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Algunas definiciones:
1. Autobiografías: del griego, el mismo, bida, y escribir, pintar.
Philippe Lejeune fue el que mejor definió la autobiografía: “relato retrospectivo en pros que
una persona real hace de su propia existencia, poniendo énfasis en su vida intelectual y, en
particular, en la historia de su personalidad”
“El pacto autobiográfico”
“La definición pone en juego elementos pertenecientes a cuatro categorías diferentes:
1) Forma del lenguajes
a) Narración
b) En prosa
2) Tema tratado: vida individual, historia de una personalidad.
3) Situación del autor: identidad del autor (cuyo nombre reenvia a una persona real) y
del narrador.
4) Posición del narrador:
a) Identidad del narrador y del personaje principal.
b) Perspectiva retrospectiva de la narración
“Lo que me interesa resaltar es que este elemento (el doble pacto autobiográfico y
referencial) es igualmente válido para toda la literatura personal, la cual, por tanto, quedaría
rigurosamente definida por la idea de identidad de autor, narrador y protagonista, y también
por el pacto referencial"
George May:
La autobiografía
“El término «biografía» tiene ahora un uso tan corriente que uno se sorprende al saber que
no existe sino desde hace poco más de doscientos cincuenta años: apenas algo más de un
siglo de ventaja sobre el de «autobiografía». No se sabe que fuera usado antes del siglo
XVIII; el primer diccionario que lo admitió es el Dictionnaire de Trévoux de 1721 y su
frecuencia, aun en el siglo XX, es notablemente baja según lo atestigua el Dictionnaire des
fréquences" (1979)
“Como se comprende, aquí la cosa precedió a la palabra; y desde mucho antes, ya que se
coincide en ver en Plutarco, que nació hacia la mitad del siglo I de nuestra era, como el
primer biógrafo, sino desde el punto de vista cronológico, al menos por su importancia"
(1979)
“En la autobiografía existe un problema añadido: ésta ha sido siempre, y en parte lo sigue
siendo, un género disputado entre la historia y la literatura. Tradicionalmente se le ha
asimilado más a la historia y se le enjuiciado por su valor documental; más recientemente
se le ha querido identificar con la novela, como veremos más adelante. Pienso por mi parte
que ambas posiciones anulan lo que este género tiene de específico e introducen
importantes confusiones teóricas y críticas, ya que ni la historia ni la novela, por separado,
ofrecen el instrumento teórico adecuado para analizar la autobiografía” (1997, 21)
“Por mi parte, creo que es un error dar a la autobiografía el mismo estatuto que a un libro de
historia, pero también es un motivo de confusión identificarla sin más con la ficción literaria.
Lo sustancial del género es la mezcla de los dos procesos: pretensión de referirse a una
realidad concreta y elaboración (manipulación) de esa realidad” (1997, 25)
Anna Caballé
“Biografía y autobiografía: convergencias y divergencias entre ambos géneros”
"Biografía y autobiografía se presentan como narraciones de una vida. Sin embargo, frente
a la biografía que, al menos en una situación ideal, acumula el máximo de información
posible sobre el biografiado en beneficio de su indudable complejidad humana, frente a ella,
incluso contra ella, se halla en cierto modo la autobiografía”
“(...) tanto en el plano de la voz narrativa como en el plano autorial ambos géneros se
oponen. Hay otras oposiciones: por ejemplo, frente al acopio de material que debe llevar a
cabo el biógrafo para dotar de objetividad y amplitud su trabajo; el autobiógrafo procede de
modo inverso mediante la “selección intencional de actuaciones”
“Por varias razones. En primer lugar porque nadie es capaz de relatar toda su vida: el
material de que dispone el autobiógrafo es infinitamente superior al más documentado
biógrafo; pensemos además en la posibilidad que se le ofrece al primero de incorporar su
vida onírica, incluir sus “yoes” imaginados, fantaseados, soñados o incluso cínicamente
inventados que no tienen cabida en la escritura biográfica.”
“Es pues una opción imposible que obliga a seleccionar del continuum vivido (y recordado:
una limitación real) aquellas actuaciones que se consideran más pertinentes o relevantes
¿En función de qué criterios? Toda autobiografía nace de la voluntad de dar un sentido a la
propia vida, de trazar de unas líneas de fuerza que retrospectiva doten de coherencia a la
propia existencia o al menos a parte de ella" (2005, 53-54)
George May
“Si se pudiera imaginar una lista cronológica más o menos completa de todas las
autobiografías conocidas, y una lista paralela de todos los estudios críticos o históricos
dedicados a la autobiografía, la primera no tendría necesidad sino de pocas páginas para
llegar hasta mediados del siglo XVIII; mientras que la segunda no contendría más que unos
pocos títulos para abarcar la segunda mitad o incluso el último tercio del siglo XX. De ahí se
desprende que el desarrollo del género - si existe- precedió cerca de dos siglo al de su
teoría, si es que esta existe”
“Sigue siendo tópico obligado iniciar los estudios sobre autobiografía española afirmando y
lamentando su escasez. Los españoles -se dice- no escribimos autobiografías, al contrario
de los franceses o los ingleses y tampoco somos dados a los diarios, los epistolarios y en
general a desvelar nuestra intimidad por escrito; el genio español -se insiste- es refractario a
la introversión, el autoanálisis y a meditar en torno a la propia individualidad”.
“Lo más curioso es que tales observaciones son también un tópico con el que autobiógrafos
y memorialistas suelen iniciar sus obras, las cuales, sin embargo, en alguna medida lo
desmienten. Esto es así desde fechas tempranas del siglo XIX y viene reiterándose hasta
muy entrado el siglo XX, incluso a pesar del hecho evidente de una cuantiosísima
producción autobiográfica en España a partir de la guerra civil y hasta nuestros días, lo que
demuestra que en todo caso las autobiografías en España se han leído poco, más que
escrito poco”.
“Resulta obvio que cuando los críticos se ven obligados una y otra vez a comenzar sus
trabajos discutiendo, no la importancia y calidad, sino la misma existencia del objeto de su
estudio, es que el problema no ha sido aún resuelto a plena satisfacción”
La autobiografía en España
- Las hagiografías:
Es la historia de la vida de los santos. Su propia etimología da cuenta de esta
condición.
¿Por qué vinculamos este tipo de textos con la autobiografía?
Se tratará de una autobiografía cuando la vida del santo sea escrita por sí mismo.
- La novela picaresca:
- A pesar de que, como sabemos, no constituye una autobiografía como tal,
sino que se trata de una autobiografía fingida (se rompe, en este caso, el
pacto autobiográfico) resulta un antecedente fundamental para entender la
autobiografía en el siglo XVIII.
- Además, al igual que en las autobiografías religiosas, la picaresca propone la
explicación de un caso o la justificación ante una autoridad mayor.
- Por otro lado, los primeros lectores del Lazarillo (1554) y Guzmán de
Alfarache (1599) leen estos textos como aunténticas autobiografías.
Siglo XVIII
“Lo que se desprende de todo esto es que el género en España ha sido socialmente
inoperante, de escasa repercusión: las circunstancias que vengo examinando han impedido
que ejerza una influencia significativa sobre el resto de la literatura o la cultura. Existe, pues,
una bastante productiva autobiografía española, pero el problema que se ha encontrado ha
sido el de su difusión y recepción. En general, puede afirmarse que hasta bien entrado el
siglo XX no se ha salvado por entero ese obstáculo; en lo que hace a los libros escritos en
el XVIII y XIX, sólo hay cinco autores que pueden considerarse de éxito: Torres Villarroel,
Mesonero Romanos, Alcalá Galiano, Fernández de Córdova y Zorrilla. Ellos sí han tenido
una importante repercusión. El resto es la historia de una literatura sin eco”.
Otros ejemplos: