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Los objetivos del análisis transaccional son, básicamente tres: la conciencia, la espontaneidad y la
intimidad:
Ser consciente es ser capaz de distinguir lo que es real de lo que es fantasía. Es el autoconocimiento.
La espontaneidad se relaciona con la expresión de los pensamientos, los sentimientos, las emociones y
las necesidades de uno mismo.
IMPORTANCIA
El análisis transaccional es considerado importante porque proporciona una comprensión única de cómo
las personas interactúan entre sí y cómo estas interacciones afectan su bienestar emocional y su
desarrollo personal. Algunas de las razones por las que el análisis transaccional es considerado
importante incluyen:
Desarrollo de la autoestima: El análisis transaccional se enfoca en ayudar a las personas a desarrollar una
mayor confianza en sí mismas y a mejorar su autoimagen.
Mejora en las relaciones interpersonales: El análisis transaccional se enfoca en mejorar las habilidades
de comunicación y resolución de conflictos, lo que puede ayudar a las personas a construir relaciones
más saludables y significativas.
[17/6 11:40] Leonardo D G: El análisis transaccional es una corriente psicológica que se basa en el
estudio de las transacciones que se producen entre las personas en sus relaciones interpersonales. Se
centra en el análisis de las comunicaciones y los intercambios entre los individuos, prestando especial
atención a cómo éstos influyen en la conducta y en la personalidad de cada uno. El análisis transaccional
se considera una herramienta útil para el crecimiento personal y el desarrollo de habilidades de
comunicación efectiva.
Berne consideró que el objetivo de la terapia era ayudar a las personas a comprender mejor sus
transacciones y a tomar conciencia de cómo estas influían en su vida cotidiana. Así, el Análisis
Transaccional se convirtió en una herramienta para el crecimiento personal y la resolución de conflictos a
nivel individual y grupal.
El Análisis Transaccional ha evolucionado desde entonces, incorporando conceptos de la teoría del ego,
la psicología cognitiva y la psicología social. Hoy en día, sigue siendo una herramienta valiosa para la
psicoterapia y el desarrollo personal.
[17/6 11:44] Leonardo D G: El análisis transaccional estructural es una rama del análisis transaccional
que se enfoca en entender cómo se estructuran los conceptos que las personas tienen sobre sí mismas y
sobre el mundo a su alrededor, y cómo eso influye en su comportamiento y relaciones interpersonales.
En esta perspectiva, se considera que cada persona tiene tres estructuras de personalidad: el Padre, el
Adulto y el Niño. El Padre es la estructura que representa las influencias externas y la autoridad, el
Adulto es la estructura racional y analítica y el Niño es la estructura emocional y creativa.
Un ejemplo de cómo esto puede influir en las relaciones interpersonales es cuando una persona asume
un rol paternal sobre otra, a través de su estructura de Padre. Por ejemplo, un jefe que asume una
actitud paternalista con sus subordinados, puede impedir que estos se desarrollen plenamente y tomen
decisiones autónomas, al tratarlos como si fueran niños.
En este sentido, el análisis transaccional estructural busca identificar estas dinámicas y ayudar a las
personas y organizaciones a promover relaciones más equitativas y saludables, en las que se respeten los
diferentes roles y se fomente el crecimiento personal y profesional de cada individuo.
[17/6 11:45] Leonardo D G: El análisis estructural transaccional propiamente dicho es una teoría
psicológica que busca comprender cómo las personas se comunican entre sí y cómo estas interacciones
influyen en su comportamiento y en su personalidad. Esta teoría se basa en la idea de que las personas
se comunican a través de transacciones, que son intercambios verbales y no verbales que suceden entre
dos o más personas.
El análisis estructural transaccional tiene como objetivo identificar los patrones de transacción que se
dan entre las personas y analizar cómo estos patrones influyen en su comportamiento y en su forma de
relacionarse con los demás. Para ello, se utiliza una metodología que involucra el análisis del lenguaje
corporal, la atención a los problemas de comunicación y la comprensión de los estados de ánimo de las
personas involucradas.
Un ejemplo de análisis estructural transaccional se podría dar en una terapia de pareja. En este caso, el
terapeuta podría observar cómo los miembros de la pareja se comunican entre sí y buscar patrones de
transacción que puedan estar afectando negativamente su relación. Por ejemplo, el terapeuta podría
observar que uno de los miembros de la pareja tiende a ser negativo y crítico con el otro, mientras que el
otro miembro tiende a retirarse y no responder.
Después de identificar estos patrones de transacción, el terapeuta podría trabajar con la pareja para
cambiarlos. Por ejemplo, podría animar al miembro negativo a comunicarse de manera más constructiva
y alentadora, mientras que anima al otro miembro a no retirarse y a responder de manera más activa.
Con el tiempo, estos cambios en las transacciones podría ayudar a la pareja a mejorar su relación y
resolver los problemas de comunicación que pudieran tener