Está en la página 1de 7

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS

ESTUDIO HERMENEÚTICO y OPINIÓN

CURSO : Procedimiento Administrativo

INDECOPI

DOCENTE : Dra. María Mercedes Bellido Taber

ALUMNO : Edwin Jesús Vásquez Sánchez

CICLO : X

SECCIÓN : A

TURNO : Noche

ICA - 2023
ACTIVIDAD Nº 02
CASUÍSTICA: CLÍNICA RICARDO PALMA

 HECHOS:

En el 2011, la señora Victoria Aguirre Oviedo se atendía en la clínica Ricardo


Palma por sus constantes dolores de cabeza. Tras varios exámenes y pruebas, los
doctores descubrieron un tumor cerebral. Lo recomendable, en este caso, sería
someterla a una craneotomía. Según su esposo, Alejandro Benites, al día siguiente
de la operación, a la señora Oviedo «se le hinchó la cabeza, no hablaba y perdió la
vista». La paciente tuvo que volver a ser operada ya que, según la denuncia
interpuesta por los hijos ante Indecopi, «quedó con un hematoma cerebral y tuvo
que ser intervenida por segunda vez». Al poco tiempo, murió.

En mayo del 2016, el juez del Segundo Juzgado Penal para Procesos con
Reos Libre de la Corte Superior de Lima, Luis Sánchez Gonzales, emplazó a los
denunciados José Manuel Américo Drago Silva, Luis Ojeda Medina, Luis Michilot
Ramos, Luis Rodriguez Baez y Fernando Veliz Vilcapoma para comparecer en la
audiencia por la presunta comisión del delito contra la vida, el cuerpo y la salud, en
la modalidad de lesiones culposas graves, en agravio de la señora Aguirre. El
proceso continuó por varios años sin que nadie fuera sancionado y sin que la multa
fuera cancelada. Al final prescribió.

 ANTECEDENTES:

Mediante resolución N° 2138-2015/SPC-INDECOPI del 08 de julio de 2015, la


Sala Especializada en Protección al Consumidor resolvió fundada varias sanciones,
entre las cuales citamos los que afectaban económicamente a la clínica Ricardo
Palma:

- Confirmó la Resolución 862-2014/CC1 que declaró fundada la denuncia


interpuesta contra Clínica Ricardo Palma por infracción de los artículos 18º,
19º y 67º.1 del Código, en el extremo referido a la falta de exámenes y
evaluaciones a fin de determinar la gravedad de la enfermedad que aquejaba
a la paciente, sancionándola con 25 UIT.
- Confirmó la Resolución 862-2014/CC1 que declaró fundada la denuncia
interpuesta contra Clínica Ricardo Palma por infracción de los artículos 18º,
19º y 67º.1 del Código, en el extremo referido a la falta de tratamiento a la
hipertensión endocraneana que presentaba la paciente antes de someterla a
una craneotomía y resección tumoral, sancionándola con 30 UIT.

- Confirmó la Resolución 862-2014/CC1 que declaró fundada la denuncia


interpuesta contra Clínica Ricardo Palma por infracción de los artículos 18º,
19º y 67º.1 del Código, en el extremo referido a la falta de cuidado necesario
a la paciente durante la etapa postoperatoria, sancionándola con 35 UIT.

- Confirmó la Resolución 862-2014/CC1 en el extremo que ordenó a Clínica


Ricardo Palma como medida correctiva, que en un plazo no mayor a cinco (5)
días hábiles de notificada la presente resolución, cumpla con reembolsar la
totalidad de los gastos médicos incurridos a partir de la realización de la
craneotomía y resección tumoral a la paciente hasta su fallecimiento, los
cuales deberán ser acreditados previamente por los miembros de la Sucesión
de la señora Aguirre.

- Confirmó la Resolución 862-2014/CC1 en el extremo que condenó a Clínica


Ricardo Palma al pago de las costas y costos del procedimiento.

 ANALISIS DEL CASO:

El órgano protector del consumidor emite sus normas en función de la


idoneidad y obligación de un buen servicio, pues este considera que el personal
médico de la clínica Ricardo Palma no cumplió con su obligación de una evaluación
integral respecto a los exámenes indispensables a realizar antes de la craneotomía y
resección tumoral a la paciente Victoria Aguirre Oviedo, un procedimiento
inadecuado durante la intervención quirúrgica y la falta de cuidado durante el post
operatorio. Esto nos dice entonces, que no se cumplió con los estándares de
servicio, calidad y su obligatoriedad, más aun, en un sector tan sensible como el de
la salud y que se supone, debe contar con el personal e infraestructura idónea para
el cargo.

Así también la resolución hace hincapié en que el proveedor de servicios de


salud, esta obligado a proteger la salud de su consumidor, en este punto hablamos
de un bien preciado que está ligado a la calidad de vida y supervivencia de la
persona, por lo que cualquier daño a la integridad, si bien puede ser indemnizable,
no regresaría la cosa al estado anterior del daño. Por ello, desde mi opinión, no se
debe tratar el tema de las negligencias médicas solo a nivel de Indecopi, más al
contrario, debería ser abordado íntegramente por el derecho penal en la vía judicial,
pues estas negligencias pueden causar lesiones muy graves que deje secuelas
irreversibles en el afectado o como en el presente caso, la muerte, por lo que los
responsables deberían pagar esa negligencia, además de la reparación civil, con
una pena efectiva de privación de la libertad.

 ANALISIS DEL ACTUAR DE LOS HIJOS DE LA VICTIMA:

La mañana del 24 de julio de 2018, ocurrieron dos explosiones en la clínica


Ricardo palma, la primera explosión ocurrió en el sótano donde se encuentra uno de
los laboratorios y la segunda en el área de estacionamiento. Este atentado tuvo
como consecuencia 35 personas heridas, incluyendo a sus autores. Las
investigaciones sindicaron a los hermanos Claudia Rocío y Lenin Alexander Benites
Aguirre como autores del atentado, resultado que el móvil fue la venganza, puesto
que en dicha clínica falleció su madre Victoria Aguirre Oviedo debido a una
negligencia médica y esta entidad, no acato la sanción económica impuesta por
INDECOPI y en la via judicial, la demora de parte de la fiscal que llevaba el caso,
hizo que los presuntas delitos prescriban, quedando impune la negligencia medica
que cobro la vida de Victoria Aguirre Oviedo.

Desde un punto de vista subjetivo me identifico con la frustración de los hijos


al no alcanzar justicia por la perdida de su madre y más aun, percibir que dicha
demora en la vía judicial era sinónimo de corrupción, pero vivimos en un estado de
derecho, donde a través de la tutela jurisdiccional efectiva, podemos exigir
pretensiones, así como el respeto y cumplimiento hacia nuestros derechos. Pienso
que, en el presente caso, se debió asistir no solo a la vía administrativa del
organismo regulador, sino también a la vía penal, pues la negligencia médica era
evidente y respecto a la prescripción del caso por parte de la fiscal, no hubo un
correcto control de plazo por parte del abogado de los denunciantes. Respecto al
actuar de los hermanos, no existe atenuante alguno que los justifique y que este es
lamentablemente configura como el delito de peligro común y puso en riesgo la vida
propia de sus autores y de terceros que nada tenían que ver con sus ánimos de
venganza.

CASUISTICA: SHIRLEY MELENDENDEZ

 HECHOS:

Shirley fue operada tres veces por cálculos renales entre enero y febrero del
año 2016. A pesar de no haber sido sometida a exámenes para corroborar si no
quedaba algún cálculo, fue dada de alta. Diez días después de la última alta médica
(tercera operación) tuvo problema para miccionar y decidió regresar al Hospital
Almenara, donde los médicos notaron que aún tenía tres cálculos, por lo que le
volvieron a colocar otro catéter. Horas más tarde comenzó a sentir un fuerte dolor en
el riñón, pero en lugar de ser atendida a tiempo permaneció, según su abogado,
hasta doce horas en el pasillo de emergencias sin recibir atención oportuna. Tenía
una infección generalizada, motivo por el cual fue inducida al coma. También tuvo un
paro cardiorrespiratorio y, tras ello, los galenos notificaron a los padres que los
tejidos de los brazos y pies de la joven tenían necrosis, por lo que debían ser
amputados.

 OPINIÒN:

Ante el caso expuesto puedo manifestar que es cierto que cada profesional se
encuentra sujeto a la LEX ARTIS, que es la denominación que en el ámbito judicial
se da a los niveles de calidad exigibles a los servicios profesionales y los que se
presumen, son avalados por los títulos académicos que el exhibe. Pero esto
discrepa en la practica y mas aun en las atenciones médicas, pues el caso de
Shirley Meléndez, es la prueba viviente de una serie de negligencias continuas, de
parte del profesional médico que, como consecuencia de las mismas, termino
perdiendo los brazos y las piernas. No podemos enfocar el presente caso desde la
culpa consciente, puesto de que toda intervención quirúrgica por más mínima que
parezca tiene riesgos para el paciente, y demanda toda la expertiz y capacidad del
profesional de la salud para prevenirlos y afrontarlos a nivel de personal e
infraestructura. En el presente caso Shirley Meléndez, fue operada en tres
oportunidades, donde los médicos intervinientes conocían la historia clínica de la
paciente, pues era tratada en dicho establecimiento por estar sometida a diálisis,
Cabe resaltar que los problemas los presenta desde la segunda operación, en donde
los intervinientes no logran una extracción total de los cálculos del uréter del riñón
derecho y quitan el catéter doble J, colocado en el uréter izquierdo, no colocando el
mismo en el uréter recién operado. De igual manera no existe una correcta
extracción de los cálculos en la tercera operación y producto de ello es que la
paciente hace un cuarto ingreso, pero a emergencia debido a una septicemia
generalizada, por lo cual los médicos tratantes deciden amputarle piernas y manos,
puesto que ya se habían gangrenado.

Aquí podemos apreciar, que si hubo dolo de parte de los médicos que
operaron a Shirley Meléndez a partir de la segunda cirugía, pues eran conocedores
de que los riñones de la intervenida generaban cálculos, pero no hicieron una
extracción y limpieza total, y menos colocaron el catéter doble JJ, el cual en la
práctica servía para disminuir la generación de cálculos, sumado a ello de que al
momento de que Shirley Meléndez ingresa por emergencia, no se cumplen los
protocolos establecidos para la atención a pacientes con infección generalizada, que
es la atención en un mínimo de 10 minutos y en el presente caso pasaron mas de 9
horas desde su llegada al nosocomio. Aquí podemos apreciar que hubo dolo directo
de parte del personal médico, pues los elementos cognitivos y volitivos eran de su
completo dominio, incumpliendo en todos los momentos, los protocolos de salud e
intervenciones médicas, a lo cual desde mi parecer no debieron ser absueltos,
puesto que su conducta traspasa la negligencia y se convierte en un acto doloso que
debió ser calificado como Lesiones culposas graves y penados tal como lo indica el
artículo 124º del Código Penal.
.

También podría gustarte