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Curso académico 2023 / 24

COMENTARIO DE TEXTO
Comenzar a escribir tras los signos “ ” en los cuadros de texto.

Estudiante: Hugo Llinás Domingo

Texto: La flexibilidad

Autor: R. Sennett
Título: La corrosión del carácter. CAP 3 La flexibilidad.

(1) IDEA PRINCIPAL:

El texto trata principalmente la cuestión de la flexibilidad. La búsqueda de flexibilidad en las

instituciones como un medio para liberarse de la rigidez, cuando en realidad, estas prácticas no
conducen a una mayor libertad, sino que están diseñadas para ejercer nuevas formas de poder y
control sobre las personas. Sennett se encarga de explicarlo a través de tres componentes de la
flexibilidad: la reinvención discontinua de las instituciones, la especialización flexible y la
concentración descentralizada.

(2) DESARROLLO: Continúa en las dos pátinas siguientes

Comienza afirmando que desde la sociedad se busca unas instituciones más

flexibles para acabar con la rigidez. En cambio, la realidad es que esas
prácticas de flexibilidad en lugar de proporcionar libertad, normalmente están
encaminadas a ejercer otra forma de poder sobre las personas. Para Mill, el
comportamiento flexible es lo que genera libertad humana, sin embargo, para
Sennett, a través de la nueva economía política, la oposición a la rutina
burocrática y la búsqueda de esa flexibilidad han producido nuevas
estructuras de poder y control.

Este nuevo sistema de poder dentro de las formas de flexibilidad está

compuesto por tres elementos. El primero se trata de la reinvención
discontinua de las instituciones, en este caso se trata de un cambio
organizacional de las empresas que pretende reinventar las instituciones de
forma irrevocable haciéndolas más flexibles, rompiendo así la rutina
burocrática. Se pasa así de una jerarquía piramidal a un sistema de redes
flexibles, en el que se puede separar una parte de otra sin llegar a destruir al
resto, se trata pues de un sistema fragmentario. Para realizar esta conversión
los directores empresariales echan de mano de programas software que
estandarizan los procedimientos operativos a través de los cuales se reduce el
número de trabajadores y aumenta la carga de trabajo de los componentes

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de la red, que ahora realizarán múltiples tareas. Estos cambios contra la

rutina burocrática se hacen desde el campo empresarial en nombre del
aumento de la productividad. Sin embargo, este aumento de la productividad
parece que no se ha dado, pero realmente tampoco importa demasiado pues lo
que prima de verdad es la capacidad de cambio que tienen las empresas, eso
es lo que las hace tener gran valor en el mercado y eso es lo que persiguen, que
sean capaces de romper con el pasado. Ese cambio está relacionado con la
inestabilidad de la demanda del consumo, que también está ligado al siguiente
elemento, la especialización flexible. Ésta consiste básicamente en conseguir
los productos más variados cada vez más rápidos, lo que implica adaptarse al
cambio continuo en vez de tratar de controlarlo. Para ello es necesario, la
disposición de alta tecnología, la velocidad de las comunicaciones para estar al
tanto de los datos del mercado global y por encima de todo estar dispuesto a
dejar que las demandas cambiantes del mundo exterior determinen la
estructura interna de las instituciones. Sennett nos habla de dos modelos de
economías políticas: el modelo renano y el anglosajón. En el modelo renano, los
sindicatos y el Estado del bienestar tienen vigencia, mientras que el anglosajón
ofrece más posibilidades al libre mercado. Aun así, ambos pueden comportarse
con la misma flexibilidad, pero con distintas implicaciones, el anglosajón tiene
tasas de empleo muy altas pero pocas restricciones a la desigualdad de
salarios mientras que el renano pone más énfasis en la situación de los
trabajadores, sufre de tasas más altas. El último elemento es la concentración
sin centralización del poder que se trata básicamente de una organización
vertical (de arriba abajo) del trabajo en red que supone, además de una
sobrecarga de dirección de los pequeños grupos de trabajo, nuevas formas de
poder desigual y arbitrario. Una de las formas en las que el control se ejerce es
fijando objetivos a cada unidad de red, dándoles una supuesta libertad a los
trabajadores de cada célula para que alcancen los objetivos como quieran, la
cuestión es que los objetivos que se les asignan no son fáciles a veces tan
siquiera realistas, por lo que se ven sometidas a una mayor presión.

Los tres ejemplos se visualizan en la organización del tiempo en el lugar del

trabajo. Esto es la aparición del horario flexible y esta flexibilidad,
aparentemente liberadora, refleja la necesidad de adaptarse a las demandas
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laborales y personales contemporáneas. Por un lado, el horario flexible es

más bien un beneficio para determinados empleados privilegiados y a su vez
está asociado con un estricto control institucional. Un trabajador controla la
ubicación del trabajo, pero no tiene más control sobre cómo realizar ese
trabajo. A medida que el trabajo se descentraliza, la vigilancia electrónica se
intensifica, lo que implica una nueva forma de sumisión al poder. Por eso
Sennett afirma que la flexibilidad provoca desorden, pero no libera de las
restricciones.

Finalmente, expone los rasgos fundamentales que han de poseer los magnates
en cuanto a la flexibilidad, que son la capacidad de desprenderse del pasado,
es decir, la necesidad de posicionarse en una red de posibilidades mejor que
quedarse estancado en un solo trabajo. Y la seguridad necesaria para aceptar
la fragmentación, es decir, la capacidad de moverse en el desorden.

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 (3) CONCLUSIONES:

A través de la flexibilidad, se ha generado un nuevo sistema de poder en las

instituciones, caracterizado por la reinvención discontinua, la especialización
flexible y la concentración sin centralización. La flexibilidad implica libertad y
control al mismo tiempo, mientras que para el empresario si que se resulta una
libertad a la hora de poder realizar su actividad económica y adaptarla a las
circunstancias cambiantes del mercado global. Para el trabajador, la
flexibilidad bajo una aparente sensación de libertad, significa un mayor control
y una constante incertidumbre acerca de su futuro, pues no sabe cuánto
tiempo va a durar en el trabajo o tan siquiera cual será el horario de su
próxima semana, impidiendo así la posibilidad de organizar cualquier otra
actividad que no esté ligada a su actividad laboral.

(4) VALORACIÓN PERSONAL:

En este apartado, quería llevar el concepto de la flexibilidad a una situación

que se da de forma generalizada entre los trabajadores poco cualificados hoy
en día. Se trata de las ETTS, las empresas de trabajo temporal, que se
encargan de poner en contacto a empresas que demandan mano de obra y
trabajadores que ofertan su fuerza de trabajo. El tema está en las condiciones
laborales que proporcionan a los trabajadores, aunque el salario puede ser algo
más alto que los trabajadores que están con contrato de empresa, el problema
reside en que las empresas disponen del tiempo de los “temporales” en función
de la carga de trabajo que exista en ese momento, es decir, que estos
trabajadores han de estar siempre pendientes y disponibles por si son
llamados a trabajar. Así se producen situaciones en las que el trabajador
piensa que al día siguiente a de ir a trabajar, sin embargo, esa noche o la
misma mañana recibe una llamada diciéndole que no hay trabajo, que se
quede en su casa sin percibir ningún tipo de salario. Además, estos contratos
se renuevan cada mes hasta que decidan le hagan fijo por la empresa, lo cual
suele ser bastante complicado. En estos casos la empresa juega con esa
“recompensa” para que los temporales se dediquen y compitan entre ellos para
demostrar su dedicación o lealtad a la empresa: haciendo horas extra o
trabajando días no estipulados en el contrato, por ejemplo. Para mí esta sería
una de las formas de la flexibilidad dentro del neoliberalismo.
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