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INTRODUCCION:

En el presente proyecto de investigación se abordará un tema histórico, el cual fue


de suma importancia en Europa y la Alemania del siglo XVI, ya que con la Reforma
Protestante de Lutero el teólogo y reformador alemán, se dio origen a una serie de
cambios necesarios para la reforma católica.

Se pretende ofrecer un panorama general de la figura histórica de Martín Lutero, de


la importancia del pensamiento político que generaron sus escritos y como este
movimiento influyo e impacto a la Europa católica; así como dar a conocer las
razones por las cuales Martin Lutero decidió separarse de la iglesia. Con la
disolución de los principios fundamentales del Medioevo y el surgimiento de las
nuevas corrientes intelectuales del humanismo y el Renacimiento, se dieron las
condiciones propicias para el desarrollo de la Reforma protestante, especialmente
en los territorios de habla alemana, en donde el fervor religioso se entremezclaba
con el disgusto hacia la Iglesia romana. Y se dará a conocer la importancia de este
evento en el desarrollo del pensamiento luterano, de forma particular, en el desafío a
la autoridad del papado, la radicalización de su postura frente a la respuesta de la
Iglesia romana a su doctrina, así como el impulso para llegar hasta el rompimiento.

El pensamiento y la obra de Martín Lutero se inscriben en ese gran movimiento


religioso de principios del siglo XVI denominado la Reforma protestante, que finalizó
con la supremacía eclesiástica, religiosa y política de la Iglesia de Roma en Europa
creando iglesias protestantes de diferentes denominaciones. Aunque la Reforma fue
esencialmente un movimiento religioso, produjo importantes cambios en casi todos
los aspectos de la vida social, económica y política, con grandes repercusiones en la
historia moderna del mundo occidental.

También es importante mencionar que el desafío de Lutero a la autoridad de Roma


es la culminación de un largo proceso en el cual se combinan una serie de
elementos, circunstancias y condiciones que rebasan los aspectos meramente
religiosos. La Reforma no comienza con el famoso episodio de las 95 tesis de Lutero
(31 de octubre de 1517), sino en una serie de reforma religiosa profundamente
sentida en la Iglesia ya desde mucho atrás, ya que durante siglos hubo una continua
lucha por la supremacía del poder político terrenal entre los papas y los poderes
seculares.

Antes de Lutero, muchos cristianos consideraban que la Iglesia de Roma había


perdido sus tradiciones espirituales y que se preocupaba excesivamente por el
poder temporal. El aumento de la alfabetización y la impresión de libros a fines del
siglo XV hicieron que muchos cristianos redescubrieran a los antiguos cristianos
comparándolos desfavorablemente con la Iglesia Católica Romana, y sus métodos
para financiar las diversas construcciones en las que ésta estaba abocada fueron
muy criticados. Dichos métodos incluían las indulgencias (pagos por la remisión que
hace la Iglesia de las penas debidas por los pecados), la venta de reliquias, la venta
de misas para los muertos, peregrinajes espirituales, y el logro de “méritos” por
donaciones.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Al momento de plantear este proyecto de investigación sobre Martin Lutero y la


iglesia, es común preguntarse ¿Cuáles fueron los cambios que provocaron? o ¿Qué
impacto tuvo en el mundo?. Pero para poder dar respuesta a estas es importante
primeramente hacernos la siguiente pregunta y comenzar a desarrollar el proyecto
con base a esta cuestión ¿Por qué Martin Lutero decidió separarse de la iglesia
católica?

Como bien sabemos la nueva forma que tenía Lutero de entender el evangelio, y la
importancia que daba a la doctrina de la justificación, reorienta todo su pensamiento,
en el que van interviniendo más cuestiones teológicas, dando lugar a una fe con un
fuerte acento cristológico, donde la gran pregunta de Lutero va a ser la cuestión de
la salvación, y donde ya se van a percibir los acentos; donde se va a fraguar una
espiritualidad que ha sido definida como una espiritualidad del mundo.

JUSTIFICACION

He decidido llevar a cabo la investigación y análisis de este tema porque este


movimiento conocido como la Reforma Protestante y la separación de Lutero y la
iglesia es una parte importante de la historia cristiana. Fue el origen de una serie de
cambios necesarios para la reforma católica. Este movimiento se originó en el siglo
XVI instigado por la necesidad de mejorar la iglesia cristiana. Comenzó exactamente
en el 1517 cuando Martín Lutero publicó sus famosas 95 Tesis, una pieza muy
polémica que abordaba cuestiones relacionadas con las indulgencias de la Iglesia
Católica.

Lutero buscaba protestar en contra de las malas prácticas y los abusos que se
venían presentando al interior de las iglesias. La división entre protestantes y
católicos marco la historia alemana durante un largo tiempo, así también el
pensamiento y la acción protestante tuvieron grandes efectos e influencia que hasta
el día de hoy prevalecen, por eso considero que es importante conocer de este
tema.

Lutero quería salvar el alma y la Iglesia sólo ofrecía un sistema dogmático, basado en
su exclusiva autoridad para interpretar la Biblia. De su lectura se dedujeron
cuestiones acerca de la predestinación humana, la negación del libre albedrío y la
sola justificación por la fe en los méritos de Cristo, socavando así las bases
tradicionales del catolicismo: los sacramentos, las indulgencias, el purgatorio, el
sacerdocio y la jerarquía eclesiástica. El protestantismo rechaza la tradición y se
atiene a la Biblia, única revelación absoluta que posee fuerza redentora y salvador.

OBJETIVOS GENERALES

Comprender y analizar sobre cómo la Europa católica quedo atrasada


económicamente gracias a la ya mencionada separación de Lutero con la Iglesia,
asimismo como se vio afectado el negocio de la iglesia junto con la venta de
indulgencias. Abordando un panorama general de la vida de Martín Lutero y a su vez
la influencia e impacto que tuvo su pensamiento protestante en Europa.

Con la finalidad de dar a conocer al lector como la Reforma protestante


forzosamente implicó una ruptura religiosa, política, social y cultural en la Europa
moderna y en el mundo en general. Reconocer que inicialmente fue uno de tantos
intentos renovadores de la espiritualidad que había partido de una reflexión teológica
desde dentro de la propia Iglesia, pero, sin embargo, desembocó en la división
religiosa y política de Europa, generando una fractura.
HIPOTESIS

En base a lo que se, y pensando en la posible respuesta a la pregunta que he


planteado en un principio, he deducido que las causas que llevaron a Martin Lutero a
separarse de la Iglesia fueron principalmente debido los abusos de la iglesia, y a que
claramente Lutero no estaba de acuerdo con la venta de indulgencias, también la
excesiva centralización a nivel de organización política y administrativa. Asimismo,
un aspecto más a tener en cuenta fue la corriente humanista y materialista que
empezaba a desarrollarse. Esta corriente consideraba el hombre, y no Dios, como el
centro del Universo (sin dejar de lado la religión, claro está).

I. La doctrina luterana y el desafío a la Iglesia Romana

En base a un artículo de la biblioteca digital de la UNAM se nos mencionan la


importancia de los momentos que conducen a Lutero de la controversia sobre las
indulgencias al rompimiento. Como será posible apreciar, más allá del contexto
histórico, de los hechos por sí mismos, el apego de Lutero a su teología, fuente de su
paz interior, habría de ser la guía que lo conduciría al rompimiento definitivo.

Lutero encontró los fundamentos de su teología posterior: la justificación por la fe y


no por las buenas obras (Rom. 1, 17). Es decir, una persona se podía salvar si creía
en la salvación y en Dios, y por tanto no dependía de las obras que hubiera realizado
a lo largo de su vida. La ruptura con Roma estaba comenzando a fraguarse, ya que,
a la crítica a la mundanidad de la Corte papal, se sumaba una nueva perspectiva y
unas nuevas soluciones frente al problema de la salvación, que tanto le obsesionaba.
Estas soluciones conllevaban una oposición al sistema de las indulgencias, capital
para la jerarquía eclesiástica de la época.

Ahora bien, creer o no creer depende de la conciencia de cada uno y con ello no se
causa ningún daño al poder secular, que debe permitir “que se crea de esta o de
aquella manera, como cada uno quiera y pueda, sin obligar a nadie... ya que nadie
puede ser obligado a creer”. No hay que confundir esto, aunque es lo que según
Lutero lamentablemente ocurre en esa época. La Iglesia no predica la palabra de
Dios, el Papa y los obispos “se han convertido en príncipes temporales, gobernando
con leyes que sólo conciernen al cuerpo y a los bienes... deberían gobernar las
almas interiormente con la palabra de Dios y, sin embargo, gobiernan externamente
palacios y ciudades”.

II. La Reforma luterana ¿reforma de costumbres o carácter teológico?

La Reforma protestante se explica por motivos religiosos y teológicos, aunque


intervinieron o ayudaron otros factores que tuvieron su influencia y su importancia
en la Reforma. Pero la Reforma que inició Lutero tiene un carácter eminentemente
religioso y teológico y habría que decir, sobre todo teológico. Lutero fue un profesor
de teología cuya idea es, principalmente, que la Iglesia vuelva al evangelio de
Jesucristo, pero es una Reforma de carácter teológico. A veces se cree que la
Reforma es una reforma de costumbres, pero lo que Lutero piensa es que la gente
practica mal porque cree mal; si se tienen unas creencias y éstas se corrigen, de
hecho, llevan a unas prácticas correctas. Por tanto, la Reforma que dice Lutero tiene
más carácter teológico.

III. Impacto de las 95 tesis

Por muchos años Martín Lutero se mantuvo en tácito anonimato como monje y
erudito, hasta 1517 cuando a través de un documento clavado a las puertas de la
iglesia del castillo de Wittenberg, se atrevió a denunciar públicamente la práctica
corrupta de la iglesia católica, con la venta de indulgencias para absolver el pecado;
principal y reiterativa denuncia de este texto conocido como Las 95 tesis.

El documento Disputa sobre el poder y la eficacia de las indulgencias, se basaba en


dos pautas esenciales que la protesta defendía a toda costa y eran que la biblia era
la autoridad religiosa base y que los humanos podían conseguir la salvación solo por
su fe y no por sus obras. El protestantismo que pronto surgió fue moldeado por
estas dos ideas generales de Lutero; pero también se sostenía en la denuncia y el
rechazo enérgico contra la práctica corrupta de vender indulgencias.
Se especula que esta lista de preguntas y proposiciones para el debate fue escrita
en tono notablemente humilde y académico, cuestionando más que acusando, pero
igual de provocador por su desafío para la iglesia. Se cree que las dos primeras de
las tesis sujetaban la idea medular de Lutero, que Dios esperaba que los
practicantes buscaran el arrepentimiento; mientras las 93 tesis restantes, criticaban
frontalmente la práctica de la iglesia católica.

El manuscrito se multiplicó y distribuyó rápidamente por toda Alemania y Roma en


1518, cuando Lutero fue convocado a defender sus opiniones en una asamblea
imperial, un debate de tres días que no produjo acuerdo. Un año después, las
enseñanzas de Lutero fueron investigadas por una comisión papal que las consideró
escandalosas y ofensivas, y fue así como el Papa León X emitió un decreto que daba
120 días a Lutero para retractarse de sus proposiciones heréticas. Su negativa a
hacerlo, le valió la excomulgación.
Lutero dio a estas 95 tesis el nombre de Disputa para que se aclare el poder de las
indulgencias. Más que para desafiar la autoridad de la iglesia, hizo esto para señalar
lo injusticia que implicaba la venta de las indulgencias papales. Eso se puede ver por
las siguientes tesis:

5. “El Papa no tiene ni la voluntad ni el poder para remitir penas, excepto las que
haya impuesto él por su propia autoridad. [...]
20. Por lo tanto, el Papa, cuando habla de remisión plenaria de todas las penas, no
significa realmente de todas, sino sólo de las que él mismo ha impuesto. [...]

36. Todo cristiano que experimenta verdadera compunción tiene como derecho
remisión plenaria de castigo y culpa, aunque no tenga cartas de perdón”

31. A Lutero le indignaba la venta de indulgencias, pues sabía que los seres
humanos no pueden negociar con Dios. En el otoño de 1517 escribió sus tesis, en
las que acusaba a la Iglesia de abusos económicos, doctrinales y religiosos. Con el
deseo de fomentar una reforma, no una rebelión, Lutero envió sus tesis al arzobispo
Alberto de Maguncia y a varios eruditos. Muchos historiadores señalan
aproximadamente el año 1517 como la fecha del nacimiento de la Reforma.

IV. Corrupción en la iglesia

Sin duda la iglesia católica ha sido una de las instituciones más perdurables de la
historia, su gran cantidad de feligreses, su robusta tradición, su sistema doctrinario y
sus vastas propiedades le han conferido una poderosa influencia en los asuntos
terrenales. Semejante poder ha sido sacudido en muchas ocasiones en sus casi dos
milenios de existencia. Fue el motivo más resaltante del rechazo a la iglesia católica
y de la activación del movimiento protestante, que socavó la autoridad espiritual del
Papa y su jerarquía. La apresurada riqueza de la iglesia con sus propiedades y poder
secular; las grandes dotaciones y la corrupción en los establecimientos monásticos;
tanto como la a venta de indulgencias en 1517 para financiar la reconstrucción de la
Basílica de San Pedro en Roma, fueron malgastando la fe cristiana. En resumen, el
hastío de varios países europeos por el pago de impuestos papales, el control
ejercido desde Roma por los delegados pontificios y la suma de acusaciones de
corrupción y mala voluntad contra la iglesia, resultaron en una propuesta urgente de
reforma.

V. Doctrinas de Lutero

Lutero fue desarrollando cada vez más a fondo sus doctrinas y contactó con
humanistas de la talla de Melanchton o Erasmo de Rotterdam. Así llegó a
conclusiones más profundas, tanto en aspectos dogmáticos como organizativos. Un
ejemplo de ello fue el sacerdocio universal, que implica la existencia de una relación
directa del individuo con Dios. La Iglesia, entendida como conjunto de clérigos que
desarrollan un papel de intermediario con la población seglar, perdía esta función.

La interpretación de las Escrituras, según Lutero, no tenía por qué ser monopolio
exclusivo del clero, sino que cualquier fiel que supiera leer podía extraer
conclusiones válidas. Este hecho fundamental tiene como consecuencia la
necesidad de traducir la Biblia a las diferentes lenguas vernáculas que pasaban a ser
un instrumento de transmisión de contenidos filosóficos, científicos e intelectuales en
general. Es decir, con ello, las lenguas vernáculas se revitalizaron enormemente,
principalmente en aquellos Estados en los que se extendió el punto de vista de
Lutero. Además, el clero, al no ser un elemento intermediario entre Dios y la
sociedad, al perder el estatus de segmento privilegiado, no tiene por qué
diferenciarse del resto del cuerpo social, y de esta forma se integra en él y se abole
el celibato eclesiástico. Otra consecuencia muy importante fue la eliminación de
algunos sacramentos de la Iglesia Católica, de manera que tan sólo conservó el
bautismo y la eucaristía.

En la eucaristía, por ejemplo, demandaba que se devolviera el cáliz a los laicos, y en


la transubstanciación defendía la presencia real del cuerpo y de la sangre de Cristo,
con lo que en realidad propugnaba era la consubstanciación. La consecuencia social
y política de este hecho fue, como es obvio, la pérdida de poder sacramental de la
casta sacerdotal que había perdido sus poderes espirituales diferenciales. Los fieles
pasaban a ser, necesariamente, los protagonistas de las ceremonias, si bien es
cierto que la grey necesita de un pastor que la guiara, pero que no realizara ninguna
función sacramental. A nivel organizativo, Lutero denunció la centralización de la
Iglesia Católica y defendió la independencia de las diferentes Iglesias nacionales,
cuya cabeza debía ser el príncipe legítimo de cada Estado.

Esto es lógico, ya que, si se considera que no debe existir un cuerpo social diferente
del resto de la sociedad, si se considera que los encargados de dirigir el culto deben
ser un elemento más de la estructura social, esto implica que deben situarse debajo
del poder temporal, como todos los demás miembros.
La consecuencia política de esta premisa es de todos conocida: las Guerras de
Religión de los siglos XVI y XVII: Una serie de conflictos de naturaleza
políticoreligiosa que sumieron a Europa en un baño de sangre cuyas consecuencias
se rastrean hasta en la contemporaneidad.

VI. La concepción de Lutero de la autoridad política

A lo largo de las siguientes líneas tratare de realizar un breve bosquejo de la


concepción que el reformador alemán tenía de la autoridad política, pero antes
hemos de precisar que Lutero era principalmente un teólogo cristiano, y no un
pensador político Por ello, su pensamiento político más bien fue una consecuencia
de sus planteamientos religiosos. De hecho, en él no se encuentra un pensamiento
político sistemático, aunque sí es cierto que estuvo muy preocupado por el problema
de la autoridad que los gobernantes ejercían y los límites del poder.

Por su formación teológica, pensaba que los seres humanos se debían dividir en dos
grupos o reinos: el Reino de Dios, donde se debían incluir los que creían en Cristo, y
el Reino de este mundo. Cada uno de estos diferentes ámbitos debía disponer de su
propio sistema político. De esta forma, el Reino de Dios debía estar gobernado por
un sistema espiritual, mientras que el Reino de este mundo, por un sistema secular.
El espiritual debía recurrir a la palabra como instrumento, y el secular, a la espada.

En la idea de Cristiandad del mundo medieval no existían los dos mundos o reinos
que propugnaba el fraile agustino, sino sólo un poder. De hecho, cuando Papado e
Imperio habían chocado, no lo habían hecho para dirimir qué poder estaba port
encima de cuál. Los dos representaban al mismo: el poder político-temporal de
justificación divina. A consecuencia de esto, en el mundo tardomedieval no existía
una diferenciación de gobierno para cada una de esas esferas.

Lutero no reconocía la capacidad de rebelarse en contra del poder establecido,


porque no tenían autoridad para ello. En realidad, consideraba que sólo podían
sublevarse contra la autoridad los que ya de por sí disponían de alguna. A resultas
de ello, los príncipes protestantes podrían sublevarse contre el Emperador, pero no
así sus súbditos contra ellos. La consecuencia política y social de esta postura fue el
fortalecimiento del poder de los príncipes luteranos, frente a sus vasallos y frente a la
autoridad, antes realmente superior, y después sólo formalmente, de los
emperadores. Aparte de todo lo dicho anteriormente, hay que destacar que la
doctrina de los dos reinos fue un término que no lo usó en realidad el fraile agustino,
sino que fue acuñado definitivamente en 1922 por teólogos luteranos, a
consecuencia de lo cual se desataron importantes fracturas políticas.

VII. Consecuencia final

En los años posteriores a este conflicto, el luteranismo fue dibujándose y


definiéndose, en relación con el resto de las propuestas reformistas. A resultas de
este fracaso, el luteranismo quedó como una de tantas formas de entender el
cristianismo y se consolidó como alternativa religiosa y política. Había demasiadas
diferencias dogmáticas y organizativas que lo alejaban de un ensayo tan humanista.

Los grupos sociales más deteriorados de la sociedad continuaron con la situación de


subsidiariedad y con la sumisión, en puntos de vista ideológico-religiosos, por no
decir económico-sociales, a los príncipes protestantes.

En este punto conviene recordar que el concepto que tenía Lutero de la autoridad
política, entendida como pública, era que se trataba, necesariamente, de un poder
político muy fuerte. En este punto podemos rastrear otra diferencia con el
reformador suizo, que, aunque aceptaba la autoridad secular, la cuestionaba si
objetivamente desarrollaba una serie de actuaciones en contra de las Escrituras.

Otra consecuencia, en este caso de lo anteriormente comentado, fue la definición y


delimitación de los diferentes constructos políticos. Unos constructos que iban
caminando, en la medida de lo posible, hacia el absolutismo monárquico. Las
monarquías empezaron a utilizar titulaciones antes reservadas, tan sólo, para los
cargos eclesiásticos como los pontífices, como era el tratamiento de Majestad,
cuando anteriormente tan sólo utilizaban el de Alteza, lo cual implicaba,
necesariamente, la asunción de un cierto carácter teocrático propio de los vicarios
de Cristo, por parte de las monarquías europeas. Y la reforma luterana, que conllevó
la asunción del poder religioso por parte de los príncipes, fue un elemento esencial.
Y la religión pasó a ser, tanto o más que antes, un elemento cohesionador
fundamental en el cuerpo político. Ejemplos de todo ello fueron las enormes
tensiones religiosas y políticas de la segunda mitad del XVI, y las tensiones del XVII.

La religión, por tanto, pasaba a ser un elemento de Estado. Es cierto que ya se había
utilizado como tal durante la edad media (la creación del Santo Oficio papal así lo
demuestra) pero no fue hasta la modernidad (término que hace referencia a la edad
moderna) cuando pasó a ser un asunto de Estado.

De hecho, si bien es cierto que Europa fue un continente represor ya desde el


Medievo, el planteamiento político, la represión ejercida desde arriba, con signos,
incluso, de genocidio, no se desarrolló hasta la Reforma. Sin embargo, no se trata de
afirmar que este movimiento de renovación generara la represión posterior, pero sí
contribuyó a alinear las creencias religiosas personales como un elemento
fundamental en el fortalecimiento o debilitamiento del poder político

BIBLIOGRAFÍA UTILIZADA:

La bibliografía que a continuación se presenta es un pequeño conjunto de obras que


se han utilizado para la redacción del presente artículo. Algunos de estos textos se
han referenciado con importante profusión debido a la riqueza de la información que
contienen. Otros han servido para aspectos más puntuales, para ratificar información
hallada en otras obras o para realizar una oportuna contextualización.

http://132.248.9.195/ptd2009/agosto/0646718/Index.html

http://132.248.9.195/ptd2022/enero/0821432/Index.html

https://www.dw.com/es/mart%C3%ADn-lutero-el-monje-que-cambi%C3%B3-el-
mundo/a-36213755

https://historiageneral.com/2009/03/15/la-reforma-protestante-de-martin-lutero/

https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0049-34492001000300002

https://web.unican.es/campuscultural/Documents/Aula%20de%20estudios%20sobre
%20religi%C3%B3n/2016-
2017/Lutero%20y%20el%20inicio%20de%20la%20Reforma%20Protestante.pdf
https://biblat.unam.mx/hevila/EnClavesdelPensamiento/2014/vol8/no15/7.pdf

http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/se/20100609123955/8varnagy.pdf

http://clio.rediris.es/n39/articulos/Lutero.pdf

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