La narrativa que rodea el arca de Noé y la épica del
diluvio perdura como una de las leyendas más ancestrales, cautivando la imaginación tanto de niños como de adultos a lo largo de los milenios. En los recuerdos infantiles, se relata cómo Dios desató el diluvio como un medio para erradicar la maldad que imperaba en la tierra. La historia nos cuenta que Noé y su familia lograron salvarse al emprender un viaje en un arca titánica, llevando consigo a bordo un zoológico flotante que albergaba a todas las especies de animales y aves. El viaje inaugural de esta monumental embarcación comenzó en el día 17 del segundo mes, coincidiendo 1 con el inicio de la lluvia, y se extendió a lo largo de los proverbialmente simbólicos 40 días y 40 noches. Sabiduría celestial en la épica del diluvio Aunque algunos de los detalles más precisos de la narrativa posterior pueden parecer difusos, el Libro del Génesis detalla que las aguas comenzaron a elevarse sobre la tierra durante un período extenso de 150 días. Aunque pocos pueden recordar con claridad tantos días, es posible que retengan la imagen de las cimas de las montañas desapareciendo bajo las olas. Quizás, en la narración de la llegada del arca al monte Ararat, los niños puedan perderse en la somnolencia y pasar por alto que este acontecimiento ocurrió en el día 17 del séptimo mes. https://origenes.substack.com/p/ascenso-celestial-en-la- embarcacion