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Ubicación geográfica
Los fenicios tenían una sociedad estratificada que estaba organizada en torno
al comercio. La clase más alta consistía en una aristocracia de las grandes
familias de mercaderes y traficantes de esclavos. Luego, había una clase de
comerciantes medianos, que se ocupaban de las rutas comerciales de menor
escala. Los marineros y artesanos componían la clase más baja de la
sociedad.
Los fenicios no conquistaron los territorios a los que llegaban con sus rutas
comerciales. En vez, fundaron colonias propias y factorías comerciales
(enclaves dedicados a la producción). De esta manera, desarrollaron una red
de puntos de apoyo, producción y distribución, para sus rutas comerciales.
Baal. Era una divinidad solar a la que rendían culto los habitantes del Asia
Menor, y aquellos pueblos sobre los que tenían influencia, como el fenicio.
Era la deidad de la lluvia y de la guerra, y era uno de los dioses centrales del
culto fenicio.
Hadad. Era el dios fenicio del aire, las tormentas y los relámpagos, de la
lluvia y del viento. Los fenicios pensaban que era su voz la que retumbaba
en medio de las tempestades.
Dagón. Posible sincretismo entre tres dioses (uno ugarítico: Ben Dagón; uno
sumerio: Dagan; y uno fenicio: Dagón), era una divinidad marítima
representada como una criatura mitad hombre, mitad pez. Sin embargo, otras
interpretaciones lo asocian a voces agrícolas (“espiga” en hebreo), aunque es
quizá uno de los pocos dioses nacionales de los filisteos.
Arte y arquitectura. Durante siglos, los fenicios utilizaron los estilos egipcio
y asirio en sus diseños artísticos y arquitectónicos. La producción artística
tenía fines comerciales, por lo que las cerámicas y artesanías tomaron formas
y diseños de aquellas regiones con las que se comerciaba.
Escritura. Los fenicios crearon un sistema de escritura alfabética, compuesto
por 22 signos fonéticos. Los signos se diferenciaban en vocales y
consonantes, que se combinaban para formar palabras. Este sistema era fácil
de aprender y utilizar, por lo que resultó muy conveniente para el uso
comercial. Se difundió a través de las rutas y los enclaves comerciales
fenicios, y terminó siendo adoptado por otros pueblos, como los griegos y
los latinos, que lo tomaron como base para sus propios sistemas de escritura.