2008 7.4.legislacion Nacional Aeronautica

LEGISLACIÓN
AERONÁUTICA
7.4
LEGISLACIÓN
NACIONAL
AERONÁUTICA
Convocatoria de controladores
de la circulación aérea
2008
7. Legislación Aeronáutica
ÍNDICE
Página
1. Introducción 3
2. La Ley de Navegación Aérea (Ley 48/1960) 5
2.1. Disposiciones generales
2.2. De las aeronaves

2.3. De los aeródromos, aeropuertos y servidumbres
aeronáuticas
2.4. Del personal aeronáutico, de la policía, de la circulación
aérea y los accidentes aéreos (asistencia y salvamento)
2.5. Del tráfico aéreo, del contrato de transporte, de los
seguros aéreos, del transporte privado, navegación de
turismo y escuelas de aviación
2.6. Transporte de viajeros
2.7. Transporte de mercancías
2.8. Sanciones
3. La Ley Penal de Navegación Aérea (Ley 209/1964) 16
3.1. Delitos contra la seguridad de la aeronave
3.2. Delitos contra el tráfico aéreo
3.3. Delitos contra el derecho de gentes
3.4. Delitos contra la autoridad
3.5. Delitos de falsedad
3.6. Delitos contra la propiedad
3.7. Delitos de imprevisión, imprudencia o impericia en el
tráfico aéreo
4. Ley 21/2003 de Seguridad Aérea 22
4.1. Competencias
4.2. Investigación de accidentes e incidentes
4.3. Control e inspección
4.4. Obligaciones
4.5. Régimen sancionador
7.4. Legislación nacional aeronáutica

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1. INTRODUCCIÓN
Propósito
Esta unidad didáctica proporciona información resumida sobre los contenidos

de la Ley de Navegación Aérea y de la Ley Penal de Navegación Aérea, a
efectos de:
Situar las bases (marco legal) sobre las que se desarrolla la navegación aérea
en nuestro país.
Destacar los aspectos legales cuyo conocimiento es esencial para el ejercicio de

la profesión por parte del controlador español de tránsito aéreo.
Objetivos
Con esta unidad se pretende, desde un punto de vista pedagógico, que el alumno
de control de tránsito aéreo conozca:
Lo dispuesto en la Legislación Aeronáutica española.
Los delitos y faltas aeronáuticas, y las sanciones, castigos y penas que se

pueden imponer por incumplimiento de la Ley.
Con el resumen legal que a continuación se expone NO SE PRETENDE en modo

alguno substituir el texto legislativo de las leyes a que se refiere esta unidad, así
como tampoco eximir de ninguna de las obligaciones legales vigentes.
Contenido
Esta unidad está constituida por dos partes:
1ª Parte, dedicada a la Ley de Navegación Aérea y que se ha agrupado en los

siguientes temas:
- Disposiciones generales: soberanía, leyes aeronáuticas, reglas para su

aplicación y organización administrativa.
- Aeronaves: clasificación, nacionalidad, documentación a bordo,

matriculación, certificados de aeronavegabilidad, requisas, incautaciones y
movilización, gravámenes y créditos privilegiados.
- Aeródromos, aeropuertos y servidumbres aeronáuticas.
- El personal aeronáutico: la policía de la Circulación Aérea y los accidentes

aéreos.

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- El tráfico aéreo: el contrato de transporte, el transporte de mercancías, las

responsabilidades en caso de accidente, los seguros aéreos, el transporte
privado, la navegación de turismo y las escuelas de aviación.
- Sanciones por incumplimiento de la Ley de Navegación Aérea.
2ª Parte, dedicada a la Ley Penal de Navegación Aérea, incluyendo lo

dispuesto sobre los siguientes temas:
- Disposiciones generales: faltas y delitos aeronáuticos, causas de exención

y modificativas de responsabilidad, penas graves y leves, medidas de
seguridad ante situaciones no constitutivas de delito y derecho supletorio.
- Delitos: contra la seguridad de la aeronave, contra el trafico aéreo, contra

el derecho de gente contra la autoridad y negligencia en el ejercicio del
mando, delitos de falsedad, delitos contra la propiedad, daños, polizonaje y
delitos de imprevisión, imprudencia o impericia en el tráfico aéreo.
- Faltas: contra la policía y la seguridad aérea, contra la policía de

aeropuertos y otras faltas.
Captación de la atención
Constitución
española
Leyes generales Leyes aeronáuticas
Reglamentos
Normas y
procedimientos
Operaciones de la
navegación aérea
La navegación aérea, como actividad que se desarrolla en los aeródromos y

aeropuertos españoles y en el espacio aéreo de soberanía del Estado, es
objeto de una legislación nacional especial y propia que articula y organiza
el desarrollo coherente de la actividad aeronáutica dentro de la sociedad
española.

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2. LA LEY DE NAVEGACIÓN
AÉREA (LEY 48/1960)
2.1. DISPOSICIONES GENERALES
“De la soberanía, de las leyes aeronáuticas y de las reglas generales para

su aplicación”.
El espacio aéreo situado sobre el territorio español y su mar territorial está sujeto a
la soberanía del Estado español. Podrá ser utilizado, para fines de navegación, por
aeronaves nacionales y por aeronaves extranjeras (estas últimas, previa
autorización por tratados, convenios o permiso especial).
Se faculta al Gobierno para fijar zonas prohibidas o restringidas y para suspender

las actividades aéreas, total o parcialmente.
La legislación española será de aplicación:
A las aeronaves extranjeras en territorio o espacio aéreo de soberanía española,

y a las aeronaves españolas, incluso cuando éstas se encuentren en territorio
extranjero o lo sobrevuelen, siempre que no se oponga a las leyes del país
subyacente.
La aeronave de Estado se considera territorio español.
“De la organización administrativa”.
Según la Constitución Española, es el Gobierno, a través de los ministerios

correspondientes (Fomento y Defensa, actualmente), el que tiene la competencia
exclusiva en materia de navegación aérea, estructuración aérea del territorio
nacional y distribución de aeródromos y aeropuertos.
2.2. DE LAS AERONAVES
“De su definición, clasificación y nacionalidad, de la documentación a

bordo, matriculación, certificados de aeronavegabilidad, requisas,
incautaciones y movilización, gravámenes y créditos privilegiados”.
Aeronave es toda construcción apta para el transporte de personas o cosas, capaz

de moverse en la atmósfera merced a las reacciones del aire, sea o no más ligera
que éste y tenga o no órganos moto propulsores.

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Se clasifican en:
Aeronaves de Estado (las aeronaves militares y las aeronaves no militares

destinadas a servicios estatales no comerciales).
Privadas (todas las demás).
Las aeronaves tendrán la nacionalidad del Estado en que estén matriculadas.
Existe un registro de matrícula, a cargo de la Autoridad Aeronáutica, en el que se

inscribirán todas las aeronaves españolas.
Las aeronaves españolas deben contar con autorización antes de ser matriculadas
en otros Estados o enajenadas a extranjeros.
Es competencia de la Autoridad Aeronáutica la calificación y autorización para el

vuelo de prototipos de aeronave y la autorización, inspección y suspensión para
construir en serie aeronaves, motores y accesorios específicos.
Todas las aeronaves necesitan, para poder volar, un Certificado de

Aeronavegabilidad, que es el documento que sirve para identificar técnicamente
la aeronave y define sus características. Este certificado debe ser extendido o
convalidado por la Autoridad Aeronáutica.
Las aeronaves llevarán visibles al exterior las marcas de nacionalidad y matrícula

y una placa (interior o exteriormente) con indicación del tipo, número de serie,
matrícula y nombre del propietario.
Las aeronaves llevarán a bordo los siguientes documentos:
Certificación de matrícula.
Certificado de aeronavegabilidad.
Licencia de aptitud de cada uno de los tripulantes, licencia y calificación de su

estación de radiocomunicación.
Diario del servicio radioeléctrico (donde se registrarán las comunicaciones

efectuadas y sus incidencias).
Cuaderno de la aeronave.
Cartilla de motores y de hélices.
Todos estos documentos podrán ser requeridos y examinados por las autoridades
en los aeródromos.

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Sí durante el vuelo ocurriesen incidencias que no se reflejasen en la

documentación de a bordo, el piloto al mando dará cuenta de ello a la autoridad del
aeródromo de llegada.
El Estado podrá requisar o incautar las aeronaves en territorio español, por acuerdo
del Consejo de Ministros, por motivos de interés público. También podrá incautarse
de los servicios aéreos de las empresas extranjeras en España y de los
pertenecientes a españoles, dentro o fuera de España.
Cuando sea acordado por el Gobierno, la Autoridad Aeronáutica es responsable de

la movilización de empresas españolas de transporte aéreo y la consiguiente
militarización del personal.
La adquisición, modificación o extinción de derechos sobre una aeronave deberá

constar en documento público o privado.
Las aeronaves tienen condición de bienes muebles de naturaleza especial y, pueden

ser objeto de hipoteca, usufructo, arrendamiento y demás derechos que las leyes
autoricen.
El embargo de aeronaves pertenecientes a empresas de tráfico aéreo no producirá

la interrupción del servicio público al que estén destinadas.
2.3. DE LOS AERÓDROMOS, AEROPUERTOS Y SERVIDUMBRES

AERONÁUTICAS
Se entiende por aeródromo la superficie de límites definidos apta para la salida y

llegada de aeronaves, con inclusión en su caso de edificios e instalaciones. Pueden
ser militares o civiles, públicos o privados y permanentes o eventuales. Los
aeródromos militares podrán ser declarados abiertos al tráfico civil.
Aeropuerto es el aeródromo en el que existen de modo permanente instalaciones

y servicios públicos para asistir de modo regular al tráfico aéreo, permitir el
aparcamiento y reparaciones del material aéreo y recibir o despachar pasajeros o
carga.
Reglamentariamente los aeropuertos y aeródromos se clasificarán según las

dimensiones y la índole de sus instalaciones y de las aeronaves que hayan de
utilizarlos y el carácter de los servicios que presten. Los aeropuertos abiertos al
tráfico internacional son objeto de normas especiales.
La construcción, calificación, inspección y explotación de los aeródromos y

aeropuertos públicos es competencia de la Autoridad Aeronáutica, así como el fijar
las tarifas de aterrizaje, salida y estacionamiento de aeronaves, ayudas a la
navegación, comunicaciones aeronáuticas y demás servicios de los aeropuertos y
aeródromos públicos. La dirección técnica y administrativa corresponde a la
Dirección General de Aviación Civil (DGAC).

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Las corporaciones locales podrán construir o participar en la construcción de

aeropuertos públicos, sometiéndose a las condiciones fijadas por la Autoridad
Aeronáutica del Estado. La instalación de aeródromos privados podrá ser autorizada
a corporaciones, entidades o particulares, siempre que sean de nacionalidad
española.
Son susceptibles de expropiación los bienes necesarios para el establecimiento e

instalación de servicios de aeródromos y ayudas a la navegación.
Los terrenos, construcciones e instalaciones que circunden los aeropuertos,

aeródromos y ayudas a la navegación están sujetos a las servidumbres
aeronáuticas que se determinen.
Los propietarios de inmuebles no podrán oponerse a la entrada en sus fincas o paso

por ellas para operaciones de salvamento o auxilio de aeronaves accidentadas.
2.4. DEL PERSONAL AERONÁUTICO, DE LA POLICÍA, DE LA CIRCULACIÓN

AÉREA Y DE LOS ACCIDENTES AÉREOS (ASISTENCIA Y SALVAMENTO)
“Del personal aeronáutico”
Para el ejercicio de cualquier función técnica propia de la navegación aérea (en

vuelo o en tierra), tanto civil como militar, será necesario el título expedido por la
Autoridad Aeronáutica que faculte específicamente para dicha función. Las licencias
del personal técnico expedidas en el extranjero podrán ser reconocidas en España.
El personal afecto a la navegación aérea puede ser:
De vuelo (tripulación: personal destinado al mando, pilotaje o servicio).
De tierra (directivos, técnicos y auxiliares, en aeropuertos, aeródromos o

navegación aérea).
El comandante de la aeronave es la persona designada por el empresario para

ejercer el mando. Podrá acceder al puesto de Comandante cualquier ciudadano que
tenga la nacionalidad de un estado miembro de la Unión Europea y se halle en
pleno disfrute de sus derechos civiles y en posesión del título de Piloto y licencia de
aptitud correspondiente al tipo de aeronave utilizada.
El Comandante designado por el empresario desempeñará el mando de la aeronave

y será el responsable de la misma y de su tripulación, de los viajeros y equipajes,
de la carga y del correo desde que se haga cargo de aquélla, aunque no asuma su
pilotaje material.
“De la policía de la navegación aérea”
Esta Ley define las funciones de policía de la circulación aérea, que abarcan el
cumplimiento de la normativa tendente a conseguir una rápida, ordenada y segura
circulación de las aeronaves, tanto en vuelo como en tierra.

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La Ley atribuye estas funciones a los jefes de demarcación aérea, jefes de

aeródromos y aeropuertos y a los comandantes de aeronave (en el plano civil, hoy
son ejercidas, por un lado por las Direcciones Regionales de Navegación Aérea y
Direcciones de Aeropuertos, de quienes dependen los Servicios de Tránsito Aéreo y
por otro lado por el comandante de aeronave ("piloto al mando").
Las disposiciones sobre policía de la circulación aérea y disciplina de vuelo se

aplican a todas las aeronaves, civiles o militares.
La Autoridad Aeronáutica, por sí o mediante concesiones, asumirá la organización y

funcionamiento de los servicios de telecomunicaciones aeronáuticas,
meteorológicas y de ayuda a la navegación. La autorización de dichos servicios,
igual que la de los de aeropuerto será obligatoria y se ajustará a las condiciones y
tarifas que los Reglamentos determinen.
Todas las aeronaves civiles o militares que vuelen dentro del espacio aéreo español
deberán:
Ser autorizadas, previa presentación del plan de vuelo (con las excepciones
aplicables en los Reglamentos), ostentar las marcas de nacionalidad, matrícula
o número y llevar la documentación exigida (por esta Ley, sus Reglamentos o
los Convenios o Tratados internacionales).
Seguir en vuelo los canales de navegación impuestos respetando las zonas

prohibidas o reservadas.
Variar su ruta primitivamente elegida, a requerimiento de la autoridad que vigile

la navegación aérea.
Efectuar las operaciones de partida y llegada en los aeródromos autorizados.
Aterrizar inmediatamente en el aeropuerto en que se indique por la autoridad

que vigile la navegación aérea.
“De los accidentes, de la asistencia y salvamento y de los hallazgos”
Se declara de interés público la asistencia y salvamento a las aeronaves

accidentadas o en peligro.
Es responsabilidad de las autoridades aeronáuticas la Dirección en las labores de

asistencia de las aeronaves accidentadas o en peligro.
La investigación y determinación de responsabilidades se efectuará bajo la dirección

de las autoridades aeronáuticas.
Se establece que una aeronave está abandonada cuando estuviese sin tripulación y
no sea posible determinar su legítimo propietario o cuando el propietario manifieste
expresamente su deseo de abandonarla.

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2.5. DEL TRÁFICO AÉREO, EL CONTRATO DE TRANSPORTE, DE LOS

SEGUROS AÉREOS, DEL TRANSPORTE PRIVADO, NAVEGACIÓN DE TURISMO
Y ESCUELAS DE AVIACIÓN
“Del tráfico aéreo”
Tráfico aéreo regular es el prestado para transporte comercial de pasajeros,

correo o carga y con arreglo a tarifas, itinerario y horario fijos y de conocimiento
general.
Tráfico eventual o no regular es cualquier otro de carácter comercial distinto al

anterior.
Tráfico aéreo interior es el que se efectúe sobre territorio de soberanía del

Estado nacional de la aeronave.
Tráfico aéreo exterior es el que se realice en todo o en parte, sobre territorio de

soberanía de otro Estado (este tráfico es internacional cuando tenga escala en
territorio extranjero).
El transporte aéreo internacional, tanto español como extranjero, puede ser

regular, no regular y de turismo.
El tráfico de cabotaje comprende todo transporte de pasajeros, carga o correo

que se realice entre lugar de soberanía española, aunque para ello sobrevuele
territorio o aguas jurisdiccionales de otro Estado.
Corresponde a la Autoridad Aeronáutica conceder o autorizar la implantación e

iniciación de servicios aéreos, así como ejercer la inspección necesaria para
garantizar el cumplimiento de las condiciones de la autorización.
El tráfico de cabotaje se reserva a empresas españolas. Se prohíbe efectuar

transporte de cabotaje a las aeronaves extranjeras.
El tráfico exterior necesita autorización especial de la Dirección General de Aviación

Civil (DGAC).
Las aeronaves de tráfico no regular necesitan autorización para cada viaje.
Es obligatoria la salida o llegada a territorio español por un aeropuerto aduanero a

toda aeronave de tráfico aéreo internacional, a excepción de las aeronaves de
turismo con previa autorización especial de la DGAC.
Los servicios aéreos españoles para el tráfico internacional de carácter regular, se

establecerán mediante convenios con los Estados interesados. Los permisos o
concesiones a empresas extranjeras se otorgarán normalmente bajo el principio de
reciprocidad.
Las aeronaves de Estado extranjeras necesitan autorización o invitación para

sobrevolar territorio español, excepto en misiones de búsqueda y salvamento.

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2.6. TRANSPORTE DE VIAJEROS
“Del contrato de Transporte”
Es obligatorio extender el billete de pasaje, de acuerdo a los requisitos y datos que

se establecen.
Se determina el carácter nominativo e intransferible del billete y su sola utilización

para el viaje para el que fue expedido.
Las tarifas del transporte de pasajeros y sus equipajes deben ser aprobadas por la
Autoridad Aeronáutica.
En caso de suspensión o retraso del viaje por causa de fuerza mayor o razones
meteorológicas, el transportista queda liberado de su responsabilidad, devolviendo
el precio del billete.
Si una vez comenzado el viaje, éste se interrumpe, el transportista viene obligado a

efectuar el transporte de viajeros y equipajes por su cuenta, hasta dejarlos en su
destino, salvo que el pasajero optase por un reembolso proporcional al trayecto no
recorrido.
También el transportista sufragará los gastos de manutención y hospedaje que se

deriven de la interrupción.
El transportista está obligado a transportar el equipaje de los viajeros y responderá

únicamente de la pérdida, substracción o deterioro de lo entregado para su
custodia.
El transportista podrá excluir a los pasajeros que puedan suponer perturbación para
el buen régimen de la aeronave.
2.7. TRANSPORTE DE MERCANCÍAS
El contrato de mercancías constituye un contrato entre transportista y expedidor. El

transportista está obligado a extender el talón de transporte, constituyendo éste
prueba plena sobre la existencia del contrato.
El transportista está obligado a la custodia de los objetos que se le entreguen para

transportar y a su entrega después de su llegada al destino.
Entre otros derechos, el expedidor tiene derecho de disposición sobre la mercancía

objeto de transporte.
El transportista puede excluir del contrato aquellas mercancías que puedan

constituir peligro evidente para la navegación.

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“Responsabilidades en caso de accidente”
El transportista es responsable del daño o perjuicio causado durante el transporte,

debiendo asumir las indemnizaciones correspondientes en favor del viajero,
respecto a la carga o equipajes y por los daños causados a personas o cosas en la
superficie terrestre por acción de la aeronave, aún cuando el transportista,
operador o sus agentes justifiquen que obraron con la debida diligencia.
En caso de colisión entre aeronaves, los empresarios de ellas serán solidariamente

responsables de los daños causados a terceros. Si la colisión ocurriese por culpa de
la tripulación de una de ellas, será de cargo del empresario los daños y pérdidas. Si
la culpa fuese común o por caso fortuito, cada uno de ellos responderá en
proporción al peso de la aeronave.
Las acciones para exigir el pago de indemnizaciones prescriben a los seis meses de
la fecha en que se causó el daño. Las reclamaciones por avería, retraso de la carga
o equipaje facturado deberán formularse por escrito dentro de los diez días
siguientes a la entrega o a la fecha en que debió entregarse.
“De los seguros aéreos”
Los seguros aéreos tienen por objeto garantizar los riesgos de la navegación aérea,
siendo obligatorios el de pasajeros, el de daños causados a terceros, el de
aeronaves destinadas al servicio de líneas aéreas y el de las que sean objeto de
hipoteca.
“Del Transporte privado, de la navegación de turismo y de las escuelas de

aviación”
Las aeronaves de transporte privado de empresas, las de escuelas de aviación, las

dedicadas a trabajos técnicos o científicos, las de turismo y las deportivas, no
podrán realizar servicio público de transporte ni utilizar terrenos diferentes de los
aeródromos oficialmente abiertos al tráfico, a menos que cuenten con autorización
de la Dirección General de Aviación Civil (DGAC).
2.8. SANCIONES
Por infracciones de la Ley de Navegación Aérea y de sus Reglamentos podrán

imponerse diferentes sanciones en vía gubernativa a empresas nacionales o
extranjeras de transporte aéreo, a empresas extranjeras de servicio de transporte
internacional, a propietarios de aeronaves de transporte privado de empresas o
destinadas a trabajos técnicos o científicos, al comandante de aeronave y al
personal técnico aeronáutica de los servicios de tierra.

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Las sanciones previstas por la Ley son las siguientes:
Apercibimiento.
Suspensión del título profesional o aeronáutico.
Multas.
Privación del título profesional o aeronáutico.
Suspensión de los derechos de tráfico otorgados a empresas de transporte.
Revocación de los derechos de tráfico otorgados a empresas de transporte.
Se impondrán sanciones a las empresas de transporte por:
Incumplimiento de las obligaciones de la concesión.
Infracciones en tarifas, itinerarios u horarios.
Menoscabo de la seguridad.
Negar sin fundamento el libre acceso del público a sus servicios.
Expedir billetes que no cumplan las disposiciones.
Utilizar aeronaves sin la documentación y licencias necesarias.
No dar conocimiento de accidentes a la Autoridad Aeronáutica.
No poner la diligencia debida en las operaciones de búsqueda y salvamento.
Se impondrán sanciones a los comandantes que:
Tripulen sin las licencias de personal reglamentarias.
Permitan que sus subordinados presten servicio en estado de embriaguez,

alcohólica o estupefaciente.
Permitan intervenir en la operación de vuelo a personas ajenas a la tripulación.
Abandonen la aeronave, carga o pasaje antes de la terminación del viaje.
Vuelen en zonas prohibidas o en condiciones contrarias a los Reglamentos.
Realicen vuelos de demostración sin permiso.
Transporten cadáveres o enfermos mentales o contagiosos sin la debida

autorización.
No pongan la debida diligencia en operaciones de búsqueda y salvamento.

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Vuelen sin presentación del plan de vuelo.
Inicien el vuelo con exceso de carga.
No cumplan las disposiciones de Aduana, Policía y Sanidad.
No aterricen cuando se le ordene.
No presenten la documentación reglamentaria después de aterrizar.
Se impondrán sanciones al personal técnico aeronáutico de los servicios de tierra

por todo acto u omisión relacionado con sus funciones que, sin constituir delito,
ponga en peligro la seguridad de las aeronaves, de las instalaciones en los
aeródromos o de las ayudas a la navegación, de conformidad con los Reglamentos.
Cualquier otra infracción a esta Ley o a sus Reglamentos será sancionada según el
prudente arbitrio de las autoridades aeronáuticas.
Lo previsto por esta Ley se entiende sin perjuicio de las, posibles responsabilidades
penales, así como las de carácter administrativo o laboral que se ajustarán a sus
peculiaridades.
Se trata de una Ley Especial, lo que significa que, respetando o establecido en el

Código Penal (ley penal general), establece unas particularidades para el ámbito
que regula, la navegación aérea.
No se ha contemplado en este resumen la influencia que el nuevo Código Penal

pueda suponer en este ámbito del ordenamiento jurídico.
“Disposiciones generales, delitos y faltas aeronáuticos, causas de exención

y modificadas de responsabilidad, penas graves y leves, medidas de
seguridad ante situaciones no constitutivas de delito, y derecho supletorio”
Se establecen como delitos y faltas aeronáuticas taxativamente los que se recogen

en esta ley.
Se remite a la ley penal general (Código Penal) para las causas de exención de
responsabilidad y circunstancias modificativas de la misma (estado de grave
necesidad, legítima defensa, enajenaciones permanentes o transitorias, etc.).
En todo lo no previsto especialmente por esta Ley, se aplicarán como normas

supletorias de sus disposiciones, los preceptos del Libro 1 del Código Penal.
En el caso de que un mismo hecho pueda ser calificado dentro de dos o más
conductas delictivas, se englobará en aquella que suponga pena más grave.
Se establecen las categorías de penas siguientes:
Graves: Reclusión, arresto, pérdida y/o suspensión de título.
Leves: Arresto, suspensión de título, multa, amonestación.

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Los atenuantes rebajan el grado de la pena y los agravantes (grave

entorpecimiento del tráfico o peligro para la vida o culpabilidad del comandante)
aumentan el grado de la pena.
Se establecen medidas de seguridad (“complementos" a las penas), consistentes

en:
Suspensión/pérdida del título profesional (cuando el delito se comete con

infracción de los deberes del cargo o valiéndose del mismo).
Incautación de aeronaves, demolición de instalaciones, etc., que supongan

riesgo para la navegación.
Se definen conceptos, para la aplicación de la Ley, como son el de tripulación,

actos de servicio y lo que se entiende por navegación aérea (“tiempo de vuelo entre
calzos").
La Ley establece un registro especial, a cargo de la Autoridad Aeronáutica, donde

consten las penas y medidas de seguridad impuestas.

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3. LA LEY PENAL DE
NAVEGACIÓN AÉREA
(LEY 209/1964)
Delitos contra la seguridad de la aeronave, contra el tráfico aéreo, contra
el derecho de gentes, contra la autoridad, abuso de autoridad y negligencia
en el ejercicio del mando, delitos de falsedad, delitos contra la propiedad,
daños, polizonaje y delitos de imprevisión, imprudencia o impericia en el
tráfico aéreo.
3.1. DELITOS CONTRA LA SEGURIDAD DE LA AERONAVE
Se describen como delitos contra la seguridad de la aeronave los siguientes:
La destrucción total o parcial de la aeronave, durante la navegación y fuera

de ella. Se agrava en caso de ocasionar muerte o lesiones.
No dar la información, o darla equivocada por parte de los servicios de

Tránsito Aéreo.
Negar información a los Servicios de Tránsito Aéreo, o darla equivocada,

por parte del comandante y miembros de la tripulación.
La no presentación del plan de vuelo antes de volar.
El no cumplir con las normas de seguridad dictadas por la autoridad

competente en lo relativo a obras y construcciones servidumbres
aeronáuticas y otras medidas de seguridad en los lugares en que se desarrolla
la navegación aérea.
El volar de forma arriesgada, efectuar vuelos acrobáticos o realizar

maniobras no autorizadas.
El exceso de peso en la aeronave o la mala distribución de la carga.
Los atentados en las aeronaves.
3.2. DELITOS CONTRA EL TRÁFICO AÉREO
Se describen como delitos contra el tráfico aéreo los siguientes:
Sedición, estableciendo como conducta delictiva toda aquélla que suponga la

no aceptación de la autoridad del piloto al mando en la aeronave o del jefe de
aeropuerto, contraviniendo sus órdenes, impidiendo sus funciones, realizando
actos de venganza, abandonando sus cometidos como represalia o causando
daño a bienes o personas.

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Este delito puede someterse por tripulantes, empleados o pasajeros. Se

consideran diversos agravantes (como por ejemplo, la comisión del delito para
interrumpir o interferir la navegación o si el delito se comete con armas), así
como exenciones de la responsabilidad (si hay sometimiento antes del delito o
se denuncia en tiempo hábil para evitarlo). También es delito la negligencia, del
comandante o del jefe de aeropuerto, en la represión de la sedición.
Abandono de la aeronave y del servicio, siendo delito lo siguiente:
- La dejación injustificada de las obligaciones del mando por parte del

comandante, de los miembros de la tripulación o del personal controlador,
con riesgo para la seguridad.
- El actuar bajo los efectos del alcohol o narcóticos, tanto para el personal de
la aeronave, como para el personal de los servicios de tránsito aéreo.
- El abandono de la aeronave en peligro sin orden del comandante.
- Se consideran agravantes el empleo de armas y si se el abandono se realiza

por la persona designada para el pilotaje.
- Embarcar substancias peligrosas, explosivos o armas, sin la debida

autorización, ya sea por el comandante, explotador, tripulación o por otras
personas.
- El uso de aparatos fotográficos o radioeléctricos a bordo.
- Asunción indebida del mando.
- Ejercer funciones de tripulante careciendo de título.
3.3. DELITOS CONTRA EL DERECHO DE GENTES
El derecho de gentes hace referencia a las normas de derecho privado en general, y

en este caso particular también a las normas de derecho internacional. Se recogen
los siguientes tipos de conductas delictivas:
Apoderamiento con violencia de la aeronave, de personas o de cosas que

se hallen dentro (“interferencia ilícita”), y en tales circunstancias que no se
pueda dar la protección de un Estado, con los agravantes de peligro de siniestro
para la aeronave o abandono de personas a su suerte. También es delito el
facilitar a otro la comisión del mismo, así como provocar la caída, pérdida,
incendio, aterrizaje o amerizaje de la aeronave con dicho propósito.
El robo de efectos personales y la rapiña dirigida contra las víctimas de

un accidente aéreo, con el agravante de practicarse contra heridos,
causándoles lesiones y/o agravando su estado.

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La denegación de auxilio por parte del comandante (o capitán de buque) si

se solicita desde otra aeronave o buque, así como el que los miembros de la
tripulación que conociendo algún caso de esta índole, no lo pusieran en
conocimiento del comandante. Esta obligación de auxilio se extiende también a
cualquiera que no preste su ayuda en una situación de peligro en la medida de
sus posibilidades.
3.4. DELITOS CONTRA LA AUTORIDAD
Se enumeran las siguientes faltas disciplinarias que pueden ser cometidas durante
el servicio:
Insultos al mando y desacatos, comprendiendo:
El maltrato de obra a un superior, con agravante en caso de lesiones.
El maltrato de palabra a un jefe de aeropuerto por un empleado del mismo.
La intimidación, amenaza o atentado contra la libertad del superior, con los

agravantes de uso de armas, agresión física, coacciones o si el acto se realiza
en público.
La ofensa de palabra contra el superior, por escrito o en forma equivalente.
Los atentados y desacatos cometidos por pasajeros contra el comandante o el

que haga sus veces.
Desobediencia, cuando no se mantiene la obligada disciplina que es necesario

observar para el mantenimiento de la seguridad durante el desempeño de las
funciones de la navegación aérea:
Se considera delito la desobediencia en vuelo o en aeropuerto de las órdenes

del comandante relativas al servicio, con el agravante de la dificultad que
pudiera derivarse para el vuelo, falta de seguridad o en los casos de auxilio a
otra aeronave, buque o persona.
También el pasajero, para mantener la seguridad, debe obediencia durante su

permanencia en la aeronave.
Abuso de autoridad y negligencia en el ejercicio del mando, siendo delito lo

siguiente:
El maltrato de un superior a un miembro de la tripulación, abusando de su

cargo, o a un pasajero por parte del comandante o por cualquier miembro de la
tripulación.
El abandonar arbitrariamente a cualquier miembro de la tripulación o pasajero

por parte del comandante, con agravante si se realiza fuera de territorio
nacional.
La no represión de cualquier acto de indisciplina, si del mismo puede derivarse

falta de seguridad para la aeronave o para los pasajeros.

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3.5. DELITOS DE FALSEDAD
Es delito la falsedad en los documentos referidos a la aeronave, como por ejemplo:
No llevar placas de matrícula o nacionalidad, o que sean falsas.
Valerse de documentos de otras aeronaves con ánimo de lucro o para causar

daños.
Declararse maliciosamente propietario de una aeronave (inscripción fraudulenta

en el registro).
La falsificación de los libros y documentos de a bordo (los miembros de la

tripulación tendrán la consideración de funcionarios públicos).
3.6. DELITOS CONTRA LA PROPIEDAD
Robo y hurto
- Cuando se realiza por tripulantes en aeronave en vuelo o en aeropuertos por

empleados del mismo, con el agravante si el objeto de que se trate es un
elemento de la aeronave.
- Realizado por el comandante que empleara ilegítimamente la aeronave en

provecho propio o de un tercero, o para cometer un delito o encubrirlo.
- Cuando exista apropiación del cargamento de la aeronave por los tripulantes

o por aquellos a los que hubiera sido encargada su custodia.
Daños
Se comete delito cuando se realizan los siguientes daños:
- Averías causadas maliciosamente en la nave o en su carga, con el agravante

de destrucción total o parcial de la misma.
- Modificar, destruir o deteriorar instalaciones, balizas o señales con la

consiguiente perturbación de la navegación aérea.
Polizonaje
Es delito el viajar sin billete en aeronave comercial, o continuar el viaje más allá de
donde cubre el billete, así como también comete delito el tripulante que consienta o
coopere en este comportamiento delictivo.

19
3.7. DELITOS DE IMPREVISIÓN, IMPRUDENCIA O IMPERICIA EN EL

TRÁFICO AÉREO
En la Ley se recogen aquellas conductas que, de realizarse con malicia, supondrían

un delito o una infracción de los Reglamentos, pero que se realizan por
imprudencia, impericia o imprevisión. La pena en estos casos es menor que la que
conlleva la misma conducta realizada con malicia. El causar daños supone un
aumento de las penas, pero nunca se llegará a la misma pena que si existiese
malicia.
Faltas: contra la policía y la seguridad aérea, contra la policía de

aeropuertos y otras faltas.
La Ley recoge las siguientes conductas como faltas ("delitos menos graves"):
Ocupar un espacio aéreo impidiendo su uso público.

Realizar plantaciones en instalaciones aeronáuticas.
Manipular en instalaciones aeronáuticas substancias inflamables o explosivas.
Encender luces que puedan confundir a la navegación aérea.
Encender fuegos en instalaciones aeronáuticas.
Emitir señales radioeléctricas.
Ejercer sin autorización funciones a bordo que requieran título.
No comunicar aterrizajes o partidas de aeronaves.
No llevar las listas de pasajeros, plan de vuelo y demás documentación en
regla.
No esperar las autorizaciones correspondientes para realizar maniobras.
En general, el realizar labores para las que sea preceptiva una autorización sin
tenerla.
La enseñanza del pilotaje sin autorización.
Dejar partir una aeronave sin la documentación reglamentaria.
No anotar las indicaciones reglamentarias.
Llevar más pasajeros de los autorizados.
Perturbar el tráfico aéreo.
Las faltas de puntualidad o asistencia al servicio.
Arrojar objetos que no sean lastre desde una aeronave.
No cumplir las normas de policía o con otras infracciones a disposiciones de las
autoridades aeronáuticas.

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21
4. LEY DE SEGURIDAD AÉREA

(LEY 48/1960)
Los desafíos que la seguridad aérea plantea, han conducido durante los últimos
años a complementar nuestra legislación aeronáutica general con la aprobación de
nuevas normas derivadas de las más recientes prescripciones y recomendaciones
de la Organización de Aviación Civil Internacional y de las disposiciones de
ejecución, necesarias para la aplicación de las normas comunitarias, y a adoptar
como reglas de derecho interno, los códigos y decisiones más relevantes acordados
por EUROCONTROL y por las Autoridades Aeronáuticas Conjuntas, organismo
asociado a la Conferencia Europea de Aviación Civil.
Esta Ley complementa A la Ley 48/1960 con una norma legal, mediante la
regulación de la ordenación y supervisión de la aviación civil, para determinar sus
fines y dotará a la autoridad aeronáutica con los medios necesarios para asegurar
la regularidad de los servicios aeronáuticos y el orden y la seguridad del transporte
aéreo.
4.1. COMPETENCIAS
El Título I de la Ley establece las competencias que en materia de aeropuertos de

interés general, control del espacio aéreo, tránsito y transporte aéreo, servicio
meteorológico y matriculación de aeronaves, el artículo 149.1.20ª de la
Constitución encomienda con carácter exclusivo al Estado.
El Ministerio de Fomento queda configurado como la autoridad aeronáutica civil

en el ámbito interno y sus funciones se orientan fundamentalmente a la
ordenación, supervisión y control de los diferentes sectores de actividad que
constituyen la aviación civil y al ejercicio de la potestad sancionadora en la materia.
En esta dirección y, siguiendo una pauta generalizada en los demás países de

nuestro entorno, se atribuye al Director General de Aviación Civil la potestad de
dictar disposiciones reglamentarias de carácter secundario y de contenido técnico y
especializado, denominadas «Circulares aeronáuticas», destinadas a completar,
precisar y asegurar la más eficaz aplicación de las normas con la finalidad de
preservar la seguridad de las operaciones de vuelo y el orden del tránsito y el
transporte aéreos.
4.2. INVESTIGACIÓN DE ACCIDENTES E INCIDENTES
La organización administrativa se completa con la creación del Consejo Asesor de

Aviación Civil como órgano superior de asesoramiento y consulta de la
Administración General del Estado en materia de aviación civil, adscrito al Ministerio
de Fomento.

22
El Título II se consagra a la regulación de la investigación técnica de los

accidentes e incidentes de aviación civil, hasta ahora establecida por el Real
Decreto 389/1998, de 13 de marzo, que incorporó a nuestro ordenamiento la
Directiva 94/56/CE, de 21 de noviembre, por la que se establecen los principios
fundamentales que rigen la investigación de los accidentes e incidentes de aviación
civil, de acuerdo con el anexo 13 del Convenio de Aviación Civil Internacional.
La nueva regulación refuerza la independencia del órgano responsable de efectuar

las investigaciones, la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de
Aviación Civil, órgano colegiado técnicamente especializado y adscrito
orgánicamente al Ministerio de Fomento.
4.3. CONTROL E INSPECCIÓN
Uno de los cometidos esenciales del órgano regulador consiste en verificar el

cumplimiento de las normas reguladoras de la aviación civil y reaccionar frente a
los eventuales incumplimientos, circunstancia que otorga particular relevancia a la
inspección aeronáutica. Pues bien, el Título III de la Ley se dedica íntegramente a
regular el contenido y la forma de ejercicio de las funciones de control, inspección
en sentido estricto y de verificación sobre las actividades aeronáuticas por el
Ministerio de Fomento.
El control de las actividades aeronáuticas tiene una doble dimensión: comprende

por una parte, las tradicionales funciones de vigilancia y control del cumplimiento
de las normas sobre aviación civil aplicables en los distintos ámbitos sujetos a las
mismas y, por otra, abarca también actuaciones de supervisión técnica y realización
de comprobaciones, pruebas y ensayos necesarios para la obtención y renovación
de licencias, habilitaciones y autorizaciones inherentes al campo de la aviación civil
y la certificación de las aeronaves y de los equipos y aparatos aeronáuticos.
4.4. OBLIGACIONES
La ley formula los requerimientos de seguridad y las pautas de comportamiento

exigibles a las personas y organizaciones que desarrollan actividades aeronáuticas:
Fabricación y mantenimiento de productos aeronáuticos.

Los operadores y compañías aéreas.
Las empresas que realizan trabajos aéreos.
Los proveedores de servicios de navegación aérea.
Los agentes de servicios aeroportuarios.
Los gestores de infraestructuras aeroportuarias.
Los pasajeros y usuarios y de las entidades
Personas que realicen actos de inspección.
4.5. RÉGIMEN SANCIONADOR
El Título V de la ley establece un régimen sancionador en materia de aviación civil

completo, tanto en lo material como en lo procedimental, que sustituye al
contenido en los artículos 152 a 159 de la Ley 48/1960.

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2008 7.4.legislacion Nacional Aeronautica

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LEGISLACIÓN

2.1. Disposiciones generales

2.2. De las aeronaves

2.7. Transporte de mercancías

7.4. Legislación nacional aeronáutica

Esta unidad didáctica proporciona información resumida sobre los contenidos

 Destacar los aspectos legales cuyo conocimiento es esencial para el ejercicio de

 Lo dispuesto en la Legislación Aeronáutica española.

 Los delitos y faltas aeronáuticas, y las sanciones, castigos y penas que se

Con el resumen legal que a continuación se expone NO SE PRETENDE en modo

Esta unidad está constituida por dos partes:

 1ª Parte, dedicada a la Ley de Navegación Aérea y que se ha agrupado en los

- Disposiciones generales: soberanía, leyes aeronáuticas, reglas para su

- Aeronaves: clasificación, nacionalidad, documentación a bordo,

- Aeródromos, aeropuertos y servidumbres aeronáuticas.

- El personal aeronáutico: la policía de la Circulación Aérea y los accidentes

7.4. Legislación nacional aeronáutica

- El tráfico aéreo: el contrato de transporte, el transporte de mercancías, las

- Sanciones por incumplimiento de la Ley de Navegación Aérea.

 2ª Parte, dedicada a la Ley Penal de Navegación Aérea, incluyendo lo

- Disposiciones generales: faltas y delitos aeronáuticos, causas de exención

- Delitos: contra la seguridad de la aeronave, contra el trafico aéreo, contra

- Faltas: contra la policía y la seguridad aérea, contra la policía de

Leyes generales Leyes aeronáuticas

La navegación aérea, como actividad que se desarrolla en los aeródromos y

7.4. Legislación nacional aeronáutica

“De la soberanía, de las leyes aeronáuticas y de las reglas generales para

Se faculta al Gobierno para fijar zonas prohibidas o restringidas y para suspender

La legislación española será de aplicación:

 A las aeronaves extranjeras en territorio o espacio aéreo de soberanía española,

La aeronave de Estado se considera territorio español.

“De la organización administrativa”.

Según la Constitución Española, es el Gobierno, a través de los ministerios

2.2. DE LAS AERONAVES

“De su definición, clasificación y nacionalidad, de la documentación a

Aeronave es toda construcción apta para el transporte de personas o cosas, capaz

7.4. Legislación nacional aeronáutica

 Aeronaves de Estado (las aeronaves militares y las aeronaves no militares

 Privadas (todas las demás).

Las aeronaves tendrán la nacionalidad del Estado en que estén matriculadas.

Existe un registro de matrícula, a cargo de la Autoridad Aeronáutica, en el que se

Es competencia de la Autoridad Aeronáutica la calificación y autorización para el

Todas las aeronaves necesitan, para poder volar, un Certificado de

Las aeronaves llevarán visibles al exterior las marcas de nacionalidad y matrícula

Las aeronaves llevarán a bordo los siguientes documentos:

 Licencia de aptitud de cada uno de los tripulantes, licencia y calificación de su

 Diario del servicio radioeléctrico (donde se registrarán las comunicaciones

 Cartilla de motores y de hélices.

7.4. Legislación nacional aeronáutica

Sí durante el vuelo ocurriesen incidencias que no se reflejasen en la

Cuando sea acordado por el Gobierno, la Autoridad Aeronáutica es responsable de

La adquisición, modificación o extinción de derechos sobre una aeronave deberá

Las aeronaves tienen condición de bienes muebles de naturaleza especial y, pueden

El embargo de aeronaves pertenecientes a empresas de tráfico aéreo no producirá

2.3. DE LOS AERÓDROMOS, AEROPUERTOS Y SERVIDUMBRES

Se entiende por aeródromo la superficie de límites definidos apta para la salida y

Aeropuerto es el aeródromo en el que existen de modo permanente instalaciones

Reglamentariamente los aeropuertos y aeródromos se clasificarán según las

La construcción, calificación, inspección y explotación de los aeródromos y

7.4. Legislación nacional aeronáutica

Las corporaciones locales podrán construir o participar en la construcción de

Son susceptibles de expropiación los bienes necesarios para el establecimiento e

Los terrenos, construcciones e instalaciones que circunden los aeropuertos,

Destacar los aspectos legales cuyo conocimiento es esencial para el ejercicio de

Lo dispuesto en la Legislación Aeronáutica española.

Los delitos y faltas aeronáuticas, y las sanciones, castigos y penas que se

1ª Parte, dedicada a la Ley de Navegación Aérea y que se ha agrupado en los

2ª Parte, dedicada a la Ley Penal de Navegación Aérea, incluyendo lo

A las aeronaves extranjeras en territorio o espacio aéreo de soberanía española,

Aeronaves de Estado (las aeronaves militares y las aeronaves no militares

Privadas (todas las demás).

Licencia de aptitud de cada uno de los tripulantes, licencia y calificación de su

Diario del servicio radioeléctrico (donde se registrarán las comunicaciones

Cartilla de motores y de hélices.

De vuelo (tripulación: personal destinado al mando, pilotaje o servicio).

De tierra (directivos, técnicos y auxiliares, en aeropuertos, aeródromos o

Seguir en vuelo los canales de navegación impuestos respetando las zonas

Variar su ruta primitivamente elegida, a requerimiento de la autoridad que vigile

Efectuar las operaciones de partida y llegada en los aeródromos autorizados.

Aterrizar inmediatamente en el aeropuerto en que se indique por la autoridad

Suspensión del título profesional o aeronáutico.

Privación del título profesional o aeronáutico.

Suspensión de los derechos de tráfico otorgados a empresas de transporte.

Revocación de los derechos de tráfico otorgados a empresas de transporte.

Incumplimiento de las obligaciones de la concesión.

Infracciones en tarifas, itinerarios u horarios.

Negar sin fundamento el libre acceso del público a sus servicios.

Expedir billetes que no cumplan las disposiciones.