Kim Dare - en Este Dia...

Kim Dare En este día…
Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

Kim Dare
En este día…
Forma parte de dos series:
Gemas Eróticas #2 (multiautor)

y Stand Alone Short Stories #2 (la autora cambio el nombre
de la serie, anteriormente era Kinky Quickies)

Nota a los lectores

3
Nuestras traducciones están hechas para quienes

disfrutan del placer de la lectura. Adoramos muchos
autores pero lamentablemente no podemos acceder a ellos
porque no son traducidos en nuestro idioma.
No pretendemos ser o sustituir el original, ni
desvalorizar el trabajo de los autores, ni el de ninguna
editorial. Apreciamos la creatividad y el tiempo que les llevó
desarrollar una historia para fascinarnos y por eso
queremos que más personas las conozcan y disfruten de
ellas.
Ningún colaborador del foro recibe una retribución
por este libro más que un Gracias y se prohíbe a todos los
miembros el uso de este con fines lucrativos.
Queremos seguir comprando libros en papel porque
nada reemplaza el olor, la textura y la emoción de abrir un
libro nuevo así que encomiamos a todos a seguir
comprando a esos autores que tanto amamos.
¡A disfrutar de la lectura!

Dedicatoria
4
A mis padres, que se casaron un miércoles, y que se han dicho “Feliz

aniversario” el uno al otro todos los miércoles desde entonces.

Sinopsis
5
Tayton siempre recordaba Navidades, San Valentines, cumpleaños

y todos los aniversarios convencionales. Él siempre había pensado que
era uno de los chicos buenos cuando se trataba de ocasiones especiales,
pero su nuevo sumiso quería celebrar este aniversario con todo.
Esta noche parece marcar un aniversario que es particularmente

importante para Denny. Desafortunadamente, Tayton no tiene ni idea de
que es el aniversario...

Capítulo Uno
6
Frederick Tayton hizo una pausa, con un pie dentro de su casa y

el otro aún en el marco de la puerta. Echo un rápido vistazo a través de
las distintas ventanas que conducían desde la entrada a la sala y vio que
todas las cortinas de la planta baja estaban cerradas. La única fuente de
luz natural era la puerta en sí. Cuando Tayton finalmente pasó por el
umbral y cerró la puerta detrás de él, ni un rastro de luz solar altero la
oscuridad.
Si no fuera porque alguien había encendido docenas de velas

elegantemente situadas alrededor del espacio, Tayton ni siquiera habría
sido capaz de ver al hombre desnudo de rodillas en medio de su pasillo.
Mientras estudiaba la escena delante de él, los labios de Tayton se

torcieron en una sonrisa. Ciertamente, ser Dueño de Denny hacía la vida
interesante. También hacia completamente imposible saber qué hacer
cuando llegaba a casa del trabajo para encontrarse a sí mismo teniendo
un papel protagonista en una inesperada celebración.
Tayton corrió la fecha del día a través de su mente.
¿Cumpleaños? No. ¿San Valentín? No ¿Navidad? No

¿Aniversario...? Bueno, ninguna de los convencionales de cualquier
forma.
Caminando confiado a través de la habitación, Tayton se

detuvo frente al joven, preguntándose si su amante tendría la
intención de darle una idea de que festejaban. Denny
mantuvo la cabeza gacha y las manos detrás de su
espalda.

El hombre más joven ya estaba duro, su pene curvado hacia su
estómago. La propia polla de Tayton se puso tensa al observar a su
sumiso, tomó una respiración profunda y la dejó escapar lentamente.
7
No era el aniversario del día en que Tayton le había dado a Denny

su collar permanente o la fecha en que se conocieron, o incluso la fecha
en que habían tenido su primera relación sexual. Tampoco era el sexto
aniversario de la primera vez que habían llevado a cabo una escena en
toda regla al aire libre. Tayton sabía muy bien que lo habían celebrado
hacía apenas dos semanas con un pequeño picnic erótico, realizado en el
suelo de la cocina en deferencia a la lluvia torrencial que caía afuera.
—¿Mascota? —Tayton inquirió, mientras daba lentamente vueltas

alrededor del sumiso de rodillas. El muchacho realmente era
impresionante; la luz de la vela parpadeaba sobre su piel con un hermoso
brillo cálido, y ponía de relieve las líneas de músculo magro.
Nada interrumpía su vista, excepto el collar de cuero negro

alrededor de la garganta de Denny. No había ni siquiera un solo cabello
rubio pálido por debajo de su cuello para echar una sombra. Estaba
recién afeitado y obviamente, muy listo y dispuesto a complacer a su
Amo.
Denny inclinó la cabeza hacia atrás y miró a Tayton.
—¿Tiene hambre, Señor?
La comida era la última cosa en su mente. Tayton estaba a punto

de decirlo, cuando vio los ojos de Denny parpadeando hacia el comedor
formal. Tayton siguió su mirada.
A través de la puerta, vio que la mesa del comedor

estaba puesta elaboradamente, con un juego completo de

cubiertos de plata y copas de cristal fino que Tayton no había visto desde
que lo había heredado de una tía anciana hacía más de una docena de
años.
8
Su curiosidad fue por un momento más que su lujuria. Volviendo

la espalda a su sumiso, Tayton entró en el comedor para investigar. Todo
a la vista había sido abrillantado y pulido hasta que volvió a la vida. La
plata brillaba cada vez que la llama de una vela se tambaleaba.
—¿Sirvo la cena, Señor?
Tayton miró por encima del hombro. Denny ya se había trasladado

a la puerta y estaba sentado de nuevo sobre sus rodillas. Tayton corrió
un ojo para evaluar el trabajo que el joven había puesto en sus
preparativos para la noche. Parecía que su intención original de una
mamada rápida, cena sobre bandejas equilibradas sobre las rodillas en
la sala de estar, seguido de una noche adormecidos frente a la televisión,
sería mejor dejarla de lado para otra noche.
—Sí.
Su sumiso se levantó y se retiró en silencio hacia la cocina en la

parte trasera de la casa. Tayton se quitó la chaqueta, se aflojó la corbata
y obedientemente se sentó a la cabecera de la mesa. El vino ya se estaba
enfriando en un aparador. El pan recién horneado ocupaba una pequeña
cesta en la mesa.
Echándose hacia atrás en su silla y estirando las piernas por

debajo de la larga mesa de caoba, Tayton ociosamente trató de averiguar
lo que esta fecha en particular podría conmemorar. Sin duda,
su mascota le diría cuando estuviera listo, pero adivinar se
había convertido en parte de la diversión de estas
inesperadas celebraciones.

¿El primer aniversario de la primera vez que había azotado al
hombre más joven? ¿Tres meses desde que exploraran las posibilidades
de una suspensión bondage?
9
Los pasos descalzos de Denny no hicieron ruido cuando él se

apresuró a regresar al comedor llevando una bandeja con la comida
favorita de Tayton. El olor de la carne le recordó que hacía horas desde
que había comido por última vez, pero eso no era lo más importante que
atravesaba su mente.
Sólo había un plato en la bandeja, sólo un lugar establecido en la

mesa. El plato no podía contener una porción doble para ser compartido
tampoco.
—¿Ya has comido?
—Yo no tengo hambre, gracias, Señor.
Tayton estudió el perfil del joven con mucho cuidado. Estaba tan
impresionante como siempre, pero ahora que miraba con más detalles,
se dio cuenta que el chico también estaba hecho un manojo de nervios.
Un ceño fruncido tocó las comisuras de los ojos de Tayton. Nunca

había visto cualquier atisbo de ansiedad en Denny respecto a cualquiera
de las improvisadas celebraciones anteriores.
Tayton asintió distraídamente aceptando el ayuno de su amante en

esta ocasión, pero toda su atención estaba ahora firmemente fija en tratar
de averiguar qué demonios podía poner a Denny tan nervioso de celebrar.
Habían estado juntos por más de un año, pero estaba

bastante seguro de que había estado en un viaje de
negocios hacia doce meses ese día. ¿Que había dejado

algún tipo de hito hacía seis meses, o tal vez hacía tres meses? Tayton
miró a Denny mientras su sumiso se arrodillaba sobre un cojín a su lado,
esperando pacientemente alguna oportunidad para servirlo.
10
El bistec desapareció gradualmente del plato de Tayton, junto con

cada una de las guarniciones.
—Excelente, como siempre. —Tayton pasó los dedos por el cabello

del joven mientras consumía el último trozo de comida y se recostaba en
la silla.
Denny no estaba tan nervioso como para no sonrojarse ante un

cumplido. Agachando la cabeza, como sí que no quisiera que su Amo
notara su color ligeramente sonrosado, rápidamente se levantó y limpió
los utensilios.
Ahora que Tayton estaba buscando los signos, era muy fácil ver
que su sumiso tenía los hombros anudados por la tensión. No dispuesto
a tener al joven fuera de su vista hasta que supiera lo que estaba pasando
con él, Tayton lo siguió hasta la cocina.
Denny estaba junto al fregadero, contando cosas con los dedos

mientras trabajaba a través de alguna lista mental de tareas pendientes.
Llegando por detrás de él en silencio, Tayton deslizó las manos alrededor
de la pequeña cintura y tiró del hombre hacia él hasta que su culo se
presionó fuertemente contra su propia entrepierna.
Denny jadeó cuando Tayton instaló las manos en sus caderas y

presionó su erección contra su parte trasera a través de sus pantalones.
Una sensación inesperada contra su polla le informó a Tayton
que no era sólo el entusiasmo de Denny por celebrar los
aniversarios lo que lo mantenía duro a pesar de sus
nervios.

Deslizando una mano entre sus cuerpos, Tayton deslizó dos dedos
en la hendidura entre las nalgas de Denny hasta que presionaron contra
el tapón que empujaba firmemente en el culo de Denny. Este vibró
11
suavemente contra sus dedos cuando empujó dentro del apretado
agujero. Denny gimió y se tambaleó hacia atrás contra Tayton.
—¿Te has mantenido listo para mí todo el día? —Tayton le susurró

al oído.
Denny asintió. Parecía ser el único tipo de respuesta de la que era

capaz en ese momento.
Sonriendo para sí mismo, Tayton alcanzó alrededor de Denny con

la otra mano y pasó la palma de la mano por el torso del joven hasta que
uno de sus dedos rozó un bonito pezón rosado.
Denny gimió y se mordió con fuerza el labio inferior.
Tayton murmuró su aprobación en el oído de Denny.
—¿Te has asegurado que estabas sensible para mí, también?
—Sí, Señor. —Las palabras eran apenas más que un susurro.
—¿Utilizaste las pinzas? —preguntó Tayton, rodando la pequeña

protuberancia de terminaciones nerviosas entre los dedos.
Denny molió su culo contra la entrepierna de Tayton mientras

presionaba el pecho hacia adelante en su mano.
—Sí, Señor.
—¿Mis favoritas?
Denny asintió, luchando para recuperar el aliento.

—Buen chico.
La cabeza de Denny cayó hacia atrás para apoyarse en el hombro

12
de su Amo mientras Tayton pellizcaba el pezón firmemente entre el pulgar
y el dedo índice y luego lo soltó.
—¿Y qué más tienes planeado para nosotros esta noche? —

preguntó Tayton, flexionando la dedos de la otra mano para presionar el
tapón más firmemente contra la próstata de Denny.
Denny gimió mientras el presemen se filtraba aún más

rápidamente de la punta de su polla.
Tayton sonrió y rozó sus labios contra la sien del hombre más bajo.
—¿Qué voy a hacer contigo? —reflexionó—. Podría...
—Permítame que lo ayude a relajarse primero —Denny

interrumpió.
Tayton se detuvo por un momento antes de girar al otro hombre

dentro del círculo de sus brazos y mirar abajo a sus ojos. Relajarse era
cualquier cosa menos un orgasmo muy agradable y no estaba en lo alto
en su lista de pendientes.
—Si usted prefiere, Señor… —Denny rápidamente se corrigió.
El joven ya se movía al borde de su orgasmo. Tayton pudo ver la

lujuria en sus ojos cuando Denny lo miró, pero había algo más, también.
Por alguna razón, Denny quería ayudar a su Amo a relajarse mucho más
de lo que quería que cualquiera de los dos se corriera, parecía
que sus planes para esa noche eran muy importantes para
él. Cualesquiera que fuera el aniversario que estaban
conmemorando era muy importante. Tayton estudió a su

amante con cuidado, preguntándose si se trataba de un aniversario que
Denny esperaba que su Amo recordara, también.
13
Denny bajó la mirada.
—Dígame lo que prefiere hacer, Señor —invitó en voz baja.
Tayton negó con la cabeza.
—Relajarse suena bien.
Denny lo miró por un momento, como si no estuviera seguro de que

iba en serio.
—Adelante —Tayton lo animó.
—Gracias, Señor.
Denny tendió con cautela una mano a Tayton. Sin decir una
palabra, lideró el camino de vuelta al pasillo y las escaleras.
Las velas se derramaron mientras ellos pasaban.
—Yo debería... —Denny se tambaleo cuando descubrió la falla en

sus arreglos cuidadosamente establecidos. Al parecer, quemar la casa no
era parte del plan.
—Me ocupare de las velas, y luego te alcanzo —Tayton decidió. Sólo

tomó a Denny un momento darse cuenta que no le estaba ofreciendo una
sugerencia; estaba ordenándole que hacer.
—Gracias, Señor.
Tayton observó a Denny despejar la parte superior

de las escaleras y girar la esquina que llevaba al dormitorio

principal antes de retirarse a la sala del comedor y empezar a extinguir
la multitud de velas repartidas por el espacio. Hizo lo mismo todo el
camino a través del pasillo y hasta las escaleras, por fin llegó a la puerta
14
del dormitorio.
El sonido de salpicadura de agua lo llevó hacia el baño. La gran

bañera doble estaba ya llena, el cuarto de baño inundado con remolinos
de vapor.
Denny estaba arrodillado pacientemente junto a la bañera, pero

rápidamente se levantó cuando Tayton entró y se acercó a ayudarle a
quitarse la ropa.
En cualquier otro momento, Tayton habría levantado una ceja y lo

hubiera apartado para este servicio en particular. Esta noche, dejó que
Denny hiciera lo que quisiera. De pie todavía en el medio de la cuarto,
permitió que el joven lo desnudara y pusiera su ropa cuidadosamente a
un lado.
Al entrar en la bañera, Tayton se tumbó y dejó que el calor del agua

se disipara por sus músculos. Cerró los ojos por un momento y
simplemente disfrutó de la forma en que su cuerpo se relajó y cualquier
pensamiento sobre su trabajo como analista financiero desapareció de su
mente.
Escuchó a medias el crujir de tela al otro lado de la habitación

mientras Denny doblaba su ropa. Cuando el sonido se detuvo y no fue
reemplazado inmediatamente por el sonido de Denny entrando en el
baño, Tayton abrió los ojos.
Denny estaba de rodillas una vez más en la toalla

doblada que había colocado en el suelo junto a la bañera.

—¿Puedo servirle, Señor?
—Sí. Si te preocupa que el vibrador te electrocute, puedo sustituirlo

15
por otro.
Denny miró Tayton entonces al agua.
—Yo...
—Te unirás a mí —Tayton terminó por él.

Capítulo Dos
16
Denny volvió su completa atención de nuevo a la cara de su Amo.

Conocía ese tono de voz. No había ninguna posibilidad de discusión en
él, y la desobediencia no formaba parte de sus planes para esta noche.
Su aniversario iba a ser perfecto. La sola idea de que no lo fuera

bastó para que sus rodillas temblaran mientras se ponía de pie y
obedientemente tomaba un tapón más adecuado de la estantería al lado
de la bañera.
Deslizándolo, rápidamente cambió el que había tenido alojado en

su culo vibrando a diferentes velocidades durante la mayor parte del día.
El simple hecho de que el reemplazo no estuviera enviando vibraciones a
su próstata hizo más fácil para Denny retroceder del borde del orgasmo,
pero aun así tuvo que morderse los labios mientras levantaba su pierna
y se metía en la bañera. En ese momento, sintió que podía correrse
simplemente si el viento cambiaba de dirección.
La bañera era grande, pero también lo era Tayton. Denny no estaba

muy seguro de cómo colocarse a sí mismo alrededor del hombre mayor
con el fin de dar a Tayton tanto espacio como fuera posible. Él tendría
que haber pensado todo con mucho más cuidado, debió haber anticipado
mejor los deseos de su Amo y trabajado en cómo responder a ellos de
antemano.
Dedos mojados se envolvieron alrededor de las muñecas de

Denny, y las decisiones dejaron de ser suyas. Tayton guio a
Denny para arrodillarse frente a él, a horcajadas sobre su
cuerpo.

La erección de Tayton se deslizó contra las nalgas de Denny
mientras él los colocaba como deseaba. Dejando de lado sus muñecas,
Tayton centró su atención en el resto del cuerpo de Denny.
17
Ahora los dedos de Tayton estaban suaves con aceites de baño

mientras jugaba fácilmente con los pezones de Denny. Incluso el más leve
toque fue suficiente para hacerlo gemir y querer suplicar por el permiso
de correrse. Cuando Tayton envolvió su otra mano alrededor de la
erección de Denny, él fue incapaz de contener sus caderas de corcovear
hacia adelante.
Mirando hacia abajo, a su Amo, Denny le rogó en silencio que no

lo empujara más cerca de esa línea que no tenía permiso para cruzar. La
idea de decepcionar a este hombre, en este día de todos los días, era más
de lo que podía soportar.
Tayton levantó una ceja.
Denny cerró los ojos, luchando desesperadamente por volver de ola

tras ola de sensaciones. La oscuridad detrás de sus párpados no ayudó.
Fue reemplazada casi inmediatamente por la imagen de Tayton, desnudo
y hermoso, sus músculos brillantes con los aceites de baño que se
aferraban a su piel, el cabello oscuro peinado atrás en su rostro, una
sombra de barba destacando su mandíbula y el deseo de jugar brillante
en sus ojos.
Denny no podía decepcionar a su Amo. Él respiró hondo y se

concentró en relajar cada músculo de su cuerpo, tratando frenéticamente
de detener el orgasmo que se acercaba aceleradamente.
—Te estas controlando muy bien. —Tayton observaba

como los minutos pasaban, cada uno sintiéndose como
una hora para Denny.

Parpadeó abriendo los ojos.
—Gracias, Señor. —Su voz estaba ronca, las palabras de ningún

18
modo lo suficientemente cerca como para expresar la verdadera gratitud
por la inesperada alabanza.
Tayton asintió con la cabeza, sólo una vez, y dejó caer las manos
lejos del cuerpo de Denny.
Tomando eso como su señal, Denny se levantó cuidadosamente

para salir del baño, haciendo todo lo posible por no a gotear sobre su
amante en el proceso. Cuando Tayton se puso de pie, Denny cogió una
de las enormes toallas negras que había colocado para la ocasión y
comenzó a secar el cuerpo de su Amo.
Tayton no hizo ningún comentario; él simplemente esperó

pacientemente en el medio del baño hasta que Denny hubo completado
la tarea. Las gotas de agua se aferraban a los vellos oscuros sobre el
pecho de Tayton y Denny las limpió suavemente, teniendo cuidado de no
perder ni un solo centímetro de la forma de su Amo.
Una vez hecho esto, Denny apresuradamente retiró la humedad de

su propia piel que aún no había secado y luego arrojó la toalla en el cesto.
Tayton todavía estaba de pie en el mismo lugar en el medio de la

habitación, con los brazos cruzados sobre su pecho, obviamente, a la
espera de que Denny le dijera lo que pensaba que debería suceder a
continuación. Sólo había una respuesta a esa pregunta en silencio.
—Lo que quieras, Señor.
Tayton dio un paso adelante, hasta que sus cuerpos

desnudos casi se tocaban.

—¿Estás diciéndome que no has planeado nada más allá de este
punto?
19
Denny lo miró.
—Hay aceites de masaje esperándolo en el dormitorio, Señor —

admitió.
Tayton asintió, sólo una vez.
Con el permiso concedido para seguir adelante con la siguiente

etapa de su plan, Denny llevó a Tayton hacia el dormitorio.
Los aceites estaban prolijamente alineados en la cómoda. Denny ya

tenía uno en su manos en el momento Tayton habló de nuevo.
—Si vas a apagar las velas en algún momento, será mejor que lo
hagas ahora —advirtió—. Porque no saldrás de la cama una vez que
estemos cómodos en ella.
—Sí, Señor. —Denny corrió alrededor de la sala, colocando su

mano detrás de cada llama que extinguía para asegurarse que no saltara
nada de cera en los finos muebles de su Amo.
—Hay una cosa que te has olvidado de hacer —Tayton mencionó,

casi casualmente.
Denny se congeló mientras trataba de averiguar en qué había

fallado.
—¿Señor?
—Decirme, ¿qué aniversario estamos celebrando? —

Tayton apremió.

El alivio se precipitó a través de Denny. Sonrió ligeramente cuando
apagó otra vela.
20
—No es una fecha que usted recordaría, Señor.
—Ah, ¿sí?
Denny hizo todo lo posible para mantener la calma en el exterior,

incluso mientras mentalmente se maldijo a sí mismo. Había sabido que
hacer demasiado alboroto era una mala idea. También había sabido
condenadamente bien que estaba jugando con la clase de fuego que no
tenía nada que ver con las velas.
—En realidad no es un aniversario suyo, Señor.
Denny se arriesgó a mirar en la dirección de Tayton. Había un ligero

ceño fruncido alrededor de los ojos del hombre mayor. Lo observó
profundizar más el ceño como si Tayton se hubiera dado cuenta de
repente de algo importante y no que era en absoluto de su gusto.
—Si estas celebrando algún aniversario de otro hombre conmigo,

Denny... —comenzó.
Denny negó con la cabeza y se volvió hacia Tayton, pero fue

totalmente incapaz de obligarse a sí mismo a cruzar la habitación y
acercarse al otro hombre sin una invitación.
—Yo no haría eso, Señor.
—Hace un año este fin de semana, yo estaba en un viaje de

negocios en Londres —Tayton comenzó.
—No, Señor. Esto fue hace dos años —Denny espetó.

El ceño fruncido de Tayton no mejoró. Sus hombros se tensaron y
la expresión de sus ojos se volvió más fría de lo que Denny había visto
nunca.
21
—Hace dos años, ni siquiera nos habíamos conocido. ¿Te gustaría

probar otra mentira? ¿Tal vez una que fuera más creíble esta vez?
Denny tragó rápidamente. Su estómago se revolvió por la

acusación. Su cabeza le daba vueltas.
—¿Y bien? —Su Amo inquirió.
Denny respiró hondo, pero la acción no pudo hacer que las

palabras correctas aparecieran en su cabeza. Incluso los gritos furiosos
habría sido preferibles a ese tono frío y sin emoción.
—¿Denny? —Su Amo todavía estaba al otro lado de la habitación,

pero bien podría haber sido kilómetros de distancia.
—Hace dos años, usted se reunió con algunos amigos en un bar

leather1 de la ciudad, llamado The Falcon.
Tayton asintió secamente.
1 La subcultura leather (del inglés, “cuero”) comprende prácticas e

indumentaria con un fin sexual o erótico. Una de las maneras en
las que el grupo se distingue de las culturas sexuales
convencionales es mediante el uso de ropa de color negra y artículos
de cuero. Aunque la cultura leather es más visible en la comunidad
gay y se la suele asociar con hombres gays, en realidad se
manifiesta de muchas maneras en el mundo gay, lésbico, bisexual,
y heterosexual. Muchas personas asocian la cultura leather con
prácticas de bondage, disciplina, dominación, sumisión y
sadomasoquismo. Pero para otros, usar indumentos de cuero de
color negro es simplemente una moda erótica que realza la
masculinidad del portador o reclama el poder sexual; la afición por
las motocicletas y la independencia; y/o una erotización o
fetichización en torno al cuero y otros productos de la cultura
leather.

—Eso es correcto.
—Pasó toda la noche allí con otros tres Dominantes. No puedo

22
recordar sus nombres, pero creo que debía conocerlos desde hace tiempo,
ya que estaba muy relajado. Usted no sesionó esa noche, Señor.
Simplemente pareció ponerse al día con los chicos que no habías visto
por mucho tiempo.
—¿Y tu punto es? —preguntó Tayton, su impaciencia clara en cada

sílaba.
Denny se quedó mirando la botella de aceite de masaje aún en sus

manos.
—Hace dos años, me enamore de usted, Señor. —De alguna

manera, Denny logró encontrar la fuerza para buscar y encontrar los ojos
del otro hombre a través de la habitación.
Su Señor se le quedó mirando durante mucho tiempo. Denny

contuvo el aliento, esperando el veredicto del hombre. Finalmente, Tayton
chasqueó los dedos, llamándolo hacia él.
Balanceando sus piernas por un lado de la cama, Tayton tomó una

almohada y la arrojó en el suelo a sus pies. Denny se arrodilló sobre ella,
contento de no tener que preocuparse de que sus piernas se doblaran.
Sus rodillas apenas habían tocado el suave algodón cuando Tayton
extendió la mano y enredó sus dedos en su cabello, acercándolo más
hasta apoyar la cabeza contra su pierna.
El mero hecho de que Tayton le permitiera tener ese tipo

de contacto le permitió a Denny recordar cómo respirar. Su
Amo no estaba tan enojado con él como había temido que
estuviera. No había metido la pata tan mal que no pudiera

ser perdonado.
—Lo siento por todo el alboroto, Señor. Yo sólo...

23
—Si tratas de pedir disculpas por cualquier cosa otra vez, te

encontrarás volcado sobre mis rodillas y no va a ser para el tipo de
nalgadas que disfrutas recibir o que disfruto administrar.
Un tirón en el pelo de Denny le exigió que mirara hacia arriba y

encontrara los ojos de Tayton. Denny nunca tuvo visto a su Amo tan
serio.
—No dejare que pidas disculpas por enamorarte de mí o por

celebrarlo.

Capítulo Tres
24
Denny estaba muy sorprendido, no podía pensar en una sola cosa

que decir. A lo sumo, había esperado que su Amo tolerara su
sentimentalismo. La posibilidad de que en realidad Tayton lo aprobara ni
siquiera se le había ocurrido.
—Es un hito mucho más grande que algunos de los otros que
hemos celebramos juntos —Tayton observó.
Denny trató de mirar hacia abajo, pero el agarre de Tayton en su

cabello se apretó, denegándole el permiso para hacer eso.
—¿Hay algo más que quieras decirme sobre todos esos aniversarios
que hemos celebrado juntos?
Denny se mordisqueó el labio inferior mientras trataba de averiguar

la respuesta menos mala.
—Las mentiras por omisión siguen siendo mentiras, mascota. —

Sus ojos se encontraron—. Pero si me dices toda la verdad en este
momento, no seras castigado por algo que no has mencionado antes de
hoy.
Denny cerró los ojos por un momento. Tayton merecía la verdad.

Era poco lo que le pedía en comparación con todo lo que le había dado
en los últimos dos años.
—Esos primeros meses después que me enamoré de

usted, Señor, antes de pertenecerle... —susurró Denny,
sólo para encontrar que le era imposible continuar.

—No fueron agradables —Tayton termino en su lugar.
Denny asintió, más por la alegría de sentir la mano de Tayton

25
mantener su férreo control sobre su pelo que por cualquier otra cosa.
—Usted ni siquiera sabía que estaba vivo, y había tantos otros

sumisos que podría haber escogido. Así que, yo... Me prometí que siempre
estaría agradecido por cualquier cosa que pudiera tener con usted, Señor.
—Abriendo los ojos, miró a Tayton y se forzó a sí mismo a sostener la
mirada del hombre mayor—. Nunca esperé que me ofreciera un collar en
realidad, pero yo no puedo dejar de ser agradecido por las cosas pequeñas
sólo porque tengo las grandes ahora. Eso sería un error.
Tayton no dijo nada.
—Sé que es una tontería, Señor. Y no quiero ponerlo nervioso

con...
—Suficiente.
Denny inmediatamente se quedó en silencio. Incluso su corazón

había silenciado sus latidos.
—¿Alguna vez te he dicho lo mucho que me gustan nuestros

aniversarios?
Denny negó con la cabeza.
—No son tontos; son hermosos —dijo Tayton.
Él pareció a punto de añadir algo más, pero se aclaró la

garganta en su lugar, obviamente incómodo con la dirección
que estaba tomando la conversación. Necesitando decir
algo, cualquier cosa, para aliviar la vergüenza de Tayton,

Denny dijo lo primero que le vino a la cabeza.
—¿Puedo saber lo que habría optado por hacer esta noche si no

26
hubiera llegado a casa para una celebración, Señor?
Si bien una de las manos de Tayton permaneció en el pelo de

Denny, trasladó la otra a su rostro. Su pulgar trazó una línea en el labio
inferior del joven. De repente, toda la atención de Tayton estaba en la
boca de Denny. Las palabras no fueron necesarias entonces. Denny sabía
lo que Tayton quería. Sonrió ligeramente.
—¿Puedo ayudarlo a... relajarse, Señor? —preguntó de nuevo.
La risa de Tayton dio a Denny la confianza para sonreír más

ampliamente. Se inclinó hacia delante, apenas manteniendo un gemido
cuando el tapón se movió dentro de él como resultado.
Tayton no puso ninguna objeción cuando Denny acarició su

entrepierna. Tocándolo con su lengua, Denny lamió suavemente el eje
duro, frotando su cara contra la piel del otro hombre en el proceso. Al
parecer, no había puesto a prueba la paciencia de su Amo por lo que él
había pensado.
Tayton lo separó por un momento, pero sólo para colocarse a sí

mismo más cómodamente en la cama con su cabeza y hombros apoyados
sobre varias almohadas. Él, obviamente, tenía la intención de disfrutar
de una agradable mamada en lugar de simplemente correrse tan rápido
como pudiera.
Denny se unió rápidamente a su amante en la cama y se

arrodilló entre las rodillas del otro hombre. Mojando la
cabeza, succionó suavemente la punta de la polla de
Tayton de la forma en que sabía que el otro hombre amaba.

Así como él esperaba, la mano de Tayton se enredó en su cabello
una vez más y guió sus movimientos, asegurándose que hacía todo lo que
complacería a su amante tanto como fuera posible.
27
—Así es, cariño —Tayton murmuró—. Justo así.
Incluso después de todo este tiempo, Tayton nunca había dejado

de enseñarle, animándole a ser mejor en todo lo que hacía. Nunca dejó
de alabarlo cuando hacía algo que le complacía, tampoco. Y Denny nunca
lo había amado más por eso, que cuando lo hizo en aquel momento en
particular.
Las palabras de Tayton construyeron una corriente lenta y

constante de agradecimiento que hizo que Denny lo llevara
profundamente en su garganta y trabajara los músculos formando un
canal apretado alrededor de la erección, de la forma en que le había
enseñado.
Denny conocía la polla de Tayton como la suya propia. Sabía cómo

llevarlo al borde, sólo para tirar hacia atrás en el último momento y
alargar el placer de su amante un poco más.
La mandíbula de Denny empezó a doler. Su lengua se sentía

adolorida. Al inclinarse era cada vez más difícil ignorar el tapón dentro
de él. Pero igual no hizo nada para apresurar a su Amo. Mirando
fijamente el cuerpo de Tayton, simplemente bebió de la vista de su
amante, hasta que este, de repente, hizo señas para que se detuviera.
Retirándose, Denny se pasó los dedos por sus labios, sin saber si
había hecho algo mal.
Tayton tendió una mano hacia él.

—Ven aquí.
Denny puso su mano en la de Tayton. Unos segundos más tarde,

28
se encontró a horcajadas sobre el cuerpo del otro hombre. Tayton tomó
la tapa de la botella de aceite de masaje que todavía estaba en la mano
de Denny y lo guió para que vertiera un poco en la polla de su Amo.
Denny se relajó un poco mientras observaba a Tayton extender el

líquido resbaladizo en la gruesa y dura longitud. No era el final del juego,
sólo el medio tiempo. Y Tayton quería cambiar de lado para la segunda
mitad. Denny no pudo evitar sonreír ante la idea.
—Plug —Tayton urgió.
Levantándose a sí mismo desde los muslos de Tayton, Denny

alcanzó tras de sí con la mano libre y extrajo el tapón. Apenas lo había
puesto a un lado cuando Tayton lo guió para que bajara sobre él y se
deslizara sobre la erección de su Amo.
Denny se quedó sin aliento. Los tapones no estaban ni siquiera

cerca del tamaño de la polla de Tayton. Estar relajado lo suficiente para
mantener el plástico dentro suyo no era lo mismo que dilatarse lo
suficiente para la erección de su amante. Él se quedó quieto, con los ojos
cerrados, la cabeza gacha mientras esperaba que su cuerpo se adaptara
y aceptara la nueva y más grande intrusión.
—Así es, mascota. —Las manos de Tayton descansaban a cada lado

de la cintura de Denny, el calor de las palmas de sus manos calando en
la piel del joven—. Tenemos todo el tiempo del mundo.
Denny asintió. Era vagamente consciente de la botella

de aceite de masaje, todavía en la mano, pero que no tenía
la coordinación para colocarla sobre la mesita de noche.

Los momentos se estiraron en minutos. Con el tiempo, las manos de
Tayton que descansaban a ambos lados de Denny cambiaron. Las yemas
de los dedos apretaban más firmemente contra él, dándole un leve
29
movimiento.
Lentamente al principio, Denny comenzó a subir y bajarse a sí

mismo. Tensando sus muslos, él levantó su cuerpo, dejando que la polla
de Tayton se deslizara de su agujero. Cuando solo quedaba la cabeza,
Denny descendió de nuevo. A medida que los músculos de sus piernas
se pusieron a trabajar, también lo hicieron los que estaban dentro de
Denny. Él cerró y relajó el apretado anillo de músculos en la base de su
agujero alrededor de la polla de Tayton una y otra vez, decidido a dar a
su Amo tanto placer como pudiera.
Cada vez que se movía, la cabeza de la polla de Tayton parecía

palpitar contra la próstata de Denny. Él gimió de frustración, sabiendo
que todavía no se le permitiría correrse. Una fina capa de sudor estalló
en su piel, más por necesidad que por el esfuerzo.
Parpadeó abriendo los ojos y se quedó mirando a Tayton, tratando

de averiguar qué tan cerca estaba su Amo y qué posibilidades tenía de
durar el tiempo suficiente para hacer que el otro hombre se corriera.
Mientras Denny enfocaba en él, Tayton echó hacia atrás la cabeza. Danny
se resistió, sus caderas apartándose de la cama mientras él empujaba
profundamente en su interior.
Las manos apoyadas en las caderas de Denny apretaron su agarre.

Tayton dejó escapar un grito mientras se corría. Denny lo miró fijamente,
apenas manteniendo el equilibrio en la parte superior del otro
hombre mientras Tayton empujaba a través de su orgasmo.
Cuando Tayton se dejó caer en la cama, con el

cuerpo completamente inmóvil excepto por la forma en que su pecho
subía y bajaba al ritmo de sus irregulares respiraciones, Denny lo siguió
mirando. Mientras Tayton permanecía inmóvil, Denny voluntariamente
30
siguió su ejemplo y mantuvo su posición, la polla de su Amo
ablandándose lentamente dentro de él.
Él no se retiró o levantó a sí mismo del regazo de Tayton hasta que

este no se lo indicara. Sentado con cuidado sobre el otro hombre, Denny
miró hacia abajo a la botella de aceite de masaje aún en la mano a través
de una bruma de frustración. Parecía bastante inútil ahora.
—Creo que estoy tan relajado como cualquier hombre puede

ponerse —Tayton convino mientras tomaba la botella de él y la colocaba
sobre la mesa de noche—. Tal vez estoy tan relajado que, si eres muy
bueno y te acuestas en silencio aquí conmigo por un rato, voy a estar
inclinado a contarte sobre el día que me enamoré de ti también...
Denny miró a Tayton, los ojos muy abiertos de asombro. Ni siquiera

se le había ocurrido que su Amo en realidad podría...
Tayton levantó una ceja.
—¿No crees que eso es algo que debe ser celebrado, también?
—¡Sí, Señor! —Denny dijo apresuradamente.
La sonrisa de Tayton se volvió ligeramente malvada.
—En ese caso, si eres muy bueno entre ahora y el aniversario de

ese día, cuando llegue el momento dejare que te corras como parte
de las celebraciones.
El aire quedo atrapado en la garganta de Denny. Ya

había pasado mucho tiempo desde que le había permitido

un orgasmo. La idea de estar frustrado durante meses hacia que quisiera
llorar, incluso mientras que el resto de él continuaba regocijándose
porque su amor era correspondido.
31
—No te preocupes, mascota —Tayton le susurró mientras guiaba a

Denny para acostarse junto él, en el círculo de sus brazos—. No tendrás
que esperar mucho tiempo. Yo no estaba tan ajeno a ti como pareces
pensar.
Un poco de rubor complacido hizo su camino hacia las mejillas de

Denny cuando él puso su cabeza en el hombro de Tayton y se acurrucó
aún más cómodamente al lado del hombre más grande, sintiéndose más
seguro y más amado de lo que nunca pensó posible.
—Sí, Señor
Fin

Próximo libro
32
3 – Tocando madera
Ha pasado bastante tiempo desde que
Ross y su Amo, Harry, han tenido
tiempo de ir abajo, a la sala de juegos
del sótano, para pasar un buen rato
juntos.
Eso está por cambiar.
Todo el mundo sabe que el contacto

con la madera puede dar buena suerte
a una persona y Ross necesita toda la
suerte que pueda conseguir esta
noche. El no poder tocar madera no es
una opción, pero cuando un hombre está atado e indefenso no es fácil
tener éxito tampoco.

Staff
33
Traducción, revisión y diseño
Lelu

Acerca del autor

34
Kim Dare escribe a tiempo completo en Gales
(Reino Unido). Publico por primera vez en
2008, y ha lanzado desde entonces cerca de
ochenta títulos de BDSM erótico y
romántico.
Si bien la mayoría de las historias de Kim es

de relaciones m/m, también escribe sobre
personajes que gozan de historias
hombre/mujer, mujer/hombre (mujer
dominante), mujer/mujer y todo tipo de
relaciones ménage. Los títulos de Kim han incluido historias
contemporáneas, cuento de hadas readaptados, vampiros, viajeros del
tiempo, hombres lobo y hombres leones, por no hablar de algún hombre
pato ocasional.
Sin importar el sexo de sus personajes o los diferentes géneros que

habitan, desde cuentos a las novelas, hay tres cosas que Kim siempre
quiere dar a sus personajes: perversión, amor, y un final feliz.
Información de Contacto
E-mail: kim@kimdare.com
Sitio Web: www.kimdare.com

35
Esperamos que lo hayas disfrutado y

nos acompañes en el próximo libro.
Si quieres saber más de nosotros o

formar parte de nuestro equipo
puedes contactarnos en:
contactar.sd@gmail.com

Kim Dare - en Este Dia...

Cargado por

Información del documento

Descripción original:

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Kim Dare - en Este Dia...

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

Kim Dare En este día…

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

Gemas Eróticas #2 (multiautor)

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

Nota a los lectores

Nuestras traducciones están hechas para quienes

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

A mis padres, que se casaron un miércoles, y que se han dicho “Feliz

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

Tayton siempre recordaba Navidades, San Valentines, cumpleaños

Esta noche parece marcar un aniversario que es particularmente

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

Frederick Tayton hizo una pausa, con un pie dentro de su casa y

Si no fuera porque alguien había encendido docenas de velas

Mientras estudiaba la escena delante de él, los labios de Tayton se

Tayton corrió la fecha del día a través de su mente.

¿Cumpleaños? No. ¿San Valentín? No ¿Navidad? No

Caminando confiado a través de la habitación, Tayton se

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

No era el aniversario del día en que Tayton le había dado a Denny

—¿Mascota? —Tayton inquirió, mientras daba lentamente vueltas

Nada interrumpía su vista, excepto el collar de cuero negro

Denny inclinó la cabeza hacia atrás y miró a Tayton.

—¿Tiene hambre, Señor?

La comida era la última cosa en su mente. Tayton estaba a punto

A través de la puerta, vio que la mesa del comedor

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

Su curiosidad fue por un momento más que su lujuria. Volviendo

—¿Sirvo la cena, Señor?

Tayton miró por encima del hombro. Denny ya se había trasladado

Su sumiso se levantó y se retiró en silencio hacia la cocina en la

Echándose hacia atrás en su silla y estirando las piernas por

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

Los pasos descalzos de Denny no hicieron ruido cuando él se

Sólo había un plato en la bandeja, sólo un lugar establecido en la

—¿Ya has comido?

—Yo no tengo hambre, gracias, Señor.

Un ceño fruncido tocó las comisuras de los ojos de Tayton. Nunca

Tayton asintió distraídamente aceptando el ayuno de su amante en

Habían estado juntos por más de un año, pero estaba

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

El bistec desapareció gradualmente del plato de Tayton, junto con

—Excelente, como siempre. —Tayton pasó los dedos por el cabello

Denny no estaba tan nervioso como para no sonrojarse ante un

Denny estaba junto al fregadero, contando cosas con los dedos

Denny jadeó cuando Tayton instaló las manos en sus caderas y

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

—¿Te has mantenido listo para mí todo el día? —Tayton le susurró

Denny asintió. Parecía ser el único tipo de respuesta de la que era

Sonriendo para sí mismo, Tayton alcanzó alrededor de Denny con

Denny gimió y se mordió con fuerza el labio inferior.

Tayton murmuró su aprobación en el oído de Denny.

—¿Te has asegurado que estabas sensible para mí, también?

—Sí, Señor. —Las palabras eran apenas más que un susurro.

—¿Utilizaste las pinzas? —preguntó Tayton, rodando la pequeña

Denny molió su culo contra la entrepierna de Tayton mientras

Denny asintió, luchando para recuperar el aliento.

Gemas Eróticas #2 – Stand Alone Short Stories #2

La cabeza de Denny cayó hacia atrás para apoyarse en el hombro

—¿Y qué más tienes planeado para nosotros esta noche? —

Denny gimió mientras el presemen se filtraba aún más

—¿Qué voy a hacer contigo? —reflexionó—. Podría...