NAYELY

A FAVOR

La contaminación por plástico en Perú tiene graves repercusiones para la salud humana. Los
plásticos generan sustancias tóxicas como metales pesados, gases ácidos y partículas en
suspensión que se infiltran en el aire, agua y alimentos. Esto plantea serias preocupaciones, ya que
la exposición a los microplásticos puede provocar efectos respiratorios, endocrinos y
cardiovasculares.

Además, la ingesta de plásticos puede causar una enfermedad llamada plasticosis, que afecta
tanto a las aves marinas como potencialmente a la salud humana. Los aditivos tóxicos presentes
en el plástico también pueden desencadenar mutaciones celulares, especialmente perjudiciales
para los fetos y los niños.

Para afrontar este problema en Perú, es crucial proteger la biodiversidad, ya que su deterioro
puede dar lugar a la propagación de enfermedades infecciosas y a la disminución de la calidad del
aire y del agua. El país puede tomar medidas ejemplares adoptadas por naciones vecinas como
México, que ha implementado prohibiciones específicas sobre ciertos tipos de plásticos y ha
creado planes de acción nacionales para abordar la basura marina y la contaminación por plástico.
En particular, la implementación de biovallas para recoger los residuos plásticos en los ríos puede
ser una estrategia efectiva para reducir la contaminación

.A CONTRA

Si bien la contaminación por plásticos es una amenaza para la salud humana y la biodiversidad en
Perú, existen preocupaciones válidas respecto a la implementación de políticas restrictivas. Estos
son algunos argumentos en contra de tales medidas:

1. La industria del plástico proporciona empleos y contribuye significativamente a los ingresos en

el país. Restringir ciertos plásticos y reducir el uso de productos de un solo uso podría afectar
negativamente la economía y el empleo.

2. La eliminación de plásticos de un solo uso podría alterar la vida cotidiana de las personas, ya
que son ampliamente utilizados en la industria alimentaria y en los hogares.

3. La prohibición de plásticos de un solo uso podría comprometer la seguridad alimentaria, ya que

estos plásticos son fundamentales para mantener la higiene y seguridad de los alimentos.

Es crucial considerar estas preocupaciones al implementar políticas para abordar la contaminación

por plásticos. Se debe encontrar un equilibrio entre la protección del medio ambiente y el
mantenimiento de la estabilidad económica, junto con la búsqueda de alternativas sostenibles que
no comprometan la seguridad alimentaria ni la prevención de enfermedades transmitidas por
alimentos.