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1- La comunicación es la forma de interacción entre dos o más personas, ya sea mediante la palabra

hablada o escrita, gestos, ademanes, expresiones emocionales, etc., cuyo resultado es el intercambio de
significados que conducen a la comprensión y, en el mejor de los casos a un acuerdo, a un
comportamiento adecuado

2- Información.
La información es un conjunto de datos acerca de algún suceso, hecho o fenómeno, que organizados en
un contexto determinado tienen su significado, cuyo propósito puede ser el de reducir la incertidumbre
o incrementar el conocimiento acerca de algo

3- Diferencias entre comunicación e información.


La información es un conjunto de datos que han sido procesados y organizados, los cuales constituyen
un mensaje que enriquecerá el conocimiento del receptor. Por otro lado, la comunicación es la acción
que hace que un emisor o sujeto transmita información a otro individuo o receptor.

4-Opinión Pública

La opinión pública es la tendencia o preferencia, real o estimulada, de una sociedad o de un individuo


hacia hechos sociales que le reporten interés. La opinión pública se puede manifestar, entre otras
maneras, en las manifestaciones y marchas.

4.1- Proceso de formación de matrices de opinión pública y su vinculación con el derecho.

¿Qué es la opinión pública?

La opinión pública es la manifestación del sentir de la mayoría de la población de una sociedad sobre un
tema de interés general. Dicho en otras palabras, es la opinión que tiene la mayoría de la sociedad
respecto a una cuestión, o a menudo la estimación y la apreciación que de dicha opinión hacen los
expertos.

Se trata de un tema de interés para las ciencias políticas y la comunicación política, que en el mundo
moderno tiende a ir de la mano de los medios de comunicación masiva y los debates que en ellos
suceden. Así, dentro de la opinión pública tienen lugar el conjunto de posturas posibles que la gente
asume en torno a un tema, pero esto cobra relevancia cuando se impone una postura mayoritaria, ya se
trate del rechazo a una medida tomada por el gobierno, el apoyo a un candidato político o cualquier
otro asunto de interés público.

En el ejercicio político moderno, la opinión pública juega un rol determinante, y es por ello que los
actores políticos cuidan su reputación. Esto se debe a que la soberanía reside en la voluntad popular, es
decir, que un político detestado por la mayoría tiene pocas oportunidades de ganar una elección, por
ejemplo, o que una población indignada es capaz de ejercer presión a su gobierno para obligarlo a tomar
determinadas medidas.

De allí, también, que se dedique tanto esfuerzo cotidiano a medir o comprender la opinión pública, para
saber, en líneas generales, qué es lo que piensa y siente la población.

Ver además: Participación ciudadana

Historia de la opinión pública

La opinión pública ha existido desde la Antigüedad, aunque en las repúblicas de la era clásica no todos
los ciudadanos tenían derecho a expresar su opinión. En las democracias de la Antigua Grecia, por
ejemplo, no existía la idea de que el total de la población debía participar en el debate respecto a los
asuntos públicos, sino que la opinión pública se restringía a la de los ciudadanos varones, libres y
griegos.

En cambio, en las monarquías absolutas, tanto antiguas como medievales, la opinión pública no jugaba
un papel importante en la conducción política, ya que las clases dominantes (la aristocracia y el clero)
tenían el pleno control del Estado y ninguna intención de consultar a las mayorías. Aun así, la Iglesia jugó
un rol clave en el control social, imponiendo a través de su doctrina determinadas posturas políticas,
como que los reyes eran puestos en el trono por Dios, y por lo tanto cualquier alteración del orden
dinástico constituía un pecado.

El concepto moderno de opinión pública surgió de la mano de la modernidad y del liberalismo, a medida
que un nuevo orden político y social se imponía junto con el desarrollo de la burguesía y el capitalismo.
Aunque esto significó que los asuntos políticos debían involucrar al grueso de la población, inicialmente
se distinguió entre la opinión de los ciudadanos instruidos y del Parlamento (“opinión legal”) y la opinión
de la plebe (“opinión natural”).
Así se estableció un orden bastante desigual en una sociedad donde el acceso a la educación era
minoritario. Pero esto, de todos modos, representaba un cambio importante: ya no era necesario haber
nacido noble para participar del destino de la nación.

Con el paso del tiempo y la industrialización, la sociedad de masas tuvo lugar y con ella un cambio
significativo en el concepto de opinión pública, dado que la conducción de la sociedad ahora dependía
de convencer a las mayorías, dueñas de su voto.

Características de la opinión pública

Los medios de comunicación expresan la opinión pública a través de entrevistas.

La opinión pública puede ser influenciada por la información transmitida por los medios.

A grandes rasgos, la opinión pública se caracteriza por:

Consiste en la sumatoria de las posturas de la sociedad frente a un tema de interés, especialmente


cuando existe una postura mayoritaria o dominante.

Es cambiante y susceptible de ser influenciada por los eventos ocurridos y las informaciones expresadas
en los medios de comunicación.

Se considera un elemento de peso en el debate político, aunque no siempre es tomada en cuenta por
parte de los gobernantes y los actores políticos. Por ejemplo, en una dictadura la opinión pública es
ignorada y castigada.

Puede expresarse a través de medios institucionales (como el voto), acciones de fuerza (huelgas,
manifestaciones) o instancias colectivas (asambleas, publicaciones).

Tiene consecuencias directas en el ejercicio de la política y la conducción de la nación.

Importancia de la opinión pública

La opinión pública es fundamental en el ejercicio moderno de la política. En principio porque expresa el


sentir colectivo y el deseo popular, lo cual posibilita establecer una retroalimentación entre el poder
político y la ciudadanía, y así tomar las decisiones más adecuadas en base a la expresión de la mayoría.
Del mismo modo, la opinión pública permite a la población manifestar su descontento y organizarse
políticamente, para hacer presión e influir en la toma de decisiones políticas. En esto los medios de
comunicación de masas juegan, a su vez, un rol importante.

Formas en que se expresa la opinión pública

Una urna en un mercado recoge la opinión pública de los transeúntes.

Las votaciones permiten conocer los deseos de la población de manera directa.

La opinión pública puede expresarse de diferentes maneras:

Manifestaciones y protestas. Consisten en reuniones de personas en un espacio público (plazas, calles)


con el propósito de expresar apoyo o descontento respecto a alguna decisión, evento o sistema político,
social o económico. Suelen organizarse en fechas insignes para el público (como efemérides) e incluir
letreros, pancartas, banderas y otras formas de visibilizar un mensaje o un reclamo.

Huelgas y boicots. Consisten en acciones que hacen frente al sistema político a través de generar
incomodidad en la cotidianidad, deteniendo momentáneamente el flujo del trabajo y la economía.
Generalmente ocurren luego de que varias manifestaciones hayan sido ignoradas, como una forma de
aumentar la presión ejercida por la opinión pública sobre la conducción del país. Las huelgas consisten
en ausencias laborales programadas y transitorias, mientras que los boicots consisten en llamados al
cese del consumo o de la utilización de ciertos bienes y servicios, como método de protesta.

Votaciones, referendos y plebiscitos. Consisten en la participación electoral de la multitud en una


convocatoria institucional (o autoconvocada), para apoyar a un candidato o elegir una opción en una
consulta. En estos eventos la mayoría expresa directa y anónimamente su deseo.

Protestas virtuales. Consisten en manifestaciones realizadas a distancia, empleando los espacios


virtuales y digitales (como las redes sociales) para esparcir y visibilizar un mensaje. Son una forma
relativamente nueva de protesta, permitida por la popularización de las TIC y los espacios 2.0.

Encuestas de opinión. Consisten en instrumentos de medición aplicados por organizaciones públicas o


privadas para sondear lo que la gente piensa a través de una muestra estadística. Estas herramientas
pueden ser más o menos confiables para los distintos sectores y actores políticos y sociales, por lo que
suelen hacerse a menudo y con diferentes métodos de consulta: en persona, telefónicos, digitales, entre
otros.

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