Está en la página 1de 10

Al analizar la obra “Dos

Pesos de Agua” puedo


decir que esta, es una de
las
más breves, de las que
escribió el autor
dominicano Juan Bosch.
En esta se
muestra la
inconformidad que
tenían los moradores del
pueblo llamado
Paso Hondo, debido a la
sequía que enfrentaba
dicho pueblo.
En cambio la vieja
Remigia, era la única
persona optimista, ante
las
adversidades que se
encontraba enfrentando
el pueblo, ella nunca se
rindió hasta el final.
Al analizar la obra “Dos
Pesos de Agua” puedo
decir que esta, es una de
las
más breves, de las que
escribió el autor
dominicano Juan Bosch.
En esta se
muestra la
inconformidad que
tenían los moradores del
pueblo llamado
Paso Hondo, debido a la
sequía que enfrentaba
dicho pueblo.
En cambio la vieja
Remigia, era la única
persona optimista, ante
las
adversidades que se
encontraba enfrentando
el pueblo, ella nunca se
rindió hasta el final.
Al analizar la obra “Dos
Pesos de Agua” puedo
decir que esta, es una de
las
más breves, de las que
escribió el autor
dominicano Juan Bosch.
En esta se
muestra la
inconformidad que
tenían los moradores del
pueblo llamado
Paso Hondo, debido a la
sequía que enfrentaba
dicho pueblo.
En cambio la vieja
Remigia, era la única
persona optimista, ante
las
adversidades que se
encontraba enfrentando
el pueblo, ella nunca se
rindió hasta el final.
NOMBRES: BIANCA MARIA SIERRA PEREZ ANALISIS

Al analizar la obra “Dos Pesos de Agua” puedo decir que esta, es una de l

as más breves, de las que escribió el autor dominicano Juan Bosch. En esta se muestra la
inconformidad que tenían los moradores del pueblo llamado Pasó Hondo, debido a la sequía
que enfrentaba dicho pueblo. En cambio la vieja Remigia, era la única persona optimista, ante
las adversidades que se encontraba enfrentando el pueblo, ella nunca se rindió hasta el final.

PERSONAJES
 La Vieja Remigia
 El Nieto de la Vieja Remigia
 Las Animas

RESUMEN

para hacer un rosario a


San Isidro, pero no
llovió. Un día las ánimas
estaban repasando
cuentas y una barbuda se
dio cuenta de que la
vieja
Remigia, de Paso
Hondo, había quemado
ya dos pesos de velas
pidiendo
agua. Entonces, las otras
se alarmaron al ver tal
cantidad de dinero, ya
que
servían una noche de
lluvia por dos centavos
de velas. A la mañana
siguiente amaneció el
cielo nublado, después
de varias horas estalló un
trueno, Remigia corrió a
la puerta, vio que ya
estaba lloviendo y se tiró
afuera, radiosa. Luego
tomó al nieto y lo mostró
a la lluvia. Ya dentro de
la
casa, empezó a pensar
cómo iba a empezar de
nuevo. Pero, pasaron
varias
semanas y no paraba de
llover. Una tarde pasó un
hombre montado en un
mulo y Remigia lo invitó
a pasar para que se
calentara, pasar un rato
empezaron a hablar
sobre la niega que estaba
pasando y la sequía que
ya
habían vivido. Entonces,
el señor le dijo a
Remigia que porqué ella
no
dejaba ese sitio y se iba
para las lomas, a lo que
ella contestó:
-Jum...Peor que esto fue
la seca, don
Este cuento del profesor Juan Emilio Bosch, trata de la sequía o "mal de ojo" como ellos
decían, que se vivía en Paso Hondo, al tener varias semanas que no llovía, tanto así que ya el
maíz se había consumido en sus tallos, se oían crujir los palos, se veían enflaquecer los caños
de agua y la tierra de la pocilga se estaba endureciendo. Al ver esto las personas estaban
abandonando el pueblo, menos la vieja Remigia, quien siempre está esperanzada en que
lloviera y les daba dinero a las personas que se iban para que les prendieran velas a las ánimas.
La vieja Remigia le seguía prendiendo velas a las ánimas, y una tarde su nieto ardía en fiebre,
entonces Remigia lo tomó y salió por las calles llamando a los vecinos, para hacer un rosario a
San Isidro, pero no llovió. Un día las ánimas estaban repasando cuentas y una barbuda se dio
cuenta de que la vieja Remigia, de Paso Hondo, había quemado ya dos pesos de velas pidiendo
agua. Entonces, las otras se alarmaron al ver tal cantidad de dinero, ya que servían una noche
de lluvia por dos centavos de velas. A la mañana siguiente amaneció el cielo nublado, después
de varias horas estalló un trueno, Remigia corrió a la puerta, vio que ya estaba lloviendo y se
tiró afuera, radiosa. Luego tomó al nieto y lo mostró a la lluvia. Ya dentro de la casa, empezó a
pensar cómo iba a empezar de nuevo. Pero, pasaron varias semanas y no paraba de llover. Una
tarde pasó un hombre montado en un mulo y Remigia lo invitó a pasar para que se calentara,
pasar un rato empezaron a hablar sobre la niega que estaba pasando y la sequía que ya habían
vivido. Entonces, el señor le dijo a Remigia que porqué ella no dejaba ese sitio y se iba para las
lomas, a lo que ella contestó:

-Jum...Peor que esto fue la seca, don.

También podría gustarte