Fecha: miércoles 15 de noviembre del 2023

Nombre de alumno: Montero Frías Jeshua

Ensayo de película: “Intoxicación” la cruda verdad de nuestra

comida
La realidad es que Intoxicación es el documental que te hará pensar antes de cada
comida por un tiempo. Es una perspectiva de lo poco que podemos hacer, en un
sistema de envenenado por intereses que desprotegen al consumidor, e inevitable deja
una sensación muy fatalista. No obstante, también hace una denuncia para determinar,
a nivel salud, que hacemos por nosotros mismos, en casa, para protegernos. Algo que
muchas veces pasamos por alto en búsqueda de culpables y que nos invita a
reflexionar que todo lo que nos invita a reflexionar que todo lo que ingerimos tiene
repercusiones. El documental aborda lo que llaman, irónicamente el suministro de
alimentos más seguro del mundo, entonces es aún más terrorífico pensar lo que pasará
en otras regiones con menor regulación. Y mediante entrevistas con expertos y
familiares de víctimas, intoxicación se centra en los brotes de salud alimenticia más
mediáticos en el país norteamericano.
Una última denominación con que las figuras políticas y comerciales estadounidenses
definen a su cadena alimentaria, pero que está lejos de ser real como lo expone este
documental. El que se basa en el libro Poisoned, de Jeff Benedict, y tiene como uno de
sus hilos conductores a Bill Marler, abogado que al inicio del relato aborda el riesgo de
los alimentos crudos.

Como la fruta cortada y lechuga romana que se compran en los supermercados

pensando que son más saludables. Sin embargo, los millones de enfermos por su causa
descubrieron lo contrario. Pero también Marler fue testigo directo de cómo también
los alimentos procesados son causantes de enfermedad y muerte, tal como en 1993
con el brote de E. coli en el estado de Washington. Cuando el abogado representó a
varias víctimas del accionar de esa bacteria, luego de que llegará a muchos
consumidores a través de las hamburguesas de la cadena Jack in the Box.
En el inicio de una carrera que lo ha llevado a ser testigo y activista frente a diferentes
casos de contaminación y enfermedad dentro de la industria alimentaria en EE.UU.
Entre los cuales el documental expone el de los patógenos hallados en lechugas y
espinacas debido a excrementos de animales en los canales de irrigación en las zonas
de cultivos.
Como también a la existencia de salmonela en los pollos, algo que todavía no puede
ser controlado totalmente, o de esta misma bacteria en una productora de maní hace
algunos años. Muchos incidentes ante los cuales legisladores y representantes
gubernamentales no han respondido adecuadamente, varias veces presionados por los
representantes de las industrias.
Expone varios casos de gente que ha muerto por intoxicaciones alimentarias por (oh
sorpresa) la bacteria E. Coli en verduras por no lavarlas bien, dado que lógicamente se
encuentran sembrados y crecen en huertos con abono que básicamente es la bacteria,
heces de animales y alguna cosa más. El debate del documental se centra en como los
organismos regulatorios (algo que también ya sabemos en el ámbito liberal) no
controlan mucho que digamos. Pero recuerda, todo se reduce a lavar bien las verduras
y cocinar bien los alimentos y no hay mucho más dado que estas bacterias no
sobreviven a temperaturas tan altas, es un debate superado como el del anisakis, que
si se congela el pescado 48 horas se muere, pues esto lo mismo. No tiene mayor
interés. Otra muestra más de como EEUU es en muchos aspectos un país
tercermundista. Aquí se expone la escasa regulación en materia de Seguridad
Alimentaria que se aplica debido a la presión de lobbies y la ineficacia del Gobierno
estadounidense.
Quizás es difícil de valorar este documental por alguien que desconozca el ámbito de la
Seguridad Alimentaria pero es bastante claro en explicar el riesgo que proviene de los
alimentos. El problema pasa por la falta de regulación y control en los
establecimientos, más que por la producción industrial de alimentos no nutritivos
Pero otra tesis sobre los alimentos no nutritivos postula que no se trata sólo de regular,
sino de cambiar la forma de producción: las condiciones en que se crían las vacas, los
pollos, los chanchos y hasta los peces en cautiverio. Y qué fertilizantes reciben las
verduras de consumo masivo. Los alimentos ultra-procesados no son las mejores
opciones para el mundo por venir.