Vía Crucis

2024
 Vía Crucis
2024
Fraternidad para
sanar el mundo
Guía: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo.

Todos: Amén.

Guía: Cristo, el Señor, hizo suyos nuestros sufrimientos

y cargó con nuestros dolores. Dispongamos nuestro
corazón para que a través de su pasión salvadora nos
reconozcamos hermanos, hijos del Padre celestial.

Todos: Yo confieso ante Dios todopoderoso, y ante

ustedes, hermanos, que he pecado mucho de
pensamiento, palabra, obra y omisión. Por mi culpa,
por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a
Santa María Virgen, a los ángeles, a los santos y a
ustedes, hermanos, que intercedan por mí ante Dios
nuestro Señor. Amén.
 1°Estación
Jesús es condenado
a muerte
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LOS NO NACIDOS

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «El Dios de nuestros padres ha glorificado a su

siervo Jesús, a quien ustedes entregaron y a quien negaron
ante Pilato cuando éste quería ponerlo en libertad. Ustedes
negaron al Santo y al Justo y pidieron como gracia la
libertad de un asesino, mientras que al Señor de la vida lo
hicieron morir» (Hch 3,13-15)

Silencio meditativo

Lector: Fiel al mandato recibido por Cristo,

la Iglesia católica se esfuerza por promover
la fraternidad universal y el respeto de la dignidad de todo
ser humano. (Documento Base #39)

Padre Nuestro, Ave

María y Gloria
 2°Estación
Jesús carga
con la cruz
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LOS MIGRANTES

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Tomaron a Jesús, y Él, cargando con su cruz, salió

al lugar llamado Calavera, que en hebreo se dice Gólgota»
(Jn 19,16b-17)

Silencio meditativo

Lector: La fe cristiana revive en la persona la vocación

humana a la fraternidad (...) La historia de la salvación
es un camino con los demás, un camino de perdón y de
reencuentros, un caminar no individual, sino fraternal.
(Documento Base #21)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 3°Estación
Jesús cae
por primera vez
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS
POR LAS VÍCTIMAS DE LAS DROGAS

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Llamando a la gente y a sus discípulos, Jesús

les dijo: Si alguno quiere venir detrás de mí, niéguese a
sí mismo, tome su cruz y sígame. Porque quien quiere
salvar su vida la perderá; pero quien pierda su vida por
mí y por el Evangelio, la salvará. Pues ¿de qué le sirve
al hombre ganar el mundo entero si arruina su vida?»
(Mc 8,34-36)

Silencio meditativo

Lector: Colocando de lado todos los intereses que se

interponen entre el otro y yo, tenemos que hacernos pobres
para encontrarnos cara a cara, para mirarnos a los ojos,
para abrazarnos fraternalmente. Más allá de
toda diferencia somos hermanos y hermanas.
(Documento Base #46)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 4°Estación
Jesús encuentra a María,
su madre
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LAS MADRES
QUE PIERDEN A SUS HIJOS EN LA GUERRA

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Se presentaron donde Él estaba, su madre y sus

parientes, pero no podían llegar a Él a causa de la multitud.
Le anunciaron: tu madre y tus parientes están ahí afuera
y quieren verte. Pero Él les respondió: mi madre y mis
hermanos son aquellos que oyen la Palabra de Dios y la
cumplen» (Lc 8,19-21)

Silencio meditativo

Lector: La humanidad lleva inscrita en sí una vocación a la

fraternidad, pero también la dramática posibilidad de su
traición. Da testimonio de ello el egoísmo cotidiano que
está en el fondo de tantas guerras e injusticias: muchos
seres humanos mueren a manos de hermanos
y hermanas que no saben reconocerse como
tales. En el signo de la custodia y responsabilidad
por el otro podemos decir que somos o no somos
hermanos. (Documento Base #17)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 5°Estación
El Cirineo ayuda a Jesús
a cargar con la cruz
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LAS VÍCTIMAS
DE LA EXPLOTACIÓN LABORAL

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Ayúdense mutuamente a llevar sus cargas y

cumplan así la Ley de Cristo. Porque si alguno se imagina
ser algo no siendo nada, se engaña a sí mismo. Examine
cada cual su propia conducta y entonces tendrá en Él, y no
en otros, motivos para gloriarse, pues cada uno tiene que
llevar su propia carga» (Gal 6,2-5)

Silencio meditativo

Lector: Una vez celebrada la Eucaristía, las asambleas

litúrgicas se disuelven lentamente y se dispersan
como semillas en los surcos de la tierra. Después
de escuchar su Palabra, de compartir el mismo
Pan y beber del mismo Cáliz, los cristianos vuelven
a sus hogares, escuelas, oficinas, comercios,
lugares de ocio, trazando nuevos caminos que a
través de la red de fraternidad construyen el
Reino. (Documento Base #49)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 6°Estación
La Verónica limpia
el rostro de Jesús
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS
POR LOS PRESOS Y ENCARCELADOS

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «No tenía presencia ni belleza que atrajera nuestras

miradas, ni aspecto que nos cautivase. Despreciado y
evitado de la gente, un hombre habituado a sufrir, curtido
en el dolor; al verlo se tapaban la cara; despreciado, lo
tuvimos por nada» (Is 53,2-3)

Silencio meditativo

Lector: La acción sanadora de Cristo sobre el mundo se

enfrenta a las dramáticas realidades de nuestra historia,
en la que la violencia generalizada nos ha convertido
a todos en víctimas y verdugos al mismo tiempo. En
nuestro país, mayoritariamente católico, por ejemplo,
hablar de fraternidad reconciliada puede tener un
sabor de incredulidad al recordar lo acontecido en
nuestras cárceles y en nuestras calles donde inocentes
y culpables han perdido la vida s i n
discriminación, haciendo, por ejemplo, de los últimos
años los más violentos de nuestra historia reciente.
(Documento Base #41)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 7°Estación
Jesús cae
por segunda vez
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LAS VÍCTIMAS
DEL RACISMO Y LA XENOFOBIA

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «A Él, que soportó nuestros sufrimientos y cargó

con nuestros dolores, lo tuvimos por un contagiado,
herido de Dios y afligido. Él, en cambio, fue traspasado por
nuestras rebeliones, triturado por nuestros crímenes. Sobre
Él descargó el castigo que nos sana y con sus cicatrices nos
hemos sanado» (Is 53,4-5)

Silencio meditativo

Lector: Ya el pueblo de Israel en su peregrinar cantaba la

alegría del caminar fraternal. Es la conciencia de que la
unidad de la humanidad, en la riqueza de la diversidad,
encuentra su origen en Dios mismo. Rostros, culturas,
lenguajes y pensamientos “caminando juntos” hacia el
principio y la meta de la vida: Dios. (Documento
Base #22)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 8°Estación
Jesús consuela
a las mujeres de Jerusalén
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LAS MUJERES
VÍCTIMAS DE LA VIOLENCIA INTRAFAMILIAR

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Cuando lo llevaban, lo seguía una gran multitud

del pueblo y mujeres que se dolían y lamentaban por Él.
Jesús, volviéndose a ellas les dijo: hijas de Jerusalén, no
lloren por mí, lloren más bien por ustedes y por sus hijos»
(Lc 23,27-28)

Silencio meditativo

Lector: Estamos frente a una constatación y una

búsqueda: el mundo está herido, urge encontrar caminos
de fraternidad y no dejarnos vencer por la violencia
que degrada a la persona humana y a toda la creación.
(Documeno Base #42)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 9°Estación
Jesús cae
por tercera vez
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LOS
SECUESTRADOS Y TORTURADOS

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «¿Qué gloria hay en soportar los golpes cuando han

faltado? Pero si obrando bien soportan el sufrimiento, esto
es meritorio ante Dios. Pues para esto han sido llamados,
ya que también Cristo sufrió por ustedes, dejándoles un
modelo para que sigan sus huellas» (1Pe 2,20-21)

Silencio meditativo

Lector: La celebración eucarística rompe todo muro y

frontera de rivalidad, violencia y egoísmo. He ahí el Reino
de Dios, un Reino de hijos en el Hijo, un Reino de hermanos
reconciliados por el Padre bondadoso de Cristo, un Reino
de hijos que agradecen y que al compartir la Palabra y el
pan, signos de vida, de fraternidad y de reconciliación, son
injertados dentro de la propia realidad de Dios.
(Documento Base #27)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 10°Estación
Jesús es despojado
de sus vestiduras
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LAS VÍCTIMAS
DE LA TRATA DE BLANCAS

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Los soldados tomaron sus vestiduras, con las que

hicieron cuatro lotes, un lote para cada soldado, y la túnica.
La túnica era sin costura, tejida de una pieza de arriba
abajo. Por eso se dijeron unos a otros: no la rompamos,
sino echemos a suertes a ver a quién le toca. Para que se
cumpliera la Escritura: Se han repartido mis vestiduras,
han echado a suertes mi túnica. Y eso es lo que hicieron los
soldados» (Jn 19,23-24)

Silencio meditativo

Lector: La Eucaristía es sanación para el mundo herido en

la fraternidad. Ahí donde el pecado nos hizo desconocernos
como hermanos y nos puso en relación de oposición
y rivalidad, la Eucaristía nos hace sentarnos a
la misma mesa del Cuerpo y de la Sangre de
Cristo como hijos de un mismo Padre y por lo
mismo, hermanos entre nosotros. (Documento
Base #30)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 11°Estación
Jesús es clavado
en la cruz
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LOS ENFERMOS
TERMINALES VÍCTIMAS DE LA EUTANASIA

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Llegados al lugar llamado Calvario, le crucificaron

allí a Él y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la
izquierda. Jesús decía: Padre, perdónales porque no saben
lo que hacen» (Lc 23,33-34)

Silencio meditativo

Lector: Precisamente, donde la herida del pecado ha

construido el reino de la muerte, Dios hace brotar la
vida de la herida del costado de Cristo (cf. Jn 19, 34). Las
llagas abiertas de Cristo crucificado son en el seno de la
historia la herida de amor que sana las otras heridas del
odio y la violencia que desfiguran nuestras existencias
quitándonos la identidad de hijos y de hermanos.
Así la Palabra al hacerse hombre ha redimido toda la
creación porque el ser de Dios es crear y
salvar. (Documento Base #23)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 12°Estación
Jesús muere
en la cruz
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LOS NIÑOS
VÍCTIMAS DE ABUSO SEXUAL

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Desde el mediodía hubo oscuridad sobre toda la

tierra hasta las tres de la tarde. Y alrededor de esta hora
clamó Jesús con fuerte voz: ¡Elí, Elí!, ¿lemá sabactaní?, esto
es: ¡Dios mío, Dios mío! ¿por qué me has abandonado? Pero
Jesús, dando de nuevo un fuerte grito exhaló el espíritu»
(Mt 27,45-46.50)

Silencio meditativo

Lector: La Iglesia en su cuerpo no está

exenta de estas heridas. También en ella
las relaciones entre sus miembros se han
visto muchas veces fracturadas. Hoy se ha
tomado conciencia de terribles abusos, muchos
de ellos graves delitos, entre quienes debieron
ser “padres” y no victimarios del vulnerable.
(Documento Base #19)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 13°Estación
Jesús es bajado
de la cruz
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR LOS
CRISTIANOS PERSEGUIDOS

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «Vino José de Arimatea, miembro respetable del

Consejo, que esperaba también el Reino de Dios, y tuvo la
valentía de entrar donde Pilato y pedirle el cuerpo de Jesús.
Informado por el centurión, concedió el cuerpo a José,
quien, comprando una sábana, lo descolgó de la cruz, lo
envolvió en la sábana y lo puso en un sepulcro que estaba
excavado en roca» (Mc 15,43.45-46a)

Silencio meditativo

Lector: El cristianismo primitivo es la prueba

fehaciente de la capacidad que tiene la
fe cristiana de reinventar la sociedad y la
cultura, y todo ello, en la fuerza de Aquel
que nos reúne alrededor de la misma mesa
haciéndose alimento en su Evangelio y en
su Cuerpo y Sangre. (Documento Base #47)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 14°Estación
Jesús es colocado
en el sepulcro
EN ESTA ESTACIÓN PEDIMOS POR TODOS LOS
ANCIANOS QUE MUEREN ABANDONADOS

Guía: Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos.

Todos: Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Lector: «En el lugar donde había sido crucificado había un

huerto, y en el huerto un sepulcro nuevo, en el que nadie
todavía había sido depositado. Allí, pues, porque era el día
de la Preparación de los judíos y el sepulcro estaba cerca,
pusieron a Jesús» (Jn 19,41-42)

Silencio meditativo

Lector: Hay nuevas heridas que van lacerando el mundo

que vivimos. Estas si se tapan terminan por infectarse.
Así el miedo, el rechazo, el desprecio y la insensibilidad se
traducen en xenofobia, violencia, exclusión, marginación,
descarte del niño que está por nacer y del anciano; en
fin, destrucción de la casa común. Incluso, tenemos que
decir que este distanciamiento con los demás se hace
manifiesto en un desprecio cada vez mayor a
la misma especie humana (...) Una herida que
supura la cultura del descarte y de la muerte.
(Documento Base #19)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

ORACIÓN
FINAL
Padre misericordioso,
por amor a toda la humanidad
acogiste la ofrenda que tu único Hijo
hizo de sí mismo en la Cruz,
a quién hemos acompañado hoy
en el camino hacia el Gólgota.
Tómanos de la mano, camina con nosotros,
para que no nos alejemos de Ti;
convierte nuestros corazones rebeldes,
para que aprendamos
a seguir proyectos de fraternidad.
Haz que los enemigos se den la mano,
para que gusten del perdón recíproco;
desarma la mano alzada
del hermano contra el hermano,
para que donde haya odio florezca la concordia.
Haz que el dolor y el sufrimiento de nuestro mundo
golpee nuestras falsas conciencias
y nos comprometa a luchar
por el advenimiento de tu Reino.
Haz que no nos comportemos
como enemigos de la cruz de Cristo,
para que participemos
en la gloria de su resurrección.
Él, que vive y reina contigo,
en la unidad del Espíritu Santo,
por los siglos de los siglos.
Amén.
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