FISCALIA PROVINCIAL

VALENCIA

Jefatura

INSTRUCCIÓN SOBRE PAUTAS DE ACTUACIÓN POLICIAL EN LOS

SUPUESTOS
DE OCUPACIÓN ILEGAL DE BIENES INMUEBLES

La entrada en un inmueble por parte de persona o personas distintas del

propietario y sin autorización del mismo ni título alguno que legitime dicha entrada
puede dar lugar a dos conductas delictivas.

DELITO DE ALLANAMIENTO DE MORADA

El concepto penal de morada se equipara al domicilio. Por lo tanto es el lugar

cerrado, legítimamente ocupado, en el que transcurre la vida privada, individual o
familiar, aunque la ocupación sea temporal o accidental, lo que lleva a considerar
incluido dentro del concepto de morada no solo el domicilio donde la persona desarrolla
su vida privada doméstica con permanencia sino también las segundas residencias
siempre y cuando la persona las utilice aunque sea de manera transitoria y no
permanente y limitada a unas determinadas épocas más o menos inciertas pero en
cualquier caso desarrollando en dicha residencia parte de su privacidad (SAP de
Valencia (Sección 3ª) de 6 de febrero de 2015).

Según ha declarado el Tribunal Constitucional, se entiende como domicilio

“cualquier lugar cerrado en el que pueda transcurrir la vida privada, individual o
familiar, o lo que es lo mismo, que “sirva de habitación o morada a quien en él vive”,
estimándose que constituye domicilio o morada, cualquier lugar, cualquiera que sea su
condición y característica, donde vive esa persona o una familia, sea propiamente

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domicilio o simplemente residencia, estable o transitoria, incluidas las chabolas,
tiendas de campaña, habitaciones de hotel, etcétera.

Hay dos conductas que pueden constituir un delito de allanamiento de morada:

1. La entrada sin consentimiento.

2. El mantenimiento en el interior de la morada o domicilio contra la

voluntad del titular.

Además, el Código Penal determina una mayor gravedad de la conducta cuando

para realizarla se emplea violencia o intimidación.

Se trata de un delito permanente, su consumación se prolonga en el tiempo.

Denunciada dicha conducta ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
y comprobada la existencia de indicios de la comisión del delito, al constituir un delito
menos grave castigado con pena de prisión de 6 meses a 2 años, procederá conforme al
artículos 492.4º de la Ley de Enjuiciamiento Criminal la inmediata detención y puesta
a disposición del juzgado de guardia de los posibles autores.

En caso de no poder ser detenido ni identificado el ocupante de la vivienda

deberá presentarse atestado ante el juzgado dejando constancia de las gestiones
practicadas para identificar al ocupante, de la denuncia del perjudicado, la solicitud del
perjudicado de recobrar la posesión de su vivienda y proponiendo al Juzgado de
Guardia que se autorice a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para que se
proceda de forma cautelar a autorizar la entrada al objeto de identificar y detener al
autor o autores y poner fin a la conducta delictiva.

DELITO DE OCUPACIÓN DE BIEN INMUEBLE (NO MORADA)

Cuando el hecho denunciado es la ocupación de un bien inmueble que no

constituye morada hay que distinguir dos situaciones:

1.- Si en la ocupación concurrió violencia o intimidación en las personas que en

ese momento se encontraran allí (supuesto infrecuente) al ser un delito castigado en el
artículo 245.1 del Código Penal con pena de prisión de 1 a 2 años la forma de proceder

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deberá ser la misma que con el supuesto en que el inmueble constituya morada. Pero
además en este supuesto al ser de instrucción sencilla, flagrante y la pena no superar
los 3 años de prisión procederá la elaboración conforme al artículo 795 de la Ley de
Enjuiciamiento Criminal de atestado para enjuiciamiento rápido, citando ante el
juzgado al denunciante, testigos que puedan dar razón de los hechos y requiriendo al
denunciante para que comparezca ante el juzgado con todos los documentos que
acrediten que el inmueble es de su propiedad (títulos de propiedad o en virtud de los
cuales se dispone de la posesión, facturas de agua, luz, si se dispusieran o justificación
bancaria de su abono, entre otros).

2.- Si en la ocupación no concurrió violencia o intimidación en las personas

(supuesto habitual) la conducta es constitutiva de un delito leve castigado con pena de
multa de 3 a 6 meses. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado receptores de la
denuncia deberán proceder a la identificación del ocupante u ocupantes del inmueble
y, en caso de poder ser identificados, conforme a los artículos 964 y siguientes de la
Ley de Enjuiciamiento Criminal, procederá confeccionar de manera inmediata el
correspondiente atestado que remitirá sin dilación al Juzgado de Guardia. Dicho
atestado recogerá las diligencias practicadas, así como el ofrecimiento de acciones al
ofendido o perjudicado con la solicitud en su caso de que sea reintegrado en su
posesión, y la designación, si disponen de ello, de un domicilio a efectos de citaciones,
de una dirección de correo electrónico y un número de teléfono a los que puedan ser
remitidas las comunicaciones y notificaciones que deban realizarse al objeto de que el
Juzgado de Guardia pueda acordar la inmediata celebración del juicio por delito leve
citando a las personas que deban ser convocadas durante el servicio de guardia y, en
caso de no ser posible, resolver sobre la procedencia de acordar de forma cautelar la
restitución de la posesión al denunciante.

En caso de no poder ser identificado el posible autor o autores, las Fuerzas y

Cuerpos de Seguridad del Estado remitirán las diligencias al Juzgado de Guardia
haciendo constar la denuncia del perjudicado, la imposibilidad de identificación del
ocupante u ocupantes y solicitando la autorización judicial para poner fin a la situación
antijurídica, accediendo al inmueble para identificar al autor o autores una vez
constatada la permanencia de los ocupantes en el interior.

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 En todo caso los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
ante una denuncia por ocupación de inmueble sea morada o no, deberán practicar
diligencias para intentar determinar tres elementos que deberán dejar constancia en sus
diligencias, a saber:

- Titularidad del inmueble.

- Oposición del titular a la ocupación: denuncia o acta de manifestación.
Puede hacerse constar la voluntad expresa del titular a que se desaloje a los
ocupantes.
- Ausencia de título legítimo por parte del ocupante. En caso de que se
aporte algún documento por parte del ocupante deberán comprobar su validez
o veracidad.

Si los agentes observasen durante su actuación una posible situación de

desamparo y/o vulnerabilidad de las personas que ocupan el inmueble o se tratase de
menores de edad lo harán constar en las diligencias policiales.

Después, tras la presentación de las diligencias policiales, las/os Fiscales, en

aplicación de la Instrucción 1/20 de la Fiscalía General del Estado y del Decreto de 20
de agosto de 2020, dictado por el Fiscal Jefe de la Fiscalía Provincial de Valencia,
valorarán la posibilidad de solicitar el desalojo del inmueble como medida cautelar. Si
en las diligencias policiales se hubiese hecho constar una posible situación de
desamparo y/o vulnerabilidad de las personas que ocupan el inmueble o se tratase de
menores de edad, las/os Fiscales deberán solicitar, de forma simultánea, el desalojo y
la intervención de los servicios sociales competentes en cada caso.

Valencia, a 24 de septiembre de 2020

EL FISCAL JEFE

José Francisco Ortiz Navarro

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 Comuníquese la presente Instrucción al Ilmo. Sr. Comisario Provincial del
Cuerpo Nacional de Policía, al Ilmo. Sr. Coronel Jefe de la Comandancia de la Guardia
Civil, y a los Sres. Jefes de las Policías Locales.