Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Hay una solución para esto que es increíblemente creativa y agrega un toque hermoso
a tu jardín.
En lugar de dejar que estas plantas invasoras se apoderen del lugar, ¡enséñales a
crecer hacia arriba y listo!
1. Construir un arco
¡El primer paso para cultivar verticalmente es crear un arco! Puedes tomar el camino
fácil y comprar uno prefabricado en un centro de jardinería o puedes construir el tuyo
propio.
Los arcos de jardín se pueden hacer con tubos de PVC, o paneles metálicos de hierro
de construcción doblados suavemente en forma de arco.
2. Asegúralo en el suelo
Después de construir la estructura base de tu arco, deberás asegurarlo en el suelo para
asegurarse de que sea estable.
Dependiendo del tipo de material utilizado para construir en la base, puedes enterrarlo
de 20 a 30 cm de profundidad para asegurarlo.
Tener una estructura estable asegurará que el viento no la tumbe durante toda la
temporada de cultivo.
Puedes atar la cuerda entre los soportes para crear un tejido, o asegurar un alambrado
de metal a tus postes de PVC o hierro.
4. Planta
Una vez que tu arco está en su lugar y tiene suficiente estructura transversal para
darles a las plantas algo para trepar, es hora de poner tus plantas en el suelo.
Planta de cerca a la base del arco, inclinando ligeramente los tallos para que crezcan
hacia la estructura. Puede ser necesario ayudar a las plantas para que crezcan hacia
arriba asegurándolas al arco con alguna cuerda.
Puedes plantar tus plantas un poco más juntas cuando trabajas en un jardín vertical
porque no compiten por la misma cantidad de espacio en el suelo.
5. Míralos crecer
Después de plantar, asegúrate de cubrir el suelo que rodea sus plantas con una buena
capa de compost de 5 cm de profundidad para ayudar a disminuir la aparición de
malezas, mientras mantienes el suelo húmedo.
Cuando las frutas comiencen a formarse, usa trapos viejos o redes para crear camas
que soporten el peso de la fruta para evitar que rompa los tallos.
A medida que tus viñas crecen sobre el arco, fertiliza periódicamente para promover el
mejor crecimiento posible.