¿De aquí a dónde?

“Recuerda pues todo y hallarás mucha paz y

mucha alegría en medio de tus penas”

~Beato Padre Luis Variara

La memoria es la capacidad de recordar, recrear historias, imágenes o palabras

presentes en las experiencias y aprendizajes individuales.
Recuerdan seguro el aroma de aquel inolvidable primer día de escuela, algunos
con llanto, algunos con risa, uno que otro con incertidumbre, aunque en todo caso
presente la emoción y atentos nuestros sentidos, recuerdas quizás el nombre de
tu primer amigo, o acaso aquel imborrable maestro; estos primeros años serán la
base de nuestra formación, además el empujoncito hacia nuestro debut en la
sociedad, la cual maestra dulce y sabia vida guiará nuestra preparación al éxito y
al fallo.
¿Cómo? ¿cuándo? ¿quiénes? ¿para exactamente qué?
¿de aquí a dónde?
“La vida escenario del desarrollo eficaz”
La calidad y la calidez humana en los principios y valores como punto de partida
del ser para el hacer, para ello conocer:
De la vida como una gran fiesta de goce y aprendizaje, tienes tres opciones para
hacer de esta y cada noche un eterno baile de ideas, La ciencia es tu primer
elección en este baile en medio de cuál te llevará a pensar, quizá no sea el mejor
bailarín pero una gran conversación no se hará esperar, En segundo lugar llega a
ti La religión esta te ilumina nacen destellos en su sonrisa te ofrece serenidad y
calma, y justo en el centro de la pista con un incontrolable derroche de emoción…
he aquí El amor.
“Juventud, esperanza y los dones de la naturaleza recorren campos de pureza
para construir territorios de paz”
La trascendencia es una cualidad del ser al existir, que esto no nos impida crecer,
sentir, pensar conocer u actuar, que la excelencia no sea la meta que haga corto
el camino, niñas, niños y jóvenes limitados a escuchar su corazón y la voz de la
naturaleza en el idioma del amor hacia sí mismos y cada obra en su actuar.
“De jóvenes a adultos, quienes guiados por la indecencia del sol encuentren la luz
que encandezca su espíritu”
De adultos a eternos niños quienes de la mano de las estrellas se unan por un
bien común un mundo necesitado de conciencia uno que se apropie de su cultura
y su formación hacia el cuidado y la apropiación de aquello que aman.
De niños a jóvenes, jóvenes a adultos, de adultos a eternos niños y en esta breve
agrupación de las fases del tiempo y el ser, se proyecten estos como pilares y no
como peones de esta cambiante sociedad, mentes innovadoras que no acepten el
cambio, que sean la fuente que lo promueve, sean torbellinos incansables de
excelencia, sean estos felices y afronten con amor y demás valores aprendidos las
bases en un contexto ambiental, cultural, social y profesional las iniciativas que
encaminen nuestra sociedad.

“Al final del camino me preguntarán, ¿has vivido? ¿has amado? ¿ lo has logrado?
Les responderé abriendo mi corazón lleno de nombre, lleno de historias, lleno de
recuerdos…
El futuro empieza hoy, no mañana”

M.p