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26 de abril de 2023
Comunión y oración eficaz
Viviana Marín

El 25 de abril tras un tiempo de oración tuve la impresión de que el

Señor me decía que me iba a hablar algo especial a través de Su
Palabra. Entonces me puse a leer la lectura del día y era Hechos 12,
que es sobre la liberación de Pedro de la cárcel, al ver qué era ese
pasaje, en un primer momento no me pareció nada especial y no me
quedaba mucho tiempo de devocional, pero me llamó la atención
Hechos 12:5: "pero la iglesia hacía oración ferviente a Dios por él",
porque fue un pasaje que Dios nos dio cuando empezó el problema
de depresión de mi padre, en su primer ingreso por allá por abril de
2017. Así que me quedé con eso y no pude estudiar mucho más ese
día por falta de tiempo, por lo que volví al mismo pasaje al día
siguiente y lo que escribo a continuación es lo que pienso me mostró
el Señor:

Hechos 12:
Herodes se levantó como enemigo:
-Maltrató a unos de la iglesia.
-Mandó a matar a Jacobo.
-Arrestó a Pedro.

Humanamente Herodes era un enemigo con mucho poder:

-Cuatro grupos de cuatro soldados para resguardar a Pedro.
-Cadenas.
-Puertas de una cárcel de máxima seguridad.

Al día siguiente Herodes lo llevaría ante el pueblo para juzgarlo y

matarlo.
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(El día de mi muerte lo decide el Señor, no mis enemigos, pero ¿qué

hubiera pasado si la iglesia no hubiera orado?, ¿lo habrías librado
igual?, ¿por qué hace falta orar tanto?)
"Si oras significa que crees que yo puedo hacer algo, que crees en mi
poder por sobre las circunstancias".

El actuar de Dios fue sobrenatural:

-Un ángel
-Una luz (poder de Dios en acción)
-Las cadenas cayeron de sus manos (Dios tiene poder, no necesita
llaves)
-Pero Pedro tuvo que hacer caso y vestirse
"Acostúmbrate a lo sobrenatural, yo soy sobrenatural".
-Dios tiene poder sobre nuestros obstáculos y opresores (puertas,
cadenas, guardias).

¿Qué sucedió? Vs. 11: el Señor ha enviado a su ángel y me ha

rescatado de la mano de Herodes (el enemigo) y de todo lo que
esperaba el pueblo de los judíos.

La iglesia oraba fervientemente y junta.

El fin de Herodes:
Al instante un ángel del Señor lo hirió, por no haber dado la gloria a
Dios; y murió comido de gusanos.
Hechos 12:23 LBLA

-Dios tiene poder sobre nuestros enemigos.

-Herodes murió comido de gusanos.
-Pero la palabra del Señor crecía y se multiplicaba (imparable).

Pablo estaba en Jerusalén cuando sucedió la liberación sobrenatural

de Pedro, fue testigo de esto (Hechos 11:30 y Hechos 12:25).
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¿Qué aprendo de Dios?

-Tiene poder sobre mis enemigos, sobre cualquier enemigo de carne
y hueso y espiritual también.
- Para actuar su poder parece que es necesario creer en Él, la fe, orar
con fe y sin cesar parece que es importante en el mundo espiritual.
-Es soberano en su forma de actuar y liderar.

Enseñanzas:
No debo tenerle miedo a mis enemigos, sino orar, orar sin cesar,
creer que Dios puede librarme de ellos, y orar, orar sin cesar. Creer en
lo sobrenatural para ser sanados, liberados, desatado el poder del
Señor. Creer que la palabra de Dios puede crecer y multiplicarse en
mí y en mi ciudad.

Leyendo esto me acordé de un mensaje que le había mandado a mi

padre una persona que tiene don de profecía, se lo dijo en julio 2020:

"El Señor me mostró brujería y hechicería que te hicieron allá en

España, esos hechizos que te envían, van en cansancio, para que se te
enredara la lengua, para bloquearte la mente, para confundirte, para
enloquecerte. Esta hechicería fue enviada hacia tu vida de forma
personal pero también hacia la iglesia y hacia tu familia, para poder
descompensarte y ponerte mal en todo.
También el Señor me mostraba que ungieran semanalmente la casa,
la entrada de la puerta, de las ventanas y la casa en general, ungir con
aceite, el aceite de oliva, que tú ores con él, lo consagres con Stellita y
unjan. También que todos los días te ungieras la mente con aceite, la
frente, todos los días.
Me hablaba el Señor de Marcos 6:13, creer lo sobrenatural para ser
liberado, que tú fe se aumente más y puedas tomar autoridad a
través de la fe y la llenura del Espíritu Santo.
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Has recibido ataques espirituales que son reales, por eso es tan
importante todos los días la unción.
El Señor también mostraba que siguieran ayunando con la iglesia,
uno de esos ayunos largos, que puedan ayunar con ellos, siquiera
cada semestre o como ustedes en oración dispongan con el Señor,
seguir ayunando periódicamente y también el Señor me hablaba de la
oración de recuperación para tu vida, que se centraran mucho en eso:
oración de recuperación."

Me llamó la atención esto: "Me hablaba el Señor de Marcos 6:13, creer

lo sobrenatural para ser liberado".

Y echaban fuera muchos demonios, y ungían con aceite a muchos

enfermos y los sanaban.
Marcos 6:13 LBLA

¿Será que aplicaban el tratamiento médico de la época con fe y

oración? Repasé Isaías 1:6 y Lucas 10:34, en ambos pasajes se usa el
aceite de oliva como tratamiento para curar heridas/úlceras. Marcos
6:13 da un uso bastante más amplio, habla de ungir con aceite a
todos los enfermos, no sólo a los que tienen llagas/úlceras, parece un
uso más simbólico del actuar sanador sobrenatural del Espíritu Santo
que un efecto terapéutico natural (limitado a heridas cutáneas) pero
que curiosamente es fácil relacionar con un tratamiento médico (o
sea, para la mente de ese tiempo el aceite de oliva lo veían como
vemos nosotros por ejemplo una pomada para sanar heridas).

La referencia de este pasaje de Marcos me llevó a Santiago 5:14-16:

¿Está alguno entre vosotros enfermo?
Que llame a los ancianos de la iglesia y que ellos oren por él, ungiéndolo
con aceite en el nombre del Señor; y la oración de fe restaurará al
enfermo, y el Señor lo levantará, y si ha cometido pecados le serán
perdonados.
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Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros y orad unos por otros
para que sean sanados.
La oración (súplica) eficaz del justo puede lograr mucho.

Leí este pasaje en la TPT (The Passion Translation) y me llamó la

atención varias cosas:

Y la oración de fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará, y si ha

cometido pecados le serán perdonados.
Santiago (Jacob) 5:15 TPT

Dice el comentario: "Este no es el griego que generalmente se usa

para enfermedad o dolencia. La palabra kamno también puede
significar "aquellos que están cansados y agotados", y en el contexto
posiblemente podría referirse a los creyentes que han estado
discutiendo entre sí, dejándolos espiritualmente débiles".

Me llamó mucho la atención esto, porque mi padre tiene un síntoma

que se llama "astenia" que es esa sensación de estar cansado como
cuando a uno le da gripe, que sientes que no puedes ni levantarte de
la cama ni ser capaz de hacer nada. Y no hay razón orgánica para el
síntoma, todos los análisis de laboratorio están bien, no tiene anemia
ni ningún otro déficit. Desde el punto de vista médico lo considero un
síntoma depresivo. En la profecía que le enviaron a mi padre en 2020
lo mencionan, que le enviaron eso: cansancio.

Y donde dice: "y si han cometido pecados le serán perdonados" dice

el comentario:
"5:15 O "hacedor del pecado". Hay una clara implicación en este
pasaje de que la enfermedad (debilidad) a la que se refiere es el
resultado del pecado. Véase también 1 Cor. 11:18-32."

Me fui entonces a leer 1 Corintios 11:

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Pues, en primer lugar, oigo que cuando os reunís como iglesia hay
divisiones entre vosotros; y en parte lo creo. Porque es necesario que
entre vosotros haya bandos, a fin de que se manifiesten entre vosotros los
que son aprobados. Por tanto, cuando os reunís, esto ya no es comer la
cena del Señor, porque al comer, cada uno toma primero su propia cena;
y uno pasa hambre y otro se embriaga. ¿Qué? ¿No tenéis casas para
comer y beber? ¿O menospreciáis la iglesia de Dios y avergonzáis a los
que nada tienen? ¿Qué os diré? ¿Os alabaré? En esto no os alabaré.
Porque yo recibí del Señor lo mismo que os he enseñado: que el Señor
Jesús, la noche en que fue entregado, tomó pan, y después de dar gracias,
lo partió y dijo: Esto es mi cuerpo que es para vosotros; haced esto en
memoria de mí. De la misma manera tomó también la copa después de
haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced
esto cuantas veces la bebáis en memoria de mí. Porque todas las veces
que comáis este pan y bebáis esta copa, la muerte del Señor proclamáis
hasta que Él venga. De manera que el que coma el pan o beba la copa del
Señor indignamente, será culpable del cuerpo y de la sangre del Señor.
Por tanto, examínese cada uno a sí mismo, y entonces coma del pan y
beba de la copa. Porque el que come y bebe sin discernir correctamente
el cuerpo del Señor, come y bebe juicio para sí. Por esta razón hay
muchos débiles y enfermos entre vosotros, y muchos duermen. Pero si
nos juzgáramos a nosotros mismos, no seríamos juzgados. Pero cuando
somos juzgados, el Señor nos disciplina para que no seamos condenados
con el mundo. Así que, hermanos míos, cuando os reunáis para comer,
esperaos unos a otros. Si alguno tiene hambre, coma en su casa, para
que no os reunáis para juicio. Los demás asuntos los arreglaré cuando
vaya.
1 Corintios 11:18-34 LBLA

Esta referencia a 1 Corintios 11 en el comentario de Santiago 5:15 me

pareció muy interesante, empieza diciendo: "pues, en primer lugar,
oigo que cuando os reunís como iglesia hay divisiones entre vosotros;
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y en parte lo creo", y hace una mención clara a cuando se reunían a

compartir la cena del Señor, les explica por qué se hace la cena y
previamente, en el capítulo anterior les ha explicado que esa cena la
compartimos entre todos y nos recuerda que somos uno.

La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la participación en la

sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la participación en el
cuerpo de Cristo? Puesto que el pan es uno, nosotros, que somos muchos,
somos un cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan.
1 Corintios 10:16-17 LBLA

Todos necesitamos y bebemos de la misma copa, todos necesitamos

y comemos del mismo pan, todos firmamos el mismo "nuevo pacto".
Eso nos hace iguales, nos hace parte de un mismo pueblo, de un
mismo cuerpo, eso nos hace uno. Como dijo Pedro en el concilio en
Hechos 15:

Creemos más bien que somos salvos por la gracia del Señor Jesús, de la
misma manera que ellos también lo son.
Hechos 15:11 LBLA

Pienso que es en ese contexto de comunidad que mejor se puede

interpretar lo que dice en 1 Corintios 11:30, lo de: "Por esta razón hay
muchos débiles y enfermos entre vosotros, y muchos duermen", al
parecer el que hubiera divisiones al compartir esa cena era un asunto
grave y en mi opinión eso es lo que significa comer el pan o beber la
copa indignamente, aunque evidentemente puede haber más
razones, sino que lo digo por el contexto de lo que quiere enfatizar
Pablo a la iglesia de Corinto, que en este texto de 1 Cor 11 no está
tratando los pecados individuales sino las malas conductas grupales.

De manera que el que coma el pan o beba la copa del Señor

indignamente, será culpable del cuerpo y de la sangre del Señor. Por
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tanto, examínese cada uno a sí mismo, y entonces coma del pan y beba
de la copa. Porque el que come y bebe sin discernir correctamente el
cuerpo del Señor, come y bebe juicio para sí. Por esta razón hay muchos
débiles y enfermos entre vosotros, y muchos duermen. Pero si nos
juzgáramos a nosotros mismos, no seríamos juzgados. Pero cuando
somos juzgados, el Señor nos disciplina para que no seamos condenados
con el mundo. Así que, hermanos míos, cuando os reunáis para comer,
esperaos unos a otros. Si alguno tiene hambre, coma en su casa, para
que no os reunáis para juicio. Los demás asuntos los arreglaré cuando
vaya.
1 Corintios 11:27-34 LBLA

Me llamó la atención la distinción que hace entre "débiles" y

enfermos. Mencionando claramente la debilidad y la enfermedad, e
incluso la muerte física como una consecuencia de haber comido y
bebido sin discernir correctamente el cuerpo del Señor.
¿Cuál es el cuerpo del Señor además de su cuerpo físico?, ¿No es la
iglesia?.

Así dice en la TPT:

Por eso, cualquiera que coma el pan o beba la copa del Señor con el
espíritu equivocado, será culpable de deshonrar el cuerpo y la sangre del
Señor. Así que que cada individuo evalúe primero su propia actitud y sólo
entonces coma el pan y beba la copa. Porque comer y beber
continuamente con un espíritu malo traerá juicio sobre ti mismo al no
reconocer el cuerpo. Esta insensibilidad es la razón por la que muchos de
ustedes son débiles, tienen enfermedades crónicas y algunos incluso se
están muriendo.
1 Corintios 11:27-30 TPT

Esto dice el comentario en la TPT sobre este tema de discernir el

cuerpo del Señor:
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"Esto puede entenderse al menos de dos maneras. Puede referirse a

no reconocer el pan como el cuerpo de Cristo entregado en sacrificio,
o no reconocer el cuerpo de Cristo en la tierra, la iglesia. Discernir
correctamente el cuerpo del Señor, que fue golpeado y magullado
para nuestra sanidad, significaría que no estaríamos débiles ni
enfermos ni moriríamos prematuramente."

Leer esto me evoca mucho este pasaje de Mateo:

Habéis oído que se dijo a los antepasados: «No matarás» y: «Cualquiera

que cometa homicidio será culpable ante la corte». Pero yo os digo que
todo aquel que esté enojado con su hermano será culpable ante la corte;
y cualquiera que diga: «Raca» a su hermano, será culpable delante de la
corte suprema; y cualquiera que diga: «Idiota», será reo del infierno de
fuego. Por tanto, si estás presentando tu ofrenda en el altar, y allí te
acuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí delante
del altar, y ve, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y
presenta tu ofrenda.
Mateo 5:21-24 LBLA

Vivimos en una cultura muy individualista y nos cuesta, por lo menos

a mí, entender cómo estos aspectos comunitarios, estos pecados de
relación, pueden interferir en nuestra comunión con el Señor, pero
por toda la Biblia está bastante claro que es así.

Volviendo a Santiago 5, el cuadro que presenta es muy comunitario ya

que si alguno está enfermo "llame a los ancianos de la iglesia" y en el
versículo 16 dice:

Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros, y orad unos por
otros para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede lograr
mucho.
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Santiago 5:16 LBLA

El confesar es reconocer y ponerse de acuerdo, ¿en cuánto a qué?,

¿en cuanto a qué pecados?, la lógica me dice que si se trata de
confesarse pecados unos a otros, será de pecados que hemos
cometido los unos contra los otros, es como lo más básico. Si me
confieso ante Dios me pongo de acuerdo con Dios en cuanto a mi
pecado contra él, si me confieso ante un hermano, pienso será
ponerme de acuerdo en cuánto a mi pecado contra éste y el de éste
contra mí, hablar abiertamente de nuestros pecados mutuos, los
cometidos el uno contra el otro y hacer las paces, para luego así con
esa unidad restaurada orar unos por otros para ser sanados.

La oración eficaz del justo puede mucho. ¿Quién es el justo? Aquél

que ha sido justificado por la sangre de Cristo:

Y este es el mensaje que hemos oído de Él y que os anunciamos: Dios es

luz, y en Él no hay tiniebla alguna. Si decimos que tenemos comunión con
Él, pero andamos en tinieblas, mentimos y no practicamos la verdad; mas
si andamos en la luz, como Él está en la luz, tenemos comunión los unos
con los otros, y la sangre de Jesús su Hijo nos limpia de todo pecado. Si
decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y la
verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y
justo para perdonarnos los pecados y para limpiarnos de toda maldad. Si
decimos que no hemos pecado, le hacemos a Él mentiroso y su palabra
no está en nosotros.
1 Juan 1:5-10 LBLA.

El justo en su experiencia diaria es aquél que ha confesado sus

pecados y se ha apropiado de la sangre de Cristo, es aquél que anda
en la luz y una evidencia de andar en la luz es tener comunión los
unos con los otros. El tener comunión los unos con los otros hace
nuestra oración eficaz. Habrá más cosas que obstaculicen la oración
 11

pero creo que no se puede creer uno justo (no hablo de la posición
doctrinal por fe como justo sino de la condición/experiencia diaria de
limpieza), sino se está en comunión con los demás, o por lo menos he
hecho todo lo que está a mi alcance para estar en paz con el otro
(Rom. 12:18). Nos mentimos a nosotros mismos si creemos que
andamos en la luz pero hay discordia en el corazón, rabia, amargura,
rivalidad o pecado similar contra un hermano.

La idea que me queda tras estudiar estos pasajes es que hay una
relación entre la comunión, la oración mutua y la sanidad y liberación.

Las divisiones y discusiones en la iglesia que rompen la comunión, ese

tipo de pecados de relación, son como una brecha que abren la
puerta a la debilidad/agotamiento y a la enfermedad (agotamiento
físico y emocional).

Por el contrario, la armonía, la reconciliación, el ponernos de acuerdo

de lo que sucedió y pedirnos perdón mutuamente y al Señor, abren la
puerta a la sanidad y liberación. El que oremos unos por otros en
armonía es algo sobrenaturalmente eficaz.

No menospreciemos el efecto que la división trae a la iglesia, al

cuerpo de Cristo.

En el caso de mi padre, a la iglesia le corresponde orar y para que la

oración sea eficaz es necesaria la unidad del cuerpo. Pidámosle al
Señor que nos muestre a cada uno cómo hemos fallado en esto y qué
debemos hacer al respecto.

A mi papá además de arreglar cualquier asunto del que sea

consciente de falta de unidad, el Señor le pide que tome autoridad a
través de la fe y la llenura del Espíritu Santo, oremos porque el Señor
le de la fe para tomar autoridad/dominio propio sobre sus
 12

pensamientos por medio del poder/capacidad que le da el Espíritu

Santo.

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sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es
la cabeza, esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concertado y
unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente,
según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir
edificándose en amor.
Efesios 4:15-16 RVR1960

Unos días más tarde del escrito anterior, me levanté en la madrugada,

reflexionando sobre esta pregunta:

¿Por qué la falta de comunión es tan mala para el cuerpo?

La falta de comunión enferma al cuerpo, hace que tenga dolores y

que no crezca/madure, eso hace que sea poco efectivo en su función
de manifestar a Cristo.

Cristo ya no puede hacer nada con su cuerpo humano aquí en la

tierra, porque su cuerpo humano ahora está con el Padre, pero ahora
la idea es que Cristo pueda seguir actuando a través de su Espíritu
Santo fluyendo por medio de su cuerpo que es la Iglesia.

Si todos somos miembros del mismo cuerpo y hay falta de

armonía/comunión, pues no podemos trabajar coordinamente,
unidos, eso produce dolor y enfermedad al cuerpo de Cristo, es como
si Cristo estuviera enfermo y eso lo hace poco eficaz, hace que no
pueda manifestar el amor del Padre al mundo, que no pueda
manifestar la salvación.
 13

La oración eficaz de la iglesia es una oración ferviente, unida, si hay

división, no es igual de eficaz.

Ej: el vértigo. El saber dónde estamos en el mundo, nuestra posición y

equilibrio, depende de un complejo sistema del que aún nos falta
mucho por descubrir, pero por lo menos sabemos que depende como
mínimo de la vista, del oído y de las vértebras y músculos del cuello,
así como de la circulación y complejas conexiones entre éstos y otros
órganos del cuerpo. Toda esta información la recibe el cerebro por
diferentes vías y así sabe dónde está. Cualquier alteración, daño en
uno de estos sistemas o en su coordinación nos produce sensación
de mareo, malestar, inestabilidad, etc. Y con esas molestias es difícil
cumplir con nuestras labores diarias. Pues algo similar es lo que pasa
si no hay armonía en el cuerpo de Cristo.

¡Que admirable, que agradable es que los hermanos vivan juntos en

armonía! Es como el buen aceite que, desde la cabeza, va descendiendo
por la barba, por la barba de Aarón, hasta el borde de sus vestiduras. Es
tan refrescante como el rocío del monte Hermón que cae sobre los
montes de Jerusalén. Donde se da esta armonía, el Señor concede
bendición y vida eterna.
Salmo 133:1-3 NBV