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Carrera: Arquitectura

Materia: Antropología

Tema: Cultura Oriental

Integrantes: Camily Arteaga, Mariela Merchan, Mercy Uzho

Docente: Lcdo. Marco Vinicio Ordoñez Jara

Grupo: 36

Periodo: 63
ÍNDICE
Introducción ...................................................................................................................... 3

Desarrollo ......................................................................................................................... 6

EDAD ANTIGUA: ....................................................................................................... 6

EDAD MEDIA: ............................................................................................................ 8

EDAD MODERNA: ..................................................................................................... 9

Referencias bibliográficas .............................................................................................. 21


Introducción

La antropología, como disciplina dedicada al estudio del ser humano en todas sus

dimensiones, desempeña un papel crucial en la investigación de culturas, tanto antiguas

como modernas. Su enfoque holístico y comparativo proporciona herramientas

metodológicas y teóricas valiosas para comprender la complejidad de las sociedades a lo

largo del tiempo (Harris et al., 1990).

Esta presenta una aportación con una perspectiva única que va más allá de la mera

descripción de prácticas y costumbres. Mediante el análisis estructural y funcional, los

antropólogos desentrañan los significados simbólicos y sociales que subyacen a los

comportamientos culturales. Este enfoque proporciona una comprensión profunda de

cómo las culturas dan forma a la experiencia humana y cómo evolucionan a lo largo del

tiempo.

En el ámbito de la arqueología, la antropología desempeña un papel central al

descifrar las huellas dejadas por sociedades antiguas. La aplicación de métodos científicos

y teorías antropológicas permite reconstruir no solo las estructuras físicas de

civilizaciones pasadas, sino también sus sistemas de creencias, organización social y

prácticas rituales (Harris & Del Toro, 1999).

Además, la antropología social y cultural contemporánea contribuye

significativamente a la comprensión de las dinámicas culturales actuales. Investigar

comunidades modernas desde una perspectiva antropológica permite identificar patrones

de cambio, resistencia y adaptación, esenciales para abordar los desafíos contemporáneos

(Le Goff, 2017).

En un mundo globalizado, donde las interacciones culturales son cada vez más

complejas, la antropología se vuelve indispensable para desmitificar estereotipos y


comprender la diversidad cultural. La investigación antropológica fomenta el respeto

intercultural y la apreciación de la riqueza inherente a las diferencias culturales (García,

2010).

La riqueza y profundidad de las culturas orientales, impregnadas por las filosofías

y religiones milenarias como el Budismo, Taoísmo e Hinduismo, ofrecen un vasto campo

de estudio que va más allá de sus fronteras geográficas. Analizar estas tradiciones no solo

enriquece nuestro conocimiento cultural, sino que también aporta perspectivas valiosas

para comprender la diversidad humana y forjar puentes de entendimiento intercultural.

El Budismo, originario de la India, pero profundamente arraigado en la cultura

asiática, proporciona una filosofía que destaca la comprensión profunda del sufrimiento

humano y la búsqueda de la iluminación. Al explorar sus enseñanzas sobre la

permanencia y la conexión entre la mente y el cuerpo, se desafían concepciones

occidentales arraigadas, fomentando un enriquecimiento espiritual y una apertura mental

(Bajtín, 1974).

El Taoísmo, de origen chino, aporta una perspectiva única sobre el equilibrio y la

armonía con la naturaleza. Al explorar la idea del Tao, el camino o la fuerza que fluye en

todo, se plantea una filosofía de vida que invita a la reflexión sobre el ritmo natural del

universo. Este enfoque, en contraste con la mentalidad occidental, resalta la importancia

de la quietud y la aceptación (Rivière, 1961).

El Hinduismo, arraigado en la India, es una de las religiones más antiguas y

complejas del mundo. Su análisis revela una riqueza de mitologías, rituales y doctrinas

que han moldeado profundamente la cultura y la sociedad de la región. Al estudiar el

Hinduismo, se comprende la interconexión entre lo material y lo espiritual, así como la

diversidad de deidades y prácticas que caracterizan esta religión (Dussel, 2016).


La relevancia de analizar estas culturas y religiones orientales radica en su

capacidad para desafiar suposiciones occidentales arraigadas y enriquecer nuestra

comprensión global. Más allá de ser meras prácticas religiosas, estas filosofías ofrecen

perspectivas fundamentales sobre la existencia humana, la moralidad y la conexión con

el entorno. Además, en un mundo cada vez más interconectado, el conocimiento de estas

tradiciones orientales promueve la empatía y el respeto hacia las diferentes formas de ver

y vivir la vida. Contribuye a la construcción de puentes culturales, fomentando un diálogo

enriquecedor que trasciende las barreras geográficas y religiosas (Romero, 2013).

En este trabajo se analiza la cultura Oriental y sus distintas religiones tomando en

cuenta la edad antigua y la edad moderna, así mismo los hechos más significativos

históricamente que marcan el desarrollo y evolución de estas culturas considerando su

impacto en la sociedad actual.

Las antiguas civilizaciones orientales se consolidaron casi sin la influencia del

resto del mundo, es decir de la cultura occidental, debido a su posición geográfica que

permitió el desarrollo de una fuerte cultura propia. A partir de la globalización hasta la

actualidad, las culturas oriental y occidental se nutrieron e influenciaron de manera mutua

por cuestiones económicas, sociales y políticas.


Desarrollo

La cultura oriental tiene sus raíces en las culturas antiguas como la

egipcia, mesopotámica, la antigua china, Persia e india.

Esta cultura se divide en tres edades, siendo estas: la edad antigua, la

edad media y la edad moderna.

EDAD ANTIGUA:

Durante la mitad del IV milenio en el sur de Mesopotamia se inicia una forma de vida más

sedentaria a los alrededores de los ríos mas importantes como el Tigris, Éufrates alrededor

de los cuales se desarrollan mas las comunidades asentadas, empiezan a beneficiarse de estos

recursos, usándolo para la agricultura, el comercio, volviéndose cada vez mas importantes

por lo cual se dieron muchas rivalidades, batallas, guerras tratando de tomar posesión de los

territorios prósperos.

En años cercanos las comunidades del valle y del Nilo avanzaron con su escritura de

jeroglíficos y organización política provocando así la aparición del estado egipcio, las

primeras dinastías de este estado dejarían grandes logros y desarrollos para la historia como

son las pirámides, los templos, las tumbas; a medida que van avanzando con su desarrollo

se iría convirtiendo en una de las grandes potencias de oriente.

En Mesopotamia, los Acadios, población semita, formaron el primer Estado territorial en

el último cuarto del III milenio. En el II milenio, el Próximo Oriente vio la expansión de

grandes imperios como los Asirios en el alto Tigris y los Hititas desde Hattusa. La dinastía

amorita de Hammurabi se extendió por Summer y Akkad, y el Estado de Mitanni surgió


en el alto Éufrates, frenando las ambiciones de Hititas y Asirios. Egipto, en su Dinastía

XVIII, se convirtió en aliado del nuevo Estado.

En el siglo XIV, Suppiluliuma llevó a los Hititas a su apogeo, absorbiendo Mitanni. En

el siglo XIII, las ciudades del alto Tigris cayeron bajo control asirio, poniendo fin a

Mitanni. Hititas y Asirios dominaron el Próximo Oriente, mientras en la baja

Mesopotamia, los Cassitas formaron una monarquía unificada con capital en Babilonia,

pero con escasa influencia externa.

En la antigüedad, el aumento de la influencia de Asiria llevó a Egipto y Hattusa a formar

un tratado para hacer frente a la amenaza asiria. A finales del I milenio, las ciudades de

la costa del Mediterráneo oriental sufrieron destrucciones por los Pueblos del Mar, dando

lugar a la expansión de nuevas ciudades como Tiro y la introducción de la metalurgia del

hierro.

En el I milenio, los Asirios formaron el mayor Estado unificado en el oeste de los Montes

Zagros, llegando hasta el Mediterráneo y sometiendo a las ciudades cananeas.

Nabucodonosor II de Babilonia conquistó territorios asirios, incluyendo Tiro y Jerusalén,

provocando grandes deportaciones. La destrucción de Tiro cambió las relaciones

económicas en el Mediterráneo, siendo asumidas por Cartago.

En el siglo VI a.C., el Imperio Persa unificó todo el Próximo Oriente y Egipto en satrapías.

En el 334 a.C., Alejandro Magno conquistó Asia, helenizando las regiones. Después de

su muerte, los Diadocos lucharon por el control, formando los reinos helenísticos: los

Seleúcidas en el Próximo Oriente, los Lágidas en Egipto y los Antigónidas en Macedonia.

Desde el siglo II a.C., Roma extendió su presencia en Oriente, controlando la región hasta

el Éufrates. Las luchas internas en Roma afectaron al Mediterráneo oriental, culminando


en la derrota de Marco Antonio y Cleopatra en la batalla de Actium en el 31 a.C. Egipto

se convirtió en provincia romana al año siguiente.

EDAD MEDIA:

Entre los años 300 y 400, factores como la mala administración, la esclavitud persistente

y la decadencia moral contribuyeron gradualmente a la caída del Imperio Romano. En el

año 364, se dividió oficialmente en dos zonas: una oriental, con Constantinopla como

centro, y otra occidental, con la capital en Milán y luego en Rávena, tras la muerte del

emperador Teodosio en 395.

Fuera del Imperio Romano, diversos pueblos, como los godos occidentales, vándalos,

lombardos, francos, jutos y sajones, jugaron roles clave. Los visigodos entraron primero,

derrotando a los romanos en la batalla de Adrianópolis en 378 y saqueando Roma en 410.

Los vándalos, liderados por Genserico, saquearon Roma nuevamente en 455. Juntos

invadieron Bretaña en 449, y los francos se movieron hacia el oeste, ocupando el norte de

Francia en el siglo V.

Estas invasiones llevaron a la formación de diversos reinos. La caída de Rómulo

Augústulo en el año 476 marcó el fin de la autoridad imperial en occidente, mientras que

la parte oriental asumió la herencia política de Roma. Durante el siglo VI, los francos

bajo la dinastía merovingia experimentaron repartos y estancamiento político hasta la

llegada de la dinastía carolingia fundada por Pipino el Breve en 751.

La fusión de los pueblos invasores con elementos de la cultura romana dio a Europa una

nueva identidad en el ámbito político y cultural.


EDAD MODERNA:

En la segunda mitad del siglo XV y principios del XVI, en la Edad Moderna, los países

de Oriente tenían la siguiente situación:

India: Estaba dominada por los mongoles y formaba parte del Imperio del gran Mogol.

Turquía: Después de la conquista de Constantinopla en 1453, el sultán turco Mohamet II

extendió su dominio a Serbia (1454), parte de Grecia, incluyendo Atenas, Otranto en el

tacón de la bota italiana y algunas islas del mar Egeo.

China: Estaba gobernada por la dinastía mongólica de los Ming desde el año 1368 hasta

el inicio de la Edad Moderna.

HINDUISMO

La india es la más antigua civilización aun existente que se rige por el hinduismo que no

solo es una religión si no también un estilo de vida.

1. Sanatana Dharma

Sanatana Dharma es el término correcto para referirse a lo que conocemos hoy como

hinduismo. Históricamente, en textos sagrados y enseñanzas, no se menciona la palabra

"hindú" ni "hinduismo". En su lugar, se utiliza el concepto de sanatana dharma, que se

traduce de manera aproximada como la ocupación eterna del ser humano. La palabra

"dharma" no tiene una traducción exacta al español, pero se acerca a significar "aquello

que sustenta la propia existencia", o también, "ley religiosa, deber o verdad". Se origina

en el sánscrito a partir de la palabra "Dhri", que significa agarrar, adherir y juntar. En el

Mahabharata, se define como aquello que sostiene la sociedad, mantiene el orden cósmico

y garantiza el bienestar de la humanidad. Es el deber del individuo hacia los demás, como
la instrucción en el conocimiento espiritual, cuidar de los hijos y ser moralmente correcto

y piadoso.

Durante la invasión musulmana del siglo VIII, surgió la palabra "hindú", utilizada por los

persas para referirse a los habitantes al sur del río Sindhú, ahora conocido como Indo.

Aunque originalmente se refería a la geografía, con el tiempo también pasó a describir la

religión. El dharma se extiende más allá del hinduismo, siendo parte de otras creencias

derivadas, como el budismo, jainismo y sikhismo.

Enseñanzas del Dharma: En los Vedas, se mencionan los cuatro preceptos básicos del

hinduismo: dharma (práctica religiosa), artha (desarrollo económico), kama (complacer

los sentidos) y moksha (liberación). Se destaca la importancia de dharma y moksha, y se

enfatiza que sin el primero no se puede obtener la liberación del alma de los ciclos de

nacimiento y muerte. Se cree en la ley del karma, la relación de causa y efecto, y en la

reencarnación del alma según el karma acumulado en vidas anteriores. Las enseñanzas

del dharma se encuentran en las escrituras sagradas y los mensajes de divinidades y

maestros espirituales. Más que una religión, el sanatana dharma es considerado una

cultura y una forma de vida, seguido por más de 950 millones de fieles en todo el mundo.

2. La divinidad

A pesar de la percepción equivocada de que el hinduismo es una religión politeísta, según

las escrituras védicas, Dios es único y tiene la capacidad de manifestarse en innumerables

avatares o encarnaciones, lo que refleja un monoteísmo polifórmico. Dios otorga poderes

a sus servidores, los semidioses, para sustentar las diversas energías del universo. Cada

hindú elige su istha-deva o deidad preferida basándose en las enseñanzas de su escuela

filosófica, tradición familiar, la guía de su maestro espiritual o su propia devoción. Se

destacan cuatro escuelas filosóficas dentro del hinduismo: Vaishnavas (devotos de


Vishnu), shaivas (devotos de Shiva), shaktas (devotos de Shakti o la diosa madre) y

smartas (adoradores de formas diversas de la divinidad, creyendo que Dios no tiene

forma).

Es esencial señalar que la mayoría de las divinidades están acompañadas por su shakti o

energía femenina, y son veneradas en el recinto principal del templo o en templos

dedicados exclusivamente a estas deidades femeninas.

Explorar en detalle las diversas divinidades, sus historias y cultos resulta imposible en

este artículo, por lo que se ofrece una breve reseña de las principales. Brahma, responsable

de la creación y parte de la trimurti junto a Vishnu y Shiva, es adorado con su consorte

Sarasvati. Vishnu, a cargo del mantenimiento de la creación material, tiene como consorte

a Lakshmi. Vishnu se manifiesta en diez avatares principales, llamados dasavatara, siendo

Rama y Krishna los más populares. Shiva, también parte de la trimurti, se encarga del

mundo material y, al final de Kali-yuga, realizará la danza de la destrucción para permitir

la creación nuevamente. Shiva es adorado en forma de shiva-linga en la mayoría de los

templos, y su consorte es Parvati. Durga, también conocida como Kali, Parvati o Uma, es

la diosa madre que dirige el mundo material y contribuye a su destrucción. Ganesha, con

cuerpo humano y cabeza de elefante, es el señor de los comienzos y elimina obstáculos

en la vida cotidiana.

3. Las Escrituras Sagradas

Los Vedas, que se traducen como "conocimiento", constituyen los libros originales y se

considera que existían antes de la creación. Inicialmente, se transmitían oralmente a

personas santas en forma de shruti (escuchado directamente). Posteriormente, fueron

registrados en sánscrito, una de las lenguas más antiguas. Divididos en cuatro secciones:
Rig, Atharva, Yajur y Sama, contienen himnos de alabanza a la divinidad, normas para

rituales y códigos de conducta.

Las Upanishads, una colección crucial de 108 textos, han generado innumerables

comentarios. Algunas llevan el nombre del sabio mencionado en ellas y consisten en

diálogos entre sabios o con la Divinidad, a menudo narrando historias con lecciones

filosóficas. Se considera que trece Upanishads son las principales, enfocándose en

enseñar la liberación del alma a través de la meditación y la austeridad.

Los Puranas, que significan "antiguos", presentan las conclusiones de las escrituras de

manera accesible. Relatan historias de las divinidades y sus devotos, dedicándose a

deidades específicas como Vishnu Purana y Shiva Purana. De los 18 considerados

principales, seis se centran en Vishnu, otros seis en Shiva y los restantes en Brahma.

Algunos Puranas son formulados como preguntas y respuestas. También existen los Upa

Puranas, considerados comentarios naturales de los Vedas al aclarar el significado final

de la literatura védica.

Los Itihasas comprenden las grandes epopeyas, como el Ramayana (los viajes de Rama)

y el Mahabharata (historia de la gran India), que incluye la Bhagavad-gita, el texto más

conocido y difundido del hinduismo. Las Dharma-shastras son escrituras que contienen

reglas, regulaciones y códigos éticos del hinduismo, incluyendo Griha-sutras y Manu-

samhita, entre otras.

4. Lugares de Peregrinación y Ríos Sagrados

En el contexto del hinduismo, se pueden distinguir dos clases de ciudades consideradas

sagradas: los dhamas, que son lugares donde la Divinidad reside permanentemente, y los

tirthas, que están vinculados a eventos específicos relacionados con el Señor o sus
devotos. La sacralidad de un lugar puede derivar de actividades divinas, la presencia de

un río sagrado o la importancia de un templo.

El acto de peregrinación, conocido como tirtha-yatra, tiene una profunda significancia en

el hinduismo. Los textos sagrados explican que viajar a estos lugares implica llevar a cabo

austeridades, como la reducción de comidas, afeitarse la cabeza y caminar descalzo. Este

viaje incluye bañarse en ríos y lagos sagrados, realizar actos de caridad y visitar templos.

Se subraya la importancia de interactuar con los devotos y escuchar sus enseñanzas,

considerándose que un peregrinaje no está completo sin la visita a una persona santa.

India cuenta con innumerables lugares sagrados, algunos ubicados actualmente en

Pakistán, Bangladesh y Nepal. Estos sitios buscan perfeccionar la vida espiritual y

purificar de pecados cometidos en esta y otras vidas. Cuatro dhamas representan el plano

espiritual y marcan los puntos cardinales de la India mística: Badrinath, Rameshwaram,

Puri y Dwaraka. Las siete ciudades sagradas, conocidas como Saptapuris, abarcan

Ayodhya, Mathura, Haridwar, Varanasi, Kanchi, Ujjain y Dwarka. El festival Kumbha-

mela se celebra en Prayag, Haridwar, Ujjain y Nasik. Además, existen otras ciudades

sagradas de difícil acceso, como los peregrinajes a los templos del Himalaya.

En el hinduismo, prácticamente todos los ríos se consideran sagrados, ya que de alguna

manera están conectados con la Divinidad o sus devotos. Los ríos, en la cultura védica,

son considerados de naturaleza femenina, añadiéndose a sus nombres términos como

mata, mayi o ma, que significan "madre". Por ejemplo, al Ganges se le puede referir como

Ganga Ma. El único río masculino es el Brahmaputra, conocido como el "hijo de

Brahma". Los siete ríos más sagrados son Ganges, Yamuna, Godavari, Saraswati,

Narmada, Sindhu y Kaveri. Un baño ritual en estas aguas se considera liberador de

pecados y purificador para continuar la vida espiritual.


5. El Templo, Rituales y Festividades

En el mandir o templo, la imagen de la divinidad reside, constituyendo un lugar de culto

destacado que fomenta el pensamiento y las artes religiosas. La diversidad de templos

varía desde pequeños, capaces de albergar a una sola persona, hasta imponentes

estructuras que pueden acoger a miles de devotos, a menudo comparadas con pequeñas

ciudades.

La construcción de templos puede realizarse en piedra, madera o incluso en el interior de

cuevas, presentando estilos diversos, como el Drávida en el sur de la India y el Nagara en

el norte. Las imágenes de los templos pueden ser fijas o móviles, elaboradas en piedra o

aleaciones de metales. Las imágenes móviles, conocidas como utsava-murti, se utilizan

en procesiones y baños ceremoniales.

La adoración de las deidades del templo es responsabilidad de los pujaris o archakas,

sacerdotes brahmanas que sirven y adoran las imágenes. En los grandes templos, un

sacerdote principal supervisa las pujas para asegurar la observancia de las normas

establecidas. Solo se permite la entrada al altar a los sacerdotes, debidamente vestidos y

después de un baño purificatorio. Después de las ceremonias, se distribuye prashad,

alimento bendecido ofrecido a las deidades.

La vida de un hindú, desde el nacimiento hasta la muerte, está regida por los samskaras o

rituales purificadores, sacramentos que protegen el cuerpo y la mente de males físicos y

psíquicos. Los samskaras, que significan "actos perfectos", son ceremonias beneficiosas

que eliminan el mal karma y promueven influencias auspiciosas en la naturaleza material.


Estos rituales purifican las relaciones familiares y sociales, como el matrimonio (Vivaha),

la imposición del nombre (Nama-karana), la iniciación con el cordón sagrado

(Upanayanam) y la cremación después de la muerte (Antiyesti-kriya).

6. Calendario y Festividades Las festividades

En el hinduismo, conocidas como utsava, ofrecen momentos de celebración y

purificación. El calendario hindú, lleno de festividades en honor a la Divinidad, santos y

maestros, garantiza prácticamente una celebración diaria. Durante estas festividades, se

observan ayunos hasta ciertas horas del día o la noche, seguidos de comidas vegetarianas.

Los festivales, generalmente regidos por el calendario lunar vikrama-sambat, incluyen

Sarasvasti Puja, Shiva-rati, Holi, Rama-navami, Guru-purnima, Janmashtami, Ganesha

Chaturthi, Nava-ratri y Diwali, entre otros.

La figura del guru o maestro espiritual es crucial en el hinduismo, y se enfatiza la

importancia de aceptar un guru para guiar la vida espiritual. La palabra guru significa

"pesado en conocimiento", y estos maestros representan a Dios, sirviendo como guías

espirituales. Existen tres tipos de gurus: Vartma Pradarsaka Guru, Diksha Guru y Shiksha

Guru, cada uno con su función específica en la enseñanza y guía espiritual.

Además, el hinduismo establece un sistema de órdenes sociales y espirituales (Varna-

ashrama Dharma). Las cuatro órdenes sociales (varnas) son brahmanas, kshatriya,

vaishyas y sudras, mientras que las cuatro órdenes espirituales (ashrams) son

brahmacharya, grihastha, vanaprastha.

TAOÍSMO
El taoísmo (también conocido como taoísmo) es una filosofía china como raíz de origen

en Laozi (c. 500 d.C.), que se desarrolló a partir de religiones populares principalmente

en la China rural y se convirtió en la religión oficial del estado durante la dinastía Tang.

Por tanto, el taoísmo es a la vez una filosofía y una religión. La filosofía se deriva de la

observación del mundo natural y la religión se deriva de la creencia en el equilibrio del

universo, mantenido y regulado por el Tao.

Las creencias originales pueden incluir o no prácticas como el culto a los antepasados y

el culto a las deidades, pero muchos taoístas todavía siguen ambos principios hoy y lo

han hecho durante siglos.

Desde la dinastía Shang, el taoísmo ha tenido una influencia significativa en la cultura

china.

La conciencia de que todas las cosas y todas las personas están conectadas se refleja en

el desarrollo del arte, que refleja la comprensión de las personas de su lugar en el universo

y sus responsabilidades para con los demás.

Durante la dinastía Tang, el taoísmo se convirtió en la religión estatal bajo el emperador

Xuanzong porque creía que el taoísmo podía crear un equilibrio armonioso entre sus

súbditos, y durante un tiempo tuvo razón.

El reinado de Xuanzong todavía se considera uno de los más prósperos y estables de la

historia de China y fue el apogeo de la dinastía Tang.

El taoísmo fue propuesto como religión estatal varias veces en la historia china, pero la

mayoría prefirió las enseñanzas confucianas (o a veces budistas), tal vez porque los

rituales de esas religiones proporcionaban la estructura de la que carecía el taoísmo.


Hoy en día, el taoísmo es reconocido como una de las principales religiones del mundo

y continúa siendo practicado por personas en China y en todo el mundo.

BUDISMO

Al centrar la atención a través de la meditación, uno puede permanecer tranquilo y en paz

consigo mismo y con el mundo (Keene, 2003, p. 75).En la filosofía budista, toda la

realidad cambia constantemente, nada permanece; los humanos también somos

permanentes: “El ciclo de vida, nacimiento y muerte significa que nada es permanente y

todo está en un estado de cambio constante. Se llama "anicca", que significa

"permanencia" (Keene, 2003, p. 76), pero "cuando la gente busca la eternidad, el resultado

es dolor o sufrimiento" (p. 76). Para esta filosofía, el bien que cada persona persigue es

un trabajo personal que indirectamente produce un efecto social; sin embargo, ética y

políticamente, no es una decisión encaminada a cambiar una realidad social injusta;

Maneras de evitar la reencarnación.

Alcanzar el Nirvana es una forma de liberación personal. La filosofía budista entiende al

ser humano como seres formados por un cuerpo y un alma, siendo esta última inmortal.

Presenta a los humanos como seres capaces de “amor, compasión, alegría y paz, estados

del ser a los que todo ser humano aspira” (Keene, 2003, p. 80). La bondad es uno de los

principios que ayuda a las personas a evitar la reencarnación. Aunque no son opciones

éticas y políticas para un mundo mejor, se han convertido en un punto de avance y crítica

del sistema social capitalista occidental. La atención se centra en el poder y el dominio

del capital.
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