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TAPETE

D Í A D E M U E R T O S

Alumna: Ana Sofia Prezas Pérez


Maestra: Blanca
SOBRE NUESTRO TAPETE...

El proyecto explicado a continuación fué


desempeñado por los alumnos de tercer semestre
de bachiller.

En el instante que se nos dejó la tarea de realizar un


tapete con la tematica del estado de Nuevo León, se
nos vinieron a la mente cuatro cosas principales de
dicho estado, como: su ubicación, su flor tipica;
llamada Anacahuita, su joya gastronomica que es el
cabrito y su diversidad reconocida de maíces criollos,
por esta razón desenvolvimos cada detalle en el
tapete, dandole así realce y brillo, claro sin que se
perdiera la tematica del Día de Muertos.

El fondo del tapete contaba con una notoría silueta


del estado de Nuevo León, representado como en un
mapa geografico, sobre de este estaba exhibido el
caricaturezco y colorido cabrito; lleno de variados
patrones de colores, debido a que se quería dar a la
ilusion que era un cabrito-alebrije.
A los costados se podian observar unos llamativos
maices deslumbrando su vibrante color amarillo, en
compañia de una grata representación de las flores
Anacahuita, echas de pompones.
Para finalizar, se realizaron unas delicadas pero muy
representativas; flores de cempasúchil, como objeto
decorativo para el marco de nuestro tapete, dandole
así el toque del Día de Muertos.
DÍA DE MUERTOS EN NUEVO LEÓN:
TRADICIONES Y CULTURA

Las ofrendas, danzas y bellas representaciones


conforman las celebraciones para recibir a los fieles
difuntos en Nuevo León.

Muy distinto al centro y sur del país, la celebración de


muertos que en esta región norteña de México, se
festeja con muestras de ofrendas y altares en
lugares públicos como el Palacio de Gobierno del
estado, la Facultad de Enfermería o el Museo de
Historia Mexicana con la finalidad de mantener y
fortalecer las raíces. Hay concursos de calaveras
literarias, exposiciones, disfraces.

Es el 2 de noviembre, con ilusión y añoranza adornan


año con año la última morada de sus difuntos; la
arreglan con arcos revestidos de cientos de flores de
cempasúchil, con ese color anaranjado y amarillo que
simboliza la tierra; flores blancas que significan la
pureza y el cielo; las moradas que conllevan el
sentimiento de luto. Después, amorosamente
acomodan plátanos, cañas, mandarinas, tejocotes y
en un lugar especial colocan una canasta repleta de
pan.
Es esencial colocar la fotografía del difunto y luego
encender las veladoras, cual si fueran un rayo de luz
que alumbre el camino de los espíritus. Para terminar
este ritual, se esparce el copal que limpia el lugar de
las malas energías y abre los caminos. Entonces,
entrada la noche, tiene lugar la convivencia entre el
mundo de los vivos y de los muertos.
SIGNIFICADO DE LOS TAPETES
DE DÍA DE MUERTOS
Una de las tradiciones mexicanas cuyo elemento
principal es el color y que forman parte del arte popular
efímero son los tapetes de aserrín y flores que se
elaboran en el piso, en diferentes fiestas religiosas y que
son utilizados para que pasen los santos y sacerdotes,
además de adornar los poblados, dan la bienvenida a los
difuntos. Este arte es una muestra más del sincretismo
religioso y cultural que se da en México y en América
Latina, en donde el color tienen un lugar preponderante.
Su origen tiene dos fuentes culturales: la prehispánica y
la española.
Estas alfombras o tapetes se realizan sobre un diseño
casi siempre pre elaborado, en el cual las imágenes
representadas son flores y animales propios de la
región; en algunos tapetes se ven representaciones
bíblicas o de imágenes del santo a quien va dirigida la
fiesta.
Los dos primeros días de noviembre México se llena de
cempasúchil, ofrendas, catrinas, veladoras, pan de
muerto y tapetes de día de muertos que dan la
bienvenida a los difuntos que vienen del inframundo.

Estos tapetes son originarios de pueblos indígenas en el


estado de Oaxaca, aunque en últimos años, varios
estados han querido preservar la tradición, por lo que
estas obras de arte se pueden apreciar en ciudades
como Querétaro, Guanajuato, Zacatecas y en el Zócalo
de la Ciudad de México.

El significado que hay tras estos tapetes es dar la


bienvenida y rendir un tributo a los que ya murieron e
iniciaron su viaje hacia el Mictlán. Esos mismos seres,
cada 1 y 2 de noviembre, cruzan hacia la vida terrenal
para visitar a sus humanos queridos.

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