Coloreando la ciudad

La regla de oro: hacer a los otros lo que nos gustaría que hicieran por mí.
Actúa como un imperativo ético universal.

 Ayudar sin buscar recompensa (el buen Samaritano)

 Construye una reciprocidad positiva y solidaria entre los implicados.
 Salva la iniciativa y la libertad individual.
 Podemos decir que es una metodología integradora. Inclusiva y
emergente del nosotros.
 Permite el desarrollo de competencias ciudadanas.
 Marca la acción conjunta del niño con el adulto.
La formación cívica está implícita en el contexto del Bicentenario.
Propuesta pedagógica para instituciones públicas no formales, escolares,
religiosas.
UNESCO: aprender a vivir juntos
La educación a lo largo de la vida se basa en cuatro pilares: aprender a
conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos, aprender a ser.

Desde las aulas se hacen cada año foros de fraternidad

Con un alcance de 5000 adolescentes.

Algunos alcances en la formación:

 Indicadores de consolidación de DDHH
 Estrategias de conciliación y mediación
 Camino intercultural
 Todos habitantes de la misma aldea global
 El planeta es una casa común
 Creció el voluntariado y el servicio comunitario
 Nace la fraternidad como una categoría pedagógica

La fraternidad es nuestra fortaleza

Además de desarrollar valores sociales desarrolla en lo personal valores

como aprender a pensar juntos, trabajar en equipo, resolver problemas y
conflictos
Una de las prioridades de UNICEF es no centrar la educación en el aula.
Sino ver lo que sucede fuera de ella. En la familia, las organizaciones
comunitarias, en instituciones del estado.
 Esto forma niños conocedores y comprometidos solidariamente con
las necesidades de su comunidad, país y comunidades
internacionales.
 El fundamento teórico es la pedagogía de la reciprocidad. Prioriza la
ayuda, dar compartir, ayuda y consolación verbal, valorización del
otro, escucha empatía solidaridad, presencia positiva. Son actitudes
elegidas y no normadas.

Cómo nace?
Un grupo de 600 intendentes se convocó en una ciudad. Los adolescentes
llevaron sus inquietudes, propuestas y compromisos en la construcción de
la ciudad.
La iniciativa podría haber quedado allí, limitada a una acción. Fue acogida
por los docentes y se transformó en lo que hoy conocemos el Proyecto
Coloreamos la ciudad.
Aun hoy los jóvenes y adolescentes son los protagonistas de este
proyecto.