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Centro de Armonización Integral

Curso: Geometría Sagrada


Prof.: Gustavo Fernández

Lección nº 14: Armonización de viviendas y lugares físicos con Merkaba

Llegados a este punto, podremos comenzar a aplicar la Merkaba ya practicada con


vistas a equilibrar energéticamente el ambiente en que nos encontremos. Ya sabemos que
la intensa concentración psíquica que deviene de estas técnicas crea un efecto de vórtice el
cual, en tanto rota idealmente en distintos sentidos, se transforma en un toroide.

Así, la mente crea forma, y las formas modelan el espacio a nuestro alrededor.

De manera tal que podremos proceder a armonizar energéticamente los ámbitos en que nos
encontremos cuando, una vez determinados tantos los puntos de radiaciones telúricas
nocivas como cruces Hartmann enseñados en la lección anterior, procedamos así:

a) ubicándonos en el punto exacto detectado (o en su epicentro, si el área que abarca, como


en el caso de los “ojos de agua” (cruces de napas de agua a distintas profundidades y su
proyección vertical) y direccionados al punto cardinal correspondiente al hemisferio donde
nos encontramos, efectuamos el ejercicio Merkaba tal como –se supone- venimos
practicándolo desde el comienzo de este curso. Esto es muy importante: bastará con hacerlo
una sola vez para que el efecto de armonización del punto (quizás deberíamos mejor
escribir: bloqueo energético) se extienda durante un período que puede estar sujeto a
muchas variables, pero que nuestra experiencia indica entre 18 meses y dos años. Sin
embargo, tal período puede extenderse hasta el triple si inmediatamente luego de cumplir el
Merkaba en ese punto inscribimos (ya sea pintándolo, trazándolo en el suelo con martillo y
cincel, fijando al lugar una placa, etc) el Vesica Piscis esquematizado, como mostramos
aquí.

Dado que no es necesario que esté expuesto a la vista, si se trata de neutralizar un


punto de irradiación perjudicial del suelo podremos cubrir, por ejemplo, con una alfombra
el mismo. O bien, como he recomendado hacer en algunos casos puntuales, enterrar bajo el
suelo una plaqueta –recomiendo que sea de hormigón, en el cual el Vesica Piscis se grabó a
buril- con el mismo y sobre ella colocar el embaldosado, parquette, cerámicos, etc.

Dicho Merkaba lo habremos de repetir en todos los puntos de la vivienda donde


habremos detectado anomalías energéticas, siendo muy importante visualizar, en la
ejercitación, una continuidad entre lo Macrocósmico y lo Microcósmico, expresado
simbólicamente en una columna de luz que descendiendo el cielo ingrese al Merkaba,
atraviese nuestro chakra coronario, se dirija hacia el sacro coccígeo y se proyecte hacia el
interior de la tierra sin solución de continuidad.

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