase VS2 en zonas planas, en sitios con menos de 7 especies
para leña y/o construcción, con valores de área basal de las especies utilizadas para
construcción menores a 13.6 m2/ha, y una densidad de individuos de las especies
utilizadas para leña menor a 198 individuos/ha a más de 4 km alrededor de los poblados
(Cuadro 15).
Cuadro 15. Superficie por clase de aptitud por unidad de mapeo para el AFNM.
Clase de aptitud
Unidad de Cobertura Superficie total
mapeo del su elo en el paisaje No Apto Marginalmente Apto Moderadamente Apto Apto Muy Apto
ha % ha % ha % ha % ha % ha %
UM01 VS1 (0·5%) 4,536 12 1,987 5 2,549 7 o o o o o o
UM02 VS1 (5·10%) 2,032 5 o o 532 1 1,500 4 o o o o
UM03 VS1 (> 10%) 184 o o o 91 o 93 o o o o o
UM04 VS2 (0-5%) 4,199 11 o o 1,212 3 2,987 8 o o o o
UM05 VS2 (5-10%) 2,087 6 o o o o o o 255 1 1,832 5
UM06 VS2 (> 10%) 170 o o o o o o o 58 o 112 o
UM07 VS3 (0-5%) 6,837 18 o o 46 o 6,791 18 o o o o
UM08 VS3 (5-10%) 4,906 13 o o o o o o 92 o 4,814 13
UM09 VS4(5-10%) 5,184 14 o o o o o o 71 o 5,112 14
UM10 VS4 (> 10%) 5,373 14 o o o o o o 5,073 14 300
Total 35,508 95 1,987 5 4,431 12 11 370 31 5,549 15 12171 33
En cuanto al uso de conservación , 10,289 ha (28% del total del paisaje) fueron
consideradas como muy aptas, mientras que 9,786 ha (26% del total del paisaje) se
consideraron como no aptas (Figura 16). Las áreas con la mayor aptitud para la
conservación, se ubicaron toda la superficie de la clase VS4 (laderas y cimas de los
cerros) , donde se observa una vegetación con más de 7. especies endémicas, una mayor
estructura (24.7-30.3), y una densidad de especies mayor a 24 especies, a lo largo de
todo el paisaje (Cuadro 16).
66
Capitulo JI
Cuadro 16. Superficie por clase de aptitud por unidad de mapeo para el uso de conservación .
Clase de aptitud
Unidad de Cobertura Superficie total
mapeo del suelo en el paisaje No Apto M arginalmente Apto Moderadamente Apto Apto Muy Apto
ha % ha % ha % ha % ha % ha %
UM01 VS1 (0 -5%) 4,536 12 4,533 12 3 o o o o o o o
UM02 VS1 (5 -10%) 2,032 1,175 3 857 2 o o o o o o
UM03 VS1 (> 10%) 184 o o o 162 o 21 o o o o o
UM04 VS2(0-5% ) 4,199 11 4,077 11 122 o o o o o o o
UM05 VS2 (5-10%) 2,087 6 o o o o o o 2,013 5 74 o
UM06 VS2 (> 10%) 170 o o o o o o o 169 o 1 o
UM07 VS3 (0-5% ) 6,837 18 o o o o 6,782 18 55 o ·O o
UM08 VS3 (5-10%) 4,906 13 o o o o o o 4,892 13 15 o
UM09 VS4(5-10%) 5,184 14 o o o o o o 86 o 5,098 14
UM10 VS4(>10%) 5,373 14 o o o o o o 271 5,102 14
Total 35 508 95 9 786 26 1144 3 6 803 18 7,486 20 10 289 28
La Reserva Biocultural Kaxil Kiuic" (RBKK) cuenta con una superficie de 1,640 ha, de las
cuales 750 ha (46% del total de la reserva) están cubiertas bajo vegetación secundaria
>15 años en cerros (VS4), 559 ha (34%) con vegetación secundaria >15 años en zonas
planas (VS3) , 252 ha (15%) presentan una vegetación secundaria de 8-15 años (VS2) y
únicamente 78 ha (5%) presentan una cobertura de 3-8 años (VS1).
Cuadro 17. Superficie por clase de aptitud dentro de la RBKK para cada alternativa.
Clase de aptitud
Alternativa de
uso de suelo No Apto Marginalmente Apto Moderadamente Apto Apto Muy Apto
ha "'o ha "'o ha "'o ha "'o ha "'o
Agricultura
mecanizada 244 15 222 14 682 42 25 2 467 28
AFNM o o 11 1 465 28 970 59 194 12
Conservación 6 o 35 2 463 28 410 25 725 44
Agricultura
tradicional 215 13 18 271 17 392 24 743 45
67
o No Apto
16
32 •
48
64
80
96
112
128
143
159
175
191
207
223
239
255 Muy Apto
S
230000 235000 240000 245000 250000
68
o No Apto
16
32
48
64
•
80
96
112
128
143
159
175
191
207
223
239
255 Muy Apto
69
o No Apto
16
32
48
64
80
96
112
128
143
159
175
191
207
223
239
255 Muy Apto
70
No Apto
Muy Apto
.. .. .. ..
230000 235000 240000 245000 S
71
•
Capítulo JI
Los confl ictos del uso del suelo se analizaron desde la perspectiva de objetivos en
conflicto, mediante la combinación de los mapas de aptitud. Esto permitió identificar las
áreas en el paisaje con la mayor aptitud para más de una altern~tiva , en donde se
posibilita la ocurrencia de conflictos por el uso del suelo entre las alternativas.
Este análisis mostró que existen diversos conflictos por el uso del suelo y que estos
conflictos varían en cuanto el nivel de aptitud en el que ocurren y la superficie en conflicto.
Los princi pales conflictos se presentaron entre las alternativas de conservación y el AFNM
con 5,165 ha del paisaje consideradas como muy aptas para ambas alternativas,
ocurriendo principalmente dentro del 13% de las clase VS4 en pendientes moderadas a lo
largo del todo el paisaje. Las alternativas de agricultura también presentaron cierto nivel
del conflicto, compitiendo por el 2,243 ha (6% de la clase VS3 en zonas planas) dentro de
los primeros 6 km alrededor de los poblados (Cuadro 18).
Cuadro 18. Conflictos por el uso del suelo en el paisaje entre las distintas alternativas.
72
Capítulo JI
El objetivo del desarrollo de los escenarios fue modelar el patrón óptimo de ocupación del
territorio desde tres diferentes perspectivas. Estos escenarios permiten analizar los
patrones de ocupación que mejor satisfagan necesidades específicas de desarrollo. La
información y prod uctos derivados de la evaluación del uso del suelo y estos escenarios
representan una base sobre la cual los tomadores de decisiones pueden empezar a
negociar para reso lver los conflictos por el uso del suelo y diseñar el patrón de ocupación
del paisaje que se desea.
Las áreas prioritarias para agricultura mecanizada se ubican dentro de los primeros 2 km
alrededor de los poblados, ocupando el 3% y 2% de las clases VS1 y VS2 en zonas
planas respectivamente. Las áreas prioritarias para la agricultura tradicional se ubicaron
dentro de los primeros 7 km alrededor de los poblados en el 1% y 9% de las clases VS 1 y
VS3 en las zonas planas respectivamente (Cuadro 19, Figura 17).
73
Capítulo JI
Cuadro 19. Superficie por unidad de mapeo asignada a cada alternativa según el escenario de
conservación .
Escenario de Conservación
Unidad de Cobertura Superficie total en Agricultura Agricu ltura
m apeo del suelo el ~aisaje mecanizada AFNM Conservación trad icional
ha % ha % ha % ha % ha %
UM01 VS1 (0-5%) 4536 12 1202 3 937 3 2042 5 354
UM02 VS1 (5-10%) 2032 5 o o o o 2032 5 o o
UM03 VS1 (> 10%) 184 o o o o o 184 o o o
UM04 VS2 (0-5%) 4199 11 573 2 8 o 3618 10 o o
UM05 VS2 (5-10%) 2087 6 o o 200 1886 5 o o
UM06 VS2 (> 10%) 170 o o o 1 o 169 o o o
UM07 VS3 (0-5%) 6837 18 o o o o 3641 10 3196 9
UM08 VS3 (5-10%) 4906 13 o o 2783 7 2123 6 o o
UM09 VS4 (5-10%) 5184 14 o o 1397 4 3787 10 o o
UM10 VS4 !> 10%! 5373 14 o o o o 5373 14 o o
74
Capítulo JI
Cuad ro 20. Superficie por unidad de mapeo asignada a cada alternativa según el escenario
intermedio.
Escenario Integral
Unidad de Cobertura Superficie total en Agricultura Agricultura
mapeo del suelo el ~aisaje mecanizada AFNM Conservación tradicional
ha % ha % ha % ha % ha %
UM01 VS1 (0·5%) 4,536 12 2,281 6 o o 2,255 6 o o
UM02 VS1 (5·10%) 2,032 5 o o 32 o 2,000 5 o o
UM03 VS1 (> 10%) 184 o o o o o 184 o o• o
UM04 VS2 (0·5%) 4,199 11 1,269 3 o o 2,929 8 o o
UM05 VS2 (5·10%) 2,087 6 o o 1,591 4 496 1 o o
UM06 VS2 (> 10%) 170 o o o 138 o 32 o o o
UM07 VS3 (0-5%) 6,837 18 o o o o 1,511 4 5,326 14
UM08 VS3 (5-10%) 4,906 13 o o 4,766 13 140 o o o
UM09 VS4 (5-10%) 5,184 14 o o 2,351 6 2,833 8 o o
UM10 VS4 (> 10%) 5,373 14 o o o o 5,373 14 o o
75
•
apftulo JI
Cuadro 21 . Superficie por unidad de mapeo asignada a cada alternativa según el escenario de
producción .
Escenario de Producción
Unidad de Cobertura Superficie total en Agricultura Agricultura
m apeo del suelo el(!aisaje mecanizada AFNM Conservación tradicional
ha % ha % ha % ha % ha %
UM01 VS1 (0-5%) 4,536 12 3,028 8 o o 1,237 3 269 1
UM02 VS1 (5 -10% ) 2,032 5 o o 864 2 1,168 3 o o
UM03 VS1 (> 10% ) 184 o o o 30 o 154 o • o o
UM04 VS2 (0-5%) 4,199 11 2,298 6 o o 1,898 5 4 o
UM05 VS2 (5-10% ) 2,087 6 o o 2,058 6 28 o o o
UM06 VS2 (> 10% ) 170 o o o 169 o 1 o o o
UM07 VS3 (0 -5% ) 6,837 18 o o o o 9 o 6,828 18
UM08 VS3 (5-10% ) 4,906 13 o o 4,906 13 o o o o
UM09 VS4 (5-10% ) 5,184 14 o o 3,007 8 2,176 6 o o
UM10 VS4 !> 10% ! 5,373 14 o o 1,392 4 3,981 11 o o
76
Simbología
Alternativas de uso de suelo
Agricultura tradicional •
- Agricultura mecanizada
- AFNM
- Conservación
® Poblados
fQSZSI Caminos
c:::J Reserva Kaxil Kiuic
3~~-0~~~3 Kilometros
Figura 17. Escenario de conservación para la asignación de los usos del suelo en el paisaje.
77
Simbología
Alternativas de uso de suelo
Agricultura tradicional
- Agricultura mecanizada
- AFNM
- Conservación
® Poblados
f:QSZSJ Caminos
c::J Reserva Kaxil Kiuic
3~
5¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡!0~~~3 Kilomet ros
Figura 18. Escenario intermedio para la asignación de los usos del suelo en el paisaje.
78
Simbología
Alternativas de uso de suelo
Agricultura tradicional
- Agricultura mecanizada
•
- AFNM
- Conservación
® Poblados
rszs2SI Caminos
c:::J Reserva Kaxil Kiuic
3~~¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡;lo~~~3 Kilometros
Figura 19. Escenario de producción para la asignación de los usos del suelo en el paisaje.
79
•
apltulo IJ
DISCUSIÓN
La dificultad para identificar y delimitar las zonas forestales genera ,confusión para su
aprovechamiento y propicia la extracción furtiva de los recursos forestales (Montañez et
al., 201 O) . En este sentido, la información derivada de la clasificación de la imagen de
satélite contribuyó a resolver este problema en el manejo de los recursos forestales, al
permitir identificar diferentes clases de coberturas en el paisaje, aunque no todas con la
misma precisión .
Las clases mejor clasificadas fueron las clases de la agricultura y zonas urbanas con una
precisión 100%, debido principalmente a la homogeneidad en la respuesta espectral del
suelo desnudo y el concreto, seguidas de las clases VS1 con 77% y VS4 con 73%. Las
clases VS2 y VS3 presentaron una menor precisión (68% y 62% respectivamente) . Esta
menor precisión en la clasificación de estas clases, podrían deberse a que estas clases
no se encuentran bien diferenciadas en términos de su estructura y composición . De tal
manera que la diferencia entre estas clases no es abrupta sino gradual y transitoria,
ocasiona ndo que estas clases presenten una mayor variabilidad interna (Hernández-
Stefanoni y Ponce-Hernández, 2004; González-lturbe, 2004). Sin embargo, el objetivo de
realizar la clasificación de la imagen, no era la diferenciación detallada de estados
sucesionales dentro del bosque secundario, sino contar con una aproximación cuantitativa
de la extensión y distribución de las diferentes cobertl!ras en el paisaje.
El mapa de coberturas obtenido, muestra que cerca del 60% del paisaje (22,330 ha) se
encuentra bajo una cobertura for~stal >15 años tanto en zonas planas (VS3) como en
zonas con pendiente (VS4); mientras el 35% del paisaje (13,207 ha) presenta una
cobertura forestal < 15 años de abandono (VS 1 y VS2) . La cantidad de superficie bajo las
coberturas VS3 y VS4 en el paisaje, resulta de gran importancia para la subsistencia las
comunid ades locales y el desarrollo de las diferentes alternativas del uso del suelo , pues
representan la cantidad del principal capital biológico con el que se cuenta, cuyo monto
está en función de la edad sucesional y del cual depende el rendimiento agrícola
80
Capítulo 11
tradicional y la calidad del producto forestal (Levy et al., 1992). Sin embargo, no se
debemos descartar el valor de las clases de menor edad para otros usos, como en el caso
de la clase VS2 para el AFNM y la conservación (UM5, Cuadros 15 y 16) o la clase VS1
para el establecimiento de la agricultura mecanizada (UM1, Cuadro 14).
A pesar de que los análisis de varianza permitieron observar claras diferencias en cuanto
a su estructura entre las clases de vegetación, estas diferencias no fueron tan claras en
cuanto a la composición de especies. Cuando se analizó la composición de las especies
que representan el 80% del VIR acumulado, nueve especies de árboles tuvieron los cinco
mayores valores del VIR en cada clase de vegetación; lo que indica que existe un
pequeño número de especies que tienen la mayor dominancia (donde las Fabaceas
contribuyen con un mayor porcentaje) y que estas especies están distribuidas de forma
más o menos homogénea en todas las clases de vegetación (Figura 8). La presencia de
algunas especies como, L. /atísí/íquum, L. xuul, P. píscípula, B. símaruba, G. floríbundum o
C. gaumerí desde las primaras etapas sucesionales, puede deberse al uso y manejo que
hacen los campesinos de estas especies, así como a su capacidad de rebrote a partir de
tocones o rizomas después de la perturbación, alta producción de semillas y rápida
geminación (Balam, 2005; Ortega, 1997).
81
•
apitulo JI
La topografía y los atributos del suelo son otros elementos del paisaje que mostraron tiene
una influencia tanto en la estructura, como en la composición de especies. Los sitios con
pendientes de moderadas a fuertes y con abundante pedregosidad, presentaron valores
mayores de área basal de las especies utilizadas para construcción , en el número de
especies utilizadas para leña y/o construcción y en el número de especies endémicas, en
comparación con los sitios de la misma clase de vegetación pero en zonas planas y con
,
menor pedregosidad . Resultados similares han sido descritos por Dupuy y colaboradores
(2011) y White y Hood, (2004).
Estos resultados señalan que los bosques > 15 años en los cerros y cerritos podrían tener,
en promedio , un valor mayor para la conservación (debido a su estructura, mayor número
de especies en general , así como de especies endémicas) que los bosques de la misma
edad de abandono en zonas planas. Lo cual tienen implicaciones importantes y
alentadoras para la conservación en el paisaje de estudio, ya que los sitios con mayor
valor para la conservación (cerros y cerritos) son los que presentan menor aptitud para los
usos productivos, especialmente para la agricultura mecanizada debido a las restricciones
que la pendiente y la pedregosidad representan para dicho uso. De tal manera que, los
sitios de mayor aptitud para los usos del suelo más antagónicos e incompatibles
(conservación versus agricultura mecanizada) son mutuamente excluyentes, lo que
disminuye el nivel de conflicto entre ambas alternativas (solamente 1% del área se
consideró como apto para ambas alternativas, Cuadro 18) y permitiría una zonificación de
estos usos en el paisaje.
82
•
Capítulo JI
Cuando se considera únicamente la superficie evaluada como muy apta, esto es, las
superficies que se pudieran considerar como óptimas para el desarrollo de las
alternativas, la agricultura mecanizada es la alternativa de uso de suelo con la mayor
superficie dentro de esta clase (42%). Sin embargo, cuando se consideran en conjunto la
superficie de las dos clases de mayor aptitud (apta + muy apta), la agricultura tradicional
es la alternativa con el mayor potencial biofísico en el paisaje (76%), seguida del AFNM y,
el uso de conservación (48%), mientras que la agricultura mecanizada presenta la menor
superficie (43%, Cuadro 12).
83
•
apltulo JI
Estas diferencias en la cantidad de superficie entre estas clases de aptitud, pueden ser
explicadas por el número de factores analizados para cada alternativa, ya que los sitios
con mayor aptitud son aquellos donde coinciden la mayoría de los factores analizados y
donde existe mayor acceso (Hossain et al., 2007). Así, por ejemplo, en el caso de la
agricultura tradicional se observó, que algunos sitios de la clase VS4 presentan valores
adecuados de estructura , pero valores bajos de otros factores co~o pendiente y
pedregosidad, mientras que otros sitios de las clases VS2 y VS1 presentaron valores
adecuados de pendiente y pedregosidad , pero valores bajos de estructura, MO y P. Estas
diferencias en los niveles de aptitud en los distintos factores, explicaría por qué una gran
cantidad de sitios presentaron un nivel intermedio de aptitud, lo cual se vio reflejado en
una mayor cantidad de superficie en la clase de aptitud "apto" para esta alternativa
(Cuadro 12).
Sin embargo , a pesar del gran potencial biofísico evaluado en el paisaje para el desarrollo
de las agriculturas, se debe tener presente que estas alternativas enfrentan dos
importantes limitantes. Las principales limitantes en la zona de estudio son la falta un
sistema de pozos para el establecimiento un sistema de riego, lo cual limita grandemente
el desarrollo de estas alternativas en el paisaje (Ezequiel Kokom May comunicación
personal) y otra es la pérdida de fertilidad de los suelos, principalmente ocasionada
disminución significativa en los niveles de fósforo en el los suelos; uno de los nutrientes
que junto con el nitrógeno, más afecta la producción de los cultivos (Bono y Romano,
2008). Esta pérdida de fertilidad , se observó más acentuada en los suelos de zonas
planas que en los suelos de las zonas con pendiente, probablemente por un uso más
intensivo en las primeras, que en la segundas (Observación personal).
Está pérdida de fertilidad de los suelos podría tener importantes implicaciones ecológicas
a largo plazo, ya que esta pérdida de fertilidad trae como consecuencia una degradación
de los suelos, lo cual se traduce en una menor recuperación de la vegetación , lo que a su
vez se traduce en una menor recuperación de la fertilidad de los suelos. Lo cual podría
crear ciclos de retroalimentación positiva en el sistema , que podrían conducir al
abatimiento de los rendimientos agrícolas y la disminución cuantitativa y cualitativa del
aprovechamiento forestal (Lawrence et al., 2007; Solís et al., 2004). Es por esto que, la
intensificación del uso del suelo para las actividades agrícolas y la reducción del periodo
84
Capítulo 11
85
•
Capitulo JI
En cuanto al AFNM, los resultados de la evaluación muestran que el paisaje presenta una
vocación de tipo forestal no maderable, ya que el 48% del total del paisaje se consideró
como apto para este tipo de aprovechamiento y únicamente el 5% del paisaje se
consideró como no apto. Es importante resaltar que la vocación forestal del paisaje no es
del tipo maderable, debido que, a pesar de la presencia de algunas especies de interés
comercial, el desarrollo que éstas alcanzan en cuanto a la altura y el diámetro de los
fustes no permite su aprovechamiento maderable (Katún-Balam, 2005).
De la superficie total considerada como apta para el AFNM, el 41% de esta superficie se
ubicó en las clases de vegetación de mayor edad sucesional y, en los sitios con pendiente
y abundante pedregosidad como las laderas y cimas de los cerros (Cuadro 15); lo cual
señala que el producto forestal no solo se diversifica con las edad sucesional (Hernández-
X et al. , 1995), sino que también con la posición topográfica.
El área basal de las especies utilizadas para construcción, fue el factor que más
contribuyó para asignar la mayor prioridad para esta alternativa a las clases de mayor
edad , mientras que los factores del número de especies utilizadas para leña y/o
construcci ón y el número de individuos utilizados para leña permitieron incluir al 6% de la
clase VS2 en la clase de mayor aptitud. Esto otorga cierta importancia en el AFNM a los
bosques de 9 a 15 años para la obtención de leña y otros productos (e.g. producción de
miel), pero no para la obtención de materiales de construcción (la cual se relaciona con el
área basal de los árboles utilizados para este fin) . En el caso de los sitios con vegetación
VS1 , estos presentaron un valor de aptitud muy bajo , siendo susceptibles únicamente
para el aprovechamiento de algunas especies para leña y la obtención de materiales
"bajareques" (elementos de construcción de 50 a 100 cm de largo y 1-2 cm de grosor)
utilizados en la comtrucción de las casas tradicionales.
86
Capitulo JI
Al comparar la distribución de las áreas de mayor aptitud para el AFNM entre las tres
comunidades humanas. Se observó que la comunidad de Xkobenhaltun es la que
presentó una mayor superficie considerada muy apta para esta alternativa dentro de los
primeros 2 km alrededor de los poblados, seguida de la comunidad de Yaxhachen y
finalmente la comu nidad de Xul; la cual presentó una menor superficie adecuada para
esta alternativa dentro de esta distancia. Esto evidenció una mayor escases de los
productos forestales alrededor de la comunidad de Xul, provocando que sus pobladores
tengan que recorrer una mayor distancia para la obtención de estos productos, en
comparación con las otras comunidades. Esta escases de los productos forestales o un
menor acceso a estos persistirá o se intensificará, conforme la cobertura de los bosques
cercanos a la población disminuyan por el cambio de uso de suelo (Aiexandratos, 1997).
Es por esto que, la distribución y el acceso a los recursos para las comunidades humanas
en el paisaje son dos aspectos importantes que se deben tomar en cuenta en la
planeadón de los usos del suelo.
En el caso del uso de conservación, el 28% del total del paisaje fue considerado como
muy apto para esta alternativa. Esta superficie abarcó principalmente los sitios de la clase
VS4, debido a que estos sitios presentaron los mayores valores de estructura, riqueza de
especies y número de endemismo. El número de endemismos y la riqueza de especies,
fueron los factores que más influyeron para que los sitios de la clase VS3, se
consideraran con una menor aptitud para la conservación; ya que estos sitios de esta
clase presentaron en promedio valores más bajos de estos factores en comparación con
los sitios de la clase VS4. Sin embargo, estos mismos factores son los que permitieron
considerar al 6% de la clase VS2 dentro de la segunda clase de aptitud . Estos resultados
deben tomarse con precaución, ya que estos podrían cambiar si se utilizaran otros
parámetros de riqueza que consideren las diferencias en la abundancia de los individuos
(rarefacción) y la distribución de las especies raras en las estimación de la riqueza o la
variación en la composición de especies (Diversidad beta, Dupuy et al., 2011).
Por otro lado, el 26% del paisaje se consideró como no apto para la conservación ; esta
superficie abarcó el 15% de la clase VS 1 y 12% de la clase VS2 en zonas planas. Estos
resultados represe ntan la superficie del bosque que ha quedado fuera de las prioridades
de conservación al presentar una menor estructura, menor riqueza de especies y escaso
87
•
Capítulo JI
Los resultados de la evaluación para esta alternativa, muestran que la superficie bajo
algún régimen de conservación o protección podría incrementarse cerca de seis veces la
superficie actual de la reserva (1 ,640 ha). Cuando se sobrepuso el polígono de la reserva,
sobre el mapa de aptitud se observó que cerca del 70% de la superficie de la reserva se
consideró como apto para conservación ; sin embargo, el 45% de la reserva también se
consideró como muy apta para agricultura tradicional y el 28% para la agricultura
mecanizada. Esto último puede deberse a que la reserva cuenta con sitios con suelos
fértiles y adecuada estructura, y adecuados para su mecanización; sin embargo, la
ubicación cercana a los poblados, caminos principales y acceso a una gran cantidad de
sitios mediante caminos secundarios es lo que podría otorgándole una mayor aptitud a
estos sitios.
Esta ubicación de la reserva, tiene gran relevancia en el ejercicio de asignación del uso
del suelo, ya que aún en el escenario de conservación únicamente el 53% de su
superficie fue destinado a esta alternativa, y en el caso del escenario de producción se
otorgará el 82% de su superficie a las actividades productivas. Esto señala que en caso
en que se llevaran a cabo los cambios de uso de suelo sugeridos en los escenarios, los
sitios aledaños a la reserva y dentro de esta son algunos de los sitios con mayor
vulnerabilidad ante el proceso de cambio de uso de suelo . Ocasionando que la
persistencia en el largo plazo de estos bosques y su biodiversidad principalmente en el
límite sur de la reserva, se vea mayormente amenazadas por el cambio de uso de suelo
o ante efectos secundarios, tales como incendios derivados de las prácticas agrícolas en
las zonas aledañas.
88
•
Capítulo Il
El 20% del total del paisaje (7,408 ha) presenta algún grado de conflicto entre las
alternativas de uso del suelo. Los mayores conflictos en extensión y magnitud en la
categoría de mayor aptitud, ocurren entre las alternativas de conservación y AFNM (14%
del paisaje), y entre la agricultura tradicional y la agricultura mecanizada (6% del paisaje,
Cuadro 18).
En el primer caso, las áreas de conflicto ocurren principalmente en el 13% de la clase VS4
en las laderas de los cerros, donde se presentó una mayor estructura, mayor área basal
de las especies utilizadas para construcción , mayor riqueza de especies, reflejado en una
mayor número de especies susceptibles para el AFNM, además de un mayor número de
endemismos y por lo tanto, de importancia para la conservación. En el siguiente caso, el
conflicto entre las agriculturas ocurrió en el 6% (2,243 ha) de la clase VS3 en zonas
planas, dentro de los primeros 6 km alrededor de los poblados. Este conflicto se debe
principalmente, a que los sitios de esta clase, son algunos de los sitios con mayor
estructura, facto r de importancia para la agricultura tradicional, y donde las limitantes de
pendiente y pedregosidad son menores, lo que facilita el establecimiento de la agricultura
mecanizada.
Estos resultados permiten comparar el valor relativo de los cerros y las zonas planas, en
cuanto a su aptitud y potencial de conflicto, donde los primeros resultan prioritarios para la
conservación y el AFNM, mientras que las segundas son prioritarias para la producción
agrícola. Esto permitiría proponer una zonificación en base a la aptitud de las diferentes
alternativas; la cual contribuiría a reducir conflictos por el uso del suelo, al propiciar que
los conflictos en mayor categoría de aptitud ocurran entre usos más o menos compatibles
(conservación vs AFNM y entre los dos tipos de agricultura) y que estos se circunscriban
a zonas específicas del paisaje, lo que facilitaría su resolución . Por ejemplo, al permitir el
AFNM en las zonas prioritarias para la conservación no necesariamente disminuye el
valor ni el potencial del sitio para este uso, por lo que ambos usos son en gran medida
compatibles. Algo similar sucede con los usos agrícolas, los cuales persiguen el mismo fin
de producción para el beneficio y/o mantenimiento de los pobladores locales.
89
ap itulo Ji
Otro de los conflictos de gran relevancia en el paisaje, fue el que se presentó entre las
alternativas de conservación y agricultura tradicional en las laderas de los cerros , donde
18% del paisaje consideró como apto para ambos usos. Este es el conflicto que plantea
más claramente la disyuntiva entre conservar y utilizar para producción ; ya que, al
destinar estos sitios a la conservación, se renuncia a la posibilidad de obtener un
beneficio económico a corto plazo, mientras que si se opta por la agriCL;Jitura tradicional ,
se reduce temporalmente el valor de estos sitios para la conservación. Por consiguiente la
solución de este conflicto recae principalmente en la prioridad que los usuarios a asignen
a cada alternativa de uso del suelo, la cual puede estar muy influida por el valor
económico (potencial) de cada uso.
Otro aspecto que podría ser de gran relevancia para la solución de los conflictos entre los
usos del suelo, la utilización de los factores de distancia a poblados y caminos principales
para realizar una zonificación de los usos del suelo en el paisaje. Por ejemplo , los sitios
de la clase VS3 en plano dentro de los primeros 6 km alrededor de los poblados y
cercanos a los caminos se consideraron como muy aptos para las alternativas agrícolas y
menos aptos para conservación, pero más allá de estas distancia estos mismo sitios se
consideraron como aptos para la agricultura, y más aptos para conservación . Lo que
señala que, la aptitud para agricultura versus para la conservación depende del acceso y
cercanía a poblados y caminos: a mayor acceso de un sitio a estos factores , mayor valor
para la agricultura, especialmente la mecanizada y menor valor para la conservación.
90
Capítulo JI
En este caso , los escenarios obtenidos fueron evaluados sobre una de las metas de
conservación establecidas en el Convenio sobre la Diversidad Biológica (201 O); la cual
establece que se debe proteger por lo menos el 75% de las áreas más importantes para
la diversidad de las especies vegetales de cada región ecológica. En nuestro caso esta
meta se adoptó pero para las áreas de mayor aptitud para la conservación según los
resultados de eva luación del uso del suelo realizada.
El escenario de conservación es el que mejor permite cumplir con esta meta, ya que logra
conservar el 100% de la clase VS4, junto con el 73% de la superficie de la clase VS3; sin
embargo, los incrementos que se proponen para las alternativas de agricultura en este
escenario pudieran no ser suficientes para satisfacer la demandas de productos por parte
de las comunidades humanas en el paisaje.
91
Capltulo JI
Este nivel de fragmentación en el paisaje pod ria tener importantes repercusiones sobre la
biomasa forestal , ya que esta disminuye conforme los parches de una clase de vegetación
se vuelven más pequeños y aislados (Nascimento y Laurence, 2004) y sobre la densidad
de especies, ya que esta también disminuye conforme se incrementa el número de
parches y estos se vuelven más irregulares (Hernández-Stefanoni et al. , 2010).
Adicionalmente, estos bosque no solo mantienen una gran cantidad de ,especies plantas
endémicas, sino que también de vertebrados endémicos, por lo que la conversión las
áreas forestales a agricultura, aumenta el riesgo de la pérdida de especies aun en áreas
pequeñas (Maass, 1995).
Las implicaciones de los cambios de uso de suelo señalados en los escenarios, están
fuera de los objetivos de este trabajo; sin embargo, la utilización de modelos como los
desarrollados por (Hernández-Stefanoni et al., 201 O) podrían ser de gran utilidad para
evaluar los efectos del cambio de uso de suelo y la configuración del paisaje sobre la
biomasa y la densidad de especies vegetales y, ayudar a guiar las decisiones sobre el uso
del suelo . De igual manera, es necesario realizar estudios de la contribución relativa del
AFNM, la agricultura tradicional y la mecanizada a la economía de las comunidades
humanas en la zona de estudio, así como estimar el potencial de obtención de recursos
adicionales por PSA para evaluar la viabilidad socio-económica de los diferentes usos del
suelo en cada escenario.
92
•
Capítulo 11
BIBLIOGRAFÍA
Bello , P. J., R. H. Ponce y C. M. A. Liceaga (2006). lncorporating GIS and MCE suitability
assessment modeling of coral reef resources. Environmental Monitoring and
Assessment, 114, 225-256.
93
Capítulo JI
Eastman, J. R (2003). IDRISI Kilimanjaro: Guide to GIS and image processing updated
manual , version 14.0. Graduate School of Geography, Clark University.
Massachusetts. pp. 201-207.
Food and Agriculture Organization of the United Nations, 1985. Guidelines: Land evaluation
for irrigated agriculture, FAO Development Series 1. (Seleccionando los encabezados
del boletín) [Online] (Actualizado 201 O)
Disponible en : http://www.fao.org/docrep/X5648E/x5648eOO.htm
[Acceso 11 Febrero 2011]
Food and Agriculture Organization of the United Nations, 1997. Zonificación ag ro-ecológica:
Guía, FAO Soils Bulletin 73. (Seleccionando los encabezados del boletín) [Online]
(Actualizado 2011)
Disponible en : http://www.fao.org/docrep!W2962500.htm
[Acceso 19 Abril 2011]
Gentry, A. H. (1995). Diversity and floristic composition. of Neotropical dry forest, en:
Seasonally dry tropical forests, Bullock, S. H. , H. A. Mooney, E. Medina (eds).
Cambridge University Press. Great Britain. pp. 184-191 .
94
•
Capítulo JI
lnternational Tropical Timber Organization (2005).Revised ITTO criteria and indicators for
the sustainable management of tropical forest including reporting format. ITTO Policy
Development Series No. 15. pp. 10-14.
Maas, J. M. (1995) . Conversion of tropical dry forest to pasture and agricultu re, en :
Seasonally dry tropical forests, Bullock, S. H., H. A. Mooney, E. Medina (eds).
Cambridge University Press. Great Britain . pp. 399-402 .
95
apltulo ll
Mueller-Dombois, D., H. Ellenberg (1974). Aims and methods of vegetation ecology. John
Wiley & Sons, New York, USA. pp. 67 92.
Read , L. , y D. Lawrence (2003) . Litter nutrient dynamics during succession in dry tropical
forest of the Yucatan: regional and seasonal effects. Ecosystem , 6, 747-761 .
Saaty, T . L (1980). The Analytic Hierarchy process: planning , setting priorities, resource
allocation. MacGraw-Hill. New York. NY.
Solís, E. y J. Campo (2004) . Soil N and P dynamics in two secondary tropical dry forests
after fertilization . Forest Ecology and Management, 195, 409-418.
96
•
Capitulo 11
Vandermeer, J. y l. Perfecto (2007) . The agricultura! matrix and future paradigm for
conservation . Conservation Biology, 21 , 274-277.
Van der Merwe, J. H. (1997) GIS-aided land evaluation and decision-making for. regulating
urban expansion: A South Africa case study. GeoJurnal , 43, 135-151 .
97
98
a
•
Capítulo 111
DISCUSIÓN GENERAL
El paisaje presenta un gran potencial biofísico para las distintas alternativas de uso de
suelo; sin embargo , estos resultados dependen fundamentalmente de tres aspectos
importantes que deben ser considerados en la toma de decisiones sobre el uso del suelo :
1) la identificación del conjunto de criterios y factores utilizados en la evaluación del uso
,
del suelo; 2) la estandarizacon y priorización de los criterios y factores; 3) la selección del
método más adecuado para integrarlos de manera que pueda reflejar las relaciones entre
estos.
99
•
2003). Por esto, antes de obtener las información de los criterios y factores debe tomarse
en cuenta el tiempo disponible para la realización del estudio, la extensión del área a
cubrir, los costos aproximados para generar la información y si existe otra fuente que de
manera indirecta aporte dicha información, tomando en cuenta su margen de error
(SEMARNAT, 2006).
En este momento, se requiere hacer una distinción entre los factores de beneficio y costo ,
debido a que el objetivo de estas funciones es la maximización o minimización de un
factor (Malczewski , 1996). Por ejemplo, en el caso del los factores de beneficio como la
materia orgánica, el área basal o la densidad de especies, se utilizó una función de forma
sigmoidal monotónicamente creciente, ya que al incrementarse el valor de estos factores,
se incrementa la aptitud del sitio. En el caso de los factores de costo como la pendiente,
pedregosidad o la distancia a poblados y caminos se utilizó una función sigmoidal o lineal
monotónicamente decreciente, ya que al incrementarse el valor de estos factores, se
disminuye la aptitud del sitio; sin embargo, estos supuestos pueden variar para cada
alternativa del uso del suelo. En ambos casos se utilizaron este tipo de funciones , ya que
estas son las más ccynúnmente utilizadas (Eastman, 2003). En el caso del pH se utilizó
una función de forma de J, para reflejar un punto óptimo en el comportamiento de esta
variable.
100
Capítulo 111
En este estudio nos enfrentamos a la ausencia de estos rangos para algunos de los
factores como el IEB, el número de endemismos, ó como en el caso de los factores
edáficos, donde no fue posible utilizar los rango establecidos en la NOM-021-RECNAT-
2000 para algunos factores como puntos de control; ya que los valores observados en los
suelos del área de estudio se encontraron muy por debajo o por encima de los
establecidos en la NOM. Por lo tanto, fue necesario observar la distribución de los datos
de campo y utilizar los percentiles 25 y 75 como puntos de control , para reflejar la
variabilidad interna de nuestros datos. En el caso de otros factores como la pendiente y la
pedregosidad, se utilizaron los límites máximos de estos factores donde existe un 25% y
75% de erosión laminar del horizonte A del suelo para el caso de la agricultura tradicional
o donde se interfiere de moderadamente a severamente las prácticas de mecanización
del suelo según el manual para la conservación del suelo y el agua (1991 ). En el caso del
pH , se utilizaron los valores donde existe mayor disponibilidad de nutrientes según Barret
y colaborades (1998). En el caso de los factores de distancia, al no encontrar un rango
óptimo de distancia para el establecimiento de las alternativas, se utilizaron los valores
mínimos y máximos de distancia en el paisaje como puntos .de control.
101
booleanas pueden ser incorporadas, para que los valores de decisión sean calculados
como la unión o la intersección de los criterios. Así, dependiendo de la lógica de la
estructura de la regla de decisión, un sitio podría ser considerado como muy apto
solamente si se cumple con un conjunto de criterios (Regan, 2007).
En los que respecta a la priorización de los criterios, el proceso analítico jerárquico (PAJ)
,
resultó ser una técnica eficaz para incorporar las preferencias de diferentes usuarios para
determinar la prioridad de los criterios utilizados en la evaluación. Sin embargo, la
utilización de otro conjunto de prioridades y otros métodos de priorización podrían generar
distintos resultados a los obtenidos en este trabajo; debido a que la asignación de
prioridades mantiene cierto nivel de subjetividad, y depende en gran medida de la
experiencia y conocimientos del grupo de evaluación que las determinan (Regan et al. ,
2007 ; SEMARNAT, 2006). La búsqueda de consenso entre los diferentes actores
respecto a la prioridad de los factores es el principal aspecto a resolver en la toma de
decisiones y la mejor manera para minimizar la subjetividad en el proceso es búsqueda de
concesos entre los diferentes participantes (Malczewski, 1996).
102
Capítulo !JI
CONCLUSION ES
El paisaje de estudio mantiene una importante cobertura forestal, donde el 60% del área
se encuentra cubierto por bosques con edades mayores a 15 años, y el 35% de la
superficie se encuentra bajo una cobertura forestal menor a 15 años. Las zonas agrícolas
y urbanas representan únicamente el 5% de área total.
Los mapas de aptitud de uso de suelo permitieron además de ubicar las áreas con mayor
aptitud para cada alternativa de uso del suelo, conocer cómo se distribuyen estas zonas
en el área de estudio y saber cuáles son sus características. Estos resultados pueden ser
utilizados por los tomadores de decisiones para seleccionar las áreas más aptas para
cada alternativa de uso de suelo.
De acuerdo a los criterios y factores analizados, las alternativas con mayor potencial
biofísico para el desarrollo en el área de estudio son la agricultura tradicional , el AFNM, la
conservación y por último la agricultura mecanizada. Los resultados obtenidos de este
estudio permiten proponer un zonificación de los usos del suelo de base a la aptitud.
La sobreposición de los mapas de aptitud permitió detectar los conflictos por el uso del
suelo y ubicar las clases de cobertura donde estos ocurren. Aproximadamente el 20% del
área estudiada presenta la mayor aptitud para más de una alternativa de uso de suelo, lo
que posibilita el su rgimiento de conflictos entre las diferentes alternativas. Los mayores
conflictos se presentaron entre los usos del suelo más o menos compatibles, como el
AFNM y la conservación, o la agricultura tradicional y la mecanizada; lo cual hace más
factible la solución de estos conflictos y plantear un patrón de ocupación del paisaje desde
la perspectiva de usos del suelo compatibles o complementarios, más que antagónicos.
103
•
Las clases de vegetación VS3 y VS4, tienen mayor presión por parte de las diferentes
alternativas de uso de suelo, debido en parte al mayor desarrollo de la vegetación y a los
procesos asociados a la recuperación de la fertilidad del suelo que acompañan a la
sucesión secundaria de los bosques tropicales. Esto conlleva un mayor valor de estas
clases tanto para la agricultura, como para el AFNM y la conservación .
La evaluación del uso del suelo mostró que, la superficie considerada como muy apta
para la conservación podría incrementarse cerca de seis veces considerando el área de la
reserva RBKK. De igual manera, la superficie considerada como muy apta para la
agricultura mecanizada, podría incrementarse casi nueve veces la superficie que
actualmente ocupa. Estas dos condiciones sugieren que en el área de estudio aún existe
cierto margen de tiempo y espacio para la detonación de grandes conflictos entre los usos
del suelo incompatibles.
La integración de las herramientas de los AMC y los SIG permite articular un marco
metodológico explícito y científicamente defendible para la planeadón del uso del suelo a
nivel de paisaje.
La generación de escenarios para la planeadón del uso del suelo, permite modelar en el
tiempo y en el espacio patrones espaciales del uso del suelo explícitos, sobre los cuales
se puede realizar discusión sobre la asignación óptima de los recursos en el paisaje.
104
Capítulo 111
3) La planeación del uso del suelo debe considerar los valores e intereses de los
distintos grupos de usuarios y tomadores de decisiones para ponderar el peso de
los diferentes criterios y factores utilizados en la evaluación de la aptitud del uso
del suelo y determinar la alternativa que minimice el conflicto entre ellos.
4) La solución de conflictos por el uso del suelo debe tomar en cuenta el carácter
compatible y complementario de los usos agrícolas (tradicional y mecanizada), por
un lado y el uso de conservación y de AFNM por el otro, así como el carácter
antagónico entre los dos primeros y los dos últimos.
105
mecanizada se localicen en zonas planas, con suelos profundos y poco
pedregosos, con vegetación joven (más fácil de remover) , ubicados cerca de los
caminos principales y poblados; b) los sitios para agricultura tradicional se ubiquen
en zonas con pendientes ligeras a moderadas, con suelos relativamente fértiles y
con vegetación bien desarrollada cercanos a poblados y caminos; e) el AFNM se
ubique en zonas con pendientes de moderadas a fuertes, con vegetación bien
desarrollada y con presencia de especies de valor para construcción y leña, no
muy alejadas de los poblados y caminos; d) los sitios destinados a la conservación
también se ubiquen en zonas con pendientes de moderadas a fuertes, con
vegetación bien desarrollada y con presencia de interés para la conservación
(endémicas o en alguna categoría de riesgo), pero alejadas de los poblados y
caminos principales.
PERSPECTIVAS
Los resultados obtenidos en este trabajo, permiten realizar una zonificación de las
diferentes alternativas de uso del suelo en base a la aptitud biofísica del suelo; no
obstante, aún se requiere hacer esta evaluación incluyendo los aspectos socio-
económicos que permitan hacer una zonificación ecológica-económica , teniendo en
cuenta los elementos biofísicos y condiciones socio-económicas relevantes.
También se hace necesario obtener imágenes de satélite de diferentes años para realizar
estudios sobre la historia de los cambios de cobertura y uso del suelo.
La evaluación del uso del suelo para conservación consideró únicamente criterios para la
conservación de las especies de plantas leñosas; por lo que sería conveniente incorporar
criterios de conservación para otros grupos taxonómicos.
Finalmente, se deberían desarrollar escenarios de uso del suelo más realistas, tomando
en cuenta las necesidades de los pobladores para cada alternativa de uso y sus
limitaciones sociales y económicas, que ayuden a establecer criterios y recomendaciones
específicas para la planeación del uso del suelo en otras áreas similares.
106
•
Capitulo III
BIBLIOGRAFÍA
Barret, E., P. Chu, G. Coleman , D. Goff, L. Griffith, J. Hohla, N. Jones, K. Pohlman, H.
Poole, C. Spiva y J. Zwep (1998) . Manual de Agronomía, versión en español. Michel,
F. R. , C. U. Hamlet, G. A. Lagos-Barba (eds) . Laboratorios A-L de México.
Guadalajara, Jalisco. México. pp. 3-130.
Bautista-Zuñiga, F. , E. Batllori-Sampedro, M. A. Ortiz-Pérez, G. Palacio-Aponte y M.
Castillo-González (2003). Geoformas, agua y suelo en la Península de Yucatán , en:
Naturaleza y sociedad en el área maya: Pasado, Presente y Futuro, Colunga, P. y A.
Larque (eds). Academia Mexicana de Ciencias y Centro de Investigación Científica de
Yucatán , Mérida, Yucatán . pp. 21-35.
Chen, K. , R. Blong y C. Jacobson (2001 ). MCE-RISK: lntegrating multi-criteria evaluation
and GIS for risk decision-making in natural hazards. Environmental Modeling and
Software, 16, 387-397.
Chowdhury, R. R. , C. L. Schneider, Y. Ogneva-Himmelberger, M. P. Mendoza, C. S. Villar y
A. Baker-Piotkin (2004). Land cover and land use: Classification and Change analysis,
en: lntegrated Land-Changes Science and Tropical Deforestation in the Southem
Yucatan. Turner 11 , B. L. , J. Geoghegan, D. R. Foster (eds). Oxford University Press.
NewYork. pp. 81-104.
Eastman, J. R. (2003) . IDRISI Kilimanjaro : Guide to GIS and image processing updated
manual , version 14.0. Graduate School of Geography, Clark University.
Massachusetts. pp. 201-207.
Fabos, G. J. (1979) Planning the total landscape: A guide to intelligent land use. Westview
Press. Colorado, United States of America . pp . 61-77.
Food and Agriculture Organization of the United Nations, 1997. Zonificación agro-ecológica:
Guía, FAO Soils Bulletin 73. (Seleccionando los encabezados del boletín) [Online]
(Actualizado 2011)
Disponible en : http://www.fao.org/docrep/W2962500.htm
[Acceso 19 Abril 2011]
Hernández-Stefanoni, J. L. , J. M. Dupuy, F. Tun-Dzul , F. May-Pat (2010). lnfluence of
landscape structure and stand age on species density and biomass of a tropical dry
forest across spatial scales. Landscape Ecology. Publicado en línea. DOI
10.1007/s1 0980-010-9561-3
Malczewski , J. (1996) A GIS-based approach to multiple criteria group decision making.
lnternational Journal of Geographicallnformation systems 1O, 955-971 .
Regan , H. M. , Davis, F. W ., Andelman , S. J. , Widyanata , A. , Freese, M. (2007)
Comprehensive criteria for biodiversity evaluation in conservation planning.
Biodiversity Conservation , 16, 2715-2728.
SEMARNAT (2006). Proceso de ordenamiento ecológico, en : Manual de procesos de
ordenamiento ecológico, López, A. G., C. M. Santa, M. S. Díaz, V. F. Rasete, J. M.
Gabriel, H. J. M. Aguilar (eds). Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales
México, D.F. pp. 17-45.
107
•
ANEXO 1
Listado de las especies registradas en al área de estudio.
Familia Nombre científico Familia Nombre científico
Acanthaceae Aphelandra scabra Boragi naceae Baurreria pulchra
Anacardiace ae Spandias mambin Bursera simaruba
Annonaceae Malmea depressa Cardia gerascanthus
Sapranthus campechianus Cordiasp.
Apocynaceae Cascabela gaumeri Ehretia tinifolia
Cynanchum schlechtendalii Heliatrapium procumbens
Plumeria obtusa Tournefartia volubilis
Tabernaemantana alba Brassicaceae Capparis flexuosa
Tabernaemantana sp. Farchhammeria trifoliata
Arecaceae Sabaljapa Burseraceae Bursera simaruba
Aristolochiaceae Aristalachia maxima Cactaceae Napa/ea gaumeri
Aste raceae Ca/ea jamaicensis N apalea in a perta
Colea urticifolia Caricaceae Jacaratia mexicana
Lasianthaea fruticasa Celastraceae Hippocratea excelsa
Otopappus scaber Celtidaceae Celtis iguanaea
Otopappus sp. Ceratophyllaceae Cerataphytum tetragonolabum
Bignoniaceae Amphilophium paniculatum var molle Convolvulaceae Jacquemantia nodijlara
Amphilophium paniculatum var. paniculatum Jacquemantia pentantha
Arrabidaea f/aribunda Ebenaceae Diaspyras anisandra
Arrabidaea podapagon Diaspyras cuneata
Arrabidaea pubescens Diaspyras salicifolia
Arrabidaea sp. Diaspyras vera e-crucis
Cydista diversifolia Diospyros yatesiana
Cydista heterophylla Erythroxylaceae Erythroxylum ratundifolium
Cydista patasina Euphorbiaceae Acalypha vi/losa
Cydista sp. Astracacia tremula
Macfadyena unguis-cati Cnidoscalus acanitifolius
Mansoa verrucifera Croton arbareus
Parmentiera millspaughiana Croton glabellus
Pithecactenium crucigerum Croton lundellii
Stizophyllum riparium Croton reflexifolius
Tabebuia chrysantha Croton yucatanensis
Xylophragma seemannianum Gymnanthes lucida
Bixaceae Cochlospermum vitifolium Jatropha gaumeri
Manihot carthaginensis
Savia sessilif/ara
108
Listado de las especies registradas del bosque tropical seco de la zona de estudio.
Familia Nombre científico Familia Nombre científico
Fa baceae Acacia angustissima Flacourtiaceae Laetia thamnia
Acacia cornigera Samyda yucatanensis
Acacia gaumeri Lamiaceae Callicarpa acuminata
Acacia pennatu/a Vitex gaumeri
Aeschynomene fascicularis Leguminoceae Dalbergia glabra
Albizia tomentosa Mal pighiaceae Bunchosia glandulosa
Apopla nesia paniculata Bunchosia swartziana
Bauhinia divaricata Heteropterys brachiata
Bauhinia ungulata Heteropterys /aurifo/ia
Bursera simaruba Heteropterys /aurifo/ia
Caesalpinia gaumeri Heteropterys sp.
Caesalpinia yucatanensis Malpighia glabra
Chaetocalyx scandens Malvaceae Ceiba aesculifolia
Chloroleucon mangense Ceiba schottii
Diphysa carthagenensis Hampea trilobata
Hava rdia a/bicans Helicteres baruensis
Leucaena /eucocephala Heliocarpus donne/1-sm ith ii
Lonchocarpus hondurensis Luehea candida
Lonchocarpus rugosus Luehea speciosa
Lonchocarpus sp. Meliaceae Trichilia glabra
Lonchocarpus xuul Trichilia hirta
Lysiloma latisiliquum Myrsinaceae Ardisia escal/onioides
Mim osa bahamensis Parathesis cubana
Mim osa pigra Myrtaceae Calyptranthes pallens
Piscidia piscipula Calyptranthes sp.
Pithecellobium dulce Eugenia axillaris
Pithecellobium sp. Eugenia buxifolia
Platymiscium yucatanum Psidium sartorianum
Sen na atomaria Nyctagi naceae Neea psychotrioides
Senn a racemosa Neea sp.
Zapo teca formosa Pisonia aculeata
109
•
Listado de las especies registradas del bosque tropical seco de la zona de estudio.
Familia Nombre científico Familia Nombre científico
Olacaceae Schoepfia schreberi Rutaceae Casimiroa tetrameria
Ximenia americana Zanthoxylum caribaeum
Opiliaceae Agonandra obtusifolia Zanthoxylum procerum
Palmae Acrocomia mexicana Salicaceae Casearia corymbosa
Soba/ mexicana Casearia emarginata
Polygalaceae Securidaca diversifolia Casearia sp.
Polygonaceae Coccoloba acapu/censis Xylosma flexuosa
Coceo/aba diversifolia Zuelania guidonia
Coceo/aba sp. Sapindaceae 8/omia sp.
Coceo loba spicata Cardiospermum corindum
Gymnopodium floribundum Paullinia cururu
Neomillspaughia emarginata Serjania goniocarpa
Rhamnaceae Colubrina elliptica Talisia olivaeformis
Colubrina greggii Thouinia paucidentata
Karwinskia humbo/dtiana Sapotaceae Manilkara so pota
Krugiodendron ferreum Sideroxylon obtusifolium
Rub iaceae Alseis yucatanensis Solanaceae Solanum erianthum
Asemnantha pubescens Stercul iaceae Ayenia fasciculata
Chiococca alba Theophrastaceae Bonelia macrocarpa
Exostema caribaeum Ulmaceae Trema micrantha
Guettarda combsii Verbenaceae Duranta repens
Guettarda elliptica Lantano canescens
Guettarda gaumeri Petrea volubilis
Hamelia patens Violaceae Hybanthus yucatanensis
Hintonia octomera Vitaceae Cissus microcarpa
Machaonia lindeniana spp.l
Morinda yucatanensis ssp.2
Psychotria microdon
Randia acu/eata
Randia longiloba
Randia obcordata
Randia truncata
110
•
111
ANI!XO 2
Listado de las especies utilizadas para leña y/o construcción y endémicas registradas para la
zona de estudio.
Especies utilizadas para Especies utilizadas para la Especie utilizadas para
# leñá y/o construcción* construcción* Leña* Especies endérricas**
1 Acacia gaum eri Acacia gaumeri Acacia gaumeri Acacia gaumeri
2 Acacia pennatula Acacia pennatula Caesalpinía gaumeri Ayenia fasciculata
3 Ardisia escal/onioides Ardisía escallonioides Caesalpinia yucatanensís Bourreria pulchra
4 Arrabídaea floribunda Arrabidaea floribunda Calyptranthes pallens Caesalpinia yucatanensís
5 Bauhinía dívarícata Bauhinía dívaricata Cocco/oba acapu/censís Ca/ea urticífo/ía
6 Bourrería pulchra Bourreria pu/chra Coccoloba spicata Ceíba schottíi
7 Caesalpínía gaumeri Caesa/pinia gaumerí Cordia gerascanthus Cocco/oba spícata
8 Caesalpínía yucatanensís Cocco/oba acapulcensis Croton glabellus Colubrina greggíi
9 Calyptranthes pallens Coccoloba spícata Diospyros anisandra Díospyros anísandra
1O Coccoloba acapu/censis Croton glabellus Diospyros cuneata Díospyros cuneata
11 Coccoloba spicata Croton reflexífolíus Exostema caribaeum Guettarda gaumeri
12 Cordia gerascanthus Diospyros cuneata Hampea tri/abata Hampea trílobata
13 Croton glabellus Diphysa carthagenensis Havardia albicans Havardía albícans
14 Croton reflexifolíus Exostema caribaeum Helícteres baruensís Hintonia octomera
15 Díospyros anisandra Guettarda elliptíca Lonchocarpus x u uf Jatropha gaumerí
16 Díospyros cuneata Hampea trílobata Lysi/oma latisiliquum Lonchocarpus x uul
17 Diphysa carthagenensís Havardia a/bicans Machaonía líndeniana Machaonia lindeníana
18 Exostema caríbaeum Helícteres baruensis Malmea depressa Neomillspaughia emarginata
19 Guettarda elliptíca Helíocarpus donne/1-smithíí Neomíllspaughia emargínata Nopa/ea gaumeri
20 Hampea trilobata Lonchocarpus xuul Píscidía piscípu/a Nopa/ea inaperta
21 Havardia a/bicans Lysiloma latisilíquum Platymiscíum yucatanum Platymiscium yucatanum
22 Helícteres baruensis Macfadyena unguis-catí Psídíum sartorianum Randía /ongíloba
23 Helíocarpus donne/1-smithíí Machaonía líndeniana Senna alomaría Samyda yucatanensis
24 Lonchocarpus xuul Malmea depressa Thouínía paucídentata Thouinia paucidentata
25 Lysíloma latísiliquum Mimosa bahamensís
26 Macfadyena unguis-catí Neomillspaughia emarginata
27 Machaonia lindeniana Piscidia piscipula
28 Malmea depressa Platymíscium yucatanum
29 Mimosa bahamensis Psidíum sartorianum
30 Neomil/spaughia emarginata Sabaljapa
31 Piscidia piscipula Senna atomaria
32 Platymiscíum yucatanum Senna racemosa
33 Psídium sartorianum Thouinia paucidentata
34 Saba/ japa Zuelania guídonía
35 Senna atomaria
36 Senna racem osa
37 Thouinia paucidentata
38 Zuelanía guídonia
* La lista de especies se obtuvo de acuerdo con Kantún-Balam (2005).
**La lista de especies se obtuvo de acuerdo a Durán et al. (2000)
112
113
ANEXO 3
Los conjuntos difusos (o clases) son conjuntos sin límites abruptos, donde la transición entre
la pertenencia y la no pertenencia de una celda es gradual. Un conjunto difuso es
caracterizado por un grado de pertenencia difusa que va desde 0.0 a 1.0, indicando un
incremento continuo desde la no pertenencia hasta la completa pertenencia . IDRISI provee
cuatro conjuntos de funciones de pertenencia difusa: Sigmoidal, Forma de J, Lineal y definida
por el usuario. '
Estas funciones están controladas por cuatro puntos de control , que son los puntos de
inflexión de la curva, ordenados de menor a mayor según la escala de medición. El primer
punto marca la ubicación donde la función de pertenencia comienza a elevarse de O. El
segundo punto indica cuando la función alcanza 1. El tercer punto indica la posición donde el
grado de pertenencia comienza a caer por debajo de 1. El cuarto punto indica cuando la
función regresa a O.
~
b,c,d
11
b,c,d b e
a b e d
a
114
•
a b,c,d 1---......:.
~,b,c
e b e d
a d
b
\ .
co ntrol pom ts
115