Convéncete, Dios está contigo

Cuando tomes conciencia del modo en que Jesús está contigo, verás que te llevará al éxito en todo lo
que tengas que hacer.

Si Jesús está con nosotros, nos dará éxito en todo lo que hagamos y hará que tengamos buenos
resultados en todas las áreas de nuestras vidas, para la gloria de Dios.

No importa cuál sea tu ocupación, Jesús está contigo y quiere que te vaya bien.

no importa cuál sea tu vocación u ocupación, seas maestro, líder empresarial o ama de casa,
quiero que sepas que Cristo está contigo y que quiere que te vaya bien.

Quiero que sepas que todos nuestros esfuerzos, toda nuestra fuerza de voluntad y disciplina no pueden
lograr lo que hace la presencia del Señor en un instante.

¿quién podría decir que mientras estamos hablamos sobre Jesús, su presencia no pueda llevarse algo
que es destructivo en tu vida? Verás, no es tu esfuerzo el que te transforma. Lo que te transforma es
contemplar a Jesús y creer que te ama y quiere salvarte.

Tenemos que entender eso como lo entendería el pueblo hebreo. Y aquí hay algo bellísimo, ¡el secreto
de Emanuel! La mente judía entiende que cuando el Señor está contigo, te vuelves exitoso en cualquier
emprendimiento al que te dediques. Y no tienes por qué creerme solo porque te lo diga yo. Observa las
crónicas de la historia judía. La Biblia registra que cada vez que el Señor estuvo con ellos en la batalla,
jamás pudieron los enemigos derrotar a los hijos de Israel; todas sus campañas militares terminaron en
éxitos rotundos.

En el contexto moderno nada ha cambiado. Cuando la Biblia afirma que Jesús está contigo, lo está para
ayudarte, asistirte, dar vuelta a las cosas en tu favor y hacer que suceda todo para tu beneficio. No está
contigo, corno creen erradamente algunos, para criticar, juzgar o asignar culpas. Cuando Dios
todopoderoso está contigo suceden cosas buenas en ti, alrededor de ti y a través de ti. ¡Lo he visto una y
otra vez!

Cuando Dios todopoderoso está contigo suceden cosas buenas en ti, alrededor de ti y a través de ti.

Génesis 39:2: "el Señor estaba con José y las cosas le salían muy bien".
¿Y sabes qué? Empecé a reclamar ese versículo cada día y decía en voz alta: "Jesús está conmigo y las
cosas me saldrán muy bien''.
Estaba ante la presencia de Jesús. Una cosa es asentir mentalmente diciendo que Cristo está contigo,
pero otra muy diferente es cuando empiezas a estar consciente de su presencia. Puedes comenzar a
invocarla afirmando que está contigo en voz alta.

Invoca su presencia y verás su poder

¿Sabes que el mejor momento para dar gracias a Jesús por su presencia es cuando parece que no la
"sientes"? Porque cuando se trata de la presencia de Jesús, no te guías por tus sentimientos. Es que
los sentimientos y emociones pueden ser engañosos. ¡Guíate por la promesa de Dios, de que Él es
Emanuel!
Ni las emociones ni los sentimientos se basan en la verdad. ¡La Palabra de Dios es la verdad!
¿Lo ves? No puedes guiarte por lo que sientes. Guíate por la verdad. Y la verdad es esta: Dios
prometió lo siguiente: "Nunca te dejaré; jamás te abandonaré".5 De modo que el mejor momento para
estar en la presencia de Jesús es, precisamente, cuando sientes como si Jesús estuviera a cien mil
kilómetros de distancia. Recuerda que los sentimientos no se basan en la verdad. ¡La Palabra de Dios
es la verdad!