INTERPRETACIÓN DEL TEST “ELIJE TU ÁRBOL”

Árboles elegidos: números 22 y 26, El postulante evidencia un contacto amable y hábil,

flotante, impreciso que tiene como fin lograr los propios deseos con el mínimo esfuerzo y
sacrificio posibles; posee un carácter alegre, locuaz y entusiasta. Presenta una tendencia a
atribuir el valor a las personas o a las cosas por su aspecto externo (falta de profundidad y de
realismo práctico). Talento descriptivo y decorativo y facilidad de expresión.
Por otro lado, muestra tendencias internas depresivas, que suelen mermar la energía, la decisión
y la iniciativa. Receptividad (tendencia a dejarse influenciar), de igual manera, resalta su falta
de sentido de la realidad, inseguridad y desorientación. Es pasivo, fantasioso e imaginativo,
posee facilidad para expresar su disposición anímica. Esto no impide cierta plasticidad en el
carácter y esa alegría aparente y de colores, unida a una buena capacidad descriptiva por gozo
de sentirse escuchado.
Árboles rechazados: números 8 y 9, En este apartado el postulante muestra tendencia a huir de
la realidad la cuál va unida a la depresión, a la soledad, a la evasión de la realidad para
refugiarse en fantasías dantescas o de ciencia ficción. Considera que, puede verse envuelto en
ideas más o menos extravagantes, unidas a rarezas de carácter, a des adaptaciones, incluso a
desequilibrios de la personalidad, y muestra también una tendencia al exhibicionismo o a
complicar las cosas de modo que se hacen irreconocibles.
Evidencia también, infantilismo psíquico a causa de la incompletud o malformación del árbol y
su fruto, de la misma forma, refleja cierto sentido creativo ingenuo. Se puede evidenciar cierto
retardo mental o poco desarrollo intelectual, los cuales le generen dificultades para adaptarse a
la vida adulta, mostrando torpeza mental en algunos casos.