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¿Qué es la propiedad intelectual?

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La propiedad intelectual (P.I.) se relaciona con las creaciones de la mente: invenciones,


obras literarias y artísticas, así como símbolos, nombres e imágenes utilizados en el
comercio.

La legislación protege la P.I., por ejemplo, mediante las patentes, el derecho de autor y
las marcas, que permiten obtener reconocimiento o ganancias por las invenciones o
creaciones. Al equilibrar el interés de los innovadores y el interés público, el sistema de P.I.
procura fomentar un entorno propicio para que prosperen la creatividad y la innovación.

• ¿Qué es la P.I.?
• Entender el derecho de autor y los derechos conexos ǀ Entender la propiedad industrial
• WIPO Intellectual Property Handbook - Una guía detallada sobre políticas, normas y uso
de la P.I.
• Principios básicos del derecho de autor y los derechos conexos
• Autor(es): OMPI | Año de publicación: 2016

• Tipo de licencia:


• Este folleto sirve de introducción a quienes no están familiarizados con el tema del
derecho de autor y los derechos conexos. En él se explican los fundamentos en los
que se basa la normativa y la práctica del derecho de autor, y se describen los
distintos tipos de derechos que protege la legislación de derecho de autor y
derechos conexos, así como las limitaciones respecto de dichos derechos.
Asimismo, se examinan brevemente la cesión del derecho de autor y las
disposiciones en materia de observancia.
Caso práctico: la creación del Patent Troll (secuestrador de patentes) por el artista Bob
MacNeil. (Fotografía: Bob MacNeil)
Temas y cuestiones sobre derecho de autor
El derecho de autor concierne a la vida diaria. Las cuestiones de derecho de autor están
presentes cuando se lee un libro, se mira una película, se transfiere música o se toma una
fotografía. Temas y cuestiones sobre el derecho de autor.

Reseña del Tratado de la OMPI sobre Derecho de Autor (WCT) (1996)

El Tratado de la OMPI sobre Derecho de Autor (WCT) es un arreglo particular adoptado en


virtud del Convenio de Berna que trata de la protección de las obras y los derechos de sus
autores en el entorno digital. Aunque no estén obligadas por dicho Convenio, las Partes
Contratantes en el Arreglo deberán cumplir con las disposiciones sustantivas del Acta de
1971 (París) del Convenio de Berna para la Protección de las Obras Literarias y Artísticas
(1886) (véase la reseña correspondiente de esta serie). Además, el WCT menciona
dos objetos de protección por derecho de autor: i) los programas de ordenador, con
independencia de su modo o forma de expresión, y ii) las compilaciones de datos u otros
materiales ("bases de datos") en cualquier forma, que por razones de la selección o
disposición de su contenido constituyen creaciones de carácter intelectual. (Cuando la
base de datos no constituya una creación de esa índole, está fuera del alcance del
presente Tratado).
En cuanto a los derechos concedidos a los autores al margen de los derechos reconocidos
por el Convenio de Berna, el Tratado también confiere: i) el derecho de distribución, ii) el
derecho de alquiler y iii) un derecho más amplio de comunicación al público.
• El derecho de distribución es el derecho a autorizar la puesta a disposición del público
del original y los ejemplares de la obra mediante venta u otra transferencia de
propiedad.
• El derecho de alquiler es el derecho a autorizar el alquiler comercial al público del
original y las copias de tres tipos de obras: i) los programas de ordenador (excepto
cuando el programa propiamente dicho no sea el objeto esencial del alquiler); ii) las
obras cinematográficas (pero únicamente cuando el alquiler comercial haya dado lugar
a una copia generalizada de dicha obra que menoscabe considerablemente el derecho
exclusivo de reproducción); y iii) las obras incorporadas en fonogramas, tal como lo
establezca la legislación nacional de las Partes Contratantes (excepto para los países
que desde el 15 de abril de 1994 aplican un sistema de remuneración equitativa
respecto de ese alquiler).
• El derecho de comunicación al público es el derecho a
autorizar cualquier comunicación al público por medios alámbricos o inalámbricos,
comprendida "la puesta a disposición del público de sus obras, de tal forma que los
miembros del público puedan acceder a estas obras desde el lugar y en el momento
que cada uno de ellos elija". La expresión citada abarca, en particular, la comunicación
interactiva y previa solicitud por Internet.
En cuanto a las limitaciones y excepciones, en el artículo 10 del WCT se incorpora la
llamada "regla de los tres pasos" para la determinación de las limitaciones y excepciones
con arreglo a lo dispuesto en el párrafo 2 del artículo 9 del Convenio de Berna, que
extiende su aplicación a todos los derechos. En las Declaraciones concertadas que
acompañan al WCT se estipula que esas limitaciones y excepciones, establecidas en la
legislación nacional de conformidad con el Convenio de Berna, podrán hacerse extensivas
al entorno digital. Los Estados Contratantes podrán formular nuevas excepciones y
limitaciones adecuadas al entorno digital. Se permite la ampliación de las limitaciones y
excepciones existentes, o la creación de otras nuevas, siempre que se cumplan las
condiciones de la regla de los tres pasos.
En cuanto a la duración, la protección debe durar, como mínimo, 50 años para cualquier
tipo de obra.
El goce y el ejercicio de los derechos contemplados en el Tratado no estará subordinado a
ninguna formalidad.

El Tratado obliga a las Partes Contratantes a prever recursos jurídicos que permitan evitar
los actos dirigidos a neutralizar las medidas técnicas de protección (por ejemplo, el cifrado)
de que se valen los autores en relación con el ejercicio de sus derechos y evitar asimismo
la supresión o modificación de información, tales como ciertos datos que identifican las
obras o sus autores, la cual es necesaria para la gestión de sus derechos (por ejemplo, la
concesión de licencias y la recaudación y distribución de las regalías) ("información sobre
la gestión de derechos").

El Tratado obliga a las Partes Contratantes a adoptar, de conformidad con su


ordenamiento jurídico, las medidas necesarias para garantizar su aplicación. En particular,
todas las Partes Contratantes deberán velar por que en la legislación nacional existan
procedimientos de observancia que permitan adoptar medidas eficaces contra los actos
de infracción de los derechos previstos en el Tratado. Dichas medidas deberán incluir
recursos ágiles para evitar las infracciones, así como otros recursos que constituyan un
medio eficaz de disuasión para nuevas infracciones.

El Tratado establece una Asamblea de las Partes Contratantes cuya función principal
radica en tratar las cuestiones relativas al mantenimiento y el desarrollo del Tratado, y
encomienda a la Secretaría de la OMPI las labores administrativas relacionadas con él.

El WCT fue adoptado en 1996 y entró en vigor en marzo de 2002.

Pueden adherirse al Tratado los Estados miembros de la OMPI y de la Unión Europea.


Incumbe a la Asamblea constituida en virtud del Tratado decidir la admisión de otras
organizaciones intergubernamentales. Los instrumentos de ratificación o de adhesión
deben depositarse en poder del Director General de la OMPI.

Derecho de autor

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¿Qué es el derecho de autor?


En la terminología jurídica, la expresión “derecho de autor” se utiliza para describir los
derechos de los creadores sobre sus obras literarias y artísticas. Las obras que se prestan a
la protección por derecho de autor van desde los libros, la música, la pintura, la escultura
y las películas hasta los programas informáticos, las bases de datos, los anuncios
publicitarios, los mapas y los dibujos técnicos.

¿Qué puede protegerse por derecho de autor?


La legislación no suele contener una lista exhaustiva de las obras que ampara el derecho
de autor. No obstante, en términos generales, entre las obras habitualmente protegidas
por el derecho de autor en todo el mundo están las siguientes:

• las obras literarias como las novelas, los poemas, las representaciones escénicas, las
obras de referencia, los artículos periodísticos;
• los programas informáticos y las bases de datos;
• las películas, las composiciones musicales y las coreografías;
• las obras artísticas como los cuadros, los dibujos, las fotografías y las esculturas;
• la arquitectura; y
• los anuncios, los mapas y los dibujos técnicos.
La protección del derecho de autor abarca solo las expresiones, pero no las ideas,
procedimientos, métodos de operación o conceptos matemáticos en sí. El derecho de
autor puede amparar o no elementos como los títulos, los lemas o logotipos, dependiendo
de que la paternidad de la obra sea suficiente.

¿Qué derechos se prevén en el marco del derecho de autor? ¿De qué derechos goza el
autor de una obra? ↓
El derecho de autor abarca dos tipos de derechos:

• los derechos patrimoniales, que permiten que el titular de los derechos obtenga
compensación financiera por el uso de sus obras por terceros; y
• los derechos morales, que protegen los intereses no patrimoniales del autor.
En la mayoría de los casos, en la legislación de derecho de autor se estipula que el titular
de los derechos goza del derecho patrimonial a autorizar o impedir determinados usos de
la obra o, en algunos casos, a recibir una remuneración por el uso de la obra (por ejemplo,
por medio de la gestión colectiva). El titular de los derechos patrimoniales de una obra
puede prohibir o autorizar:
• la reproducción de su obra de varias formas, como la publicación impresa o la
grabación sonora;
• la interpretación o ejecución públicas, por ejemplo en una obra dramática o musical;
• la grabación de la obra, por ejemplo en forma de discos compactos o DVD;
• la radiodifusión de la obra por radio, cable o satélite;
• la traducción de la obra a otros idiomas; y
• la adaptación de la obra, como en el caso de una novela adaptada para un guión.
Entre los ejemplos de derechos morales universalmente reconocidos están el derecho a
reivindicar la paternidad de la obra y el derecho a oponerse a toda modificación de la obra
que pueda perjudicar la reputación del creador.

¿Se registra el derecho de autor?


En la mayoría de los países, y conforme a lo que se dispone en el Convenio de Berna, la
protección del derecho de autor se obtiene automáticamente sin necesidad de efectuar
ningún registro ni otros trámites.
No obstante, en la mayoría de los países existe un sistema de registro y depósito
facultativo de obras; estos sistemas facilitan, por ejemplo, las aclaraciones de las
controversias relacionadas con la titularidad o la creación, las transacciones financieras,
las ventas, las cesiones y transferencias de derechos.

La OMPI no cuenta con un sistema de registro del derecho de autor ni con una base de
datos de derecho de autor que permita realizar búsquedas. Consulte más información
sobre los sistemas de registro y catalogación en el ámbito del derecho de autor.

preguntas frecuentes: Derecho de autor

Conceptos básicos

¿Qué es el derecho de autor?


En la terminología jurídica, la expresión “derecho de autor” se utiliza para describir los
derechos de los creadores sobre sus obras literarias y artísticas. Las obras que se prestan a
la protección por derecho de autor van desde los libros, la música, la pintura, la escultura
y las películas hasta los programas informáticos, las bases de datos, los anuncios
publicitarios, los mapas y los dibujos técnicos

¿Qué puede protegerse por derecho de autor?


La legislación no suele contener una lista exhaustiva de las obras que ampara el derecho
de autor. No obstante, en términos generales, entre las obras habitualmente protegidas
por el derecho de autor en todo el mundo están las siguientes:

• las obras literarias como las novelas, los poemas, las representaciones escénicas, las
obras de referencia, los artículos periodísticos;
• los programas informáticos y las bases de datos;
• las películas, las composiciones musicales y las coreografías;
• las obras artísticas como los cuadros, los dibujos, las fotografías y las esculturas;
• la arquitectura; y
• los anuncios, los mapas y los dibujos técnicos.
La protección del derecho de autor abarca solo las expresiones, pero no las ideas,
procedimientos, métodos de operación o conceptos matemáticos en sí. El derecho de
autor puede amparar o no elementos como los títulos, los lemas o logotipos, dependiendo
de que la paternidad de la obra sea suficiente.

¿Qué derechos se prevén en el marco del derecho de autor? ¿De qué derechos goza el
autor de una obra?
El derecho de autor abarca dos tipos de derechos:

• los derechos patrimoniales, que permiten que el titular de los derechos obtenga
compensación financiera por el uso de sus obras por terceros; y
• los derechos morales, que protegen los intereses no patrimoniales del autor.
En la mayoría de los casos, en la legislación de derecho de autor se estipula que el titular
de los derechos goza del derecho patrimonial a autorizar o impedir determinados usos de
la obra o, en algunos casos, a recibir una remuneración por el uso de la obra (por ejemplo,
por medio de la gestión colectiva). El titular de los derechos patrimoniales de una obra
puede prohibir o autorizar:
• la reproducción de su obra de varias formas, como la publicación impresa o la
grabación sonora;
• la interpretación o ejecución públicas, por ejemplo en una obra dramática o musical;
• la grabación de la obra, por ejemplo en forma de discos compactos o DVD;
• la radiodifusión de la obra por radio, cable o satélite;
• la traducción de la obra a otros idiomas; y
• la adaptación de la obra, como en el caso de una novela adaptada para un guión.
Entre los ejemplos de derechos morales universalmente reconocidos están el derecho a
reivindicar la paternidad de la obra y el derecho a oponerse a toda modificación de la obra
que pueda perjudicar la reputación del creador.
¿Se registra el derecho de autor?
En la mayoría de los países, y conforme a lo que se dispone en el Convenio de Berna, la
protección del derecho de autor se obtiene automáticamente sin necesidad de efectuar
ningún registro ni otros trámites.
No obstante, en la mayoría de los países existe un sistema de registro y depósito
facultativo de obras; estos sistemas facilitan, por ejemplo, las aclaraciones de las
controversias relacionadas con la titularidad o la creación, las transacciones financieras,
las ventas, las cesiones y transferencias de derechos.

La OMPI no cuenta con un sistema de registro del derecho de autor ni con una base de
datos de derecho de autor que permita realizar búsquedas. Consulte más información
sobre los sistemas de registro y catalogación en el ámbito del derecho de autor.

¿Qué se entiende por “obra”?


En el contexto del derecho de autor, la palabra “obra” se emplea para referirse a una
amplia gama de creaciones intelectuales, desde las novelas hasta las obras arquitectónicas,
pasando por los programas informáticos, etcétera. Para consultar una lista más detallada
de obras que pueden protegerse por derecho de autor, remítase a la pregunta “¿Qué se
puede proteger por derecho de autor?”.

¿Qué significa el símbolo ©? ¿Lo debo incorporar en mi obra?


Hace años había países cuya legislación estipulaba que el titular del derecho de autor
tenía que cumplir determinadas formalidades para recibir protección por derecho de
autor. Una de esas formalidades era incluir una indicación en el sentido de que se
reivindicaba el derecho de autor, por ejemplo, el símbolo ©. En la actualidad, muy pocos
países imponen formalidades en materia de derecho de autor, y por consiguiente, el uso
de ese tipo de símbolos ha dejado de ser un requisito legal. No obstante, muchos titulares
de derechos siguen incluyendo el símbolo © como forma muy visible de poner de relieve
que la obra está protegida por derecho de autor y que todos los derechos están
reservados, a diferencia de una licencia menos restrictiva.

¿Cuánto dura la protección por derecho de autor?


Los derechos patrimoniales tienen una duración determinada que varía de una legislación
nacional a otra. En los Estados parte en el Convenio de Berna, el plazo es, como mínimo,
de 50 años contados a partir de la muerte del creador de la obra. En algunas legislaciones
nacionales se prevén plazos de protección más largos. Para más información, póngase
en contacto con la oficina de P.I. de su país o consulte la legislación nacional en WIPO Lex.

Protección de la obra

¿Se puede proteger una obra a nivel internacional mediante el derecho de autor?
En primer lugar, la protección por derecho de autor es automática en todos los Estados
parte en el Convenio de Berna (remítase a la pregunta “¿Se puede registrar el derecho de
autor?”). Aunque la legislación nacional de cada uno de esos Estados tenga matices
propios, en líneas generales existe un alto grado de armonía. Consulte las legislaciones
nacionales y los tratados en WIPO Lex.
En cuanto a los Estados que no son parte en el Convenio de Berna, cabe recordar que la
legislación de derecho de autor es de naturaleza territorial. Dicho de otro modo, se aplica
en el país en el que haya sido promulgada. De ahí que, si se desea proteger una obra a
nivel internacional, hay que cerciorarse de cumplir los requisitos legales pertinentes del
país o de los países en los que se desea proteger la obra.

¿Qué significa “conceder una licencia” sobre una obra y cómo se concede una licencia?
El titular de los derechos sobre una obra puede dar autorización a terceros para que
utilicen o exploten dicha obra. Esas autorizaciones suelen denominarse “licencias” y
pueden exigir o no una retribución del titular de los derechos. Lógicamente, a la hora de
negociar un contrato de licencia se recomienda solicitar asesoramiento jurídico.

Si desea conceder licencias sobre sus obras a usuarios tales como organismos de
radiodifusión, editores, o incluso establecimientos recreativos, desde bares a clubes
nocturnos, una buena solución podría consistir en hacerse socio de un organismo de
gestión colectiva. Los organismos de gestión colectiva supervisan el uso de las obras en
nombre de los creadores y se encargan de negociar licencias y recaudar regalías. Dichos
organismos son particularmente frecuentes en el ámbito de las obras musicales y literarias
en las que puede haber un gran número de usuarios de la misma obra y resultaría difícil,
tanto a los usuarios como al titular de los derechos, obtener la autorización específica
para cada utilización, y supervisar las distintas utilizaciones.

¿Se puede proteger un programa informático o una aplicación de teléfono móvil por
derecho de autor?
A los efectos del derecho de autor, los programas informáticos y otros tipos
de software se consideran obras literarias. Por consiguiente, quedan automáticamente
protegidos sin necesidad de ser registrados. En algunos países, el proceso de registro
voluntario de los programas informáticos o software puede diferir del relativo a otros
tipos de obras.

¿Existe un registro o depósito de derecho de autor?


No existe un registro internacional de obras protegidas por derecho de autor que pueda
consultarse.

Las razones de ello residen en que, por norma general, la protección del derecho de autor
es automática y no depende de registro alguno. Sin embargo, en algunos países existe un
registro o depositario voluntario del derecho de autor y es aconsejable registrar allí su
obra pues ello le puede ser de gran ayuda, por ejemplo, en caso de litigio acerca de la
paternidad de la obra.

Aunque no repercuta en la protección por derecho de autor, hay países que exigen el
depósito de muestras del material impreso publicado en los países en cuestión. Para más
información, póngase en contacto con la oficina de P.I. de su país.

¿Qué se puede hacer si una obra publicada ha sido reproducida sin autorización de su
autor?
Antes de tomar medidas hay que evaluar detenidamente si la reproducción constituye de
verdad una infracción del derecho de autor (remítase a la pregunta sobre limitaciones y
excepciones relativas al derecho de autor). Si considera usted que han infringido sus
derechos, debe tratar de identificar al responsable de ese acto. Si no se puede o no
conviene resolver el problema por medios informales, puede solicitarse reparación legal a
un tribunal u otra autoridad.
Por lo general es posible interponer una demanda ante un tribunal civil para obtener
compensación financiera y también para impedir que se siga produciendo la infracción. No
obstante, antes de tomar esa iniciativa, se recomienda, e incluso es obligatorio en algunos
Estados, enviar primero una notificación oficial al presunto infractor, pidiéndole que
ponga fin a sus actos y/o pague una compensación.

También puede suceder que la reproducción no autorizada constituya un delito de


piratería del derecho de autor; en ese caso, puede interponerse una demanda ante la
policía, la fiscalía u otra autoridad competente, en función de la legislación local aplicable.

En algunos casos, los mecanismos de solución extrajudicial de controversias (como la


mediación, el arbitraje, la decisión de expertos, la evaluación imparcial, etc.) pueden ser
una opción válida en comparación con los procedimientos judiciales, por cuanto pueden
zanjarse con un arreglo del litigio por medios más sencillos, rápidos y económicos.
Si la reproducción no autorizada de la obra se ha puesto a disposición por Internet, puede
notificarse el hecho al correspondiente proveedor de servicios por Internet, y pedir a este
último que impida el acceso a la copia ilegal. Ese procedimiento es conocido como
procedimiento de “notificación y retirada”.

Si es usted miembro de un organismo de gestión colectiva, con frecuencia basta con pedir
a dicho organismo que tome las medidas adecuadas. De lo contrario, tendrá que
arreglárselas para intervenir y proteger sus derechos. En esos casos, se suele aconsejar el
recurso a un abogado para que actúe en nombre del afectado.

¿Cómo se gestionan las obras protegidas por derecho de autor? ¿Qué son los
organismos de gestión colectiva?
Los organismos de gestión colectiva supervisan el uso de las obras en nombre de los
creadores y se encargan de negociar licencias y recaudar regalías. Dichos organismos son
particularmente frecuentes en el ámbito de las obras musicales y literarias en las que
puede haber un gran número de usuarios de la misma obra y resultaría difícil, tanto a los
usuarios como al titular de los derechos, obtener la autorización específica para cada
utilización, y supervisar las distintas utilizaciones.

¿Dónde puedo consultar la legislación de derechos de autor de un país?

Utilizar las obras de terceros

¿A quién pertenece el derecho de autor de una obra? Si se crea una obra como
empleado, en el marco de una relación de trabajo, ¿a quién pertenece el derecho de
autor?
Por lo general, el titular del derecho de autor sobre una obra es el creador original o el
autor de la obra. Sin embargo, hay excepciones a esta norma. En algunos países, por
ejemplo, los derechos patrimoniales derivados de una obra protegida por derecho de
autor se atribuyen desde el principio a la persona/organización que emplea al creador. En
otros países, los derechos patrimoniales se ceden o transfieren automáticamente al
empleador. Póngase en contacto con la oficina de P.I. de su país para más información
sobre la situación del país que le interese concretamente.

¿Hace falta obtener autorización para utilizar una obra protegida por derecho de autor?
Por lo general, para utilizar una obra protegida se precisa autorización (se trate de una
licencia o de una cesión de derechos). Para determinados usos, puede que la autorización
se reciba de un organismo de gestión colectiva en lugar de obtenerla directamente del
titular del derecho, por ejemplo, para una autorización a fin de utilizar una canción en un
concierto público.
No se precisa obtener autorización ninguna respecto de una obra protegida si se da una
de estas dos circunstancias:

• Puede haber limitaciones y excepciones en el plano nacional, que permitan hacer uso
de la obra.
• A veces, las obras están a disposición del público con arreglo a condiciones específicas o
licencias que permiten ciertos usos. Al utilizar dichas obras hay que prestar atención a
las condiciones específicas de las licencias a fin de saber exactamente lo que permite y
no permite el titular de los derechos. También existen licencias de uso común, como la
licencia Creative Commons, la licencia MIT, la licencia pública Mozilla y muchas otras.
Si no está seguro, lo mejor es consultar con un abogado de propiedad intelectual.

¿Cómo identificar y ponerse en contacto con el titular del derecho de autor sobre una
obra?
Como la mayoría de los países no imponen formalidades para la concesión de protección
por derecho de autor, a veces es difícil ubicar al titular de los derechos sobre una obra.
Para localizar al titular de los derechos de una obra específica en un territorio, lo mejor es
ponerse en contacto con el autor o el editor, o con el organismo de gestión colectiva, el
registro local de obras o la oficina nacional de derecho de autor. Esos organismos cuentan
a veces con bases de datos muy valiosos sobre la titularidad de obras protegidas por
derecho de autor.
Los organismos de gestión colectiva también pueden ayudar a obtener autorización del
titular del derecho de autor sobre una obra. Para dar con el organismo de gestión
colectiva pertinente, cabe consultar la base de datos en línea del Collecting Societies
Handbook (proyecto conjunto de la OMPI y Baker & McKenzie).

¿Qué se entiende por limitaciones y excepciones al derecho de autor?


En algunos casos se puede utilizar las obras que no están en el dominio público sin tener
que pedir autorización o remunerar al autor o el titular de los derechos. Eso puede
suceder si esos usos son objeto de limitaciones y excepciones conforme a lo dispuesto en
la legislación nacional. Entre los ejemplos de limitaciones y excepciones están:
• la cita de obras;
• el uso de noticias del día; o
• la creación de formatos accesibles para las personas con dificultades para acceder al
texto impreso.
Más información sobre las limitaciones y excepciones.

¿Qué se entiende por “uso leal”?


Hay divergencias entre los sistemas jurídicos, en el sentido de que en algunos sistemas se
cuenta con una lista clara de limitaciones y excepciones al derecho de autor, mientras que
en otros solo hay una cláusula general, que por lo general se conoce como cláusula de
“uso leal” o “actos leales”.

¿Qué significa que una obra esté “en el dominio público”?


Al decir que una obra está en el dominio público (o que es un “bien común”) quiere decir
que la obra ya no tiene titular sobre los derechos de la misma (de los derechos
patrimoniales). Por lo general, ello se debe al hecho de que ha expirado el plazo de
protección de los derechos. Por ejemplo, los derechos patrimoniales sobre el famoso
poema “La Odisea”, de Homero, han prescrito y la obra puede ser utilizada o explotada sin
necesidad de obtener autorización o remunerar al titular de los derechos. En algunos
países, los autores a veces introducen voluntariamente sus obras en el dominio público. A
ese procedimiento se lo conoce como “renuncia voluntaria”. Más información sobre las
obras que están en el dominio público.

¿Se pueden utilizar gratuitamente las obras publicadas en Internet?


Una idea errónea muy generalizada es que las obras publicadas en Internet, incluidas las
plataformas de redes sociales, son de dominio público y, por consiguiente, pueden ser
utilizadas libremente por cualquiera sin autorización del titular del derecho. Toda obra
protegida por derecho de autor o derechos conexos, ya sea una composición musical, un
producto multimedios, un artículo periodístico o una producción audiovisual, cuyo plazo
de protección siga vigente, está protegida, independientemente de que haya sido
publicada en papel o en Internet. En todos los casos se debe, por lo general, obtener la
autorización del titular del derecho antes de su utilización.

A veces, los sitios web contienen una licencia general que estipula que los usuarios
quedan exentos de tener que pedir autorización directa para determinados usos, por
ejemplo, usos no comerciales. En la práctica, en lo que respecta a un texto a disposición
del público en un blog o en un sitio web, por ejemplo, dicho texto no puede utilizarse
salvo que:

• dicho uso esté contemplado en la licencia general concedida en dicho sitio web;
• dicho uso sea objeto de una limitación o excepción al derecho de autor; o
• se haya obtenido autorización.
Análogamente, una pyme precisa autorización si publica o pone a disposición en su sitio
web obras, grabaciones sonoras, emisiones o interpretaciones o ejecuciones protegidas
por derecho de autor.
¿Qué son los derechos conexos o afines?
Los derechos conexos o afines son un conjunto independiente de derechos relacionados
con el derecho de autor que se otorgan a determinas personas o entidades que
contribuyen a poner las obras a disposición del público. Los beneficiarios de los derechos
conexos en las legislaciones nacionales suelen ser los artistas intérpretes y ejecutantes, los
productores de fonogramas y los organismos de radiodifusión.

Esas mismas condiciones se aplican a determinadas personas y entidades que hayan


producido objetos que, aunque no se consideren obras en virtud de los sistemas de
derechos de autor en algunos países, contengan suficiente creatividad y capacidad técnica
y organizativa para merecer la concesión de un derecho similar al derecho de autor.

Ahora bien, en algunas legislaciones se deja claro que el ejercicio de los derechos conexos
no debe afectar en modo alguno a la protección del derecho de autor.
Reseña del Convenio de Berna para la Protección de las Obras Literarias y Artísticas
(1886)

El Convenio de Berna trata de la protección de las obras y los derechos de los autores. Se
funda en tres principios básicos y contiene una serie de disposiciones que determinan
la protección mínima que ha de conferirse, así como las disposiciones especiales para
los países en desarrolloque quieran valerse de ellas.
1) Los tres principios básicos son los siguientes:
a) Las obras originarias de uno de los Estados Contratantes (es decir, las obras cuyo autor
es nacional de ese Estado o que se publicaron por primera vez en él) deberán ser objeto,
en todos y cada uno de los demás Estados Contratantes, de la misma protección que
conceden a las obras de sus propios nacionales (el principio del "trato nacional") [1].
b) La protección no deberá estar subordinada al cumplimiento de formalidad alguna
(principio de la protección "automática") [2].
c) La protección es independiente de la existencia de protección en el país de origen de la
obra (principio de la "independencia" de la protección). Empero, si en un Estado
Contratante se prevé un plazo más largo de protección que el mínimo prescrito por el
Convenio, y cesa la protección de la obra en el país de origen, la protección podrá negarse
en cuanto haya cesado en el país de origen [3].
2) Las condiciones mínimas de protección se refieren a las obras y los derechos que han
de protegerse, y a la duración de la protección:
a) En lo que hace a las obras, la protección deberá extenderse a "todas las producciones
en el campo literario, científico y artístico, cualquiera que sea el modo o forma de
expresión" (párrafo 1 del artículo 2 del Convenio).

b) Con sujeción a ciertas reservas, limitaciones o excepciones permitidas, los siguientes


son algunos de los derechos que deberán reconocerse como derechos exclusivos de
autorización:

 el derecho a traducir,
 el derecho de realizar adaptaciones y arreglos de la obra,
 el derecho de representar y ejecutar en público las obras dramáticas, dramático–
musicales y musicales,
 el derecho de recitar en público las obras literarias,
 el derecho de transmitir al público la representación o ejecución de dichas obras,
 el derecho de radiodifundir (los Estados Contratantes cuentan con la posibilidad
de prever un simple derecho a una remuneración equitativa, en lugar de un
derecho de autorización),
 el derecho de realizar una reproducción por cualquier procedimiento y bajo
cualquier forma (los Estados Contratantes podrán permitir, en determinados casos
especiales, la reproducción sin autorización, con tal que esa reproducción no
atente contra la explotación normal de la obra ni cause un perjuicio injustificado a
los intereses legítimos del autor y, en el caso de grabaciones sonoras de obras
musicales, los Estados Contratantes podrán prever el derecho a una remuneración
equitativa),
 el derecho de utilizar la obra como base para una obra audiovisual y el derecho
de reproducir, distribuir, interpretar o ejecutar en público o comunicar al público
esa obra audiovisual [4].
Asimismo, el Convenio prevé "derechos morales", es decir, el derecho de reivindicar la
paternidad de la obra y de oponerse a cualquier deformación, mutilación u otra
modificación de la misma o a cualquier atentado a la misma que cause perjuicio al honor o
la reputación del autor.
c) Por lo que respecta a la duración de la protección, el principio general es que deberá
concederse la protección por el plazo de los 50 años posteriores a la muerte del autor. Sin
embargo, existen excepciones a ese principio general. En el caso de obras anónimas o
seudónimas, el plazo de protección expirará 50 años después de que la obra haya sido
lícitamente hecha accesible al público, excepto cuando el seudónimo no deja dudas sobre
la identidad del autor o si el autor revela su identidad durante ese período; en este último
caso, se aplicará el principio general. En el caso de las obras audiovisuales
(cinematográficas), el plazo mínimo de protección es de 50 años después de que la obra
haya sido hecha accesible al público ("exhibida") o, si tal hecho no ocurre, desde la
realización de la obra. En el caso de las obras de artes aplicadas y las obras fotográficas, el
plazo mínimo es de 25 años contados desde la realización de la obra [5].
3) El Convenio de Berna permite ciertas limitaciones y excepciones en materia de
derechos económicos, es decir, los casos en que las obras protegidas podrán utilizarse sin
autorización del propietario del derecho de autor y sin abonar una compensación.
Generalmente se utiliza el término "libre utilización" de obras protegidas para referirse a
esas limitaciones, y figuran en el párrafo 2) del artículo 9 (reproducción en determinados
casos especiales), el artículo 10 (citas y uso de obras a título de ilustración de la
enseñanza), el artículo 10bis (reproducción de artículos de periódicos o artículos similares
y el uso de obras con fines de información sobre acontecimientos actuales) y el párrafo 3)
del artículo 11bis (grabaciones efímeras con fines de radiodifusión).
4) En el Anexo del Acta de París del Convenio se permite así mismo que los países en
desarrollo apliquen licencias no voluntarias para la traducción y reproducción de obras en
determinados supuestos en el contexto de actividades de enseñanza. En estos casos, se
permite la utilización descrita sin la autorización del titular del derecho con sujeción al
pago de una remuneración que se establecerá en la legislación.

La Unión de Berna se ha dotado de una Asamblea y de un Comité Ejecutivo. Forman la


Asamblea los países miembros de la Unión que se hayan adherido, por lo menos, a las
disposiciones administrativas y las cláusulas finales del Acta de Estocolmo. A su vez, los
miembros del Comité Ejecutivo se eligen entre quienes pertenecen a la Unión, a excepción
de Suiza, que es miembro de oficio.

Corresponde a la Asamblea la función de establecer el presupuesto bienal por programas


de la Secretaría de la OMPI en lo que concierne a la Unión de Berna.
Adoptado en 1886, el Convenio de Berna fue revisado en París (1896) y en Berlín (1908),
completado en Berna en 1914 y revisado nuevamente en Roma (1928), en Bruselas (1948),
en Estocolmo (1967) y en París (1971), y por último, fue objeto de enmienda en 1979.

Pueden adherirse al Convenio todos los Estados. Los instrumentos de ratificación o de


adhesión deben depositarse en poder del Director General de la OMPI [6].

[1] En virtud del Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual
relacionados con el Comercio (Acuerdo sobre los ADPIC), los principios del trato nacional,
la protección automática y la independencia de la protección obligan también a los
Miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) que no son parte en el
Convenio de Berna. Además, el Acuerdo sobre los ADPIC impone una obligación de "trato
de la nación más favorecida", en virtud del cual las ventajas que un miembro de la OMC
confiere a los nacionales de otro país también deberán conferirse a los nacionales de
todos los demás Miembros de la OMC. Cabe observar que la posibilidad de aplazar la
aplicación del Acuerdo sobre los ADPIC no se aplica a las obligaciones relativas al trato
nacional y al trato de la nación más favorecida.
[2] Idem.
[3] Idem.
[4] En virtud del Acuerdo sobre los ADPIC, deberá reconocerse un derecho exclusivo de
alquiler sobre los programas de ordenador y, en ciertas condiciones, de las obras
audiovisuales.
[5] En virtud del Acuerdo sobre los ADPIC, el plazo de protección que se calcule sobre una
base distinta de la vida de una persona física deberá ser de no menos de 50 años contados
desde la primera publicación autorizada de la obra o, a falta de tal publicación, dentro del
plazo de los 50 años posteriores a la realización de la obra. Sin embargo, este principio no
se aplica a las obras fotográficas o de artes aplicadas.
[6] Cabe señalar que los Miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) están
obligados a observar las disposiciones legales de naturaleza sustantiva recogidas en el
Convenio de Berna, aunque no sean parte en éste. Sin embargo, quedan exonerados en lo
que respecta a las disposiciones sobre los derechos morales.
Patentes

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¿Qué es una patente?


Una patente es un derecho exclusivo que se concede sobre una invención. En términos
generales, una patente faculta a su titular a decidir si la invención puede ser utilizada por
terceros y, en ese caso, de qué forma. Como contrapartida de ese derecho, en el
documento de patente publicado, el titular de la patente pone a disposición del público la
información técnica relativa a la invención.

Preguntas frecuentes: Patentes

Conceptos básicos
¿Qué es una patente?
Una patente es un derecho exclusivo que se concede sobre una invención. Es decir, una
patente es un derecho exclusivo que se concede sobre un producto o un proceso que, por
lo general, ofrece una nueva manera de hacer algo o una nueva solución técnica a un
problema. Para obtener una patente, hay que presentar una solicitud en la que se
divulgue públicamente información técnica acerca de la invención.

El titular de la patente puede autorizar o conceder una licencia a terceros para que
utilicen su invención, de conformidad con unas condiciones mutuamente convenidas. El
titular puede, asimismo, ceder el derecho a la invención a un tercero, que se convertirá así
en el nuevo titular de la patente. Cuando vence la patente, finaliza la protección conferida
y la invención pasa al dominio público; en otras palabras, la invención se puede explotar
comercialmente sin infringir la patente.

¿Qué derechos confiere una patente?


El titular de una patente tiene derecho a decidir quién puede utilizar la invención
patentada durante el período de protección. Dicho de otro modo, la protección por
patente significa que una invención no se puede producir, usar ni distribuir con fines
comerciales, ni tampoco vender, sin que medie el consentimiento del titular de la patente.

¿Qué invenciones se pueden proteger?


Se pueden conceder patentes sobre invenciones de cualquier sector de la tecnología,
desde un utensilio de cocina de uso diario hasta un chip de nanotecnología. Una invención
puede ser un producto —como un compuesto químico— o un proceso —por ejemplo, un
proceso para producir un compuesto químico específico—. De hecho, muchos productos
comprenden varias invenciones. Por ejemplo, una computadora portátil puede estar
compuesta por cientos de invenciones que funcionan conjuntamente.

¿Cuánto dura la protección que confiere una patente?


La protección por patente se concede por un período limitado, que suele ser de 20 años
contados a partir de la fecha de presentación de la solicitud.

¿La patente tiene validez en todo el mundo?


Las patentes son derechos territoriales. Por lo general, los derechos exclusivos
correspondientes solo tienen validez en el país o la región en los que se ha presentado la
solicitud y se ha concedido la patente, de conformidad con la normativa de ese país o
región.

¿Cómo se hacen valer los derechos de patente?


Por lo general, la observancia de los derechos de patente se hace respetar en los
tribunales a iniciativa del titular de la patente. En la mayoría de los sistemas, los tribunales
tienen atribuciones para impedir las infracciones de la patente. No obstante, la
responsabilidad de supervisar, detectar y tomar medidas contra los infractores de una
patente recae principalmente en el titular de la patente.

¿Qué implica “conceder una licencia de patente” y por qué se conceden licencias?
Conceder una licencia de patente significa, simplemente, que el titular de la patente
autoriza a otro particular u organización a fabricar, utilizar o vender su invención
patentada. Esta concesión se realiza de conformidad con unas condiciones (por ejemplo,
la cuantía y el tipo de pago que el licenciatario satisfará al licenciante), para un propósito
concreto, en un territorio determinado y durante un período de tiempo convenido.

El titular de la patente puede conceder una licencia a un tercero por muchas razones. Por
ejemplo, puede carecer de las instalaciones necesarias para fabricar la invención
patentada y, en consecuencia, optar por permitir que otros la fabriquen y vendan a
cambio de pagos de regalías. Otra posibilidad es que el titular de la patente disponga de
instalaciones para su fabricación, pero que estas no sean lo suficientemente grandes para
abarcar la demanda del mercado. En este caso, el titular puede estar interesado en
conceder una licencia de la patente a otro fabricante a fin de obtener una nueva fuente de
ingresos. Otra situación factible consiste en que el titular de la patente desee
concentrarse en un mercado geográfico; por consiguiente, el titular de la patente puede
decidir conceder una licencia a otro particular u organización, con intereses en otros
mercados geográficos. La suscripción de un acuerdo de licencia puede contribuir a forjar
una relación comercial beneficiosa para todas las partes.

El licenciante continúa teniendo derechos de propiedad sobre la invención patentada, a


diferencia de lo que ocurre al vender o transferir una patente a otra parte.

¿Por qué son útiles las patentes (para la sociedad, las empresas, los particulares, etc.)?
Las invenciones patentadas están presentes en todos los aspectos de la vida humana,
desde la luz eléctrica (patentes de Edison y Swan) y el plástico (patentes de Baekeland),
hasta los bolígrafos (patentes de Biro) y los microprocesadores (por ejemplo, las patentes
de Intel).
Las patentes brindan incentivos y protección a las personas en la medida en que ofrecen
un reconocimiento a su creatividad y les dan la posibilidad de obtener una recompensa
material por sus invenciones. Al mismo tiempo, la publicación obligatoria de patentes y
solicitudes de patente facilita la difusión mutuamente provechosa de nuevos
conocimientos y agiliza las actividades de innovación al evitar, por ejemplo, la necesidad
de “reinventar la rueda”.

Una vez que los conocimientos son de disponibilidad pública, se prestan, por su condición,
a ser utilizados simultáneamente por un número ilimitado de personas. Y aunque sin duda
esto es totalmente aceptable para los fines de información pública, plantea un dilema con
respecto a la comercialización de conocimientos técnicos. Dada la falta de protección de
dichos conocimientos, cualquier oportunista podría utilizarlos en invenciones sin
reconocer la creatividad del inventor ni contribuir a las inversiones efectuadas por este.
Como es natural, los inventores se sentirían desalentados a introducir nuevas invenciones
en el mercado y se esforzarían por mantener en secreto las invenciones de valor comercial.
Los sistemas de patentes pretenden corregir esta escasez de actividades innovadoras al
proporcionar derechos exclusivos limitados a los innovadores, concediéndoles de este
modo la posibilidad de recibir ingresos apropiados por sus actividades innovadoras.

En un sentido más amplio, la divulgación pública de los conocimientos técnicos que se


hace en la patente y el derecho exclusivo que concede la patente constituyen incentivos
para la competencia, en el sentido de buscar soluciones alternativas e inventar partiendo
de la primera invención. Esos incentivos y la difusión de conocimientos sobre nuevas
invenciones fomentan la innovación, lo que a su vez garantiza que aumente
constantemente la calidad de vida y el bienestar de la sociedad.

Solicitudes de protección por patente

¿Qué condiciones deben cumplirse para obtener la protección por patente?


Para obtener una patente deben satisfacerse numerosas condiciones que es imposible
recopilar en una lista exhaustiva de aplicación universal. No obstante, entre las
condiciones más importantes cabe destacar las siguientes:

• la invención debe presentar un elemento de novedad, es decir, una característica


nueva que no forme parte del cuerpo de conocimientos existente en su ámbito técnico.
Ese cuerpo de conocimientos se llama "estado de la técnica".
• La invención debe implicar actividad inventiva o "no evidente", lo que significa que no
podría ser deducida por una persona de nivel medio del mismo ámbito técnico.
• La invención debe ser susceptible de aplicación industrial, es decir, debe poder
utilizarse con fines industriales o comerciales sin limitarse a ser un fenómeno
meramente teórico, o a ser útil.
• La materia objeto de la invención debe considerarse “patentable” conforme a la
legislación. En muchos países, las teorías científicas, las creaciones estéticas, los
métodos matemáticos, las variedades vegetales o animales, los descubrimientos de
sustancias naturales, los métodos comerciales o los métodos para el tratamiento
médico (a diferencia de los productos médicos) y los programas informáticos no suelen
ser patentables.
• La invención debe divulgarse por medio de una solicitud de una forma lo
suficientemente clara y completa para permitir su reproducción por una persona de
nivel medio del mismo ámbito técnico.

¿Quién concede la patente?


La patente es concedida por una oficina nacional de patentes o por una oficina regional
que se encargue de esa labor en nombre de varios países. En la actualidad, se encuentran
en funcionamiento las siguientes oficinas regionales de patentes:

• la Organización Africana de la Propiedad Intelectual (OAPI);


• la Organización Regional Africana de la Propiedad Intelectual (ARIPO)
• la Organización Eurasiática de Patentes (EAPO);
• la Oficina Europea de Patentes (OEP),
• la Oficina de Patentes del Consejo de Cooperación de los Estados Árabes del Golfo
(Oficina de Patentes CCG)
Con arreglo a estos sistemas regionales, un solicitante solicita protección para una
invención en uno o más Estados miembros de la organización regional en cuestión. La
oficina regional acepta las solicitudes de patente, que surten los mismos efectos que las
solicitudes nacionales, o concede patentes cuando se cumplen todos los criterios para la
concesión de una patente regional.

Por el momento no existe ningún sistema universal e internacional de concesión de


patentes.

¿Es necesario contratar los servicios de un abogado o agente de patentes para preparar
y presentar una solicitud de patente?
En general, los solicitantes pueden encargarse de preparar y presentar sus solicitudes sin
intervención de un abogado de patentes. No obstante, dada la complejidad de los
documentos de patente y los conocimientos jurídicos necesarios para ocuparse, entre
otras cosas, de la redacción de las reivindicaciones, es sumamente recomendable procurar
asistencia jurídica de un abogado o agente de patentes al elaborar la solicitud.

Además, en la legislación de muchos países se exige que el solicitante cuyo lugar de


residencia habitual o domicilio social se halle fuera del país esté representado por un
abogado o agente homologado en el país (lo que habitualmente quiere decir que se trata
de un agente o abogado que reside y ejerce en el país). En las oficinas nacionales y
regionales de propiedad intelectual se puede solicitar información sobre abogados y
agentes homologados.

¿Cuánto cuesta patentar una invención?


Los costos varían notablemente de un país a otro (e incluso dentro de un mismo país).
Dado que las tasas oficiales varían mucho de un país a otro, cabe dirigirse a la oficina
nacional o regional de patentes correspondiente para obtener información más detallada
sobre el baremo de tasas. Consulte nuestra lista de oficinas naciones y regionales de
propiedad intelectual.
Los costos de patentar una invención dependen de factores como la naturaleza de la
invención, su complejidad, los honorarios del abogado de patentes, la longitud de la
solicitud y las objeciones que se planteen durante el examen por la oficina de patentes. En
algunos países se ofrecen descuentos a las pequeñas y medianas empresas y a quienes
presentan la solicitud por internet. En otros países se ofrece la posibilidad de realizar un
examen acelerado previo pago de tasas adicionales.

Además de las tasas oficiales de presentación que se aplican en cada país, una vez que la
oficina de patentes concede la patente hay que pagar tasas de mantenimiento o de
renovación, por lo general una vez por año, a fin de mantener en vigor la patente.

Si se decide patentar la invención en otro país, debe tenerse presente el costo de las tasas
oficiales de presentación de solicitudes que se aplican en cada país de interés, los costos
de traducción y los honorarios de los agentes de patentes locales, a los que los solicitantes
extranjeros deben recurrir según se dispone en muchos países.

¿Se puede obtener una patente válida en todo el mundo?


Por el momento, no se puede obtener una “patente mundial” ni una “patente
internacional” universal. Las patentes son derechos territoriales. Por lo general, la
solicitud de patente debe presentarse en cada país en el que se desea obtener protección
por patente para la invención, y de conformidad con lo que se disponga en la legislación
de cada país. Por tanto, una forma de obtener patentes en varios países consiste
en presentar una solicitud nacional de patente en cada oficina nacional de patentes de
interés..
En algunas regiones existen oficinas regionales de patentes, por ejemplo, la Oficina
Europea de Patentes (OEP) y la Organización Regional Africana de la Propiedad Intelectual
(ARIPO), que aceptan solicitudes regionales de patente y conceden patentes. Dichas
patentes surten los mismos efectos que las solicitudes presentadas o las patentes
concedidas en los Estados miembros de esa región. Esto significa que, en determinadas
regiones, se puede obtener una patente regional de una oficina regional de patentes, que
es válida en varios de sus Estados miembros o en todos ellos.
Si se pretende obtener la protección por patente en varios países del mundo, una opción
adecuada es presentar una solicitud internacional en virtud del Tratado de Cooperación
en materia de Patentes (PCT), gestionado por la OMPI. Cualquier residente o ciudadano de
un Estado parte del PCT(Estado contratante) puede presentar una solicitud internacional
única que surte el efecto de una solicitud nacional de patente (y de determinadas
solicitudes regionales de patente) en varios de los Estados contratantes del PCT o en todos
ellos. En algunos casos, esta opción puede ser más sencilla que optar por presentar
solicitudes por separado en todos los países en los que se pretende obtener la
protección. Consulte más información sobre el Sistema del PCT.

¿Qué medidas prácticas deben adoptarse para obtener la protección por patente?
El primer paso para obtener una patente es presentar una solicitud. Muchas oficinas de
patentes facilitan un formulario específico para su cumplimentación. Algunas oficinas
ofrecen la posibilidad de presentar las solicitudes por internet.

En la solicitud de patente, por lo general, debe figurar el título de la invención e indicarse


su ámbito técnico. Deben incluirse los antecedentes y una descripción de la invención en
un lenguaje claro y suficientemente detallado para que una persona con un nivel medio
de conocimientos en la materia pueda utilizar o reproducir la invención. Esa descripción
suele estar acompañada de material ilustrativo, como dibujos, planos o diagramas, en los
que se describe con mayor detalle la invención, y de un resumen con una breve reseña de
la invención. Asimismo, en el apartado de “reivindicaciones” de la solicitud de patente,
debe indicarse de forma clara y concisa la razón por la que se solicita la protección por
patente.

Además, en función de la legislación sobre patentes aplicable, podrá ser necesario


presentar distintos tipos de informes, declaraciones o documentos justificativos a la
oficina de patentes. Dada su complejidad, se recomienda consultar a un abogado o agente
de patentes para preparar la solicitud de patente.

¿Qué sucede después de presentar la solicitud?


Los procedimientos varían considerablemente de un país a otro, por lo que resulta
imposible ofrecer un resumen exhaustivo y detallado. Si se desea consultar por separado
la legislación en materia de patentes de un país, la base de datos WIPO Lex ofrece acceso
a legislación sobre propiedad intelectual de todo el mundo.
No obstante, se recomienda consultar con un abogado especialista en propiedad
intelectual o con la oficina correspondiente. Consulte nuestro directorio de oficinas
naciones y regionales de propiedad intelectual.

¿Se puede impugnar la concesión de una patente?


La concesión de una patente se puede impugnar por conducto de una oficina de patentes
o por vía judicial. Los tribunales pueden invalidar o revocar una patente si la impugnación
presentada por un tercero resulta fundada. Además, en muchas oficinas de patentes se
aplican procedimientos administrativos que permiten que terceros se opongan a la
concesión de una patente (incluidos los “sistemas de oposición”), por ejemplo, sobre la
base de que la invención reivindicada no es nueva o no implica actividad inventiva.

Los procedimientos de impugnación de patentes difieren de un país a otro. Consulte más


información sobre los sistemas de oposición (en inglés).

¿Se puede pedir una ampliación del plazo de protección por patente?
En varios países se ofrece la posibilidad de ampliar el plazo de protección por patente, y
en algunos casos muy específicos se puede obtener un certificado complementario de
protección. Con la ampliación del plazo se pretende compensar el tiempo invertido en el
procedimiento administrativo de aprobación antes de que los productos puedan salir al
mercado. El tiempo invertido en ese procedimiento implica, en algunos casos, que el
titular de la patente no pueda hacer valer su derecho durante un período de tiempo
considerable después de la concesión de la patente.

¿Se puede obtener una patente respecto de una invención relacionada con un programa
informático?
Se puede patentar una aplicación
¿Cómo se pueden buscar invenciones que ya se han patentado?
Dónde se pueden consultar las legislaciones nacionales en materia de patentes?

Confidencialidad

¿Se puede obtener una patente y mantener la invención en secreto?


No. Las oficinas de patentes otorgan las patentes a cambio de la divulgación plena de la
invención. Por lo general, la información sobre la invención se publica posteriormente y
pasa a estar disponible para el público en general.

Debe tenerse en cuenta que la publicación se puede realizar en distintas fases del
procedimiento. En algunos países, el documento de patente en el que figuran las
reivindicaciones de la patente y la descripción de la invención se publica únicamente en el
momento de la concesión. En otros, las solicitudes de patente se publican generalmente
18 meses después de la fecha de presentación o, en los casos en que se ha reivindicado la
prioridad, de la fecha de prioridad (para más información, consúltese el sitio web de
la oficina nacional de propiedad intelectual correspondiente).

Puedo exponer en detalle mi invención a un inversor potencial antes de presentar la


solicitud de patente?

Las patentes y las empresas

¿Qué interés ofrecen las patentes para las empresas?


A pesar de que es cierto que no todas las empresas desarrollan invenciones patentables,
existe la falsa idea de que las patentes únicamente se aplican a complejos procesos y
productos físicos y químicos, o que únicamente resultan útiles para las grandes empresas.
En realidad, puede obtenerse una patente en cualquier esfera de la tecnología, y eso
abarca desde un clip hasta una computadora.

Asimismo, la mayoría de las personas suele asociar las patentes con los grandes
descubrimientos científicos, como la primera lámpara eléctrica de Edison, o con grandes
empresas que invierten importantes cantidades de dinero en investigación y desarrollo.
No obstante, la mayoría de las patentes no se conceden para grandes descubrimientos
científicos, sino para invenciones que perfeccionan invenciones existentes. Por ejemplo,
para la segunda o tercera generación de un producto o proceso, que funciona de una
forma más económica o eficiente.
Varios países cuentan con disposiciones específicas para la protección de innovaciones
adicionales. Se denominan modelos de utilidad tienden a tener una duración inferior que
las patentes y generalmente son más fáciles de obtener.

¿Por qué conviene patentar una invención?


• Derechos exclusivos: las patentes otorgan el derecho exclusivo de impedir o poner fin a
la explotación comercial de la invención durante 20 años contados a partir de la fecha
de presentación de la solicitud de patente
• Rendimiento de las inversiones: al haber invertido considerables sumas de dinero y
mucho tiempo para concebir un producto innovador, gracias a los derechos exclusivos
que confiere la patente es posible adquirir una posición de prestigio en el mercado y
obtener un rendimiento superior de la inversión.
• Posibilidad de conceder una licencia o vender la invención: si el titular de la patente
decide no explotar la patente por sus propios medios, podrá venderla o conceder una
licencia en favor de otra empresa para que la comercialice, pudiéndose constituir en
una fuente de ingresos para su titular.
• Aumento del poder de negociación: si una empresa está gestionando la adquisición de
derechos para utilizar las patentes de otra empresa, por medio de un contrato de
licencia, la cartera de patentes de la empresa compradora potenciará su poder de
negociación. Eso significa que una patente puede cobrar un interés considerable para la
empresa con la que se está negociando y puede suscribirse un acuerdo de licencias
cruzadas en virtud del cual, y por explicarlo con palabras sencillas, dos empresas
convienen en una concesión de licencias sobre las respectivas patentes.
• Imagen positiva de la empresa: los socios, los inversores y los accionistas pueden
considerar que las carteras de patentes son una expresión del excelente nivel de
conocimientos técnicos, especialización y capacidad tecnológica que posee una
empresa. Ello puede resultar de utilidad para captar inversiones, encontrar socios
comerciales y aumentar el valor de mercado de la empresa.

¿Qué sucede si no se patenta una invención?


Si no se patenta una invención, es posible que los competidores se aprovechen de ella. Si
el producto tiene éxito, muchas empresas de la competencia se verán tentadas a fabricar
el mismo producto utilizando la invención sin necesidad de pedir autorización. Las grandes
empresas pueden aprovechar las economías de escala para fabricar el producto a costos
más reducidos y competir a un precio de mercado más favorable. Es posible que esto
reduzca de manera considerable la cuota de mercado de la empresa titular de la invención
en relación con ese producto. Incluso las pequeñas empresas de la competencia pueden
fabricar el mismo producto y a menudo venderlo a un precio inferior, ya que no tendrían
que recuperar la inversión en investigación y desarrollo en la que incurrió inicialmente la
empresa titular de la invención.

Pero eso no es todo. Las posibilidades de negociar licencias respecto de una tecnología,
venderla o transferirla serán muy limitadas si no se patenta la invención; de hecho, sin
derechos de propiedad intelectual (patente), la transferencia de tecnología resultará difícil,
si no imposible. La transferencia de tecnología presupone que una o más partes tienen la
titularidad jurídica de una tecnología y que esta solo puede obtenerse si se ha protegido
adecuadamente la propiedad intelectual. Si la tecnología en cuestión no está protegida
por propiedad intelectual, durante las negociaciones acerca de la transferencia de esa
tecnología ninguna de las partes se atreverá a divulgar sus invenciones por temor a que la
contraparte pueda “huir con la invención”.

Por último, debe tenerse en cuenta la posibilidad de que otra persona puede patentar la
invención antes. La primera persona o empresa que presente una solicitud de patente
sobre una invención tendrá derecho a obtener una patente. Esto puede generar una
situación en la que si una persona no patenta sus invenciones o si el titular del derecho no
patenta las invenciones de sus empleados, un tercero —que podría haber desarrollado
posteriormente la misma invención o una invención equivalente— podrá patentar esa
invención y, por ende, podría excluir legítimamente del mercado a la empresa del inventor
inicial, limitar sus actividades a la continuación del uso anterior (si la legislación en materia
de patentes pertinente prevé dicha excepción) o solicitar el pago de regalías por el uso de
la invención.

Sin embargo, para procurar que nadie pueda patentar la invención del inventor original,
en lugar de cumplimentar una solicitud de patente, puede divulgarse públicamente la
invención a fin de que represente el estado de la técnica para todas las solicitudes de
patente que se cumplimenten después de su publicación, colocándola en el dominio
público (lo que se conoce como publicación preventiva). Debido a la existencia de
ese estado de la técnica, las oficinas de patentes rechazarán las solicitudes de patente
cumplimentadas posteriormente con la misma invención o con una invención similar por
falta de novedad o actividad inventiva. Al mismo tiempo, si la invención se divulga antes
de presentar una solicitud de patente, las posibilidades de obtener la protección por
patente sobre esa invención se verán seriamente limitadas.

¿Cómo se conceden licencias de patente a terceros?


Cada situación es única, por lo que no existe ninguna forma “correcta” de proceder al
conceder licencias de patente. En algunos países, se puede publicar en el boletín oficial la
intención del solicitante de una patente de conceder una licencia a terceros. Para obtener
más información al respecto, póngase en contacto con su oficina nacional de propiedad
intelectual.
No obstante, en general se puede señalar que, si se pretende conceder una licencia de
patente, lo importante es la preparación diligente. Antes de comenzar las negociaciones
con los eventuales licenciatarios, debe recopilarse información sobre la situación actual y
las perspectivas futuras del mercado y la tecnología correspondientes. Asimismo, debe
averiguarse la situación comercial de los eventuales licenciatarios, el valor financiero
asociado a la patente, etc. Se deben analizar los objetivos comerciales y se debe estudiar
detalladamente si la suscripción de un acuerdo de licencia encaja en las estrategias
comerciales a corto y largo plazo.

¿Los modelos de utilidad y los secretos comerciales son alternativas a la protección por
patente?
En muchos casos, cuando una empresa se limita a mejorar un producto existente y dicha
mejora no acarrea la suficiente actividad inventiva para poder ser considerada patentable,
los modelos de utilidad pueden representar una buena alternativa, si están disponibles en
el país de que se trate. A veces, será conveniente que una empresa mantenga sus
innovaciones como secretos comerciales, lo que exige, en particular, que se tomen
medidas suficientes para que la información mantenga carácter confidencial.
Una estrategia alternativa podría ser procurar que nadie pueda patentarla mediante la
divulgación de la invención (lo que se conoce como publicación preventiva), colocándola
de esa forma en el dominio público. Sin embargo, cabe reflexionar detenidamente antes
de valerse de esa estrategia, pues si se divulga la invención antes de presentar una
solicitud de patente, al mismo tiempo se limitarán seriamente las posibilidades de obtener
la protección por patente.

Si un empleado inventa un nuevo producto o proceso: ¿a quién corresponden los


derechos sobre la patente?
En la mayoría de los países, si un empleado ha creado una invención en el marco de un
contrato de trabajo, es decir, por lo general, durante su horario de trabajo en la empresa,
la invención (y los derechos de patente correspondientes) pertenecerá a la empresa. Para
evitar confusión y eventuales litigios, los empleadores suelen especificar en los contratos
de trabajo las cuestiones de propiedad intelectual. Sin embargo, según el caso, el
empleado podrá tener derecho a una remuneración equitativa de conformidad con las
disposiciones de la legislación o su contrato de trabajo. De todos modos, el empleado
conservará siempre el derecho a ser mencionado como inventor, a menos que haya
renunciado expresamente a él.

Información contenida en las patentes

¿Qué es la información contenida en las patentes?


La información contenida en las patentes hace referencia, por lo general, a la información
que figura en las solicitudes de patente y en las patentes concedidas. Esta información
puede incluir datos bibliográficos sobre el inventor y el solicitante o el titular de la patente,
una descripción de la invención reivindicada y los avances relacionados en el sector de la
tecnología, y una lista de reivindicaciones que indican el alcance de la protección por
patente pedida por el solicitante.

¿Por qué los solicitantes de patentes declaran toda esta información acerca de sus
invenciones? La razón radica en que, en el sistema de patentes, los derechos exclusivos
concedidos al titular de la patente sobre una invención se equilibran con la obligación de
divulgar información públicamente sobre la nueva tecnología desarrollada.

Este requisito de que el solicitante de la patente divulgue información es muy importante


para el desarrollo continuo de la tecnología. Dicha información sirve de referencia para
que otros inventores puedan desarrollar nuevas soluciones técnicas. Sin su publicación, el
público no tendría ninguna posibilidad de obtener información acerca de los nuevos
avances técnicos. Por lo tanto, no sorprende que hoy en día dar información al público sea
uno de los principales cometidos de las oficinas de propiedad industrial.

¿Por qué es importante la información contenida en las patentes?


Los documentos de patentes incluyen información tecnológica que no se suele divulgar en
otros tipos de publicación, y abarcan prácticamente todos los sectores de la tecnología. Se
presentan en un formato relativamente normalizado y están clasificados por sectores de
la técnica para distinguir los documentos pertinentes con mayor facilidad (para más
información, véase "Información general sobre la Clasificación Internacional de
Patentes” ). En conjunto, existe un amplio repositorio de conocimientos humanos de
fácil acceso:
La práctica ha demostrado que la información contenida en los documentos de patentes
puede ser muy valiosa para investigadores, emprendedores y muchos otros agentes, al ser
de utilidad para:

• evitar la duplicación de actividades de investigación y desarrollo;


• perfeccionar y mejorar productos o procesos existentes;
• analizar el estado de la técnica en un sector determinado de la tecnología, p. ej., para
conocer los avances más recientes en ese sector;
• evaluar la patentabilidad de las invenciones, en particular la novedad y la actividad
inventiva de las invenciones (criterios importantes para determinar su patentabilidad),
con el objeto de solicitar la protección por patente a nivel nacional o en el exterior;
• reconocer las invenciones protegidas por patentes, en particular para evitar
infracciones y buscar oportunidades de obtener licencias
• controlar las actividades de socios y competidores potenciales tanto en el país como en
el exterior, y
• hallar nichos de mercado o descubrir nuevas tendencias en la tecnología o el desarrollo
de un producto en una etapa temprana

¿Dónde se puede encontrar información sobre patentes?


¿Cómo se puede saber más sobre la información contenida en las patentes?

La OMPI y las patentes

¿Qué función desempeña la OMPI con respecto a las patentes?


La OMPI trabaja para desarrollar un sistema equilibrado y eficaz de propiedad intelectual
de ámbito internacional, del que una parte fundamental está dedicado a las patentes. Los
Estados miembros de la OMPI colaboran en distintas esferas, en particular en lo que
respecta a alcanzar acuerdos sobre los tratados y los convenios que respaldan el sistema
de propiedad intelectual y posibilitan el intercambio mundial de creatividad e innovación.
Los servicios de propiedad intelectual que presta la OMPI, como la facilitación de
protección internacional por patente en virtud del Sistema del PCT, complementan los
servicios disponibles a nivel nacional o regional. Conviene recordar que la OMPI no
concede patentes per se; la decisión de conceder o rechazar una patente sigue siendo
competencia de la oficina nacional o regional de patentes.
Qué es una marca?

Una marca es un signo que permite diferenciar los productos o servicios de una empresa
de los de otra. Las marcas son derechos de P.I. protegidos.

¿Cómo puede protegerse una marca? ↓


En el plano nacional o regional, una marca puede protegerse registrándola, esto es,
presentando una solicitud de registro en la oficina nacional o regional de marcas y
abonando las tasas correspondientes. En el plano internacional, existen dos opciones:
presentar una solicitud de marca en la oficina de marcas de cada uno de los países en que
se quiera obtener protección o utilizar el sistema de Madrid.

¿Qué derechos confiere el registro de marcas? ↓


En principio, el registro de marca confiere al titular el derecho exclusivo a utilizarla. Es
decir, la marca podrá ser utilizada exclusivamente por el titular, o ser concedida en
licencia a un tercero a cambio de un pago. El registro de marca ofrece seguridad jurídica y
refuerza la condición del titular del derecho, por ejemplo, en caso de litigio.

¿Cuánto dura la protección de una marca? ↓


El período de validez del registro de una marca puede variar, pero normalmente es de diez
años, renovable indefinidamente abonando tasas adicionales. Los derechos de marca son
derechos privados cuya protección se hace valer en los tribunales.

¿Qué tipos de marcas pueden registrarse? ↓


Las marcas pueden consistir en una palabra o una combinación de palabras, letras y cifras.
Pueden consistir asimismo en dibujos, símbolos, características tridimensionales, como la
forma y el embalaje de los productos, signos no visibles, como sonidos, fragancias o tonos
de color utilizados como características distintivas; las posibilidades son casi ilimitad

Reseña del Convenio de París para la Protección de la Propiedad Industrial (1883)

El Convenio de París se aplica a la propiedad industrial en su acepción más amplia, con


inclusión de las patentes, las marcas de productos y servicios, los dibujos y modelos
industriales, los modelos de utilidad (una especie de "pequeña patente" establecida en la
legislación de algunos países), las marcas de servicio, los nombres comerciales (la
denominación que se emplea para la actividad industrial o comercial), las indicaciones
geográficas (indicaciones de procedencia y denominaciones de origen) y la represión de la
competencia desleal.

Las disposiciones fundamentales del Convenio pueden dividirse en tres categorías


principales: trato nacional, derecho de prioridad y normas comunes.
1) En virtud de las disposiciones sobre el trato nacional, el Convenio establece que, en lo
que se refiere a la protección de la propiedad industrial, los Estados Contratantes deberán
conceder a los nacionales de los demás Estados Contratantes la misma protección que
concede a sus propios nacionales. También tendrán derecho a esa protección los
nacionales de los Estados que no sean contratantes, siempre que estén domiciliados o
tengan establecimiento industrial o comercial efectivo y serio en un Estado Contratante.
2) En el Convenio se establece el derecho de prioridad en relación con las patentes (y
modelos de utilidad, donde existan), las marcas y los dibujos y modelos industriales.
Significa ese derecho que, con arreglo a una primera solicitud de patente de invención o
de registro de la marca que sea presentada en uno de los Estados Contratantes, el
solicitante podrá, durante determinado período de tiempo (12 meses para las patentes y
los modelos de utilidad y seis meses para los dibujos y modelos industriales y las marcas),
solicitar la protección en cualquiera de los demás Estados Contratantes; esas solicitudes
posteriores se considerarán presentadas el mismo día de la primera solicitud. Dicho de
otro modo, esas solicitudes posteriores tendrán prioridad (de ahí la expresión "derecho de
prioridad") con respecto a las solicitudes que otras personas puedan presentar durante los
citados plazos por la misma invención, modelo de utilidad, marca o dibujo o modelo
industrial. Además, como se fundan en la primera, dichas solicitudes posteriores no se
verán afectadas por hechos que puedan haber acaecido en el intervalo, como la
publicación de la invención o la venta de artículos que utilicen la marca o en los que se
plasme el dibujo o modelo industrial. Una de las grandes ventajas prácticas de esta
disposición radica en que el solicitante que desea protección en varios países no está
obligado a presentar todas las solicitudes al mismo tiempo, sino que dispone de 6 o 12
meses para decidir en qué países desea la protección y para disponer con todo el cuidado
debido las diligencias necesarias para asegurarse la protección.
3) En el Convenio se establecen además algunas normas comunes a las que deben
atenerse todos los Estados Contratantes. Las más importantes son las siguientes:
a) En relación con las patentes: Las patentes concedidas en los diferentes Estados
Contratantes para la misma invención son independientes entre sí: la concesión de la
patente en un Estado Contratante no obliga a los demás a conceder otra patente; la
patente no podrá ser denegada, anulada, ni considerada caducada en un Estado
Contratante por el hecho de haber sido denegada o anulada o haber caducado en otro.
El inventor tiene derecho a ser mencionado como tal en la patente.
No se podrá denegar la concesión de una patente, y la patente no podrá ser invalidada por
el hecho de que la venta del producto patentado o el producto obtenido por un
procedimiento patentado estén sujetos a restricciones o limitaciones previstas en la
legislación nacional.

El Estado Contratante que tome medidas legislativas que prevean la concesión de licencias
obligatorias para evitar los abusos que podrían derivarse del ejercicio de los derechos
exclusivos conferidos por la patente podrá hacerlo únicamente en determinadas
condiciones. Sólo se podrá conceder la licencia obligatoria (licencia que no concede el
propietario de la patente, sino el órgano competente del Estado de que se trate),
atendiendo a la falta de explotación industrial o explotación insuficiente de la invención
patentada, cuando la solicitud haya sido presentada después de tres años contados desde
la concesión de la patente o después de cuatro años contados desde la fecha de
presentación de la solicitud de patente. Además, la solicitud habrá de ser rechazada si el
titular de la patente justifica su inacción con motivos legítimos. Además, la caducidad de la
patente no podrá ser prevista sino para el caso en que la concesión de licencia obligatoria
no hubiera bastado para impedir el abuso. En este último caso, se podrá entablar el
procedimiento para declarar caducada la patente, pero no antes de que expiren dos años
contados desde la concesión de la primera licencia obligatoria.
b) En relación con las marcas: El Convenio de París no fija las condiciones de presentación
y registro de las marcas, que se rigen por el derecho interno de los Estados Contratantes.
En consecuencia, no se podrá rechazar la solicitud de registro de una marca presentada
por un ciudadano de un Estado Contratante, ni se podrá invalidar el registro, por el hecho
de que no hubiera sido presentada, registrada o renovada en el país de origen. Una vez
obtenido el registro de la marca en el Estado Contratante, la marca se
considera independiente de las marcas que, en su caso, se hayan registrado en otro país,
incluido el propio país de origen; por consiguiente, la caducidad o anulación del registro
de la marca en un Estado Contratante no afecta a la validez de los registros en los demás
Estados Contratantes.
Cuando la marca ha sido debidamente registrada en el país de origen, tiene que ser
admitida para su depósito y protegida en su forma original en los demás Estados
Contratantes, cuando así se solicita. No obstante, se podrá denegar el registro en
supuestos debidamente establecidos, como cuando la marca afecta a derechos adquiridos
por terceros, cuando está desprovista de todo carácter distintivo o es contraria a la moral
o al orden público o de naturaleza tal que pueda engañar al público.
Si en el Estado Contratante fuera obligatoria la utilización de la marca registrada, el
registro no podrá ser anulado por la falta de utilización, sino después de transcurrido un
plazo prudencial y sólo si el interesado no justificase las causas de su inacción.

Los Estados Contratantes están obligados a denegar el registro y a prohibir el uso de una
marca que constituya la reproducción, imitación o traducción, susceptibles de crear
confusión, de otra marca utilizada para productos idénticos o similares y que, a juicio del
órgano competente del respectivo Estado, resultara que es notoriamente conocida en ese
Estado como marca que ya es propiedad de una persona que pueda beneficiarse del
Convenio.
Los Estados Contratantes deberán igualmente rechazar el registro y prohibir el uso de
marcas que contengan, sin permiso, escudos de armas, emblemas de Estado y signos y
punzones oficiales de los Estados Contratantes, siempre que éstos les hayan sido
comunicados por conducto de la Oficina Internacional de la OMPI. Las mismas
disposiciones se aplican a los escudos de armas, banderas y otros emblemas, siglas o
denominaciones de ciertas organizaciones intergubernamentales.
Las marcas colectivas deben estar protegidas.
c) En relación con los dibujos y modelos industriales: Los dibujos y modelos industriales
tienen que estar protegidos en todos los Estados Contratantes, y no se podrá denegar la
protección por el hecho de que los productos a los que se aplique el dibujo o modelo no
sean fabricados en ese Estado.
d) En relación con los nombres comerciales: Los nombres comerciales estarán protegidos
en todos los Estados Contratantes sin obligación de su depósito o de registro.
e) En relación con las indicaciones de procedencia: Los Estados Contratantes deben
adoptar medidas contra la utilización directa o indirecta de indicaciones falsas
concernientes a la procedencia del producto o a la identidad del productor, fabricante o
comerciante.
f) En relación con la competencia desleal: Todos Estados Contratantes están obligados a
asegurar una protección eficaz contra la competencia desleal.
La Unión de París, instituida por el Convenio, se dotó de una Asamblea y de un Comité
Ejecutivo. Forman la Asamblea todos los Estados miembros de la Unión que se hayan
adherido, por lo menos, a las disposiciones administrativas y a las cláusulas finales del
Acta de Estocolmo (1967). A su vez, los miembros del Comité Ejecutivo son elegidos entre
quienes pertenecen a la Unión, excepto en el caso de Suiza, que es miembro de oficio.
Corresponde a la Asamblea establecer el presupuesto bienal por programas de la
Secretaría de la OMPI en lo que respecta a la Unión de París.

Adoptado en 1883, el Convenio de París fue revisado en Bruselas (1900), en Washington


(1911), en La Haya (1925), en Londres (1934), en Lisboa (1958) y en Estocolmo (1967), y,
finalmente, fue enmendado en 1979.

Pueden adherirse al Convenio todos los Estados. Los instrumentos de ratificación o de


adhesión deben depositarse en poder del Director General de la OMPI.
Dibujos y modelos industriales

¿Qué es un dibujo o modelo industrial


Un dibujo o modelo (diseño) industrial constituye el aspecto ornamental o estético de un
artículo. El dibujo o modelo puede consistir en rasgos tridimensionales, como la forma o la
superficie de un artículo, o en rasgos bidimensionales, como motivos, líneas o colores.

¿Qué tipos de productos pueden protegerse como dibujos o modelos industriales?


Los dibujos o modelos industriales se aplican a una amplia variedad de productos de la
industria y la artesanía, que van desde instrumentos técnicos y médicos hasta relojes,
joyas y otros artículos de lujo; desde electrodomésticos y aparatos eléctricos hasta
vehículos y estructuras arquitectónicas, y desde materiales textiles hasta bienes
recreativos.

¿Por qué se protegen los dibujos y modelos industriales?


Los dibujos y modelos industriales hacen que un producto sea atractivo y llamativo; por
consiguiente, aumentan el valor comercial del producto así como sus posibilidades de
venta.

La protección de un dibujo o modelo industrial ayuda a incrementar el rendimiento del


capital invertido. Un sistema eficaz de protección beneficia asimismo a los consumidores y
al público en general, pues fomenta la competencia leal y las prácticas comerciales
honestas.

La protección de los dibujos y modelos industriales contribuye a fomentar el desarrollo


económico, alentando la creatividad en los sectores industriales y manufactureros, y
contribuye a la expansión de la actividad comercial y al fomento de la exportación de
productos nacionales.

¿Cómo se protegen los dibujos y modelos industriales?


En la mayoría de los países, el dibujo o modelo debe registrarse a fin de estar protegido
por la legislación que rige los dibujos y modelos industriales. Dependiendo de la
legislación nacional de que se trate, y del tipo de dibujo o modelo, este también puede
recibir protección como dibujo o modelo no registrado o como obra de arte en virtud del
derecho de autor. En algunos países, coexiste la protección por derecho de autor con la
protección de los dibujos y modelos industriales. En otros, se excluyen mutuamente: una
vez que el titular ha optado por un tipo de protección no podrá acogerse a la otra.

En determinadas circunstancias, un diseño industrial también puede ser objeto de


protección por las leyes de competencia desleal, si bien las condiciones de protección y los
derechos y recursos ofrecidos pueden variar considerablemente.
Preguntas frecuentes: los diseños industriales (también denominados dibujos y modelos
industriales)

Conceptos básicos

¿Qué es un diseño industrial?


Desde el punto de vista jurídico, un diseño industrial constituye el aspecto ornamental o
estético de un artículo.

Un diseño puede consistir en rasgos tridimensionales, como la forma de un artículo, o en


rasgos bidimensionales, como motivos, líneas o colores

¿Qué tipo de protección ofrecen los derechos sobre los diseños industriales?
En principio, el titular de un diseño industrial registrado o de una patente de diseño está
facultado a impedir que terceros fabriquen, vendan o importen artículos que ostenten o
incorporen un dibujo o modelo que sea una copia, o fundamentalmente una copia, del
dibujo o modelo protegido, cuando esos actos se realicen con fines comerciales.

¿Qué tipo de productos pueden beneficiarse de la protección de los diseños industriales?


Los diseños industriales se aplican a una amplia variedad de productos de la industria y la
artesanía: desde envases y contenedores hasta mobiliario y enseres domésticos, equipos
de iluminación y joyas, pasando por aparatos electrónicos y textiles. Los diseños
industriales también pueden servir para símbolos gráficos e interfaces gráficas de usuario,
así como logotipos.

¿Cómo se protegen los diseños industriales?


En la mayoría de los países, un diseño industrial debe estar registrado para gozar de
protección como “diseño registrado” en virtud de la legislación sobre diseños industriales.
En algunos países, los diseños industriales están protegidos en virtud del Derecho de
patentes como “patentes de diseño”.

La legislación sobre diseños industriales de algunos países concede a los “diseños


industriales no registrados” –es decir, sin que sea necesario el registro- un tipo de
protección limitada en el tiempo y el alcance.

En función de la legislación nacional de que se trate y del tipo de diseño, los diseños
industriales pueden asimismo estar protegidos como obras de arte en virtud de la
legislación sobre derecho de autor.

¿Cuánto dura la protección de los diseños industriales?


Los derechos sobre un diseño industrial se conceden por un período limitado. La duración
de la protección de los diseños industriales varía de un país a otro, pero dura, como
mínimo, 10 años. En muchos países, la duración total de la protección se divide en
períodos sucesivos renovables.
¿Cómo se hacen valer los derechos sobre un diseño industrial?
Habitualmente, los derechos sobre un diseño industrial se hacen valer en un tribunal, por
lo general por iniciativa del titular de los derechos, según disponga la legislación aplicable.
Los recursos y sanciones varían de un país a otro y pueden ser de índole civil
(mandamiento judicial para poner fin a una infracción, resarcimiento de daños y perjuicios,
etcétera), penal o administrativa.

¿Cuál es la diferencia entre los derechos que confieren un diseño industrial y una
patente?
El derecho sobre un diseño industrial protege solo el aspecto o las características estéticas
de un producto, mientras que una patente protege una invención que ofrece una nueva
solución técnica a un problema. En principio, un derecho sobre un diseño industrial no
protege las características técnicas o funcionales de un producto que, sin embargo,
podrían quedar protegidas por una patente. Más información sobre las patentes.

Solicitar protección para un diseño industrial

¿Qué condiciones deben satisfacerse para obtener protección para un diseño industrial?
En función de la legislación aplicable, los diseños industriales creados de forma
independiente deben cumplir los dos requisitos siguientes, o tan solo uno de ellos:
novedad y originalidad.

La evaluación de la novedad y la originalidad varía de un país a otro. Por lo general, se


considera que un diseño industrial es nuevo si no ha sido divulgado previamente al
público, y puede considerarse original si difiere significativamente de diseños conocidos o
de combinaciones de características de diseños conocidos.

¿Quién se encarga de registrar diseños industriales o conceder patentes de diseño?


Por lo general, se encarga de registrar un diseño industrial o conceder una patente de
diseño la oficina de propiedad intelectual del país (la región) en la que se presenta la
solicitud. Puede consultarse una lista de las oficinas nacionales/regionales de propiedad
intelectual.

¿Es necesaria la intervención de un agente para presentar una solicitud?


En función de la legislación aplicable, una solicitud de registro de un diseño industrial o de
concesión de una patente de diseño podrá presentarse personalmente o será preciso
nombrar un agente.

¿Cuánto cuesta obtener protección para un diseño industrial?


Habida cuenta de que el costo de solicitar protección varía de un país a otro, convendrá
contactar a la oficina de propiedad intelectual nacional (regional) para informarse acerca
de la estructura de tasas. Si se desea solicitar protección en el exterior, además de las
tasas corrientes de presentación de una solicitud, deberán tenerse en cuenta los costos de
traducción y de contratación de un agente local.

Consultar la lista de oficinas nacionales/regionales de propiedad intelectual.


La protección de un diseño industrial concedida en un país ¿es válida en otros?
Los derechos sobre los diseños industriales son territoriales. Ello significa que esos
derechos se limitan al país (o la región) en la que se concedió la protección.

¿Cómo puedo obtener protección para un diseño industrial en otros países?


Actualmente, no existe un derecho “mundial” o “internacional” sobre los diseños
industriales..

Por lo general, para obtener protección en otros países, debe presentarse una solicitud de
registro de diseño industrial o de concesión de una patente de diseño industrial en cada
uno de los países en los que se desea obtener la protección, de conformidad con la
legislación del país de que se trate. Dicho de otra forma, si se desea obtener protección en
los países A y B, deberá presentarse una solicitud ante la oficina de propiedad intelectual
(P.I.) del país A y otra solicitud ante la oficina de P.I. del país B.

Para evitar la necesidad de presentar solicitudes en cada uno de los países en que se
solicita la protección, el Sistema de La Haya de la OMPI ofrece una solución práctica para
registrar hasta 100 diseños en un gran número de territorios –todo ello mediante la
presentación de una única solicitud internacional. Más información sobre el Sistema de La
Haya.
En determinadas regiones, también es posible obtener la protección de los diseños
industriales en la región de que se trate, mediante la presentación de una solicitud ante
una oficina regional de propiedad intelectual. Es el caso, por ejemplo, de la Organización
Africana de la Propiedad Intelectual (OAPI), que registra los diseños industriales en los
Estados parte del Arreglo de Bangui; la Organización Regional Africana de la Propiedad
Intelectual (ARIPO), que registra los diseños industriales en los Estados parte en el
Acuerdo de Lusaka; la Oficina de Propiedad Intelectual del Benelux (BOIP), que registra los
diseños industriales en los tres países del “Benelux”; y la Oficina de Propiedad Intelectual
de la Union Europea (EUIPO), que registra los diseños industriales en los Estados
miembros de la Unión Europea.

¿En la práctica, qué medidas debo tomar para obtener la protección de un diseño
industrial?
Una solicitud de registro de un diseño industrial o de concesión de una patente de diseño
industrial puede ser presentada en la oficina de propiedad intelectual (P.I.) del país (o la
región) en la que se solicita la protección. Se recomienda consultar nuestra lista de
oficinas de P.I. para encontrar la oficina de su interés.
Como alternativa, el Sistema de La Haya para el registro internacional de diseños
industriales ofrece una solución práctica para registrar hasta 100 diseños en un gran
número de países mediante la presentación de una única solicitud internacional. Más
información sobre el Sistema de La Haya.

¿Cuándo debo presentar la solicitud?


El momento en que se presenta la solicitud es muy importante. Teniendo en cuenta el
requisito de novedad u originalidad que impone la mayoría de las legislaciones sobre
diseños industriales, por lo general es fundamental presentar una solicitud de registro o
de concesión de una patente antes de divulgar públicamente el diseño, a fin de evitar que
se aniquile su novedad/originalidad.

Si el diseño industrial ya ha sido divulgado al público (por ejemplo, mediante un anuncio


publicitario publicado en el sitio web de la empresa), es posible que ya no pueda ser
considerado “nuevo” u “original” y que pase a formar parte del dominio público. Sin
embargo, algunos países contemplan un “plazo de gracia” para presentar la solicitud
después de la divulgación del diseño industrial. Ese plazo constituye una salvaguardia para
los solicitantes que hayan divulgado su diseño industrial antes de presentar una solicitud,
y suele ser de 6 o 12 meses.

¿Cómo puedo saber qué diseños industriales ya han sido registrados?


Muchas oficinas de propiedad intelectual ponen a disposición en Internet bases de datos
sobre los registros de diseños industriales o las patentes diseño industrial. Consulte
nuestra lista de oficinas nacionales/regionales de propiedad intelectual.

¿Dónde puedo encontrar la legislación sobre diseños industriales de los distintos países?
WIPO Lex ofrece fácil acceso a la legislación sobre propiedad intelectual de muchos países
y regiones, así como a los tratados sobre propiedad intelectual.
Asimismo, un gran número de oficinas nacionales o regionales de propiedad intelectual
cuentan con sitios web en los que se suministra información sobre la legislación nacional o
regional. Para más información, puede consultarse una lista de enlaces a las oficinas
nacionales y regionales de propiedad intelectual.

Los diseños industriales y la actividad comercial

¿Qué utilidad pueden prestar los diseños industriales para mi actividad comercial?
Los diseños industriales hacen que un producto sea atractivo y llame la atención de los
clientes. El diseño motiva la elección del consumidor: el aspecto de un producto puede ser
un elemento clave en la decisión de compra. Dicho de otra forma, el éxito o el fracaso de
un producto puede deberse, al menos parcialmente, a su aspecto. Por lo tanto, los diseños
industriales pueden ser muy importantes, tanto para las pequeñas y medianas empresas
(pymes) como para las empresas más grandes, sin importar su sector de actividad.

¿En qué puede beneficiar a mi actividad comercial la protección de los diseños


industriales?
La protección de los diseños industriales debería formar parte de cualquier estrategia
empresarial. Los motivos principales para proteger los diseños industriales son los
siguientes:

• Rendimiento de las inversiones: la protección contribuye a obtener el rendimiento de


las inversiones realizadas para crear y comercializar productos atractivos e innovadores.
• Derechos exclusivos: la protección otorga derechos exclusivos durante al menos 10
años, y permite impedir o poner fin a la explotación comercial o la copia del diseño
industrial.
• Fortalecer las marcas: los diseños industriales pueden ser un elemento importante de
la marca de una empresa. Proteger los diseños industriales contribuye a la protección
de la marca de na empresa.
• Oportunidad de conceder una licencia o de vender: la protección confiere derechos que
pueden ser vendidos o concedidos en licencia a otra empresa, constituyendo una
fuente de ingresos para el titular de los derechos.
• Imagen positiva: la protección contribuye a transmitir una imagen positiva de una
empresa, puesto que los diseños industriales son activos empresariales que pueden
aumentar el valor de mercado de una empresa y sus productos.
• Recompensa: a protección de los diseños industriales fomenta y recompensa la
creatividad.

¿Qué sucede si no protejo mis diseños industriales?


Si no protege sus diseños industriales no gozará de derechos exclusivos sobre ellos, por lo
cual los competidores podrían colocar en el mercado un producto que incorpore su diseño
industrial sin tener que obtener su autorización.

Es decir, si un competidor u otra persona, sin su consentimiento, fabrican, venden o


importan productos que ostenten o incorporen un diseño que sea una copia (o
fundamentalmente una copia) de su diseño industrial, usted no tendrá medios jurídicos
para hacer frente a esa situación. Además, es probable que las copias del dibujo o modelo
industrial se vendan a un precio más bajo, puesto que los competidores no tienen que
recuperar las inversiones realizadas en el proceso creativo. Ello podría reducir su cuota de
mercado para el producto en cuestión y dañar la reputación de su empresa y de sus
productos.
Reseña del Convenio de París para la Protección de la Propiedad Industrial (1883)

El Convenio de París se aplica a la propiedad industrial en su acepción más amplia, con


inclusión de las patentes, las marcas de productos y servicios, los dibujos y modelos
industriales, los modelos de utilidad (una especie de "pequeña patente" establecida en la
legislación de algunos países), las marcas de servicio, los nombres comerciales (la
denominación que se emplea para la actividad industrial o comercial), las indicaciones
geográficas (indicaciones de procedencia y denominaciones de origen) y la represión de la
competencia desleal.

Las disposiciones fundamentales del Convenio pueden dividirse en tres categorías


principales: trato nacional, derecho de prioridad y normas comunes.
1) En virtud de las disposiciones sobre el trato nacional, el Convenio establece que, en lo
que se refiere a la protección de la propiedad industrial, los Estados Contratantes deberán
conceder a los nacionales de los demás Estados Contratantes la misma protección que
concede a sus propios nacionales. También tendrán derecho a esa protección los
nacionales de los Estados que no sean contratantes, siempre que estén domiciliados o
tengan establecimiento industrial o comercial efectivo y serio en un Estado Contratante.
2) En el Convenio se establece el derecho de prioridad en relación con las patentes (y
modelos de utilidad, donde existan), las marcas y los dibujos y modelos industriales.
Significa ese derecho que, con arreglo a una primera solicitud de patente de invención o
de registro de la marca que sea presentada en uno de los Estados Contratantes, el
solicitante podrá, durante determinado período de tiempo (12 meses para las patentes y
los modelos de utilidad y seis meses para los dibujos y modelos industriales y las marcas),
solicitar la protección en cualquiera de los demás Estados Contratantes; esas solicitudes
posteriores se considerarán presentadas el mismo día de la primera solicitud. Dicho de
otro modo, esas solicitudes posteriores tendrán prioridad (de ahí la expresión "derecho de
prioridad") con respecto a las solicitudes que otras personas puedan presentar durante los
citados plazos por la misma invención, modelo de utilidad, marca o dibujo o modelo
industrial. Además, como se fundan en la primera, dichas solicitudes posteriores no se
verán afectadas por hechos que puedan haber acaecido en el intervalo, como la
publicación de la invención o la venta de artículos que utilicen la marca o en los que se
plasme el dibujo o modelo industrial. Una de las grandes ventajas prácticas de esta
disposición radica en que el solicitante que desea protección en varios países no está
obligado a presentar todas las solicitudes al mismo tiempo, sino que dispone de 6 o 12
meses para decidir en qué países desea la protección y para disponer con todo el cuidado
debido las diligencias necesarias para asegurarse la protección.
3) En el Convenio se establecen además algunas normas comunes a las que deben
atenerse todos los Estados Contratantes. Las más importantes son las siguientes:
a) En relación con las patentes: Las patentes concedidas en los diferentes Estados
Contratantes para la misma invención son independientes entre sí: la concesión de la
patente en un Estado Contratante no obliga a los demás a conceder otra patente; la
patente no podrá ser denegada, anulada, ni considerada caducada en un Estado
Contratante por el hecho de haber sido denegada o anulada o haber caducado en otro.
El inventor tiene derecho a ser mencionado como tal en la patente.
No se podrá denegar la concesión de una patente, y la patente no podrá ser invalidada por
el hecho de que la venta del producto patentado o el producto obtenido por un
procedimiento patentado estén sujetos a restricciones o limitaciones previstas en la
legislación nacional.

El Estado Contratante que tome medidas legislativas que prevean la concesión de licencias
obligatorias para evitar los abusos que podrían derivarse del ejercicio de los derechos
exclusivos conferidos por la patente podrá hacerlo únicamente en determinadas
condiciones. Sólo se podrá conceder la licencia obligatoria (licencia que no concede el
propietario de la patente, sino el órgano competente del Estado de que se trate),
atendiendo a la falta de explotación industrial o explotación insuficiente de la invención
patentada, cuando la solicitud haya sido presentada después de tres años contados desde
la concesión de la patente o después de cuatro años contados desde la fecha de
presentación de la solicitud de patente. Además, la solicitud habrá de ser rechazada si el
titular de la patente justifica su inacción con motivos legítimos. Además, la caducidad de la
patente no podrá ser prevista sino para el caso en que la concesión de licencia obligatoria
no hubiera bastado para impedir el abuso. En este último caso, se podrá entablar el
procedimiento para declarar caducada la patente, pero no antes de que expiren dos años
contados desde la concesión de la primera licencia obligatoria.
b) En relación con las marcas: El Convenio de París no fija las condiciones de presentación
y registro de las marcas, que se rigen por el derecho interno de los Estados Contratantes.
En consecuencia, no se podrá rechazar la solicitud de registro de una marca presentada
por un ciudadano de un Estado Contratante, ni se podrá invalidar el registro, por el hecho
de que no hubiera sido presentada, registrada o renovada en el país de origen. Una vez
obtenido el registro de la marca en el Estado Contratante, la marca se
considera independiente de las marcas que, en su caso, se hayan registrado en otro país,
incluido el propio país de origen; por consiguiente, la caducidad o anulación del registro
de la marca en un Estado Contratante no afecta a la validez de los registros en los demás
Estados Contratantes.
Cuando la marca ha sido debidamente registrada en el país de origen, tiene que ser
admitida para su depósito y protegida en su forma original en los demás Estados
Contratantes, cuando así se solicita. No obstante, se podrá denegar el registro en
supuestos debidamente establecidos, como cuando la marca afecta a derechos adquiridos
por terceros, cuando está desprovista de todo carácter distintivo o es contraria a la moral
o al orden público o de naturaleza tal que pueda engañar al público.
Si en el Estado Contratante fuera obligatoria la utilización de la marca registrada, el
registro no podrá ser anulado por la falta de utilización, sino después de transcurrido un
plazo prudencial y sólo si el interesado no justificase las causas de su inacción.

Los Estados Contratantes están obligados a denegar el registro y a prohibir el uso de una
marca que constituya la reproducción, imitación o traducción, susceptibles de crear
confusión, de otra marca utilizada para productos idénticos o similares y que, a juicio del
órgano competente del respectivo Estado, resultara que es notoriamente conocida en ese
Estado como marca que ya es propiedad de una persona que pueda beneficiarse del
Convenio.
Los Estados Contratantes deberán igualmente rechazar el registro y prohibir el uso de
marcas que contengan, sin permiso, escudos de armas, emblemas de Estado y signos y
punzones oficiales de los Estados Contratantes, siempre que éstos les hayan sido
comunicados por conducto de la Oficina Internacional de la OMPI. Las mismas
disposiciones se aplican a los escudos de armas, banderas y otros emblemas, siglas o
denominaciones de ciertas organizaciones intergubernamentales.
Las marcas colectivas deben estar protegidas.
c) En relación con los dibujos y modelos industriales: Los dibujos y modelos industriales
tienen que estar protegidos en todos los Estados Contratantes, y no se podrá denegar la
protección por el hecho de que los productos a los que se aplique el dibujo o modelo no
sean fabricados en ese Estado.
d) En relación con los nombres comerciales: Los nombres comerciales estarán protegidos
en todos los Estados Contratantes sin obligación de su depósito o de registro.
e) En relación con las indicaciones de procedencia: Los Estados Contratantes deben
adoptar medidas contra la utilización directa o indirecta de indicaciones falsas
concernientes a la procedencia del producto o a la identidad del productor, fabricante o
comerciante.
f) En relación con la competencia desleal: Todos Estados Contratantes están obligados a
asegurar una protección eficaz contra la competencia desleal.
La Unión de París, instituida por el Convenio, se dotó de una Asamblea y de un Comité
Ejecutivo. Forman la Asamblea todos los Estados miembros de la Unión que se hayan
adherido, por lo menos, a las disposiciones administrativas y a las cláusulas finales del
Acta de Estocolmo (1967). A su vez, los miembros del Comité Ejecutivo son elegidos entre
quienes pertenecen a la Unión, excepto en el caso de Suiza, que es miembro de oficio.
Corresponde a la Asamblea establecer el presupuesto bienal por programas de la
Secretaría de la OMPI en lo que respecta a la Unión de París.

Adoptado en 1883, el Convenio de París fue revisado en Bruselas (1900), en Washington


(1911), en La Haya (1925), en Londres (1934), en Lisboa (1958) y en Estocolmo (1967), y,
finalmente, fue enmendado en 1979.

Pueden adherirse al Convenio todos los Estados. Los instrumentos de ratificación o de


adhesión deben depositarse en poder del Director General de la OMPI.
Indicaciones geográficas

¿Qué es una indicación geográfica?


Una indicación geográfica es un signo utilizado para productos que tienen un origen
geográfico concreto y cuyas cualidades, reputación y características se deben
esencialmente a su lugar de origen. Por lo general, la indicación geográfica consiste en el
nombre del lugar de origen de los productos. Un ejemplo típico son los productos
agrícolas que poseen cualidades derivadas de su lugar de producción y están sometidos a
factores geográficos específicos, como el clima y el terreno.

¿Qué derechos confiere una indicación geográfica?


¿Para qué tipo de productos pueden utilizarse las indicaciones geográficas?
¿Cómo puede protegerse una indicación geográfica?

Preguntas frecuentes: indicaciones geográficas

Conceptos básicos

¿Qué es una indicación geográfica?


Una indicación geográfica es un signo utilizado en productos que tienen un origen
geográfico específico y poseen cualidades que se deben a ese origen. Para constituir una
indicación geográfica, un signo debe identificar un producto como originario de un lugar
determinado. Además, es preciso que las cualidades, características o reputación del
producto se deban esencialmente al lugar de origen. Puesto que las cualidades dependen
del lugar geográfico de producción, existe un claro vínculo entre el producto y su lugar
original de producción.

¿Qué derechos confiere una indicación geográfica?


Los derechos que confieren las indicaciones geográficas facultan a sus titulares a utilizar la
indicación para impedir su uso por terceros cuyos productos no se conforman a las
normas aplicables. Por ejemplo, en las jurisdicciones en las que está protegida la
indicación geográfica Darjeeling, los productores de té Darjeeling pueden impedir el uso
del término “Darjeeling” para el té que no haya sido cultivado en sus terrenos ni
producido con arreglo a las normas establecidas en el código de prácticas de la indicación
geográfica.

Sin embargo, una indicación geográfica protegida no faculta al titular a impedir que
alguien fabrique un producto utilizando las mismas técnicas que las que se establecen en
las normas vigentes para esa indicación. Por lo general, la protección de una indicación
geográfica se obtiene mediante la adquisición de un derecho sobre el signo que constituye
la indicación.

¿Para qué tipo de productos pueden utilizarse las indicaciones geográficas?


Habitualmente, las indicaciones geográficas se utilizan para los productos agrícolas, los
alimentos, los vinos y las bebidas espirituosas, la artesanía y los productos industriales.

¿Cómo se protegen las indicaciones geográficas?


Las indicaciones geográficas se protegen principalmente de tres maneras, a saber,
mediante:

• los denominados sistemas sui generis (regímenes especiales de protección);


• la utilización de marcas colectivas o de certificación; y
• los métodos centrados en las prácticas comerciales, por ejemplo, los regímenes
administrativos de aprobación de productos.
Esos enfoques entrañan diferencias en cuestiones importantes, como las condiciones o el
alcance de la protección. Por otra parte, dos de las modalidades de protección, es decir,
los sistemas sui generis y las marcas colectivas o de certificación, comparten algunas
características, como el hecho de que establecen derechos de uso colectivo para quienes
cumplan las normas definidas.
Por lo general, las indicaciones geográficas reciben protección en diferentes países y
regiones mediante gran variedad de sistemas, y con frecuencia utilizando una
combinación de dos o más de los sistemas indicados anteriormente. Tales sistemas se han
elaborado con arreglo a distintas tradiciones jurídicas y en el marco de condiciones
históricas y económicas particulares.

¿Cuánto dura la protección de una indicación geográfica?


En muchas legislaciones sui generis, el registro de las indicaciones geográficas no está
sujeto a un plazo específico de vigencia. Ello significa que la protección de una indicación
geográfica registrada seguirá siendo válida hasta tanto se cancele el registro.
Por lo general, las indicaciones geográficas registradas como marcas colectivas y de
certificación se protegen por un plazo de 10 años renovable.

¿Quién puede utilizar una indicación geográfica protegida?


El derecho a utilizar una indicación geográfica protegida corresponde a los productores de
la zona geográfica definida, que cumplen con las condiciones específicas de producción
del producto.

¿Cómo se hacen valer los derechos sobre una indicación geográfica?


Al igual que todos los derechos de propiedad intelectual, los derechos relativos a las
indicaciones geográficas se hacen valer mediante la aplicación de la legislación nacional,
por lo general, en un tribunal. El derecho a iniciar una acción en ese sentido podrá
corresponder a la autoridad competente, el Ministerio Público, o toda otra parte
interesada, trátese de una persona física o una persona jurídica, de carácter público o
privado. Las sanciones previstas en la legislación nacional pueden ser de índole civil
(mandamiento judicial para hacer cesar o prohibir los actos ilícitos, resarcimiento de
daños y perjuicios, etcétera), penal o administrativa.

¿Cuál es la diferencia entre una indicación geográfica y una marca?


Las indicaciones geográficas identifican un producto como originario de un lugar en
particular. En cambio, una marca identifica un producto como originario de
una empresa en particular.
Una marca suele consistir en signo arbitrario o de fantasía. En cambio, el nombre utilizado
como indicación geográfica suele corresponder al de una zona geográfica.

Por último, una marca puede ser cedida o concedida en licencia a cualquier persona, en
cualquier lugar del mundo, porque está vinculada a una empresa y no a un lugar
determinado. En cambio, una indicación geográfica puede ser utilizada por cualquier
persona, dentro de la zona de origen, que produzca el producto en cuestión conforme a
las normas especificadas; además, debido a su vínculo con el lugar de origen, una
indicación geográfica no puede ser cedida ni concedida en licencia a nadie que esté fuera
del lugar de que se trate o que no pertenezca al grupo de productores autorizados.

¿Cuál es la diferencia entre una indicación geográfica y una indicación de procedencia?


Una indicación de procedencia se refiere al hecho de que un país (o un lugar dentro de ese
país) es el país o el lugar de origen de un producto. A diferencia de una indicación
geográfica, una indicación de procedencia no supone la presencia de ninguna cualidad,
reputación o característica especiales del producto, que puedan atribuirse esencialmente
a su lugar de origen. Las indicaciones de procedencia tan solo exigen que el producto para
el que se utilizan sea originario de una determinada zona geográfica. A título de ejemplo
de indicaciones de procedencia, cabe citar la mención, en un producto, del nombre de un
país, o indicaciones como “hecho en ….”, “producto de ….”, etcétera.

¿Cuál es la diferencia ente una indicación geográfica y una denominación de origen?


Las denominaciones de origen son un tipo especial de indicación geográfica. Las
indicaciones geográficas y las denominaciones de origen requieren la existencia de un
vínculo cualitativo entre el producto al que se refieren y su lugar de origen. Ambas
informan a los consumidores sobre el origen geográfico de un producto y una cualidad o
característica del producto vinculada a su lugar de origen.La diferencia fundamental entre
los dos conceptos es que el vínculo con el lugar de origen debe ser más estrecho en el
caso de una denominación de origen. La calidad o las características de un producto
protegido por una denominación de origen deben
ser exclusivao esencialmente consecuencia de su origen geográfico. Por lo general, ello
significa que las materias primas deben proceder del lugar de origen y que la elaboración
del producto también debería realizarse allí. En el caso de las indicaciones geográficas, un
único criterio atribuible a su origen geográfico es suficiente –ya sea una cualidad u otra
característica del producto, o incluso solo su reputación.

¿Cuál es la relación entre los conocimientos tradicionales (CC.TT.) y las indicaciones


geográficas?
Los productos identificados por una indicación geográfica son a menudo el fruto
de procesos y conocimientos tradicionales transmitidos de generación en generación por
una comunidad en una región determinada. De modo similar, algunos productos
identificados por una indicación geográfica pueden incorporar elementos característicos
del patrimonio artístico tradicional desarrollado en una región determinada, englobado en
el nombre “expresiones culturales tradicionales” (ECT). Esto vale en particular para los
productos tangibles, por ejemplo, las obras de artesanía, realizados utilizando recursos
naturales y cuyas cualidades se derivan de su origen geográfico.
Las indicaciones geográficas no protegen directamente la materia que se relaciona
generalmente con los CC.TT. o las ECT, que permanece en el dominio público en el marco
de los sistemas convencionales de P.I. Sin embargo, las indicaciones geográficas pueden
utilizarse para contribuir indirectamente a su protección, preservándola para las
generaciones futuras, por ejemplo, mediante la descripción de las normas de producción
de un producto cubierto por una indicación geográfica, que podrá incluir la descripción de
un proceso o conocimiento tradicional.

¿Qué es una indicación geográfica “genérica”?


En el contexto de las indicaciones geográficas, los términos genéricos son nombres que, si
bien denotan el lugar en el que se origina un producto, se han convertido en el término
habitual para designar ese producto. Un ejemplo de indicación geográfica que se ha
convertido en un término genérico es camembert, nombre que ahora pueden utilizarse
para designar cualquier queso de tipo camembert.

La transformación de una indicación geográfica en un término genérico puede tener lugar


en diferentes países y momentos. De ahí que una indicación específica pueda constituir
una indicación geográfica en algunos países, mientras que en otros la misma indicación
sea considerada como término genérico.

¿Qué son las indicaciones geográficas “homónimas”?


Las indicaciones geográficas homónimas son las que se escriben o pronuncian del mismo
modo, pero identifican productos originarios de lugares distintos, habitualmente en países
diferentes. En principio, esas indicaciones deberían poder coexistir, pero esa coexistencia
puede estar sujeta a determinadas condiciones. Por ejemplo, podrá exigirse que se
utilicen únicamente junto con información adicional sobre el origen del producto para
impedir que induzcan a engaño a los consumidores. Podrá denegarse la protección de una
indicación geográfica si, debido a la existencia de una indicación homónima, se considera
que su uso podría inducir a engaño a los consumidores con respecto al verdadero origen
del producto.

Solicitar la protección de una indicación geográfica

¿Quién puede solicitar la protección de una indicación geográfica?


La protección puede ser solicitada por un grupo de productores del producto identificado
por la indicación geográfica. Los productores podrán estar organizados como entidad, por
ejemplo una cooperativa o asociación, que los represente y vele por que el producto
cumpla con los requisitos acordados o aceptados. En algunas jurisdicciones, la protección
también puede ser solicitada por una autoridad nacional competente (por ejemplo, una
autoridad gubernamental local).

¿Quién concede la protección a las indicaciones geográficas?


La concesión de la protección de una indicación geográfica incumbe a una autoridad
nacional (regional) competente, previa solicitud. En algunos países, esa función
corresponde a un órgano especial encargado de esa tarea; en otros, a la oficina de
propiedad intelectual. En el sitio web de la OMPI puede consultarse una lista de oficinas
de propiedad intelectual.

¿Qué condiciones deben satisfacerse para obtener protección para una indicación
geográfica?
Par su registro como indicación geográfica, un signo debe cumplir los requisitos exigidos
para ser considerado indicación geográfica en virtud de la legislación aplicable, sin estar
sujeto a ningún obstáculo. Por lo general, un requisito importante que figura en la
definición, es que el producto identificado por la indicación geográfica debe tener un
vínculo con el origen geográfico. Ese vínculo puede quedar determinado por una cualidad,
reputación u otra característica específica, fundamentalmente debida a su origen
geográfico. En muchas legislaciones nacionales, bastará un único criterio que pueda
atribuirse al origen geográfico, ya sea una cualidad u otra característica del producto, o
solo su reputación.

¿Necesito un abogado para proteger mi indicación geográfica?


En función de la legislación aplicable, una solicitud de protección de una indicación
geográfica puede presentarse sin la asistencia de un abogado o agente especializados en
P.I. Sin embargo, en muchos países, un solicitante cuya residencia o domicilio social se
halle fuera del país en que se solicita la protección debe estar representado por un
abogado o agente reconocido a la práctica en ese país. La información sobre los abogados
y agentes reconocidos puede obtenerse directamente de las oficinas nacionales de P.I. En
el sitio web de la OMPI puede consultarse una lista de oficinas de propiedad intelectual.

¿Cuánto cuesta obtener protección para una indicación geográfica?


Habida cuenta de que los costos de solicitud de la protección varían de país a país, lo
mejor será contactar a su oficina nacional (regional) de P.I. para solicitar información
detallada sobre la estructura de tasas. Si se solicita protección en el extranjero, además de
las tasas corrientes de presentación, debería usted tener en cuenta los costos de
traducción y los costos de contratación de un agente local. Cabe recordar que es posible
que, para proteger una indicación geográfica en el exterior, se imponga el requisito de que
la indicación geográfica esté protegida en el país de origen.

¿Existen obstáculos a la protección de una indicación geográfica?


En primer lugar, por lo general, se excluyen de la protección como indicación geográfica:

• Los signos que no cumplen los requisitos correspondientes a las indicaciones


geográficas en virtud de la legislación aplicable.
Desde un punto de vista jurídico, los obstáculos al registro de una indicación geográfica
pueden ser, entre otros, los siguientes:

• que entre en conflicto con una marca anterior


• el carácter genérico del término que constituye la indicación geográfica
• la existencia de una indicación geográfica homónima, cuya utilización podría
considerarse que induce a error sobre el verdadero origen del producto
• el nombre de la indicación es el de una variedad vegetal o raza animal
• la falta de protección de la indicación geográfica en su país de origen.

¿Qué medidas debo tomar en la práctica para obtener protección para una indicación
geográfica?
Las medidas que han de tomarse en la práctica varían, en gran medida, en función del
propósito y el alcance geográfico de la protección que se desea obtener.

En términos generales, si usted está considerando obtener protección solo a escala


nacional, le convendrá dirigirse en primer lugar a su oficina de propiedad intelectual o la
autoridad nacional (regional) competente encargada de las indicaciones geográficas. En el
sitio web de la OMPI puede consultarse una lista de oficinas de propiedad intelectual.

Por otra parte, si está considerando obtener la protección en más de un territorio, la


alternativa adecuada podrá ser, entre otras, recurrir al Sistema de Lisboa de la OMPI. Para
más información y conocer alternativas, véase la respuesta a la pregunta “¿Puedo obtener
protección válida para una indicación geográfica en varios países?”.

¿Puedo obtener protección válida para una indicación geográfica en varios países?
Los derechos correspondientes a las indicaciones geográficas son territoriales; ello
significa que se limitan al país (o la región) en que se concedió la protección.

De momento, ninguna indicación geográfica confiere un derecho “mundial” o


“internacional”. Actualmente, existen principalmente cuatro maneras de proteger una
indicación geográfica en el exterior:

• Obtener la protección directamente en el sistema jurídico de que se trate: por lo general,


a los efectos de proteger una indicación geográfica en su territorio, muchas
jurisdicciones exigen que la indicación geográfica ya esté protegida en el país de origen.
Una vez obtenida la protección en el país de origen, será posible solicitar la protección
de la indicación geográfica en otras jurisdicciones en virtud de los medios de protección
disponibles en esas jurisdicciones. Para más información, póngase en contacto con la
oficina de PI de su país.
• Valerse de los acuerdos bilaterales concertados entre países: habitualmente, los países
celebran acuerdos bilaterales sobre la base de la reciprocidad. Podrán limitarse a
determinados sectores económicos o productos, por ejemplo, vinos y bebidas
espirituosas, o formar parte de un acuerdo comercial más amplio. Para más
información, póngase en contacto con la oficina de PI de su país.
• Por conducto del Sistema de Lisboa para el registro internacional de denominaciones de
origen:mediante el Sistema de Lisboa, una denominación de origen que ya esté
protegida en un Estado miembro podrá recibir protección en los territorios de todos los
demás miembros, gracias a un único registro denominado “registro internacional”. Más
Información sobre el Sistema de Lisboa.
• Por conducto del Sistema de Madrid para el Registro internacional de Marcas (es decir,
como marca colectiva o de certificación): Tpara evitar la necesidad de presentar
solicitudes de marca en cada uno de los países en que se solicita la protección, es
posible presentar una única solicitud internacional por conducto del Sistema de Madrid
de la OMPI. Más información sobre el Sistema de Madrid.

¿Cómo puedo saber qué indicaciones geográficas ya han sido registradas?


No existe una manera de buscar entre todas las indicaciones geográficas registradas en el
mundo entero.

Sin embargo, podrá usted ponerse en contacto con la oficina nacional de propiedad
intelectual correspondiente que tal vez cuente con una base de datos susceptible de
búsqueda de las indicaciones geográficas registradas en su territorio. En el sitio web de la
OMPI puede consultarse una lista de oficinas de propiedad intelectual.
Asimismo, puede usted consultar la base de datos Lisboa Express de la OMPI para buscar
indicaciones geográficas registradas en virtud del Sistema de Lisboa.

Dónde puedo encontrar la legislación sobre indicaciones geográficas de los distintos


países?

Las indicaciones geográficas y la actividad comercial

¿Qué utilidad pueden prestar las indicaciones geográficas para mi actividad comercial?
Los consumidores están prestando cada vez más atención al origen geográfico de los
productos y muchos se interesan por determinadas características de los productos que
compran. En algunos casos, el “lugar de origen” indica a los consumidores que el producto
tendrá una calidad o característica que ellos valoran. En ese sentido, las indicaciones
geográficas sirven para diferenciar los productos en el mercado, al permitir a los
consumidores distinguir entre los productos con características basadas en el origen
geográfico y otros sin esas características. Así pues, las indicaciones geográficas pueden
ser un elemento clave para el desarrollo de marcas colectivas para los productos cuya
calidad está vinculada al origen. Consulte la base de datos WIPO Lex para acceder a la
legislación nacional pertinente.

¿En qué puede beneficiar a mi actividad comercial la protección de una indicación


geográfica?
La protección de una indicación geográfica faculta a quienes tienen derecho a usar esa
indicación a tomar medidas contra terceros que la utilicen sin autorización,
beneficiándose de su buena reputación (los “ventajistas”). La reputación de una indicación
geográfica constituye un activo valioso, colectivo e intangible; de no ser protegido, podría
ser utilizado sin restricciones y ello desgastaría su valor, que terminaría por perderse.

Proteger una indicación geográfica también es una forma de impedir a terceros el registro
de una indicación como marca y limitar el riesgo de que la indicación pase a constituir un
término genérico.
Por lo general, las indicaciones geográficas, respaldadas por una sólida gestión comercial,
sirven para:

• dar una ventaja competitiva


• añadir valor a un producto
• aumentar las oportunidades de exportación
• fortalecer una marca
Reseña del Convenio que establece la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual
(Convenio de la OMPI) (1967)

El Convenio de la OMPI, el instrumento constitutivo de la Organización Mundial de la


Propiedad Intelectual (OMPI), fue firmado en Estocolmo el 14 de julio de 1967, entró en
vigor en 1970 y fue enmendado en 1979. La OMPI es una organización
intergubernamental que en 1974 pasó a ser uno de los organismos especializados del
sistema de organizaciones de las Naciones Unidas.

Los orígenes de la OMPI se remontan a 1883 y a 1886, cuando se adoptaron,


respectivamente, el Convenio de París para la Protección de la Propiedad Industrial y el
Convenio de Berna para la Protección de las Obras Literarias y Artísticas. Ambos
Convenios preveían el establecimiento de sendas "Oficinas Internacionales". Las dos
Oficinas se unieron en 1893 y en 1970 fueron sustituidas por la Organización Mundial de
la Propiedad Intelectual, establecida en virtud del Convenio de la OMPI.

La OMPI tiene dos objetivos principales. El primero de ellos es fomentar la protección de


la propiedad intelectual en todo el mundo. El segundo es asegurar la cooperación
administrativa entre las Uniones que entienden en materia de propiedad intelectual y que
han sido establecidas en virtud de los tratados administrados por la OMPI.

Con el fin de alcanzar esos objetivos, la OMPI, además de encargarse de las tareas
administrativas de las Uniones, lleva a cabo diversas actividades que
incluyen: i) actividades normativas, es decir, la creación de reglas y normas para la
protección y la observancia de los derechos de propiedad intelectual mediante la
concertación de tratados internacionales; ii) actividades programáticas, que comprenden
la prestación de asistencia técnica y jurídica a los Estados en el ámbito de la propiedad
intelectual; iii) actividades de normalización y de clasificación internacionales, que
incluyen la cooperación entre las oficinas de propiedad industrial en lo que respecta a la
documentación relativa a las patentes, las marcas y los dibujos y modelos industriales;
y iv) actividades de registro y presentación de solicitudes, que comprenden la prestación
de servicios relacionados con las solicitudes internacionales de patentes de invención y el
registro de marcas y dibujos y modelos industriales.
Pueden adherirse a la OMPI los Estados que pertenezcan a cualquiera de las Uniones, así
como otros Estados que cumplan una de las condiciones siguientes: i) ser miembro de las
Naciones Unidas, de alguno de los organismos especializados vinculados a las Naciones
Unidas o del Organismo Internacional de Energía Atómica, ii) ser parte en el Estatuto de la
Corte Internacional de Justicia; o iii) ser invitado por la Asamblea General de la OMPI a
adherirse al Convenio. La calidad de miembro de la OMPI no genera otras obligaciones
con respecto a los demás tratados administrados por la Organización. La adhesión se
efectúa mediante el depósito del instrumento de adhesión al Convenio de la OMPI en
poder del Director General de la Organización.
El Convenio de la OMPI establece tres órganos principales: la Asamblea General, la
Conferencia y el Comité de Coordinación. La Asamblea General de la OMPI está formada
por los Estados miembros de la OMPI que también lo sean de una de las Uniones. Entre
sus principales funciones cabe mencionar las siguientes: designar al Director General a
propuesta del Comité de Coordinación, examinar y aprobar los informes del Director
General y los informes y las actividades del Comité de Coordinación, aprobar el
presupuesto bienal de los gastos comunes a las Uniones y el reglamento financiero de la
Organización.

La Conferencia de la OMPI está formada por los Estados que son parte en el Convenio de
la OMPI. Entre otras funciones, es el órgano competente para aprobar modificaciones del
Convenio. El Comité de Coordinación de la OMPI está formado por miembros elegidos
entre quienes componen el Comité Ejecutivo de la Unión de París y el Comité Ejecutivo de
la Unión de Berna. Sus principales funciones consisten en aconsejar a los órganos de las
Uniones, la Asamblea General, la Conferencia y el Director General sobre todas las
cuestiones administrativas y financieras de interés común a esos órganos. Asimismo, se
encarga de preparar el proyecto de orden del día de la Asamblea General y el proyecto de
orden del día de la Conferencia. Además, cuando corresponde, el Comité de Coordinación
propone el nombre de un candidato para el puesto de Director General por la Asamblea
General.

Los recursos del presupuesto ordinario de la OMPI proceden principalmente de las tasas
que abonan los usuarios privados por los servicios de registro internacional y presentación
de solicitudes, y de las contribuciones abonadas por los gobiernos de los Estados
miembros. Con el fin de determinar su cuota de contribución, cada Estado queda incluido
en una de las 14 clases establecidas. La contribución más elevada corresponde a la clase I,
que supone el pago de 25 unidades de contribución, mientras que la contribución más
baja es la de la Clase Ster, que obliga al pago de una fracción correspondiente a una 32ª
parte de una unidad de contribución. De conformidad con el sistema de contribución
única adoptado por los Estados miembros en 1993, la cuota de contribución de cada
Estado es la misma, independientemente de que el Estado esté adherido solamente a la
OMPI o a una o más Uniones o, en su defecto, tanto a la OMPI como a una o más Uniones.
La Secretaría de la Organización se denomina Oficina Internacional. El Director General es
el más alto funcionario de la Oficina Internacional; es designado por la Asamblea General y
está asistido por dos o más Directores Generales Adjuntos.

La Sede de la Organización se encuentra en Ginebra (Suiza). La Organización tiene oficinas


de enlace en Río de Janeiro (Brasil), Tokio (Japón), Singapur (Singapur) y ante las Naciones
Unidas, en Nueva York (Estados Unidos de América).

La Organización goza de las prerrogativas e inmunidades otorgadas a los organismos


internacionales y a sus funcionarios, necesarias para alcanzar sus objetivos y ejercer sus
funciones y, a estos efectos, ha concertado un acuerdo de sede con la Confederación Suiza.

http://www.wipo.int/about-ip/es/
OMC.ORG
ADPIC: INFORMACIÓN SOBRE LOS ADPIC

¿Qué se entiende por "derechos de


propiedad intelectual"?
Los derechos de propiedad intelectual son aquellos que se confieren a las personas sobre las creaciones
de su mente. Suelen dar al creador derechos exclusivos sobre la utilización de su obra por un plazo
determinado.

Habitualmente, los derechos de propiedad intelectual se dividen en dos sectores principales:


(i) Derecho de autor y derechos con él relacionados.Volver al principio
Los derechos de los autores de obras literarias y artísticas (por ejemplo, libros y demás obras escritas,
composiciones musicales, pinturas, esculturas, programas de ordenador y películas cinematográficas)
están protegidos por el derecho de autor por un plazo mínimo de 50 años después de la muerte del autor.
También están protegidos por el derecho de autor y los derechos con él relacionados (denominados a
veces derechos "conexos") los derechos de los artistas intérpretes o ejecutantes (por ejemplo, actores,
cantantes y músicos), los productores de fonogramas (grabaciones de sonido) y los organismos de
radiodifusión. El principal objetivo social de la protección del derecho de autor y los derechos conexos
es fomentar y recompensar la labor creativa.
(ii) Propiedad industrial. Volver al principio
Conviene dividir la propiedad industrial en dos esferas principales:

• Una de ellas se caracteriza por la protección de signos distintivos, en particular marcas de


fábrica o de comercio (que distinguen los bienes o servicios de una empresa de los de otras
empresas) e indicaciones geográficas (que identifican un producto como originario de un
lugar cuando una determinada característica del producto es imputable fundamentalmente a
su origen geográfico).

La protección de esos signos distintivos tiene por finalidad estimular y garantizar una
competencia leal y proteger a los consumidores, haciendo que puedan elegir con
conocimiento de causa entre diversos productos o servicios. La protección puede durar
indefinidamente, siempre que el signo en cuestión siga siendo distintivo.

• Otros tipos de propiedad industrial se protegen fundamentalmente para estimular la


innovación, la invención y la creación de tecnología. A esta categoría pertenecen las
invenciones (protegidas por patentes), los dibujos y modelos industriales y los secretos
comerciales.

El objetivo social es proteger los resultados de las inversiones en el desarrollo de nueva


tecnología, con el fin de que haya incentivos y medios para financiar las actividades de
investigación y desarrollo.

Un régimen de propiedad intelectual efectivo debe también facilitar la transferencia de


tecnología en forma de inversiones extranjeras directas, empresas conjuntas y concesión de
licencias.

La protección suele prestarse por un plazo determinado (habitualmente 20 años en el caso de


las patentes).

Si bien los objetivos sociales fundamentales de la protección de la propiedad intelectual son los
indicados supra, cabe también señalar que los derechos exclusivos conferidos están por lo general
sujetos a una serie de limitaciones y excepciones encaminadas a establecer el equilibrio requerido entre
los legítimos intereses de los titulares de los derechos y de los usuarios.

ENTENDER LA OMC: LOS ACUERDOS

Propiedad intelectual: protección y


observancia
El Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual
relacionados con el Comercio (ADPIC) de la OMC, negociado en la Ronda
Uruguay (1986-94), incorporó por primera vez normas sobre la propiedad
intelectual en el sistema multilateral de comercio.

• Información básica [+]


• Los Acuerdos [-]
o Panorama general
o Aranceles
o Agricultura
o Normas y seguridad
o Textiles
o Servicios
o Propiedad intelectual
o Antidumping, subvenciones, salvaguardias
o Obstáculos no arancelarios
o Acuerdos plurilaterales
o Exámenes de las políticas comerciales
• Solución de diferencias [+]
• Cuestiones transversales y cuestiones nuevas [+]
• Programa de Doha
• Países en desarrollo [+]
• La Organización [+]
• Abreviaturas

Más información de introducción


> La OMC en pocas palabras
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Orígenes: el sistema de comercio basado en normas
Las ideas y los conocimientos constituyen una parte cada vez más importante del comercio. La mayor
parte del valor de los medicamentos y otros productos nuevos de alta tecnología reside en la cantidad de
invención, innovación, investigación, diseño y pruebas que requieren. Las películas, las grabaciones
musicales, los libros, los programas de ordenador y los servicios en línea se compran y venden por la
información y la creatividad que contienen, no por los materiales de plástico, metal o papel utilizados en
su elaboración. Muchos productos que solían ser objeto de comercio como productos de baja tecnología
contienen actualmente una mayor proporción de invención y diseño en su valor: por ejemplo, las prendas
de vestir de marca o las obtenciones vegetales.
Se puede otorgar a los creadores el derecho de impedir que otros utilicen sus invenciones, diseños o
demás creaciones y de valerse de ese derecho para negociar la percepción de un pago por permitir esa
utilización. Son los “derechos de propiedad intelectual”. Revisten una serie de formas: por ejemplo, los
libros, las pinturas y las películas quedan protegidos por el derecho de autor; las invenciones pueden
patentarse; los nombres comerciales y los logotipos de productos pueden registrarse como marcas de
fábrica o de comercio; y así sucesivamente. Los gobiernos y los parlamentos han conferido a los
creadores esos derechos como incentivo para generar ideas que beneficien a la sociedad en su conjunto.
El grado de protección y observancia de esos derechos variaba considerablemente en los distintos países
del mundo y, a medida que la propiedad intelectual fue adquiriendo mayor importancia en el comercio,
esas diferencias se convirtieron en una fuente de tensiones en las relaciones económicas internacionales.
Así pues, se consideró que la manera de que hubiera más orden y previsibilidad y se pudieran resolver
más sistemáticamente las diferencias era establecer nuevas normas comerciales internacionalmente
convenidas en la esfera de los derechos de propiedad intelectual.
La Ronda Uruguay lo consiguió. El Acuerdo de la OMC sobre los ADPIC constituye un intento de
reducir las diferencias en la manera de proteger esos derechos en los distintos países del mundo y de
someterlos a normas internacionales comunes. En él se establecen niveles mínimos de protección que
cada gobierno ha de otorgar a la propiedad intelectual de los demás Miembros de la OMC. Al hacerlo,
establece un equilibrio entre los beneficios a largo plazo y los posibles costos a corto plazo resultantes
para la sociedad. Los beneficios a largo plazo para la sociedad se producen cuando la protección de la
propiedad intelectual fomenta la creación y la invención, especialmente cuando expira el período de
protección y las creaciones e invenciones pasan a ser del dominio público. Los gobiernos están
autorizados a reducir los costos a corto plazo que puedan producirse mediante diversas excepciones, por
ejemplo hacer frente a los problemas relativos a la salud pública. Y actualmente, cuando surgen
diferencias comerciales con respecto a derechos de propiedad intelectual, puede recurrirse al sistema de
solución de diferencias de la OMC.
El Acuerdo abarca cinco amplias cuestiones:
cómo deben aplicarse los principios básicos del sistema de comercio y otros acuerdos internacionales
sobre propiedad intelectual
cómo prestar protección adecuada a los derechos de propiedad intelectual
cómo deben los países hacer respetar adecuadamente esos derechos en sus territorios
cómo resolver las diferencias en materia de propiedad intelectual entre Miembros de la OMC
disposiciones transitorias especiales durante el período de establecimiento del nuevo sistema.
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Principios básicos: trato nacional, trato NMF y protección equilibrada


Al igual que en el GATT y en el AGCS, el punto de partida del Acuerdo sobre la propiedad intelectual
son los principios básicos y, al igual también que en los otros dos Acuerdos, reviste especial importancia
el principio de no discriminación: trato nacional(igualdad de trato para nacionales y extranjeros) y trato
de la nación más favorecida(igualdad de trato para los nacionales de todos los interlocutores comerciales
en el marco de la OMC). El otorgamiento de trato nacional es también un principio fundamental en otros
acuerdos sobre propiedad intelectual ajenos a la OMC.
En el Acuerdo sobre los ADPIC se enuncia un importante principio adicional: la protección de la
propiedad intelectual debe contribuir a la innovación técnica y a la transferencia de tecnología. Deben
beneficiarse — se dice — tanto los productores como los usuarios y debe acrecentarse el bienestar
económico y social.
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Cómo proteger la propiedad intelectual: principios básicos comunes


En la segunda parte del Acuerdo sobre los ADPIC se examinan diferentes tipos de derechos de
propiedad intelectual y la manera de protegerlos. El objetivo perseguido es velar por que existan normas
adecuadas de protección en todos los países Miembros. A tal efecto, se parte de las obligaciones
dimanantes de los principales acuerdos internacionales de la Organización Mundial de la Propiedad
Intelectual (OMPI) ya existentes antes de que se creara la OMC:
el Convenio de París para la Protección de la Propiedad Industrial (patentes, dibujos y modelos
industriales, etc.)
el Convenio de Berna para la Protección de las Obras Literarias y Artísticas (derecho de autor)
Esos convenios no abarcan algunas esferas. Por otra parte, en algunos casos se consideró que las normas
de protección prescritas eran insuficientes. Así pues, el Acuerdo sobre los ADPIC añade un número
importante de normas nuevas o más rigurosas.
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Derecho de autor
En el Acuerdo sobre los ADPIC se establece que los programas de ordenador serán protegidos como
obras literarias en virtud del Convenio de Berna y se dispone cómo deberán protegerse las bases de datos.
El Acuerdo amplía también las normas internacionales en materia de derecho de autor para abarcar los
derechos de arrendamiento. Los autores de programas de ordenador y los productores de grabaciones de
sonido deben gozar del derecho de prohibir el arrendamiento comercial al público de sus obras. Se aplica
un derecho exclusivo similar a las películas cinematográficas: el arrendamiento comercial ha dado lugar
a una realización muy extendida de copias de esas obras, lo que afecta a los ingresos que los titulares del
derecho de autor podrían obtener de sus películas.
En el Acuerdo se establece que también los artistas intérpretes o ejecutantes deben tener derecho a
impedir por plazo no inferior a 50 años la grabación, reproducción o radiodifusión sin su consentimiento
de sus interpretaciones o ejecuciones (grabaciones ilícitas). Los productores de grabaciones de sonido
deben tener el derecho de prohibir la reproducción de sus grabaciones sin su consentimiento por un
plazo de 50 años.
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Marcas de fábrica o de comercio
En el Acuerdo se establece qué tipos de signos deben merecer protección como marcas de fábrica o de
comercio y cuáles deben ser los derechos mínimos conferidos a sus titulares. Las marcas de servicios
deben protegerse de la misma manera que las marcas de fábrica o de comercio utilizadas para los
productos. Las marcas que hayan alcanzado notoriedad en un determinado país gozan de protección
adicional.
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Indicaciones geográficas
A veces se utilizan nombres de lugares para identificar un producto. Esa “indicación geográfica” no sólo
denota dónde se elaboró el producto sino que, lo que es más importante, identifica también las
características especiales del producto resultantes de sus orígenes.
Son ejemplos notorios “champagne”, “Scotch”, “tequila” y queso “Roquefort”. A los fabricantes de
vinos y bebidas espirituosas les preocupa especialmente la utilización de nombres de lugares para
identificar los productos, por lo que el Acuerdo sobre los ADPIC contiene disposiciones especiales con
respecto a esos productos. Ahora bien, la cuestión es también importante en lo que se refiere a otros
tipos de artículos.
La utilización del nombre de un lugar cuando el producto se haya fabricado en otro lugar o cuando no
posea las características habituales puede inducir a error a los consumidores y puede dar lugar a una
competencia desleal. En el Acuerdo sobre los ADPIC se establece que los países han de impedir esa
mala utilización de los nombres geográficos.
En lo que se refiere a los vinos y bebidas espirituosas, en el Acuerdo se prevén mayores niveles de
protección, es decir, aunque no exista peligro de que se induzca a error al público.
Se permiten algunas excepciones; por ejemplo, si el nombre está ya protegido como marca de fábrica o
de comercio o si se ha convertido en un término genérico. Es el caso del término “cheddar”, que
actualmente se refiere a un determinado tipo de queso no necesariamente fabricado en Cheddar, Reino
Unido. Ahora bien, todo país que desee hacer una excepción por esos motivos debe estar dispuesto a
entablar negociaciones con el país que desee proteger la indicación geográfica en cuestión.
En el Acuerdo se prevé la celebración de nuevas negociaciones en el marco de la OMC para establecer
un sistema multilateral de notificación y registro de las indicaciones geográficas de vinos. Esas
negociaciones forman actualmente parte del Programa de Doha para el Desarrollo y abarcan las bebidas
espirituosas. También se debate en la OMC la cuestión de negociar o no la aplicación de ese mayor nivel
de protección a otros productos además de los vinos y las bebidas espirituosas.
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Dibujos y modelos industriales


En virtud del Acuerdo sobre los ADPIC, los dibujos y modelos industriales deben gozar de protección
por un plazo mínimo de 10 años. Los titulares de dibujos o modelos protegidos deben poder impedir la
fabricación, venta o importación de artículos que ostenten o incorporen un dibujo o modelo que sea una
copia del dibujo o modelo protegido.

Tipos de propiedad intelectual


Esferas abarcadas por el Acuerdo sobre los ADPIC

Derecho de autor y derechos conexos


Marcas de fábrica o de comercio, incluidas las marcas de servicios
Indicaciones geográficas
Dibujos y modelos industriales
Patentes
Esquemas de trazado (topografías) de los circuitos integrados
Información no divulgada, incluidos los secretos comerciales

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Patentes
Se establece en el Acuerdo que la protección de las invenciones mediante patentes debe durar como
mínimo 20 años. Debe poder obtenerse protección por este medio tanto para productos como para
procedimientos, en prácticamente todos los campos de la tecnología. Los gobiernos pueden negarse a
otorgar una patente con respecto a una invención cuando esté prohibida su explotación comercial por
razones de orden público o moralidad. Pueden excluir asimismo los métodos de diagnóstico, terapéuticos
y quirúrgicos, las plantas y los animales (excepto los microorganismos), y los procedimientos biológicos
para la producción de plantas o animales (que no sean procedimientos microbiológicos).
Sin embargo, las obtenciones vegetales deben ser objeto de protección mediante patentes o mediante un
sistema especial (por ejemplo, los derechos de seleccionador previstos en los convenios de la Unión
Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV)).
En el Acuerdo se establecen los derechos mínimos de que debe gozar el titular de una patente. Pero se
permiten también algunas excepciones. El titular de una patente podría abusar de sus derechos: por
ejemplo, no suministrando el producto en el mercado. Para prevenir esa posibilidad, en el Acuerdo se
dispone que los gobiernos pueden expedir “licencias obligatorias” por las que se autorice a un
competidor a fabricar el producto o utilizar el procedimiento objeto de licencia. No obstante, sólo puede
hacerse en determinadas condiciones encaminadas a salvaguardar los intereses legítimos del titular de la
patente.
Cuando la patente se otorgue para un procedimiento de producción, los derechos deberán hacerse
extensivos al producto directamente obtenido por ese procedimiento. En determinadas condiciones, un
tribunal podrá ordenar a presuntos infractores que demuestren que no han utilizado el procedimiento
patentado.
Una cuestión que se ha planteado recientemente es cómo garantizar que la protección de los productos
farmacéuticos por medio de patentes no impida a personas de países pobres tener acceso a los
medicamentos, manteniendo al mismo tiempo la función del sistema de patentes de dar incentivos para
la realización de actividades de investigación y desarrollo encaminadas a crear medicamentos nuevos.
En el Acuerdo sobre los ADPIC se prevén ciertas flexibilidades, como la expedición de licencias
obligatorias, pero algunos gobiernos no estaban seguros de cómo se interpretarían esas flexibilidades y
hasta qué punto se respetaría su derecho a valerse de ellas.
La cuestión se resolvió en gran parte cuando los Ministros de los países Miembros de la OMC
publicaron una declaración especial en la Conferencia Ministerial de Doha, en noviembre de 2001.
Convinieron en que el Acuerdo sobre los ADPIC no impide ni deberá impedir que los Miembros
adopten medidas para proteger la salud pública. Subrayaron la capacidad de los países para valerse de las
flexibilidades previstas en el Acuerdo sobre los ADPIC y convinieron en prorrogar las exenciones
relativas a la protección de los productos farmacéuticos por medio de patentes hasta 2016 en el caso de
los países menos adelantados. Con respecto a una cuestión subsistente, encomendaron al Consejo de los
ADPIC una tarea: determinar cómo otorgar flexibilidad adicional para que los países que no tengan
capacidad de fabricación en el sector farmacéutico puedan importar productos farmacéuticos patentados
fabricados al amparo de licencias obligatorias. El 30 de agosto de 2003 se acordó una exención por la
que se otorgaba esta flexibilidad.
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Esquemas de trazado de los circuitos integrados


La base de la protección prevista en el Acuerdo sobre los ADPIC para los esquemas de trazado
(“topografías”) de los circuitos integrados es el Tratado de Washington sobre la Propiedad Intelectual
respecto de los Circuitos Integrados, concluido en el marco de la Organización Mundial de la Propiedad
Intelectual. Se adoptó en 1989, pero aún no ha entrado en vigor. En el Acuerdo sobre los ADPIC se
añaden una serie de disposiciones: por ejemplo, la protección debe otorgarse por un plazo mínimo de 10
años.
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Información no divulgada y secretos comerciales


Los secretos comerciales y otros tipos de “información no divulgada” que tengan valor comercial deben
estar protegidos contra abusos de confianza y otros actos contrarios a los usos comerciales honestos.
Ahora bien, deben haberse adoptado medidas razonables para mantener secreta la información. También
deben estar protegidos contra todo uso comercial desleal los datos de pruebas facilitados a los gobiernos
con el fin de obtener autorización para la comercialización de productos farmacéuticos o productos
químicos agrícolas nuevos.
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Control de las prácticas anticompetitivas en las licencias contractuales


El titular de un derecho de autor, una patente u otra forma de derecho de propiedad intelectual puede
otorgar una licencia para que otra persona produzca o copie la marca de fábrica o de comercio, la obra,
la invención, el dibujo o modelo, etc. protegidos. En el Acuerdo se reconoce que las condiciones de las
licencias contractuales podrían restringir la competencia o impedir la transferencia de tecnología. Por
consiguiente, se dispone que, en determinadas condiciones, los gobiernos tienen derecho a adoptar
medidas para impedir prácticas anticompetitivas en materia de licencias que constituyan un abuso de los
derechos de propiedad intelectual. Se dispone asimismo que los gobiernos deben estar dispuestos a
celebrar consultas entre sí sobre el control de las prácticas anticompetitivas en materia de licencias.
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Observancia: rigurosa pero equitativa


Tener leyes en materia de propiedad intelectual no es suficiente. Han de hacerse cumplir. Sobre esto
versa la tercera parte del Acuerdo sobre los ADPIC. En el Acuerdo se dice que los gobiernos han de
asegurarse de que los derechos de propiedad intelectual puedan hacerse valer en el marco de sus leyes y
de que las sanciones por infracción sean lo bastante severas para disuadir de nuevas violaciones. Los
procedimientos deben ser justos y equitativos y no resultar innecesariamente complicados o costosos. No
deben comportar plazos injustificables ni retrasos innecesarios. Las partes interesadas deberán poder
dirigirse a un tribunal para pedir la revisión de una decisión administrativa o apelar contra la resolución
de un tribunal inferior.
En el Acuerdo se expone con cierto detalle cómo deben ser los procedimientos de observancia, con
inclusión de normas para la obtención de pruebas, medidas provisionales, mandamientos judiciales,
indemnización de daños y otras sanciones. Se dice que los tribunales deben estar facultados para ordenar,
en determinadas condiciones, la eliminación o destrucción de las mercancías pirata o falsificadas. La
falsificación de una marca de fábrica o de comercio o la fabricación de mercancías pirata que lesionen el
derecho de autor, cuando se cometan con dolo y a escala comercial, se considerarán delitos penales. Los
gobiernos deberán asegurarse de que los titulares de derechos de propiedad intelectual pueden recibir
asistencia de las autoridades aduaneras para impedir las importaciones de mercancías falsificadas y
mercancías pirata.
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Transferencia de tecnología
Los países en desarrollo, en particular, consideran la transferencia de tecnología parte de la negociación
en la que han convenido en proteger los derechos de propiedad intelectual. El Acuerdo sobre los ADPIC
contiene una serie de disposiciones al respecto. Por ejemplo, exige que los gobiernos de los países
desarrollados den incentivos a sus empresas para que transfieran tecnología a los países menos
adelantados.
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Disposiciones transitorias: 1, 5 u 11 años o más


Cuando los Acuerdos de la OMC entraron en vigor el 1º de enero de 1995 los países desarrollados
disponían de un año para poner sus leyes y prácticas en conformidad con el Acuerdo sobre los ADPIC.
Los países menos adelantados disponían de 11 años, hasta 2006, plazo que se ha prorrogado ahora hasta
2013 en general, y hasta 2016 en el caso de las patentes de productos farmacéuticos y de la información
no divulgada.
Si un país en desarrollo no prestaba protección mediante patentes de productos a un determinado sector
de tecnología een el momento de la entrada en vigor para él del Acuerdo sobre los ADPIC (1º de enero
de 2000), disponía de cinco años más para establecer esa protección. No obstante, en el caso de los
productos farmacéuticos y de los productos químicos para la agricultura debía aceptar la presentación de
solicitudes de patentes desde el principio del período de transición (es decir, desde el 1º de enero de
1995), aunque no fuera necesario otorgar la patente hasta el final de dicho período. Si el gobierno
permitía la comercialización del producto farmacéutico o del producto químico para la agricultura de
que se tratara durante el período de transición, debía -con sujeción a determinadas condiciones- conceder
derechos exclusivos de comercialización del producto durante un período de cinco años o hasta que se
concediera la patente del producto, si ésta se otorgaba antes de ese plazo.
Con algunas excepciones, la regla general es que las obligaciones enunciadas en el Acuerdo son
aplicables tanto a los derechos de propiedad intelectual existentes al final del período de transición como
a los nuevos.
ADPIC: INFORMACIÓN SOBRE LOS ADPIC
Acuerdo sobre los ADPIC: visión
general
El Acuerdo sobre los ADPIC, que entró en vigor el 1º de enero de 1995, es hasta
la fecha el acuerdo multilateral más completo sobre propiedad intelectual.
ÍNDICE:
> Disposiciones generales
> Normas de protección
> Derecho de autor
> Derechos conexos
> Marcas
> Indicaciones geográficas
> Dibujos y modelos industriales
> Patentes
> Esquemas de trazado
> información no divulgada
> Prácticas anticompetitivas

> Observancia
> Obligaciones generales
> Procedimientos y recursos
> Medidas provisionales
> Medidas en frontera
> Procedimientos penales

> Otras disposiciones


> Adquisición y mantenimiento de los derechos
> Disposiciones transitorias
> Protección de la materia existente
Las esferas de la propiedad intelectual que abarca son: derecho de autor y derechos conexos (los artistas
interpretes o ejecutantes, los productores de fonogramas y los organismos de
radiodifusión); marcas incluye marcas de servicios; indicaciones geográficas incluye indicaciones de
origen; dibujos y modelos industriales; patentesincluye la preservación de los vegetales; esquemas de
trazado; y información no divulgada incluye secretos comerciales y datos de pruebas.

En lo que se refiere a los países en desarrollo, el período general de transición era de cinco años, es decir,
hasta el 1º de enero de 2000. Además, el Acuerdo permite a los países en proceso de transformación de
una economía de planificación central en una economía de mercado que aplacen la aplicación hasta el
año 2000, si cumplen determinadas condiciones.
Se aplican normas especiales de transición si un país en desarrollo no otorgaba protección mediante
patentes de productos a un determinado sector de tecnología -especialmente, las invenciones de
productos farmacéuticos o productos químicos agrícolas- en la fecha general de aplicación del Acuerdo
para ese Miembro, es decir, en el año 2000.
Los tres principales elementos del Acuerdo son los siguientes:

• Normas. Con respecto a cada uno de los principales sectores de la propiedad intelectual que
abarca el Acuerdo sobre los ADPIC, éste establece las normas mínimas de protección que ha
de prever cada Miembro. Se define cada uno de los principales elementos de la protección:
la materia que ha de protegerse, los derechos que han de conferirse y las excepciones
permisibles a esos derechos, y la duración mínima de la protección. El Acuerdo establece
esas normas exigiendo, en primer lugar, que se cumplan las obligaciones sustantivas
estipuladas en los principales convenios de la OMPI: el Convenio de París para la Protección
de la Propiedad Industrial (el Convenio de París) y el Convenio de Berna para la Protección
de las Obras Literarias y Artísticas (el Convenio de Berna) en sus versiones más recientes.
Con excepción de las disposiciones del Convenio de Berna sobre los derechos morales,
todas las principales disposiciones sustantivas de esos Convenios se incorporan por
referencia al Acuerdo sobre los ADPIC y se convierten así en obligaciones para los países
Miembros de dicho Acuerdo. Las disposiciones pertinentes figuran en el párrafo 1 del
artículo 2 y en el párrafo 1 del artículo 9 del Acuerdo sobre los ADPIC, que se refieren,
respectivamente, al Convenio de París y al Convenio de Berna. En segundo lugar, el
Acuerdo sobre los ADPIC añade un número sustancial de obligaciones en aspectos que los
convenios antes existentes no tratan o tratan de modo que se consideró insuficiente. Así pues,
a veces se llama al Acuerdo sobre los ADPIC el Acuerdo de Berna y de París ampliado.

• Observancia. El segundo principal conjunto de disposiciones se refiere a los procedimientos


y recursos internos encaminados a la observancia de los derechos de propiedad intelectual.
En el Acuerdo se establecen algunos principios generales aplicables a todos los
procedimientos de observancia de los DPI. Además, contiene disposiciones sobre
procedimientos y recursos civiles y administrativos, medidas provisionales, prescripciones
especiales relacionadas con las medidas en frontera, y procedimientos penales, en las que se
especifican con cierto detalle los procedimientos y recursos que deben existir para que los
titulares de DPI puedan efectivamente hacer valer sus derechos.

• Solución de diferencias. En virtud del Acuerdo, las diferencias entre Miembros de la OMC
con respecto al cumplimiento de las obligaciones en la esfera de los ADPIC quedan sujetas
al procedimiento de solución de diferencias de la OMC.

Por otra parte, en el Acuerdo se recogen determinados principios fundamentales -por ejemplo, los de
trato nacional y trato de la nación más favorecida- y algunas normas generales encaminadas a evitar que
las dificultades de procedimiento para adquirir o mantener los DPI anulen las ventajas sustantivas
resultantes del Acuerdo. Las obligaciones dimanantes del Acuerdo se aplican igualmente a todos los
países Miembros, pero los países en desarrollo disponen de un plazo más largo para su aplicación.
Existen también disposiciones transitorias especiales para los casos en que los países en desarrollo no
presten actualmente protección por medio de patentes de productos al sector de los productos
farmacéuticos.
El Acuerdo sobre los ADPIC es un acuerdo de normas mínimas, que permite a los Miembros prestar una
protección más amplia a la propiedad intelectual si así lo desean. Se les deja libertad para determinar el
método apropiado de aplicación de las disposiciones del Acuerdo en el marco de sus sistemas y usos
jurídicos.
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Algunas disposiciones generales


Al igual que los anteriores principales convenios sobre propiedad intelectual, la obligación fundamental
de cada país Miembro es conceder a las personas de los demás Miembros, respecto de la protección de la
propiedad intelectual, el trato previsto en el Acuerdo. En el párrafo 3 del artículo 1 se define quiénes son
esas personas. Se les da el nombre de "nacionales", pero incluyen personas físicas o jurídicas que tienen
una relación estrecha con otros Miembros sin que hayan de ser necesariamente nacionales de éstos. Los
criterios para determinar qué personas deben beneficiarse del trato previsto en el Acuerdo son los
establecidos a tales efectos en los anteriores principales convenios sobre propiedad intelectual de la
OMPI, aplicables -naturalmente- a todos los Miembros de la OMC, sean o no parte en esos convenios.
Tales Convenios son los siguientes: el Convenio de París, el Convenio de Berna, la Convención
Internacional sobre la Protección de los Artistas Intérpretes o Ejecutantes, de los Productores de
Fonogramas y los Organismos de Radiodifusión (la Convención de Roma) y el Tratado sobre la
Propiedad Intelectual respecto de los Circuitos Integrados (el Tratado IPIC).
En los artículos 3, 4 y 5 se recogen las normas fundamentales sobre la concesión a los extranjeros de
trato nacional y trato de la nación más favorecida, que son comunes a todas las categorías de propiedad
intelectual abarcadas por el Acuerdo. Estas obligaciones comprenden no sólo las normas sustantivas de
protección, sino también cuestiones que afectan a la existencia, adquisición, alcance, mantenimiento y
observancia de los derechos de propiedad intelectual y cuestiones que se refieren al ejercicio de los
derechos de propiedad intelectual de los que trata expresamente el Acuerdo. La cláusula sobre trato
nacional prohíbe la discriminación entre los nacionales de un determinado Miembro y los nacionales de
los demás Miembros y la cláusula sobre trato de la nación más favorecida prohíbe la discriminación
entre los nacionales de los demás Miembros. Con respecto a la obligación de concesión de trato nacional,
el Acuerdo sobre los ADPIC autoriza también las excepciones permitidas en virtud de los anteriores
Convenios de la OMPI sobre propiedad intelectual. Cuando esas excepciones prevén la reciprocidad
material, se permite también la consiguiente excepción del trato n.m.f. (por ejemplo, la comparación de
los plazos de protección del derecho de autor por encima del plazo mínimo exigido en el Acuerdo sobre
los ADPIC según lo dispuesto en el artículo 7 8) del Convenio de Berna incorporado a dicho Acuerdo).
Se prevén asimismo algunas otras excepciones limitadas de la obligación de concesión de trato n.m.f.
Los objetivos generales del Acuerdo sobre los ADPIC figuran en el preámbulo del Acuerdo, en el que se
reproducen los objetivos de negociación básicos de la Ronda Uruguay establecidos en la esfera de los
ADPIC en la Declaración de Punta del Este de 1986 y en el balance a mitad de período realizado en
1988/89. Estos objetivos son, entre otros, reducir las distorsiones del comercio internacional y los
obstáculos a ese comercio, fomentar una protección eficaz y adecuada de los derechos de propiedad
intelectual y asegurarse de que las medidas y procedimientos destinados a hacer respetar dichos derechos
no se conviertan a su vez en obstáculos al comercio legítimo. Estos objetivos deben leerse
conjuntamente con el artículo 7, titulado "Objetivos", en el que se dice que la protección y la
observancia de los derechos de propiedad intelectual deberán contribuir a la promoción de la innovación
tecnológica y a la transferencia y difusión de la tecnología, en beneficio recíproco de los productores y
de los usuarios de conocimientos tecnológicos y de modo que favorezcan el bienestar social y
económico y el equilibrio de derechos y obligaciones. En el artículo 8, titulado "Principios", se reconoce
el derecho de los Miembros a adoptar medidas por motivos de salud pública y otras razones de interés
público y a prevenir el abuso de los derechos de propiedad intelectual, a condición de que tales medidas
sean compatibles con las disposiciones del Acuerdo sobre los ADPIC.
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Normas de protección sustantivas


Derecho de autor Volver al principio
En las negociaciones de la Ronda Uruguay se reconoció que el Convenio de Berna preveía ya, en su
mayor parte, las normas básicas adecuadas de protección del derecho de autor. Así pues, se acordó que
el punto de partida debía ser el nivel de protección existente en virtud de la última Acta de ese Convenio,
el Acta de París de 1971. Ese punto de partida queda expresado en el párrafo 1 del artículo 9, en el que
se establece que los Miembros están obligados a observar las disposiciones sustantivas del Acta de París
de 1971 del Convenio de Berna, es decir, los artículos 1 a 21 de dicho Convenio (1971) y el apéndice del
mismo. No obstante, en virtud del Acuerdo sobre los ADPIC, los Miembros no tendrán derechos ni
obligaciones respecto de los derechos conferidos por el artículo 6bis de ese Convenio -es decir, los
derechos morales (el derecho a reclamar la autoría y a oponerse a todo acto de menosprecio con respecto
a una obra que sea perjudicial para el honor o la reputación del autor)- ni respecto de los derechos que se
derivan del mismo. Las disposiciones del Convenio de Berna a que se hace referencia tratan de
cuestiones tales como la materia objeto de protección, el plazo mínimo de protección y los derechos que
han de conferirse y las limitaciones permisibles a esos derechos. En el apéndice se autoriza a los países
en desarrollo, en determinadas condiciones, a poner ciertas limitaciones al derecho de traducción y al
derecho de reproducción.
Además de exigir la observancia de las normas fundamentales del Convenio de Berna, el Acuerdo sobre
los ADPIC da aclaraciones y añade algunos puntos específicos.
En el párrafo 2 del articulo 9 se confirma que la protección del derecho de autor abarcara las expresiones
pero no las ideas, procedimientos, métodos de operación o conceptos matemáticos en si.
En el párrafo 1 del artículo 10 se establece que los programas de ordenador, sean programas fuente o
programas objeto, serán protegidos como obras literarias en virtud del Convenio de Berna (1971). Esta
disposición confirma que los programas de ordenador deben estar protegidos mediante el derecho de
autor y que se aplicarán también a ellos las disposiciones del Convenio de Berna aplicables a las obras
literarias. Confirma asimismo que la forma en que se presente el programa, ya sea programa fuente o
programa objeto, no afecta a la protección. La obligación de proteger los programas de ordenador como
obras literarias significa, por ejemplo, que únicamente pueden aplicarse a los programas de ordenador
las limitaciones aplicables a las obras literarias. Confirma, en fin, esa disposición que el plazo general de
protección de 50 años es aplicable a los programas de ordenador. No podrán aplicarse los plazos,
posiblemente más breves, aplicables a las obras fotográficas o de arte aplicado.
En el párrafo 2 del artículo 10 se aclara que las bases de datos y demás compilaciones de datos o de otros
materiales serán protegidas como tales mediante el derecho de autor, aun cuando las bases de datos
incluyan datos que como tales no estén protegidos por el derecho de autor. Las bases de datos son
acreedoras a protección mediante derecho de autor siempre que, por razones de la selección o
disposición de sus contenidos, constituyan creaciones de carácter intelectual. Se confirma asimismo en
esta disposición que las bases de datos han de protegerse sea cual fuere la forma que revistan: forma
legible por máquina u otra forma. Se aclara también que la protección no abarcará los datos o materiales
en sí mismos y que se entenderá sin perjuicio de cualquier derecho de autor que subsista respecto de los
datos o materiales en sí mismos.
En el artículo 11 se dispone que, al menos respecto de los programas de ordenador y -en determinadas
circunstancias- las obras cinematográficas, los autores tendrán el derecho de autorizar o prohibir el
arrendamiento comercial al público de los originales o copias de sus obras amparadas por el derecho de
autor. Con respecto a las obras cinematográficas, el derecho exclusivo de arrendamiento está sujeto al
llamado criterio de menoscabo: se exceptuará a un Miembro de esa obligación a menos que el
arrendamiento haya dado lugar a una realización muy extendida de copias de esas obras que menoscabe
en medida importante el derecho exclusivo de reproducción conferido en dicho Miembro a los autores y
sus derechohabientes. En lo referente a los programas de ordenador, esa obligación no se aplica a los
arrendamientos cuyo objeto esencial no sea el programa en sí.
De conformidad con la norma general contenida en el párrafo 1) del artículo 7 del Convenio de Berna,
incorporado al Acuerdo sobre los ADPIC, la protección durará mientras viva el autor y 50 años después
de su muerte. En los párrafos 2 a 4 de dicho artículo se permiten específicamente plazos más breves en
algunos casos. Estas disposiciones quedan complementadas por el artículo 12 del Acuerdo sobre los
ADPIC, en el que se dispone que, cuando la duración de la protección de una obra que no sea fotográfica
o de arte aplicado se calcule sobre una base distinta de la vida de una persona física, esa duración será de
no menos de 50 años contados desde el final del año civil de la publicación autorizada o, a falta de tal
publicación autorizada dentro de un plazo de 50 años a partir de la realización de la obra, de 50 años
contados a partir del final del año civil de su realización.
En el artículo 13 se dispone que los Miembros circunscriban las limitaciones o excepciones impuestas a
los derechos exclusivos a determinados casos especiales que no atenten contra la explotación normal de
la obra ni causen un perjuicio injustificado a los intereses legítimos del titular de los derechos. Es ésta
una disposición horizontal aplicable a todas las limitaciones y excepciones permitidas en virtud de las
disposiciones del Convenio de Berna y el apéndice del mismo, incorporadas al Acuerdo sobre los
ADPIC. En este último se permiten también esas limitaciones, pero la disposición citada deja claro que
deben aplicarse de manera que no perjudique los intereses legítimos del titular de los derechos.
Derechos conexos Volver al principio
Las disposiciones sobre la protección de los artistas intérpretes o ejecutantes, los productores de
fonogramas y los organismos de radiodifusión figuran en el artículo 14. Con arreglo al párrafo 1 de
dicho artículo, los artistas intérpretes o ejecutantes tendrán la facultad de impedir la fijación sin su
autorización de sus interpretaciones o ejecuciones (por ejemplo, la grabación de una ejecución musical
en directo). El derecho de fijación únicamente abarca las grabaciones sonoras, no las audiovisuales. Los
artistas intérpretes o ejecutantes deben también poder impedir la reproducción de tales fijaciones.
Tendrán asimismo la facultad de impedir la difusión por medios inalámbricos y la comunicación al
público, sin su autorización, de sus interpretaciones o ejecuciones en directo.
De conformidad con el párrafo 2 del artículo 14, los Miembros han de otorgar a los productores de
fonogramas el derecho exclusivo de reproducción. Además, en virtud del párrafo 4 del mismo artículo,
han de otorgar el derecho exclusivo de arrendamiento por lo menos a los productores de fonogramas.
Las disposiciones relativas a los derechos de arrendamiento son asimismo aplicables a todos los demás
titulares de los derechos sobre los fonogramas según los determine la legislación nacional. Este derecho
tiene el mismo alcance que el derecho de arrendamiento relativo a los programas de ordenador. Por
consiguiente, no está sujeto al criterio de menoscabo como en el caso de las obras cinematográficas. No
obstante, está limitado por una cláusula de anterioridad, con arreglo a la cual un Miembro que el 15 de
abril de 1994 -es decir, la fecha de la firma del Acuerdo de Marrakech- aplicara un sistema de
remuneración equitativa de los titulares de derechos en lo que se refiere al arrendamiento de fonogramas
podrá mantener ese sistema siempre que el arrendamiento comercial de los fonogramas no esté
produciendo un menoscabo importante de los derechos exclusivos de reproducción de los titulares de los
derechos.
En virtud del párrafo 3 del artículo 14, los organismos de radiodifusión tendrán el derecho de prohibir
que, sin su autorización, se proceda a la fijación, la reproducción de las fijaciones y la retransmisión por
medios inalámbricos de las emisiones, así como a la comunicación al público de sus emisiones de
televisión. No obstante, no es necesario otorgar esos derechos a los organismos de radiodifusión si los
titulares de los derechos de autor sobre la materia objeto de las emisiones tienen la posibilidad de
impedir esos actos, a reserva de lo dispuesto en el Convenio de Berna.
La duración de la protección es, como mínimo, de 50 años para los artistas intérpretes o ejecutantes y los
productores de fonogramas y de 20 años para los organismos de radiodifusión (párrafo 5 del artículo 14).
En el párrafo 6 del artículo 14 se dispone que, en relación con la protección de los artistas intérpretes o
ejecutantes, los productores de fonogramas y los organismos de radiodifusión, todo Miembro podrá
establecer condiciones, limitaciones, excepciones y reservas en la medida permitida por la Convención
de Roma.
Marcas de fábrica o de comercio Volver al principio
La norma fundamental contenida en el artículo 15 es que cualquier signo o combinación de signos que
sea capaz de distinguir los bienes o servicios de una empresa de los de otras empresas debe poder
registrarse como marca de fábrica o de comercio, siempre que sea perceptible visualmente. Tales signos,
en particular las palabras, incluidos los nombres de persona, las letras, los números, los elementos
figurativos y las combinaciones de colores, así como cualquier combinación de estos signos, deben
poder registrarse como marcas de fábrica o de comercio.
Cuando los signos no sean intrínsecamente capaces de distinguir los bienes o servicios pertinentes, los
países Miembros podrán exigir, como condición adicional para que puedan ser objeto de registro como
marcas de fábrica o de comercio, que hayan adquirido ese carácter distintivo mediante su uso. Los
Miembros tienen libertad para permitir o no el registro de signos que no sean perceptibles visualmente
(por ejemplo, marcas sonoras u olfativas).
Los Miembros podrán supeditar al uso la posibilidad de registro. No obstante, no se permitirá que se
ponga como condición para la presentación de una solicitud de registro el uso efectivo de una marca de
fábrica o de comercio, y deberán haber transcurrido por lo menos tres años a contar de la fecha de
presentación de la solicitud para que el no haber realizado un intento de uso sirva de base para denegar la
solicitud (párrafo 3 del artículo 15).
En el Acuerdo se dispone que las marcas de servicios sean protegidas de la misma manera que las
marcas distintivas de productos (véanse, por ejemplo, el párrafo 1 del artículo 15, el párrafo 2 del
artículo 16 y el párrafo 3 del artículo 62).
El titular de una marca de fábrica o de comercio registrada debe gozar del derecho exclusivo de impedir
que terceros, sin su consentimiento, utilicen en el curso de operaciones comerciales signos idénticos o
similares para bienes o servicios que sean idénticos o similares a aquellos para los que se haya registrado
la marca, cuando ese uso dé lugar a probabilidad de confusión. En el caso de que se use un signo
idéntico para bienes o servicios idénticos, debe presumirse que existe probabilidad de confusión (párrafo
1 del artículo 16).
El Acuerdo sobre los ADPIC contiene algunas disposiciones sobre marcas notoriamente conocidas que
complementan la protección prevista en el artículo 6bis del Convenio de París (incorporado por
referencia al Acuerdo sobre los ADPIC), que obliga a los Miembros a denegar o anular el registro y a
prohibir el uso de una marca que esté en pugna con una marca notoriamente conocida. En primer lugar,
las disposiciones de ese artículo deben aplicarse también a los servicios. En segundo lugar, se exige que
se tenga en cuenta la notoriedad de la marca en el sector pertinente del público obtenida no solamente
como consecuencia de su uso sino también por otros medios, incluida su promoción. Por otra parte, la
protección de las marcas notoriamente conocidas registradas debe abarcar a los bienes o servicios que no
sean similares a aquellos para los cuales haya sido registrada la marca de fábrica o de comercio, a
condición de que su uso indique una conexión entre esos bienes o servicios y el titular de la marca
registrada y de que sea probable que ese uso lesione los intereses del titular (párrafos 2 y 3 del artículo
16).
Los Miembros podrán establecer excepciones limitadas de los derechos conferidos por una marca de
fábrica o de comercio, por ejemplo el uso leal de términos descriptivos, a condición de que en ellas se
tengan en cuenta los intereses legítimos del titular de la marca y de terceros (artículo 17).
El registro inicial de una marca de fábrica o de comercio y cada una de las renovaciones del registro
tendrán una duración de no menos de siete años. El registro de una marca de fábrica o de comercio será
renovable indefinidamente (artículo 18).
La anulación del registro de una marca sobre la base de falta de uso sólo podrá tener lugar después de un
período ininterrumpido de tres años de falta de uso, a menos que el titular de la marca de fábrica o de
comercio demuestre que ha habido razones válidas basadas en la existencia de obstáculos a dicho uso. Se
reconocerán como razones válidas de falta de uso las circunstancias que surjan independientemente de la
voluntad del titular de la marca, como las restricciones a la importación u otras restricciones impuestas
oficialmente. Cuando esté controlada por el titular, debe considerarse que la utilización de una marca de
fábrica o de comercio por otra persona constituye uso de la marca a los efectos de mantener el registro
(artículo 19).
Se exige asimismo que no se complique injustificablemente el uso de una marca de fábrica o de
comercio en el curso de operaciones comerciales con exigencias especiales, como por ejemplo el uso
con otra marca de fábrica o de comercio, el uso en una forma especial o el uso de una manera que
menoscabe la capacidad de la marca para distinguir los bienes o servicios (artículo 20).
Indicaciones geográficas Volver al principio
A los efectos del Acuerdo, las indicaciones geográficas se definen como indicaciones que identifiquen
un producto como originario del territorio de un Miembro o de una región o localidad de ese territorio,
cuando determinada calidad, reputación u otra característica del producto sea imputable
fundamentalmente a su origen geográfico (párrafo 1 del artículo 22). Así pues, esta definición especifica
que tanto la calidad como la reputación u otra característica de un producto puede ser base suficiente de
una indicación geográfica cuando sea imputable fundamentalmente al origen geográfico del producto.
En relación con las indicaciones geográficas, las partes interesadas deben disponer de medios legales
para impedir la utilización de indicaciones que induzcan a error al público en cuanto al origen geográfico
del producto, así como cualquier otra utilización que constituya un acto de competencia desleal, en el
sentido del artículo 10bisdel Convenio de París (párrafo 2 del artículo 22).
Debe denegarse o invalidarse de oficio si la legislación lo permite, o a petición de una parte interesada,
el registro de una marca de fábrica o de comercio en la que se utilice una indicación geográfica de
manera que induzca a error al público en cuanto al verdadero lugar de origen (párrafo 3 del artículo 22).
En el artículo 23 se estipula que las partes interesadas deben disponer de medios legales para impedir la
utilización de una indicación geográfica que identifique vinos para productos de ese género que no sean
originarios del lugar designado por la indicación geográfica de que se trate. Ello es aplicable aun cuando
no se induzca a error al público ni exista competencia desleal y aun cuando se indique el verdadero
origen del producto o la indicación geográfica vaya acompañada de expresiones tales como "clase",
"tipo", "estilo", "imitación" u otras análogas. Debe prestarse una protección similar a las indicaciones
geográficas que identifiquen bebidas espirituosas cuando se utilicen para productos de ese género.
Asimismo, debe prestarse la correspondiente protección contra el registro de marcas de fábrica o de
comercio.
En el artículo 24 se prevén diversas excepciones a la protección de las indicaciones geográficas. Estas
excepciones adquieren especial importancia con respecto a la protección adicional de las indicaciones
geográficas relativas a vinos y bebidas espirituosas. Por ejemplo, los Miembros no están obligados a
prestar protección a una indicación geográfica cuando se haya convertido en el término genérico para
describir al producto en cuestión (párrafo 6). Las medidas adoptadas para aplicar estas disposiciones no
lesionarán derechos a marcas de fábrica o de comercio anteriores adquiridos de buena fe (párrafo 5). En
determinadas circunstancias, podrá autorizarse el uso continuado de una indicación geográfica con
respecto a vinos o bebidas espirituosas en la misma escala y con el mismo carácter que anteriormente
(párrafo 4). Los Miembros que se acojan a estas excepciones deben estar dispuestos a entablar
negociaciones sobre su aplicación continuada a indicaciones geográficas determinadas (párrafo 1). No
podrán utilizarse esas excepciones para reducir la protección de las indicaciones geográficas existentes
con anterioridad a la entrada en vigor del Acuerdo sobre los ADPIC (párrafo 3). El Consejo de los
ADPIC mantendrá en examen la aplicación de las disposiciones relativas a la protección de las
indicaciones geográficas (párrafo 2).
Dibujos y modelos industriales Volver al principio
El párrafo 1 del artículo 25 del Acuerdo sobre los ADPIC obliga a los Miembros a prestar protección a
los dibujos y modelos industriales creados independientemente que sean nuevos u originales. Los
Miembros podrán establecer que los dibujos y modelos no son nuevos u originales si no difieren en
medida significativa de dibujos o modelos conocidos o de combinaciones de características de dibujos o
modelos conocidos. Los Miembros podrán establecer que esa protección no se extienda a los dibujos y
modelos dictados esencialmente por consideraciones técnicas o funcionales.
En el párrafo 2 del artículo 25 figura una disposición especial encaminada a tener en cuenta el breve
ciclo de vida y el gran número de nuevos dibujos y modelos en el sector textil: las prescripciones para
conseguir la protección de esos dibujos o modelos -particularmente en lo que se refiere a costo, examen
o publicación- no deben dificultar injustificablemente las posibilidades de búsqueda y obtención de esa
protección. Los Miembros tendrán libertad para cumplir esta obligación mediante la legislación sobre
dibujos o modelos industriales o mediante la legislación sobre el derecho de autor.
En el párrafo 1 del artículo 26 se exige a los Miembros que otorguen al titular de un dibujo o modelo
industrial protegido el derecho de impedir que terceros, sin su consentimiento, fabriquen, vendan o
importen artículos que ostenten o incorporen un dibujo o modelo que sea una copia, o fundamentalmente
una copia, del dibujo o modelo protegido, cuando esos actos se realicen con fines comerciales.
El párrafo 2 del artículo 26 autoriza a los Miembros a prever excepciones limitadas de la protección de
los dibujos y modelos industriales, a condición de que tales excepciones no atenten de manera
injustificable contra la explotación normal de los dibujos y modelos industriales protegidos ni causen un
perjuicio injustificado a los legítimos intereses del titular del dibujo o modelo protegido, teniendo en
cuenta los intereses legítimos de terceros.
La duración de la protección prestada equivaldrá a 10 años como mínimo (párrafo 3 del artículo 26). La
expresión "equivaldrá a" permite dividir el plazo en, por ejemplo, dos períodos de cinco años.
Patentes Volver al principio
El Acuerdo sobre los ADPIC exige a los países Miembros que otorguen patentes por todas las
invenciones, ya sean de productos o de procedimientos, en todos los campos de la tecnología sin
discriminación, con sujeción a los criterios normales de innovación, invención y aplicación industrial.
Exige asimismo que puedan obtenerse las patentes y gozarse de los derechos de patente sin
discriminación por el lugar de la invención o el hecho de que los productos sean importados o de
producción nacional (párrafo 1 del artículo 27).
Se prevén tres excepciones permisibles de la norma básica sobre patentabilidad. Una de ellas se refiere a
las invenciones contrarias al orden público o la moralidad; incluye explícitamente las invenciones
peligrosas para la salud o la vida de las personas o de los animales o la preservación de los vegetales, o
gravemente perjudiciales para el medio ambiente. El recurso a esta excepción está sujeto a la condición
de que deba también impedirse la explotación comercial de la invención y que ello sea necesario para
proteger el orden público o la moralidad (párrafo 2 del artículo 27).
La segunda excepción consiste en que los Miembros pueden excluir de la patentabilidad los métodos de
diagnóstico, terapéuticos y quirúrgicos para el tratamiento de personas o animales (apartado a) del
párrafo 3 del artículo 27).
La tercera es que los Miembros pueden excluir las plantas y los animales, excepto los microorganismos,
y los procedimientos esencialmente biológicos para la producción de plantas o animales que no sean
procedimientos no biológicos o microbiológicos. Sin embargo, todo país que excluya las obtenciones
vegetales de la protección por medio de patentes debe prever un eficaz sistema de protección sui generis.
Por otra parte, esta disposición será objeto de examen en su totalidad cuatro años después de la entrada
en vigor del Acuerdo (apartado b) del párrafo 3 del artículo 27).
Las patentes de productos deben conferir derechos exclusivos de fabricación, uso, oferta para la venta,
venta e importación para esos fines. La protección mediante patentes de procedimientos debe conferir
derechos no solamente sobre el uso del procedimiento sino también sobre los productos directamente
obtenidos por medio de dicho procedimiento. Los titulares de patentes tendrán asimismo el derecho de
cederlas o transferirlas por sucesión y de concertar contratos de licencia (artículo 28).
Los Miembros podrán prever excepciones limitadas de los derechos exclusivos conferidos por una
patente, a condición de que tales excepciones no atenten de manera injustificable contra la explotación
normal de la patente ni causen un perjuicio injustificado a los legítimos intereses del titular de la patente,
teniendo en cuenta los intereses legítimos de terceros (artículo 30)
La protección conferida no expirará antes de que haya transcurrido un período de 20 años contados a
partir de la fecha de presentación de la solicitud (artículo 33).
Los Miembros exigirán al solicitante de una patente que divulgue la invención de manera
suficientemente clara y completa para que las personas capacitadas en la técnica de que se trate puedan
llevar a efecto la invención, y podrán exigir que el solicitante indique la mejor manera de llevar a efecto
la invención que conozca el inventor en la fecha de la presentación de la solicitud o, si se reivindica la
prioridad, en la fecha de prioridad reivindicada en la solicitud (párrafo 1 del artículo 29).
Cuando el objeto de una patente sea un procedimiento para obtener un producto, las autoridades
judiciales estarán facultadas para ordenar que el demandado pruebe que el procedimiento para obtener
un producto idéntico es diferente del procedimiento patentado si se dan determinadas circunstancias que
indiquen la probabilidad de que se haya utilizado el procedimiento patentado (artículo 34).
Se autoriza el otorgamiento obligatorio de licencias y el uso por el gobierno sin autorización del titular
de los derechos, pero con sujeción a determinadas condiciones encaminadas a proteger los legítimos
intereses del titular de los derechos. Entre esas condiciones, establecidas principalmente en el artículo 31,
figuran las siguientes: la obligación, como norma general, de otorgar esas licencias únicamente si se han
realizado intentos infructuosos de obtener una licencia voluntaria en términos y condiciones razonables y
en un plazo prudencial; la obligación de pagar una remuneración adecuada según las circunstancias
propias de cada caso, teniendo en cuenta el valor económico de la licencia; y la prescripción de que las
decisiones estén sujetas a revisión judicial u otra revisión independiente por una autoridad superior
diferente. Algunas de esas condiciones se mitigan cuando las licencias obligatorias se emplean para
poner remedio a prácticas que se haya determinado son anticompetitivas mediante un procedimiento
judicial. Estas condiciones deben leerse conjuntamente con las disposiciones conexas del párrafo 1 del
artículo 27, en el que se exige que se pueda gozar de los derechos de patente sin discriminación por el
campo de tecnología o el hecho de que los productos sean importados o de producción nacional.
Esquemas de trazado de los circuitos integrados Volver al principio
El artículo 35 del Acuerdo sobre los ADPIC exige a los países Miembros la protección de los esquemas
de trazado de los circuitos integrados de conformidad con las disposiciones del Tratado IPIC (el Tratado
sobre la Propiedad Intelectual respecto de los Circuitos Integrados), negociado bajo los auspicios de la
OMPI en 1989. Estas disposiciones tratan, entre otras, de las siguientes cuestiones: definiciones de
"circuito integrado" y "esquema de trazado (topografía)", prescripciones en materia de protección,
derechos exclusivos, y limitaciones, así como explotación, registro y divulgación. Por "circuito
integrado" se entiende un producto, en su forma final o en una forma intermedia, en el que los elementos
-uno de los cuales por lo menos es un elemento activo- y algunas o la totalidad de las interconexiones
están constituidos íntegramente en o sobre un soporte y cuya finalidad es la realización de una función
electrónica. Por "esquema de trazado (topografía)" se entiende la disposición tridimensional, sea cual
fuere su expresión, de los elementos -uno de los cuales por lo menos es un elemento activo- y de algunas
o la totalidad de las interconexiones de un circuito integrado, o esa disposición tridimensional preparada
para un circuito integrado en proyecto de fabricación. La obligación de protección es aplicable a los
esquemas de trazado que sean originales, en el sentido de que sean el resultado del esfuerzo intelectual
de sus creadores, y que no sean corrientes entre los creadores de esquemas de trazado y los fabricantes
de circuitos integrados en el momento de su creación. Entre los derechos exclusivos figuran el derecho
de reproducción y el derecho de importación, venta o distribución de otro modo con fines comerciales.
Se prevén algunas limitaciones a esos derechos.
Además de exigir a los países Miembros que protejan los esquemas de trazado de los circuitos
integrados de conformidad con las disposiciones del Tratado IPIC, el Acuerdo sobre los ADPIC aclara y
desarrolla varias cuestiones: la duración de la protección (diez años en vez de ocho, artículo 38), la
aplicabilidad de la protección a artículos que contengan circuitos integrados ilícitos (última frase del
artículo 36) y el trato de los infractores que no hayan sabido que cometían una infracción (párrafo 1 del
artículo 37). En caso de concesión de licencias obligatorias o no voluntarias de esquemas de trazado o de
uso de los mismos por o para los gobiernos sin autorización del titular del derecho, son aplicables
mutatis mutandis las condiciones establecidas en el artículo 31 del Acuerdo sobre los ADPIC, en vez de
las disposiciones del Tratado IPIC sobre licencias obligatorias (párrafo 2 del artículo 37).
Protección de la información no divulgada Volver al principio
En el Acuerdo sobre los ADPIC se exige que la información no divulgada -secretos comerciales o
conocimientos tecnoprácticos(know-how)- goce de protección. De conformidad con el párrafo 2 del
artículo 39, debe prestarse protección a la información que sea secreta, que tenga un valor comercial por
ser secreta y que haya sido objeto de medidas razonables para mantenerla secreta. No se prescribe en el
Acuerdo que la información no divulgada se trate como una forma de propiedad, pero sí se prescribe que
las personas que tengan legítimamente control de esa información tengan la posibilidad de impedir que
se divulgue a terceros o sea adquirida o utilizada por terceros sin su consentimiento de manera contraria
a los usos comerciales honestos. La expresión "de manera contraria a los usos comerciales honestos"
significa prácticas tales como el incumplimiento de contratos, el abuso de confianza, la instigación a la
infracción, y también la adquisición de información no divulgada por terceros que supieran, o que no
supieran por negligencia grave, que la adquisición implicaba tales prácticas.
El Acuerdo contiene también disposiciones sobre los datos de pruebas y otros datos no divulgados cuya
presentación exijan los gobiernos como condición para aprobar la comercialización de productos
farmacéuticos o de productos químicos agrícolas que utilizan nuevas entidades químicas. En esas
circunstancias, el gobierno Miembro de que se trate debe proteger los datos contra todo uso comercial
desleal. Además, los Miembros deben proteger esos datos de toda divulgación, excepto cuando sea
necesario para proteger al público, o salvo que se adopten medidas para garantizar la protección de los
datos contra todo uso comercial desleal.
Control de las prácticas anticompetitivas en las licencias contractuales Volver al principio
En el artículo 40 del Acuerdo sobre los ADPIC se reconoce que algunas prácticas o condiciones
relativas a la concesión de las licencias de los derechos de propiedad intelectual, que restringen la
competencia, pueden tener efectos perjudiciales para el comercio y pueden impedir la transferencia y la
divulgación de la tecnología (párrafo 1). Los países Miembros podrán adoptar, de forma compatible con
las demás disposiciones del Acuerdo, medidas apropiadas para impedir o controlar las prácticas relativas
a la concesión de licencias de los derechos de propiedad intelectual que sean abusivas o anticompetitivas
(párrafo 2). El Acuerdo establece un mecanismo por el que todo país que desee adoptar medidas contra
prácticas de ese tipo en las que intervengan empresas de otro país Miembro podrá entablar consultas con
ese otro Miembro e intercambiar información públicamente disponible y no confidencial que sea
pertinente a la cuestión de que se trate, así como otras informaciones de que disponga ese Miembro, con
arreglo a la ley nacional y a reserva de que se concluyan acuerdos mutuamente satisfactorios sobre la
protección de su carácter confidencial por el Miembro solicitante (párrafo 3). Análogamente, todo país
cuyas empresas estén sujetas a medidas de ese tipo en otro país Miembro podrá entablar consultas con
ese Miembro (párrafo 4).
AC UERDO SOBRE LOS ADP IC MODIFICADO

Acuerdo sobre los ADPIC modificado


(texto modificado el 23 de enero de 2017)

El Acuerdo sobre los ADPIC es el Anexo 1C del Acuerdo de Marrakech por el


que se establece la Organización Mundial del Comercio, firmado en Marrakech,
Marruecos, el 15 de abril de 1994.
El Acuerdo sobre los ADPIC se modificó por medio del Protocolo de 6 de
diciembre de 2005, que entró en vigor el 23 de enero de 2017. La enmienda
incorporó un nuevo artículo 31bis al Acuerdo, así como un anexo y un apéndice.
Estos textos establecen el fundamento jurídico que permite a los Miembros de la
OMC conceder licencias obligatorias especiales exclusivamente para producir
medicamentos genéricos asequibles y exportarlos a otros Miembros que no
pueden producir en su territorio los medicamentos que necesitan en cantidad
suficiente para sus pacientes.
AC UERDO SOBRE LOS ADP IC MODIFICADO

Preámbulo
También en esta página:

• PREÁMBULO
• PARTE I Disposiciones generales y principios básicos
• PARTE II Normas relativas a la existencia, alcance y ejercicio de los derechos de propiedad
intelectual
• 1. Derecho de autor y derechos conexos
• 2. Marcas de fábrica o de comercio
• 3. Indicaciones geográficas
• 4. Dibujos y modelos industriales
• 5. Patentes
• 6. Esquemas de trazado (topografías) de los circuitos integrados
• 7. Protección de la información no divulgada
• 8. Control de las prácticas anticompetitivas en las licencias contractuales
• PARTE III Observancia de los derechos de propiedad intelectual
• 1. Obligaciones generales
• 2. Procedimientos y recursos civiles y administrativos
• 3. Medidas provisionales
• 4. Prescripciones especiales relacionadas con las medidas en frontera
• 5. Procedimientos penales
• PARTE IV Adquisición y mantenimiento de los derechos de propiedad intelectual y
procedimientos contradictorios relacionados
• PARTE V Prevención y solución de diferencias
• PARTE VI Disposiciones transitoria
• PARTE VII Disposiciones institucionales; disposiciones finales
• Anexo y Apéndice del Acuerdo sobre los ADPI

Los Miembros,
Deseosos de reducir las distorsiones del comercio internacional y los obstáculos al mismo, y teniendo
en cuenta la necesidad de fomentar una protección eficaz y adecuada de los derechos de propiedad
intelectual y de asegurarse de que las medidas y procedimientos destinados a hacer respetar dichos
derechos no se conviertan a su vez en obstáculos al comercio legítimo;
Reconociendo, para este fin, la necesidad de nuevas normas y disciplinas relativas a:
(a) la aplicabilidad de los principios básicos del GATT de 1994 y de los acuerdos o convenios
internacionales pertinentes en materia de propiedad intelectual;

(b) la provisión de normas y principios adecuados relativos a la existencia, alcance y ejercicio de los
derechos de propiedad intelectual relacionados con el comercio;

(c) la provisión de medios eficaces y apropiados para hacer respetar los derechos de propiedad
intelectual relacionados con el comercio, tomando en consideración las diferencias entre los sistemas
jurídicos nacionales;

(d) la provisión de procedimientos eficaces y ágiles para la prevención y solución multilaterales de las
diferencias entre los gobiernos; y

(e) disposiciones transitorias encaminadas a conseguir la más plena participación en los resultados de las
negociaciones;
Reconociendo la necesidad de un marco multilateral de principios, normas y disciplinas relacionados
con el comercio internacional de mercancías falsificadas;
Reconociendo que los derechos de propiedad intelectual son derechos privados;
Reconociendo los objetivos fundamentales de política general pública de los sistemas nacionales de
protección de los derechos de propiedad intelectual, con inclusión de los objetivos en materia de
desarrollo y tecnología;
Reconociendo asimismo las necesidades especiales de los países menos adelantados Miembros por lo
que se refiere a la aplicación, a nivel nacional, de las leyes y reglamentos con la máxima flexibilidad
requerida para que esos países estén en condiciones de crear una base tecnológica sólida y viable;
Insistiendo en la importancia de reducir las tensiones mediante el logro de compromisos más firmes
de resolver por medio de procedimientos multilaterales las diferencias sobre cuestiones de propiedad
intelectual relacionadas con el comercio;
Deseosos de establecer unas relaciones de mutuo apoyo entre la OMC y la Organización Mundial de
la Propiedad Intelectual (denominada en el presente Acuerdo “OMPI”) y otras organizaciones
internacionales competentes;
Convienen en lo siguiente:

Parte I — Disposiciones generales y principios básicos


También en esta página:
Artículo 1
Naturaleza y alcance de las obligaciones
1. Los Miembros aplicarán las disposiciones del presente Acuerdo. Los Miembros podrán prever en su
legislación, aunque no estarán obligados a ello, una protección más amplia que la exigida por el presente
Acuerdo, a condición de que tal protección no infrinja las disposiciones del mismo. Los Miembros
podrán establecer libremente el método adecuado para aplicar las disposiciones del presente Acuerdo en
el marco de su propio sistema y práctica jurídicos.
2. A los efectos del presente Acuerdo, la expresión “propiedad intelectual” abarca todas las categorías
de propiedad intelectual que son objeto de las secciones 1 a 7 de la Parte II.
3. Los Miembros concederán a los nacionales de los demás Miembros. (1) el trato previsto en el
presente Acuerdo. Respecto del derecho de propiedad intelectual pertinente, se entenderá por nacionales
de los demás Miembros las personas físicas o jurídicas que cumplirían los criterios establecidos para
poder beneficiarse de la protección en el Convenio de París (1967), el Convenio de Berna (1971), la
Convención de Roma y el Tratado sobre la Propiedad Intelectual respecto de los Circuitos Integrados, si
todos los Miembros de la OMC fueran miembros de esos convenios.(2)Todo Miembro que se valga de
las posibilidades estipuladas en el párrafo 3 del artículo 5 o en el párrafo 2 del artículo 6 de la
Convención de Roma lo notificará según lo previsto en esas disposiciones al Consejo de los Aspectos de
los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (el “Consejo de los ADPIC”).
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Artículo 2
Convenios sobre propiedad intelectual
1. En lo que respecta a las Partes II, III y IV del presente Acuerdo, los Miembros cumplirán los
artículos 1 a 12 y el artículo 19 del Convenio de París (1967).
2. Ninguna disposición de las Partes I a IV del presente Acuerdo irá en detrimento de las obligaciones
que los Miembros puedan tener entre sí en virtud del Convenio de París, el Convenio de Berna, la
Convención de Roma y el Tratado sobre la Propiedad Intelectual respecto de los Circuitos Integrados.
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Artículo 3
Trato nacional
1. Cada Miembro concederá a los nacionales de los demás Miembros un trato no menos favorable que
el que otorgue a sus propios nacionales con respecto a la protección (3) de la propiedad intelectual, a
reserva de las excepciones ya previstas en, respectivamente, el Convenio de París (1967), el Convenio de
Berna (1971), la Convención de Roma o el Tratado sobre la Propiedad Intelectual respecto de los
Circuitos Integrados. En lo que concierne a los artistas intérpretes o ejecutantes, los productores de
fonogramas y los organismos de radiodifusión, esta obligación sólo se aplica a los derechos previstos en
el presente Acuerdo. Todo Miembro que se valga de las posibilidades estipuladas en el artículo 6 del
Convenio de Berna (1971) o en el párrafo 1 b) del artículo 16 de la Convención de Roma lo notificará
según lo previsto en esas disposiciones al Consejo de los ADPIC.
2. Los Miembros podrán recurrir a las excepciones permitidas en el párrafo 1 en relación con los
procedimientos judiciales y administrativos, incluida la designación de un domicilio legal o el
nombramiento de un agente dentro de la jurisdicción de un Miembro, solamente cuando tales
excepciones sean necesarias para conseguir el cumplimiento de leyes y reglamentos que no sean
incompatibles con las disposiciones del presente Acuerdo, y cuando tales prácticas no se apliquen de
manera que constituya una restricción encubierta del comercio.
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Artículo 4
Trato de la nación más favorecida
Con respecto a la protección de la propiedad intelectual, toda ventaja, favor, privilegio o inmunidad
que conceda un Miembro a los nacionales de cualquier otro país se otorgará inmediatamente y sin
condiciones a los nacionales de todos los demás Miembros. Quedan exentos de esta obligación toda
ventaja, favor, privilegio o inmunidad concedidos por un Miembro que:
a) se deriven de acuerdos internacionales sobre asistencia judicial o sobre observancia de la ley de
carácter general y no limitados específicamente a la protección de la propiedad intelectual;

b) se hayan otorgado de conformidad con las disposiciones del Convenio de Berna (1971) o de la
Convención de Roma que autorizan que el trato concedido no esté en función del trato nacional sino del
trato dado en otro país;

c) se refieran a los derechos de los artistas intérpretes o ejecutantes, los productores de fonogramas y
los organismos de radiodifusión, que no estén previstos en el presente Acuerdo;

d) se deriven de acuerdos internacionales relativos a la protección de la propiedad intelectual que


hayan entrado en vigor antes de la entrada en vigor del Acuerdo sobre la OMC, a condición de que esos
acuerdos se notifiquen al Consejo de los ADPIC y no constituyan una discriminación arbitraria o
injustificable contra los nacionales de otros Miembros.
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Artículo 5
Acuerdos multilaterales sobre adquisición y mantenimiento de la
protección
Las obligaciones derivadas de los artículos 3 y 4 no se aplican a los procedimientos para la
adquisición y mantenimiento de los derechos de propiedad intelectual, estipulados en acuerdos
multilaterales concertados bajo los auspicios de la OMPI.
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Artículo 6
Agotamiento de los derechos
Para los efectos de la solución de diferencias en el marco del presente Acuerdo, a reserva de lo
dispuesto en los artículos 3 y 4 no se hará uso de ninguna disposición del presente Acuerdo en relación
con la cuestión del agotamiento de los derechos de propiedad intelectual.
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Artículo 7
Objetivos
La protección y la observancia de los derechos de propiedad intelectual deberán contribuir a la
promoción de la innovación tecnológica y a la transferencia y difusión de la tecnología, en beneficio
recíproco de los productores y de los usuarios de conocimientos tecnológicos y de modo que favorezcan
el bienestar social y económico y el equilibrio de derechos y obligaciones.
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Artículo 8
Principios
1. Los Miembros, al formular o modificar sus leyes y reglamentos, podrán adoptar las medidas
necesarias para proteger la salud pública y la nutrición de la población, o para promover el interés
público en sectores de importancia vital para su desarrollo socioeconómico y tecnológico, siempre que
esas medidas sean compatibles con lo dispuesto en el presente Acuerdo.
2. Podrá ser necesario aplicar medidas apropiadas, siempre que sean compatibles con lo dispuesto en el
presente Acuerdo, para prevenir el abuso de los derechos de propiedad intelectual por sus titulares o el
recurso a prácticas que limiten de manera injustificable el comercio o redunden en detrimento de la
transferencia internacional de tecnología.

Parte II — Normas relativas a la existencia, alcance y ejercicio de los derechos de


propiedad intelectual

Sección 1 y 2

Sección 1: Derecho de autor y derechos conexos

Artículo 9
Relación con el Convenio de Berna
1. Los Miembros observarán los artículos 1 a 21 del Convenio de Berna (1971) y el Apéndice del
mismo. No obstante, en virtud del presente Acuerdo ningún Miembro tendrá derechos ni obligaciones
respecto de los derechos conferidos por el artículo 6bis de dicho Convenio ni respecto de los derechos
que se derivan del mismo.
2. La protección del derecho de autor abarcará las expresiones pero no las ideas, procedimientos,
métodos de operación o conceptos matemáticos en sí.

Artículo 10
Programas de ordenador y compilaciones de datos
1. Los programas de ordenador, sean programas fuente o programas objeto, serán protegidos como
obras literarias en virtud del Convenio de Berna (1971).
2. Las compilaciones de datos o de otros materiales, en forma legible por máquina o en otra forma, que
por razones de la selección o disposición de sus contenidos constituyan creaciones de carácter intelectual,
serán protegidas como tales. Esa protección, que no abarcará los datos o materiales en sí mismos, se
entenderá sin perjuicio de cualquier derecho de autor que subsista respecto de los datos o materiales en sí
mismos.

Artículo 11
Derechos de arrendamiento
Al menos respecto de los programas de ordenador y de las obras cinematográficas, los Miembros
conferirán a los autores y a sus derechohabientes el derecho de autorizar o prohibir el arrendamiento
comercial al público de los originales o copias de sus obras amparadas por el derecho de autor. Se
exceptuará a un Miembro de esa obligación con respecto a las obras cinematográficas a menos que el
arrendamiento haya dado lugar a una realización muy extendida de copias de esas obras que menoscabe
en medida importante el derecho exclusivo de reproducción conferido en dicho Miembro a los autores y
sus derechohabientes. En lo referente a los programas de ordenador, esa obligación no se aplica a los
arrendamientos cuyo objeto esencial no sea el programa en sí.

Artículo 12
Duración de la protección
Cuando la duración de la protección de una obra que no sea fotográfica o de arte aplicado se calcule
sobre una base distinta de la vida de una persona física, esa duración será de no menos de 50 años
contados desde el final del año civil de la publicación autorizada o, a falta de tal publicación autorizada
dentro de un plazo de 50 años a partir de la realización de la obra, de 50 años contados a partir del final
del año civil de su realización.

Artículo 13
Limitaciones y excepciones
Los Miembros circunscribirán las limitaciones o excepciones impuestas a los derechos exclusivos a
determinados casos especiales que no atenten contra la explotación normal de la obra ni causen un
perjuicio injustificado a los intereses legítimos del titular de los derechos.

Artículo 14
Protección de los artistas intérpretes o ejecutantes, los productores de
fonogramas (grabaciones de sonido) y los organismos de radiodifusión
1. En lo que respecta a la fijación de sus interpretaciones o ejecuciones en un fonograma, los artistas
intérpretes o ejecutantes tendrán la facultad de impedir los actos siguientes cuando se emprendan sin su
autorización: la fijación de sus interpretaciones o ejecuciones no fijadas y la reproducción de tal fijación.
Los artistas intérpretes o ejecutantes tendrán asimismo la facultad de impedir los actos siguientes cuando
se emprendan sin su autorización: la difusión por medios inalámbricos y la comunicación al público de
sus interpretaciones o ejecuciones en directo.
2. Los productores de fonogramas tendrán el derecho de autorizar o prohibir la reproducción directa o
indirecta de sus fonogramas.
3. Los organismos de radiodifusión tendrán el derecho de prohibir los actos siguientes cuando se
emprendan sin su autorización: la fijación, la reproducción de las fijaciones y la retransmisión por
medios inalámbricos de las emisiones, así como la comunicación al público de sus emisiones de
televisión. Cuando los Miembros no concedan tales derechos a los organismos de radiodifusión, darán a
los titulares de los derechos de autor sobre la materia objeto de las emisiones la posibilidad de impedir
los actos antes mencionados, a reserva de lo dispuesto en el Convenio de Berna (1971).
4. Las disposiciones del artículo 11 relativas a los programas de ordenador se aplicarán mutatis
mutandis a los productores de fonogramas y a todos los demás titulares de los derechos sobre los
fonogramas según los determine la legislación de cada Miembro. Si, en la fecha de 15 de abril de 1994,
un Miembro aplica un sistema de remuneración equitativa de los titulares de derechos en lo que se
refiere al arrendamiento de fonogramas, podrá mantener ese sistema siempre que el arrendamiento
comercial de los fonogramas no esté produciendo menoscabo importante de los derechos exclusivos de
reproducción de los titulares de los derechos.
5. La duración de la protección concedida en virtud del presente Acuerdo a los artistas intérpretes o
ejecutantes y los productores de fonogramas no podrá ser inferior a 50 años, contados a partir del final
del año civil en que se haya realizado la fijación o haya tenido lugar la interpretación o ejecución. La
duración de la protección concedida con arreglo al párrafo 3 no podrá ser inferior a 20 años contados a
partir del final del año civil en que se haya realizado la emisión.
6. En relación con los derechos conferidos por los párrafos 1, 2 y 3, todo Miembro podrá establecer
condiciones, limitaciones, excepciones y reservas en la medida permitida por la Convención de Roma.
No obstante, las disposiciones del artículo 18 del Convenio de Berna (1971) también se
aplicarán mutatis mutandis a los derechos que sobre los fonogramas corresponden a los artistas
intérpretes o ejecutantes y los productores de fonogramas.
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Sección 2: Marcas de fábrica o de comercio

Artículo 15
Materia objeto de protección
1. Podrá constituir una marca de fábrica o de comercio cualquier signo o combinación de signos que
sean capaces de distinguir los bienes o servicios de una empresa de los de otras empresas. Tales signos
podrán registrarse como marcas de fábrica o de comercio, en particular las palabras, incluidos los
nombres de persona, las letras, los números, los elementos figurativos y las combinaciones de colores,
así como cualquier combinación de estos signos. Cuando los signos no sean intrínsecamente capaces de
distinguir los bienes o servicios pertinentes, los Miembros podrán supeditar la posibilidad de registro de
los mismos al carácter distintivo que hayan adquirido mediante su uso. Los Miembros podrán exigir
como condición para el registro que los signos sean perceptibles visualmente.
2. Lo dispuesto en el párrafo 1 no se entenderá en el sentido de que impide a un Miembro denegar el
registro de una marca de fábrica o de comercio por otros motivos, siempre que éstos no contravengan las
disposiciones del Convenio de París (1967).
3. Los Miembros podrán supeditar al uso la posibilidad de registro. No obstante, el uso efectivo de una
marca de fábrica o de comercio no será condición para la presentación de una solicitud de registro. No se
denegará ninguna solicitud por el solo motivo de que el uso pretendido no ha tenido lugar antes de la
expiración de un período de tres años contado a partir de la fecha de la solicitud.
4. La naturaleza del producto o servicio al que la marca de fábrica o de comercio ha de aplicarse no
será en ningún caso obstáculo para el registro de la marca.
5. Los Miembros publicarán cada marca de fábrica o de comercio antes de su registro o sin demora
después de él, y ofrecerán una oportunidad razonable de pedir la anulación del registro. Además los
Miembros podrán ofrecer la oportunidad de oponerse al registro de una marca de fábrica o de comercio.

Artículo 16
Derechos conferidos
1. El titular de una marca de fábrica o de comercio registrada gozará del derecho exclusivo de impedir
que cualesquiera terceros, sin su consentimiento, utilicen en el curso de operaciones comerciales signos
idénticos o similares para bienes o servicios que sean idénticos o similares a aquellos para los que se ha
registrado la marca, cuando ese uso dé lugar a probabilidad de confusión. En el caso de que se use un
signo idéntico para bienes o servicios idénticos, se presumirá que existe probabilidad de confusión. Los
derechos antes mencionados se entenderán sin perjuicio de ninguno de los derechos existentes con
anterioridad y no afectarán a la posibilidad de los Miembros de reconocer derechos basados en el uso.
2. El artículo 6bis del Convenio de París (1967) se aplicará mutatis mutandis a los servicios. Al
determinar si una marca de fábrica o de comercio es notoriamente conocida, los Miembros tomarán en
cuenta la notoriedad de esta marca en el sector pertinente del público inclusive la notoriedad obtenida en
el Miembro de que se trate como consecuencia de la promoción de dicha marca.
3. El artículo 6bis del Convenio de París (1967) se aplicará mutatis mutandis a bienes o servicios que
no sean similares a aquellos para los cuales una marca de fábrica o de comercio ha sido registrada, a
condición de que el uso de esa marca en relación con esos bienes o servicios indique una conexión entre
dichos bienes o servicios y el titular de la marca registrada y a condición de que sea probable que ese uso
lesione los intereses del titular de la marca registrada.

Artículo 17
Excepciones
Los Miembros podrán establecer excepciones limitadas de los derechos conferidos por una marca de
fábrica o de comercio, por ejemplo el uso leal de términos descriptivos, a condición de que en ellas se
tengan en cuenta los intereses legítimos del titular de la marca y de terceros.

Artículo 18
Duración de la protección
El registro inicial de una marca de fábrica o de comercio y cada una de las renovaciones del registro
tendrán una duración de no menos de siete años. El registro de una marca de fábrica o de comercio será
renovable indefinidamente.
Artículo 19
Requisito de uso
1. Si para mantener el registro se exige el uso, el registro sólo podrá anularse después de un período
ininterrumpido de tres años como mínimo de falta de uso, a menos que el titular de la marca de fábrica o
de comercio demuestre que hubo para ello razones válidas basadas en la existencia de obstáculos a dicho
uso. Se reconocerán como razones válidas de falta de uso las circunstancias que surjan
independientemente de la voluntad del titular de la marca y que constituyan un obstáculo al uso de la
misma, como las restricciones a la importación u otros requisitos oficiales impuestos a los bienes o
servicios protegidos por la marca.
2. Cuando esté controlada por el titular, se considerará que la utilización de una marca de fábrica o de
comercio por otra persona constituye uso de la marca a los efectos de mantener el registro.

Artículo 20
Otros requisitos
No se complicará injustificablemente el uso de una marca de fábrica o de comercio en el curso de
operaciones comerciales con exigencias especiales, como por ejemplo el uso con otra marca de fábrica o
de comercio, el uso en una forma especial o el uso de una manera que menoscabe la capacidad de la
marca para distinguir los bienes o servicios de una empresa de los de otras empresas. Esa disposición no
impedirá la exigencia de que la marca que identifique a la empresa productora de los bienes o servicios
sea usada juntamente, pero no vinculadamente, con la marca que distinga los bienes o servicios
específicos en cuestión de esa empresa.

Artículo 21
Licencias y cesión
Los Miembros podrán establecer las condiciones para las licencias y la cesión de las marcas de fábrica
o de comercio, quedando entendido que no se permitirán las licencias obligatorias de marcas de fábrica o
de comercio y que el titular de una marca de fábrica o de comercio registrada tendrá derecho a cederla
con o sin la transferencia de la empresa a que pertenezca la marca.

Parte II — Normas relativas a la


existencia, alcance y ejercicio de los
derechos de propiedad intelectual
Sección 3 y 4

Sección 3: Indicaciones geográficas


Artículo 22
Protección de las indicaciones geográficas
1. A los efectos de lo dispuesto en el presente Acuerdo, indicaciones geográficas son las que
identifiquen un producto como originario del territorio de un Miembro o de una región o localidad de ese
territorio, cuando determinada calidad, reputación, u otra característica del producto sea imputable
fundamentalmente a su origen geográfico.
2. En relación con las indicaciones geográficas, los Miembros arbitrarán los medios legales para que
las partes interesadas puedan impedir:
a) la utilización de cualquier medio que, en la designación o presentación del producto, indique o
sugiera que el producto de que se trate proviene de una región geográfica distinta del verdadero lugar de
origen, de modo que induzca al público a error en cuanto al origen geográfico del producto;

b) cualquier otra utilización que constituya un acto de competencia desleal, en el sentido del artículo
10bis del Convenio de París (1967).
3. Todo Miembro, de oficio si su legislación lo permite, o a petición de una parte interesada, denegará
o invalidará el registro de una marca de fábrica o de comercio que contenga o consista en una indicación
geográfica respecto de productos no originarios del territorio indicado, si el uso de tal indicación en la
marca de fábrica o de comercio para esos productos en ese Miembro es de naturaleza tal que induzca al
público a error en cuanto al verdadero lugar de origen.
4. La protección prevista en los párrafos 1, 2 y 3 será aplicable contra toda indicación geográfica que,
aunque literalmente verdadera en cuanto al territorio, región o localidad de origen de los productos, dé al
público una idea falsa de que éstos se originan en otro territorio.

Artículo 23
Protección adicional de las indicaciones geográficas de los vinos y
bebidas espirituosas
1. Cada Miembro establecerá los medios legales para que las partes interesadas puedan impedir la
utilización de una indicación geográfica que identifique vinos para productos de ese género que no sean
originarios del lugar designado por la indicación geográfica de que se trate, o que identifique bebidas
espirituosas para productos de ese género que no sean originarios del lugar designado por la indicación
geográfica en cuestión, incluso cuando se indique el verdadero origen del producto o se utilice la
indicación geográfica traducida o acompañada de expresiones tales como “clase”, “tipo”, “estilo”,
“imitación” u otras análogas. (4)
2. De oficio, si la legislación de un Miembro lo permite, o a petición de una parte interesada, el
registro de toda marca de fábrica o de comercio para vinos que contenga o consista en una indicación
geográfica que identifique vinos, o para bebidas espirituosas que contenga o consista en una indicación
geográfica que identifique bebidas espirituosas, se denegará o invalidará para los vinos o las bebidas
espirituosas que no tengan ese origen.
3. En el caso de indicaciones geográficas homónimas para los vinos, la protección se concederá a cada
indicación con sujeción a lo dispuesto en el párrafo 4 del artículo 22. Cada Miembro establecerá las
condiciones prácticas en que se diferenciarán entre sí las indicaciones homónimas de que se trate,
teniendo en cuenta la necesidad de asegurarse de que los productores interesados reciban un trato
equitativo y que los consumidores no sean inducidos a error.
4. Para facilitar la protección de las indicaciones geográficas para los vinos, en el Consejo de los
ADPIC se entablarán negociaciones sobre el establecimiento de un sistema multilateral de notificación y
registro de las indicaciones geográficas de vinos que sean susceptibles de protección en los Miembros
participantes en ese sistema.

Artículo 24
Negociaciones internacionales; excepciones
1. Los Miembros convienen en entablar negociaciones encaminadas a mejorar la protección de las
indicaciones geográficas determinadas según lo dispuesto en el artículo 23. Ningún Miembro se valdrá
de las disposiciones de los párrafos 4 a 8 para negarse a celebrar negociaciones o a concertar acuerdos
bilaterales o multilaterales. En el contexto de tales negociaciones, los Miembros se mostrarán dispuestos
a examinar la aplicabilidad continuada de esas disposiciones a las indicaciones geográficas determinadas
cuya utilización sea objeto de tales negociaciones.
2. El Consejo de los ADPIC mantendrá en examen la aplicación de las disposiciones de la presente
Sección; el primero de esos exámenes se llevará a cabo dentro de los dos años siguientes a la entrada en
vigor del Acuerdo sobre la OMC. Toda cuestión que afecte al cumplimiento de las obligaciones
establecidas en estas disposiciones podrá plantearse ante el Consejo que, a petición de cualquiera de los
Miembros, celebrará consultas con cualquiera otro Miembro o Miembros sobre las cuestiones para las
cuales no haya sido posible encontrar una solución satisfactoria mediante consultas bilaterales o
plurilaterales entre los Miembros interesados. El Consejo adoptará las medidas que se acuerden para
facilitar el funcionamiento y favorecer los objetivos de la presente Sección.
3. Al aplicar esta Sección, ningún Miembro reducirá la protección de las indicaciones geográficas que
existía en él inmediatamente antes de la fecha de entrada en vigor del Acuerdo sobre la OMC.
4. Ninguna de las disposiciones de esta Sección impondrá a un Miembro la obligación de impedir el
uso continuado y similar de una determinada indicación geográfica de otro Miembro, que identifique
vinos o bebidas espirituosas en relación con bienes o servicios, por ninguno de sus nacionales o
domiciliarios que hayan utilizado esa indicación geográfica de manera continua para esos mismos bienes
o servicios, u otros afines, en el territorio de ese Miembro a) durante 10 años como mínimo antes de la
fecha de 15 de abril de 1994, o b) de buena fe, antes de esa fecha.
5. Cuando una marca de fábrica o de comercio haya sido solicitada o registrada de buena fe, o cuando
los derechos a una marca de fábrica o de comercio se hayan adquirido mediante su uso de buena fe:
a) antes de la fecha de aplicación de estas disposiciones en ese Miembro, según lo establecido en la
Parte VI; o

b) antes de que la indicación geográfica estuviera protegida en su país de origen;


las medidas adoptadas para aplicar esta Sección no prejuzgarán la posibilidad de registro ni la validez
del registro de una marca de fábrica o de comercio, ni el derecho a hacer uso de dicha marca, por el
motivo de que ésta es idéntica o similar a una indicación geográfica.
6. Nada de lo previsto en esta Sección obligará a un Miembro a aplicar sus disposiciones en el caso de
una indicación geográfica de cualquier otro Miembro utilizada con respecto a bienes o servicios para los
cuales la indicación pertinente es idéntica al término habitual en lenguaje corriente que es el nombre
común de tales bienes o servicios en el territorio de ese Miembro. Nada de lo previsto en esta Sección
obligará a un Miembro a aplicar sus disposiciones en el caso de una indicación geográfica de cualquier
otro Miembro utilizada con respecto a productos vitícolas para los cuales la indicación pertinente es
idéntica a la denominación habitual de una variedad de uva existente en el territorio de ese Miembro en
la fecha de entrada en vigor del Acuerdo sobre la OMC.
7. Todo Miembro podrá establecer que cualquier solicitud formulada en el ámbito de la presente
Sección en relación con el uso o el registro de una marca de fábrica o de comercio ha de presentarse
dentro de un plazo de cinco años contados a partir del momento en que el uso lesivo de la indicación
protegida haya adquirido notoriedad general en ese Miembro, o a partir de la fecha de registro de la
marca de fábrica o de comercio en ese Miembro, siempre que la marca haya sido publicada para
entonces, si tal fecha es anterior a aquella en que el uso lesivo adquirió notoriedad general en dicho
Miembro, con la salvedad de que la indicación geográfica no se haya usado o registrado de mala fe.
8. Las disposiciones de esta Sección no prejuzgarán en modo alguno el derecho de cualquier persona a
usar, en el curso de operaciones comerciales, su nombre o el nombre de su antecesor en la actividad
comercial, excepto cuando ese nombre se use de manera que induzca a error al público.
9. El presente Acuerdo no impondrá obligación ninguna de proteger las indicaciones geográficas que
no estén protegidas o hayan dejado de estarlo en su país de origen, o que hayan caído en desuso en ese
país.
Volver al principio

Sección 4: Dibujos y modelos industriales

Artículo 25
Condiciones para la protección
1. Los Miembros establecerán la protección de los dibujos y modelos industriales creados
independientemente que sean nuevos u originales. Los Miembros podrán establecer que los dibujos y
modelos no son nuevos u originales si no difieren en medida significativa de dibujos o modelos
conocidos o de combinaciones de características de dibujos o modelos conocidos. Los Miembros podrán
establecer que esa protección no se extenderá a los dibujos y modelos dictados esencialmente por
consideraciones técnicas o funcionales.
2. Cada Miembro se asegurará de que las prescripciones que hayan de cumplirse para conseguir la
protección de los dibujos o modelos textiles -particularmente en lo que se refiere a costo, examen y
publicación- no dificulten injustificablemente las posibilidades de búsqueda y obtención de esa
protección. Los Miembros tendrán libertad para cumplir esta obligación mediante la legislación sobre
dibujos o modelos industriales o mediante la legislación sobre el derecho de autor.

Artículo 26
Protección
1. El titular de un dibujo o modelo industrial protegido tendrá el derecho de impedir que terceros, sin
su consentimiento, fabriquen, vendan o importen artículos que ostenten o incorporen un dibujo o modelo
que sea una copia, o fundamentalmente una copia, del dibujo o modelo protegido, cuando esos actos se
realicen con fines comerciales.
2. Los Miembros podrán prever excepciones limitadas de la protección de los dibujos y modelos
industriales, a condición de que tales excepciones no atenten de manera injustificable contra la
explotación normal de los dibujos y modelos industriales protegidos ni causen un perjuicio injustificado
a los legítimos intereses del titular del dibujo o modelo protegido, teniendo en cuenta los intereses
legítimos de terceros.
3. La duración de la protección otorgada equivaldrá a 10 años como mínimo.
Parte II — Normas relativas a la existencia, alcance y ejercicio de los derechos de
propiedad intelectual

Sección 5 y 6

Seción 5: Patentes

Artículo 27
Materia patentable
1. Sin perjuicio de lo dispuesto en los párrafos 2 y 3, las patentes podrán obtenerse por todas las
invenciones, sean de productos o de procedimientos, en todos los campos de la tecnología, siempre que
sean nuevas, entrañen una actividad inventiva y sean susceptibles de aplicación industrial.(5) Sin
perjuicio de lo dispuesto en el párrafo 4 del artículo 65, en el párrafo 8 del artículo 70 y en el párrafo 3
del presente artículo, las patentes se podrán obtener y los derechos de patente se podrán gozar sin
discriminación por el lugar de la invención, el campo de la tecnología o el hecho de que los productos
sean importados o producidos en el país.
2. Los Miembros podrán excluir de la patentabilidad las invenciones cuya explotación comercial en su
territorio deba impedirse necesariamente para proteger el orden público o la moralidad, inclusive para
proteger la salud o la vida de las personas o de los animales o para preservar los vegetales, o para evitar
daños graves al medio ambiente, siempre que esa exclusión no se haga meramente porque la explotación
esté prohibida por su legislación.
3. Los Miembros podrán excluir asimismo de la patentabilidad:
a) los métodos de diagnóstico, terapéuticos y quirúrgicos para el tratamiento de personas o animales;

b) las plantas y los animales excepto los microorganismos, y los procedimientos esencialmente
biológicos para la producción de plantas o animales, que no sean procedimientos no biológicos o
microbiológicos. Sin embargo, los Miembros otorgarán protección a todas las obtenciones vegetales
mediante patentes, mediante un sistema eficaz sui generis o mediante una combinación de aquéllas y
éste. Las disposiciones del presente apartado serán objeto de examen cuatro años después de la entrada
en vigor del Acuerdo sobre la OMC.

Artículo 28
Derechos conferidos
1. Una patente conferirá a su titular los siguientes derechos exclusivos:
a) cuando la materia de la patente sea un producto, el de impedir que terceros, sin su consentimiento,
realicen actos de: fabricación, uso, oferta para la venta, venta o importación (6) para estos fines del
producto objeto de la patente;

b) cuando la materia de la patente sea un procedimiento, el de impedir que terceros, sin su


consentimiento, realicen el acto de utilización del procedimiento y los actos de: uso, oferta para la venta,
venta o importación para estos fines de, por lo menos, el producto obtenido directamente por medio de
dicho procedimiento.
2. Los titulares de patentes tendrán asimismo el derecho de cederlas o transferirlas por sucesión y de
concertar contratos de licencia.

Artículo 29
Condiciones impuestas a los solicitantes de patentes
1. Los Miembros exigirán al solicitante de una patente que divulgue la invención de manera
suficientemente clara y completa para que las personas capacitadas en la técnica de que se trate puedan
llevar a efecto la invención, y podrán exigir que el solicitante indique la mejor manera de llevar a efecto
la invención que conozca el inventor en la fecha de la presentación de la solicitud o, si se reivindica la
prioridad, en la fecha de prioridad reivindicada en la solicitud.
2. Los Miembros podrán exigir al solicitante de una patente que facilite información relativa a sus
solicitudes y las correspondientes concesiones de patentes en el extranjero.

Artículo 30
Excepciones de los derechos conferidos
Los Miembros podrán prever excepciones limitadas de los derechos exclusivos conferidos por una
patente, a condición de que tales excepciones no atenten de manera injustificable contra la explotación
normal de la patente ni causen un perjuicio injustificado a los legítimos intereses del titular de la patente,
teniendo en cuenta los intereses legítimos de terceros.

Artículo 31
Otros usos sin autorización del titular de los derechos
Cuando la legislación de un Miembro permita otros usos (7) de la materia de una patente sin
autorización del titular de los derechos, incluido el uso por el gobierno o por terceros autorizados por el
gobierno, se observarán las siguientes disposiciones:
a) la autorización de dichos usos será considerada en función de sus circunstancias propias;

b) sólo podrán permitirse esos usos cuando, antes de hacerlos, el potencial usuario haya intentado
obtener la autorización del titular de los derechos en términos y condiciones comerciales razonables y
esos intentos no hayan surtido efecto en un plazo prudencial. Los Miembros podrán eximir de esta
obligación en caso de emergencia nacional o en otras circunstancias de extrema urgencia, o en los casos
de uso público no comercial. Sin embargo, en las situaciones de emergencia nacional o en otras
circunstancias de extrema urgencia el titular de los derechos será notificado en cuanto sea
razonablemente posible. En el caso de uso público no comercial, cuando el gobierno o el contratista, sin
hacer una búsqueda de patentes, sepa o tenga motivos demostrables para saber que una patente válida es
o será utilizada por o para el gobierno, se informará sin demora al titular de los derechos;

c) el alcance y duración de esos usos se limitarán a los fines para los que hayan sido autorizados y, si
se trata de tecnología de semiconductores, sólo podrá hacerse de ella un uso público no comercial o
utilizarse para rectificar una práctica declarada contraria a la competencia tras un procedimiento judicial
o administrativo;
d) esos usos serán de carácter no exclusivo;

e) no podrán cederse esos usos, salvo con aquella parte de la empresa o de su activo intangible que
disfrute de ellos;

f) se autorizarán esos usos principalmente para abastecer el mercado interno del Miembro que autorice
tales usos;

g) la autorización de dichos usos podrá retirarse a reserva de la protección adecuada de los intereses
legítimos de las personas que han recibido autorización para esos usos, si las circunstancias que dieron
origen a ella han desaparecido y no es probable que vuelvan a surgir. Las autoridades competentes
estarán facultadas para examinar, previa petición fundada, si dichas circunstancias siguen existiendo;

h) el titular de los derechos recibirá una remuneración adecuada según las circunstancias propias de
cada caso, habida cuenta del valor económico de la autorización;

i) la validez jurídica de toda decisión relativa a la autorización de esos usos estará sujeta a revisión
judicial u otra revisión independiente por una autoridad superior diferente del mismo Miembro;

j) toda decisión relativa a la remuneración prevista por esos usos estará sujeta a revisión judicial u otra
revisión independiente por una autoridad superior diferente del mismo Miembro;

k) los Miembros no estarán obligados a aplicar las condiciones establecidas en los apartados b) y f)
cuando se hayan permitido esos usos para poner remedio a prácticas que, a resultas de un proceso
judicial o administrativo, se haya determinado que son anticompetitivas. La necesidad de corregir las
prácticas anticompetitivas se podrá tener en cuenta al determinar el importe de la remuneración en esos
casos. Las autoridades competentes tendrán facultades para denegar la revocación de la autorización si
resulta probable que las condiciones que dieron lugar a esa autorización se repitan;

l) cuando se hayan autorizado esos usos para permitir la explotación de una patente (“segunda patente”)
que no pueda ser explotada sin infringir otra patente (“primera patente”), habrán de observarse las
siguientes condiciones adicionales:

i) la invención reivindicada en la segunda patente ha de suponer un avance técnico importante de una


importancia económica considerable con respecto a la invención reivindicada en la primera patente;

ii) el titular de la primera patente tendrá derecho a una licencia cruzada en condiciones razonables para
explotar la invención reivindicada en la segunda patente; y

iii) no podrá cederse el uso autorizado de la primera patente sin la cesión de la segunda patente.

Artículo 31bis
1. Las obligaciones que corresponden a un Miembro exportador en virtud del apartado f) del artículo 31
no serán aplicables con respecto a la concesión por ese Miembro de una licencia obligatoria en la medida
necesaria para la producción de un producto o productos farmacéuticos y su exportación a un Miembro o
Miembros importadores habilitados de conformidad con los términos que se enuncian en el párrafo 2 del
Anexo del presente Acuerdo.
2. Cuando un Miembro exportador conceda una licencia obligatoria en virtud del sistema expuesto en el
presente artículo y el Anexo del presente Acuerdo, se recibirá en ese Miembro una remuneración
adecuada de conformidad con el apartado h) del artículo 31, habida cuenta del valor económico que
tenga para el Miembro importador el uso autorizado en el Miembro exportador. Cuando se conceda una
licencia obligatoria respecto de los mismos productos en el Miembro importador habilitado, la
obligación que corresponde a ese Miembro en virtud del apartado h) del artículo 31 no será aplicable
respecto de aquellos productos por los que se reciba en el Miembro exportador una remuneración de
conformidad con la primera frase de este párrafo.
3. Con miras a aprovechar las economías de escala para aumentar el poder de compra de productos
farmacéuticos y facilitar la producción local de los mismos: cuando un país en desarrollo o menos
adelantado Miembro de la OMC sea parte en un acuerdo comercial regional, en el sentido del
artículo XXIV del GATT de 1994 y la Decisión de 28 de noviembre de 1979 sobre trato diferenciado y
más favorable, reciprocidad y mayor participación de los países en desarrollo (L/4903), en el cual la
mitad como mínimo de las actuales partes sean países que figuran actualmente en la Lista de países
menos adelantados de las Naciones Unidas, la obligación que corresponde a ese Miembro en virtud del
apartado f) del artículo 31 no será aplicable en la medida necesaria para que un producto farmacéutico
producido o importado al amparo de una licencia obligatoria en ese Miembro pueda exportarse a los
mercados de aquellos otros países en desarrollo o menos adelantados partes en el acuerdo comercial
regional que compartan el problema de salud en cuestión. Se entiende que ello será sin perjuicio del
carácter territorial de los derechos de patente en cuestión.
4. Los Miembros no impugnarán al amparo de los apartados b) y c) del párrafo 1 del artículo XXIII del
GATT de 1994 ninguna medida adoptada de conformidad con las disposiciones del presente artículo y
del Anexo del presente Acuerdo.
5. El presente artículo y el Anexo del presente Acuerdo se entienden sin perjuicio de los derechos,
obligaciones y flexibilidades que corresponden a los Miembros en virtud de las disposiciones del
presente Acuerdo fuera de los apartados f) y h) del artículo 31, incluidas las reafirmadas en la
Declaración relativa al Acuerdo sobre los ADPIC y la Salud Pública (WT/MIN(01)/DEC/2), ni de su
interpretación. Se entienden también sin perjuicio de la medida en que los productos farmacéuticos
producidos al amparo de una licencia obligatoria puedan exportarse conforme a las disposiciones del
apartado f) del artículo 31.

Artículo 32
Revocación/caducidad
Se dispondrá de la posibilidad de una revisión judicial de toda decisión de revocación o de declaración
de caducidad de una patente.

Artículo 33
Duración de la protección
La protección conferida por una patente no expirará antes de que haya transcurrido un período de 20
años contados desde la fecha de presentación de la solicitud. (8)
Artículo 34
Patentes de procedimientos: la carga de la prueba
1. A efectos de los procedimientos civiles en materia de infracción de los derechos del titular a los que
se refiere el párrafo 1 b) del artículo 28, cuando el objeto de una patente sea un procedimiento para
obtener un producto, las autoridades judiciales estarán facultadas para ordenar que el demandado pruebe
que el procedimiento para obtener un producto es diferente del procedimiento patentado. Por
consiguiente, los Miembros establecerán que, salvo prueba en contrario, todo producto idéntico
producido por cualquier parte sin el consentimiento del titular de la patente ha sido obtenido mediante el
procedimiento patentado, por lo menos en una de las circunstancias siguientes:
a) si el producto obtenido por el procedimiento patentado es nuevo;

b) si existe una probabilidad sustancial de que el producto idéntico haya sido fabricado mediante el
procedimiento y el titular de la patente no puede establecer mediante esfuerzos razonables cuál ha sido el
procedimiento efectivamente utilizado.
2. Los Miembros tendrán libertad para establecer que la carga de la prueba indicada en el párrafo 1
incumbirá al supuesto infractor sólo si se cumple la condición enunciada en el apartado a) o sólo si se
cumple la condición enunciada en el apartado b).
3. En la presentación de pruebas en contrario, se tendrán en cuenta los intereses legítimos de los
demandados en cuanto a la protección de sus secretos industriales y comerciales.

Sección 6: Esquemas de trazado (topografías) de los circuitos integrados

Artículo 35
Relación con el Tratado IPIC
Los Miembros convienen en otorgar protección a los esquemas de trazado (topografías) de circuitos
integrados (denominados en el presente Acuerdo “esquemas de trazado”) de conformidad con los
artículos 2 a 7 (salvo el párrafo 3 del artículo 6), el artículo 12 y el párrafo 3 del artículo 16 del Tratado
sobre la Propiedad Intelectual respecto de los Circuitos Integrados y en atenerse además a las
disposiciones siguientes.

Artículo 36
Alcance de la protección
Sin perjuicio de lo dispuesto en el párrafo 1 del artículo 37, los Miembros considerarán ilícitos los
siguientes actos si se realizan sin la autorización del titular del derecho (9): la importación, venta o
distribución de otro modo con fines comerciales de un esquema de trazado protegido, un circuito
integrado en el que esté incorporado un esquema de trazado protegido o un artículo que incorpore un
circuito integrado de esa índole sólo en la medida en que éste siga conteniendo un esquema de trazado
ilícitamente reproducido.
Artículo 37
Actos que no requieren la autorización del titular del derecho
1. Sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 36, ningún Miembro estará obligado a considerar ilícita la
realización de ninguno de los actos a que se refiere dicho artículo, en relación con un circuito integrado
que incorpore un esquema de trazado ilícitamente reproducido o en relación con cualquier artículo que
incorpore tal circuito integrado, cuando la persona que realice u ordene esos actos no supiera y no
tuviera motivos razonables para saber, al adquirir el circuito integrado o el artículo que incorpora tal
circuito integrado, que incorporaba un esquema de trazado reproducido ilícitamente. Los Miembros
establecerán que, después del momento en que esa persona reciba aviso suficiente de que el esquema de
trazado estaba reproducido ilícitamente, dicha persona podrá realizar cualquier acto con respecto al
producto en existencia o pedido antes de ese momento, pero podrá exigírsele que pague al titular del
derecho una suma equivalente a la regalía razonable que correspondería pagar por una licencia
libremente negociada de tal esquema de trazado.
2. Las condiciones establecidas en los apartados a) a k) del artículo 31 se aplicarán mutatis
mutandis en caso de concesión de cualquier licencia no voluntaria de esquemas de trazado o en caso de
uso de los mismos por o para los gobiernos sin autorización del titular del derecho.

Artículo 38
Duración de la protección
1. En los Miembros en que se exija el registro como condición para la protección, la protección de los
esquemas de trazado no finalizará antes de la expiración de un período de 10 años contados a partir de la
fecha de la presentación de la solicitud de registro o de la primera explotación comercial en cualquier
parte del mundo.
2. En los Miembros en que no se exija el registro como condición para la protección, los esquemas de
trazado quedarán protegidos durante un período no inferior a 10 años contados desde la fecha de la
primera explotación comercial en cualquier parte del mundo.
3. No obstante lo dispuesto en los párrafos 1 y 2, todo Miembro podrá establecer que la protección
caducará a los 15 años de la creación del esquema de trazado.

Parte II — Normas relativas a la existencia, alcance y ejercicio de los derechos de


propiedad intelectual

Sección 7 y 8

Sección 7: Protección de la información no divulgada

Artículo 39
1. Al garantizar una protección eficaz contra la competencia desleal, de conformidad con lo
establecido en el artículo 10bis del Convenio de París (1967), los Miembros protegerán la información
no divulgada de conformidad con el párrafo 2, y los datos que se hayan sometido a los gobiernos o a
organismos oficiales, de conformidad con el párrafo 3.
2. Las personas físicas y jurídicas tendrán la posibilidad de impedir que la información que esté
legítimamente bajo su control se divulgue a terceros o sea adquirida o utilizada por terceros sin su
consentimiento de manera contraria a los usos comerciales honestos (10), en la medida en que dicha
información:
a) sea secreta en el sentido de que no sea, como cuerpo o en la configuración y reunión precisas de sus
componentes, generalmente conocida ni fácilmente accesible para personas introducidas en los círculos
en que normalmente se utiliza el tipo de información en cuestión; y

b) tenga un valor comercial por ser secreta; y

c) haya sido objeto de medidas razonables, en las circunstancias, para mantenerla secreta, tomadas por
la persona que legítimamente la controla.
3. Los Miembros, cuando exijan, como condición para aprobar la comercialización de productos
farmacéuticos o de productos químicos agrícolas que utilizan nuevas entidades químicas, la presentación
de datos de pruebas u otros no divulgados cuya elaboración suponga un esfuerzo considerable,
protegerán esos datos contra todo uso comercial desleal. Además, los Miembros protegerán esos datos
contra toda divulgación, excepto cuando sea necesario para proteger al público, o salvo que se adopten
medidas para garantizar la protección de los datos contra todo uso comercial desleal.

Sección 8: Control de las prácticas anticompetitivas en las licencias


contractuales

Artículo 40
1. Los Miembros convienen en que ciertas prácticas o condiciones relativas a la concesión de las
licencias de los derechos de propiedad intelectual, que restringen la competencia, pueden tener efectos
perjudiciales para el comercio y pueden impedir la transferencia y la divulgación de la tecnología.
2. Ninguna disposición del presente Acuerdo impedirá que los Miembros especifiquen en su
legislación las prácticas o condiciones relativas a la concesión de licencias que puedan constituir en
determinados casos un abuso de los derechos de propiedad intelectual que tenga un efecto negativo sobre
la competencia en el mercado correspondiente. Como se establece supra, un Miembro podrá adoptar, de
forma compatible con las restantes disposiciones del presente Acuerdo, medidas apropiadas para impedir
o controlar dichas prácticas, que pueden incluir las condiciones exclusivas de retrocesión, las
condiciones que impidan la impugnación de la validez y las licencias conjuntas obligatorias, a la luz de
las leyes y reglamentos pertinentes de ese Miembro.
3. Cada uno de los Miembros celebrará consultas, previa solicitud, con cualquiera otro Miembro que
tenga motivos para considerar que un titular de derechos de propiedad intelectual que es nacional del
Miembro al que se ha dirigido la solicitud de consultas o tiene su domicilio en él realiza prácticas que
infringen las leyes o reglamentos del Miembro solicitante relativos a la materia de la presente sección, y
desee conseguir que esa legislación se cumpla, sin perjuicio de las acciones que uno y otro Miembro
pueda entablar al amparo de la legislación ni de su plena libertad para adoptar una decisión definitiva. El
Miembro a quien se haya dirigido la solicitud examinará con toda comprensión la posibilidad de celebrar
las consultas, brindará oportunidades adecuadas para la celebración de las mismas con el Miembro
solicitante y cooperará facilitando la información públicamente disponible y no confidencial que sea
pertinente para la cuestión de que se trate, así como otras informaciones de que disponga el Miembro,
con arreglo a la ley nacional y a reserva de que se concluyan acuerdos mutuamente satisfactorios sobre
la protección de su carácter confidencial por el Miembro solicitante.
4. A todo Miembro cuyos nacionales o personas que tienen en él su domicilio sean en otro Miembro
objeto de un procedimiento relacionado con una supuesta infracción de las leyes o reglamentos de este
otro Miembro relativos a la materia de la presente Sección este otro Miembro dará, previa petición, la
posibilidad de celebrar consultas en condiciones idénticas a las previstas en el párrafo 3 .

Parte III — Observancia de los derechos de propiedad intelectual

Sección 1: Obligaciones generales

Artículo 41
1. Los Miembros se asegurarán de que en su legislación nacional se establezcan procedimientos de
observancia de los derechos de propiedad intelectual conforme a lo previsto en la presente Parte que
permitan la adopción de medidas eficaces contra cualquier acción infractora de los derechos de
propiedad intelectual a que se refiere el presente Acuerdo, con inclusión de recursos ágiles para prevenir
las infracciones y de recursos que constituyan un medio eficaz de disuasión de nuevas infracciones.
Estos procedimientos se aplicarán de forma que se evite la creación de obstáculos al comercio legítimo,
y deberán prever salvaguardias contra su abuso.
2. Los procedimientos relativos a la observancia de los derechos de propiedad intelectual serán justos y
equitativos. No serán innecesariamente complicados o gravosos, ni comportarán plazos injustificables o
retrasos innecesarios.
3. Las decisiones sobre el fondo de un caso se formularán, preferentemente, por escrito y serán
razonadas. Se pondrán a disposición, al menos de las partes en el procedimiento, sin retrasos indebidos.
Sólo se basarán en pruebas acerca de las cuales se haya dado a las partes la oportunidad de ser oídas.
4. Se dará a las partes en el procedimiento la oportunidad de una revisión por una autoridad judicial de
las decisiones administrativas finales y, con sujeción a las disposiciones en materia de competencia
jurisdiccional previstas en la legislación de cada Miembro relativa a la importancia de un caso, de al
menos los aspectos jurídicos de las decisiones judiciales iniciales sobre el fondo del caso. Sin embargo,
no será obligatorio darles la oportunidad de revisión de las sentencias absolutorias dictadas en casos
penales.
5. Queda entendido que la presente Parte no impone ninguna obligación de instaurar un sistema
judicial para la observancia de los derechos de propiedad intelectual distinto del ya existente para la
aplicación de la legislación en general, ni afecta a la capacidad de los Miembros para hacer observar su
legislación en general. Ninguna disposición de la presente Parte crea obligación alguna con respecto a la
distribución de los recursos entre los medios destinados a lograr la observancia de los derechos de
propiedad intelectual y los destinados a la observancia de la legislación en general.
Volver al principio

Sección 2: Procedimientos y recursos civiles y administrativos


Artículo 42
Procedimientos justos y equitativos
Los Miembros pondrán al alcance de los titulares de derechos (11) procedimientos judiciales civiles
para lograr la observancia de todos los derechos de propiedad intelectual a que se refiere el presente
Acuerdo. Los demandados tendrán derecho a recibir aviso por escrito en tiempo oportuno y con detalles
suficientes, con inclusión del fundamento de la reclamación. Se autorizará a las partes a estar
representadas por un abogado independiente y los procedimientos no impondrán exigencias
excesivamente gravosas en cuanto a las comparecencias personales obligatorias. Todas las partes en
estos procedimientos estarán debidamente facultadas para sustanciar sus alegaciones y presentar todas
las pruebas pertinentes. El procedimiento deberá prever medios para identificar y proteger la
información confidencial, salvo que ello sea contrario a prescripciones constitucionales existentes.

Artículo 43
Pruebas
1. Las autoridades judiciales estarán facultadas para ordenar que, cuando una parte haya presentado las
pruebas de que razonablemente disponga y que basten para sustentar sus alegaciones, y haya identificado
alguna prueba pertinente para sustanciar sus alegaciones que se encuentre bajo el control de la parte
contraria, ésta aporte dicha prueba, con sujeción, en los casos procedentes, a condiciones que garanticen
la protección de la información confidencial.
2. En caso de que una de las partes en el procedimiento deniegue voluntariamente y sin motivos
sólidos el acceso a información necesaria o de otro modo no facilite tal información en un plazo
razonable u obstaculice de manera sustancial un procedimiento relativo a una medida adoptada para
asegurar la observancia de un derecho, los Miembros podrán facultar a las autoridades judiciales para
formular determinaciones preliminares y definitivas, afirmativas o negativas, sobre la base de la
información que les haya sido presentada, con inclusión de la reclamación o de la alegación presentada
por la parte afectada desfavorablemente por la denegación del acceso a la información, a condición de
que se dé a las partes la oportunidad de ser oídas respecto de las alegaciones o las pruebas.

Artículo 44
Mandamientos judiciales
1. Las autoridades judiciales estarán facultadas para ordenar a una parte que desista de una infracción,
entre otras cosas para impedir que los productos importados que infrinjan un derecho de propiedad
intelectual entren en los circuitos comerciales de su jurisdicción, inmediatamente después del despacho
de aduana de los mismos. Los Miembros no tienen la obligación de conceder esa facultad en relación
con una materia protegida que haya sido adquirida o pedida por una persona antes de saber o tener
motivos razonables para saber que operar con esa materia comportaría infracción de un derecho de
propiedad intelectual.
2. A pesar de las demás disposiciones de esta Parte, y siempre que se respeten las disposiciones de la
Parte II específicamente referidas a la utilización por el gobierno, o por terceros autorizados por el
gobierno, sin el consentimiento del titular de los derechos, los Miembros podrán limitar los recursos
disponibles contra tal utilización al pago de una compensación de conformidad con lo dispuesto en el
apartado h) del artículo 31. En los demás casos se aplicarán los recursos previstos en la presente Parte o,
cuando éstos sean incompatibles con la legislación de un Miembro, podrán obtenerse sentencias
declarativas y una compensación adecuada.
Artículo 45
Perjuicios
1. Las autoridades judiciales estarán facultadas para ordenar al infractor que pague al titular del
derecho un resarcimiento adecuado para compensar el daño que éste haya sufrido debido a una
infracción de su derecho de propiedad intelectual, causada por un infractor que, sabiéndolo o teniendo
motivos razonables para saberlo, haya desarrollado una actividad infractora.
2. Las autoridades judiciales estarán asimismo facultadas para ordenar al infractor que pague los gastos
del titular del derecho, que pueden incluir los honorarios de los abogados que sean procedentes. Cuando
así proceda, los Miembros podrán facultar a las autoridades judiciales para que concedan reparación por
concepto de beneficios y/o resarcimiento por perjuicios reconocidos previamente, aun cuando el
infractor, no sabiéndolo o no teniendo motivos razonables para saberlo, haya desarrollado una actividad
infractora.

Artículo 46
Otros recursos
Para establecer un medio eficaz de disuasión de las infracciones, las autoridades judiciales estarán
facultadas para ordenar que las mercancías que se haya determinado que son mercancías infractoras sean,
sin indemnización alguna, apartadas de los circuitos comerciales de forma que se evite causar daños al
titular del derecho, o que sean destruidas, siempre que ello no sea incompatible con disposiciones
constitucionales vigentes. Las autoridades judiciales estarán además facultadas para ordenar que los
materiales e instrumentos que se hayan utilizado predominantemente para la producción de los bienes
infractores, sean, sin indemnización alguna, apartados de los circuitos comerciales de forma que se
reduzcan al mínimo los riesgos de nuevas infracciones. Se tendrán en cuenta, al dar curso a las
correspondientes solicitudes, tanto la necesidad de que haya proporción entre la gravedad de la
infracción y las medidas ordenadas como los intereses de terceros. En cuanto a las mercancías de marca
de fábrica o de comercio falsificadas, la simple retirada de la marca de fábrica o de comercio apuesta
ilícitamente no bastará, salvo en casos excepcionales, para que se permita la colocación de los bienes en
los circuitos comerciales.

Artículo 47
Derecho de información
Los Miembros podrán disponer que, salvo que resulte desproporcionado con la gravedad de la
infracción, las autoridades judiciales puedan ordenar al infractor que informe al titular del derecho sobre
la identidad de los terceros que hayan participado en la producción y distribución de los bienes o
servicios infractores, y sobre sus circuitos de distribución.

Artículo 48
Indemnización al demandado
1. Las autoridades judiciales estarán facultadas para ordenar a una parte a cuya instancia se hayan
adoptado medidas y que haya abusado del procedimiento de observancia que indemnice adecuadamente
a la parte a que se haya impuesto indebidamente una obligación o una restricción, por el daño sufrido a
causa de tal abuso. Las autoridades judiciales estarán asimismo facultadas para ordenar al demandante
que pague los gastos del demandado, que pueden incluir los honorarios de los abogados que sean
procedentes.
2. En relación con la administración de cualquier legislación relativa a la protección o a la observancia
de los derechos de propiedad intelectual, los Miembros eximirán tanto a las autoridades como a los
funcionarios públicos de las responsabilidades que darían lugar a medidas correctoras adecuadas sólo en
el caso de actuaciones llevadas a cabo o proyectadas de buena fe para la administración de dicha
legislación.

Artículo 49
Procedimientos administrativos
En la medida en que puedan ordenarse remedios civiles a resultas de procedimientos administrativos
referentes al fondo de un caso, esos procedimientos se atendrán a principios sustancialmente
equivalentes a los enunciados en esta sección.

Sección 3: Medidas provisionales

Artículo 50
1. Las autoridades judiciales estarán facultadas para ordenar la adopción de medidas provisionales
rápidas y eficaces destinadas a:
a) evitar que se produzca la infracción de cualquier derecho de propiedad intelectual y, en particular,
evitar que las mercancías ingresen en los circuitos comerciales de la jurisdicción de aquéllas, inclusive
las mercancías importadas, inmediatamente después del despacho de aduana;

b) preservar las pruebas pertinentes relacionadas con la presunta infracción.


2. Las autoridades judiciales estarán facultadas para adoptar medidas provisionales, cuando ello sea
conveniente, sin haber oído a la otra parte, en particular cuando haya probabilidad de que cualquier
retraso cause daño irreparable al titular de los derechos, o cuando haya un riesgo demostrable de
destrucción de pruebas.
3. Las autoridades judiciales estarán facultadas para exigir al demandante que presente las pruebas de
que razonablemente disponga, con el fin de establecer a su satisfacción con un grado suficiente de
certidumbre que el demandante es el titular del derecho y que su derecho es objeto o va a ser objeto
inminentemente de infracción, y para ordenar al demandante que aporte una fianza o garantía
equivalente que sea suficiente para proteger al demandado y evitar abusos.
4. Cuando se hayan adoptado medidas provisionales sin haber oído a la otra parte, éstas se notificarán
sin demora a la parte afectada a más tardar inmediatamente después de ponerlas en aplicación. A
petición del demandado, en un plazo razonable contado a partir de esa notificación se procederá a una
revisión, en la que se le reconocerá el derecho de audiencia, con objeto de decidir si deben modificarse,
revocarse o confirmarse esas medidas.
5. La autoridad encargada de la ejecución de las medidas provisionales podrá exigir al demandante que
presente cualquiera otra información necesaria para la identificación de las mercancías de que se trate.
6. Sin perjuicio de lo dispuesto en el párrafo 4, las medidas provisionales adoptadas al amparo de los
párrafos 1 y 2 se revocarán o quedarán de otro modo sin efecto, a petición del demandado, si el
procedimiento conducente a una decisión sobre el fondo del asunto no se inicia en un plazo razonable
que habrá de ser establecido, cuando la legislación de un Miembro lo permita, por determinación de la
autoridad judicial que haya ordenado las medidas, y que a falta de esa determinación no será superior a
20 días hábiles o 31 días naturales, si este plazo fuera mayor.
7. En los casos en que las medidas provisionales sean revocadas o caduquen por acción u omisión del
demandante, o en aquellos casos en que posteriormente se determine que no hubo infracción o amenaza
de infracción de un derecho de propiedad intelectual, las autoridades judiciales estarán facultadas para
ordenar al demandante, previa petición del demandado, que pague a éste una indemnización adecuada
por cualquier daño causado por esas medidas.
8. En la medida en que puedan ordenarse medidas provisionales a resultas de procedimientos
administrativos, esos procedimientos se atendrán a principios sustancialmente equivalentes a los
enunciados en esta sección.

Sección 4: Prescripciones especiales relacionadas con las medidas en


frontera (12)

Artículo 51
Suspensión del despacho de aduana por las autoridades aduaneras
Los Miembros, de conformidad con las disposiciones que siguen, adoptarán procedimientos (13) para
que el titular de un derecho, que tenga motivos válidos para sospechar que se prepara la importación de
mercancías de marca de fábrica o de comercio falsificadas o mercancías pirata que lesionan el derecho
de autor (14), pueda presentar a las autoridades competentes, administrativas o judiciales, una demanda
por escrito con objeto de que las autoridades de aduanas suspendan el despacho de esas mercancías para
libre circulación. Los Miembros podrán autorizar para que se haga dicha demanda también respecto de
mercancías que supongan otras infracciones de los derechos de propiedad intelectual, siempre que se
cumplan las prescripciones de la presente sección. Los Miembros podrán establecer también
procedimientos análogos para que las autoridades de aduanas suspendan el despacho de esas mercancías
destinadas a la exportación desde su territorio.

Artículo 52
Demanda
Se exigirá a todo titular de un derecho que inicie un procedimiento de conformidad con el artículo 51
que presente pruebas suficientes que demuestren a satisfacción de las autoridades competentes que, de
acuerdo con la legislación del país de importación, existe presunción de infracción de su derecho de
propiedad intelectual y que ofrezca una descripción suficientemente detallada de las mercancías de modo
que puedan ser reconocidas con facilidad por las autoridades de aduanas. Las autoridades competentes
comunicarán al demandante, dentro de un plazo razonable, si han aceptado la demanda y, cuando sean
ellas mismas quienes lo establezcan, el plazo de actuación de las autoridades de aduanas.
Artículo 53
Fianza o garantía equivalente
1. Las autoridades competentes estarán facultadas para exigir al demandante que aporte una fianza o
garantía equivalente que sea suficiente para proteger al demandado y a las autoridades competentes e
impedir abusos. Esa fianza o garantía equivalente no deberá disuadir indebidamente del recurso a estos
procedimientos.
2. Cuando a consecuencia de una demanda presentada en el ámbito de la presente sección, las
autoridades aduaneras hayan suspendido el despacho para libre circulación de mercancías que
comporten dibujos o modelos industriales, patentes, esquemas de trazado o información no divulgada,
sobre la base de una decisión no tomada por una autoridad judicial u otra autoridad independiente, y el
plazo estipulado en el artículo 55 haya vencido sin que la autoridad debidamente facultada al efecto dicte
una medida precautoria provisional, y si se han cumplido todas las demás condiciones requeridas para la
importación, el propietario, el importador o el consignatario de esas mercancías tendrá derecho a obtener
que se proceda al despacho de aduana de las mismas previo depósito de una fianza por un importe que
sea suficiente para proteger al titular del derecho en cualquier caso de infracción. El pago de tal fianza se
entenderá sin perjuicio de ningún otro recurso a disposición del titular del derecho, y se entenderá
asimismo que la fianza se devolverá si éste no ejerce el derecho de acción en un plazo razonable.

Artículo 54
Notificación de la suspensión
Se notificará prontamente al importador y al demandante la suspensión del despacho de aduana de las
mercancías de conformidad con el artículo 51.

Artículo 55
Duración de la suspensión
En caso de que en un plazo no superior a 10 días hábiles contado a partir de la comunicación de la
suspensión al demandante mediante aviso, las autoridades de aduanas no hayan sido informadas de que
una parte que no sea el demandado ha iniciado el procedimiento conducente a una decisión sobre el
fondo de la cuestión o de que la autoridad debidamente facultada al efecto ha adoptado medidas
provisionales que prolonguen la suspensión del despacho de aduana de las mercancías, se procederá al
despacho de las mismas si se han cumplido todas las demás condiciones requeridas para su importación
o exportación; en los casos en que proceda, el plazo mencionado podrá ser prorrogado por otros 10 días
hábiles. Si se ha iniciado el procedimiento conducente a una decisión sobre el fondo del asunto, a
petición del demandado se procederá en un plazo razonable a una revisión, que incluirá el derecho de
audiencia, con objeto de decidir si esas medidas deben modificarse, revocarse o confirmarse. No
obstante, cuando la suspensión del despacho de aduana se efectúe o se continúe en virtud de una medida
judicial provisional, se aplicarán las disposiciones del párrafo 6 del artículo 50.

Artículo 56
Indemnización al importador y al propietario de las mercancías
Las autoridades pertinentes estarán facultadas para ordenar al demandante que pague al importador, al
consignatario y al propietario de las mercancías una indemnización adecuada por todo daño a ellos
causado por la retención infundada de las mercancías o por la retención de las que se hayan despachado
de conformidad con lo dispuesto en el artículo 55.

Artículo 57
Derecho de inspección e información
Sin perjuicio de la protección de la información confidencial, los Miembros facultarán a las
autoridades competentes para dar al titular del derecho oportunidades suficientes para que haga
inspeccionar, con el fin de fundamentar sus reclamaciones, cualesquiera mercancías retenidas por las
autoridades de aduanas. Las autoridades competentes estarán asimismo facultadas para dar al importador
oportunidades equivalentes para que haga inspeccionar esas mercancías. Los Miembros podrán facultar a
las autoridades competentes para que, cuando se haya adoptado una decisión positiva sobre el fondo del
asunto, comuniquen al titular del derecho el nombre y dirección del consignador, el importador y el
consignatario, así como la cantidad de las mercancías de que se trate.

Artículo 58
Actuación de oficio
Cuando los Miembros pidan a las autoridades competentes que actúen por propia iniciativa y
suspendan el despacho de aquellas mercancías respecto de las cuales tengan la presunción de que
infringen un derecho de propiedad intelectual:
a) las autoridades competentes podrán pedir en cualquier momento al titular del derecho toda
información que pueda serles útil para ejercer esa potestad;

b) la suspensión deberá notificarse sin demora al importador y al titular del derecho. Si el importador
recurre contra ella ante las autoridades competentes, la suspensión quedará sujeta, mutatis mutandis, a
las condiciones estipuladas en el artículo 55;

c) los Miembros eximirán tanto a las autoridades como a los funcionarios públicos de las
responsabilidades que darían lugar a medidas correctoras adecuadas sólo en el caso de actuaciones
llevadas a cabo o proyectadas de buena fe.

Artículo 59
Recursos
Sin perjuicio de las demás acciones que correspondan al titular del derecho y a reserva del derecho del
demandado a apelar ante una autoridad judicial, las autoridades competentes estarán facultadas para
ordenar la destrucción o eliminación de las mercancías infractoras de conformidad con los principios
establecidos en el artículo 46. En cuanto a las mercancías de marca de fábrica o de comercio falsificadas,
las autoridades no permitirán, salvo en circunstancias excepcionales, que las mercancías infractoras se
reexporten en el mismo estado ni las someterán a un procedimiento aduanero distinto.
Artículo 60
Importaciones insignificantes
Los Miembros podrán excluir de la aplicación de las disposiciones precedentes las pequeñas
cantidades de mercancías que no tengan carácter comercial y formen parte del equipaje personal de los
viajeros o se envíen en pequeñas partidas

Sección 5: Procedimientos penales

Artículo 61
Los Miembros establecerán procedimientos y sanciones penales al menos para los casos de
falsificación dolosa de marcas de fábrica o de comercio o de piratería lesiva del derecho de autor a
escala comercial. Los recursos disponibles comprenderán la pena de prisión y/o la imposición de
sanciones pecuniarias suficientemente disuasorias que sean coherentes con el nivel de las sanciones
aplicadas por delitos de gravedad correspondiente. Cuando proceda, entre los recursos disponibles
figurará también la confiscación, el decomiso y la destrucción de las mercancías infractoras y de todos
los materiales y accesorios utilizados predominantemente para la comisión del delito. Los Miembros
podrán prever la aplicación de procedimientos y sanciones penales en otros casos de infracción de
derechos de propiedad intelectual, en particular cuando se cometa con dolo y a escala comercial.
Preguntas frecuentes sobre los ADPIC [ aspectos de los derechos de propiedad
intelectual relacionados con el comercio ] en la OMC

¿Qué se entiende por “derechos de propiedad intelectual”?Volver al principio


Los derechos de propiedad intelectual pueden definirse como aquellos que se confieren a las personas
sobre las creaciones de su mente. Suelen dar al creador un derecho exclusivo sobre la utilización de su
obra por un plazo determinado. Los derechos de propiedad intelectual se dividen tradicionalmente en dos
categorías principales:

• El derecho de autor y los derechos conexos, es decir, los derechos conferidos a los autores
de obras literarias y artísticas y los derechos de los artistas intérpretes o ejecutantes, los
productores de fonogramas y los organismos de radiodifusión. El principal propósito de la
protección concedida por el derecho de autor y los derechos conexos es estimular y
recompensar el trabajo creador.
• La propiedad industrial, que comprende 1) la protección de signos distintivos comolas
marcas de fábrica o de comercio y las indicaciones geográficas, y 2) la propiedad industrial
protegida principalmente para estimular la innovación, el diseño y la creación de tecnología.
En esta categoría se incluyen las invenciones (protegidas por patentes), los dibujos
y modelos industriales y los secretos comerciales.

A los efectos del Acuerdo sobre los ADPIC, la expresión “propiedad intelectual” abarca:
.… todas las categorías de propiedad intelectual que son objeto de las secciones 1 a 7 de la Parte II del
Acuerdo (párrafo 2 del artículo 1). Estas categorías comprenden el derecho de autor y derechos conexos,
las marcas de fábrica o de comercio, las indicaciones geográficas, los dibujos y modelos industriales, las
patentes, los esquemas de trazado de circuitos integrados y la información no divulgada.

¿Se aplica el Acuerdo sobre los ADPIC a todos los Miembros de la


OMC?
Todos los Acuerdos de la OMC (con excepción de un par de acuerdos “plurilaterales”) se aplican a todos
los Miembros de la OMC. Cada Miembro ha aceptado todos los Acuerdos, en su conjunto, con una sola
firma, por lo que en la jerga de la OMC se dice que constituyen un “todo único”.
El Acuerdo sobre los ADPIC forma parte de ese conjunto de Acuerdos. Por consiguiente, se aplica a
todos los Miembros de la OMC. (Para saber más sobre el todo único.)
No obstante, el Acuerdo autoriza a los países a aplazar la aplicación de las disposiciones del Acuerdo
durante diferentes períodos de tiempo. Estos aplazamientos definen un período de transición desde la
entrada en vigor del Acuerdo (el 1º de enero de 1995) hasta su plena aplicación por todos los países
Miembros. Los principales períodos de transición son los siguientes:

• Para los países desarrollados se estableció un período de transición de un año contado desde
la fecha de entrada en vigor del Acuerdo sobre la OMC, es decir, hasta el 1º de enero de
1996.
• Para los países en desarrollo se estableció un período adicional de cuatro años, es decir,
hasta el 1º de enero de 2000, para aplicar las disposiciones del Acuerdo, con excepción de
los artículos 3, 4 y 5 que se refieren al principio de no discriminación.
• Las economías de transición, es decir, los Miembros que se hallaban en proceso de
transformación de una economía de planificación central en una economía de mercado,
también podían beneficiarse del mismo período de aplazamiento (hasta el 1º de enero de
2000), si cumplían ciertas condiciones adicionales.
• Para los países menos adelantados se estableció un período de transición más prolongado,
de 11 años en total (hasta el 1º de enero de 2006), con posibilidad de ampliarlo. Para las
patentes de productos farmacéuticos, el plazo se ha ampliado hasta el 1º de enero de 2016,
conforme a la decisión adoptada por los Ministros en el cuarto período de sesiones de la
Conferencia Ministerial celebrada en noviembre de 2001.

¿Qué países utilizan los períodos de transición generales?Volver al principio


Los Miembros de la OMC pueden utilizar los períodos generales de transición sin tener que notificarlo a
la OMC ni a los demás Miembros. El Consejo de los ADPIC examina la legislación de los Miembros
una vez que ha expirado el período de transición.
1. Países en desarrollo
Los países en desarrollo que no son países menos adelantados tienen que aplicar las disposiciones del
Acuerdo sobre los ADPIC a partir del 1º de enero de 2000. En 2000 y 2001 el Consejo de los ADPIC
examinó la legislación de los siguientes Miembros cuyos períodos de transición expiraron el 31 de
diciembre de 1999:
Antigua y Barbuda; Argentina; Bahrein; Barbados; Belice; Bolivia; Botswana; Brasil; Brunei
Darussalam; Camerún; Chile; Chipre; Colombia; Congo; Costa Rica; Côte d'Ivoire; Cuba; Dominica;
Egipto; El Salvador; Emiratos Árabes Unidos; Estonia; Fiji; Filipinas; Gabón; Ghana; Granada;
Guatemala; Guyana; Honduras; Hong Kong, China; India; Indonesia; Israel; Jamaica; Kenya; Kuwait;
Macao; Malasia; Malta; Marruecos; Mauricio; México; Namibia; Nicaragua; Nigeria; Pakistán; Papua
Nueva Guinea; Paraguay; Perú; Polonia (sectores que no se examinaron en 1996 1998); Qatar;
República de Corea; República Dominicana; Saint Kitts y Nevis; San Vicente y las Granadinas; Santa
Lucía; Singapur; Sri Lanka; Suriname; Swazilandia; Tailandia; Trinidad y Tabago; Túnez; Turquía;
Uruguay; Venezuela; Zimbabwe.
No obstante, hay que señalar que muchos de estos Miembros promulgaron una legislación nacional de
aplicación de gran parte de las disposiciones del Acuerdo sobre los ADPIC antes del 1º de enero de 2000.
2. Países menos adelantados
Los países menos adelantados tenían al principio hasta el 1º de enero de 2006 para aplicar las
disposiciones del Acuerdo sobre los ADPIC, ahora ampliado hasta el 1 de julio de 2013, con la
posibilidad de extensión adicional, y hasta el 1º de enero de 2016 para las patentes de productos
farmacéuticos. En la OMC los países menos adelantados Miembros son aquéllos reconocidos como
países menos adelantados por las Naciones Unidas. Puede consultarse aquí las listas de estos países
Miembros y de los países que están en proceso de adhesión.
3. Nuevos Miembros
Los períodos generales de transición se aplican a todos los Miembros iniciales de la OMC, es decir, a los
gobiernos que pasaron a ser Miembros el 1º de enero de 1995. Desde entonces, varios países se han
adherido a la OMC. En general, estos países han aceptado en sus acuerdos de adhesión (los denominados
“protocolos de adhesión”) aplicar el Acuerdo sobre los ADPIC desde la fecha en que oficialmente
pasaron a ser Miembros de la OMC, sin beneficiarse de ningún período de transición.
La lista más reciente de los países (y “territorios aduaneros”) que han solicitado adherirse a la OMC
puede consultarse aquí, así como la lista de todos los Miembros de la OMC y la fecha desde la cual son
Miembros.
¿Tienen los Miembros alguna obligación de conformidad con el Acuerdo
durante el período de transición?
Todos los Miembros, incluso los que se benefician de períodos de transición más largos, tienen que
cumplir las obligaciones del trato nacional (igualdad de trato para los particulares y empresas nacionales
y extranjeros, artículo 3) y del trato de la nación más favorecida (no discriminación entre los particulares
y empresas extranjeros, artículo 4) a partir del 1º de enero de 1996.
Se aplican normas transitorias especiales si un país en desarrollo no concede protección mediante
patente de productos en un determinado sector de tecnología.
Concretamente, si un país en desarrollo no concedía protección mediante patente en un determinado
sector de tecnología cuando entró en vigor el Acuerdo sobre los ADPIC (el 1º de enero de 1995),
dispone de hasta 10 años (hasta el 1º de enero de 2005) para acordar esa protección (párrafo 4 del
artículo 65).
Sin embargo, en lo que respecta a los productos farmacéuticos y los productos químicos para la
agricultura, el país debe aceptar la presentación de solicitudes de patentes desde el inicio del período de
transición, aunque no es necesario adoptar la decisión sobre si se concede o no la patente hasta el final
de ese período (párrafo 8 del artículo 70). Esta disposición se denomina en ocasiones cláusula de
“anticipación” (mailbox).
Si el gobierno autoriza la comercialización del producto farmacéutico o del producto químico para la
agricultura en cuestión durante el período de transición, debe, con sujeción a ciertas condiciones,
conceder al solicitante de la patente derechos exclusivos de comercialización de ese producto durante
cinco años o hasta que se adopte una decisión sobre la concesión de una patente de producto, si este
período fuera más breve (párrafo 9 del artículo 70).
Además, según el párrafo 5 del artículo 65 del Acuerdo sobre los ADPIC, los Miembros que se valgan
del período transitorio al amparo de lo dispuesto en los párrafos 1, 2, 3 ó 4 del artículo 65 no deben dar
marcha atrás, es decir, deben asegurarse de que las modificaciones que introduzcan en sus leyes y
reglamentos o prácticas durante el período de transición, no disminuyan el grado de compatibilidad de
éstos con las disposiciones del Acuerdo.

¿Quedaban los derechos de propiedad intelectual incluidos en el ámbito


del antiguo GATT (GATT de 1947) antes de la entrada en vigor del
Acuerdo sobre los ADPIC?
Antes de las negociaciones de la Ronda Uruguay (1986-1994), no existía ningún acuerdo específico
relativo a los derechos de propiedad intelectual en el marco del sistema multilateral de comercio del
GATT.
Sin embargo, algunos de los principios contenidos en el GATT podrían haber influido en las medidas en
materia de propiedad intelectual adoptadas con respecto a las importaciones o las exportaciones.
El apartado d) del artículo XX del GATT de 1947 (ahora apartado d) del artículo XX del GATT de 1994)
hace concretamente referencia a los derechos de propiedad intelectual. En virtud de este artículo, se
permitía la adopción de medidas que, en otras circunstancias habrían sido incompatibles con el Acuerdo
General, para lograr la observancia de las leyes y reglamentos relativos, entre otras cosas, a los derechos
de propiedad intelectual, a reserva de ciertas condiciones.
¿Qué lugar ocupa el Acuerdo sobre los ADPIC en el sistema multilateral
de comercio?
Una de las características fundamentales del Acuerdo sobre los ADPIC es que convierte la protección de
los derechos de propiedad intelectual en parte integrante del sistema multilateral de comercio que
encarna la OMC.
Con frecuencia se describe el Acuerdo sobre los ADPIC como uno de los tres “pilares” de la OMC,
junto con el comercio de servicios y el comercio de mercancías (la esfera de competencia tradicional del
GATT).
El hecho de que el Acuerdo sobre los ADPIC forme parte del “todo único” resultante de las
negociaciones de la Ronda Uruguay implica que las disposiciones del Acuerdo quedan sujetas al
mecanismo integrado para la solución de diferencias contenido en el Entendimiento sobre Solución de
Diferencias (el “Entendimiento relativo a las normas y procedimientos por los que se rige la solución de
diferencias”).

¿Qué relación existe entre el Acuerdo sobre los ADPIC y los convenios
internacionales preexistentes a que se hace referencia en el Acuerdo?
El Acuerdo sobre los ADPIC dispone que los Miembros de la OMC deben cumplir las obligaciones
sustantivas de los principales convenios de la OMPI: el Convenio de Paríspara la Protección de la
Propiedad Industrial y el Convenio de Berna para la Protección de las Obras Literarias y Artísticas, en
sus versiones más recientes..
Con la excepción de las disposiciones del Convenio de Berna sobre derechos morales, todas las
disposiciones sustantivas de esos Convenios se incorporan por referencia y por consiguiente se
convierten en obligaciones para los países Miembros de la OMC en virtud del Acuerdo sobre los ADPIC:
los Miembros tienen que aplicar estas disposiciones principales en sus países y aplicarlas a los
particulares y empresas de los demás Miembros de la OMC.
Además, el Acuerdo sobre los ADPIC introduce obligaciones adicionales en esferas no tratadas, o que se
consideraron insuficientemente tratadas, en los citados Convenios.
El Acuerdo sobre los ADPIC se describe, pues, en ocasiones como un Acuerdo de Berna o de París
ampliado.
El texto del Acuerdo sobre los ADPIC utiliza también por referencia las disposiciones de algunos otros
acuerdos internacionales sobre derechos de propiedad intelectual:

• Los Miembros de la OMC están obligados a proteger los esquemas de trazado de los
circuitos integrados de conformidad con las disposiciones del Tratado sobre la Propiedad
Intelectual respecto de los Circuitos Integrados (Tratado IPIC), junto con algunas otras
obligaciones adicionales.
• El Acuerdo sobre los ADPIC se remite a cierto número de disposiciones de la Convención
Internacional sobre la Protección de los Artistas Intérpretes o Ejecutantes, de los Productores
de Fonogramas y los Organismos de Radiodifusión (Convención de Roma), sin que ello
entrañe la obligación general de cumplir las disposiciones sustantivas de esa Convención.

El artículo 2 del Acuerdo sobre los ADPIC estipula que ninguna disposición de las Partes I a IV del
Acuerdo irá en detrimento de las obligaciones que los Miembros puedan tener entre sí en virtud del
Convenio de París, el Convenio de Berna, la Convención de Roma y el Tratado sobre la Propiedad
Intelectual respecto de los Circuitos Integrados.
¿Qué es la OMPI?
La Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) fue establecida por un Convenio de 14 de
julio de 1967, que entró en vigor en 1970. Es un organismo especializado de las Naciones Unidas desde
1974 y administra varias uniones o tratados internacionales en la esfera de la propiedad.
Los objetivos de la OMPI son fomentar la protección de la propiedad intelectual en todo el mundo
mediante la cooperación entre los Estados y, en su caso, con la colaboración de cualquier otra
organización internacional, y asegurar la cooperación administrativa entre las uniones de propiedad
intelectual creadas por los Convenios de París y de Berna y los subtratados concertados por los
miembros de la Unión de París.
La administración de las uniones creadas con arreglo a los diversos convenios está centralizada por
conducto de la secretaría de la OMPI, la “Oficina Internacional”. Ésta mantiene también servicios
internacionales de registro en la esfera de las patentes, las marcas de fábrica o de comercio, los dibujos y
modelos industriales y las denominaciones de origen. La OMPI desarrolla asimismo actividades de
cooperación para el desarrollo en favor de países en desarrollo mediante asesoramiento, formación y
suministro de documentos.
El 1º de enero de 1996 entró en vigor un acuerdo de cooperación entre la OMPI y la OMC. El Acuerdo
prevé la cooperación en tres esferas principales:

• notificación de leyes y reglamentos nacionales, acceso a los mismos y traducción de los


textos correspondientes;
• emblemas nacionales y
• cooperación técnica.

La OMPI está situada en el chemin des Colombettes Nº 34, Ginebra,


Caja postal 18, CH-1211 Ginebra 20,
Teléfono: (41 22) 338 9111,
Fax: (41 22) 733 5428,
Internet: http://www.wipo.int.

¿Requiere el Acuerdo sobre los ADPIC que las normas para la


protección de la propiedad intelectual de todos los Miembros sean
idénticas?
No, el Acuerdo sobre los ADPIC dispone que los Miembros deberán respetar ciertas normas mínimas
para la protección de los derechos de propiedad intelectual que abarca, pero podrán decidir establecer en
su legislación una protección más amplia que la exigida por el Acuerdo, a condición de que tal
protección no infrinja las disposiciones del mismo.
Esta es la razón de que en ocasiones se diga que el Acuerdo sobre los ADPIC es un acuerdo de normas
mínimas.
Además, el Acuerdo estipula que los Miembros podrán establecer libremente el método adecuado para
aplicar las disposiciones del Acuerdo en el marco de su propio sistema jurídico y su práctica. Así pues,
el Acuerdo toma en consideración la diversidad de los marcos jurídicos de los Miembros (por ejemplo,
de los sistemas de derecho consuetudinario y jurisprudencial y de derecho civil).

¿Permite el Acuerdo la concesión de licencias obligatorias de patentes?


El artículo 31 del Acuerdo permite la concesión de licencias obligatorias de patentes y el uso por el
gobierno de una patente sin autorización de su titular.
No obstante, esto sólo puede hacerse si se cumplen determinadas condiciones destinadas a proteger los
intereses legítimos del titular de los derechos. Por ejemplo: (salvo en caso de emergencia) el potencial
usuario debe haber intentado, sin éxito, obtener la autorización del titular de los derechos en términos y
condiciones comerciales razonables y una remuneración adecuada debe pagarse al titular de los derechos.
La licencia obligatoria debe también cumplir determinados requisitos, en particular, debe ser de carácter
no exclusivo y otorgarse principalmente para abastecer el mercado interno.
(Licencia obligatoria: autorización otorgada por un gobierno para utilizar una invención patentada sin el
consentimiento del titular de la patente.)
> Preguntas más frecuentes sobre las licencias obligatorias para los productos farmacéuticos y el
Acuerdo sobre los ADPIC
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¿Requiere el Acuerdo que los Miembros otorguen protección mediante


patente a las obtenciones vegetales?
En virtud del apartado b) del párrafo 3 del artículo 27, los Miembros pueden decidir que no se
concederán patentes en sus países para determinados tipos de invenciones vegetales y animales.
En concreto, el Acuerdo les permite excluir de la patentabilidad “las plantas y los animales excepto los
microorganismos, y los procedimientos esencialmente biológicos para la producción de plantas y
animales, que no sean procedimientos no biológicos o microbiológicos”.
No obstante, el Acuerdo dispone que los Miembros deben otorgar protección a las obtenciones vegetales
mediante patentes, mediante un sistema eficaz sui generis (es decir, un sistema creado específicamente
con este fin) o mediante una combinación de aquéllas y éste.
En el Acuerdo se establece que las disposiciones del apartado b) del párrafo 3 del artículo 27 debían
examinarse cuatro años después de la entrada en vigor del Acuerdo (es decir en 1999). Este examen se
está realizando actualmente en el Consejo de los ADPIC.

¿Cuál es la función del Consejo de los ADPIC?


El Consejo de los ADPIC está integrado por todos los Miembros de la OMC y se encarga de la
supervisión de la aplicación del Acuerdo y, en particular, de la observancia por parte de los Miembros de
las obligaciones dimanantes del mismo.
Haga clic aquí para obtener más información sobre los órganos de la OMC.
1. SUPERVISIÓN: los Miembros examinan las legislaciones de los otros Miembros.
El examen de las legislaciones es uno de los aspectos fundamentales de la supervisión del
funcionamiento del Acuerdo que realiza el Consejo de los ADPIC.
Todos los países deben asegurarse de que su legislación esté conforme con las obligaciones establecidas
en el Acuerdo, con arreglo al calendario previsto en el mismo. La mayoría deben promulgar leyes para
poner en aplicación las disposiciones sobre esas obligaciones.
Estas leyes se notifican al Consejo de los ADPIC, lo que permite a los Miembros examinar la legislación
de los otros Miembros y fomenta la transparencia de las políticas aplicadas por éstos en materia de
protección de la propiedad intelectual.
La obligación de notificar está establecida en el párrafo 2 del artículo 63 del Acuerdo sobre los ADPIC.
Los Miembros deben presentar al Consejo de los ADPIC ejemplares de las leyes y reglamentos
referentes a las disposiciones del Acuerdo sobre los ADPIC.
Estas notificaciones constituyen posteriormente la base de los exámenes de la legislación de los
Miembros que realiza el Consejo.
En estos exámenes los países presentan por escrito preguntas sobre la legislación del país en cuestión
antes de la reunión de examen. Las respuestas se presentan igualmente por escrito. Durante la reunión se
hacen preguntas complementarias y se responde oralmente, y es posible plantear más preguntas
complementarias en las reuniones siguientes.
2. CONSULTAS: sobre cualquier cuestión relativa a los ADPIC
El Consejo de los ADPIC es asimismo un foro en el que los países pueden celebrar consultas acerca de
cualesquiera problemas relacionados con el Acuerdo sobre los ADPIC que puedan surgir entre ellos.
Asimismo puede ser un foro para la aclaración e interpretación de las disposiciones del Acuerdo.
3. COOPERACIÓN TÉCNICA: un programa de trabajo
El Consejo ha iniciado un programa de trabajo sobre cooperación técnica a fin de supervisar el
cumplimiento por los países desarrollados de las obligaciones que les impone el artículo 67 del Acuerdo
sobre los ADPIC.
Este artículo contiene los compromisos sobre cooperación técnica contraídos por los países desarrollados.
El programa de trabajo permite asegurarse de que los países en desarrollo reciban información adecuada
sobre la asistencia que se ofrece, así como asegurarse de que se identifiquen y atiendan las necesidades
insatisfechas de esos países.
4. EXÁMENES Y NEGOCIACIONES SOBRE TEMAS ESPECÍFICOS
La OMC constituye un foro para la celebración de nuevas negociaciones encaminadas a aumentar los
compromisos en el sector de la propiedad intelectual, al igual que en otros campos abarcados por los
Acuerdos de la OMC.
En el Acuerdo sobre los ADPIC se hace referencia a ciertas esferas específicas en las que deben
continuar los trabajos. Son las siguientes:

• la negociación de un sistema multilateral de notificación y registro de las indicaciones


geográficas para los vinos (párrafo 4 del artículo 23);
• el examen de la aplicación de las disposiciones sobre la protección de las indicaciones
geográficas (párrafo 2 del artículo 24);
• el examen, una vez transcurridos cuatro años, de la posibilidad de excluir de la
patentabilidad determinadas invenciones vegetales y animales (apartado b) del párrafo 3 del
artículo 27); y
• el examen de la aplicabilidad a los ADPIC de las reclamaciones no basadas en una
infracción con arreglo al procedimiento de solución de diferencias (artículo 64).

(Reclamaciones no basadas en una infracción = reclamaciones acerca del menoscabo de ventajas


legítimas, sin que haya habido infracción de una obligación, cuya presentación está autorizada en virtud
del GATT y del AGCS, pero suspendida durante cinco años en virtud del Acuerdo sobre los ADPIC.)
5. EXAMEN DEL ACUERDO SOBRE LOS ADPIC
El Consejo de los ADPIC realizará un examen del Acuerdo una vez transcurridos cinco años, pero
también está facultado para examinarlo en todo momento a la luz de cualquier nuevo acontecimiento
pertinente que pueda justificar su modificación y enmienda (artículo 71).

¿Cuáles son las principales obligaciones de notificación de los Miembros


con arreglo al Acuerdo sobre los ADPIC?
(Para obtener los documentos oficiales mencionados en esta respuesta, vaya a la base documental en
línea y escriba la signatura del documento en la ventana correspondiente del dispositivo de búsqueda.)
El Acuerdo sobre los ADPIC exige a los Miembros de la OMC que presenten determinadas
notificaciones al Consejo de los ADPIC. Estas notificaciones permiten a los Miembros examinar las
legislaciones de los otros Miembros, que es un aspecto importante de la labor del Consejo. Promueven
asimismo la transparencia de las políticas aplicadas por los Miembros en el ámbito de la protección de la
propiedad intelectual.
Además, los Miembros que deseen valerse de determinadas posibilidades previstas en el Acuerdo deben
notificarlo al Consejo.
Para el cumplimiento de estas obligaciones de notificación el Consejo ha adoptado procedimientos y
directrices al respecto.
El párrafo 2 del artículo 63 del Acuerdo sobre los ADPIC exige a los Miembros que notifiquen las leyes
y reglamentos referentes a la materia del Acuerdo (existencia, alcance, adquisición, observancia y
prevención del abuso de los derechos de propiedad intelectual).
El procedimiento de notificación de las leyes y reglamentos nacionales con arreglo al párrafo 2 del
artículo 63 figura en el documento IP/C/2.
Articles 1.3 and 3.1 of the TRIPS
Los párrafos 3 del artículo 1 y 1 del artículo 3 del Acuerdo sobre los ADPIC autorizan a los Miembros a
valerse de determinadas posibilidades con respecto a la definición de personas beneficiarias y al trato
nacional, a condición de que lo notifiquen al Consejo de los ADPIC.
Las notificaciones hechas de conformidad con lo dispuesto en el párrafo 3 del artículo 1 y el párrafo 1
del artículo 3 se distribuyen en la serie de documentos IP/N/2/-. El documento IP/C/W/5 contiene
información adicional sobre estas posibilidades de notificación.
De acuerdo con el párrafo d) del artículo 4, un Miembro podrá eximir del trato de la nación más
favorecida toda ventaja, favor, privilegio o inmunidad que conceda ese Miembro y que se derive de
acuerdos internacionales relativos a la protección de la propiedad intelectual que hayan entrado en vigor
antes de la entrada en vigor del Acuerdo sobre la OMC, a condición de que esos acuerdos se notifiquen
al Consejo de los ADPIC y no constituya una discriminación arbitraria o injustificable contra los
nacionales de otros Miembros.
El artículo 69 del Acuerdo exige a los Miembros que establezcan servicios de información en su
administración y los notifiquen, a fin de cooperar entre sí con objeto de limitar el comercio de
mercancías que infrinjan los derechos de propiedad intelectual.
Los datos sobre esos servicios de información se distribuyen en el documento IP/N/3 y en sus adiciones,
correcciones y revisiones periódicas.
Con independencia de las obligaciones de notificación específicamente previstas en el Acuerdo, se
incorporan a él por referencia una serie de disposiciones en materia de notificación contenidas en el
Convenio de Berna y en la Convención de Roma, sin que, no obstante, se haga referencia expresa a ellas.
En su reunión de febrero de 1996, el Consejo invitó a todo Miembro que deseara hacer esas
notificaciones a que las presentara al Consejo de los ADPIC, aun cuando hubiera presentado ya una
notificación sobre la misma cuestión en el marco del Convenio de Berna o de la Convención de Roma.
El documento IP/C/W/15 contiene información básica adicional sobre estas posibilidades de notificación.
Las notificaciones de este tipo se distribuyen en la serie de documentos IP/N/5/-.
El Manual de Cooperación Técnica sobre Prescripciones en materia de Notificación: Acuerdo sobre los
Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (documento
WT/TC/NOTIF/TRIPS/1) contiene información detallada sobre los procedimientos de notificación.

¿Cómo puede obtenerse información sobre las actividades de


cooperación técnica que ofrecen los países desarrollados Miembros?
(Para obtener los documentos oficiales mencionados en esta respuesta, vaya a la base documental en
línea y escriba la signatura del documento en la ventana correspondiente del dispositivo de búsqueda.)
El artículo 67 del Acuerdo sobre los ADPIC estipula que los países desarrollados Miembros prestarán,
previa petición y en términos y condiciones mutuamente acordados, cooperación técnica y financiera a
los países en desarrollo y a los países menos adelantados Miembros.
Con objeto de garantizar el acceso a la información pertinente, los países desarrollados Miembros han
convenido en presentar al Consejo de los ADPIC una descripción de sus actividades de cooperación
técnica en la esfera de la propiedad intelectual. Esa información figura en la serie de documentos
IP/C/W/-.
Haga clic aquí para obtener más información.
Además, los países desarrollados Miembros han notificado los servicios de notificación existentes en sus
administraciones a los que se pueden dirigir las peticiones de asistencia técnica y en los que se puede
obtener información sobre cooperación técnica.
La lista de esos servicios de información se publica en el documento IP/N/7 y en sus adiciones,
correcciones y revisiones periódicas.

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