DIPLOMADO EN INTERVENCIÓN

PSICOLÓGICA, JURICO, FORENSE EN NIÑEZ,

ADOLESCENCIA Y GÉNERO

TRABAJO PRACTICO #1
“EL ABORTO”

POSTGRADUANTE: Méndez Villalobos Diana Elizabeth

MATERIA: Leyes intervinientes en violencia NNA y género

DOCENTE: Dr. Juan Bernardo Moron Rojas

REGISTRO: 200937111
INTRODUCCION
El tema del aborto ha sido objeto de intensos debates, análisis y reflexiones en
diversos contextos sociales, legales y éticos alrededor del mundo. La
controversia que rodea este tema proviene de la compleja intersección de
factores, como la moralidad, la religión, la salud pública y los derechos
reproductivos. La decisión de interrumpir un embarazo involucra
consideraciones personales y sociales profundas que han llevado a la adopción
de diversas posturas en la sociedad.
Esta investigación se propone explorar el fenómeno del aborto desde una
perspectiva integral, abordando sus dimensiones legales, éticas y sociales. A
través de un análisis, se examinarán las leyes vigentes en diferentes países,
las perspectivas éticas que influyen en las opiniones individuales y colectivas,
así como los impactos sociales derivados de las políticas y prácticas
relacionadas con el aborto.
A nivel internacional, varios tratados y convenciones abordan el tema de los
derechos reproductivos, incluido el acceso al aborto en ciertos casos. Por
ejemplo, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Convención
sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer
son instrumentos legales internacionales que han sido utilizados para respaldar
el derecho al aborto en ciertos casos.
Las opiniones sobre el aborto son diversas y a menudo están relacionadas con
perspectivas éticas, religiosas y culturales. Aquellos que se oponen al aborto a
menudo argumentan desde el punto de vista de la vida humana, sosteniendo
que la vida comienza en la concepción y que el feto tiene derechos. Otros
argumentos en contra del aborto pueden basarse en creencias religiosas o
morales.
1. SITUACIÓN LEGAL
La posición de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre el aborto
se basa en principios de derechos humanos y en la promoción de la salud
sexual y reproductiva. La ONU reconoce que los derechos humanos incluyen el
derecho de las personas a decidir sobre el número y el espaciamiento de sus
hijos, así como a tener acceso a servicios de salud sexual y reproductiva, que
incluyen servicios de aborto seguro cuando la legislación nacional lo permita.
La ONU aboga por garantizar que las mujeres tengan acceso a servicios de
salud reproductiva, incluidos servicios de aborto seguro, como parte integral de
la atención de salud. El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y
la Organización Mundial de la Salud (OMS), agencias de la ONU, han trabajado
para mejorar la salud reproductiva y reducir la mortalidad materna, y esto
incluye la promoción de servicios de aborto seguro donde sea legal.
Es importante destacar que la posición de la ONU no implica la imposición de
una política específica sobre el aborto en los países miembros. La ONU
respeta la soberanía de los Estados miembros y reconoce que las leyes y
políticas sobre el aborto son decisiones que deben ser tomadas a nivel
nacional, respetando los derechos y las circunstancias locales.
En resumen, la ONU defiende los derechos sexuales y reproductivos, incluido
el acceso a servicios de aborto seguro, como parte de su enfoque en los
derechos humanos y la salud reproductiva, pero respeta la diversidad de
legislaciones nacionales sobre este tema.
Al respecto, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se ha
pronunciado a favor del derecho de las mujeres a decidir sobre su vida sexual y
reproductiva, y en contra de la criminalización que sufren cuando se ven
orilladas a la interrupción de un embarazo. Además, reconoce que la falta de
acceso al aborto legal, seguro y gratuito es una clara violación a sus derechos
fundamentales.
La CNDH considera que esta situación vulnera los derechos sexuales y
reproductivos de las mujeres, así como los relativos a la igualdad y a la no
discriminación, a la autodeterminación, a la vida, a no ser sometidas a torturas,
a la libertad y seguridad personales, a no ser objeto de injerencias arbitrarias
en la vida y en la familia, así como a la libertad de pensamiento, conciencia y
religión, por lo que exhorta a todas las entidades del país a que, en el marco de
sus competencias, garanticen el aborto legal, seguro y gratuito como parte de
los derechos humanos de las mujeres, para que tengan acceso a una
ciudadanía plena y una vida digna. El derecho a decidir otorga dignidad a las
mujeres –base de los derechos humanos– y, por lo tanto, el Estado debe
garantizar estos derechos sexuales y reproductivos, como educación sexual,
acceso al aborto electivo realizado por profesionales y, en el marco legal, a la
anticoncepción, a los tratamientos de fertilidad y a la protección legal contra
abortos forzados
En Bolivia, las leyes sobre el aborto varían dependiendo de ciertos factores. El
Código Penal permite el aborto en casos de violación, incesto o cuando la vida
o la salud de la mujer esté en peligro. Además, el aborto es legal en casos de
malformaciones graves del feto. Fuera de estas circunstancias, el aborto está
penalizado.
En 2014, Bolivia aprobó una reforma del Código Penal que establece
sanciones para el médico personal que practica abortos fuera de las
circunstancias permitidas por la ley.
Bolivia es parte de varios tratados internacionales que abordan cuestiones de
derechos humanos, pero la interpretación y aplicación de estos tratados
pueden variar. Por ejemplo, la Convención sobre la Eliminación de Todas las
Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) aborda la igualdad de
género y los derechos de las mujeres, y algunos argumentos que deberían
interpretarse en el sentido de garantizar el acceso a servicios de aborto seguro

El Estado de la Población Mundial 2022 publicado por el Fondo de Población

de Naciones Unidas, UNFPA, el organismo dedicado a la salud sexual y
reproductiva, da cuenta que casi la mitad de todos los embarazos en el mundo,
un total de 121 millones, son no planificados. En Bolivia, la cifra es mayor,
50.5%, es decir, más de la mitad son embarazos no intencionales.
Estos datos se desprenden de la Encuesta de Demografía y Salud (EDSA)
2016, que revela que más de la mitad de las mujeres bolivianas que fueron
consultadas no había decidido ser madre cuando quedó embarazada, sino que
quería ejercer su maternidad más tarde (28,9%), o ya no quería tener más hijos
o solo no quería ser madre (21,6%)
En el área rural de Bolivia, según el EDSA, el 58,6% de las madres tuvieron
embarazos no intencionales, lo que evidencia que las mujeres del área rural
tuvieron menos opciones para elegir sobre su maternidad. Aunque en el área
urbana este porcentaje es menor (46,5%) no deja de ser preocupante cuando
se habla de ejercicio de derechos y cuidado de la salud de las mujeres, señala
el UNFPA.
Añade que las mujeres de 25 a 34 años son las que en mayor porcentaje
dijeron que sí deseaban ser madres al momento del nacimiento de su hijo o
hija; en tanto que el 50% de las mujeres menores de 20 años señalaron que
querían ser madres más tarde.

Comparación Internacional:
-Países con Legislación más Permisiva:
Al comparar con otros países, se observa que algunos permiten el aborto en
una variedad de circunstancias, como razones de salud, socioeconómicas o
simplemente a petición de la mujer. Ejemplos de países con leyes más
permisivas incluyen varios en Europa, como Suecia, Alemania o Francia, donde
el aborto se permite dentro de ciertos límites temporales o bajo diversas
justificaciones.
-Países con Legislación Restrictiva:
Por otro lado, hay naciones con leyes restrictivas similares a Bolivia, donde el
aborto está permitido solo en casos específicos. Esto incluye a varios países de
América Latina, donde la influencia de la tradición y la religión también ha
jugado un papel importante en la formulación de políticas.
-Países que prohíben o tienen restricciones muy estrictas:
Ahora; también hay países como: Malta (donde el aborto está prohibido en
todas las circunstancias), El Salvador (donde el aborto está prohibido en todas
las circunstancias), Honduras (donde el aborto está prohibido en todas las
circunstancias), Nicaragua (donde el aborto está prohibido en todas las
circunstancias), República Dominicana (donde el aborto está prohibido en
todas las circunstancias, aunque hay excepciones limitadas)
Es importante destacar que la información puede cambiar y las leyes pueden
evolucionar con el tiempo. Además, incluso en países donde el aborto está
legalmente permitido, los detalles específicos de las regulaciones pueden
variar, como el período de gestación en el que se permite el aborto, los motivos
aceptables, y otros aspectos relacionados.

2. CONTEXTO SOCIAL Y CULTURAL

La influencia de valores culturales y tradiciones en Bolivia ha influido en la
formulación de leyes restrictivas sobre el aborto. Esta situación puede tener
impactos significativos en el acceso de las mujeres a servicios seguros de
aborto y en la toma de decisiones sobre su salud reproductiva.
En Bolivia, el tema del aborto ha sido históricamente controversial y ha estado
influenciado por diversos factores:
Cultural y Religioso: La sociedad boliviana tiene profundas raíces culturales y
religiosas. La Iglesia Católica y otras iglesias ha tenido una fuerte presencia en
la cultura boliviana, y la postura de la Iglesia sobre el aborto ha influido en las
actitudes de muchas personas. Las opiniones sobre el aborto pueden variar
según las creencias culturales y religiosas de diferentes comunidades.
Movimientos Sociales: Existen movimientos feministas y de derechos de las
mujeres en Bolivia que abogan por cambios en la legislación sobre el aborto.
Estos movimientos buscan promover el derecho de las mujeres a decidir sobre
su propio cuerpo y mejorar el acceso a servicios de salud reproductiva, incluso
cada 28 de septiembre se realiza movimientos masivos como marchas
radicales en el marco del Día de Acción Global por el Aborto Legal, Seguro y
Accesible, también conocido como Día por la Despenalización y Legalización
del Aborto
Es importante destacar que las actitudes hacia el aborto pueden variar
significativamente entre las zonas urbanas y rurales, así como entre diferentes
grupos étnicos y culturales en Bolivia. Además, las políticas y las percepciones
pueden haber evolucionado desde mi última actualización.

3. POSTURA PERSONAL
En la reflexión sobre el complejo tema del aborto, sostengo firmemente que la
vida es un valor fundamental que merece ser protegida. Sin embargo,
reconozco que existen circunstancias excepcionales, como la violación o
cuando la vida de la madre está en peligro, donde la interrupción del embarazo
puede ser una opción ética.
Creo en la importancia de fomentar la responsabilidad reproductiva y la
conciencia sobre los métodos anticonceptivos disponibles. En la actualidad,
contamos con una variedad de opciones accesibles para prevenir embarazos
no deseados, incluso gratuitos. Desde preservativos hasta anticonceptivos
hormonales, estos métodos ofrecen a las personas la capacidad de planificar
conscientemente su familia y evitar situaciones difíciles.
La toma de decisiones respecto al cuerpo y la maternidad es un derecho crucial
que debe ser ejercido con responsabilidad y reflexión. Antes de concebir, es
esencial que las personas consideren cuidadosamente las consecuencias de
sus acciones y exploren las opciones disponibles para evitar embarazos no
planificados. La educación sexual y el acceso a métodos anticonceptivos deben
ser promovidos para empoderar a las personas en la toma de decisiones
informadas sobre su salud reproductiva.
En resumen, abogo por la preservación de la vida y la promoción de la
responsabilidad reproductiva. Creo en la importancia de reconocer la diversidad
de perspectivas en torno al aborto, al tiempo que enfatizo la necesidad de
fomentar una sociedad que brinde apoyo, información y acceso a métodos
anticonceptivos, permitiendo a las personas tomar decisiones informadas antes
de enfrentar la complejidad de un embarazo no planificado.
4. RECOMENDACIONES
Las recomendaciones sobre el aborto, considerando posibles modificaciones
legales y las diversas perspectivas éticas, sociales, religiosas y culturales,
pueden variar en función de las creencias y valores de cada individuo. Sin
embargo, a continuación, presentaré algunas recomendaciones generales que
podrían tener en cuenta estos aspectos:
1. Educación integral:
Promover una educación sexual integral que proporcione información
precisa, basada en evidencia científica y sin sesgos, desde edades
tempranas. Esto ayudaría a prevenir embarazos no deseados y a que las
personas tomen decisiones informadas.
2. Acceso a métodos anticonceptivos:
Garantizar el acceso a una amplia gama de métodos anticonceptivos
seguros, efectivos y asequibles para todas las personas. Esto contribuiría a
reducir la necesidad de interrupciones del embarazo.
3. Apoyo a la maternidad:
Brindar apoyo integral a mujeres embarazadas que se encuentren en
situaciones difíciles o desfavorables, ofreciendo recursos como atención
médica, asesoramiento psicológico, asistencia social y opciones de cuidado
infantil. Esto permitiría que las mujeres tomen decisiones informadas y
respaldadas.
4. Consideración de causales específicas:
Evaluar y mejorar la posibilidad de establecer causales específicas para
permitir el acceso al aborto en determinadas circunstancias, como riesgo
para la vida o salud de la mujer, malformaciones fetales graves e
 inviabilidad del embarazo. Esta medida podría abordar casos excepcionales
y salvaguardar la salud y los derechos de las mujeres.
5. Enfoque multidisciplinario:
Propiciar diálogos y debates multidisciplinarios que involucren a expertos en
salud, ética, derecho, sociología, psicología y religión, con el fin de
considerar todas las perspectivas y buscar soluciones equilibradas y
respetuosas hacia los derechos de las personas.
6. Apoyo psicológico:
Asegurar el acceso a servicios de apoyo psicológico y emocional para
aquellas personas que tomen la decisión de interrumpir un embarazo, así
como también para quienes enfrenten emociones y conflictos relacionados
con el aborto.
7. Prevención y reducción del aborto:
Fomentar programas de prevención del embarazo no deseado,
promoviendo la educación sexual, el acceso a métodos anticonceptivos y la
planificación familiar. También es importante ofrecer soporte a nivel
comunitario y garantizar el acceso a servicios de salud reproductiva de
calidad.
Es importante destacar que estas recomendaciones son generales y deben ser
adaptadas a las realidades y contextos específicos de cada país o región. El
objetivo principal es buscar soluciones que respeten los derechos y la
autonomía de las personas, al tiempo que se garanticen medidas de protección
y apoyo para aquellos que se vean involucrados en situaciones relacionadas
con el aborto.