Está en la página 1de 2

Escena: En lo de Walter

(Marito y Marta entran caminando a escena por un lateral del escenario)


Marito: -…y vos fíjate que se guardó esa maravilla para el final, una locura! No se lo esperaba nadie, ¿o
no? ¿Qué decís?
Marta: (dispersa) -No, no se lo esperaban…
Marito: -vos lo que tenés que mirar siempre es la cadera, el movimiento que hace cuando la tira, ¿le
viste la cadera? ¿la viste?
Marta: -Sí, la cadera…
Marito: -¿Viste lo que es? Parece una gacela en celo, siempre hace lo mismo este Remigio, es terrible
Marta: -Grande Remigio, ¿no?
Marito: -Sí, es un capo.
Marta: -No, digo, grande… mayor… ¿cuántos…
Marito: -93… pero así como lo ves, con el bastón, la bolsita colgando y el tubito ese en la garganta para
hablar, en la cancha de bochas ninguno le hace ni sombra… es un espectáculo.
Marta: -Te gustan las bochas ¿no?
Marito: -Y sí, la verdad que es un deporte muy noble, con valores importantes, tiene una historia muy
rica, se dice que en el 5000, 5200 antes de Cristo, los egipcios jugaban con pequeñas bochas de piedra
caliza…
Marta: (interrumpe) -Estás contento.
Marito: (contento/tímido) -Y sí
Marta: (pegándole en el hombre amistosamente) -¡eh, tontito!
Marito: -que se yo, pensé que iba a pasar mi cumpleaños sólo, bah con mi mamá… así que sí. ¡qué
sorpresa que te apareciste eh! (le pega en el hombre más fuerte, y la sacude un poco)
Marta: -Está para tomar algo ¿no? Un vermucito.
Marito: (entusiasmado) -Y sí… un vermucito, o una coca, (seductor) en casa me sobró coca de ayer.
Marta: - Vamos ahí (señala hacia el público) ¿te acordás de la parrilla?

(Marito mira hacia el público, se queda paralizado, se le transforma la cara)


Marito: (Para sí) –“Lo de Walter” (A marta) Hay no, mirá la hora que es. Me tengo que ir.
Marta: -Pará, cómo que te vas.
Marito: (duda)-Sí, es que… me tengo que ir a mi casa…

1
Marta: -No, pero no te podés ir… tenemos que tomar el vermucito.
Marito: (duda)-No… es que mi mamá…
Marta: -Dale, si tu mamá no se va a enterar, tomamos uno para festejar.
Marito: (duda)-no… es que… la dejé encerrada en la pieza, para que no me tome la coca, y me olvide
de sacarla
Marta: -Dale, no le va a pasar nada.
Marito: -No, pero… es que… ¡me tengo que ir!

(coreografía de movimientos, Marito se quiere ir y Marta no lo deja)


Marta: -No
Marito: -Sí
Marta: -No
Marito: -Dejam…
Marta: -Quedat…

(termina la secuencia movimientos. Marito se empieza a ahogar)


Marta: -Tranquilo, tranquilo, respirá, ¿las pastillas? ¿donde están las pastillas?
(Marito le señala la mochila, Marta saca las pastillas y le da una)
Marta: -Listo, tranquilo, respirá… inspiro… expiro… muy bien
Marito: (más relajado, pero aún asustado)- Es que me trae malos recuerdos “Lo de Walter”
Marta: -Bueno, pero lo pasado ya pasó ¡Eh! (lo abraza y lo empieza a empujar sutilmente hacia el
público) ahora hay que festejar, ¡así que nos tomamos un vermucito con los chicos y todos contentos!
Marito: (alarmado) -¡¿Qué chicos?!

(Marito se planta y no quiere seguir avanzando. Forcejean, Marta lo empuja y Marito trata de
resistirse)
Marta: -¡Los chicos! ¡Dale! ¡Caminá! (lográ empujarlo hacia el borde del escenario) ¡Caminá carajo!
TODOS: -¡Sorpresa! (cara de pánico de Marito)

APAGÓN.

También podría gustarte