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Leccion 51

El Principio de una Nación

Preparación: Estudie Génesis 12. Obtenga un pastel de cumpleaños. Si es posible que tenga glaseado color rojo,
blanco y azul.

Sermón; Muestre el pastel de cumpleaños. Mencione que durante esta semana nuestra nación celebra su
cumpleaños. Cuente una hsitoria breve del nacimiento de nuestra nación.
Diga: "Una historia en la Biblia dice acerca del nacimiento de una nación especial. Escuchen como le digo
acerca de eso. Averigüe que el nombre del hombre que Dios uso para empezar esa nación y por qué Dios
empezó la nación."
Dios tuvo un plan. El había prometido a Adán y Eva que él algún día mandaría a un Salvador al mundo. El
Salvador necesitaría una familia. La familia necesitaría ser muy especial. Ellos necesitarían confiar y adorar a
Dios. Muy lejos en la ciudad de Ur, Dios encontró a un hombre a quien él escogió para empezar esa familia
especial. El nombre del hombre era Abram. Que despué le fue cambiado a Abraham.
Dios habló con Abram. Y El le dijo: "Abram, vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la
tierra que te mostraré. Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás
bendición. Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las
familias de la tierra" (Génesis 12:1-3). Aunque Abram no supiera donde Dios lo dirigiría, él decidió obedecer.
Abram, su esposa Sarai, Taré su padre, y Lot, sobrino de Abram, empacaron sus pertenencias y estuvieron listos
para un viaje largo. Su destino, ellos no lo sabían. La familia viajó al norte. Ellos vinieron a un lugar llamado
Harán. Ellos pusieron sus tiendas y permanecidos allí para un rato. Mientras en Harán, Taré murió.
"Ustedes todavía no han llegado a la tierra que yo les daré," dijo Dios. "Es tiempo de viajar otra vez."
Esta vez Abram, Sarai, Lot y sus sirvientes y los animales y las multitudes viajaron al sur. Por fin ellos vinieron
a la tierra de Canaán. Dios apareció a Abram y dijo, "Esta es la tierra que te daré. Te pertenece a ti y a tu
familia." Aunque el aquel momento Abram no tuviera hijos, él creyó lo que Dios le dijo. El construyó un altar y
veneró a Dios quién lo había dirigido a esta tierra nueva.
Pasó el tiempo. Abram y Sarai se envejecieron. Ellos todavía no tenían hijos. Ellos se pueden haber preguntado
si sería verdad la promesa de Dios con respecto a una familia.
Seguramente, cuándo Abram era un de cien años de edad y Sarai de noventa años, ellos dieron a luz a un
pequeño bebé. Ellos le llamaron Isaac. Eso era el principio de la familia especial que Dios necesitó en la que
nacería su Hijo, el Salvador.
Muchos, pero muchos años después María visitó a Elizabet. Poco tiempo antes, un ángel había visitado a María
y le dijo que ella daría a luz a un bebé. Ella le debía de llamar Jesús, ya que El salvaría a sus pueblo de sus
pecados.
Cuando María le dijo a Elizabeth las buenas noticias, ella dijo: "Dios no se ha olvidado de su promesa que él
hizo a nuestro antepasado Abraham y sus hijos." María fue parte de la familia de Abraham.
Ella era la madre de Jesús, el Salvador. Recuerde la promesa de Dios a Abraham " Y haré de ti una nación
grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición "

Respuesta; Diga en breve las dos preguntas que usted mencionó antes de decir la historia. (“Averigüe que el
nombre del hombre que Dios uso para empezar esa nación y por qué Dios empezó la nación.").

Oración: Gracias, Dios, por Abraham y la nación especial que él empezó por cuál Dios mandó a Jesús. Gracias
por nuestra gran nación que nos permite este privilegio de venerarle. En el nombre de Jesús, amén.

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