Está en la página 1de 11

INTRODUCCIÓN:

Todos tenemos algún conocimiento de posesión, ya que hemos sido o incluso


seguimos siendo poseedores ya sea de bienes muebles como de nuestros teléfonos
o de la laptop que usamos diariamente para estudiar o trabajar como también
podemos ser poseedores de bienes inmuebles como de una casa tanto como de
una casa propia o que estemos alquilando y así también tenemos conocimiento con
respecto al concebido ya que todos alguna vez lo fuimos y gracias a que no se
vulneran nuestros derechos cuando fuimos concebidos estamos actualmente siendo
poseedores de algunos bienes muebles o inmuebles.

El ensayo que presentamos a continuación tiene un propósito de analizar cuál es la


regulación que tienen los derechos reales en nuestra legislación peruana con
respecto al concebido , pero específicamente abordaremos el tema de posesión en
la figura de tradición establecida en el artículo 901° de nuestro Código Civil.
Para establecer el tema, no podíamos dejar de lado la naturaleza de la condición
regulada en la ley, para ello tuvimos que empezar a analizar nuestra ley peruana, la
cual emana la norma en el Código Civil específicamente en el artículo 1 en donde se
alude el acceso de esta condición de registro, con el propósito de hacer más eficaz
aquella regulación de relaciones patrimoniales entre dos partes, por un lado, las
personas que contratan acerca de la base de información que se difunde. De hecho,
la distribución que posee la doctrina incluye un término que se circunscribe entre ser
suspensiva o tener el carácter de resolutiva. La importancia de este punto arraiga o
radica en fijar ciertamente qué naturaleza asume la condición que estará protegida
por el registro en cuanto el acto o negocio jurídico que lo contiene tiene como sujeto
de derecho a un concebido. Como sabemos, el concebido es considerado como
sujeto de derecho y goza de estos siempre y cuando favorezcan. Si bien es cierto, el
concebido tiene derechos, pero todos estos tienen una condición, de que este nazca
vivo por lo menos unos segundos, si en caso de que este cuando naciera se
encuentre muerto, legalmente nunca existió.
Ahora en cuanto a la posesión dentro de la concepción romana una situación de
hecho, no es apto de una transmisión, ideal o corporal; son transmitidos los
derechos; como la posesión es relación de hecho, esa transmisión no es posible y
para adquirirla es primordial la correcta dominación fáctica. De hecho, la suerte de la
posesión (de las cosas hereditarias) al morir el poseedor, al mismo tiempo se fueron
formando dos regímenes diferentes. En el derecho romano la posesión no es por el
medio de la transmisión; para que el heredero, luego de aceptar, posea. Antes, es
necesaria su aprehensión de las cosas (con ánimo de señor). En tanto en el
derecho germánico se transmite por el régimen primordial de la ley, pasando al
heredero sin necesidad de una actuación concreta suya.
El problema radica en el momento en que nos preguntamos si el concebido puede
llegar a adquirir el derecho real de posesión por la figuración de tradición. Para ello
es de suma importancia mencionar que en los últimos años nuestra legislación ha
regularizado la adquisición de derechos patrimoniales, subyugada a la posición del
origen con existencia del concebido; sin embargo, su amparo bajo la trascendencia
de la seguridad lícita que ofrece el registro no se halla del todo clara. Cabe señalar
que el análisis jurídico que actualmente se le da al concebido ha ostentado cierto
desconcierto ocasionando una fuerte controversia de los derechos reales en nuestra
sociedad. Es por eso que del universo del concebido y la regulación de sus
derechos reales nos planteamos una realidad problemática que básicamente
proviene de una perspectiva jurídica la cual es ¿Puede el concebido adquirir el
derecho real de posesión por la tradición sabiendo que uno de los requisitos
fundamentales para que así exista esta es una relación jurídica entre ambos
sujetos?

Por todo lo mencionado el objetivo general es determinar si el concebido puede


adquirir el derecho real de posesión por la tradición sabiendo que uno de los
requisitos fundamentales para que exista esta es una relación jurídica entre ambos
sujetos. Asi mismo, hacemos presente los objetivos específicos que son: Analizar si
el concebido puede adquirir el derecho real de posesión por tradición, establecer si
uno de los requisitos fundamentales de la posesión por tradición es que exista una
relación jurídica entre ambos sujetos y evaluar la regulación de posesión del
concebido en el derecho real en la legislación peruana.

En la redacción de este ensayo se abordará como tema principal el determinar si el


concebido puede adquirir el derecho real de posesión por la tradición teniendo en
cuenta que el requisito principal es que exista una relación jurídica entre ambos
sujetos, además como subtemas tendremos requisitos que el concebido debe tener
para conseguir el derecho real de posesión por tradición, los requisitos
fundamentales de la posesión por tradición y por último la regulación de posesión
del concebido.

La importancia de este trabajo de investigación, primero, es poder darle respuesta al


problema o incógnita que encontramos el cual es ¿Puede el concebido adquirir el
derecho real de posesión por la tradición sabiendo que uno de los requisitos
fundamentales para que exista esta es una relación jurídica entre ambos sujetos? y,
segundo, es que ayudará como referencia para futuros estudiantes que quieran
desarrollar un tema parecido al nuestro o igual y lo puedan sustentar de una mejor
forma.

La justificación en la presente investigación desde una perspectiva teórica se ha


sustentado claramente en el aporte de bases legales que demuestran que el
concebido puede adquirir el derecho real de posesión por la tradición sabiendo que
uno de los requisitos primordiales para que exista esta es una relación jurídica entre
ambos sujetos a pesar de que en nuestro código civil peruano el capítulo segundo
de adquisición y conservación de la posesión, específicamente en el artículo 900
que señala las formas de adquisición y el 901 que tiene que ver con tradición.
Desde una perspectiva metodológica esta se basa en un tipo de investigación
aplicada basada en fuentes confiables en los últimos 5 años.
En consecuencia desde una perspectiva práctica, con esta investigación se
benefician primeramente las personas que tenían la duda de si el concebido puede
ser poseedor o si le puedes transmitir algún bien.
Por último, con respecto a la hipótesis de este ensayo nos hemos planteado la
siguiente: “si se empieza a valorar verdaderamente al concebido como una persona
natural, que cumple sus obligaciones y ejerce derechos a título personal; entonces
este sería verdaderamente valorado y se hace acreedor del derecho a la posesión
en la figura de tradición”.
II. ARGUMENTACIÓN

Se puede definir de manera sencilla al concebido como aquella vida humana


intrauterina (aún no nacida) debido a que esta es una vida considerada individual
desde el momento de su concepción, desde aquel momento que se junta el óvulo
con el espermatozoide (Rubio Correa, 1992).

Después de su nacimiento se da inicio, al que muchos consideran, el siguiente


proceso biológico que ocurre en la vida (la vida humana extrauterina).

A lo largo de la historia y de nuestra vida republicana, el concebido ha sido


considerado de diferentes formas, a continuación mencionaremos unas cuantas
teorías con las cuales se podría definir o interpretar la naturaleza jurídica que tiene
el concebido:
La primera sería la teoría de la portio mulieris que tiene su inicio en el derecho
Romano, en la cual el concebido se considera como órgano, porción o parte de la
madre que lo tiene en su vientre; la segunda es la teoría de la ficción que se trata de
que el feto o concebido, mientras se encuentre en el vientre de la madre, se espera
que este llegue a ser hombre, con lo cual se puede deducir que se le considera
como una futura esperanza de vida; la tercera sería la teoría de la personalidad que
con esta teoría al concebido se le da la cualidad de persona a la cual se le transfiere
toda la titularidad de sus derechos civiles. Aunque no se le da la calidad de persona.
Tiene derechos existentes pero bajo condiciones y por ultima y la teoría que se
acoge acá en Perú es la teoría de la subjetividad que ve al concebido como sujeto
de derecho, en consecuencia, haciendo un
razonamiento lógico es privilegiado de los derechos patrimoniales como aquellos
derechos extra patrimoniales, ya que se le considera como un ser genéticamente
diferente.
Para seguir hablando sobre los derechos del concebido en nuestra legislación
peruana es bueno tomar en cuenta que es lo que dice nuestra legislación acerca de
este ser. Pero antes, como antecedente, la posición que dice que el concebido es
sujeto de derecho privilegiado en todo cuanto éste le favorezca fue adoptada por el
Código Civil peruano de 1984.
Nuestra norma suprema que es nuestra nos dice Constitución Política en su primer
artículo nos dice que el fin supremo que tiene la sociedad y el estado es defender a
la persona humana y proteger su dignidad, en su artículo dos, nos dice que toda
persona tiene derecho a la vida, a su integridad moral, psíquica y física y a su libre
desarrollo y bienestar y que el concebido es sujeto de derecho en todo cuanto le
favorezca y por último, en su artículo 7 se indica que todoslos sujetos de derecho
tienen derecho a la protección de su salud, la del medio familiar y de la comunidad,
protección, atención, readaptación y seguridad.
Asimismo nuestro Código Civil también se pronuncia ante esto en su artículo 1
donde nos dice que la persona humana ya está sujeto a derechos. La vida humana
comienza desde su concepción y el concebido es sujeto de derecho en cuento le
favorezca; los derechos patrimoniales de este están sujetos a que nazca con vida.
Es por esta razón que se les reprime la libertad a las mujeres que causan
conscientemente su aborto en el Código Penal.
Los requisitos fundamentales de la posesión por tradición se despliegan de una
serie de conceptos que debemos analizar ya que son varios los conceptos
doctrinales que se han venido desarrollando respecto a la posesión, a la tradición y
por ende si existe o no una relación jurídica entre ambas partes. Teniendo como una
de estas partes principales al concebido.

La posesión es uno de los principales atributos que te da la propiedad pero no es


necesario ser propietario para ser poseedor. Según el artículo 896 de nuestro CC “la
posesión es el ejercicio de hecho de uno o más poderes inherentes a la propiedad”,
es decir que se puede usar (ius utendi) y disfrutar (ius fruendi) sobre la posesión,
pero también puede ser considerado solamente con ejercer un atributo de estos dos
anteriormente mencionados, ya que disponer (ius abutendi) o reivindicar (ius
vindicandi) es exclusivamente de los propietarios.

Otro punto importante a tocar es que la posesión se presume. Así tenemos a la


presunción iuris tantum de propiedad en el artículo 912 del CC, que nos dice que el
poseedor es propietario, hasta que se demuestre lo contrario.

La posesión se sustenta mediante actos posesorios, es decir, tienen que actuar


como propietarios y dar apariencia de ello.
También es importante saber conocer e identificar quienes pueden ser sujetos de la
posesión, así nos dice Varsi (2019) que “Pueden ser poseedores todos los sujetos
de derecho: el concebido, la persona natural, la persona jurídica y el ente no
personificado.”

Por otro lado, cuando hablamos de tradición es necesario recurrir en primer lugar a
nuestro Código civil peruano en donde encontramos estipulado este término,
específicamente en el art 901 el cual señala que la tradición se realiza mediante la
entrega del bien a quien debe recibirlo o a la persona designada por él o por la ley o
con las formalidades que ésta establezca.

Teniendo en cuenta lo ya mencionado anteriormente citamos a un tratadista de


España Manuel Albaladejo (1977) quien conceptualiza a la “traditio” o tradición
como la transmisión de la posesión de la cosa ya sean bien mueble o inmueble, con
el ánimo del que da y del que recibe, de transferir y adquirir respectivamente el
derecho sobre ella

Al haber analizado los conceptos base interpuestos por la doctrina, como lo son la
posesión y la tradición, estamos seguros que existe una relación no solo entre
ambos conceptos con el derecho real, sino también que un requisito fundamental de
la posesión por tradición es que exista una relación jurídica entre ambas partes.

Hablemos entonces de que un requisito fundamental de la posesión por tradición es


que exista una relación jurídica entre ambas partes, en este caso una de las partes
será el concebido, quien a simple vista no tendría ni voz ni voto, sin embargo
jurídicamente la ley lo ampara mientras este ser permanezca con vida, va a gozar y
disfrutar del derecho real de posesión por tradición ya que va a existir una relación
jurídica entre una persona que pueda ser alguna persona jurídica (tradens) quien
será el que da y por otro lado el concebido (accipens) quien será el que recibe en
este caso una determinada posesión.

Además debemos reconocer cuales son los derechos patrimoniales que posee el
concebido, la regulación en el Perú nos señala que dentro de una relación jurídica el
concebido si puede llegar a ser sujeto de derechos siempre y cuando, el concebido
salga beneficiado. Con esto queremos decir que para que el concebido sea
favorecido con algún derecho patrimonial debe ser parte del negocio jurídico en
donde se dice que este derecho será favorable para él.

Es importante aclarar que esta comerciabilidad que se le otorga al concebido, no


puede estar en contra de las buenas costumbres, ni del orden público. Es decir,
debe gozar de plena licitud, sin vulnerar ningún estándar de prohibición.

Aunado a ello, también debemos tener en cuenta que los derechos que se le
pueden atribuir al concebido dentro de alguna situación jurídica pueden ser los
siguientes: el derecho a la herencia, derecho a la donación, derecho a la propiedad
con sus respectivos derivados y por supuesto también el derecho a la posesión.

Es por eso que sin duda alguna dentro de la figura de la tradición, deben de
intervenir dos sujetos el transferente que es el que entrega el derecho y se
desprende de él y también el adquirente que es quien lo recibe y este será
beneficiario del derecho. El concebido puede ser partícipe de una relación jurídica
siempre y cuando se le mencione como beneficiario de un derecho patrimonial, pero
en cuanto sea mencionado se entenderá que será con la condición de que nazca
vivo. Por ende la representación del concebido se tiene que acreditar, a menos que
sean los padres ya que la representación de los padres es natural en términos
legales y también la norma exige que se identifique al concebido como beneficiario
final.

Se establece como relación jurídica a toda unión regulado de forma legal, donde la
relación se da entre dos o más personas siempre y cuando ese nexo esté regulado
en el derecho, respecto a dichos intereses tengan efectos jurídicos.

Se dice que los sujetos determinados o determinables, son aquellos sujetos que
están establecidos en los artículos que únicamente no puede ser confundido con
otros, en este caso hablamos del concebido es determinable tal como lo establece
el artículo 1 del código civil, en lo cual nos dice la vida empieza desde la concepción
y que el concebido es sujeto de derecho, donde disfruta de todos sus derechos y
aquellos extinguen cuando muere y con referencia a sus derechos patrimoniales
cuando nazca vivo.

Esta ley le da prioridad a la concepción que tiene derecho como extrapatrimoniales


que aun no los cumple pero que una vez nacido el concebido recién va poder gozar
de estos derechos patrimoniales como es el nombre, contar con un apellido,
disponer de todo lo que le corresponde como herencia.

Este reglamento defiende la vida, es decir empieza desde la concepción, aunque


teorías o doctrinas piensan que no tienen derechos, pero en la legislación peruana
se puede observar de que si procede, de que el concebido al ser regulado en la
constitución de 1993 le da derechos como en el artículo 2 de la constitución
establece es derecho fundamental de la persona como el derecho a la vida.

En el artículo 896 de C.C nos dice que la posesión es el ejercicio de hecho o más
poderes inherentes a la propiedad nos hace referencia a la inherencia que es el lazo
que hay entre una cosa por su naturaleza y que no se puede alejar y esa unión
persiste, entonces decimos que el concebido no puede adquirir la posesión, pero de
una manera u otra está unido a ella, solo con el simple nacimiento y podrá lograr
esos derechos que le corresponden.

El concebido tiene titularidad completa de propiedad sobre una cosa. Según Varsi
(2019) sostiene que el concebido tiene que nacer vivo para poder conferir el bien,
aun sabiendo que ya se cuenta con ese derecho, tal como lo establece la
legislación. Como dentro de la persona natural el concebido es incapaz de adquirir
la posesión ya que aún, no ha nacido y eso le limita hacer ciertas posibilidades
como tal, pero que aún nacido podrá disfrutar de todo sus derechos, porque la ley lo
ampara y así podrá adquirir la posesión, ser el titular del derecho real, tal como le
corresponde.

De esta manera vemos que el concebido tiene igual los mismos derechos como
persona natural y que está en todo su derecho poder gozar, mientras tanto estando
en la concepción se respeta sus derechos y libertades y su pleno ejercicio teniendo
libertad como persona humana en dicha jurisdicción así como se reconoce que el
concebido desde el principio de su vida, es decir desde la fecundación, sin embargo
no podría haber diferencia entre la parte jurídica y biológica entre el ser humano, así
como la ciencia determina que el concebido es un ser que pertenece a la especie
humana, por lo tanto el derecho debe acoger la información originaria de la ciencia a
fin de atribuir sin excepción alguna con el principio de igualdad.
III. CONCLUSIONES

● Desde una perspectiva jurídica con la cual planteamos nuestra problemática,


aseguramos que la hipótesis que nos planteamos al inicio de nuestro ensayo
si es cierta ya que si se valora eficazmente al concebido como una persona
natural y que va a ejercer derechos a título personal, incluyendo que podrá
ser acreedor del derecho real de posesión en la figura de tradición.

● Se puede confirmar que el concebido puede ser partícipe de una relación


jurídica y pueda adquirir derechos patrimoniales mediante sus representantes
que casi siempre naturalmente son sus padres siempre y cuando el
concebido nazca vivo y se identifique como el beneficiario de dicha relación
jurídica.

● De la misma manera, hemos identificado que efectivamente para que exista


la figura jurídica de tradición como medio de entrega de la posesión, si se
necesita que exista una relación jurídica entre ambos sujetos que son los
partícipes, en este caso se requiere de un tradens, que será la persona que
hará la entrega y un accipiens que será la persona que reciba la posesión.

● Con relación a la regulación jurídica se identifica que el concebido es sujeto


de derecho y manifestar que la ley reconozca al concebido, proteja su
condición jurídica como persona humana, así como un derecho primordial
que es la vida, su libre desarrollo intra uterino, a una identidad y con respecto
a la posesión adquiriendo su bien una vez que haya nacido y pueda gozar de
ello.
REFERENCIAS

Traditio. (n.d.). Wolterskluwer.Es. Retrieved November 22, 2022, from


https://guiasjuridicas.wolterskluwer.es/Content/Documento.aspx?
params=H4sIAAAAAAAEAMtMSbF1jTAAAUMTcwMLtbLUouLM_DxbIwMDCwNzA0
uQQGZapUt-ckhlQaptWmJOcSoAE3SUxDUAAAA=WKE

ALBALADEJO (Manuel), Derecho Civil, Derecho de Cosas, Barcelona, Librería


Bosch, 3era. Edición, T. III, Vol. I, 1977, p. 144.

También podría gustarte