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Nombre: Edwin Díaz

C.I.: V-17.976.518

Resumen Ministerio Pastoral

Todos hemos sentido ansiedades y temores a lo largo de nuestra vida,


inclusive más con las situaciones que vivimos estas situaciones son más
frecuentes, el temor como lo vi en clases es un estado natural el cual nos pone
alerte y nos hace prevenir situaciones, pero existen casos donde los temores
son ya trastornos psíquicos y deben ser tratados con expertos

Ahora bien en base a lo que aprendí hoy uno mismo puede saber cuáles son
sus temores y saber manejarlos pero cuando ya se ejerce un Ministerio
Pastoral vamos a afrontar casos de personas que lleguen con una cantidad de
situaciones diversas de temores y ansiedades donde debemos estar
preparados para saber que hacer

Lo primero que debemos saber para trasmitirlo es que muchos temores son a
lo que pasara en un mañana donde no se sabe si llegaran a suceder, y que
todo está puesto en la fidelidad de Dios hacia nosotros.

Todos los que estamos en Dios las cosas nos ayudan a bien, este versículo de
Romanos 8, nos sería difícil decírselo a una persona que ha pasado por una
situación, pero a medida que esa persona vaya siendo restaurada la entenderá
por sí solo.

Es fácil decir las cosas cuando el temor lo tiene otra persona y no somos
nosotros, por eso tenemos que darle la atención necesaria a la persona, ya sea
en orientación o remitiéndola a especialistas, ya que así la persona no se
sentirá sola, y podrá ir caminando hasta superar esos temores.

Al momento de tratar con una persona enferma, debemos verla con los ojos de
Cristo siendo conscientes de la situación que está atravesando, mostrando
simpatía, estar pendiente de la persona, visitarla, orar con ella, mostrarle que
Dios esta con ella, nosotros mismos debemos mostrarle el amor de Dios, que
vea que no está sola que estamos allí y que Dios no la abandona.

También es importante evitar decir cosas como que la persona está enferma
por poca fe, aconsejarle que si su enfermedad fue por descuido, que debe
tomar medidas para evitar las malas rutinas y en general mostrar que Dios
tiene un propósito y tratarla con amor.

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