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10 – Sustentabilidad y diseño.

El concepto de sustentabilidad surge en la década de los setenta, ganando


relevancia con eventos como la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio
Ambiente Humano y el Informe Brundtland en 1987. Definido como el desarrollo que
satisface las necesidades actuales sin comprometer las futuras, la sustentabilidad
se convierte en un pilar en políticas ambientales, culminando en eventos como la
declaración de Río de 1992 y el Protocolo de Kyoto en 1997. Más que una mera
práctica ambiental, la sustentabilidad implica una nueva forma de pensar que
reconoce la interconexión entre humanos, cultura y naturaleza.

La emergencia ecológica.

La emergencia ecológica ha llevado a un reconocimiento global de la necesidad de


preservar el medio ambiente. La sustentabilidad busca equilibrar las necesidades
humanas con la capacidad del planeta, apuntando a una vida segura y saludable en
armonía con la naturaleza.
Desde 1977, la capacidad de producción mundial podría satisfacer tres veces la
población actual, brindando la oportunidad de erradicar la pobreza y crear
consumidores. El Manifiesto del M.I.T. destaca la "sustentabilidad de la empresa",
proponiendo indicadores nuevos y reorganización en aspectos medioambientales,
culturales, sociales y personales.
La sustentabilidad abarca todas las facetas de la vida en la Tierra. En un mundo de
abundancia, la redistribución se convierte en una cuestión logística. Los mercados,
aunque criticados, pueden ser vehículos para soluciones creativas. Los diseñadores
desempeñan un papel crucial en este nuevo paradigma, generando productos
adecuados y explorando oportunidades de negocios.

Mercado de carbono.

En 1997, el "Protocolo de Kyoto" estableció compromisos para reducir emisiones de


gases de efecto invernadero. Surgió el mercado de carbono, permitiendo a países
vender excedentes de reducciones a través de mecanismos como el "Mecanismo de
Desarrollo Limpio" y la "Aplicación Conjunta". Este mercado movió 64 mil millones
de dólares en 2006.
La "Huella de carbono" cuantifica emisiones y es crucial para reducir la
contaminación. Empresas pueden comprar "Bonos Verdes" o toneladas de CO2
para compensar emisiones excedentes. Este enfoque busca impulsar la
sostenibilidad y se vuelve cada vez más importante, especialmente en países
europeos.
¿Cómo funciona el mercado de carbono?

El mercado de carbono es un enfoque para reducir costos de control de la


contaminación mediante incentivos económicos. Los Créditos de Reducción de
Emisión (C.R.E.) reconocen acciones que reducen emisiones y se pueden
comerciar o reservar. Empresas pueden compensar emisiones adquiriendo y
retirando créditos de otras. Este modelo, aunque eficiente, recibe críticas por
cambiar la contaminación geográficamente. Ejemplo: el mercado ruso. Empresas
occidentales compran créditos de emisión de compañías rusas, a pesar de tener
tecnología anticuada. Este sistema permite a individuos y empresas compensar
emisiones adquiriendo y retirando créditos sin emitir contaminación.

Paradojas.

La globalización, aunque se presenta como inclusiva, a menudo opera a través de la


exclusión, generando paradojas. A pesar de la necesidad de preservar la diversidad
para dinamizar la sociedad, la globalización tiende a homogeneizar el mercado,
evidente en la uniformidad de los hipermercados.
El paradigma económico global busca la inclusión mediante el aumento del
consumo, pero la sostenibilidad depende de la creación de empleos sustentables.
Frente a la competencia, se propone la reconversión y capacitación.
Los medios de comunicación influyen en agendas diarias centradas en trivialidades,
limitando la reflexión profunda. En este equilibrio entre diversidad y uniformidad, la
globalización enfrenta la paradoja de necesitar diversidad para conquistar poder,
pero también contribuir a la homogeneización del mercado.
Preservar la diversidad es vital para la conquista de poder en el mundo globalizado.
Esta tarea requiere conciencia, acción estratégica y responsabilidad de individuos y
grupos sociales, configurando una hoja de ruta consciente para considerar las
necesidades actuales y futuras generaciones.
El diseño y la sustentabilidad.

El diseño desempeña un papel clave en la sustentabilidad, equilibrando las


necesidades humanas con la preservación ambiental. Para lograrlo, se deben
considerar los siguientes factores:

• Uso eficiente de materiales: Reducir volumen y diversidad, evitar


sustancias tóxicas y elegir materiales renovables o reciclados.

• Desmaterialización: Buscar formas multifuncionales de ofrecer beneficios a


través de productos o servicios.

• Diseño para el desmontaje: Facilitar la reparación, remanufactura o


reciclaje mediante diseño modular y materiales inteligentes.

• Gestión de la energía: Controlar generación y consumo, priorizando


energías renovables y extrayendo energía de residuos.

• Extensión de vida: Mantener productos y materiales en uso productivo para


retardar el flujo lineal de materiales.

• Reducción del transporte: Minimizar el transporte para disminuir la huella


ambiental.

La sustentabilidad implica adoptar un enfoque integral, considerando el ciclo de vida


del producto, promoviendo el consumo responsable y fomentando prácticas
empresariales socialmente responsables. La colaboración multidisciplinaria y
soluciones globales son esenciales para abordar los desafíos ambientales.

El rol del diseñador.

La consolidación comercial de productos "ecológicos" ha sido limitada a pesar de la


relevancia académica del diseño sustentable. Se cuestiona si los diseñadores están
integrándose adecuadamente en equipos multidisciplinarios y si las guías de diseño
ecológico son apropiadas. La colaboración con diversas disciplinas se considera
esencial.

• Desafíos del Ecodiseño: El diseño ecológico se centra en productos y


servicios, limitando la colaboración de los diseñadores con otras disciplinas.
Se destaca la necesidad de abordar problemas sociales subyacentes para
lograr un impacto ambiental positivo.
• La Otra Sustentabilidad: La conexión emocional entre el consumidor y el
producto se logra a través de la interacción y la apariencia. Se enfatiza la
importancia de comprender las necesidades emocionales de los
consumidores mediante técnicas etnográficas y diseño multi-sensorial.

• El Diseño Multi-Sensorial: El enfoque multi-sensorial busca estimular todas


las capacidades sensoriales humanas para crear experiencias de uso
significativas. La inclusión de la experiencia de uso en el diseño sustentable
se considera crucial para atraer a los consumidores.

• Vision Estrategica Sustentable: La visión estratégica sustentable busca


soluciones integrales que equilibren el impacto social, ambiental y
económico. Se destaca la importancia de mejorar la calidad de vida presente
y futura sin comprometer el bienestar del medio ambiente a largo plazo.

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