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B). EL DESARROLLO PRODUCTIVO SUSTENTABLE.

Debido a la diversidad de climas existentes en Latinoamérica, el recurso hídrico es


imprescindible ya que en los últimos tiempos el sector agrícola ha crecido exponencialmente en
esta parte del planeta. Para lo cual la calidad del agua es vital.

DESARROLLO PRODUCTIVO EN ZONAS HUMEDAS:

El desarrollo productivo en zonas húmedas con respecto al consumo es poco significativo pero
en relación al uso hidroeléctrico hay una controversia para lo cual debe realizarse los estudios
pertinentes con el fin de tener la óptima distribución del recurso así como tener el mínimo de
riesgos con respecto al uso agrícola .

A) REDUCIR EL IMPACTO DE LAS SEQUIAS Y EL CAMBIO CLIMATICO.


Este punto nos habla del impacto que genera el cambio climático en la producción
energética para lo cual debería ampliarse el estudio de las cuencas en relación al tiempo
para asi poder predecir y estar preparados para los cambios bruscos en déficit del
recurso hídrico.
B) CONTROLAR LA EROSION EN CUENCAS DEGRADADAS Y COLMATACION DE LOS
EMBALSES.
El control de la erosión es fundamental en el tema hidroenergético ya que es el cáncer
de los proyectos hidroeléctricos va mermando la capacidad poco a poco.

USO PRODUCTIVO EN ZONAS ARIDAS Y SEMIARIDAS

En este caso hay una gran controversia ya que el gasto del recurso hídrico agrícola es mucho más
bajo que el gasto hídrico usado en la minería, para lo cual debería existir una administración
justa de este recurso con el fin de evitar que el sector agrícola se vea perjudicado ya que gran
parte de la producción está destinada a la exportación, teniendo asi un alto impacto en la
economía del país.

La energía hidroeléctrica representa el 70 % de la capacidad de generación renovable del


mundo, una proporción que se eleva a más del 80 % en América Latina..

La energía hidroeléctrica mantiene una doble relación con el cambio climático. Por un lado,
contribuye a evitar las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de la quema de
combustibles fósiles. Por otro, es probable que la disponibilidad de agua para la generación de
energía se vea afectada por el cambio en los patrones de precipitaciones, que puede reducir el
caudal de los ríos.
A) AJUSTAR LA EXTENSIÓN DE LAS ZONAS DE RIEGO A LA DISPONIBILIDAD HÍDRICA
Implica ser conscientes de nuestra disponibilidad del recurso y asi mismo administrarlo de
la manera más eficiente sin excedernos.
Tal es así que podríamos tener extensiones sin la capacidad de abastecimiento.
Aquí un cuadro del estrés hídrico en algunos países.

B) EVALUAR EN FORMA INTEGRAL EL IMPACTO DE LOS DESARROLLOS TECNOLOGICOS Y LOS


CAMBIOS DE USO.
En este aspecto podemos notar el desbalance que genera el mal uso de algunas
infraestructuras ya que generar infraestructura para mejorar el uso del recurso hídrico
genera muchas veces la utopía de que este recurso es infinito y sobrepasamos la capacidad
para lo cual fue construida en su momento.
C) CONTROLAR LA SOBREEXPLOTACION DE ACUIFEROS.
D) REGULAR LA INTERACCION ENTRE LAS AGUAS SUPERFICIALES Y SUBTERRANEAS
Estas dos situaciónes implican el consumo progresivo del agua que se encontraba
almacenada en el terreno, y acarrea numerosas consecuencias negativas, como por
ejemplo: un gradual encarecimiento de la producción, problemas en los cursos de agua o
entre usuarios y, frecuentemente, una degradación de la calidad del agua.
E) CONTROLAR LOS PROCESOS DE SALINIZACION ASOCIADOS AL DESARROLLO DEL REGADIO.
La salinización del suelo también dificulta la absorción de nitrógeno, lo que ralentiza el
desarrollo de las plantas y provoca una pérdida de rendimiento. El estrés iónico es otra
consecuencia de una alta salinidad del suelo.
En nuestro país y en nuestra región supone un gran problema.
F) CONSIDERAR LA INCERTIDUMBRE ASOCIADA A LA VARIABILIDAD Y AL CAMBIO DEL CLIMA.
Este punto nos exhorta a tomar conciencia de la importancia del recurso hídrico sobre
todo en las zonas áridas y semiáridas donde la distribución del agua debería ser
milimétrica y así evitar la incertidumbre de posibles sequias que nos lleven a una
catástrofe tanto agrícola como económica.
G) REGULAR EL CAMBIO DE LAS CONDICIONES DE ESCORRENTIA Y DRENAJE EN LAS CUENCAS
HIDROGRAFICAS.
Este punto nos habla del impacto que tienen las acciones del ser humano al modificar las
redes de drenaje naturales muchas veces con el fin de aprovechar la superficie para el uso
agrícola como para sus fines particulares como vivienda etc. Sin tomar en cuenta que
perjudica ampliamente otras zonas, muchas veces representa un enorme problema con el
que no se puede lidiar porque existen intereses monetarios importantes considerando así
un daño permanente tanto a la naturaleza como para el mismo ser humano pero en este
caso de otras zonas o regiones.

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