Relatoría 1

Immanuel Wallerstein- Marat/Sade.

Todos sabemos que la revolución francesa fue un suceso que marco y divido pautas
sociales, instituciones y gubernamentales. No solo en Francia sino también al redor del
mundo, remplazando la monarquía y las instituciones eclesiásticas por instituciones
democráticas, es bien sabido que después de estos sucesos se dio la consolidación de los
derechos humanos, ya que las constates decisiones arbitrarias que presentaban la
monarquía en su momento, fomentaron la crisis vivida a finales del siglo XVIII, debido a
esto surgieron movimientos revolucionario en respuesta al abuso y desinterés de los reyes y
de la iglesia ya que estos presentaban la concentración del poder militar y económico, para
generar represarías a la burguesía y a campesinos por medio de fuerzas militares y los
aranceles. Estas poblaciones representaban el 97% de la población francesa por lo tanto era
inminente un levantamiento que conllevaría a la revolución para desestabilizar la jerarquía
presente en ese momento y redistribuir los bienes en Francia.

Una de las consecuencias de este suceso fue la bifurcación de ideales bipartidista, en el que
se busca por medio de un debate público la formación de un estado nación. A través de
ideales, surgen divergencias de pensamiento estableciendo que los que se sentaban a lado
izquierdo buscaban la formación de una república fomentando la importancia del
conocimiento político y la no monopolización de las instituciones políticas, económicas y
religiosas, fomentando el voto nulo a fin de impedir que le rey tumbara las decisiones de la
asamblea , los que se sentaban a lado derecho buscaban una monarquía parlamentaria, este
grupo lo formaron absolutistas, gente de nobleza y el clero principalmente y finalmente los
que estaban en el centro de la asamblea se situaron los indecisos que no tenían una postura
definida en torno al papel del rey.

Las guerras siguientes debilitaron los cimientos en lo que se había formado el estado
feudal, se buscaba la expansión del pensamiento surgido posterior a la revolución francesa,
que cruzarían las fronteras de Europa para fomentar las surgentes ideologías y los
establecidos derechos humanos, para así crear un sistema mundo en el que convergiera la
superioridad de la raza humana como especie civilizada y el uso de la democracia y la
política como arma reguladora del comportamiento presente en una civilización.

No es de esperar que para establecer un orden democrático fomentado por el dialogo y el

debate se haya dado por causas barbáricas, abusos de poder, masacres y un inminente
derrame de sangre. Tal parece que en la historia de la humanidad el desarrollo cognitivo y
social de la misma haya sido precedida por sucesos devastadores, tal parece que para
alcanzar los ideales de la humanidad hay que pasar por un proceso de des-humanidad para
comprender por medio de la devastación la importancia del orden. Los derechos humanos
que hoy nos cobijan y que nos enseñan, fueron causa de un conflicto que duro años, para
crear estos derechos miles de personas fueron vulneradas, asesinadas y humilladas, el dolor
de estas personas representa hoy lo fundamental que son las revoluciones en la historia
humana para que esta pueda por medio del dolor traer la paz. Mas sin embargo esto
significa que la revolución no esté en todos nosotros ya que esta surge en el momento en el
que malestar individual transciende al malestar colectivo, no es sola una cuestión de
pensamiento e idealizar un futuro basado en la rebeldía sino comprender que la revolución
es otra institución que se vale del poder cognitivo y por la fuerza para poder alcanzar sus
metas, no hay revolución sin organización.

Para la conformación de una identidad nación que surge después de los sucesos, se busca la
separación del conocimiento y de la iglesia, para la formación de instituciones educativas
que enseñen a partir de bases científicas e empíricas, en un primer momento no se tenía
clara la diferencia entre ciencia y filosofía, tras un cambio estructural en la política, una
expansión poblacional tanto geográfica y cuantitativa, surge diferencias ideológicas en el
pensamiento positivista y holístico, las discusiones posteriores de cómo se debía fomentar
la educación conllevaron a diferentes conflictos entre el manejo de la información y de la
educación, se entraron a debatir cuestiones comportamentales y éticas acerca del manejo de
la enseñanza y aprendizaje, no solo se busca la enseñanza de la ciencia, también se busca la
formación de seres humanos aptos para formar parte de una civilización, se fomenta la
adquisición de valores y comportamientos acordes a las necesidades colectivas presentes en
una sociedad, ya no era labor solo de la iglesia la encargada del manejo de la ética, se le da
el poder a las instituciones educativas de la formación integral, ideales que nos identifican
como individuos cobijados por derechos y normativas, para el desarrollo de la personalidad
y mejorar la calidad de la formación de los seres humanos.

Como conclusión, se puede inferir, que la formación de un estado nación, no depende del
exclusivo poder que maneja una entidad reguladora, sino que es la conjunción e integración
de las necesidades públicas y las respuestas estatales. Para la formación de soluciones
generales que abarquen los requerimientos de bienestar colectivo, que requiere una
sociedad específica, la organización de las entidades políticas, judiciales y ejecutivas se
convertirían en las veces que fomentarían la aplicación eficaz de aquellos derechos,
obtenidos tras la inconformidad que había surgido por los abusos de poder presentes en la
monarquía. Actualmente nos parece inconcebible la formación de un estado, que se aleje de
la comprensión de los derechos humanos, que buscan solo el bienestar de las clases
privilegiadas sobreponiéndose a las necesidades del mismo pueblo. Sin embargo, estas
situaciones se ven actualmente reflejadas en la cotidianidad, debido a que las clases
políticas actuales hacen mal uso del poder que se les fue conferido, para el bienestar
particular de ellos mismos y sus familias, cometiendo actos arbitrarios y violentando los
reglamentos estipulados en las diferentes constituciones, que rigen a un país.