Está en la página 1de 13

Universidad Latina de Panamá

Sede Santiago

Facultad de Ciencias de la Salud

Licenciatura en Enfermería

Trabajo escrito de seminario

Tema:

Enfermedades neoplásicas

Materia:

Fundamento de enfermería. ENF 001

Profesora:

Juanita González

Estudiantes:

Nancy Batista 9-766-421

Nayelis Flavio 2-753-2421

Anyeris Miranda 2-755-264

Segundo semestre

Viernes 17 de noviembre de 2023


Índice
Presentación1
Índice 2
Introducción 3
Contenido 4
Conclusión 5
Bibliografía 6
Introducción

En este trabajo escrito se explicará de manera general el significado de las


enfermedades neoplásicas, posteriormente se enfatizará en el cáncer de útero.

Las enfermedades neoplásicas, como bien se conoce, son el conjunto de


enfermedades caracterizadas por el crecimiento anormal y descontrolado de las células
en el cuerpo. Un ejemplo de estas enfermedades son el cáncer, esta es una de las
formas más comunes de neoplasia siendo una de las patologías más letales en
diversos países desarrollados.
A. ¿Que son las enfermedades neoplásicas?

Las enfermedades neoplásicas son aquellas que surgen como resultado de una
alteración en las células de los tejidos. Esta alteración está relacionada con los
sistemas que regulan la reproducción y la diferenciación celular. En términos más
sencillos, una neoplasia es un crecimiento anormal de células que puede ser benigno o
maligno.

En el cuerpo humano podemos encontrar tejidos que tienen una función específica
dentro de un órgano y otros que actúan más bien de sostén de cara a permitir su
funcionamiento. En la neoplasia son la parénquima, que son el conjunto de células con
función propia, son aquellas que crecen y se reproducen, mientras que el estroma o
conjunto de tejidos que sirven de armazón para ello (fundamentalmente tejido conectivo
y vasos sanguíneos) permiten que se produzca dicho desarrollo tumoral.

(Mimenza, 2017)

B. Formación Biológica:

Las células cancerígenas se desarrollan a partir de células sanas mediante un proceso


complejo llamado transformación.

Iniciación: Es la primera fase, es un cambio en el material genético de la célula sana


que lo convierte en una célula cancerígena.

Es un proceso en el cual se produce un cambio en el material genético, puede suceder


espontáneamente o puede ser provocado por un agente carcinógeno (célula cancerosa
contenida dentro del tejido donde se ha iniciado su crecimiento, no se ha vuelto
invasiva por lo tanto no se ha extendido a otra parte del cuerpo) pueden ser: productos
químicos, tabaco, radiación, entre otros. No todas las células son susceptibles a los
carcinógenos. Un defecto genético de una célula puede hacerla más propensa, por lo
tanto, más susceptible a este agente, incluso la irritación física crónica puede hacer que
una célula sea más susceptible a los carcinógenos.

C. Tipos de Neoplasias:
Las neoplasias pueden catalogarse y clasificarse en diferentes grupos a partir de
diversos criterios. Sin embargo, la clasificación más habitual y conocida es la que tiene
en cuenta su grado de malignidad y capacidad de infiltración en otras zonas,
diferenciándose dos grandes grupos de neoplasias.

 Benignas: Estas neoplasias no se extienden a otros tejidos y generalmente no


representan una amenaza para la vida. Su crecimiento es relativamente lento,
siendo las células que forman parte del tumor semejantes a las de los tejidos
aledaños y estando claramente diferenciadas. Ejemplos incluyen lipomas (tumores
de grasa) y nevus (lunares).
 Malignas: Las neoplasias malignas, también conocidas como cáncer, pueden
invadir tejidos circundantes y propagarse a otras partes del cuerpo. Su crecimiento
es rápido, afectando a los tejidos colindantes y los invaden, no auto limitándose y
produciendo metástasis. Ejemplos comunes son el carcinoma de pulmón, el
melanoma y la leucemia
D. Clasificación según el tejido neoplásico:

Otra posible clasificación es según el tipo de tejido en que aparezca la neoplasia. En


este sentido podemos encontrar una gran cantidad de categorías, pudiendo encontrar
tanto neoplasias benignas como malignas en prácticamente todos los tipos. Destacan
los siguientes grupos:

 Tumores de tejido conjuntivo

Este tipo de tumores se da en tejidos de tipo adiposo, cartílago, hueso o tejido fibroso.
Por ejemplo, el fibroma o el osteosarcoma.

 Tumores derivados de endotelio

Se trata de tumores o neoplasias que se producen en los vasos sanguíneos, linfáticos o


en las meninges. Así, el meningioma o el hemangioma son ejemplos.

 Tumores derivados de células sanguíneas

Se produce una proliferación descontrolada de células sanguíneas, linfáticas o del


sistema inmune. El tipo más conocido es la leucemia. En este caso son todos malignos.
 Tumores derivados de células epiteliales

Este tipo de neoplasia se da o en la piel o en el tejido epitelial existente en diferentes


órganos, glándulas y conductos. Carcinomas (incluyendo el conocido melanoma) o
papilomas son frecuentemente conocidos por la población.

E. Síntomas:

Los síntomas de las enfermedades neoplásicas varían según el tipo de cáncer y la


etapa en la que se encuentra. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

 Pérdida de peso inexplicable


 Fatiga constante
 Dolor, cuya intensidad puede variar según la zona en la que se produzca la
neoplasia
 Alteraciones en la piel, como hiperpigmentación, ictericia, eritema, prurito, entre
otros
 Fiebre recurrente sin una causa clara
 Tos persistente
 Dolor al orinar u orina oscura
 Cansancio intenso
 Surgimiento de nódulos, en especial en la mama, por ejemplo
 Aparición de manchas en la piel
F. Causas:

No se conocen con exactitud los motivos por los que determinadas células empiezan a
multiplicarse forma descontrolada. Y es que en realidad no existe una única causa para
la aparición de una neoplasia, sino que éstas tienen un origen multifactorial. Aspectos
como la presencia de determinados trastornos o enfermedades, la dieta, la
incorporación de determinadas sustancias químicas contaminantes por parte del
organismo, la vida sedentaria, la exposición a radiación o la predisposición genética
son variables que se han vinculado a su aparición.
También influyen las vivencias, los estilos de afrontamiento del estrés (algunos
predisponen al cáncer, como aquellos que reprimen emociones negativas y se inhiben)
o la personalidad. Sin embargo, hay que tener en cuenta que ninguno de dichos
factores explica la aparición del cáncer en sí. Por ejemplo, pese a que puede existir una
predisposición genética, en su mayoría se producen de forma esporádica.

G. Diagnostico

El diagnóstico de las enfermedades neoplásicas se realiza mediante una combinación


de pruebas y procedimientos médicos. El proceso de diagnóstico puede variar según el
tipo de cáncer y la etapa en la que se encuentra. En general, el diagnóstico comienza
con un examen físico y una revisión de la historia clínica del paciente. Luego, se
pueden realizar pruebas de diagnóstico por imágenes, como tomografías
computarizadas, resonancias magnéticas o radiografías, para detectar la presencia de
tumores. También se pueden realizar pruebas de laboratorio, como análisis de sangre,
para detectar la presencia de marcadores tumorales. En algunos casos, se puede
realizar una biopsia, que implica la extracción de una muestra de tejido para su análisis
en un laboratorio. La biopsia puede ayudar a determinar si un tumor es canceroso y, en
caso afirmativo, qué tipo de cáncer es.

H. Tratamiento

El tratamiento de las enfermedades neoplásicas depende del tipo y la etapa del cáncer.
Los tratamientos comunes incluyen cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia
hormonal, terapia dirigida y terapia inmunológica. La elección del tratamiento
dependerá de varios factores, como la ubicación del cáncer, el tamaño del tumor, la
edad y la salud general del paciente, y si el cáncer se ha diseminado a otras partes del
cuerpo.

La cirugía es un tratamiento común para los cánceres que se encuentran en una sola
área del cuerpo y no se han diseminado a otras partes. La radioterapia utiliza rayos de
alta energía para destruir células cancerosas y se puede usar para reducir el tamaño
del tumor antes de la cirugía o para destruir células cancerosas después de la cirugía.
La quimioterapia utiliza medicamentos para destruir células cancerosas y se puede
administrar por vía oral o intravenosa. La terapia hormonal se usa para tratar cánceres
que dependen de hormonas para crecer. La terapia dirigida se enfoca en proteínas
específicas que ayudan a las células cancerosas a crecer y se puede administrar por
vía oral o intravenosa. La terapia inmunológica ayuda al sistema inmunológico del
cuerpo a combatir el cáncer y se puede administrar por vía oral o intravenosa.

Cáncer cervicouterino

1. ¿Qué es?

El cáncer cervicouterino es un tipo de cáncer que se origina en el cuello del útero, la


parte inferior del útero que se conecta con la vagina. Es el cuarto tipo de cáncer más
frecuente en las mujeres en todo el mundo. El cáncer de cuello uterino se forma, por lo
general, de manera lenta a lo largo del tiempo. Antes de que este cáncer se forme, las
células del cuello del útero sufren ciertos cambios conocidos como displasia y se
convierten en células anormales en el tejido del cuello uterino. Con el tiempo, si las
células anormales no se destruyen o se extraen, es posible que se vuelvan cancerosas,
se multipliquen y se diseminen a partes más profundas del cuello uterino y a las áreas
que lo rodean.

2. Tipos de cáncer de cuello uterino:

Los dos tipos principales son los siguientes:

 Carcinoma de células escamosas. La mayoría de los cánceres de cuello uterino


(hasta el 90 %) son carcinomas de células escamosas. Estos cánceres, que
también se conocen como carcinomas epidermoides, se originan en las células del
ectocérvix.

 Adenocarcinoma. Los adenocarcinomas de cuello uterino, que también se


conocen como adenocarcinomas cervicales, se originan en las células glandulares
del endocérvix. El adenocarcinoma de células claras, también llamado carcinoma
de células claras o mesonefroma, es un tipo raro de adenocarcinoma de cuello
uterino.

3. Factor de riesgo

El principal factor de riesgo para el cáncer cervicouterino es la infección por el virus del
papiloma humano (VPH), un virus muy común que se transmite por contacto sexual.
Hay más de 100 tipos de VPH, pero solo algunos son considerados de alto riesgo, ya
que pueden causar cambios precancerosos o cancerosos en el cuello del útero.

Otros factores que pueden aumentar el riesgo de cáncer cervicouterino son:

 Tener muchas parejas sexuales o tener relaciones sexuales a temprana edad.


 Fumar tabaco o consumir alcohol.
 Tener un sistema inmunitario debilitado por alguna enfermedad o tratamiento.
 Tener otras infecciones de transmisión sexual (ITS), como clamidia o herpes.
 Tener antecedentes familiares de cáncer cervicouterino o de otros tipos de cáncer.
 Tener una dieta pobre en frutas y verduras.
 Usar anticonceptivos orales durante mucho tiempo.
4. Síntomas

El cáncer de cuello uterino cuando comienza a formarse por lo general no causa


síntomas, lo que complica su detección. Con frecuencia, los síntomas inician después
de que el cáncer se disemina.

Los síntomas de cáncer de cuello uterino en estado temprano suelen ser los siguientes:

 Sangrado vaginal después de tener relaciones sexuales.


 Sangrado vaginal después de la menopausia.
 Sangrado vaginal entre períodos menstruales, o períodos menstruales abundantes
o que duran más de lo normal.
 Flujo vaginal líquido de olor fuerte o con sangre.
 Dolor pélvico o dolor durante las relaciones sexuales.
Es posible que el cáncer de cuello uterino en estado avanzado (cáncer que se diseminó
fuera del cuello del útero a otras partes del cuerpo) cause los síntomas mencionados
antes además de los siguientes:

 Dificultad o dolor al evacuar, o sangrado del recto con las evacuaciones intestinales.
 Dificultad o dolor al orinar, o sangre en la orina.
 Dolor sordo en la espalda.
 Hinchazón de las piernas.
 Dolor en el abdomen.
 Sensación de cansancio.
5. Causas

La infección prolongada (persistente) por los tipos de virus del papiloma humano (VPH)
de riesgo alto causa casi todos los cánceres de cuello uterino. El VPH 16 y el VPH 18
son dos tipos de VPH de riesgo alto que causan el 70 % de los cánceres de cuello
uterino en el mundo.

6. Diagnostico
Para diagnosticar el cáncer de cuello uterino, se pueden utilizar las siguientes pruebas:

 Exploración ginecológica bimanual, para detectar anomalías en el útero o los


ovarios.
 Prueba de Papanicolau, para detectar células anormales en el cuello uterino.
 Prueba de tipificación de VPH, para identificar el tipo de virus del papiloma humano
que puede causar el cáncer.
 Colposcopia, para examinar el cuello uterino con una lupa especial y aplicar
soluciones que resalten las lesiones.
 Biopsia, para extraer tejido anormal y confirmar el diagnóstico al microscopio.

7. Tratamiento

Hay diferentes tipos de tratamiento para el cáncer de cuello uterino. Los tratamientos
son los siguientes:

 Cirugía
 Radioterapia
 Quimioterapia
 Terapia dirigida
 Inmunoterapia
 Ensayos clínicos
 Atención de seguimiento durante el tratamiento y después de este.
8. Prevención
 Vacunarse contra el VPH, especialmente si eres una mujer adolescente o joven. La
vacuna puede protegerte contra los tipos más peligrosos del VPH y reducir el riesgo
de cáncer cervicouterino en hasta un 90%.
 Hacerse pruebas periódicas para detectar lesiones precancerosas o cancerosas en
el cuello del útero. Las pruebas más usadas son la citología cervical (prueba de
Papanicolaou) y la prueba del ADN del VPH. Estas pruebas pueden realizarse cada
3 a 5 años, dependiendo de tu edad, historial médico y factores de riesgo.
 Evitar las ITS y tratarlas adecuadamente si las tienes. Algunas ITS pueden causar
inflamación o irritación en el cuello del útero, lo que puede favorecer el desarrollo
del cáncer cervicouterino6.
 Limitar el número y la frecuencia de las relaciones sexuales hasta tener una pareja
estable y fiel.
 Usar preservativo durante cada relación sexual para evitar la transmisión del VPH u
otros agentes infecciosos.
 Dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol, ya que ambos hábitos pueden
dañar las células del cuello del útero y aumentar el riesgo de cáncer cervicouterino.
 Mantener un peso saludable y una dieta equilibrada rica en frutas y verduras, ya
que esto puede fortalecer tu sistema inmunitario y prevenir algunas enfermedades
crónicas asociadas al cáncer cervicouterino.
Conclusión

Realizado este trabajo escrito, sobre las enfermedades neoplásicas hemos podido
concluir lo siguiente, las enfermedades neoplásicas son un conjunto de patologías que
se dan por el crecimiento anormal de las células, llegando a ser benignos o malignos.
Estas enfermedades afectan al ser humano a corto y largo plazo, son la tercera causa
de incapacidad permanente que afecta significativamente tanto a los hombres como a
mujeres.
Bibliografía
 (Mimenza, 2017)
Mimenza, O. C. (2017, octubre 18). Neoplasia: tipos, síntomas, causas y tratamiento.
pymOrganization. https://psicologiaymente.com/salud/neoplasia
 (Causas, riesgos y prevención del cáncer de cuello uterino, 2022)
Causas, riesgos y prevención del cáncer de cuello uterino. (2022, octubre 13). Instituto
Nacional del Cáncer. https://www.cancer.gov/espanol/tipos/cuello-uterino/causas-
factores-riesgos-prevencion
 (Cáncer de cuello uterino, 2023)
Cáncer de cuello uterino. (2023, septiembre 2). Mayoclinic.org.
https://www.mayoclinic.org/es/diseases-conditions/cervical-cancer/symptoms-causes/
syc-20352501

También podría gustarte