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IGLESIA CRISTIANA DÍA DE VICTORIA

ESTUDIO BÍBLICO “LA ARMONÍA, UNIÓN Y


COMPAÑERISMO”
MARTES 31 DE AGOSTO DE 2021

(Extracto para video)


LA ARMONÍA EN EL APOSENTO ALTO
21 de marzo del 2000 - Tres Arroyos, Argentina

Ahora, nosotros sabemos que es para la Edad de la


Piedra Angular la promesa de la plenitud del Espíritu Santo, la
promesa de nuestra transformación. Y ahí pues estamos
unánimes juntos creyendo una misma cosa; no estamos tirando
unos para un lado y otros para el otro lado, sino que estamos ahí
creyendo una misma cosa, y ahí tenemos la revelación del
misterio del Séptimo Sello, la revelación del misterio de la
Segunda Venida de Cristo, tenemos ahí la revelación de todas
estas cosas que deben suceder pronto a medida que van siendo
reveladas a nosotros, para así nosotros ser preparados para
nuestra transformación.

No estamos interesados en luchar el uno con el otro o


contra el otro, ni estamos interesados en quitarle la posición a
otras personas, sino en estar preparados para nuestra
transformación. Ese es el propósito de estar en el Aposento alto
de la Edad de la Piedra Angular, para luego que estemos con el
nuevo cuerpo ir a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo,
lugar que ha estado preparado esperando por todos nosotros. Así
que podemos ver: “LA ARMONÍA EN EL APOSENTO ALTO.”

Y vean ustedes, allí eran 120, aunque cuando el Señor


estuvo con ellos ya resucitado eran más de 500, pero quedó el
grupo de 120 que estuvieron unánimes y juntos.
Y ahora, estamos unánimes juntos nosotros en el Aposento alto
de la Edad de la Piedra Angular esperando nuestra
transformación en adición al bautismo del Espíritu Santo.
¿Quiénes recibirán la Adopción y quiénes recibirán el
nuevo cuerpo? Pues todos los que hayan recibido su
transformación interior, todos los que hayan nacido de nuevo,
todos los que hayan recibido el Espíritu Santo, pues recibirán
luego el nuevo cuerpo, eterno, inmortal e incorruptible. Porque
para nosotros es esta promesa, para nosotros que estamos vivos
en este tiempo final.

Bueno, hemos visto el porqué estar EN ARMONÍA EN EL


APOSENTO ALTO. Por eso eviten discusiones y molestias los
unos con los otros, porque estamos llamados a estar unánimes
juntos en el Aposento alto. Y ahora, el Aposento alto hemos visto
que es la Edad de la Piedra Angular, es el Aposento alto en el
Templo Espiritual de Cristo, el Aposento alto en el Monte de Sión
que es la Iglesia del Señor Jesucristo. Hemos visto cómo
seríamos llamados y juntados en el Aposento alto para ser
preparados para nuestra transformación.

Y hemos visto la Armonía que hay en el aposento alto allá


y en el Aposento alto de la Edad de la Piedra Angular: estamos en
armonía con el Mensaje correspondiente a la Edad de la Piedra
Angular. Y ahora, en armonía en el Aposento alto continuemos
perseverando y esperando nuestra transformación. Sucederán
estas cosas, habrá terremotos y un terremoto grande, como fue
en la resurrección de Cristo y de los santos del Antiguo
Testamento. Habrá un viento recio —dice el Hermano Branham—
que vendrá y seremos transformados, como hubo un viento recio
allá.

Y ahora, él dice que esos carros de fuego o platillos


voladores vendrán y dice que habrá una transformación, seremos
cambiados. Así que estemos preparados. En la América Latina y
el Caribe actualmente se están viendo muchos platillos voladores
o carros de fuego. Pero es que ellos tienen una misión, una labor
muy importante con los escogidos de Dios, que estarán en el Día
Postrero, ¿dónde? En el Aposento alto del Cuerpo Místico del
Señor Jesucristo. Los ángeles de Dios están con los escogidos de
Dios, con la Iglesia de Jesucristo en este tiempo final; y son más
los que están con nosotros que los que están en contra.

Así que adelante unánimes juntos en el Aposento alto


esperando nuestra transformación. No colocamos fechas, como
tampoco Cristo colocó fechas allá, aunque Cristo las sabía. Pero
nos mantenemos creyendo Su promesa y esperando el
cumplimiento de ella en y para cada uno de nosotros.

Nuestros niños irán con nosotros y toda nuestra familia irá


con nosotros. Todos nos iremos con Cristo a la Cena de las
Bodas del Cordero. Por eso reclame su familia, que tengan los
folletos y que tengan la oportunidad también de estar en las
actividades y de estar en los bautismos para que Dios toque sus
corazones y obre con ellos. Entre nuestros familiares que no
están asistiendo, tienen que haber muchos también que son
escogidos; y también los que vayan a quedarse, pero que
después los veremos y los tendremos para toda la eternidad,
también es bueno que ellos tengan los Mensajes y tengan el
conocimiento de todas estas cosas; aunque tengan que dar luego
sus vidas en la gran tribulación.

Bueno, estemos en el Aposento alto, ¿cómo? Unánimes


juntos. Y juntos esperando nuestra Adopción, esperando la
Venida de la doble porción, la Venida de nuestra transformación,
la Venida del Espíritu de Dios transformando nuestros cuerpos.

Ha sido para mí un privilegio grande estar con ustedes en


esta ocasión dándoles testimonio del Aposento alto donde
estaban unánimes juntos esperando la Venida del Espíritu Santo
para obtener el nuevo nacimiento, y obtener el cuerpo teofánico
de la sexta dimensión. Y ahora, estamos unánimes esperando la
Venida del Espíritu de Dios transformando nuestros cuerpos y
dándonos el cuerpo eterno, inmortal, incorruptible y glorificado.
Que Dios les bendiga, muchas gracias por vuestra amable
atención y continúen pasando una noche llena de las bendiciones
de Jesucristo nuestro Salvador.

Escritura: Filipenses 2:1-2

“Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún


consuelo de amor, si alguna comunión del Espíritu, si algún afecto
entrañable, si alguna misericordia,

completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo


amor, unánimes, sintiendo una misma cosa.”

TENIENDO EL MISMO AMOR UNÁNIMES EN LA OBRA DE


CRISTO
Rev. William Soto Santiago
03 de Octubre de 2001 - Santa Cruz, Bolivia

Filipenses, capítulo 2, verso 1 en adelante, donde dice:

“Por lo tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún


consuelo de amor, si alguna comunión del Espíritu, si algún afecto
entrañable, si alguna misericordia, completad mi gozo, sintiendo
una misma cosa.

Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien


con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores
a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada
cual también por lo de los demás.

Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en


Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó ser igual
a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí
mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los
hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí
mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio
un nombre que es sobre todo nombre, para que en el Nombre de
Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la
tierra, y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo
es el Señor, para gloria de Dios Padre.”

Tenemos que tener el mismo Amor, y ese es el Amor de


Cristo en nosotros, y unánimes en la Obra, o sea, en la Obra de
Cristo en el Cuerpo Místico de Cristo, estando unánimes y
sirviendo a Cristo y esperando nuestra transformación; como
estuvieron unánimes en el Aposento Alto los ciento veinte
creyentes que allí estaban unánimes esperando la Venida del
Espíritu Santo.

OTRO PÁRRAFO: Para este tiempo final los escogidos de


Dios están esperando la promesa del nuevo cuerpo que Cristo ha
prometido para nosotros; y estamos en el Aposento Alto de la
Edad de la Piedra Angular, ahí estamos unánimes juntos. Ahora,
vean, ellos estaban juntos literalmente, y ahora nosotros estamos
juntos en el Cuerpo Místico de Cristo, en la Edad de la Piedra
Angular; no está uno por otra edad pasada, sino está junto en la
misma Edad, no está uno por allá por su cuenta caminando como
él quiere, sino unidos ahí en la misma edad juntos y unánimes en
la misma edad.

OTRO PÁRRAFO: Ahora, hemos llegado a la Edad del


Amor Divino.

Por lo tanto, sabiendo que permanecen la fe, la esperanza


y el amor, conforme a Primera de Corintios, capítulo 13, verso 13,
la fe, esperanza y el amor, y dice San Pablo: “Pero el mayor de
ellos es (¿cuál) el amor.”

Así que teniendo el Amor Divino en nuestra Edad,


tengamos también el Amor Divino en nuestros corazones.
Recuerden que la Edad del Amor Divino es la Edad del Lugar
Santísimo, y el Lugar Santísimo en el individuo es el alma; por lo
tanto, aquí en el alma es el lugar del Amor Divino, para Dios
morar ahí, manifestar Su Amor Divino. Por lo tanto, vean ustedes
cómo todo se junta en la Edad de la Piedra Angular, para una
manifestación del Amor Divino en la Iglesia de Jesucristo y del
Amor Divino en el alma de cada creyente. Y para que la Iglesia
exprese, deje manifestarse el Amor Divino en ella, y cada persona
como individuo también deje manifestar el Amor Divino en su
vida. Y todas las cosas que hagamos en la Obra de Cristo, sea
una Obra de Amor. “Todo lo que hagáis, hacedlo en Amor.” Dice la
Escritura. Por lo tanto, es en Amor que hay que llevar a cabo la
Obra de Dios, siendo que la Obra de Dios a través de Cristo es
una Obra de Amor.

OTRO PÁRRAFO: Adelante entonces sirviendo a Cristo,


teniendo el mismo Amor, unánimes en la Obra de Cristo, sintiendo
una misma cosa y teniendo una misma Revelación, y no
añadiéndole ni quitándole a la revelación divina. Si hay algo que
no entienden, en algún otro Mensaje lo van a entender. Lo que no
entiendes ahora lo entenderás después.

EL AVIVAMIENTO
Rev. William Soto Santiago
05 de Julio de 1981 - Cayey, Puerto Rico

No estamos compitiendo el uno con el otro, estamos


colaborando el uno con el otro en el Avivamiento de Dios, en el
glorioso Movimiento de Dios en estos días finales. Así entonces,
todos unidos en Amor Divino nos gozamos y llevamos a cabo la
Obra que Dios nos ha dado para hacer. Y Pedimos a Dios lo que
pidió el Profeta Habacuc: “Aviva Tu Obra en medio de los
tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer.”

Encontramos que ese es nuestro deseo: que Dios avive


Su Obra en medio de los tiempos, que dé a conocer Su Obra: el
gran movimiento que Él está llevando a cabo, que es el
Avivamiento en estos días finales.
EL APOSENTO ALTO
Rev. William Soto Santiago
21 de Abril de 1991 - Cayey, Puerto Rico

Así que ellos tenían la promesa de recibir el Espíritu; pero


ellos no comprendían que esa promesa sería cumplida el Día de
Pentecostés. Ellos fueron al Aposento alto, y allí estuvieron
unánimes, esperando ser revestidos de Poder de lo Alto. Y el Día
de Pentecostés vino un estruendo del Cielo y un viento recio, y
fueron llenos del Espíritu Santo, cumpliéndose así las profecías
del Profeta Joel. Porque toda cosa que Dios tenga que hacer,
tiene que ser en el cumplimiento de lo que Él ha prometido. Así
que en el Antiguo Testamento ya Dios había hablado acerca del
bautismo del Espíritu Santo, el cual recibirían ellos. Y el Día de
Pentecostés que el pueblo hebreo guardaba, estaba señalado
para ser el Día en que el Espíritu Santo descendería sobre los
hijos de Dios que estarían unánimes esperando ese bautismo del
Espíritu Santo.

Por lo tanto, ellos estuvieron en el Aposento alto,


unánimes, esperando ser llenos de Poder de lo Alto.

Todo esto es tipo y figura de lo que Dios estará haciendo


en este tiempo final con Sus escogidos, conforme a Sus
Promesas. Los escogidos en el Aposento Alto, en la Edad de la
Piedra Angular, en la Edad Eterna de la Venida del Hijo del
Hombre, esperando ser revestidos, ser llenos del Espíritu de Dios
en toda su plenitud, esperando que el Espíritu Teofánico de cada
hijo de Dios se manifieste plenamente y transforme estos cuerpos
mortales que nosotros tenemos. Y así como allá hubo un tiempo
de espera, acá también hay un tiempo de espera, en donde
estamos recibiendo la Palabra, y en donde estamos colocándonos
unánimes juntos el uno con el otro, y nosotros con Dios.

Por eso es tan importante nuestra espera en la Edad de la Piedra


Angular, en el Aposento Alto, en esta gloriosa Edad en la cual
hemos sido llamados y recogidos para esperar el revestimiento
del Espíritu Santo; y así recibir también la vestidura del nuevo
cuerpo que Él ha prometido para cada uno de nosotros. Cuando
el Señor Jesucristo ascendió al Cielo, hubo allí como quinientas
personas que le vieron subir al Cielo; pero cuando descendió en
forma de Espíritu Santo, solamente quedaban ciento veinte
personas, los cuales estaban unánimes y juntos.

Por esa causa en este tiempo final Él nos ha llamado al


Aposento alto de la Edad de la Piedra Angular, y nos ha colocado
para que estemos unánimes y juntos esperando ese
revestimiento, esperando ser llenos de ese Poder Divino de lo
Alto.

Así que hemos de permanecer como los ciento veinte.


Eran como quinientos los que vieron al Señor ascender al Cielo;
pero solamente quedaron ciento veinte en el Aposento alto. ¿Y
quiénes recibieron la Bendición del Espíritu de Dios descendiendo
el Día de Pentecostés? Los que estaban unánimes y juntos en el
Aposento alto. Los que se separaron, porque no estaban
unánimes, porque no pensaban en la misma forma, no recibieron
esa bendición en ese Día.

Que Dios nos continúe bendiciendo a todos con todas las


bendiciones prometidas para el Año del Jubileo actualizado en el
Aposento Alto, y nos ayude en todo para que nuestra fe no
desmaye y para que permanezcamos unánimes y juntos; no
separándonos, sino juntos en nuestra Edad, unidos en nuestra
Edad en el Amor Divino; porque es la Edad del Amor Divino, la
Edad del Aposento alto.

UNÁNIMES JUNTOS EN EL APOSENTO ALTO


Rev. William Soto Santiago
07 de Julio de 1987 - Cayey, Puerto Rico

Estamos esperando la plenitud del Espíritu. Estamos


esperando que el cuerpo teofánico entre a nosotros y transforme
estos cuerpos mortales y nos haga inmortales. Esa es la promesa
para los que en el Aposento Alto estén unánimes juntos. Y si
alguno no puede estar unánime, junto; pues, entonces no pueden
andar dos juntos si no están unánimes, si no están de acuerdo.
En el tiempo cuando el Señor Jesucristo ascendió al Cielo habían
como quinientas personas; pero en el tiempo en que recibieron el
Espíritu Santo, solamente quedaron ciento veinte personas.

Ahora, les pregunto a ustedes: ¿De qué grupo es usted?


¿De los trescientos ochenta o de los ciento veinte? Los
trescientos ochenta representan a los que escucharon el Mensaje
del Jubileo, el Mensaje de la Voz de la Piedra Angular, y lo
recibieron con alegría; pero después de un tiempo se cansaron de
esperar, y pensaron: “Es mejor que nos vayamos.” Estas
personas lo que hicieron fue bajar del Aposento Alto. Se fueron
con los que estaban más abajo; porque cuando alguien se sale
del Programa que Dios tiene para el tiempo en que uno vive,
entonces no se puede subir más. Lo que puede hacer es bajar a
donde ya Dios no estaba obrando.

Y estando en ese lugar estaremos unánimes juntos. No


uno tratando de decir una cosa y el otro otra cosa. Hay un solo
Mensaje. Y como ha sido traído, así es. No necesita que nadie lo
esté tratando de interpretar. Un Mensaje para todos estar
unánimes, creyendo todos una misma cosa, todos con el mismo
sentir, con una misma esperanza, con una misma fe, en el
Aposento Alto actualizado, donde los escogidos se reúnen en
este tiempo final. Fuera de ese lugar no hay otro.

Así que unánimes juntos en el Aposento Alto esperando la


promesa del Año de Pentecostés. Si estamos unánimes juntos
nos estaremos llevando bien siempre, sin problemas, sin
discusiones en cuanto al Programa Divino; y esperando con
paciencia que llegue exactamente ese momento para ser
transformados. Mientras llegue ese momento, estaremos
probando que estamos en el Aposento Alto y que estamos
unánimes, creyendo todos una misma cosa, un mismo Mensaje,
habiendo reconocido nuestra posición en el Reino de Dios, en el
Cuerpo Místico del
Señor Jesucristo.

OCUPANDO NUESTRA POSICIÓN EN EL REINO DEL SEÑOR


JESUCRISTO
Rev. William Soto Santiago
03 de Mayo de 1992 - México, D. F., México

Por lo tanto, amándonos los unos a los otros con Amor


Divino, podemos decir: “Obtendremos cada promesa que Él ha
hecho para Sus escogidos para el fin del siglo.” No podemos estar
en contiendas los unos con los otros, porque eso afecta a los que
entran en contiendas y también afecta al resto del pueblo de Dios,
y afecta a la Edad (la Edad de
la Piedra Angular) y afecta la Dispensación también. Por lo tanto,
unidos en Amor Divino obtendremos todas las bendiciones de
Dios. Y así todos seremos vistos por Dios ocupando nuestra
posición en el Reino del Señor Jesucristo.

EL MISTERIO DE LA UNIÓN
Rev. William Soto Santiago
21 de Noviembre de 1990 - Santiago de Chile, Chile

Así que vean ustedes, sí es importante la unión de todos,


que en la resurrección los que han de venir en la resurrección, los
escogidos, no han de venir a la Tierra sin saber a dónde van, sino
que han de venir a la Tierra, y van a venir a un grupo de
escogidos que tiene la promesa y se encuentra en la edad y
dispensación en donde van a ser transformados. Y por cuanto
ellos han de resucitar en nuestra edad y en nuestra dispensación,
¿a dónde van a venir? A nuestra edad y a nuestra dispensación, y
van a estar unidos a nosotros ese grupo de jóvenes que van a
venir del Paraíso; y si ese grupo de jóvenes que va a venir unido,
si están unidos allá y van a venir unidos, y se van a unir a
nosotros; los que están aquí, entonces también deben de estar
bien unidos, trabajando en la Obra del Señor, y también los
adultos, porque van a ser jóvenes también.

Así que desde ya antes de la transformación, entonces


bien unidos también, y también colaborando con los jóvenes y los
jóvenes con los adultos y con sus ministros, y los ministros con
los jóvenes para que todo sea llevado a cabo conforme al
Programa Divino, y el Mensaje llegue a donde tiene que llegar, y
la Obra sea hecha conforme a como Dios ha determinado.

Así que, podemos ver que este es un tiempo de unidad,


esa es la edad y es la dispensación que une a las dos
dispensaciones pasadas, por eso van a estar ¿dónde? En el
Milenio con nosotros; porque el Milenio pertenece a la
Dispensación del Reino, a esta Tercera Dispensación en la cual
estamos y en la cual nosotros hemos comenzado y somos los
primeros de esa Tercera Dispensación.

Así que, vean ustedes a dónde van a venir los santos del
pasado, jovencitos ellos, para unirse en armonía con los santos
de este tiempo, los cuales serán transformados, seremos
transformados, y juntamente con ellos estaremos aquí de 30 a 40
días en una labor que se llevará a cabo, de la cual no hablamos
mucho para que todo se quede hasta que llegue ese momento, en
donde será una Obra de un grupo de jóvenes todos
transformados, todos unidos en el Amor Divino, sin diferencias,
sin problemas los unos con los otros, en donde la gloria de Dios
estará manifestada.

Así que viendo estas cosas entonces todo esto nos da


ánimo,nos alienta para estar unidos, para luchar unidos, trabajar
unidos en el Amor Divino, y así obtener la Victoria estando en
estos cuerpos, para luego en el otro cuerpo, entonces llevar a
cabo la Obra que corresponde para inaugurar ese nuevo cuerpo.
Así que la inauguración de ese nuevo cuerpo será algo
maravilloso, pero también tenemos que pasar en la última Obra
que hacen los hijos de Dios estando en estos cuerpos mortales,
terrenales. Así que esta Obra que nos corresponde llevar a cabo
estando en estos cuerpos, queremos hacerla bien, y ya que es la
última Obra que los escogidos hacen estando en estos cuerpos
(porque es la Obra del fin del tiempo), queremos hacerla en el
Amor Divino, queremos hacerla en colaboración los unos con los
otros, y queremos hacerla bajo la bendición divina y dirección
divina.

EN LA CASA DE DIOS BAJO EL MINISTERIO DEL SIERVO


FIEL Y PRUDENTE
Rev. William Soto Santiago
12 de Agosto de 1996 - Minatitlán, México

Así que podemos ver que siendo personas pertenecientes


a una Casa, esa Casa es la Iglesia del Señor Jesucristo, esa
Casa es la Familia de Dios, esa Casa es la descendencia de Dios
por medio del Segundo Adán, de Jesucristo. Y todos estamos
llamados a ser personas no solamente honestas, eso todo el
mundo lo sabe, sino también ser personas respetuosas, y
mantenernos en el orden divino, en el orden de la Palabra, como
hijos e hijas de Dios, comportándonos correctamente y no
teniendo diferencias los unos con los otros, porque pertenecemos
a una Casa, a una Familia: la Familia de Dios. ¿Y saben ustedes
una cosa? Algunas veces hay personas que dicen: “Es que yo soy
así demasiado rústico.” mire, déjese de esa bobería, porque usted
es de la descendencia real de Dios, usted es de la Realeza
Celestial, usted no es cualquier persona.

¿Y verdad que se vería muy feo que los hijos del rey y la
reina de una nación se estén peleando los unos con los otros y se
estén comportando mal? ¿Verdad que se ve muy feo? Toda
persona diría: “Esas cosas que estamos viendo en esos hijos de
la realeza, son las cosas que se ven en la gente baja, en la gente
que no son de la realeza.” Miren, cada uno de ustedes son de la
Realeza más grande, de la Realeza del Cielo y de la Tierra; y
ustedes han sido hechos Reyes y Sacerdotes para reinar con
Cristo por mil años y luego por toda la Eternidad.
LAS SIETE RECOMPENSAS AL VENCEDOR
Rev. William Soto Santiago
23 de Julio de 2000 - Guatemala, Guatemala

Por lo tanto, no se detenga, siga siempre hacia delante,


sea una persona llena de Amor Divino, pues estamos en la Edad
del Amor Divino; y mantenga buen compañerismo con todos los
hermanos, aunque alguno le ofenda, perdónelo y siga hacia
delante. Y si usted ofende, pídale perdón a su hermano, y que él
entonces lo perdone; y él y usted sigan hacia delante.

TIEMPO DE LA PROMESA
Rev. William Soto Santiago
01 de Julio de 1984 - Cayey, Puerto Rico

No es lo mismo decir: “Yo te amo,” que expresar el Amor


cuando hay problemas, cuando se necesita que ese amor se
manifieste. Porque el Amor necesita ser expresado. Una persona
puede tener mucho amor, pero si no lo expresa, ese amor no ha
hecho nada.

OTRO PÁRRAFO: Algunas veces, pues, que nos ofenden


algunas personas; algunas veces sin nosotros tener la intención
de ofenderlos, otras veces, pues, ofendemos, porque hablamos
con alguna intención no muy buena, y no nos cuidamos,
hablamos con coraje, y hablando con coraje, pues, ya aunque no
haya intención de ofender, ya uno con coraje ofende en una forma
o en otra forma, usted hace sentir mal a la otra persona.

Pero nuestro deseo en el corazón, es actuar de la forma


correcta, y ser como son los que están en el Paraíso. Pero ellos
tuvieron que pasar por lo mismo que nosotros hemos pasado,
pero la Sangre de Jesucristo los limpió a ellos y nos limpia a
nosotros de todo pecado.
Así que no hay ningún problema. Lo único que tenemos
que ser, es un poquito más cuidadosos, dejar que esas virtudes
se manifiesten en nosotros, Él las manifieste, para que así
entonces podamos hacer las cosas mucho mejor, y tener menos
cosas de las cuales arrepentirnos.

TIEMPO DE LUCHA
Rev. William Soto Santiago
09 de Mayo de 1982 - Valencia, Venezuela

Porque cuando se obra con sinceridad para ayudar a


otros, todo el bien que uno le ofrece y le da a otro, también
regresa multiplicado a uno.

EL AÑO DE LIBERACIÓN
Rev. William Soto Santiago
13 de Julio de 1986 - Cayey, Puerto Rico

Por lo tanto, llenos de alegría y de regocijo, amándonos


los unos a los otros, no criticándonos, porque ¿qué vamos a estar
haciendo criticándonos los unos a los otros, cuando en vez de
usar palabras de crítica, podemos usar mejores palabras?
Palabras que le digamos a nuestro hermano: “Ya la resurrección
de los muertos está cerca, y la transformación de nuestros
cuerpos está muy cerca, por lo tanto, esfuérzate y sé valiente, que
ya falta poco. Tú eres un elegido, porque has escuchado la gran
Voz de Trompeta. No estés mirando tus problemas, tus faltas y
tus errores, para desanimarte; resuelve tus problemas, arregla
todos tus errores, y sigue hacia delante creyendo firmemente,
porque has sido llamado por la gran Voz de Trompeta para tu
transformación. Sigue hacia delante hasta que seas transformado,
y verás que después serás perfecto.”

No somos perfectos hasta que tengamos el cuerpo


transformado. Mientras tanto, cometemos errores y faltas, pero
tenemos la gran Voz de Trompeta que nos ha llamado en el fin del
tiempo, nos está recogiendo a cada elegido en el lugar donde se
encuentre, para la transformación de su cuerpo, y la resurrección
de los muertos.

Por lo tanto, perseveremos hasta el fin, porque el final será


mejor que el principio, porque mejor es el final del negocio que el
principio.

SALUDOS Y CONSEJOS A LA JUVENTUD


Rev. William Soto Santiago
29 de Junio de 1990 - Santiago, Chile

Es un privilegio muy grande trabajar en el Reino de Dios,


trabajar en nuestra Edad y saber que estamos trabajando en
armonía con la sexta dimensión. Estamos trabajando con alegría
de corazón, dándole gracias a Dios por el privilegio que nos ha
dado y cada uno ocupando su posición en la Obra del Señor.

OTRO PÁRRAFO: Trabajemos unidos, brazo a brazo y en


mutuo acuerdo en el Reino de Dios. Obtendremos todo el
resultado prometido en la Escritura y pasaremos a la Vida eterna
con un cuerpo eterno conforme a las promesas de Dios.

DIOS MORANDO ENTRE SU PUEBLO


Rev. William Soto Santiago
08 de Diciembre de 2002 - San Pablo, Brasil

Cuando uno no tiene Amor de Dios en el corazón


manifestado, se pone celoso por cualquier cosa, se pone celoso,
si ve que Dios quiere usar a otra persona; pero si tiene Amor en
su corazón, en su alma, se pone a la disposición de esa otra
persona para ayudarlo en todo aquello que Dios quiera hacer a
través de él. Esa es la forma correcta.
EL SÉPTIMO SELLO Y EL PROPÓSITO DIVINO
Rev. William Soto Santiago
02 de Septiembre de 1990 - Cayey, Puerto Rico

Dios espera recibir lo que Él le ha entregado a usted, pero


con ganancia. El que lo entregue sin ganancia, entonces vea lo
que le pasó al siervo negligente; el cual no trabajó ni se unió a los
que estaban trabajando bien en la Obra de Dios. Así que fue
negligente, fue malo, fue egoísta.Como las personas que dicen:
“Esto es mío, y si yo no lo uso en la Obra, pues no lo va a usar
nadie. Esta bendición de Dios me la dio a mí.” Pero Dios se la dio
para que la usara en Su Obra para beneficio de todas las
personas. Pero la persona egoísta siempre tiene esos problemas.
Así que nosotros no somos egoístas; por eso trabajamos con los
que trabajan en la Obra, y nos ponemos brazo a brazo con ellos;
y Dios multiplica ese trabajo. Esa Obra se multiplica; y así quedan
almacenados tesoros en el Reino de Dios para todos los que han
trabajado en la Obra.

LOS OBREROS DEL TEMPLO DE DIOS


(Reunión de Ministros)
Rev. William Soto Santiago
07 de Julio de 2001 - Austin, Texas, U. S. A.

Cualquier otra persona que no esté en armonía con el


Mensaje correspondiente a esa Edad que es dado por Cristo al
Mensajero y del Mensajero pasa a los ministros y al pueblo,
cualquier persona que no esté en armonía con ese Mensaje de
esa edad, su obra no es contada como parte del Templo Espiritual
de Cristo.
LOS OBREROS DE LA COSECHA
Rev. William Soto Santiago
03 de Junio de 1979 - Cayey, Puerto Rico

Por lo tanto, en este tiempo de cosecha todos trabajamos


unidos. No peleándonos el uno con el otro, porque entonces
interrumpiríamos esa gran labor de la cosecha. Porque entonces
no sería una cosecha en paz, sino en peleas; y se echaría a
perder el fruto que se recogería. Eso significa claramente que si
peleásemos los unos con los otros, aun teniendo el Mensaje para
cosechar, y ese Mensaje camina hacia delante, luego vienen esas
personas que han sido recogidas, que han sido cosechadas con
el Mensaje, cuando llegan, ¿qué sucede? Si estamos peleando
los unos con los otros, se echa a perder toda esa gran cosecha, y
entonces ¿qué dicen? “¡Yo creía que esto era mejor!”

Pero si estamos unidos en el Amor Divino, y trabajando


juntos, y dándonos las manos el uno al otro para llevar a cabo la
gran labor que nos ha sido encomendada, y tener un buen
ambiente para recibir a toda esa multitud de gente que está
prometida en la Palabra que será cosechada; entonces cuando
lleguen, entonces se siente tan cómodos, que podrá decir: “De
una cosa yo me lamento, y es de no haber llegado antes al
Mensaje, o de que el Mensaje no me llegara antes de este tiempo
en que me ha llegado.”

PALABRAS A LOS MINISTROS


Rev. William Soto Santiago
14 de Junio de 1994 - Villahermosa, Tabasco, México

Así que la Palabra clave para nosotros es trabajar, trabajar


en el Reino de Dios con Amor Divino, sin celos el uno al otro, sino
dándole la mano el uno al otro en todo lo que nosotros veamos
que se está haciendo en el Reino de Dios, y amándonos los unos
a los otros.
Y cuando necesitamos un refuerzo en una de nuestras
áreas, que vengan de otros de los grupos a ayudarnos de alguna
forma; entonces también se puede hacer, y cuando el otro
necesite, entonces vamos para allá, eso es tener un buen
compañerismo los unos con los otros, pensando siempre que no
trabajamos para nosotros mismos, en cuanto a lo humano, sino
para Jesucristo, la Obra es de Jesucristo, y si lo hacemos con
Amor Divino, si la intención del alma nuestra es buena, entonces
será agradable delante de Dios. Entonces podemos ver que la
intención es muy importante, porque Dios juzga el corazón, Dios
juzga el pensamiento y las intenciones.

Una persona puede hacer una cosa, el otro puede hacer lo


mismo, y sin embargo ambos tener pensamientos e intenciones
diferentes; por eso nuestras intenciones deben ser buenas, en
todo lo que nosotros hagamos en el Reino de Dios, y aprender los
unos de los otros también; y siempre estimulándonos los unos de
los otros, alentándonos los unos de los otros, porque eso nos
ayuda mucho, no criticándonos, sino alentándonos y viendo que
lo que uno pueda hacer y tener éxito, el otro también lo puede
hacer y tener éxito.

LOS REQUISITOS PARA LA ADOPCIÓN DE UN HIJO DE DIOS


Rev. William Soto Santiago
21 de Enero de 1996 - Cayey, Puerto Rico

Yo deseo para cada uno de ustedes, amigos y hermanos,


que me escuchan aquí presentes, y también televidentes, que el
Tutor, el Espíritu Santo, diga de cada uno de ustedes y también
de mí: “Estos Son unos hijos muy obedientes y muy trabajadores
en la Obra del Dios del Día Postrero. No se están peleando el uno
con el otro, sino que se están amando los unos a los otros con
Amor Divino, y se están ayudando los unos a los otros, y están
trabajando al máximo en la Obra de Dios, conscientes de que la
Obra de Dios en el Día Postrero, tiene que ser llevada a cabo por
Cristo a través de Su Iglesia, los miembros de Su Cuerpo Místico
de Creyentes. Y ellos han dicho: ‘Heme aquí Señor, envíame a
mí. Envíame a mí y úsame a mí en Tu obra, en todo lo que Tú
tienes para llevar a cabo en esta Tierra.”

Ese es el testimonio que yo deseo que el Espíritu Santo dé


de cada uno de ustedes y también de mí, para que así nuestro
Señor diga: “Se parecen tanto a Mí, que los voy a adoptar.” Y nos
adopte a todos, transforme nuestros cuerpos, y resucite a los
muertos en Cristo.

EL PADRE DE FAMILIA
Rev. William Soto Santiago
11 de Febrero de 1998 - Cayey, Puerto Rico

Y en el Amor Divino continuaremos caminando juntos


hasta ser transformados. Y después que seamos transformados
continuaremos caminando juntos por toda la Eternidad. No nos
vamos a separar el uno del otro. Y no vamos a apartarnos el uno
del otro ni en este tiempo ni cuando seamos transformados ni
durante el Reino Milenial tampoco. Todos estaremos unidos en el
lugar donde estaremos juntos allá en Jerusalén, en la parte que
corresponde a la Edad de la Piedra Angular.

DE REGRESO AL HOGAR
Rev. William Soto Santiago
02 de Julio de 1986 - Medellín, Colombia

Por eso a través de ese nuevo nacimiento en el Reino de


Dios, somos hermanos los unos de los otros, porque hemos
nacido en la misma Familia, somos hijos del mismo Padre
Celestial. Por eso el Amor de los hermanos que han nacido del
Padre Celestial, que son hijos del Señor Jesucristo, es más fuerte
que el amor terrenal de los hermanos terrenales, porque el amor
de los hermanos que han nacido en el Reino de Dios es Amor
Divino, Amor eterno, Amor que no tiene barreras, Amor que no
mira las debilidades, las faltas y problemas de su hermano
espiritual, para criticarlo, y pensar y decir que no es un hijo de
Dios, sino Amor Divino, que aunque vean a sus hermanos con
errores y faltas, y problemas, puede decir: “Con todo y eso, él es
mi hermano, y cuando sea transformado y hayamos regresado a
nuestro hogar, ya no tendrá ninguna falla y será plenamente
perfecto como el Señor Jesucristo.”

LA LUZ VERDADERA QUE ALUMBRA A TODO HOMBRE


Rev. William Soto Santiago
05 de Diciembre de 1993 - Cayey, Puerto Rico

Siempre hay problemas y hay personas problemáticas, y


también el enemigo de Dios trata de producir muchos problemas
en toda edad y en toda dispensación.

Por lo cual, todo hijo de Dios debe cuidarse de no ser


problema ni traer problemas a otras personas, ni ser instrumento
del enemigo de Dios para que haya problemas en medio del
Cuerpo Místico del Señor Jesucristo.

Es necesario que todo ser humano sepa que debe vivir en


la dispensación que le ha tocado, en una forma correcta, debe
vivir de acuerdo a la Escritura, y no de acuerdo a su propia
voluntad; porque Dios no va a juzgar a la persona por la voluntad
de la persona, sino por la Palabra de Dios.

Por eso es necesario en toda Dispensación que toda


persona se sujete a la Palabra de Dios, y viva de acuerdo a la
Palabra de Dios. Fuera de la Palabra de Dios hay problemas para
la persona. En la Palabra de Dios hay bendiciones para la
persona. Caminar en la Palabra es caminar en la Luz Verdadera
que alumbra a todo hombre.
LA UNIÓN DEL CUERPO MÍSTICO DE CRISTO
(Reunión de Ministros)
Rev. William Soto Santiago
29 de Octubre de 2002 - Puno, Perú

Así como el cuerpo físico nuestro tiene que estar unido,


usted no puede tener en su cuerpo físico una mano dejada allá en
otro lugar y usted por acá, usted necesita tener el cuerpo unido
para que funcione bien, y cuando el cuerpo suyo, usted necesita
que su cuerpo le dé un vaso de agua, pues, ahí está la mano, la
cual toma el vaso de agua y usted toma el vaso de agua.

Y así por el estilo, el cuerpo tiene que estar unido. Si no


está unido, la parte que no está unida al cuerpo no tiene vida,
está muerta una persona que se le desunió del cuerpo un brazo;
usted lo ve que falta un brazo, ¿qué pasó?, ¿dónde está la otra
parte del brazo? Muerta.

Por lo tanto, toda persona que esté separada del Cuerpo


Místico de Cristo, está ¿cómo? Muerta. “Sin mí, nada podéis
hacer; separados de mí, nada podéis hacer.” Dice Cristo. Por lo
tanto, tenemos que estar unidos en el Cuerpo Místico de Cristo,
que es Su Iglesia. Por lo tanto, no pueden estar separados, sino
unidos en el vínculo del Amor, que es lo que une todo el Cuerpo
Místico de Cristo. Los que se separan, se separan, y entonces
pierden el vínculo del Amor en el Cuerpo Místico de Cristo.

Por lo tanto, es necesario que estemos bien unidos en el


Cuerpo Místico de Cristo, para siempre trabajar conforme a la
Voluntad de Dios en Amor y con Amor Divino.

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