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Tengo sed

La palabra de Jesús “tengo sed” representa la sed de la humanidad agobiante


y sufriente. Jesús en todo igual a nosotros menos en el pecado y consciente de su
condición Divina pero también de su condición humana, tiene la necesidad física
de saciar su sed, y lo hace estando en la cruz. “Tengo sed”, de una voz dolorosa
se oye decir esta palabra la cual es expresión del sufrimiento humano. Esto no es
sólo una palabra, es más que una palabra, es la súplica de Dios Hijo en su
persona hecha a Dios Padre por todos nosotros, en otras palabras, Jesús
manifestó “Padre, el mundo tiene sed de ti, o, Padre, tus hijos están sedientos
de ti”.

¿Por qué Jesús manifiesta su sed en medio del sufrimiento? Porque el hombre
está capacitado para superar el sufrimiento, nunca el sufrimiento está por encima
del ser humano. El sufrimiento se lleva por debajo, el ser humano no está hecho
para vivir inmerso en un continuo sufrimiento sino para estar sobre éste
sufrimiento y superarlo, pero, aquí viene entonces la clave desde dónde y la
manera de cómo se puede continuar el camino sin dejarse vencer, “buscando a
Jesús, estando con Jesús y viviendo con Jesús quien sacia nuestra sed y
vence nuestro sufrimiento”1. Jesucristo en la cruz venció su sufrimiento por
amor y este amor lo llevó a manifestar su sed y luego murió, entones su muerte
tiene sentido, pues murió por amor venciendo el sufrimiento teniendo sed del
Padre. Nosotros no podemos interpretar el sufrimiento como el final de la historia,
hay que darle un sentido de fe, hay que “tener sed” de Dios y veremos cómo
podemos entonces seguir adelante anhelando un mejor futuro.

Parece curioso, pero, ¿por qué manifestamos nuestra sed de Dios cuando las
cosas no están tan bien? ¿por qué tenemos que estar enfrentando una crisis,
soportando una epidemia, atravesando un caos mundial para decir “tengo sed”?
es porque el sufrimiento es necesario para una mayor entrega, un mayor servicio,
una mayor integridad entre los pueblos donde la única raza es la raza de la
1
MONS: AYALA R JUAN A “orientación sobre la quinta palabra de Jesús en la cruz, tengo sed”, en el comedor
de la parroquia Nuestra Señora de los Ángeles, la Grita-Táchira Venezuela hora:11:47:21 a los días 10-04-
2020.
humanidad, el único lenguaje es el lenguaje del corazón y la única religión es la
religión del amor, para que exista también una mayor dignificación a la vida
humana sabiendo que a los ojos de Dios todos somos iguales, es porque en el
sufrimiento es donde más se siente esa sed de justicia, esa sed de Dios, esa sed
de perdón.

Padre, así como tu Hijo en la cruz dijo “tengo sed” así nosotros, este pueblo
(me tomo el atrevimiento de hablar en nombre de todos) te decimos “tenemos sed”
sacia nuestra sed de tu confianza, esperanza, de fe, de justicia, perdón, de tu
misericordia. Jesús, todo lo que pediste al Padre, él te lo concedió, implora al
Padre por nosotros, Tú, Hijo del Altísimo, Hijo del Dios vivo, mira a tu pueblo
sediento de Ti, mira los peligros que el mundo enfrenta, las enfermedades que nos
azotan, las enemistades que nos destruyen, los conflictos internos y externos que
aumentan la tensión entre los pueblos, el hambre y la sed de tu perdón, los
ataques en contra de la vida de las personas, mira la injusticia social. Señor,
sacia nuestra sed.

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